Textos Velocidad 2° Básico

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Textos para evaluar velocidad lectora 2° básico

Listado de lecturas estandarizadas para evaluar la velocidad lectora por mes:

Evaluación Lectura
Marzo - La casa de la tortuga.

-El monito rosa.


Abril - La hormiguita cantora.

- La abeja agradecida.
Mayo - El niño y la rana.

-Ornitomi.
Junio - ¿Una muñeca?

-Los Mapuches.
Julio - Laika.

-Las ballenas.
Agosto - El hijo del elefante.

-Piedra azul, la esposa del lobo marino.


Septiembre - El sol.

-El muñeco de nieve.


Octubre -El racimo de uvas.

-Los pescadores.
Noviembre - Colores.

-La zorra.
Diciembre - Los murciélagos.

-El caracol.

La casa de la tortuga 5

A un niño le regalaron una tortuga chiquitita. – Le 16


voy

hacer una casa – dijo el niño. 23


Buscó un cajón y le hizo una puerta. 32
Adentro puso pasto verde y un montón de paja. 42

“Aquí mi tortuguita va a vivir feliz”, pensaba nuestro 52

amigo. 54

Entonces fue a buscar la tortuga. La encontró 63


durmiendo, totalmente escondida dentro de su 70

caparazón. 72
La tortuga tenía casa propia - dijo el niño- y no me 83
había dado cuenta. Dejaré la casita que hice para 93

cuando me regalen un animal que no tenga casa 104


propia.

La casa de la tortuga

A un niño le regalaron una tortuga chiquitita. – Le voy


hacer una casa – dijo el niño.

Buscó un cajón y le hizo una puerta.


Adentro puso pasto verde y un montón de paja.
“Aquí mi tortuguita va a vivir feliz”, pensaba nuestro
amigo.

Entonces fue a buscar la tortuga. La encontró


durmiendo, totalmente escondida dentro de su
caparazón.

La tortuga tenía casa propia - dijo el niño- y no me


había dado cuenta. Dejaré la casita que hice para
cuando me regalen un animal que no tenga casa propia.

El monito rosa 3

Este era un monito muy gracioso. Lo llamaban 13


Monito
Rosa por su pelo claro y delicado. 21
Vivía con su familia sobre las ramas de un gran árbol, 33
en el corazón de la selva. 40

Era alegre como un niño y solamente pensaba en 50


saltar

de rama en rama y en correr tras las mariposas. 61

Pero lo que más le gustaba era imitar lo que hacían los 73


hombres. Lo mismo que hacen algunos niños chicos 82
cuando quieren parecerse a los mayores. 89

Un día, Monito Rosa llegó, persiguiendo una 100


mariposa,
hasta el límite del bosque. A poca distancia, vio a un 113
joven que descansaba tranquilamente sentado al pie de 121

un gran árbol. 125

El monito rosa

Este era un monito muy gracioso. Lo llamaban Monito


Rosa por su pelo claro y delicado.

Vivía con su familia sobre las ramas de un gran árbol,


en el corazón de la selva.

Era alegre como un niño y solamente pensaba en saltar


de rama en rama y en correr tras las mariposas.

Pero lo que más le gustaba era imitar lo que hacían los


hombres. Lo mismo que hacen algunos niños chicos
cuando quieren parecerse a los mayores.

Un día, Monito Rosa llegó, persiguiendo una mariposa,


hasta el límite del bosque. A poca distancia, vio a un
joven que descansaba tranquilamente sentado al pie de
un gran árbol.

La hormiguita cantora 3

La Hormiguita Cantora decidió enseñar a Polita, 11


su pequeña sobrina, las maravillas y los peligros 20
del mundo. 23
Una mañana salió con ella de la mano por el 33
delgado camino que unía el hormiguero con el 41

hongo del Duende Melodía. El Duende estaba 49

encendiendo un braserillo y soplaba los carbones 56


inflando sus mejillas como dos globos colorados. 64
Se saludaron alegremente. La pequeña hormiga 71
vio el fuego del brasero y preguntó: 79
- ¿Qué es esto colorado que se apaga y que se 89
prende? 90
- ¡Jo, jo, jo! – rió el Duende, pregúntale a tu tía 103
Hormiguita Cantora, ella tiene la obligación de 111
contestarte, lo sepa o no. 118

La hormiguita cantora
La Hormiguita Cantora decidió enseñar a Polita,
su pequeña sobrina, las maravillas y los peligros
del mundo.

Una mañana salió con ella de la mano por el


delgado camino que unía el hormiguero con el
hongo del Duende Melodía. El Duende estaba
encendiendo un braserillo y soplaba los carbones
inflando sus mejillas como dos globos colorados.

Se saludaron alegremente. La pequeña hormiga


vio el fuego del brasero y preguntó:
- ¿Qué es esto colorado que se apaga y que se
prende?

- ¡Jo, jo, jo! – rió el Duende, pregúntale a tu tía


Hormiguita Cantora, ella tiene la obligación de
contestarte, lo sepa o no.

La abeja agradecida 3

 
Una linda paloma blanca había ido a posarse 11

en la rama de un árbol, junto al cual corría un 23

limpio arroyo. De pronto una abejita se acercó a 33

beber, pero resbaló y fue arrastrada por la corriente. 44

La paloma, que había visto lo sucedido, voló 54

hacia ella y pudo sacarla con el pico. 63

Poco después un cazador, al divisar a la paloma, 74


se dispuso a darle muerte. Rápidamente acudió 82

la abeja y, para salvar a su bienhechora, fue a picar la mano 97

del hombre. Por efecto del dolor el cazador sacudió el brazo, 110

fallando así el disparo. 115

La linda palomita blanca acababa de recibir una 123

hermosa recompensa por su buena acción. 130

La abeja agradecida

Una linda paloma blanca había ido a posarse


en la rama de un árbol, junto al cual corría un
limpio arroyo. De pronto una abejita se acercó a
beber, pero resbaló y fue arrastrada por la corriente.
La paloma, que había visto lo sucedido, voló
hacia ella y pudo sacarla con el pico.

Poco después un cazador, al divisar a la paloma,


se dispuso a darle muerte. Rápidamente acudió
la abeja y, para salvar a su bienhechora, fue a
picar la mano del hombre.

Por efecto del dolor el cazador sacudió el brazo,


fallando así el disparo.

La linda palomita blanca acababa de recibir


una hermosa recompensa por su buena acción.

El niño y la rana 5

Un niño iba caminando por el campo. De repente 15


oyó una voz muy ronca y muy fuerte. "Debe ser un 27
animal enorme", pensó el niño. 34
Tenía tanto miedo, que estaba a punto de arrancar. En 46
ese momento vio a una rana que salía croando de una 57

poza. 59

- Escóndete, mejor -le dijo el niño a la rana-. Si te 73


oigo
y no te veo, creo que eres muy grande. Ahora, al 87
verte, sé que eres muy chica. 95
Por más que grites, no te tengo miedo. - Croac, croac 108
-
le respondió la rana. 113

El niño y la rana

Un niño iba caminando por el campo. De repente


oyó una voz muy ronca y muy fuerte. "Debe ser un
animal enorme", pensó el niño.

Tenía tanto miedo, que estaba a punto de arrancar. En


ese momento vio a una rana que salía croando de una
poza.

- Escóndete, mejor -le dijo el niño a la rana-. Si te oigo


y no te veo, creo que eres muy grande. Ahora, al
verte, sé que eres muy chica.

Por más que grites, no te tengo miedo. - Croac, croac -


le respondió la rana.

Ornitomi 1

Su nombre significa “rápido imitador de aves”. 9


Vivió durante el periodo cretácico tardío. 16
Esta especie era omnívora. Se alimentaba de 24
plantas, insectos y hasta huevos de otros 32
dinosaurios. Medía tres metros de largo y pesaba hasta 42
ciento cincuenta kilogramos. 46

Se le asignó este nombre por su gran parecido a las 57


aves modernas, como el avestruz. Sus restos fósiles 67
han sido encontrados en Colorado y Montana, 75
Estados Unidos y Alberta, Canadá. 82
Ornitomi

Su nombre significa “rápido imitador de aves”.


Vivió durante el periodo cretácico tardío.

Esta especie era omnívora. Se alimentaba de


plantas, insectos y hasta huevos de otros
dinosaurios. Medía tres metros de largo y pesaba hasta
150 kilogramos.

Se le asignó este nombre por su gran parecido a las


aves modernas, como el avestruz. Sus restos fósiles
han sido encontrados en Colorado y Montana,
Estados Unidos, y Alberta, Canadá
¿Una muñeca? 2

Mamá, me gustaría tener una muñeca –le dijo 11


Claudia a su madre. - ¿Qué clase de muñeca te 21
gustaría tener? –preguntó la mamá. -Me gustaría 29
una muñeca que sepa hablar, caminar y comer. 39
-¿Nada más, Claudia? - Y que se ría, y que haya 51
que bañarla y que tenga el pelo largo para poder 61

peinarla. -¿Eso no más? -Y que duerma si le 71


canto y que me dé besitos. 78
-¿Sabes Claudia? Tú no quieres una muñeca. Lo 87
que tú quieres es tener una hermanita. 95

¿Una muñeca?

Mamá, me gustaría tener una muñeca –le dijo


Claudia a su madre. - ¿Qué clase de muñeca te
gustaría tener? –preguntó la mamá. -Me gustaría
una muñeca que sepa hablar, caminar y comer.

-¿Nada más, Claudia? - Y que se ría, y que haya


que bañarla, y que tenga el pelo largo para poder
peinarla… -¿Eso no más? -Y que duerma si le
canto, y que me dé besitos.

-¿Sabes Claudia? Tú no quieres una muñeca. Lo


que tú quieres es tener una hermanita.

Los Mapuches 2

Los Mapuches o gente de la tierra, ocuparon Chile 12


entre los ríos Itata por el norte y Toltén por el sur, 25
mezclándose con los Picunches y los Huilliches. 33
Provenían de la región argentina de Neuquén, y 43
cuando
llegaron a nuestro país, cambiaron sus hábitos 52
nómades
por el sedentarismo. 56

En el siglo (dieciséis) ellos conformaban 62

el conglomerado poblacional más grande 67


de Chile, con más de un millón de habitantes. 78
Los Mapuches

Los Mapuches o gente de la tierra, ocuparon Chile


entre los ríos Itata por el norte y Toltén por el sur,
mezclándose con los Picunches y los Huilliches.
Provenían de la región argentina de Neuquén, y cuando
llegaron a nuestro país, cambiaron sus hábitos nómades
por el sedentarismo.

En el siglo (dieciséis) ellos conformaban


el conglomerado poblacional más grande
de Chile, con más de un millón de habitantes.

Laika 1
¿Has oído hablar alguna vez de Laika? Laika es el 11
nombre de una perra; sin embargo, la vida de 22
Laika no fue como la de un perro normal y corriente. 34
Laika fue el primer ser vivo que viajaba en un 44
cohete espacial: la primera astronauta de la historia. 53
Laika realizó su viaje a bordo de un satélite artificial. 64

Un equipo de investigadores diseñó  en  Rusia  la nave 73


y programó el viaje.  El objetivo de la misión era 84
probar que un ser vivo podía sobrevivir en el espacio 94
dentro de una nave. 99
El viaje de Laika abrió el camino para que, tres años 111
más tarde se lanzara al espacio, una nave con un 122

hombre a bordo. 126

Laika

¿Has oído hablar alguna vez de Laika? Laika es el


nombre de una perra; sin embargo, la vida de
Laika no fue como la de un perro normal y corriente.

Laika fue el primer ser vivo que viajaba en un


cohete espacial: la primera astronauta de la historia.
Laika realizó su viaje a bordo de un satélite artificial.

Un equipo de investigadores diseñó en Rusia la nave


y programó el viaje. El objetivo de la misión era
probar que un ser vivo podía sobrevivir en el espacio
dentro de una nave.
El viaje de Laika abrió el camino para que, tres años
más tarde se lanzara al espacio, una nave con un
hombre a bordo.

Las ballenas 2

Las ballenas son unos enormes animales que pueden 10


alcanzar los veinte metros de largo. A pesar de su 21
tamaño se alimentan de plancton. 27
El plancton está formado por pequeños 33
animales que viven en la superficie del mar. Lo 44
forman
millones de larvas que cuando se hacen grandes se 53

transforman en cangrejos, gambas, etc. 61


La ballena para comerlos, abre la boca y traga una 73
gran
cantidad de agua. El agua es filtrada y devuelta al 86
mar.
El plancton queda atrapado en una superficie de filtro 96
y
le sirve de alimento. 101
Luego vuelve a tragar otra cantidad de agua y así 111

muchas veces. De esta forma el animal más grande de 122


la tierra se alimenta de unos animalitos tan pequeños 131

que es difícil verlos a simple vista. 139


Las ballenas

Las ballenas son unos enormes animales que pueden


alcanzar los veinte metros de largo. A pesar de su
tamaño se alimentan de plancton.

El plancton está formado por pequeños


animales que viven en la superficie del mar. Lo forman
millones de larvas que cuando se hacen grandes se
transforman en cangrejos, gambas, etc.

La ballena para comerlos, abre la boca y traga una gran


cantidad de agua. El agua es filtrada y devuelta al mar.
El plancton queda atrapado en una superficie de filtro y
le sirve de alimento.

Luego vuelve a tragar otra cantidad de agua y así


muchas veces. De esta forma el animal más grande de
la tierra se alimenta de unos animalitos tan pequeños
que es difícil verlos a simple vista.

El hijo del elefante 4

Por allá por los antiguos tiempos, hijo mío, el elefante 16


no tenía trompa. Disponía apenas de una negruzca 25
nariz, encorvada y del porte de una buena bota, que 37
podía mover de un lado, pero que no le servía para 49
tomar nada. 52
Había, sin embargo, otro elefante, hijo del anterior, 64

cuya curiosidad era insaciable, lo que significa que 74


en
todo momento estaba haciendo preguntas. 80
Vivía en África y molestaba a todo ese continente con 90
su inagotable curiosidad. Preguntaba a su alta tía 99

avestruz por qué las plumas de la cola le crecían de 110

esa manera. 113

El hijo del elefante

Por allá por los antiguos tiempos, hijo mío, el elefante


no tenía trompa. Disponía apenas de una negruzca
nariz, encorvada y del porte de una buena bota, que
podía mover de un lado, pero que no le servía para
tomar nada.

Había, sin embargo, otro elefante, hijo del anterior,


cuya curiosidad era insaciable, lo que significa que en
todo momento estaba haciendo preguntas.

Vivía en África y molestaba a todo ese continente con


su inagotable curiosidad. Preguntaba a su alta tía
avestruz por qué las plumas de la cola le crecían de
esa manera.

Piedra Azul, la esposa del lobo marino 8

E1 abuelo de mi abuelo contaba esta historia que 18


ahora
recuerdo. Son cosas que ocurrieron en la isla Huapi. 29
Por esta razón lo supo mi papá, ya que somos de ahí y 43
él me lo contó a mí. 50
Hace ya mucho tiempo una niña fue sola a las orillas 61
del mar. Allí fue tomada por unos seres del mar 72
cuando andaba, dicen, por la orilla del río que 83
desembocaba en el mar. 88
La niña desapareció de repente, pero no se ahogó; 100
sino
que se encuentra viva allá bajo el río, que da al mar. 114

Piedra Azul, la esposa del lobo marino


E1 abuelo de mi abuelo contaba esta historia que ahora
recuerdo. Son cosas que ocurrieron en la isla Huapi.
Por esta razón lo supo mi papá, ya que somos de ahí y
él me lo contó a mí.

Hace ya mucho tiempo una niña fue sola a las orillas


del mar. Allí fue tomada por unos seres del mar
cuando andaba, dicen, por la orilla del río que
desembocaba en el mar.

La niña desapareció de repente, pero no se ahogó; sino


que se encuentra viva allá bajo el río, que da al mar.

El sol 2

El Sol es una estrella que se encuentra en el centro del 14


Sistema Solar. La Tierra junto a otros planetas, 24
asteroides, meteoritos, cometas y polvo orbitan 32
alrededor de ella, constituyendo a la mayor 40
fuente de energía de esta constelación. 47
El Sol es la principal fuente de energía para las 57

reacciones químicas que ocurren en la naturaleza. 65


Como toda estrella el Sol tiene una forma esférica. 75
Debido a de su lento movimiento de rotación, tiene 85
también un leve achatamiento polar. Como en 93

cualquier cuerpo masivo toda la materia que lo 101

constituye es atraída hacia el centro del objeto por su 111

propia fuerza gravitatoria. 115

El sol

El Sol es una estrella que se encuentra en el centro del


Sistema Solar. La Tierra junto a otros planetas,
asteroides, meteoritos, cometas y polvo orbitan
alrededor de ella, constituyendo a la mayor
fuente de energía de esta constelación.

El Sol es la principal fuente de energía para las


reacciones químicas que ocurren en la naturaleza.
Como toda estrella el Sol tiene una forma esférica.

Debido a de su lento movimiento de rotación, tiene


también un leve achatamiento polar. Como en
cualquier cuerpo masivo toda la materia que lo
constituye es atraída hacia el centro del objeto por su
propia fuerza gravitatoria.
El muñeco de nieve 4

Es invierno. En el pueblo todas las calles se han 15


cubierto de nieve. Cuando los niños salen del colegio, 26
se van corriendo al parque a hacer un muñeco. 36

Con las manos, juntan toda la nieve que pueden y 47


poco a poco, forman una gran bola. 56

Luego, hacen otra más pequeña y la colocan encima. 67

Uno de los niños ha escogido de su casa dos papas y 79


con ellas les hace los ojos. Otro, ha encontrado una 91
zanahoria para hacerle la nariz. El más audaz, ha 103
traído
el sombrero de su papá. Y, por supuesto no falta quien 116
se quita su bufanda para ponérsela al muñeco. 125

Finalmente, con otras dos bolas de nieve le han hecho 136

los brazos. En uno de ellos, alguien le ha puesto una 149


escoba que ha encontrado en un patio cercano. 158

¡Nunca se había visto en el pueblo un muñeco tan 168

bonito! 169

El muñeco de nieve

Es invierno. En el pueblo todas las calles se han


cubierto de nieve. Cuando los niños salen del colegio,
se van corriendo al parque a hacer un muñeco.
Con las manos, juntan toda la nieve que pueden y
poco a poco, forman una gran bola.

Luego, hacen otra más pequeña y la colocan encima.


Uno de los niños ha escogido de su casa dos papas y
con ellas les hace los ojos. Otro, ha encontrado una
zanahoria para hacerle la nariz. El más audaz, ha traído
el sombrero de su papá. Y, por supuesto no falta quien
se quita su bufanda para ponérsela al muñeco.

Finalmente, con otras dos bolas de nieve le han hecho


los brazos. En uno de ellos, alguien le ha puesto una
escoba que ha encontrado en un patio cercano.

¡Nunca se había visto en el pueblo un muñeco tan


bonito!

El racimo de uvas 4

Una vecina le regaló un racimo de uvas a la mamá de 16


Eduardo. La mamá tenía muchas ganas de comer 27
uvas.
Pero vio que Eduardo estaba muerto de ganas de 36
comerse el racimo. -Toma. Cómetelo tú –dijo la 46
mamá, y le entregó el Racimo a Eduardo. 56
Eduardo partió feliz a comerse su racimo en un lugar 66
secreto que él tenía. Pero en el lugar secreto estaba 78
su
hermana Luisa. A Luisa se le hizo agua la boca 89
cuando vio el racimo. -Te lo regalo –dijo Eduardo. 100
Luisa se fue feliz a comer su racimo al patio. Ahí 112

estaba su papá arreglando una llave de agua. Tenía 122

mucho calor. 125


-Refréscate con este racimo –le dijo Luisa a su papá. 136
El papá le agradeció mucho el racimo. Lo tomó y se 148

lo ofreció a la mamá. La mamá se sonrió. Vengan 160

todos –dijo-: Eduardo; Luisa, papá. Vamos a 170


comernos juntos este rico racimo de uvas. 178

El racimo de uvas

Una vecina le regaló un racimo de uvas a la mamá de


Eduardo. La mamá tenía muchas ganas de comer uvas.
Pero vio que Eduardo estaba muerto de ganas de
comerse el racimo. -Toma. Cómetelo tú –dijo la
mamá, y le entregó el Racimo a Eduardo.

Eduardo partió feliz a comerse su racimo en un lugar


secreto que él tenía. Pero en el lugar secreto estaba su
hermana Luisa. A Luisa se le hizo agua la boca
cuando vio el racimo. -Te lo regalo –dijo Eduardo.
Luisa se fue feliz a comer su racimo al patio. Ahí
estaba su papá arreglando una llave de agua. Tenía
mucho calor.

-Refréscate con este racimo –le dijo Luisa a su papá.


El papá le agradeció mucho el racimo. Lo tomó y se
lo ofreció a la mamá. La mamá se sonrió. Vengan
todos –dijo-: Eduardo; Luisa, papá. Vamos a
comernos juntos este rico racimo de uvas.

Los pescadores 2
Los pescadores acostumbran a medir las distancias en 10
brazas. Para medir la profundidad del mar, tiraban una 21
cuerda con una piedra en la punta. 29
Luego iban recogiendo la cuerda y midiendo las veces 38
que podían extender los brazos. Así un marinero decía 48
que el fondo del mar estaba a cinco brazas porque 58
había tenido que recoger la cuerda en cinco ocasiones. 68
Era una forma de medir porque las brazas eran 77
parecidas de un marinero a otro. Pero nunca iguales. 88
Dependía de que el marinero fuese grande o pequeño 97

para que la braza fuera mayor o menor. 106


Existían también otras medidas. Cada pueblo tenía 114
unas medidas diferentes y era difícil entenderse. Por 123
ello se pensó en una medida común para todos: el 133

metro. El metro es la unidad que utilizan casi 143

todos los países. Así las medidas que se hacen en un 155


país son iguales a las que se hacen en otro. 166

Los pescadores

Los pescadores acostumbran a medir las distancias en


brazas. Para medir la profundidad del mar, tiraban una
cuerda con una piedra en la punta.

Luego iban recogiendo la cuerda y midiendo las veces


que podían extender los brazos. Así un marinero decía
que el fondo del mar estaba a cinco brazas porque
había tenido que recoger la cuerda en cinco ocasiones.

Era una forma de medir porque las brazas eran


parecidas de un marinero a otro. Pero nunca iguales.
Dependía de que el marinero fuese grande o pequeño
para que la braza fuera mayor o menor.

Existían también otras medidas. Cada pueblo tenía


unas medidas diferentes y era difícil entenderse. Por
ello se pensó en una medida común para todos: el
metro. El metro es la unidad que utilizan casi
todos los países. Así las medidas que se hacen en un
país son iguales a las que se hacen en otro.

Colores 1

Cuando se nos van los colores de la cara, 11


supuestamente se van a alguna parte. Lo que nadie, 22

pero nadie, sabe es a ¿dónde? 29


Puede ser que se metan adentro de la piel, eso es lo 43
que
dicen algunas personas, pero puede ser que no, como 54
dicen muchas otras. 58
A mí cuando se me escapa un color de la cara, me lo 72
guardo en una cajita que llevo colgada del cuello. Esto 83
es sumamente útil sobre todo cuando a alguien se le 94
va
el color de la cara porque, por ejemplo, se pegó un 107

susto bárbaro porque también hay sustos que no 115


son bárbaros, que te sacan apenas los colores de la 126
cara, pero como te vuelven enseguida, esos no me 137
preocupan. Estaba diciendo: es sumamente útil tener 145

colores de más, porque si veo, a algún asustado, le 158

prestó un color de los míos y se le vuelven los colores 170


a la cara enseguida y se olvida del mal trago. Lo único 183
que me faltaría es aprender a guardar aire, ya sabes, 195
para cuando me quedo sin aliento. 202

Colores
Cuando se nos van los colores de la cara,
supuestamente se van a alguna parte. Lo que nadie,
pero nadie, sabe es a ¿dónde?

Puede ser que se metan adentro de la piel, eso es lo que


dicen algunas personas, pero puede ser que no, como
dicen muchas otras.

A mí cuando se me escapa un color de la cara, me lo


guardo en una cajita que llevo colgada del cuello. Esto
es sumamente útil sobre todo cuando a alguien se le va
el color de la cara porque, por ejemplo, se pegó un
susto bárbaro porque también hay sustos que no
son bárbaros, que te sacan apenas los colores de la
cara, pero como te vuelven enseguida, esos no me
preocupan. Estaba diciendo: es sumamente útil tener
colores de más, porque si veo, a algún asustado, le
prestó un color de los míos y se le vuelven los colores
a la cara enseguida y se olvida del mal trago. Lo único
que me faltaría es aprender a guardar aire, ya sabes,
para cuando me quedo sin aliento.
La zorra 2

Una zorra encontró a un erizo que bajaba lentamente 12


la
cuesta de una montaña. 17

-Buenos días, -le dijo la zorra con burla- ¿Adónde vas 28

con ese paso tan rápido? 33

-No muy lejos. Al jardín que ves allá abajo –le 45


contestó

el erizo. -Bueno, te acompañaré, pero con la 56


condición de que no vayas demasiado de prisa. 65

-¿Y si llego primero al jardín? -preguntó el erizo. La 76


zorra lo miró y, pensando que llegaría corriendo 86
mucho
antes que él, le dijo: 92

-Si me adelantas, te prometo que te llevaré todas las 103


tardes tu comida. -Vamos, pues. 111

Y, apenas había dicho estas palabras, el erizo se 122

hizo una bola y comenzó a rodar rápidamente por la 132

pendiente. 134

Cuando la zorra quiso comenzar a correr, el erizo ya 145


había llegado al jardín. 150

-Te perdono tu promesa, -le dijo a la zorra al verla 162


llegar sin aliento. 166
La zorra

Una zorra encontró a un erizo que bajaba lentamente la


cuesta de una montaña.
-Buenos días, -le dijo la zorra con burla-. ¿Adónde vas
con ese paso tan rápido?

-No muy lejos. Al jardín que ves allá abajo –le contestó
el erizo. -Bueno, te acompañaré, pero con la
condición de que no vayas demasiado de prisa.
-¿Y si llego primero al jardín? -preguntó el erizo. La
zorra lo miró y, pensando que llegaría corriendo mucho
antes que él, le dijo:
-Si me adelantas, te prometo que te llevaré todas las
tardes tu comida. -Vamos, pues.

Y, apenas había dicho estas palabras, el erizo se


hizo una bola y comenzó a rodar rápidamente por la
pendiente.
Cuando la zorra quiso comenzar a correr, el erizo ya
había llegado al jardín.
-Te perdono tu promesa, -le dijo a la zorra al verla
llegar sin aliento.
Los murciélagos 2

Algunos tienen alas que llegan a medir un metro y 12


medio. El ala de los murciélagos es realmente una 22

mano con una membrana sostenida por dedos largos y 31

un dedo pulgar separado, que tiene una uña. 41

La mayoría de los murciélagos descansa colgados 48

de cabeza en árboles o en cuevas. Las patas 58

delanteras del murciélago son parte de las alas, por 68

lo que no puede agarrarse con ellas y por eso tiene 79


que colgarse de cabeza, con las patas traseras. 89

Algunos se alimentan cazando ranas, aves, peces y 99

mamíferos pequeños y otros, chupan el néctar de la 109


flores. 111

Los murciélagos cazan y vuelan por ecolocación, es 120

decir, utilizando un sistema como el radar. Emiten 130

sonidos muy agudos que escuchan cuando rebotan 137

con los objetos. El oído humano no puede percibir 147


estas señales. 150

Los murciélagos

Algunos tienen alas que llegan a medir un metro y


medio. El ala de los murciélagos es realmente una mano con
una membrana sostenida por dedos largos y un dedo
pulgar separado, que tiene una uña.

La mayoría de los murciélagos descansa colgados


de cabeza en árboles o en cuevas. Las patas
delanteras del murciélago son parte de las alas, por
lo que no puede agarrarse con ellas y por eso tiene
que colgarse de cabeza, con las patas traseras.
Algunos se alimentan cazando ranas, aves, peces y
mamíferos pequeños y otros, chupan el néctar de la
flores.

Los murciélagos cazan y vuelan por ecolocación, es


decir, utilizando un sistema como el radar. Emiten
sonidos muy agudos que escuchan cuando rebotan
con los objetos. El oído humano no puede percibir
estas señales.

El caracol 2

El caracol de jardín pesa unos diez gramos 10


aproximadamente y vive cerca de seis años. Su nombre 20

científico es Helix Aspersa. Durante el día los 29

caracoles duermen encerrados en su caparazón; por la 38

noche se les ve activos consumiendo alimentos. Ellos 47

requieren de una temperatura de aproximadamente 53

veinte grados y de bastante humedad. 60

El caracol se alimenta de hojas blandas y jugosas, en lo 72


posible de color verde ¡Son muy golosos! ¡Les encanta 81
comer lechuga, plátano y, sobre todo, moras! 91
Se reproduce por huevos que parecen pequeñas perlas 99
blancas; el caracol los entierra en manojos de sesenta a 110
ochenta huevos, a unos cuatro centímetros de profundidad. 120

Tres semanas después nacen los caracoles y permanecen 128

bajo tierra unos días, antes de salir a la superficie. 140

En algunos países el caracol es considerado un 148


alimento muy completo y con el que se preparan platos 158

exquisitos. 160

El caracol

El caracol de jardín pesa unos diez gramos


aproximadamente y vive cerca de seis años. Su nombre
científico es Helix Aspersa. Durante el día los
caracoles duermen encerrados en su caparazón; por la
noche se les ve activos consumiendo alimentos. Ellos
requieren de una temperatura de aproximadamente
veinte grados y de bastante humedad.

El caracol se alimenta de hojas blandas y jugosas, en lo


posible de color verde ¡Son muy golosos! ¡Les encanta
comer lechuga, plátano y, sobre todo, moras!
Se reproduce por huevos que parecen pequeñas perlas
blancas; el caracol los entierra en manojos de sesenta a
ochenta huevos, a unos cuatro centímetros de profundidad.
Tres semanas después nacen los caracoles y permanecen bajo tierra
unos días, antes de salir a la superficie.

En algunos países el caracol es considerado un


alimento muy completo y con el que se preparan platos
exquisitos.
Velocidad lectora
2° básico

Profesora: Yamila Salazar

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