Stunami
Stunami
Stunami
por huracanes y temporales que podían entrar tierra adentro, pero estas no dejaban
de ser olas superficiales producidas por el viento. Tampoco se debe confundir con
la ola producida por la marea conocida como macareo. Este es un fenómeno regular y
mucho más lento, aunque en algunos lugares estrechos y de fuerte desnivel pueden
generarse fuertes corrientes.
La mayoría de los tsunamis son originados por terremotos de gran magnitud bajo la
superficie acuática. Para que se origine un tsunami, el fondo marino debe ser
movido de manera abrupta en sentido vertical, de modo que una gran masa de agua del
océano sea impulsada fuera de su equilibrio normal. Cuando esta masa de agua trata
de recuperar su equilibrio genera olas. El tamaño del tsunami estará determinado
por la magnitud de la deformación vertical del fondo marino entre otros parámetros
como la profundidad del lecho marino. No todos los terremotos bajo la superficie
acuática generan tsunamis, sino solo aquellos de gran magnitud, con hipocentro en
el punto de profundidad adecuado.
La zona más afectada por este tipo de fenómenos es el océano Pacífico, debido a que
en él se encuentra la zona de sismos más activa del planeta, el cinturón de fuego.
Por ello, es el único océano con un sistema de alertas verdaderamente eficaz.
La teoría lineal predice que las olas conservarán su energía mientras no rompan en
la costa. La disipación de la energía cerca de la costa dependerá, de las
características del relieve marino. La manera como se disipa dicha energía antes de
romper depende de la relación H/h. Una vez que llega a tierra, la forma en que la
ola rompe depende de la relación H/L. Como L siempre es mucho mayor que H, las olas
romperán como lo hacen las olas bajas y planas. Esta forma de disipar la energía es
poco eficiente, y lleva a la ola adentrarse en tierra como una gran marea.6
En la animación del tsunami del Índico de 2004 se puede observar cómo la onda se
curva por los extremos y cómo Bangladés apenas sufre sus efectos, mientras que Sri
Lanka, en la dirección de la zona central de la ola, la recibe de lleno.
Debido a que la energía de los tsunamis tectónicos es casi constante, pueden llegar
a cruzar océanos y afectar a costas muy alejadas del lugar del suceso. La
trayectoria de las ondas puede modificarse por las variaciones del relieve abisal,
fenómeno que no ocurre con las olas superficiales. En los tsunamis tectónicos, dado
que se producen debido al desplazamiento vertical de una falla, la onda que generan
suele ser un tanto especial. Su frente de onda es recto en casi toda su extensión.
Solo en los extremos se va diluyendo la energía al curvarse. La energía se
concentra, pues, en un frente de onda recto, lo que hace que las zonas situadas
justo en la dirección de la falla se vean relativamente poco afectadas, en
contraste con las zonas que quedan barridas de lleno por la ola, aunque estas se
sitúen mucho más lejos. El peculiar frente de onda es lo que hace que la ola no
pierda energía por simple dispersión geométrica, sobre todo en su zona más central.
El fenómeno es parecido a una onda encajonada en un canal o río. La onda, al no
poder dispersarse, mantiene constante su energía. En un tsunami existe, cierta
dispersión pero, sobre todo, en las zonas más alejadas del centro del frente de
onda recto.