Volumen 2 - Sintesis de Propuestas-Annotated
Volumen 2 - Sintesis de Propuestas-Annotated
Volumen 2 - Sintesis de Propuestas-Annotated
HACIA LAS
FRONTERAS DEL
CONOCIMIENTO
Síntesis de las
propuestas
Volumen 2
© Vicepresidencia de la República de Colombia
© Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación
Primera edición, 2020
ISBN Impreso: 978-958-5135-14-7
ISBN Digital: 978-958-5135-15-4
Colección
Colombia hacia una sociedad del conocimiento
Volumen 2
Colombia hacia las fronteras del conocimiento
Compiladores
Clemente Forero Pineda
Universidad de los Andes
Juliana Valdés Pereira
Universidad del Rosario
Coordinación editorial
Piedad Salgado Camacho
Facultad de Administración
Universidad de los Andes
Catalogación en la publicación
Colombia hacia las fronteras del conocimiento : síntesis de las recomendaciones.
-- Primera edición. -- Bogotá : Vicepresidencia de la República de Colombia, Ministerio de
Ciencia, Tecnología e Innovación, 2020.
396 páginas : ilustraciones, diagramas.-- (Colección Misión Internacional de Sabios, 2019)
Incluye referencias bibliográficas al final de cada capítulo
ISBN 978-958-5135-14-7 (impreso). -- ISBN 978-958-5135-15-4 (digital)
1. Desarrollo científico y tecnológico -- Colombia 2. Sociedad de la información
3. Educación y desarrollo -- Aspectos sociales 4. Gestión del conocimiento 5. Innovaciones
tecnológicas 6. Tecnología de la información 7. Colombia -- Desarrollo sostenible
P34 dos
Síntesis de las recomendaciones de los focos de la Misión
1. Foco de Biotecnología, Bioeconomía
4.2 Los componentes del desarrollo humano abordados en este informe p155
4.3 Propuestas del foco de Ciencias Sociales
y Desarrollo Humano con Equidad p162
4.4 Conclusiones p185
y Medio Ambiente (bbma) p37
Retos de país y misiones emblemáticas propuestas a la Misión Internacional 5. Foco de Energías Sostenibles p191
de Sabios 2019 con la participación del Foco bbma p37 Resumen ejecutivo p191
5.1 Las tendencias mundiales p194
Contenido
Principales conclusiones y recomendaciones del Foco de Biotecnología,
Bioeconomía y Medio Ambiente (bbma) p38 5.2 Colombia en energía p195
1.1 Contexto p39 5.3 Colombia en ctei para energía p198
1.2 Alcance p41 5.4 Recomendaciones p199
1.3 Regionalizacion p42 5.5 Tecnologías, educación y política de ctei: discusiones p201
1.4 Internacionalización p42 5.6 Política de ctei para energía p211
1.5. Síntesis de talleres con la participación ciudadana-Misión de Sabios p43 5.7 Gestión y gobernanza de la ctei p214
1.6. Documentos temáticos de integrantes del Foco de bbma p46 5.8 Algunas tareas p216
1.7. Propuestas y acciones del Foco de Biotecnología, Bioeconomía
y Medio Ambiente p71 6. Foco de Industrias Creativas y Culturales: las industrias
creativas y culturales en el Sistema Nacional de
2. Foco Ciencias Básicas y del Espacio: las ciencias básicas Ciencia, Tecnología e Innovación p219
y del espacio para la sociedad colombiana p81 6.1 Propuestas del foco de Industrias Creativas y Culturales p223
2.1 Antecedentes y contexto p81 6.2 Educación para las industrias creativas y culturales p227
2.2 Relación Academia-Empresa-Estado p98 6.3 Circulación de contenidos, articulación con industria,
2.3 Conclusiones p115 Integración de cadenas de valor p232
P330 tres
6.4 Infraestructura y tecnología p236
6.5 Regulación, financiación, información p239
Epílogo
7. Foco deFoco de Océanos y Recursos Hidrobiológicos:
estado global y nacional de los océanos, mares, humedales y recursos Presentación: la pandemia, la reactivación
hidrobiológicos marino-costeros, oceánicos, insulares y el viraje propuesto por la Misión de Sabios p333
y continentales misiones emblemáticas al 2030 p243 1. Ciencias básicas y soberanía tecnológica en tiempos de covid-19 p340
Introducción p243 2. Desarrollo humano y educación en tiempos de pandemia p345
7.1 Objetivos y metodología p246 3. El papel de la educación en la transformación
7.2 Documentos preparados por el foco de Océanos y evolución a una nueva sociedad p352
y Recursos Hidrobiológicos p248 4. La ciencia, el largo plazo y las crisisia p355
7.3 El proceso de consulta y concertación p249 5. Bioeconomía en la post-pandemia p359
7.4 Una visión conjunta del agua y los ecosistemas acuáticos 6. La ciencia, la tecnología y la innovación
marinos y continentales p250 como constructoras de un futuro diferente p365
7.5 Línea base sobre el estado mundial de las temáticas 7. La transición hacia la nueva Colombia después de la crisis covid-19 p368
del foco de Océanos y Recursos Hidrobiológicos p252 8. La pandemia y el cambio climático: amenazas existenciales globales con causas y
7.6 Salud de los ecosistemas p273 efectos comunes y sobre el retorno a la “normalidad” p372
7.7 El capital humano y su formación p280 9. La Misión de Sabios y las lecciones de la pandemia p382
7.8 La producción científica y la infraestructura
P386
científica y tecnológica p280
cuatro
Contenido
7.9 El marco normativo, políticas públicas, la institucionalidad
y la gobernanza p281 Agradecimientos
7.10 Proyectos y misiones emblemáticas p283 Agradecimientos generales p389
8. Foco de Tecnologías Convergentes e Industrias 4.0: Agradecimientos del foco de Bioeconomía, Biotecnología
una nueva Colombia hacia la convergencia tecnológica y Medio Ambiente (bbma) p390
y la cuarta revolución industrial p293 Agradecimientos del foco de Ciencias Básicas y del Espacio (cbe) p390
Resumen ejecutivo p293 Agradecimientos del foco de Ciencias Sociales
8.1 Contexto global p295 y Desarrollo Humano con Equidad (csdhe) p391
8.2 ¿Qué significan la convergencia tecnológica Agradecimientos del foco Ciencias de la Vida y de la Salud (cvs) p392
y la cuarta revolución industrial? Conceptos básicos p296 Agradecimientos del foco Energías Sostenibles (es) p393
8.3 Arquitectura crítica para la innovación y la oportunidad global p300
Agradecimientos del foco Industrias Creativas y Culturales (icc) p394
8.4 Línea base para la identificación de barreras y oportunidades
que tiene Colombia en las áreas de las tecnologías Agradecimientos del foco de Océanos y recursos hidrobiológicos (orh) p395
convergentes como base para la cuarta revolución industrial p310 Agradecimientos del foco Tecnologías Convergentes
8.5 Objetivo del foco p322 e Industrias 4.0 (tcei 4.0) p395
8.6 Meta de la misión emblemática: Colombia hacia un nuevo
modelo productivo, sostenible y competitivo p326
uno Presentación
de la serie
y del volumen 2
L a colección Misión Internacional de Sabios 2019 reúne las reflexiones
que durante diez meses hizo un grupo de científicos y expertos convocados por
el presidente de la República de Colombia, con el propósito de guiar las políticas
del Estado en ciencia, tecnología, innovación y educación, las estrategias de las
organizaciones sociales y de los sectores productivos, y la acción colectiva de la
sociedad durante las próximas décadas. Pensar y avanzar hacia ese país posible es
una tarea de todas y todos. Las reflexiones contenidas en estos volúmenes proponen
una ruta hacia una sociedad basada en el conocimiento, equitativa y sostenible.
El primer volumen, Colombia hacia una sociedad del conocimiento, contiene
las propuestas centrales del grupo de 47 científicos y expertos comisionados al
gobierno y a la sociedad colombiana y los consensos logrados en las deliberacio-
nes. Este segundo volumen, Colombia hacia las fronteras del conocimiento, presenta
una síntesis de las recomendaciones específicas de los ocho focos de la Misión:
Ciencias Básicas y del Espacio; Ciencias Sociales y Desarrollo Humano con Equidad;
Ciencias de la Vida y de la Salud; Biotecnología, Bioeconomía y Medio Ambiente;
Océanos y Recursos Hidrobiológicos; Industrias Creativas y Culturales, Energía
Sostenible y Tecnologías Convergentes e Industria 4.0. A manera de epílogo, nueve
reflexiones —realizadas por miembros de la Misión en 2019 y muy pertinentes para
enfrentar la múltiple crisis generada por la pandemia—, en donde se evidencia que
la ciencia y el conocimiento se han convertido en las principales herramientas de
la humanidad para combatir la enfermedad y sus secuelas económicas y sociales.
Colombia debe buscar de manera incesante su mejor versión. Las diversas ramas
y campos de la ciencia son aliados imprescindibles, en los que encontramos ins-
piración para desarrollar el potencial nacional y para buscar el equilibrio entre el
bienestar, el cuidado ambiental y el crecimiento económico.
El 8 de febrero de 2019 el presidente Iván Duque Márquez convocó a 47
expertos —nacionales e internacionales—, para conformar la Misión Internacional
de Sabios, con el objetivo de elaborar una hoja de ruta en materia de educación,
ciencia, tecnología e innovación que le permitiera a Colombia dar un salto para
convertirse en un país del conocimiento y cerrar las brechas existentes.
En desarrollo del Decreto 1714/18 tuve el privilegio de coordinar la orga-
nización, los ejes de trabajo y el desarrollo de la Misión Internacional de Sabios,
con la convicción de encontrarnos como nación en un momento emblemático
por coincidir con la celebración del Bicentenario de la Independencia Nacional.
Luego de un juicioso trabajo en equipo, con miembros de todas las instancias del
Gobierno, las universidades y entidades del sector público y privado, el país recibió,
el 5 de diciembre de 2019, las recomendaciones de la Misión para el avance de la
ciencia, la tecnología y la innovación.
Referencias
Unesco. (2020). Planificación educativa sensible a las crisis. Nota temática
N° 2.4. Notas temáticas del Sector de Educación, unesco, Sector de
Educación. Recuperado de https://www.iesalc.unesco.org/2020/04/01/
planificacion-educativa-sensible-a-las-crisis/
Ha pasado un poco más de un año desde que el presidente Iván Duque conformara
la Misión Internacional de Sabios con el propósito de construir una estrategia que le
permita al país avanzar hacia una sociedad del conocimiento con una conexión entre
ciencia, tecnología e innovación, bienestar, buen vivir y desarrollo económico. Esta
Misión, integrada por 46 investigadores nacionales e internacionales de diversas
áreas del conocimiento, concluyó con una hoja de ruta basada en recomendaciones,
estrategias y misiones.
Tuve el honor de participar como mujer y como hija de una región en este
grupo de científicos con la gran tarea de realizar aportes para la construcción de
una política de Estado que permitiera enrumbar al país en torno a sus potencia-
lidades. Una tarea nada fácil pero sí muy retadora, que nos permitió aportar a la
construcción de un legado que ahora hace parte de las propuestas del Ministerio de
Ciencia, Tecnología e Innovación, del cual tengo el gran honor y responsabilidad
de ser su primera ministra.
En un principio hubo interrogantes sobre cuál sería nuestro papel, pues no
estaba clara la forma de construir una ruta para conectar las múltiples visiones
considerando las oportunidades y particularidades específicas de los territorios.
1.1 Contexto
1.2 Alcance
1.4 Internacionalización
Wilmar Camilo Fonseca González, Laura Vanesa Rodríguez Arcila, Catalina María Bernal
Murcia, Laura Bibiana Zuluaga Pineda, Lina María Rubiano Arias, Edgar Francisco
Otálora Bohórquez y Martín Ramírez.
Esteban Manrique
Director del Real Jardín Botánico – CSIC (Madrid, España)
Cristián Samper
CEO y Presidente de Wildlife Conservation Society (New York, USA).
Planes Empresas
de vida Productores y emprendimiento Cooperantes
Articulación social
Catalizador
Autoridades
Entrenamiento Financiamiento
étnico-territoriales
Gestión Asistencia
Conexión Técnica
Universidades Puentes
Centros de CTeI comerciales
Dinamización Dinamización
y gestión del de las cadenas
conocimiento de valor
Silvia Restrepo
Universidad de los Andes
Los retos del sector agro en Colombia son grandes y la investigación debe
fortalecerse en varias áreas. Los principales retos se pueden centrar en torno
a tres grandes temas: cadenas de valor rezagadas, problemas en la gobernanza
del territorio y problemas de efectos negativos al medio ambiente. El primer
reto se relaciona con escasa innovación tecnológica en las cadenas productivas,
lo que conlleva a bajo valor agregado, con rezago en mecanización y en uso
de tecnologías de avanzada para la toma de decisiones en el ciclo productivo
y escasa masa crítica para trabajo tecnificado en el campo. El segundo reto,
el de la gobernanza del territorio, se relaciona con el hecho de que Colombia
solo utiliza el 24 % de la superficie apta para la agricultura, aunado a altos
índices de informalidad en la tenencia de tierras y a malas condiciones so-
cioeconómicas de la población rural. El tercer reto se relaciona con el impacto
que la agricultura en general presenta sobre el medio ambiente, máxime
Germán Poveda
Departamento de Geociencias y Medio Ambiente, Universidad Nacional de Colombia, Medellín
Cristián Samper
CEO y Presidente de Wildlife Conservation Society (New York, USA).
Germán Poveda
Departamento de Geocienci as y Medio Ambiente, Universidad Nacional de Colombia,
Sede Medellín.
Este llamado que hacemos hoy es para que todos –todos, absolutamente
todos–, en el esfuerzo de actuar frente a los efectos del cambio climático;
entendamos que no seremos victoriosos si no incluimos en nuestra agenda
la defensa irrestricta de los bosques tropicales, de los bosques lluviosos y de
los bosques primarios”. Palabras del presidente Iván Duque en las Naciones
Unidas, 23 de septiembre de 2019.
El capital natural y la extraordinaria biodiversidad de Colombia cons-
tituyen las mayores riquezas presentes y futuras de Colombia. Este capital
está constituido por los ecosistemas, sus componentes bióticos y abióticos,
los ciclos de agua y energía y los ciclos biogeoquímicos —calcio, carbono,
hidrógeno, mercurio, nitrógeno, oxígeno, fósforo, selenio y azufre—, los
seres vivos —humanos, plantas, animales y microorganismos—, y los sis-
temas de soporte a la vida: agua, aire, suelos, todos los tipos de bosques y
Referencias
González-Pinto, A. L. (Ed.). (2017). Biodiversidad y cambio climático en Colombia:
Avances, perspectivas y reflexiones. Bogotá D.C.: Jardín Botánico de Bogotá José
Celestino Mutis.
Hansen, M. C., et al. (2019). Global Forest Watch. Tree Cover Loss in Colombia.
Recuperado el 8 de agosto de 2019 de www.globalforestwatch.org.
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A global synthesis reveals biodiversity loss as a major driver of ecosystem change.
Nature, 486, 105-108. doi: 10.1038/nature11118
Ideam, Invemar, iiap e iavh 2016, (2017): Informe del Estado del Ambiente y de los Recursos
Naturales Renovables 2016. Bogotá, D.C.: Ideam.
Lovejoy, T. E. y Nobre, C. (2018). Amazon tipping point. Science Advances, 4 (2), 2340.
Makarieva, A. M. y V. G. Gorshkov (2007). Biotic pump of atmospheric moisture as
driver of the hydrological cycle on land. Hydrology and Earth System Sciences, 11,
1013-1033.
Molina, R. D., Salazar, J. F., Martínez, J. A., Villegas, J. C. y Arias, P. A. (2019).
Forest-Induced Exponential Growth of Precipitation Along Climatological wind
Streamlines over the Amazon. Journal of Geophysical Research: Atmospheres, 124,
2589-2599. doi: 10.1029/2018JD029534.
Myers, N., Mittermeier, R. A., Mittermeier, C. G., da Fonseca, G. A. B. y Kent J.
(2000). Biodiversity hotspots for conservation priorities. Nature, 403, 853-858.
doi: 10.1038/35002501
Perino, A., et al., (2019). Rewilding Complex Ecosystems. Science, 364 (6438).
doi: 10.1126/science.aav5570
Poveda, G., Pereira, H. M., Navarro L. M., Fernández, N. y Bullo, J. M. (2014). Seasonal
precipitation patterns along pathways of South American low-level jets and aerial
rivers, Water Resources Research, 50, 98-118. doi: 10.1002/2013WR014087.
1.7.1 Financiación
Incentivos para la inversión del sector privado en
biotecnología, bioeconomía y medio ambiente
Trascendencia de la propuesta: el fortalecimiento de la investigación en las
áreas de importancia capital para Colombia como son las biotecnologías
y el medio ambiente.
1.7.2 Regulación
Trascendencia de la propuesta: la promoción de la investigación sobre la
biodiversidad y los ecosistemas.
Objetivos: revisión y ajuste de las regulaciones relacionadas con el co-
nocimiento de los ecosistemas, la biodiversidad, su conservación y su
1.7.3 Regionalización
Trascendencia de la propuesta: fortalecimiento de la capacidad regional de
la investigación en biotecnología y medio ambiente.
Objetivos: definir las prioridades de investigación regionales en temas de
medio ambiente y biotecnología de acuerdo con las capacidades y necesida-
des de las mismas para ser integradas en las prioridades nacionales de ctei.
Mecanismos para lograr los objetivos: definición de la estructura del Minis-
terio de Ciencia, Tecnología e Innovación y, particularmente, de la agencia
de financiación que gestionará el Fondo Caldas para favorecer el avance de
la investigación en temas trascendentales para Colombia (Biotecnología y
Medio Ambiente) en las regiones (mecanismo rap).
Relación con los otros focos disciplinares: iniciativa de interés de los focos
de Océanos y Recursos Hidrobiológicos y de Ciencias Básicas.
1.7.5 Internacionalización
La investigación en temas ambientales y en biotecnologías requiere la
utilización de sofisticados y muy costosos equipos de laboratorio y de
monitoreo —satélites, aviones con equipos científicos, radares, drones,
torres de medición de flujos y gases traza, etc.—. Colombia debe comenzar
a financiar el desarrollo de laboratorios pertinentes, pero también debe
aprovechar la existencia de centros de investigación, recursos humanos,
laboratorios de punta y capacidades de monitoreo en otros países. Para
ello, el país debe establecer convenios de cooperación internacional con
beneficio de doble vía, en términos de capacitación de personal, inserción
en redes internacionales, transferencia de tecnología y reducción de costos
en investigación.
3. Universidades
• Implementar programas de posgrado en ciencias ambientales y, en
general, programas de educación sobre conocimiento, conservación y
aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y de los sistemas
de soporte a la vida.
• Involucrar el concepto de la bioeconomía en el contexto del proceso
educativo, con profesionales docentes entrenados y calificados en
temas como biotecnología, ingeniería, economía, bionegocios, legis-
lación ambiental, entre otros. Cursos en gestión de bioeconomía.
• Potenciar un programa mixto de doctorado universidad/empresa y
facilitar la incorporación de doctores en las plantillas.
• Fomentar la creación de programas de maestría y doctorado en
Comunicación de la ciencia para facilitar la transferencia de cono-
cimiento desde los investigadores a los tomadores de decisión y a la
sociedad.
• Apoyar la adquisición de sistemas de cómputo de alta capacidad
—modelación y pronóstico de procesos ecológicos, hidrológicos y
climáticos—.
https://www.dropbox.com/s/zok89azf0mr44ne/190715%20Base%20
de%20Datos%20PP.xlsx?dl=0
Financian
$ 2.541.403 $ 2.485.268 $ 600.418 $ 105.627 $ 81.222 $
49.373 $
14.038 $
6.054
Centros ONG, asociaciones
Entidades de investigación y Hospitales IPSFL al servicio y agremiaciones
Empresas
IES
gubernamentales desarrollo tecnológico Internacionales y clínicas de las empresas profesionales
Higher education
Firms Government institutions Research and International Hospitals Private non-profit NGOs
organizations development and clinics thatservice firms and professional
centers associations
2.432.948
36.280
695
30.837
8.659
24.561
7.424
402.757
550.065
985.769
409.099
72.220
7.302
58.056
597.078
420
1.551
365
105.627
21.986
21.172
29.114
716
110
8.123
49.373
14.024
14
6.054
$ 2.835.705 $ 1.205.409 $ 1.007.636 $ 577.227 $ 95.623 $ 81.766 $
80.037
Centros de ONG, asociaciones
Entidades investigación y IPSFL al servicio Hospitales y agremiaciones
IES profesionales
Empresas gubernamentales desarrollo tecnológico de las empresas y clínicas
Higher education
Firms institutions Government Research and Private non-profit Hospitals NGOs
organizations development thatservice firms and clinics and professional
centers associations
Ejecutan
Propuestas para protección del medio ambiente desde las Ciencias Básicas
Se propone el establecimiento de una política de Estado que financie a muy
largo plazo un paquete de iniciativas de investigación básica relacionadas
con la protección, la descontaminación del ambiente y el uso sustentable de
recursos vivos; por ejemplo:
1. Proyectos de investigación básica tendientes a la búsqueda y utilización
de microorganismos que puedan ser usados para la descontaminación de
aguas y suelos.
2. Proyectos de investigación básica en química orgánica que lleven a la
invención de nuevos materiales para sustituir los plásticos.
3. Proyectos de investigación básica en química y química farmacéutica para
la producción sustentable de bioproductos a partir de nuestra biodiversidad.
4. Programas de investigación básica en Biología donde se determinen qué
especies de plantas nativas son las más aconsejables, y en qué región, para
hacer reforestación.
5. Programas de investigación básica que permitan el uso inteligente de la
química sobre productos alimenticios en los cuales se prefieran ingredientes
vegetales, de modo que se disminuya la producción de carne y con ello
las emisiones contaminantes.
6. Contribuir a los estudios conducentes a sustituir, al menos en parte, las
energías fósiles por energías limpias.
1. Fomento de la transdisciplinariedad
Las ciencias básicas y del espacio están en una situación privilegiada para
fomentar la transdisciplinariedad, reconocidamente necesaria porque la
mayoría de los objetivos no responden a una disciplina única, ni dependen
de un solo campo profesional. Las ciencias básicas, muy relacionadas entre
ellas y con fronteras cada vez más difusas, son un foco ideal de encuentro.
Propuesta concreta
a. Creación de centros de investigación enfocado en problemas no en disciplinas.
Propuestas concretas
a. Crear la oficina de asesor científico de la presidencia.
b. Promover la creación de un comité asesor de ciencia para el Congreso.
Propuesta concreta
a. Diseñar e implementar, con el apoyo del Ministerio de Educación, una cátedra
de ciencia y estadística para facultades de periodismo y comunicación social.
b. Diseñar un sistema de educación continua para periodistas y comunica-
dores centrado en la comprensión de la ciencia.
Regionalización y equidad
Un país con grandes inequidades como Colombia desperdicia gran parte de
su potencial humano, y los sectores donde más se desaprovecha tienden a
ser los más desfavorecidos y con una larga historia de pobreza y violencia.
¿Cómo podemos convertir esta barrera en oportunidad, y aprovechar la
diversidad de Colombia para ponerla al servicio de su desarrollo en ciencias
básicas y del espacio?
Una estrategia de aprovechamiento del capital intelectual necesita con-
siderar la crucial diferencia que existe entre talento intelectual y preparación
académica. Mientras que el talento se encuentra distribuido entre todos los
sectores sociales, la preparación está altamente correlacionada con el estatus
Estrategias propuestas:
- Educación
a. Acceso: se propone la introducción de mecanismos de evaluación más
integrales, donde los puntajes en exámenes estandarizados sean solo uno
de múltiples factores para determinar el ingreso a la educación superior.
Se propende por procesos que evalúen al individuo en su contexto y
entiendan el talento como una característica multidimensional.
b. Acompañamiento: se propone crear una serie de principios básicos y
buenas prácticas para acompañar los procesos de adaptación de estu-
diantes al contexto académico.
- Financiación
Se propone introducir y reforzar planes de financiación de educación superior
que tengan en cuenta el costo total del programa académico, más allá de
los costos de matrícula.
Teniendo en cuenta que no hay planes de corto, medio o largo plazo para
el desarrollo de las Ciencias Básicas y del Espacio en el país, se recomienda:
a. Definir planes de desarrollo y planes de acción específicos para estas
disciplinas, en el marco de la planificación general de la ciencia y el
Estado.
2.3 Conclusiones
Bibliografía
Pardo Martínez, C. I. y Cotte Poveda, A. (2017). Indicadores de ciencia y tecnología,
Colombia 2017. Bogotá, D.C.: Observatorio Colombiano de Ciencia y Tecnología.
3.1 Propósito
Este documento presenta propuestas factibles y preguntas relevantes que debe
abordar el Gobierno colombiano, visto a través de la lente de las ciencias de la
vida y la salud, para que el país avance en los próximos 25 años. Estas preguntas
y propuestas están destinadas a guiar la construcción e implementación de
políticas y estrategias públicas que garanticen una vida saludable y así promover
el bienestar de todas y todos los colombianos en todas las edades, conforme al
tercero de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Los sistemas de salud y de ciencia, tecnología e innovación del país han tenido
discursos y trayectorias muy distantes: en primer lugar, el sistema de salud
ha puesto un excesivo énfasis en la enfermedad, así como en los aspectos
económicos y de cobertura del sistema; en segundo lugar, no hay un sistema
explícitamente dedicado al bienestar, lo cual lleva a la falta de claridad sobre
la asignación de recursos, o el impacto de intervenciones que intentan me-
jorarlo; tercero, el snctei se ha centrado en las tendencias de conocimiento
y la productividad académica, dejando atrás sus contribuciones reales a la
población. Para lograr la salud y el bienestar utilizando el conocimiento con-
textualizado, el sistema de salud debe ser la fuente de las preguntas, definiendo
con precisión las oportunidades y los problemas o desafíos que requieren
nuevos conocimientos; y el sncti debe utilizar el mejor conocimiento posible
para generar valor a la sociedad, o producir nuevos conocimientos utilizando
los principios fundamentales de la actividad científica y la infraestructura
tecnológica disponible en la actualidad. En este sentido, una conversación
entre los dos sistemas —salud y ciencia, tecnología e innovación— sobre salud
y bienestar es fundamental para lograr un cambio real.
Según el Banco Mundial, en 2015 solo el 27 % de los instrumentos
de ctei (dnp y Banco Mundial, 2015) creados en Colombia resultaron de
mecanismos formales de coordinación y diseño conjunto entre diferentes
organismos gubernamentales. Aprendiendo de esta experiencia, asumimos
que los gobiernos presentes y futuros crearán políticas e instrumentos que
articulen capacidades internas, programas y recursos, para abordar desafíos
clave de salud que promuevan el bienestar. Sabemos que la promoción de
una ‘pandemia de salud y bienestar’ probablemente provocará un rechazo de
aquellos que se benefician de la medicalización de la vida o de la provisión
Prerrequisitos
La salud se considera una habilidad apoyada y priorizada por el Estado y un
componente esencial del bienestar de la población, también visto como una
habilidad, mucho más allá del abordaje economicista tradicional. Para lograr
la salud y el bienestar de todos, es necesario:
– Que la equidad sea el objetivo principal.
– Que el aprendizaje contextualizado (o la educación en contexto) sea
prioritario.
– Que la transparencia, la integridad y la ética estén presentes en todas las
instituciones gubernamentales, y que sean obligatorias.
– Que la evaluación permanente de las actividades de las instituciones
gubernamentales y de su impacto sobre la salud y el bienestar garanticen
el éxito de las recomendaciones.
– Que el Gobierno acepte e implemente las recomendaciones del foco de
Ciencias de la Vida y la Salud.
Los recursos del Estado son finitos y los logros de las propuestas formu-
ladas dependen de las capacidades locales. No obstante, ante estas limitantes
el Estado debe ser estratégico y articularse en el territorio nacional para
lograr las metas.
Resultados esperados
Aunque pueden ser muchos los resultados que se esperarían de la puesta en
marcha de las iniciativas derivadas de las propuestas del foco, los prioritarios
podrían ser:
– Lograr la convergencia entre las necesidades de la población en general y
el interés del Gobierno, el sector productivo y los académicos.
Propuestas
Proponemos un sistema que verdaderamente se enfoque en la salud como
componente del bienestar, que esté basado en el uso de conocimiento científico
contextualizado para abordar problemas educativos, biomédicos y de salud pública.
Vemos esta transformación como una manera de responder a las necesidades de
las comunidades y lograr una sociedad sostenible e incluyente. De esta forma,
se crea un modelo de bienestar individual y colectivo para reducir la desigualdad
en el país y promover la plenitud para todas las personas, como parte de un
planeta floreciente donde se respete la vida, en todas sus formas.
Nuestras propuestas señalan la importancia de utilizar el mejor cono-
cimiento y movilizar el mejor talento disponible para dar soluciones a los
determinantes ambientales —alimentos, exposición a agentes infecciosos,
químicos y físicos, manejo de basuras, transporte, etc.— y sociales —factores
relacionados con pobreza, educación discriminación, inseguridad, corrupción,
impunidad, violencia, soledad etc.— sobre la salud y el bienestar. Este enfo-
que permite tener una visión integral de las comunidades y estructurar las
recomendaciones. Entendemos que la investigación científica y tecnológica,
y las actividades de innovación, solo contribuyen a la salud y el bienestar si
pueden influir positivamente sobre factores genéticos, psicosociales, financieros,
culturales y ambientales.
El enfoque propone, en su núcleo, repensar cómo es la estructura del sistema
de salud. Proponemos un modelo “salutogénico” —o enfocado en lo que causa
salud—, centrado en las personas. Este modelo incluye la creación de redes de
salud y la producción de conocimiento en salud y bienestar, y acciones que
Período 2020-2022
Propuestas específicas
a. Desarrollar un programa nacional —para los próximos 15 años— para
abordar los determinantes de la salud y el bienestar, el cual debe incluir:
Metas
— Alcanzar cobertura del 100 % en agua potable y saneamiento básico.
— Cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con los
determinantes de la salud y el bienestar, más allá del tercer objetivo.
— Cumplir con las metas en salud de Colombia Equitativa formulada
por la Misión de Sabios a partir de los reportes de equidad en salud
(Ministerio de Salud y Protección Social (2015).
— Lograr que menos del 1 % de los niños colombianos presenten bajo
peso, tanto en las zonas rurales como en las urbanas.
— Disminuir la mortalidad perinatal y neonatal tardía a menos de 12
muertes por 1000 nacidos vivos en todos los departamentos de Colombia.
Período 2030-2045
Metas
— Estar en el decil superior mundial de todos los indicadores seleccionados
en el programa nacional, considerando la autopercepción de la salud
y el bienestar, como los principales.
— Haber reducido la incidencia de las enfermedades más prevalentes a
través de los procesos de ctei.
— Incrementar —en cinco años— los años de vida libre de enfermedad
tanto en hombres como en mujeres.
— Sostener los resultados alcanzados en los años anteriores.
— Proponer un modelo nacional enfocado en la optimización de la salud
y el bienestar, más allá de la lucha contra las enfermedades y la muerte,
o la satisfacción de necesidades materiales, respectivamente.
Período 2020-2022
Propuestas específicas
a. Acordar con todas las eps e ips en Colombia un modelo basado en la
confianza para la prestación de servicios de salud y bienestar, en red
para todos los colombianos, utilizando como mínimo los resultados
obtenidos por Compensar eps. Como meta se debe garantizar que al
menos el 90 % de las poblaciones a las que sirven experimenten niveles
positivos —autopercibidos— de salud y bienestar.
b. Seleccionar un conjunto común de indicadores reconocidos interna-
cionalmente, que sean utilizados por las eps, para evaluar la capacidad
de cada red integrada de atención médica en Colombia.
c. Formular los objetivos a alcanzar en el mediano (2022-2030) y largo
plazo (2030-2045), con el respaldo formal de las principales instituciones
gubernamentales, corporativas, académicas y de la sociedad civil dentro
del sector de la salud y el bienestar.
d. Desarrollar y aprobar un código para promover y recompensar la transpa-
rencia y el comportamiento ético elaborado entre todas las organizaciones
Metas
— El Ministerio de Salud y Protección Social debe haber incrementado su
inversión en promoción de la salud y el bienestar, y de la prevención
de enfermedades, pasando del 13 % (Arciniegas et al., 2018), al 26 %
en 2023.
Período 2030-2045
Meta
— Reconocimiento del modelo basado en la confianza para la provisión de
servicios de salud y bienestar en red , como el estándar para el mundo.
Metas
— Duplicar el número de medicamentos esenciales y la diversidad de
tecnologías (no necesariamente número de unidades) producidas en el
país para abordar las necesidades de salud y bienestar de la población.
— Tener en el mercado al menos diez nuevos medicamentos, fitoterapéu-
ticos o productos biológicos, desarrollados en el país que atiendan las
principales enfermedades de salud pública de Colombia
— Posicionar al actual Instituto de Evaluación de Tecnología de la Salud
(iets) como un referente internacional en la evaluación de tecnolo-
gías para el sector salud. Su fortalecimiento requiere la provisión de
recursos económicos, la capacitación del personal y el fortalecimiento
de su capacidad tecnológica.
6) Ética y transparencia.
Responsable: Minciencias.
Aliados: Ministerio de Salud y Protección Social, Invima, Ministerio de
Educación, Congreso de la República, universidades y escuelas de salud,
Empresas Promotoras de Salud, Instituciones Prestadoras de Servicios
de Salud.
Referencias
Anaya, J. M., Duarte-Rey, C., Sarmiento-Monroy, J. C., Bardey, D., Castiblanco, J.
y Rojas-Villarraga, A. (2016). Personalized medicine. Closing the gap between
knowledge and clinical practice. Autoimmunity Reviews, 15 (8), 833–842.
Arciniegas, J. A., Gómez, D. E., Suárez, L. Y. y Cruz, M. F. (2018). Estructura del gasto
en Salud Pública en Colombia. Papeles en Salud, 17. Bogotá, D. C.: Ministerio de
Salud.
Ascofame. (2019). Recomendaciones para el futuro de la educación médica en
Colombia. Bogotá, 2019.
Barbosa, D., Villamizar, H., Hernández, G., Restrepo, J. y Acosta, C., Hernández,
G., Castillo, L., Ramírez, J. y Parra, A., Sánchez, A. y Muñoz, D. (2017).
Recomendaciones para la transformación de la educación médica en colombia.
DNP y Banco Mundial. (2015). Análisis funcional y de gobernanza del gasto público en
Ciencia, Tecnología e Innovación en Colombia, pp. 266. Disponible en: https://
colaboracion.dnp.gov.co/CDT/Sinergia/Documentos/141_InformeFinal.pdf.
Huber, M., Knottnerus, A., Green, L., van der Horst, H., Jadad, A, R., Kromhout, D. …
Smid, H. (2011) How should we define health? BMJ 2011;343:d4163. doi: https://
doi.org/10.1136/bmj.d4163
Jadad, A. R. (2017). Enabling every person in the world to enjoy positive health, from
birth to death: The role of the Maimonides Project. En Jadad, A. R., Arango, A.,
Sepulveda, J. H. D., Espinal, S., Rodríguez D. G. y Wind, K. S. (Eds.) Unleashing a
pandemic of health from the workplace: Believing is seeing (pp. 1-28). Toronto:
Beati Incorporated.
Jadad, A. R. y O’Grady, L. (2008) How should health be defined? BMJ 2008;337:a2900,
2008. doi: https://doi.org/10.1136/bmj.a2900
Jadad, A. R., Arango, A., Sepúlveda, J. D., Espinal, S., Rodríguez D. y Wind, K. (Eds.).
(2017). Desatando una pandemia de salud desde el sitio de trabajo: hay que creer
para ver. Toronto: Beati Incorporated.
4.2.1 Equidad
Hace treinta años el desarrollo humano se definió como un “proceso de
ampliación de las opciones de las personas [en donde] las más importantes
son llevar una vida larga y saludable, educarse y disfrutar de un nivel de vida
digno. Las opciones adicionales [a estas] incluyen libertad política, derechos
humanos garantizados y autoestima”. Las mediciones avanzadas de desarrollo
humano son conscientes de que “los promedios […] ocultan amplias dispa-
ridades en la población general. Diferentes grupos sociales tienen diferentes
expectativas de vida; a menudo hay amplias disparidades en la alfabetización
masculina y femenina, y el ingreso se distribuye de manera desigual”. En la
era de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ods), todavía tiene sentido
4.4 Conclusiones
Las propuestas del foco de Ciencias Sociales y Desarrollo Humano con Equidad
permitirán impulsar el desarrollo humano del país mediante la promoción
de capacidades individuales y colectivas, en el sentido propuesto por Amartya
Sen y Martha Nussbaum. Este objetivo exige, en primer lugar, construir una
Colombia más equitativa, donde sus habitantes gocen de mayor libertad al
poder disponer de más oportunidades y donde logren un mayor bienestar
gracias a una mayor capacidad de aprovechar dichas oportunidades.
Referencias
Acemoglu, D. y Autor, D. (2012). What Does Human Capital Do? A Review of Goldin
and Katz’s The Race between Education and Technology (January 11, 2012). MIT
Department of Economics Working Paper No. 12-02. Disponible en https://cutt.
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Aghion, P. y Howitt, M. (1992). A Model of Growth Through Creative Destruction.
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Sociología, 65, 4, 815-838. Recuperado de https://cutt.ly/zf3mE3m
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departamento del Tolima. Rutas de Formación, 3, 2, 15-21. doi: 10.24236/24631388
Arjona, A. (2010). One national war, multiple local orders: An inquiry into the unit
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(Eds), Law in peace negotiations. Oslo: Torkel Opsahl Academic EPublisher.
Arjona, A. (2016). Rebelocracy: Social Order in the Colombian Civil War. Cambridge:
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Atkinson, A. (2015). Inequality: what can be done? Cambridge, MA: Harvard University
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Barro, R. (1991). Economic Growth in a Cross Section of Countries. The Quarterly
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Barro, R. y Sala-i-Martin, X. (1992). Convergence. Journal of Political
Economy 100, 2, 223-251. doi:10.1086/261816.
Bateson, R. (2012). Crime victimization and political participation. American Political
Science Review, 106, 3, 570-587.
Resumen ejecutivo
Tecnologías Cómo la
candidatas Análisis incertidumbre
de riesgo de afecta el
portafolio desempeño
del portafolio
Resultados de la PIR
Índices de Métricas
estandarizadas
desempeño del para comparar
portafolio portafolios
Para definir los resultados finales de la PIR, se deben considerar tanto los resultados del modelo como otros factores,
por ejemplo, los aportes de las partes interesadas —internas y externas— y la estrategia empresarial, entre otras.
corrupción
precios de la electricidad
Millones Ton CO 2
90
1500
PI
60
1000
30
500
0 0
2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050 2015 2020 2025
150
Transporte
Industria
120 Residencial
Comercial
strucción, minería Agricultura, construcción, minería
Millones Ton CO 2
90
60
30
Figura 5.3 Escenario
base cop 21 por
0
sector de consumo.
025 2030 2035 2040 2045 2050 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050 Fuente: UPME (2019)
5.4 Recomendaciones
5.4.1 Creación de un Centro de Energía
Se propone organizar un Centro de Energía que apoye la misión Colombia
productiva y sostenible. El Centro será independiente de las universidades
—que deben ser aliadas— y de las empresas, cofinanciado en sus primeros cinco
años en un 70 % por el Estado y en un 30 % por la industria —con reversión
de estos porcentajes a partir del año seis—, regido por el derecho privado.
Algunas tecnologías de punta se desarrollarán rápidamente en otros
países y su adopción dependerá ante todo de regulaciones favorables y reduc-
ción de trámites, antes que de la actividad de i+d. El Centro se enfocará en
asuntos donde hay oportunidades y ventajas sin explorar y colaborará con
otros centros que ya tienen agendas maduras en asuntos complementarios,
como en el caso de los hidrocarburos.
El Centro podrá tener una estructura descentralizada en varias ciudades
del país. El Centro requeriría una inversión inicial de usd 20 millones en
laboratorios de prototipo y facilidades computacionales avanzadas, y tendría
unos gastos operaciones anuales entre usd 5 y 7 millones, para cubrir el salario
de 15 investigadores de alto nivel de tiempo completo, sus asistentes y las
actividades de i+d. Con este presupuesto, se tendrían prototipos avanzados
en cuatro años, que apoyaría el despliegue de las industrias propuestas y los
laboratorios se convertirían en referente técnico a nivel latinoamericano.
Los proyectos propuestos buscan diversificar la economía y apoyar el
aumento de la productividad total, crear hábitats sostenibles y más limpios,
y mejorar las capacidades de anticipar y probar alternativas de negocios y
regulatorias para la transición energética: (1) apoyo a la creación de una
H2
Fertilizantes
Energía a base de
nuclear amoníaco
Generación
de hidrógeno
Energías Infraestructura
fósiles de red eléctrica Refinación
de metales
Otros
usos finales
Calentamiento
Infraestructura de gas
2017e
$ 7,6
$ 5,0
$ 1,8 $ 0,3
$ 0/W
1 10 100 1000 10 000 100 000 10 00 000 1975 1980 1990 2000 2010 2017
Capacidad acumulada (MW)
GENERACIÓN
ELECTRODOMÉSTICOS
A GAS EÓLICA
ALMACENAMIENTO
AUTOMATIZACIÓN
Y DATOS DE
LOS HOGARES
PRECIO
OPERADOR
DEL SISTEMA TRANSMISIÓN DISTRIBUCIÓN
CONSUMIDORES
GENERACIÓN
DENTRO DE LA RED
DE DISTRIBUCIÓN
OTROS SISTEMAS AGREGADORES
ENERGÉTICOS
CARROS
ELÉCTRICOS
La figura 5.9 presenta algunos de los nuevos tipos de negocios que pueden
surgir (del centro a la derecha de la gráfica).
El tamaño relativamente pequeño de los der les da agilidad al combi-
nar flexibilidad y velocidad (Cusumano, 2010). Los modelos de negocio en
der son intensivos en conocimiento y de tipo emprendedor. La disrupción
de las der llegará por el progreso técnico y las oportunidades de arbitraje
en tiempo real que vienen del carácter incompleto de los sistemas clásicos
{g → t → d}. Puesto que la innovación corporativa en Colombia es modesta
y está centrada en aumentar el margen ebitda de los activos existentes, la
alternativa más viable de las empresas establecidas para incursionar en su
transición consistirá en asociarse y compartir ganancias con empresas de
los ecosistemas de capital de riesgo.
Muchas de las transacciones descentralizadas se pueden realizar con
ayuda de la tecnología blockchain (sin necesidad de operador de red de
distribución) que se ha ensayado en microrredes, por ejemplo, por parte de
SolarCoin, gridsingularity y Ethereum, tres firmas de capital de riesgo.
Entre los principales problemas que se han analizado en este tema se pueden
mencionar:
1. La falta de apoyo del gobierno central a Colciencias, que no le ha permitido
desempeñar plenamente el papel de ente rector del Sistema Nacional de
Ciencia y Tecnología que le asignó la ley 1286 de 2009.
220
(alec) liderado por el Instituto Caro y Cuervo entre 1950 y 1982, y la fusión,
en 1999, del Instituto Colombiano de Antropología y el Instituto Colombiano
de Cultura Hispánica para dar lugar al icanh. En casos como estos se evidencia
que Colombia cuenta con instituciones y comunidades de expertos en los que
la ciencia dialoga permanentemente con las artes y otras manifestaciones
culturales. Sin embargo, a pesar de que en estas entidades se produce cono-
cimiento científico relevante, su trabajo ha sido enmarcado principalmente
dentro del sector cultural y su relación con el snctei ha sido marginal.
En efecto, aunque tanto el sector cultural como el ecosistema científico son
ambientes fundamentales de la transición a una economía del conocimiento,
su desarrollo parece haber seguido líneas paralelas, con hitos muy importantes
en los últimos treinta años, pero con muy pocos puntos de contacto entre sí.
Esto comenzó a cambiar en 2013, año en el que se constituyó la Mesa Nacional
de Artes, Arquitectura y Diseño, con el objetivo inicial de proponer criterios
para la valoración de la producción intelectual en estas áreas, en el marco
del modelo de medición de grupos e investigadores de Colciencias. Como
parte de este proceso se avanzó en una conceptualización de las relaciones
entre creación artística e investigación, se adoptaron criterios para definir en
qué casos hay conocimiento nuevo en la actividad creativa y se estableció la
categoría de investigación+creación (i+c) como una forma de producción de
conocimiento enmarcada dentro del snctei (Bonilla et al., 2018).
Una gran parte de esta apuesta consiste en destacar que el conocimiento
producido en la creación en áreas académicas como las artes, la arquitectura,
el diseño y otras similares, constituye un valor agregado para la generación
de contenidos transferibles a las industrias creativas y culturales. Pero en este
punto es necesario señalar que la producción cultural que nutre estas industrias
no está limitada de ninguna manera a la creación en espacios académicos,
y mucho menos en universidades. Por el contrario, la diversidad cultural del
país –que es la fuente de su fortaleza comparativa en las industrias creativas
y culturales- se hace evidente en múltiples prácticas, saberes y formas de
relación con el mundo que, si bien constituyen formas de conocimiento con
potencial de aportar al desarrollo del país, trascienden el alcance del Sistema
Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
222
pequeños productores culturales. Esto amenaza con abrir una brecha entre los
procesos de generación de contenidos locales —que son los que pueden hacer
competitiva a la industria— y su articulación con procesos de generación de
valor económico.
En este marco, consideramos fundamental entender la generación de
contenidos culturales como una forma de producción de conocimiento espe-
cializado que cumple dos funciones: por un lado, potencia las posibilidades
de expresión de las identidades culturales del país, generando sentidos de
pertenencia y aumentando nuestro acervo patrimonial. Por otro lado, abre
posibilidades para el mejoramiento de la calidad de vida a través del apro-
vechamiento económico de la producción cultural. Las recomendaciones
y propuestas desarrolladas a continuación apuntan a que Colombia pueda
encontrar en las industrias creativas y culturales un motor de desarrollo que
articule estas dos funciones de manera equilibrada y sostenible durante los
próximos treinta años.
224
17. Artículo 4.2 de la parte de la población colombiana. Esto implica garantizar que las diferentes
Convención sobre
la Protección y manifestaciones culturales del país tengan una presencia real en todo el
la Promoción de territorio, de manera que sean visibles, cercanas y familiares para todos los
la Diversidad de colombianos. En contrapartida, es importante tener en cuenta que algunas
las Expresiones
Culturales. Disponible dinámicas económicas de las industrias creativas y culturales pueden producir
en: https://es.unesco. efectos de homogenización, especialmente en casos en que existen jugadores
org/creativity/ dominantes que concentran la circulación de contenidos, privilegiando a su
contenido-cultural.
vez unos determinados formatos, técnicas y formas de decir, a riesgo de la
18. La tensión entre
diferentes criterios
invisibilización de otros. De esta manera, se hace imperativo el fomento al
de calidad puede intercambio interregional de los contenidos culturales que se producen en
producir efectos como cada lugar del país. Esto es de vital importancia para la formación de una
homogenización de
formatos y narrativas,
ciudadanía multicultural que pueda hacer realidad el país plasmado en la
constreñimiento de Constitución Política.
la libertad creativa, De acuerdo con lo anterior, la política pública en torno a las industrias
marginación del
mercado y otras. creativas y culturales debe tener como prioridad el fomento de la diversidad
Para gestionar cultural —más que su conservación—, e incluir mecanismos que garanticen
estas tensiones es la generación de diversos contenidos y manifestaciones culturales, y su
necesario asumir que:
1) toda la cadena libre flujo a través de diferentes espacios geográficos, sociales, educativos y
de valor participa económicos, tanto dentro como fuera de la dinámica industrial.
de la generación Para la Unesco un contenido cultural es “el sentido simbólico, la
del contenido (en
última instancia toda dimensión artística y los valores culturales que emanan de las identidades
creación es colectiva), culturales o las expresa”17. Desde el Estado se deben fomentar aquellos
y 2) la calidad
resultante no es una
contenidos que aumenten la diversidad cultural, y aquellos que tengan
sumatoria simple de potencial de impactar la producción cultural, tanto desde el valor simbólico,
los diferentes criterios, como desde el valor económico. Igualmente, se deben fomentar contenidos
pero sí es una apuesta
negociada entre
de calidad. Para ello, se debe tener en cuenta que en diferentes eslabones de
diferentes actores la cadena de valor se privilegian diferentes criterios de calidad. Los creadores
dentro de un entorno tienden a darle más peso a valores estético-expresivos; los productores a la
cultural y económico
específico, en la que
calidad técnica de acuerdo a los estándares de su campo; los intermediarios
todos los roles pueden mercantiles al potencial de retorno económico; y los intermediarios
y deben agregar valor. de consumo, a las preferencias del público18. Y en última instancia, la
valoración de la calidad se expresa en la apropiación, la circulación del
sentido y los usos sociales de una determinada producción cultural.
6.1.2 Propuestas
1. El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación debe profundizar la inte-
gración de la i+c a las actividades de investigación, desarrollo e innovación,
y darle un lugar protagónico, tanto en los mecanismos de fomento, como
en las actividades de divulgación y apropiación social del conocimiento.
2. El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación debe desarrollar meca-
nismos específicamente dirigidos al fomento del diálogo de saberes entre
diferentes formas de producción de conocimiento y entre diferentes actores,
dentro y fuera del snctei.
226
3. En el ámbito de la Investigación Orientada por Misiones, es fundamental
que se priorice el conocimiento y uso sostenible del patrimonio cultural
colombiano, a través de actividades de investigación, desarrollo, innovación y
creación, desde todas las áreas del conocimiento, con miras al fortalecimiento
de la diversidad cultural del país, su apropiación y su aprovechamiento
para las industrias creativas y culturales. Para esto se han formulado líneas
específicas dentro de la misión “Colombia diversa, bioeconomía y economía
creativa”.
3. El Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación debe liderar la articulación
con todas las entidades del Estado que promuevan la producción de
conocimiento en el país, incluyendo especialmente una estrecha relación
de cooperación y armonización de políticas con los ministerios de Cultura,
Educación y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. Igualmente
debe liderar procesos que propicien la apropiación del conocimiento en
todas sus formas, haciendo especial énfasis en la investigación+creación,
en los ámbitos científico, artístico, cultural y educativo del país.
228
19. Ello implica que esté
estructurada en los pei e 6.2.1 Propuestas
inserta en la estructura
curricular con intensidad 1. Deben garantizarse las condiciones para que la educación artística, sea
horaria definida desde
preescolar hasta la
implementada como área fundamental del currículo y se haga efectiva
secundaria. su obligatoriedad desde la primera infancia y a través de todos los niveles
20. Con esto no se y modalidades de la formación básica y media19. Esta debe estar basada
quiere decir que se prioritariamente en contenidos procedentes de las diferentes regiones del
trate exclusivamente de
contenidos “folclóricos”
país, especialmente la propia20. Estos y otros aspectos deben enmarcarse
o “tradicionales”, sino de en un Sistema Nacional de Educación y Formación Artística y Cultural
prácticas culturales vivas articulado, participativo, descentralizado y con mecanismos eficaces de
o que tengan un especial
interés patrimonial en las
concertación, a cargo de los ministerio de Educación y Cultura21 que
regiones. conjuntamemte con los ministerios de Ciencia, Tecnología e Innovación
21. Se vienen y del Trabajo, deberán poner en marcha una Política Nacional de Edu-
implementando cación Artística y Cultural que actualice e implemente los lineamientos
trabajos conjuntos desarrollados anteriormente por los ministerios de Educación y Cultura.
entre Mineducación y
Mincultura, que abren 2. Esta política debe contemplar un programa específico para la educación
un nuevo y promisorio
escenario en temas y formación de maestros que tengan a su cargo contenidos relacionados
sensibles, que por su con arte, cultura e industrias culturales y creativas en sus diferentes áreas
complejidad de esta y modalidades. Así mismo, debe contemplar un programa de formación de
articulación (p. e. el
proyecto de Primarias formadores que esté dirigido tanto a programas continuos en formación
artísticas del Quindío, académica, como en desarrollo personal, emocional y pedagógico. Ambos
que demuestra el
papel fundamental
programas deben ser permanentes y deben abordar procesos que permitan el
que desempeñan entrecruzamiento y formación en áreas del conocimiento complementarias
las secretarías y diversas. Ambos programas deben incluir a maestros y formadores que
departamentales de
ambos ramos, y más en
se desempeñen en escenarios de educación formal, informal y no formal.
general, las prometedoras
sinergias que trabajos
3. Desde este marco se debe garantizar que en cada una de las 32 capitales
de este tipo pueden de departamento funcione al menos una institución educativa especiali-
tener en los niveles zada en artes, que forme talentos excepcionales para las diferentes áreas
departamentales,
municipales y locales.
artísticas y ofreciendo una formación intensiva desde el preescolar hasta
la educación media, culminando con título de tecnólogo y articulando y
garantizando su proceso y continuidad con becas en programas universitarios
230
convertirse en un factor que estandarice y lleve a homogenizar procesos que
por su propia naturaleza son diversos y flexibles. En ese sentido, el modelo
metodológico de la construcción de las cualificaciones debe flexibilizarse
y adaptarse a las condiciones particulares de los fenómenos culturales, y
no al revés.
6. La formación profesional en áreas relacionadas con las icc debe promover
desde muy temprano espacios permanentes de trabajo colaborativo entre
diferentes disciplinas, incluyendo la relación con otros roles de la cadena
de valor y con áreas de conocimiento poco afines con el área o ámbito de
profundización. El Ministerio de Educación —y especialmente el Viceminis-
terio de Educación Superior— debe producir lineamientos en este sentido.
7. Es necesario fomentar la descentralización de la formación para las icc.
Se deben generar estímulos para ampliar la oferta formativa en todas las
regiones, cuidando de que no se dirija solamente a los creativos, sino a toda
la cadena de valor de las icc. Mediante esquemas de alianzas público-pri-
vadas, diseñar un programa sostenible de becas y estímulos para pasantías,
residencias, diplomados y programas de posgrado en áreas artísticas y
creativas especializadas, que se articule en los 32 departamentos con los
procesos formativos y productivos para democratizar las oportunidades de
formación en todo el territorio y promover el talento de manera equitativa,
articulando los niveles y modalidades, garantizando un trayecto gradual
y completo, hacia un desarrollo de alto nivel que posicione dignamente
las artes y las prácticas creativas en los procesos de desarrollo social y
productivo del país. En este punto es fundamental facilitar la articulación
del sena con las universidades y otras entidades educativas, de manera que
la oferta académica esté articulada con las necesidades del sector.
8. La i+c debe estar presente a lo largo de todo el proceso formativo, y espe-
cialmente en la educación superior. Se debe ampliar la oferta de formación
de alto nivel (maestrías y doctorados) en áreas relacionadas con las icc,
con énfasis en procesos de i+c.
232
hacia lo regional. También, invertir recursos en convocar y asesorar empresas,
procesos colectivos no formalizados y actores independientes por cada uno
de los sectores de las icc para que se reconozcan y cooperen en estructurar
técnicamente con pluralidad de saberes y lógicas los sistemas productivos de su
sector y encuentren mecanismos de coordinación y concertación que los lleven
a representarse programáticamente como gremio autónomo, que trabaje por
intereses comunes de su campo y negocie con instancias estatales y privadas.
Para tender hacia allá, es primordial fortalecer el sector cultural a través
de procesos de asociación que permitan una mayor capacidad de negociación
e incidencia en política pública. Para ello se deben contemplar estrategias de
comunicación que faciliten el acceso a la información, por parte de organiza-
ciones y asociaciones, en temas de incentivos, marco jurídico, formalización
empresarial y laboral, acceso a financiación entre otros. En esto es funda-
mental el uso de una terminología que entienda las particularidades de las
organizaciones y de sus contextos. También es vital mejorar la apropiación
de tecnologías convergentes, y especialmente de tiyc por parte de las organi-
zaciones culturales y creativas.
Se trata de generar oportunidades equitativas para organizaciones de
diferentes tamaños, alcances y niveles de estructuración y formalización. Con
esto se busca garantizar vasos comunicantes entre la producción cultural de
base, no orientada al provecho económico, y la industria en sus diferentes
niveles, así como brindar oportunidades para la movilidad, escalamiento y
crecimiento de las organizaciones.
Por otro lado, es necesario aumentar la oferta educativa y mejorar la
valoración social, simbólica y económica de cada uno de los roles dentro de
la cadena de valor. Lo anterior implica facilitar entrecruzamientos tempranos
entre diferentes roles, tanto en el ámbito educativo, como en la realización
de proyectos y emprendimientos. Se necesita construir una cultura que en-
tienda a la creación como un proceso necesariamente colaborativo, inter y
transdisciplinar.
La generación de valor puede iniciar en la creación, pero los momentos
clave de la transformación de valor pueden estar en la calidad del proceso
creativo, en la sofisticación de la producción y los mecanismos de distribución
6.3.1 Propuestas
1. El Ministerio de Cultura debe fortalecer su rol como articulador de la red
de casas de la cultura, garantizando un sistema de información que permita
el flujo de contenidos, talento humano y buenas prácticas. En el mismo
sentido, es fundamental desarrollar procesos articulados y sostenibles de
formación de gestores de casas de la cultura. Otras propuestas específicas
en relación con las casas de la cultura se abordan en el apartado sobre
infraestructura y tecnología y en la iniciativa de Viveros Creativos.
2. Se necesita fortalecer el Plan Nacional de Lectura y Escritura a través de la
creación de un sistema nacional que permita la optimización y articulación
de acciones —definición de políticas, fortalecimiento de la circulación,
apropiación y creación de contenidos— relacionadas con el sector, con la
vinculación de los ministerios de Cultura, Educación, Tecnologías de la
Información y las Comunicaciones y Ciencia, Tecnología e Innovación.
3. Es necesario estimular la realización de censos culturales en diferentes
regiones y sectores, como punto de partida para la implementación de
una Política de información y comunicación para las icc, aspecto que se
menciona en el literal 5.3. de este documento. Estos censos serán vitales
para caracterizar los diferentes tipos de organizaciones culturales que
existen en el país, pero su articulación con la política debe servir para
establecer mecanismos estables y autónomos de alimentación continua
de información.
4. Deben implementarse estímulos e incentivos para roles diferentes al del
creativo. Estos pueden ser de tipo fiscal o a través de la priorización en
234
22. El modelo de convocatorias, pero en todo caso deben privilegiar la circulación de con-
triple hélice pone en
juego la combinación tenidos nacionales. Igualmente se pueden ofrecer estímulos a empresas
de la administración privadas que apoyen el fortalecimiento de diferentes roles dentro de la
pública, con el tejido cadena. Así mismo se deben contemplar incentivos para la circulación a
empresarial y el
conocimiento que nivel nacional de talento humano en todos los roles de la cadena de valor.
concentra la academia.
A la hélice cuádruple 5. Debe fortalecerse el impulso a la circulación internacional de agrupacio-
se le suma un nuevo nes, colectivos, autores, editoriales y otros actores de las icc a través de
jugador, que es la
sociedad civil. convocatorias públicas, abiertas y competitivas. Los ganadores de estos
estímulos deben formar parte de circuitos y programas de formación con
impacto en comunidades integradas por colombianos residentes en el
exterior y residentes extranjeros.
236
la conectividad digital de todos los rincones del país. Pero más allá de la
creación de esta infraestructura, es fundamental que todos los agentes del
sector conozcan las posibilidades creativas y de generación de valor que se
abren con el acceso y apropiación de tecnologías convergentes como
big data, IoT, blockchain, entre otras.
Por otro lado, el auge de las grandes plataformas de consumo en línea
(ott) conlleva dos riesgos: en primer lugar, pueden conducir a la
concentración de contenidos, en desmedro de la diversidad cultural. En
segundo lugar, este tipo de servicios pagan impuestos, crean infraestructura
y generan valor principalmente fuera de Colombia, con lo cual una parte
importante de la cadena se pierde para la industria nacional. Si bien es
importante la circulación internacional de contenidos, también es vital que
se tomen medidas para reducir a mediano y largo plazo la dependencia
excesiva de infraestructuras extranjeras para la circulación de contenidos
colombianos.
Para construir la infraestructura que las icc colombianas requerirán en
los próximos 30 años es importante facilitar la transferencia de tecnología
y conocimiento desde el exterior, siempre y cuando apunte a la construcción
de capacidades a nivel local. Para ello es importante monitorear las
necesidades de cada región, con una visión sistémica de país. Esto implica
que las universidades superen el rezago que han mostrado en la comprensión
de la dinámica de estas industrias y propongan modelos innovadores para
su construcción y gestión.
6.4.1 Propuestas
1. Proponemos como proyecto emblemático la creación de un modelo de
relacionamiento que integre características de laboratorios de creación,
incubadoras de emprendimientos y centros con programación abierta al
público, a través de una red nacional de Viveros Creativos (ver apartado
correspondiente a esta iniciativa).
2. Es necesario fortalecer las bibliotecas públicas en todo el país, no solo como
espacios de consulta de soportes físicos y digitales, sino también como
238
Proponemos que el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, en
conjunto con el Ministerio de Cultura, abra líneas de convocatorias espe-
cíficas para este tipo de proyectos de alimentación mutua entre ciencia y
arte, a través de procesos de i+c.
6. Existen en el país muchos inmuebles con declaratoria de patrimonio cuyo
uso es muy restringido por las dificultades para su intervención. Proponemos
que se priorice para estos inmuebles su destinación como espacios para
la circulación de contenidos culturales, a través de un estímulo específico
que puede ser de tipo fiscal o de flexibilidad normativa.
7. Es imprescindible construir, de forma articulada entre entidades públicas
y privadas, una Política de apropiación de tecnologías convergentes por
parte de los actores de las icc. Esta política debe contemplar por lo menos
una oferta formativa masiva –formal e informal- y mecanismos para
facilitar la circulación de expertos —creadores, gestores, intermediarios,
técnicos— por todo el territorio nacional, con un enfoque orientado a la
construcción de capacidades locales.
8. Es necesario ampliar la oferta académica para la apropiación de tecnolo-
gías de punta en formación de alto nivel en áreas creativas —maestrías,
doctorados, educación continua— bien sea a través de programas nuevos,
o de nuevas líneas de formación en programas existentes.
240
26. Aunque sistemas listados de ciiu de inclusión total y parcial en la economía naranja son un
como el simus se
plantean como primer avance, pero las definiciones deben consultar al sector para ir mucho
intermediadores más allá de un criterio meramente operativo. Se requiere un esfuerzo
entre oferta y importante por parte del Estado para garantizar que todos los actores del
demanda, los
usuarios manifiestan sector discutan y conozcan los criterios que definen a las icc y se apropien
que no perciben de ellos, así como de la información específica de apoyos, estímulos,
ningún beneficio incentivos y otros mecanismos de fomento.
por registrar sus
datos, no reciben
información y no 6.5.1 Propuestas
generan contactos
útiles para su
actividad. Esto 1. La Dirección Nacional de Derecho de Autor (dnda) debe seguir siendo una
mismo podría pasar entidad separada de la Superintendencia de Industria y Comercio. Se debe
con la iniciativa
de la Red Naranja, tener cuidado de no generar inconsistencias al abrir paso a interpretacio-
de la dnda, a no nes que obedezcan más a la lógica del copyright que a la de la legislación
ser que se articule colombiana en Derecho de autor.
como parte de una
política que priorice 2. Es fundamental simplificar los procesos, y reducir la carga tributaria para
la comunicación en
doble vía. la formalización de diferentes tipos de organizaciones del sector cultural,
27. Esto incluye,
no de manera coyuntural, sino a través de mecanismos de largo plazo.
por ejemplo, la 3. Es fundamental formular una Política de información y comunicación
implementación
de herramientas para las icc que sirva para: (1) repotenciar y articular sistemas de infor-
de medición y mación existentes y crear otros nuevos donde se necesiten26; (2) establecer
caracterización del
consumo cultural
beneficios claros para los usuarios, como facilitar el flujo de información
que complementen en doble vía o intermediar entre oferta y demanda; (3) comunicar con-
la Encuesta de tenidos pedagógicos a usuarios específicos y obtener retroalimentación
Consumo Cultural del
dane con información
oportuna sobre problemas del sector; (4) lograr una apropiación cabal de
más detallada para las políticas culturales; (5) involucrar diferentes actores de las icc en el
cada sector — levantamiento de información a través de deberes y derechos claros, y (6)
editorial, audiovisual,
música, etc.— realizar análisis con big data y analítica, con el fin de dar a los tomadores
de decisiones información relevante sobre el sector27. Para la formulación
e implementación de esta política se debe hacer una inversión significativa
de tiempo y recursos, y debe adelantarse bajo el liderazgo de los ministerios
Referencias
242
7. Foco de Océanos y Recursos
Hidrobiológicos: estado global y nacional
de los océanos, mares, humedales y
recursos hidrobiológicos marino-costeros,
oceánicos, insulares y continentales-
misiones emblemáticas al 2030
Introducción
244
actual degradación del suelo no tiene precedentes y la pérdida de tierras cul-
tivables es 30 a 35 veces superior al ritmo histórico, teniendo consecuencias
sobre la calidad de los ecosistemas acuáticos y la biodiversidad.
La conservación del medio ambiente debe considerarse como un sistema de
medidas y acciones sociales, socioeconómicas y técnico-productivas dirigidas a la
utilización racional de los recursos naturales, la conservación de los complejos
naturales típicos, escasos o en vías de extinción, por lo que se promueven entre
otras acciones, bien la economía verde, la economía azul, el biocomercio, la
bioprospección y la biotecnología., pero deberá pensarse que: “la mayoría de
las causas de la pérdida de biodiversidad, incluyendo la extinción de especies,
son de carácter económico”.
En Colombia, el estado del conocimiento de los recursos hidrobiológicos
marino-costeros, insulares y continentales ha estado centrado en áreas como la
sistemática, la taxonomía y algo de filogenética, siendo muy pocas las especies
aprovechadas y cuando ocurre, tiene lugar la situación de convertir los recur-
sos hidrobiológicos en pesqueros, mediante el establecimiento de una cuota
global anual, pero en la mayoría de los casos sin llegar a conocer los niveles
de aprovechamiento sostenible.
Teniendo en cuenta la importancia del agua para la vida y para las sociedades
humanas en todos los aspectos de su desarrollo, los recursos que proporciona
su biodiversidad y el estado de deterioro que presenta en todo el mundo y
particularmente en Colombia, tanto en los cuerpos de agua continentales
(ríos, lagos y aguas subterráneas) como marinas (costa, estuarios, mares y
océanos), esta Misión ha considerado importante tener como uno de sus
focos principales de acción a los océanos y a los recursos hidrobiológicos. La
ciencia, la tecnología y la innovación son los pilares en los cuales se puede
estructurar unas políticas de utilización sostenible y conservación del recurso
agua y sus recursos biológicos asociados, en sus diferentes manifestaciones.
A continuación se presenta un resumen del diagnóstico, lineamientos para
diseñar políticas públicas, estrategias, misiones emblemáticas y proyectos
necesarios, para mejorar el desarrollo humano colombiano sostenible y se generen
oportunidades socioeconómicas basadas en conocimiento científico, tecnológico
innovación, para que Colombia evolucione hacia una sociedad del conocimiento.
7.1.1 Objetivos
General
Generar lineamientos para la formulación o modificación de políticas
públicas en ciencia tecnología e innovación, estructurando estrategias
y misiones emblemáticas que permitan el adecuado conocimiento, or-
denación, manejo, control y aprovechamiento sostenible de los recur-
sos naturales —renovables y no renovables acuáticos (océanos, mares,
estuarios, aguas continentales)—, para lograr que el capital natural
genere oportunidades socioeconómicas e investigativas a futuro, que
impulsen el desarrollo sustentable del país en beneficio de las regiones
relacionadas con los recursos acuáticos en general.
Específicos
Compilar la información que permitiera establecer el estado de los
ecosistemas marino-costeros, e insulares, y de sus recursos hidrobio-
lógicos y pesqueros.
1. Establecer el estado de los ecosistemas acuáticos continentales y de sus
recursos hidrobiológicos y pesqueros.
2. Acopiar la información para establecer el estado de salud y deterioro
de los ecosistemas marino-costeros e insulares y continentales y de
sus recursos hidrobiológicos y pesqueros.
3. Identificar las barreras y oportunidades que impiden el desarrollo de
sistemas nacionales y regionales de ciencia tecnología e innovación
integradas y eficaces, aplicadas a la educación, la ciencia y la tecnología
en el área de los mares, los océanos y las áreas continentales.
4. Analizar las políticas, las regulaciones, la gobernanza y la gobernabi-
lidad, el capital humano científico, la infraestructura y la producción
académica en el área de los mares, los océanos y las áreas continentales.
246
5. Proponer misiones emblemáticas que impulsen las acciones nacionales
en materia de mares, océanos y recursos hidrobiológicos, considerando
los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ods), que logren impactar la
educación, la ciencia, la tecnología y la innovación, que se requieren
para que al 2030, se tengan superadas las barreras e implementadas
y las oportunidades identificadas en el tema de las ciencias del mar y
los recursos hidrobiológicos.
7.1.2 Metodología
El trabajo se dividió desde el punto de vista metodológico en dos fases,
siendo la primera la identificación de “Barreras y Oportunidades”, que per-
mitió esbozar las dificultades, retos y las fortalezas y oportunidades asocia-
das al foco, los cuellos de botella regulatorios o de nichos de oportunidad
en Ciencia, Tecnología e Innovación asociados a capacidades diferenciales
de Colombia. Esta fase incluyó la primera reunión de los ocho focos y
sucesivas reuniones, que permitieron el diseño de un documento diagnós-
tico sobre la capacidad ctei en el ámbito del foco; identificación de retos
y oportunidades con tres secciones: (1) retos y oportunidades específicas
del ámbito; (2) retos y oportunidades transversales entre focos; y (3) un
primer listado de ideas propuestas de actuación, tanto específicos para el
foco, como generales para mejorar la ejecución de actividades de ctei en el
contexto nacional, en consonancia a corto plazo con el Plan Nacional de
Desarrollo.
La segunda fase se centró en proponer medidas para afrontar los pro-
blemas identificados durante la fase anterior, para capitalizar las oportuni-
dades singulares de Colombia con una visión de largo plazo enfocadas ha-
cia políticas de Estado, soportado en el análisis de todos los documentos
relativos al estado de los temas propios del foco.
Igualmente, y para tener amplia visión social, cultural, científica y
técnica para completar los diagnósticos y la identificación de “Barreras y
Oportunidades”, se analizaron entre otros aspectos: (1) el desarrollo de los
sistemas nacionales y regionales de innovación integrados y eficaces;
248
1. Los recursos acuáticos y pesqueros en Colombia: marco conceptual, pro-
cedimientos administrativos, políticas de investigación y manejo.
2. Agua, peces, pesca y pesquerías en Colombia.
3. Ecosistemas marino-costeros, estuarinos e insulares y continentales y el
aprovechamiento de sus recursos hidrobiológicos.
4. Fallas y cambios necesarios en la formulación y ejecución de políticas
estatales.
5. Reflexiones sobre el estado actual del tema del foco de Océanos y Recursos
Hidrobiológicos y propuestas de reformas a corto y largo plazo.
6. Gestión costera en Colombia: elementos conceptuales, estado del arte y
necesidades de conocimiento para su aplicación en Colombia.
7 Barreras y oportunidades en ciencia tecnología e innovación en el foco
Océanos y Recursos Hidrobiológicos.
8. Tratados y convenios internacionales para el desarrollo sostenible en áreas
marino-costeras e insulares aprobados por Colombia.
9. Marco regulatorio general aplicable a los recursos acuáticos y pesqueros.
10. Memorias de los foros regionales realizados.
11. Propuestas de misiones emblemáticas.
Banco de la República
(Departamento
Conversatorio sobre Océanos y Recursos
7 de octubre Archipiélago de San 21
Hidrobiológicos.
Andrés, Providencia y
Santa Catalina)
250
marco de los objetivos del foco, se logró construir una visión de largo plazo
al 2035, para un manejo integrado y sostenible de los ecosistemas acuáticos
marinos y continentales. La Visión reconoce que para alcanzar el manejo
sostenible de los ecosistemas marinos y continentales y de los recursos hí-
dricos en las próximas décadas, debe haber una nueva actitud de las insti-
tuciones para implementar un modelo de gobernanza del agua basada en
el conocimiento científico y valorando el diálogo de saberes para fortalecer
los servicios ecosistémicos y la biodiversidad desde una gestión sostenible
basada en el conocimiento y la valoración de los recursos hidrobiológicos.
252
de Biodiversidad Biológica (1994), la Conferencia de Jakarta (1998), las
metas del Milenio (2000-2015), las metas aichi (2011-2020), y a partir
del 2021, las obligaciones que surjan de la “Década de los Océanos” o las
directrices de la Convención Ramsar, para la protección de los humedales. Es
importante anotar que, quiérase o no reconocer, todos estos compromisos
están inalcanzados.
Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (2015-2030) y sus 169 me-
tas, demuestran la magnitud de esta ambiciosa agenda universal, consig-
nándose que los océanos del mundo, su temperatura, su química, sus co-
rrientes y sobre todo la vida, mueven sistemas que hacen que la Tierra sea
habitable para la humanidad. Las precipitaciones, el agua potable, el clima,
el tiempo, las costas, gran parte de nuestros alimentos e incluso el oxígeno
del aire que se respira provienen, en última instancia, del mar y todos son
regulados por las dinámicas oceánicas y costeras.
Históricamente los océanos y los mares han sido cauces vitales del
comercio y el transporte. Cubren las tres cuartas partes de la superficie te-
rrestre, contienen el 97 % ciento del agua del planeta y representan el 99 %
de la superficie habitable del planeta en volumen (D´Odorico et al., 2019).
Absorben alrededor del 30 % —2000 millones— del dióxido de carbono pro-
ducido por los humanos, amortiguando los impactos del calentamiento
global (Doney, 2010). A pesar de ello, solo se conocen en un 10 %.
Más de 3000 millones de personas dependen para su sustento de la
biodiversidad marino-costera y oceánica, donde se tiene identificadas cerca
de 200 000 especies. A nivel mundial, el valor de mercado de los recursos
marino-costeros y oceánicos y su industria se estima en usd 3 billones por
año —alrededor del 5 % del pib mundial—, siendo la mayor fuente de
proteínas del planeta y empleando directa o indirectamente más de 200
millones de personas (Naciones Unidas, 2015). Como referencia, con los
subsidios otorgados a la pesca —la biomasa más aprovechada en los
océanos—, se está contribuyendo al rápido agotamiento de muchas especies,
impidiendo los esfuerzos para salvar y restaurar la pesca mundial y los
empleos asociados a esta, causando que la pesca oceánica genere usd 50 mil
millones menos por año de lo que podría. Además, desde la Revolución
254
del 35 % en áreas de humedales naturales tanto marino-costeros como
continentales, que varía del 12 % (Oceanía) al 59 % (América Latina). La
tasa media anual de pérdida de humedales naturales estimada por el índice
wet es de 0,78 % al año, más de tres veces superior a la tasa media anual de
pérdida de bosques naturales (0,24 % al año) entre 1990 y 2015 (fao, 2016).
Por el contrario, los humedales artificiales han aumentado desde los años
setenta —y antes—, a veces a partir de la conversión de humedales naturales.
Los ecosistemas de agua dulce albergan más de 100 000 especies
conocidas de peces, moluscos, reptiles, insectos, plantas y mamíferos, a
pesar de cubrir menos del 1 % de la superficie de la Tierra. Están altamente
amenazados y afectados por factores como la modificación, fragmentación
y destrucción de hábitats, especies invasoras, pesca excesiva, contaminación
por aguas residuales no tratadas, residuos industriales, residuos sólidos
descargados a los ríos (4 billones de t.año-1) la escorrentía agrícola, la
erosión y los cambios en los sedimentos, proliferación de enfermedades y el
cambio climático, por lo que la tendencia en cuanto a calidad es negativa.
De ahí que la combinación de estas amenazas haya provocado la disminución
catastrófica de la biodiversidad de agua dulce —más del 30 % de las especies—.
Por ejemplo, en el siglo xx, los peces de agua dulce vivieron la mayor tasa de
extinción a escala mundial entre los vertebrados (Ramsar, 2018).
Desde la década de 1990, la contaminación del agua ha empeorado en
casi todos los ríos de América Latina, África y Asia, y se prevé que el deterioro
se agrave. Para 2050, es probable que un tercio de la población mundial esté
expuesta a aguas con exceso de nitrógeno y fósforo, lo que dará lugar a un
rápido crecimiento y descomposición de las algas provocando la muerte de
muchas especies. La contaminación por patógenos graves, afecta a un tercio
de los ríos de América Latina, África y Asia; en particular, las bacterias
coliformes fecales han aumentado en las últimas dos décadas, al igual que
la salinidad, incluso en las aguas subterráneas, dañando la agricultura. De
ahí que en la mitad de los países de la ocde incluida Colombia, el agua de
las zonas agrícolas contengan pesticidas por encima de los límites
recomendados alterando los servicios ecosistémicos de humedales que
superan con creces los de los ecosistemas terrestres (Ramsar, 2018, 5).
256
de analizar la abundancia de este recurso se estudió la calidad y la dis-
ponibilidad por parte de la población, el país descendió hasta el puesto
24, es decir, cayó 18 lugares.
El agua, aunque es abundante, no llega por igual a todos sus po-
bladores; sus ríos, aunque se extienden como telarañas por el territorio,
están siendo contaminados y con el cambio climático, los patrones de
precipitación cada vez son más impredecibles y extremos. De hecho, el
Informe Nacional del Agua (Ideam, 2014), muestra que en las cuencas
Magdalena-Cauca y Caribe, donde vive 80 % de la población y se produce
80 % del pib nacional, solo está 21 % de la oferta hídrica superficial.
Esta cifra que no solo demuestra que uno de los mayores retos que tiene
el país, no está solo en establecer sistemas de acueductos para evitar la
contaminación, sino en proteger los recursos hídricos que permiten que
los ecosistemas y sus recursos se mantengan y sirvan de manera segura
para el consumo de los pobladores.
Por esto cuando se habla de “seguridad hídrica”, se refiere a tres
factores. El primero es disponibilidad de agua suficiente para el abaste-
cimiento humano, las actividades productivas y la protección de ecosis-
temas; el segundo es la capacidad para manejar este recurso de forma
sostenible y con participación de los sectores que la usan, y tercero,
mantener un nivel de riesgo que sea aceptable para los habitantes, la
economía y el medio ambiente. Si esto no sucede, un recurso que se cree
abundante también se agota, o se vuelve no apto para el consumo como
muchas veces ocurre en Colombia, donde solo hay agua en buenas con-
diciones para el 15 % de la población (Ideam, 2014).
El Ideam (2013), realizó la zonificación del territorio en áreas,
zonas y sub zonas hidrográficas del país a partir de la delimitación,
distribución y jerarquización de las cuencas con el fin de facilitar la
gestión del recurso hídrico y la integración de las variables incorporadas
y analizadas en el Sistema de Información de Recurso Hídrico (sirh) y
en el Sistema de Información Ambiental de Colombia (siac).
De otra parte, en la definición de las medidas y acciones que se
desarrollen sobre los ecosistemas acuáticos, es necesario acoger la
258
Respecto a los cuerpos de agua lénticos, el país posee 831 163,7
ha, de las cuales 397 613,7 ha corresponden a ciénagas, 56 042 ha a
embalses; 123 412 ha a lagunas y 258 273 ha a pantanos. La cuenca
Magdalena-Cauca es la región que mayor extensión de cuerpos lénticos
(48 %), seguida del área geográfica del Amazonas y el Orinoco —cada
una el 22 %— (Ideam, 2010). Pero solo en la cuenca Magdalena-Cauca
se han perdido, desde 1900, el 64 % de los humedales, debido a que
no han sido valorados y ha resultado fácil desecarlos. De otra parte, la
oferta de agua subterránea en el país es del orden de 5848 km3, siendo
la provincia hidrogeológica de los Llanos Orientales la de mayor oferta
—239,06 m3x1010—, seguida de la cordillera Oriental —90,07 m3x1010—
y Caguán Putumayo —66,11 m3x1010— (Ideam, 2010).
En 1985 el Instituto de Hidrología, Meteorología y Adecuación
de Tierras (Himat) elaboró el inventario de cuencas con el objeto de
reconocer las que eran menores a 10 km2 —zonificándose el país en
12 regiones con características homogéneas similares en patrón de
drenaje—, y se estimó el número aproximado de cuencas hidrográficas,
geomorfológicas y fisiográficas representativas. En este ejercicio, la zona
hidrográfica del Caribe resultó con 45 subcuencas y 25 910 cuencas;
el Magdalena-Cauca 103 subcuencas y 64 074 cuencas; el Orinoco 82
subcuencas y 22 867 cuencas; Amazonas 78 subcuencas y 72 428 cuencas
y Pacífico 35 subcuencas y 97 500 cuencas, cifras que arrojan un total
de 343 subcuencas y 742 705 cuencas a nivel nacional (Ideam, 2007).
Con respecto a territorios marítimos y oceánicos, Colombia tiene
1 141 748 km2 en su parte continental (56 %) y 919 376 km2 en su
territorio marítimo (44 %), distribuidos en 540 876 km2 en el mar
Caribe —línea de costa de 3513 km— y 378 500 km2 en el océano
Pacífico —línea de costa de 1556 km— con inmensa riqueza y potenciales
de aprovechamiento. Por esta razón, las aguas jurisdiccionales, la
plataforma continental y los espacios costeros son áreas en las cuales se
realizan diferentes tipos de actividades y procesos como: turismo, pesca,
transporte marítimo, exploración y aprovechamiento minero-energético,
260
especies y, en la actualidad, existen del orden de 230 000 a 250 000
especies descritas, representando el 15 % de la biodiversidad del planeta
(McIntyre, 2010).
Los diagnósticos permiten concluir que la biodiversidad nacional
está cercana a 30 436 especies de plantas, 7432 de invertebrados, más de
300 000 especies de invertebrados, 1644 de hongos y 1647 de líquenes.
Por ello Colombia está entre las 14 naciones consideradas megadiversas,
al contar con cerca del 10 % de las especies conocidas, a pesar de ocupar
el 0,22 % de la superficie terrestre. Están identificados como recursos
hidrobiológicos marinos-costeros e insulares 6150 especies para la
región Caribe, y 4350 para la región Pacífica, a partir de 1664 referencias
bibliográficas. En recursos hidrobiológicos continentales, en el 2014 se
listaron 2875 especies, a partir de 2320 referencias bibliográficas entre
1878 y 2014 (Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, 2012;
Gutiérrez, 2012-2014).
Según los datos del Sistema de Información en Biodiversidad de
Colombia (SiB-Colombia), la biodiversidad nacional está cercana a
57 000 especies registradas, donde ~34 072 son especies de plantas,
~11 269 de invertebrados, ~7589 de vertebrados, ~1758 de hongos
y ~1242 de líquenes.
Colombia posee 1435 especies de peces dulceacuícolas, agrupadas
en 14 órdenes y 47 familias: cerca de 173 de interés comercial y alrededor
de 311 son endémicas. Las especies de peces nacionales representan, a
nivel global, aproximadamente el 5 % de todas las especies marinas y
dulceacuícolas reconocidas; y a nivel latinoamericano el 29 % de los
peces de agua dulce que habitan desde el límite sur de México hasta
Chile y Argentina (Maldonado-Ocampo, Vari y Usma, 2008).
262
que crezca constantemente el conocimiento sobre cómo funcionan
los ecosistemas y cómo responden a las fuerzas antropogénicas desde
un enfoque interdisciplinario que permita la toma de decisiones.
El análisis bibliográfico de la información científica sobre la gestión
costera en el país muestra que la mayoría está concentrada en estudios
de caracterización (25 %) y función (25 %) de ecosistemas, y tan solo
un 2 % sobre estrategias de rehabilitación y restauración ecosistémica.
Esto se considera una debilidad, teniendo en cuenta que las estrategias
de manejo integrado requieren de estudios interdisciplinarios aplicados
a la recuperación ecosistémica. Tampoco se cuenta con un sistema
nacional de información para la gestión y manejo costero en el país que
permita la integración de los distintos subsistemas de información, y
que sirva de apoyo para la gestión de estos ecosistemas .
264
especialmente en las cuencas de los ríos Amazonas, Atrato, Cauca,
Grande de La Magdalena, Orinoco, San Jorge, Sinú y vertiente del
Pacífico, donde se capturan peces tanto para su consumo como alimento
como para el mercado ornamental. Tanto las flotas industriales como
las artesanales operan en las costas, mientras que la pesca en aguas
interiores es esencialmente artesanal, aunque no así su comercialización,
que está altamente intermediada. La producción acuícola está
dominada en gran parte por la piscicultura de agua dulce continental.
Aunque el sector pesquero hace una pequeña contribución al pib
—0,6 % en 2018—, genera empleo, ingresos y alimento en las zonas ru-
rales donde las oportunidades económicas son escasas. Estas incluyen
las regiones de origen de comunidades indígenas y población desplazada
por el conflictos interno que Colombia ha conocido desde la década de
1940. Se evidencia que hay una ausencia crítica de datos para entender
la contribución de los diferentes segmentos del sector al empleo, la ge-
neración de valor, la reducción de la pobreza y la seguridad alimentaria.
En el Caribe, las pesquerías han tenido varias etapas de desarrollo:
una entre 1975 y1995, con el registro de grandes variaciones; otra
entre 1992 y 2003 de altas producciones, y una de decadencia hasta la
fecha. Su aporte a la pesca no supera el 18 % de las pesquerías del país.
La asignación de cuotas de pesca presentó el mínimo valor en 1998
con 1497 toneladas, correspondiendo al 0,48 % del total de las cuotas
otorgadas en el periodo 1998-2014 para esta región (fao y Ministerio
de Agricultura y Desarrollo Rural, 2015). Comparando la asignación
de cuotas de pesca para el periodo 2003-2006 con respecto al periodo
2000-2002, se evidencia descenso para la región cercano al 18 %.
A partir del 2013 se observa incremento del 130 %, pasando de 3074
toneladas en el 2012 a 7074 en el 2013 (Figura 7.1). La situación de
los recursos pesqueros a través de los diversos estudios demuestra que
están amenazados, lo cual es más crítico si se tiene en cuenta que el mar
Caribe no es un sistema altamente productivo.
El Pacífico, por su parte, es el sector pesquero más productivo,
pero a su vez el territorio más pobre y menos desarrollado. Su potencial
100 000
80 000
Figura 7.1. Cuotas
de pesca vs.
desembarcos
60 000 de productos
pesqueros
en el Caribe
40 000 colombiano para
el período 1998-
2013 (Verde claro:
cuota de pesca.
20 000
Verde oscuro:
desembarcos).
Fuente: fao y
0 Ministerio de
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 Agricultura y
Desarrollo Rural
Cuotas de pesca (ton) Desembarcos (ton) (2015).
266
Cuotas
Figura 7.2. 0; [Re 21’]0
de pesca vs.
desembarcos
de productos
pesqueros 0; [Re 30’]0
en el Pacífico
colombiano
para el período
1998-2013 0; [Re 7]0
(Verde claro:
cuota de pesca.
Verde oscuro:
desembarcos).
Fuente: fao y 0; [Re14]0
Ministerio de
Agricultura y
Desarrollo Rural
(2015).
0; [Re21]0
0; [Re30]0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013
Para los años 2011-2012 la cuota global de pesca osciló entre 40 550
y 37 795 toneladas, presentando un descenso del 45,3 % con respecto al
periodo 2007-2010 (fao/Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural,
2015). Las capturas han variado desde un mínimo de 9136 toneladas en
1983, a un máximo de 121 192 toneladas en 1997; aunque los registros
de desembarco para el 2017 fueron de 138 106,1 toneladas, se conoce
que el 81 % de las poblaciones ícticas objeto de aprovechamiento en el
Pacífico están por encima del límite de rendimiento máximo sostenible
(rms). Por ello, la ocde (2014, 13), consignó en un documento de
evaluación avalado por Colombia que:
268
Figura 7.3. 90 000
Desembarcos (ton)
pesqueros 60 000
—observados y 50 000
estimados— en 40 000
la cuenca del
30 000
río Grande de la
Magdalena. 20 000
Fuente: reporte de la 10 000
Autoridad Pesquera
Nacional (Informes 0
anuales 1995-2015) y
1974
1975
1976
1977
1978
1979
1980
1981
1982
1983
1984
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
Barreto (2017).
Año
270
Figura 7.4. especies con que se cuenta información están plenamente explotadas;
Distribución es decir, capturadas en la vecindad del rendimiento máximo sostenible
anual de la
pesca de (Figura 7.4).
captura en La acuicultura nacional, al igual que a nivel global, se ha conver-
ambientes
marinos y 140 000
continentales
de Colombia. Marina
120 000
Fuente: reporte de la Continental
Autoridad Pesquera
Nacional (Informes Desembarcos (ton) 100 000
anuales 1995-2015).
80 000
60 000
40 000
20 000
0
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
Año
272
Cuota
Figura 7.5. 35 000 000
asignada vs.
exportaciones 30 000 000
de unidades
de peces
ornamentales 25 000 000
para el periodo
2003-2013. 20 000 000
Fuente: FAO y
Ministerio de
Agricultura y 15 000 000
Desarrollo Rural
(2015). Barra azul:
cuota; Barra roja: 10 000 000
exportación.
5 000 000
5 000 000
2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013
274
no sostenible, la perturbación de los regímenes de los flujos y el
cambio climático. Sin embargo, los servicios ecosistémicos de los
humedales, que van desde la seguridad alimentaria hasta la miti-
gación del cambio climático, son enormes y superan con creces a
los de los ecosistemas terrestres.
276
Tabla 7.2. Porcentaje
Porcentaje de afectación sobre grupos funcionale s
de afectación
cartilaginosos
sobre los grupos
Peces óseos
Crustáceos
Mamíferos
Manglares
ACTIVIDADES
Moluscos
Reptiles
marinos
Corales
funcionales a
Pastos
Peces
partir de las ECONÓMICAS
actividades
económicas:
Fuente: Modificado de
Invemar (2013). Agricultura 46% 5% 37% 1% 7% 2% 2%
Actividad
3% 1% 1% 92% 3%
minera
Poblaciones
humanas
y patrones de 43% 5% 26% 2% 4% 17% 3%
asentamientos
humanos
Puertos y
transporte 35% 46% 5% 2% 12%
marítimo
Turismo y
17% 78% 5%
recreación
Pesca y
10% 7% 26% 5% 20% 17% 2% 13%
acuicultura
278
aguas, disminución del oxígeno disuelto (od), cambios drásticos en la aci-
dez, malos olores, crecimiento incontrolado de plantas acuáticas y toxici-
dad por la presencia de algas cianofíceas tóxicas.
En conclusión, a nivel nacional el 95 % de las aguas residuales
domésticas y agrícolas, y el 85 % de las industriales, se vierten sin ningún
tratamiento a cuerpos de agua. Esto crea una reducción del od degradando
los ecosistemas, la fauna y la flora; aporta virus y bacterias —a través de las
heces humanas— que generan afectación a la salud —como eventos de
cólera en épocas de sequía—; reducción de la productividad biológica;
pérdida de productividad de tierras aledañas por riego contaminado, y
elevados costos en la potabilización del agua. A lo anterior debe sumarse la
contaminación por hidrocarburos y por metales pesados —por ejemplo, en
la Orinoquia, donde Trujillo et al. (2010), reportan hasta 1,30μg/g en el
tejido muscular de peces, superando el límite permisible de la oms para la
salud humana de 0,50μg/g. En la cuenca media del río Bogotá se registra
una carga cercana a los 900 kg/día, siendo los principales metales el cromo
(430 kg) y el zinc (410 kg) (Ideam, 2004). Respecto al zinc en sedimentos,
entre las corrientes más afectadas está el río Risaralda (municipio de La
Virginia) y el río Negro (Puerto Salgar) (mavdt, 2010). Igual ocurre en el
complejo de humedales de la Depresión Momposina y en algunos sectores
mineros del río Cauca, donde se reportan valores de hasta 0,25 mg/kg
(Silva et al., 2010). En esta misma región se presentaron también niveles
elevados de mercurio en peces de amplio consumo humano, con
concentraciones en sus tejidos que varían en el rango de 0,02 a 2,67 mg/g.
En general, son por lo menos 30 las especies que poseen registros de
mercurio en sus tejidos por encima de los límites permisibles, especialmente
localizadas en las cuencas de los ríos Amazonas, Atrato, Bogotá, Cauca,
Grande de La Magdalena y San Jorge (Gómez et al., 1995; Silva et al., 2010).
La minería en Caucasia (Antioquia) generó, en 1998, aportes en mercurio
metálico de 270 kg/día y de 9553 t/día en sedimentos (Pulido, 1985;
Universidad de Antioquia, 1988). Al medio natural la minería vierte al año
205 toneladas de mercurio, según lo estableció el Ideam, lo que hace que
Colombia ocupe el segundo lugar, a nivel mundial, con mayor contaminación
280
periodo de tiempo la evolución de la producción científica colombiana —en
esta área de conocimiento— ha aumentado notablemente (https://www.
scimagojr.com/. En ciencias ambientales, por ejemplo, la publicación en
Journals indexados en Scopus osciló entre 34 artículos en 1996 y 799 en
2018 (https://www.scimagojr.com/).
Ahora, de acuerdo con el Libro Verde de Colciencias 2030 (Colciencias,
2018), la producción científica colombiana, entre el 2007 y 2016, se resume
en: 717 publicaciones en el área de Vida de ecosistemas terrestres, 620
publicaciones sobre Acción por el clima, 498 publicaciones sobre vida
submarina —frente a 104 312 publicaciones sobre vida submarina a escala
global para el mismo periodo de tiempo—.
La infraestructura tecnológica —equipos, laboratorios y suministro de
elementos—puede considerarse buena, aunque se hace necesaria dotación
de última tecnología, reconociéndose que eso es viable a través de los pro-
yectos financiados a nivel nacional, de la cooperación internacional, de
donaciones, y de la firma de convenios de cooperación; pero fundamental-
mente, como se identificó en los foros regionales, a través de la cooperación
interinstitucional, con el fin de evitar la repetición de investigaciones —que
puede implicar, además, el no abordaje de temáticas que permitan llegar a
completar la solución de una problemática a la mayor brevedad—.
282
por Servicios Ambientales para la Construcción de paz, y la Política Nacional de
Ciencia e Innovación para el Desarrollo Sostenible (Libro Verde; 2018); los
Desafíos para el 2030 - Ciencia, tecnología, educación y medio ambiente (2018),
y, finalmente, el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022, Pacto por Colombia,
Pacto por la Equidad.
Se puede decir que si la normatividad fuera objeto de gobernanza y
gobernabilidad por parte de la institucionalidad, no se estaría frente a los
diagnósticos consignados en la parte anterior. Es conveniente anotar que
algunas reformas de la normatividad son necesarias ya que, en algunos
casos, estuvieron mal concebida y/o redactadas, o no se convocaron las
partes interesadas e involucradas en los diversos temas. Además, porque en
la práctica algunas generan dificultades y restricciones para la investigación
básica, aplicada y la tecnología, debido, por ejemplo, a cambios en las
metodologías científicas, entre otras, mientras que la normatividad parece
escrita en piedra: no se puede cambiar ni adaptar a las nuevas realidades del
país sin pasar por un tortuoso camino legislativo.
Tabla 7.3.
• Generar propuestas metodológicas y de contenido para lograr una educación en las
Proyectos
ciencias naturales y las matemáticas, moderna e incluyente, apoyada en un esquema
de formación tecnológica e investigativa participativa en los colegios y centros de
emblemáticos
formación. propuestos
por el foco
• Impulsar la transformación cultural e investigativa de las nuevas generaciones de Océanos
colombianas. y Recursos
Hidrobiológicos,
• Fortalecimiento del recurso humano a los niveles locales y regionales en temas desarrolladas
ambientales y de las ciencias del mar y la limnología. al interior del
documento.
• Incorporar investigadores doctorales extranjeros a la solución de problemas científicos
de océanos y recursos hidrobiológicos colombianos.
284
Figura 7.7. Misiones
emblemáticas
definidas EDUCACIÓN
por la Misión
Internacional
de Sabios POBREZA
2019, donde Y REDUCCIÓN CIENCIA
DE LA
se insertan y ABIERTA
INEQUIDAD
correlacionan
los diferentes
proyectos MISIONES
EMBLEMÁTICAS
emblemáticos
de cada foco
temático. MITIGACIÓN Y
ADAPTACIÓN COLOMBIA
AL CAMBIO DIVERSA
CLIMÁTICO
BIOCIENCIA 5.0
Referencias
286
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1207.
Resumen ejecutivo
294
la agricultura y sus servicios profesionales, científicos y técnicos, a través del
suministro de productos y servicios de mayor complejidad, de alta calidad e
impacto ambiental cada vez más reducido, y los consecuentes aumentos de la
productividad, emprendimientos y diversificación de la economía. El desafío
será que estos beneficios no lleguen a unos pocos sino a la sociedad en pleno,
en el marco de una economía moderna.
296
conceptualización individual de cada una de estas, sino, por el contrario,
de su convergencia. En sus primeros estadios, la convergencia tecnológica
puede parecer un trabajo interdisciplinario corriente, pero en este momen-
to de madurez se reconoce como el elemento que ha permitido recientes
avances a un ritmo vertiginoso y con un impacto trascendental en varias y
muy importantes áreas del conocimiento humano.
El término nbic fue acuñado por primera vez en 2001, por Mihail C.
Roco y William Sims Bainbridgen. A partir de allí, la National Science
Foundation (nsf) ha acompañado de manera sistemática el desarrollo de la
convergencia nbic, a través de reportes publicados entre los años 2002 y
2016 (Roco y Bainbridge, 2002, 2005, 2013, 2016). El trabajo articulado de
la nanotecnología, la biotecnología, las tecnologías de la información y las
ciencias cognitivas, significa la confluencia de cuatro elementos
fundamentales que constituyen en sí mismos los grandes pilares de las
ciencias modernas: átomo, célula, bit y sinapsis neuronal. Así, más que
convergencia tecnológica, podría decirse que se trata de la ciencia
“unificada”, como lo afirman reiterativamente Roco y Bainbridgen (2002),
creadores del concepto. A lo largo de este camino se encuentra que gracias
a esta convergencia, temas que en el año 2001 eran apenas ideas retadoras
—como la comunicación no invasiva cerebro-cerebro, el computador
personal consejero (laptop-célula), medicina regenerativa, edición genética,
bio-impresión 3d, nano-info-biomedicina o las prótesis conectadas al
cerebro—, hoy tengan altos niveles de madurez.
El término “Industria 4.0” fue acuñado durante la Feria de Hannover
de 2011, para describir la organización de los procesos de producción
basados en dispositivos que se comunican entre sí, de forma autónoma,
induciendo una mutación de la fábrica standard de hoy a la anhelada fábrica
inteligente (Klaus, 2017). El término representa hoy mucho más que esto,
pero va ligado a la comprensión de su impacto sobre la dinámica del
momento histórico. La trascendencia de esta nueva forma de producir tiene
un efecto global, y por ello se habla de una nueva revolución industrial. El
adjetivo 4.0 extiende su aplicación más allá de la manufactura en áreas
como las comunicaciones, la construcción, la agricultura, la salud y, en
298
“convergencia reactiva” —basada en interacción interdisciplinaria ocasional—,
hasta la convergencia como hecho natural y básico del trabajo, denominada
por el autor como “convergencia sistémica”. A partir de estas definiciones se
propone la figura 8.1 como esquema de la articulación de las áreas básicas de
la convergencia tecnológica (nbic) como eje central; los desarrollos
tecnológicos son consecuencia de esta convergencia y están enmarcados en
lo que conocemos como la cuarta revolución industrial. Finalmente, con la
intención de caracterizar el impacto práctico en la generación de innovaciones
transformativas, en el anillo de afuera se describen los escenarios resultantes
de esta convergencia con su gran potencial para generar nuevo conocimiento
y proponer modelos disruptivos para nuevos negocios y productos. Bainbridge
(2016) reconoce este proceso como un llamado a la generación de un sistema
de transformación técnica e intelectual, a través de la convergencia.
ión
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Moléculas
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Figura 8.1 Las
a
Nan
f
nzad
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Tecnologías
mac
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Convergentes
ión
e
Neuronas
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NBIC como base
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industrial y los
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di
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al
Sens cha
escenarios que en Block
i
ores za
pr ci
potencializan
ón
Em
estas tecnologías.
300
Figura 8.2. Inversión
Arquitectura
crítica para la Capa • Organizaciones • Consumidores • Todas las
regiones
(Fundacional)
claramente las Capa IA + LM + RA + RV + LN + Robótica + Análisis de Big data y
Smart Data + IoT + Algoritmos Cúanticos + Impresión 3D +
de valor
cinco capas Desarrollo de nuevos materiales (nano y bio), sensores
necesarios para
conseguirlo. AUDIENCIAS
• Legisladores • Desarrolladores de • Jefes de información IA = Inteligencia Artificial
negocios • Emprendedores LM = Lenguaje de Máquina
• Reguladores
• Arquitectos de plataforma • Comercializadores RA = Realidad Aumentada
• Científicos
• Científicos de datos digitales RV = Realidad Virtual
• Desarrolladores de
tecnología • Académicos • Profesionales LN = Lenguaje Natural
302
(4) Capa de innovación
En este nivel aparece la oportunidad y el gran reto para Colombia. Es
aquí donde se debe concentrar el esfuerzo por posicionar al país en
ese nuevo lugar en la arena de la innovación mundial, que se traduzca
en una economía moderna y competitiva. Si las tres capas anteriores
están razonablemente habilitadas, entonces el objetivo debe ser
producir nuevos servicios digitales de alto valor diferenciado, startups
digitales a escala, nuevos modelos de negocio, producción integrada y
colaborativa, negocios a partir de nuevos materiales, etc. En esta capa,
y con fundamento en las anteriores, encontraríamos innovaciones en
los escenarios nbic con esfuerzos muy concretos para seleccionar áreas
en las que Colombia puede diferenciarse: por ejemplo, manufactura
aditiva, química verde, industria verde, nano materiales verdes
inteligentes, agro-tecnología transformativa, plataformas algorítmicas
ambientales de Smart Data, equipos para la transición energética,
ciudades inteligentes, entre otras.
304
oportunidades de carrera para un mayor desarrollo e innovación en las
industrias colombianas. Las posibilidades de diversificación industrial y
emprendimientos (start-up, spin-off) también generarán una movilidad
laboral y empresarial que contribuirán con el crecimiento económico
del país en el mediano y el largo plazo.
306
que pueda aspirar a contribuir a la transformación de la nación. Las
asociaciones estratégicas que combinan iniciativas de la industria,
la academia y el Gobierno que reúnen a socios internacionales en
consorcios precompetitivos —por ejemplo, modelos de src y Semitech
en los Estados Unidos— pueden incentivar el desarrollo de nuevos
productos y servicios —nuevos modelos de negocio—, la innovación y,
en última instancia, la producción con alto valor agregado.
308
adecuadas para incentivar a todos los sectores de la sociedad en la
búsqueda de una visión común, que pueda ayudar a la nación a
alcanzar el sueño de convertirse, sin lugar a duda, en la sociedad y
la economía innovadoras y altamente inclusivas que todos aspiramos
dejar a las generaciones futuras. Su estructura como política de estado
—no solo gobierno— es esencial para una verdadera transformación y
modernización sostenida de país.
En materia de políticas públicas de innovación se requieren
instrumentos y plataformas únicas de información, su medición
y comunicación para poder alinear los ministerios e instituciones
relacionadas con la convergencia tecnológica y la nueva revolución
industrial. Sería necesario unificar e instrumentar las políticas del
nuevo Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, Ministerio de las
Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, Innpulsa, sena,
ptp y otras instituciones. Se trata de lograr las innovaciones en el país
en más corto tiempo, puesto que se contaría con una institucionalidad
interconectada, eficaz y eficiente. Se requieren nuevos reglamentos
técnicos y regulaciones para preservar el acceso ético y correcto a los
recursos naturales y biodiversidad de Colombia. En materia de propiedad
intelectual e industrial será importante la implementación de una
vía rápida (fast track) para el registro y protección de las tecnologías
que comprenden la convergencia tecnológica, ya que la evolución
tecnológica en esta materia es muy rápida.
Debemos reclutar y desarrollar no solo grandes talentos en las
ciencias y las humanidades para acelerar este viaje, sino —igualmente
importante y fundamental—, asegurar las prácticas más innovadoras
(benchmarking o referenciación internacional) y el talento en la
formulación de políticas de estado modernas y la legislación que
es obligatoria para ver al país emerger como una nueva colombia
innovadora, inclusiva, ambientalmente sostenible y reconocida
mundialmente como tal.
La preparación del capital humano para asimilar los nuevos retos impues-
tos por la nano y biotecnologías, la automatización, la digitalización, el Big
data, la inteligencia artificial y, en general, el vertiginoso desarrollo tecno-
lógico, empieza desde el nivel básico. En este momento de la formación, las
ciencias básicas, el lenguaje, el pensamiento computacional y las habilida-
des blandas serían los grandes pilares de la formación. En su defecto, Co-
lombia está aún concentrada en problemas de cobertura y mínima calidad.
Elementos mínimos como el acceso a recursos informáticos y conexión a
internet son inaceptables. solo del 33 % de los estudiantes rurales cuenta
con un computador y el 25 % con acceso a internet; en la zona urbana los
valores son 63 y 65 % respectivamente (Icfes, 2018). Nuestro atraso pone
en riesgo la calidad de la educación superior, la capacidad de las empresas
para asimilar nuevas tecnologías y la posibilidad de alcanzar una masa crí-
tica de alto nivel que fortalezca el sistema ctei nacional.
Vale anotar que el reto de la preparación básica para integrar la
automatización y la inteligencia artificial es global. Como ya se mencionó,
es fundamental llegar a un pacto nacional que redefina el papel de la
310
docencia acorde con la necesidad de tomar ventaja de la convergencia
tecnológica en escenarios como la inteligencia artificial (ai), a partir de
contenidos incluyentes con capacidad de personalización para el estudiante
en todas sus etapas, dentro y fuera del salón de clase.
312
ni hay incentivos salariales que inviten a la cualificación académica dentro
del entorno laboral. En la figura 8.3 se evidencia la baja inserción de personal
altamente calificado en el gobierno o la industria: todos ellos se concentran
en el medio académico. Las misiones emblemáticas propuestas por esta
Misión son la apuesta de formación, reclutamiento, desarrollo y retención
—repatriación— de doctores, y a su vez, la punta de lanza en la atracción de
talento internacional que ayude a avanzar en el proyecto de país.
Brasil
Chile
Colombia
México
América
Latina
Corea
del Sur
Turquía
Singapur
Sudáfrica
ocde
Gobierno Empresa ies Organizaciones privadas sin ánimo de lucro
análisis posterior realizado con base en las líneas temáticas de los grupos,
muestra que otros 120 grupos asignados a áreas de las ciencias básicas, la
biotecnología o la salud, están directamente relacionados con temáticas
nbic o industria 4.0. Esta situación se explica dado el indiscutible carácter
transversal de las tecnologías convergentes.
La productividad de este cuerpo de investigadores puede describirse
a través del número de publicaciones; si sumamos nuestra producción
académica a la de Chile, México y Brasil, la participación de Colombia en las
tecnologías aplicadas es del 9 % en aplicaciones tecnológicas y 6% en ciencias
básicas. La relación entre estos dos ítems es fundamental y demuestra el
importante sustento que los desarrollos tecnológicos tienen en las ciencias
314
básicas. El número de publicaciones en ambas áreas, identificado para los
países latinoamericanos mencionados y Estados Unidos, China y Alemania,
muestra una relación muy constante y aproximada de 33 a 1, es decir, para
los casos mencionados, por cada 33 artículos en ciencias básicas se publica
uno en aplicaciones tecnológicas. En esta misma línea, se encuentra que los
cuatro países Latinoamericanos listados aportan el 6 % de los artículos en
aplicaciones convergentes y el 7 % en ciencias básicas.
También es mínimo el impacto de nuestro sistema científico medido
a través de patentes y citaciones en patentes. Colombia es visible en el
conjunto de publicaciones académicas, pero, según datos publicados por
Lens.org, del total de las patentes mundiales en áreas asociadas a las nbic e
industrias 4.0. la participación del país equivale al 0,0008 % de las patentes
registradas; el impacto de las publicaciones sobre la innovación mundial
es un poco más alto: trabajos académicos colombianos constituyen el
0,0256 % del sustento teórico citado en estos procesos de innovación.
316
En términos globales, los indicadores de inversión publicados por el
Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, basados en
la Encuesta de Innovación del dane (2017), muestran a la industria como
un importante agente de financiación del snctei. Ésta reporta inversiones
en actividades de ctei de más de 1,13 billones de pesos anuales, que
equivalen al 55 % de la inversión total nacional. En contraste con esta cifra,
Colciencias indica que de 1478 empresas colombianas catalogadas como
“empresas innovadoras”, solo 30 se consideran altamente innovadoras
(Colciencias, 2019). De forma paralela, datos de la encuesta bianual de
los sectores manufacturero y servicios (2016-2017) muestran que para un
total de 16 598 empresas encuestadas, solo 31 son innovadoras en “sentido
estricto” (innovación en el mercado internacional) y 3345, innovadoras en
“sentido amplio” (innovación en el mercado nacional o para la empresa).
Otro elemento fundamental en el análisis es la disparidad en los
niveles de apropiación tecnológica entre las grandes empresas y aquellas
clasificadas como pequeñas y medianas, en áreas como ciberseguridad,
computación en la nube, internet de las cosas, etc., con diferencias
en sus niveles de apropiación entre 10 y 40 puntos porcentuales. Los
resultados son particularmente importantes si se tiene en cuenta que
según cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, las micro,
pequeñas y medianas empresas —mipymes—, representan el 99,9 % de los
establecimientos productivos, contribuyen con el 80 % del empleo en el
país y aportan el 40 % del pib nacional. En niveles de apropiación de la
internet, las redes sociales o las plataformas de pago electrónico también
son mínimos —menores al 5 % en la mayoría de los ítems— para el caso de
las pymes. Datos de la encuesta Mintic 2018 muestran que los niveles de
uso de internet para gestiones como compras, ventas o pagos están entre
el 30 y el 35 %. El nivel de interacción con entidades gubernamentales es
más alto a través de estos medios, y oscila entre el 40 y el 45 %. Todos estos
datos permiten poner las pymes en el foco de atención y a su vez grandes
oportunidades de mejoramiento sobre ellas, con un impacto indiscutible
sobre la productividad global del país.
8.4.8 Oportunidades
Colombia cuenta con un sistema ctei que sin ser el más fuerte de
Latinoamérica, ha crecido de forma acelerada en los últimos 20 años:
sus universidades han sido un soporte robusto a este sistema, y se han
multiplicado el número de estudiantes —aunque no en ciencia y tecnología—
mucho más allá que el crecimiento demográfico. Cuenta con grandes
empresas a las que puede seducir hasta convertirlas en el nuevo socio del
sistema ctei y más allá de eso, cuenta con recursos biológicos privilegiados,
un potencial agrícola soportado en importantes recursos hídricos. Así
como lo expresa la Arquitectura crítica para la innovación y la oportunidad
global propuesta en este documento, la capa beneficiaria es Colombia en
su conjunto; la equidad social y regional, la rentabilidad empresarial, la
eficiencia de todos los estamentos del estado, se sirven de las oportunidades
que la convergencia tecnológica y la cuarta revolución industrial proveen.
Otras oportunidades identificadas por los comisionados de este foco radican
en tres grandes desarrollos para Colombia:
318
usuario con un valor agregado para innovar los materiales inteligentes
del mañana. La próxima generación de materiales avanzados será verde:
ellos podrán detectar, adaptarse y ser fabricados a escala. Colombia tiene
una enorme oportunidad en la industria manufacturera de alto valor,
aprovechando su biodiversidad y transformando materiales naturales
que puedan impactar una amplia gama de sectores industriales, desde el
energético hasta el sector salud. Los nanomateriales verdes inteligentes
(nvi) tienen la característica única de convertir las tecnologías
convergentes nbic en tecnologías transformadoras que cambiarán la
forma en que pensamos sobre el diseño de materiales. Por ejemplo,
el integrar una membrana flexible biorreabsorbible que ayuda a
reconstruir las arterias cardiacas defectuosas y a la vez que se sanen,
se mide su curación con el tiempo —eventualmente reabsorbida por
el cuerpo—. Otro ejemplo incluye el diseñar membranas que puedan
responder al contenido específico de impurezas metálicas del agua
contaminada para purificarla; o un material flexible que se integre
con el cerebro y sea capaz de orquestar la detección de trastornos
neurológicos desde un dispositivo de base orgánica, corrigiéndolos en
tiempo real; o nanopartículas radio-terapéuticas verdes personalizadas
a la fisiología del paciente, que permitan detectar las células cancerosas
en etapa temprana y combinadas con anticuerpos que influyen el
sistema inmunológico del cuerpo. Los nvi también pueden abrir el
camino para los materiales cuánticos que son amigables y flexibles con
el medio ambiente; por ejemplo, la combinación de diodos emisores
de luz de punto cuántico (qd) con grafeno. Todos estos son escenarios
de demanda global en los que Colombia podría hacer apuestas como
jugador internacional, si se crean las condiciones descritas en las
propuestas contenidas en este documento.
(2)Química verde
La química verde es uno de los sectores promisorios para la nueva re-
volución industrial en el contexto de la producción integrada, ya sea a
la medida, personalizada o a escala, haciendo uso de la convergencia de
(3)Manufactura avanzada
La manufactura avanzada es el uso de tecnología innovadora de
sensores, materiales, inteligencia artificial, producción digital, etc., para
320
mejorar procesos y productos. La adopción de estas nuevas tecnologías
y herramientas, así como la capacidad de usarlas, son necesarias para
seguir siendo competitivos y agregar valor a productos en el sector. La
manufactura avanzada incluye un amplio rango de áreas de aplicación
como (1) manufactura aditiva, (2) inteligencia artificial, (3) materiales
de alto rendimiento, y (4) fabricación inteligente y digital, entre otras.
Por ejemplo, la manufactura aditiva es uno de los principales aceleradores
de la nueva revolución industrial en el contexto de la producción
digital: el uso de sistemas de mesa de impresión 3d en el hogar llevó
a nuevas ideas e innovaciones, creando nuevas empresas y grandes
inversiones de compañías globales en diversas áreas, desde software,
máquinas y materiales hasta nuevas aplicaciones e implementación en
la industria. Hoy en día en Colombia ya hay empresas que producen
equipos de manufactura aditiva de última generación, con sensores que
producen data-sets que por medio de aprendizaje de máquina generan
sombras digitales del proceso. Esta forma de análisis de Big-data trata
con conjuntos de datos —demasiado grandes y complejos para ser
procesados con programas tradicionales—, que se pueden analizar y
procesar con software de inteligencia artificial y aprendizaje de máquina.
Esto facilitará nuevas formas de analizar procesos de manufactura,
extrayendo información de manera sistemática y detectando variaciones
en el material y el proceso que permitan autocorregir las falencias y
producir bienes de alta calidad. Es en estas áreas donde la Arquitectura
crítica para la innovación y la oportunidad global propuesta por el foco
se hace indispensable. Esta forma de fabricación —con su capacidad
de funcionar sobre el escritorio y con la posibilidad de compartir
data e información en todo el país—, se presta para incorporarse a
la modernización del sistema educativo y ayudar impulsar las áreas
de stem-a. Otras áreas que impulsarán la próxima generación de
manufactura avanzada con nuevos equipos y aplicaciones, incluyen:
(1) avances en el control y supervisión de procesos para asegurar que
las tecnologías de manufactura avanzada sean alternativas viables de
producción; (2) desarrollo de nuevos sensores inteligentes y métodos
8.5.1 Propuestas
322
hacia dónde debemos dirigir nuestros esfuerzos y recursos para traducirlas
en acciones sostenidas de carácter transformador.
324
necesaria que pueda generar soluciones que realmente den respuestas
efectivas a estos desafíos y oportunidades.
Este foco apoya los tres grandes retos propuestos para desarrollar las
misiones emblemáticas: (1) Colombia Biodiversa; (2) Colombia equitativa,
y (3) Colombia productiva y sostenible
Industria manufacturera
a) Duplicar la producción de la industria manufacturera del país, y pasar de
0,57 % al 3 % del pib en industrias digitales, entre 2020 y 2030.
326
b) Transformar la industria manufacturera, agrícola, agroindustrial y de
tecnologías convergentes hacia la neutralidad de carbono.
Agro y agroindustria
a) Duplicar la producción de la agricultura de Colombia entre 2020 y 2030.
b) Aprovechar la biomasa sólida y líquida para aumentar de 9 % a 15 % su
participación en la producción de energía y desarrollar al menos cuatro
sectores industriales basados en la química verde, cada uno de ellos con al
menos una nueva empresa de base tecnológica.
Energía
a) Crear cinco empresas de base tecnológica y proyección exportadora en
instrumentación, control y equipos para la transición energética.
b) Crear cinco empresas de biorrefinerías con productos de proyección
exportadora.
c) Apoyar la transferencia y adopción de tecnologías para cinco ciudades
inteligentes y sostenibles en Colombia.
328
World Economic Forum. (2016, January). The future of jobs: Employment, skills and
workforce strategy for the fourth industrial revolution. En Global Challenge Insight
Report. Disponible en http://www3.weforum.org/docs/WEF_Future_of_Jobs.pdf
Zion Market Research, 2019. Industry 4.0 Market: Technology Analysis. Disponible en
https://www.zionmarketresearch.com/sample/industry-4-0-market
334
del ramo (Enero 2020). De 1990 a 2015, Colombia perdió 5 915 300 hectáreas de
bosques. Y hacia el futuro, los riesgos por cambio climático afectan al 100 % de
los municipios del país, lo que llama a estar preparados.
Estos indicadores nos invitan a preguntarnos si en el proceso de reactivación
que seguirá a la pandemia se quiere restaurar el modelo de desarrollo que traía el
país, y si este debe ser conducido con las políticas económicas y sociales del pasado.
La Misión Internacional de Sabios 2019 le plantea una alternativa a la sociedad
colombiana, que se puede resumir en pocas palabras: la propuesta consiste en trans-
formar la economía y la sociedad, de tal manera que desarrollo humano, equidad,
bioeconomía y sostenibilidad se muevan armónicamente y en la misma dirección.
Colombia puede ser más equitativa, proteger el medio ambiente, y tener a la vez un
desarrollo humano sostenible. Estos no son fines necesariamente contradictorios,
pero hacerlos compatibles implica importantes transformaciones.
Para que equidad, sostenibilidad y desarrollo humano sean compatibles, es
indispensable la transformación de una economía que estimula las actividades
generadoras de rentas, como la explotación de recursos agotables con muy escaso
valor agregado y las prácticas monopolistas, a una economía en donde el capital
humano, el conocimiento y las actividades sustentables apalanquen la dinámica
de la economía y se le apunte a un desarrollo sostenible ambiental y socialmente.
En esta transformación, Colombia debe girar hacia aquellas actividades eco-
nómicas, sociales y culturales que puedan ser sostenibles ambiental y socialmente,
y que conduzcan al desarrollo humano. Actividades que no tienen la capacidad de
alinear los objetivos de desarrollo humano, equidad y sostenibilidad no deberían
ser estimuladas.
La transformación solo puede lograrse a largo plazo; pero la forma de hacer
políticas públicas tiene que cambiar de inmediato para que esto sea posible. Nues-
tro sistema económico-social es un sistema complejo en el que las intervenciones
homogéneas y desde el centro hacia la periferia poco pueden hacer para cambiar la
vida de las comunidades de manera sostenible. Las políticas nacionales deben estar
allí para acompañar y darle viabilidad a acciones puntuales e iniciativas de muchos
actores individuales y colectivos, que apuntan al desarrollo humano de las personas
y las comunidades. La crisis de múltiples dimensiones que actualmente viven el
país y el mundo ofrecen un escenario propicio para ese cambio de orientación.
336
Moisés Wasserman muestra la manera como la pandemia hizo evidente la
carencia de soberanía tecnológica y de capacidad para responder con autosuficiencia
a un reto de salud pública como éste, y como los países que más han desarrollado
sus ciencias básicas y han preservado su industria a lo largo del proceso de globa-
lización son los que mejor han podido enfrentar el temporal. Quizá su principal
conclusión es que “Nadie podía haber predicho de antemano qué se iba a necesitar,
pero la ciencia básica es precisamente la que otorga a las sociedades ese potencial
para responder a los retos imprevisibles”.
Sara Victoria Alvarado señala la pérdida de libertades causada por la pandemia y
la desigualdad radical que se ha hecho más evidente con este fenómeno. Los procesos
educativos se han visto truncados para unos y afectados para muchos. Explica de
qué manera la educación, especialmente en la primera infancia, es instrumento
esencial para corregir a mediano plazo esas fallas de la sociedad que la hacen vul-
nerable. Y concluye con una propuesta de transformación de la educación, para
que los educandos afirmen su identidad y su capacidad de agencia, desarrollen su
capacidad de enfrentar la incertidumbre y la complejidad, fortalezcan su potencial
comunicativo, orienten su vida con principios éticos, y superen los dogmatismos
y la violencia.
Edgar Puentes insiste en la viabilidad de restablecer un equilibrio biológico,
social y cultural del planeta. Explica el papel que en ello puede jugar la educación,
cuando se la articula con los procesos biológicos y culturales de las regiones. Y
concluye mostrando que el objetivo de convertir a Colombia en una sociedad del
conocimiento pasa por que se reconozca su diversidad biológica y cultural.
Ludger Wessjohann argumenta la necesidad de una reflexión de largo plazo,
precisamente en el momento en que estamos enfrentando una catástrofe global
en lo inmediato. Explica el importante rol que juegan la ciencia y la comunidad
científica por su capacidad de avizorar y de prepararse para lo desconocido. Y retoma
el dilema de preservar o desarrollar, y las consecuencias que las decisiones políticas
de hoy pueden tener para el futuro.
Elizabeth Hodson, Guy Henry y Silvia Restrepo exponen la relación entre
territorio y bioeconomía. La producción y el comercio sostenibles exigen una
visión y una estrategia de desarrollo desde lo territorial. Las cadenas de valor se
integran en los espacios para asegurar la sostenibilidad, lo que le da viabilidad a
338
Hace un recuento de las transformaciones más importantes que ha generado la
covid-19, y del retroceso que se observa en la reducción de la contaminación global.
Advierte sobre los inmensos riesgos que este efecto y una reactivación intensiva en
la emisión de gases de invernadero puede traerle al planeta. El retorno a la nor-
malidad no es solución. Las inversiones que se requieren para paliar los efectos de
la crisis y atender los efectos que ha tenido sobre la población y sobre el ambiente
son cuantiosas y Colombia se encuentra entre los países que en el mundo menos
recursos está dedicando a estos propósitos.
Clemente Forero vuelve sobre la necesidad de no descuidar los propósitos de
largo plazo de la transformación que propone la misión para entregarle a la próxima
generación un país más equitativo, sostenible ambientalmente y cuyo desarrollo
humano se apalanque en el conocimiento. En la pandemia, el objetivo prioritario
de la sociedad colombiana debe ser la equidad. Para el logro de los objetivos de largo
plazo, el instrumento principal es la educación de calidad. Finalmente, concluye
presentando unas primeras lecciones de la experiencia de la pandemia. Entre ellas
se destacan el reconocimiento del valor de la ciencia y de los esfuerzos continuados
en los sistemas de investigación; el necesario viraje de las políticas de desarrollo
hacia el enfoque de misiones, y la importancia de redefinir los procesos educativos.
Los consensos generales que se revelaron en las discusiones de la Misión de
Sabios acerca del valor insustituible de la ciencia; de la importancia de la educación
para la transformación de la economía y de la sociedad colombiana; del sinsentido
de volver a la misma senda de desarrollo que traía Colombia, y del necesario viraje
hacia un desarrollo humano, equitativo y sostenible se reflejan claramente en
las contribuciones que los autores de estos ensayos proponen para interpretar la
pandemia y orientar la reactivación.
Con la visión del sentido que deben tener las distintas transformaciones
propuestas por la Misión —de la periferia hacia el centro, del proyecto piloto hacia
la universalización, de la comunidad hacia la nación—, y la necesidad de que las
políticas nacionales acompañen estos procesos, la pandemia puede ser vista como
una oportunidad para transformar el desarrollo colombiano y reconfigurar sus
objetivos de largo plazo.
340
se volvieron bienes escasos. Muchos países del “primer mundo” que los producen,
incluso algunos que se han distinguido en años recientes por su colaboración con
países en desarrollo, embargaron y prohibieron sus ventas al exterior para asegurar,
ante todo, el suministro a sus propios servicios de salud. La pandemia produjo una
reacción generalizada de “sálvese quien pueda”.
En esa estrategia nos va especialmente mal a los países en desarrollo. Se hace
muy evidente nuestra carencia de soberanía tecnológica, de la capacidad para res-
ponder con autosuficiencia a un reto de salud pública como éste. No es casualidad,
que los países que más capacidad tienen para responder a esos retos son también
los que más han desarrollado sus ciencias básicas y que tienen una industria que se
alimenta de ellas. Nadie podía haber predicho de antemano qué se iba a necesitar,
pero la ciencia básica es precisamente la que otorga a las sociedades ese potencial
para responder a los retos imprevisibles.
La primera mala noticia fue la escasez de pruebas diagnósticas moleculares
(las pruebas rt-pcr). Esa no es una prueba especialmente compleja ni se necesitan
desarrollos con patente o secreto industrial. Es una amplificación exponencial del
arn del virus (de secuencia conocida y de dominio público), usando primero una
enzima capaz de sintetizar una cadena de adn a partir del arn y luego otra que con
ciclos a temperaturas diferentes (en un aparato termociclador) y unos “cebadores”
(pequeñas moléculas con secuencia complementaria al adn) producen el adn en
una cantidad que es más fácilmente detectable. Cualquier laboratorio de biología
molecular con cierta sofisticación podría producir todos los componentes y armar
la prueba. Pero nuestros laboratorios centrales de diagnóstico dependían de un kit
comercial, aún peor, de un kit de diseño cerrado, es decir uno que solo puede ser
utilizado con un aparato, producido por la misma compañía que vende los kits. Y
resultó que esa compañía estaba en uno de los países que embargaron sus exporta-
ciones. La falta de soberanía tecnológica se hizo evidente. Quedamos dependiendo
de algo que, en el fondo, ni siquiera puede estar protegido por patentes.
Con gran esfuerzo se consiguieron kits y entonces sucedió otro impase. El paso
previo a la amplificación es la extracción del arn y eso depende de otro kit que para
mayor rapidez se usa en un aparato robotizado. El aparato se dañó y tuvimos, por
unos días, una lentificación grave del diagnóstico mientras que los representantes
de la firma lograron arreglar el robot. No hay ninguna razón para que un buen
342
productiva a la ciencia básica con la industria farmacéutica. Saldrá seguramente
una vacuna, pero muy probablemente no seremos los primeros en recibirla porque
habrá que distribuirla a miles de millones de personas en el mundo. Aunque la
vacuna no sea patentada y se constituya en bien público (no es imposible, ya sucedió
con otras como la de influenza) nosotros no podremos producirla y tendremos
que esperar hasta que nos llegue y depender de las buenas relaciones de nuestros
gobernantes con los de otras naciones.
Lo más doloroso es que aún si recibiéramos licencia de producción de la futura
vacuna no podríamos usarla porque no tenemos las instalaciones adecuadas para
producirla. Hay que recordar un par de hechos. La viruela fue erradicada de Colombia
con una vacuna fabricada en Colombia. Existió desde principios y hasta mediados
del siglo xx el Parque Nacional de Vacunación que la producía y administraba, y
que posteriormente se unió al Instituto Nacional de Salud (ins). Los brotes de la
terrorífica fiebre amarilla en el siglo xx fueron controlados con vacuna fabricada
en el Instituto Finlay en Bogotá y luego en el ins. No solo controlamos nuestros
brotes, sino que la exportamos a Ecuador y a Perú.
El año 1997 el ins en su rendición de cuentas reportaba la entrega, al Plan
Ampliado de Inmunización de 6 500 000 dosis de vacuna bcg (contra la tuberculosis)
5 797 500 dosis de vacuna dpt (contra difteria, tosferina y tétano), 10 993 000
dosis de vacuna contra el tétano y 2 465 320 dosis de vacuna contra fiebre amarilla
todas hechas en casa.
¿Era posible en 1997 y es imposible hoy? ¿Qué pasó? Hay muchas razones
para justificar o explicar por qué algo no se hace o se dejó de hacer. Pero una razón
importante ha sido la falta de confianza en nuestras propias capacidades científicas.
En ese momento se debió haber dado un paso adelante, arriesgado y haciendo una
inversión considerable; no se hizo a pesar de que nos hubiera dado un gran grado de
autonomía sanitaria. Se prefirió acabar la producción, reestructurar las instalaciones
para otros usos, y confiar en que siempre podríamos comprar nuestras vacunas en
el exterior. Este momento debía al menos quitarnos algo de esa confianza.
La soberanía tecnológica para la fabricación de fármacos también será necesaria
y por la misma razón. Países como la India lo han logrado convirtiéndose en grandes
productores que cambiaron, por ejemplo, la epidemiología del vih en África con
344
2. Desarrollo humano y educación
en tiempos de pandemia
Sara Victoria Alvarado Salgado
Psicóloga de la Universidad Javeriana. Magíster en Ciencias del Comportamiento y doctora en
Educación de Nova University (cinde). Directora del Centro de Estudios Avanzados en Niñez
y Juventud del cinde y la Universidad de Manizales y de su doctorado en Ciencias Sociales,
Niñez y Juventud. Miembro Comisión de Sabios del Bicentenario 2019.
346
primer período del 2020, como efectos proyectados de esta pandemia tendremos
11 millones más de desempleados y 28 millones más de pobres en América Latina y
habrá mayor desigualdad. Esto marca un retroceso importante en los esfuerzos por
reducir la pobreza de la última década. Esto afectará especialmente a los estratos
socioeconómicos más bajos, a las mujeres, a las minorías étnicas, a las personas
migrantes, a quienes viven en los sectores rurales y, dentro de estos grupos, aún
más a los niños y niñas, por las afectaciones directas que ha sufrido el sistema
educativo, principal instrumento generador de oportunidades para estos grupos
poblacionales.
La pandemia ha exacerbado las condiciones de precariedad en las que tienen
que vivir muchos niños y niñas en Colombia, obligando a un confinamiento que
ellos y ellas viven como un encierro, con todo lo que esto implica en la privación
de las oportunidades que representa la escuela: la posibilidad de estar en entornos
seguros y de protección; de tener una alimentación que les garantice su nutrición;
de tener acceso al conocimiento desde muy diversas prácticas; de jugar, reír gritar
y abrazar a sus compañeros, y de generar esas prácticas de complicidad que se tejen
en la amistad y que perduran en muchos casos para siempre.
Junto a esta precariedad, se han evidenciado las profundas brechas digitales
y se han incrementado las desigualdades en el acceso a procesos de formación de
calidad, a la cultura, a las oportunidades humanas y sociales que brinda la educación.
Esto se da de la mano de procesos muy extendidos de analfabetismo digital presente
en muchos padres y cuidadores. Ante la necesidad de tomar un rol más activo en
la educación de sus hijos, son presa de una inseguridad que se expresa en estrés,
inestabilidad emocional y, en muchos casos, prácticas de maltrato a los niños. Se
han transformado las relaciones familiares, sus dinámicas de supervivencia y el uso
de los tiempos, lo que genera situaciones que ponen en desventaja a las mujeres,
sobre quienes ha recaído en mayor porcentaje el cuidado y la educación de sus hijos.
De la misma manera en la que las familias no estaban preparadas para el
confinamiento y la transformación de su rol frente a la educación de los hijos, los
maestros, los rectores, tampoco lo estaban; de hecho, tampoco estaba preparado el
sistema educativo de nuestro país para enfrentar algo tan imprevisible como ha sido
esta pandemia. A los maestros y maestras esta situación los puso en una condición
difícil. Los vacíos en la formación digital se hicieron evidentes en las dificultades
348
Frente a estos grandes desafíos la Misión está proponiendo un camino posible
para reducir las brechas que se han ampliado, para atacar de frente algunas de las
raíces más hondas de la inequidad, para instalar procesos nuevos de educación
de niños niñas y jóvenes y procesos de formación de maestros centrados en el
fortalecimiento del desarrollo humano con equidad, como condición primera
de calidad de los procesos educativos. Como no es posible desarrollar todas las
propuestas de la misión en educación de manera homogénea e inmediata en
el país, la Misión propone el desarrollo de cinco proyectos piloto que permitan
experimentar, evaluar y aprender, para luego escalar progresivamente su aplicación
hasta cubrir todo el país. Estos pilotos se pondrán en marcha en distintos municipios
o zonas delimitadas dentro de ciudades. Allí se implementarán: (a) la estrategia de
universalización de la educación de calidad con atención integral a la primera infancia,
potenciando el desarrollo y puesta en marcha de la política de estado De Cero a Siempre
(Ley 1804 de 2016), con estrategias centradas en familia y comunidad, articuladas
con maestros, normales, universidades y grupos de investigación, a través de los
Centros de investigación y educación, familiares y comunitarios como instancias
de articulación intersectorial; (b) la estrategia de universalización y diversificación
disciplinaria, profesional y cultural de la educación media, para que los y las
adolescentes puedan acceder a una amplia gama de oportunidades y puedan
aprovechar y contribuir a desarrollar las potencialidades de la economía y cultura
locales y de sus comunidades, desde la investigación y la innovación; (c) La creación
de Centros de Investigación e Innovación educativa locales que articulando la
experiencia de las facultades de educación, las normales y los grupos de investigación
de la región, puedan recoger las experiencias exitosas de formación, incentivar las
redes de maestros, y desarrollar procesos de formación de educadores con fortaleza
en la investigación y garantizando los más altos niveles de calidad; (d) la puesta en
práctica de tres componentes esenciales de una educación que se encamine a cerrar
brechas, y a construir una nación altamente productiva, sostenible y diversa biológica
y culturalmente: el desarrollo del ecosistema arte-ciencia en todos los niveles de
la educación; el proceso de desarrollo socioemocional, ciudadanía y construcción
de paz en todas las instituciones involucradas; y el desarrollo de prácticas que
permitan el crecimiento simultáneo en digitalización y en humanización en los
procesos de formación de maestros, y en las experiencias educativas en los colegios.
350
frente a la vida, capacidad de desarrollar la memoria como una forma
vital de estar parado en el mundo siempre mirando sus raíces y siempre
mirando el futuro que quiere construir, de la mano de muchos, en
prácticas de acción colectiva para el bien común, para soñar el mundo
que quieren vivir y ayudarlo a construir, juntos de la mano, también
con las generaciones adultas, pero no desde las generaciones adultas, el
mundo no va hacia atrás, el mundo va hacia delante y nosotros somos
apenas acompañantes en ese mundo que se abre para las infancias y
las juventudes. Solo en este marco del desarrollo humano cobra todo
su valor la ciencia, el conocimiento y la educación.
Referencias
3. El papel de la educación en
la transformación y evolución
a una nueva sociedad
Edgar Puentes
Coordinador del foco de Industrias Creativas y Culturales.
Directivo de la Orquesta Filarmónica de Bogotá.
352
y de manera particular en nuestro país. Los modelos significativos y en los que se
evidencian mínimos de deserción escolar y un desarrollo funcional de las áreas
de conocimiento, es decir, cuando la educación genera aprendizaje y procesos
verificables en la formación, son aquellos en los que las áreas de enseñanza —en las
etapas preescolar, básica y secundaria— son impartidas de manera igualitaria, y en
la que la diversidad de los lenguajes tiene posibilidades de dialogo e interconexión.
Se hace entonces necesario establecer un diálogo de saberes en el que áreas
no afines del conocimiento puedan tener puntos de encuentro, interrelación y
construcción; se requiere transformar la educación de las áreas de enseñanza donde
el énfasis se hace en el campo teórico, por el de una práctica en el aprendizaje donde
el conocimiento sea evidente y contextual, dándole un sentido práctico y aplicable
en los aspectos más comunes y sofisticados de la cotidianidad.
De otro lado —y no menos importante—, se hace vital profundizar en conceptos
y desarrollos como la hiperhumanización o el humanismo avanzado. Además, debe
insistirse en que la formación y práctica de un pensamiento sensible y estético, y la
formación artística en todas sus manifestaciones, ocupen un lugar fundamental en
todos los niveles del sistema educativo a través del cual se fortalezca el desarrollo
de la personalidad, consolidando así en el individuo tanto su capacidad expresiva,
como un espíritu consciente y crítico, todo esto, como respuesta a un desarrollo
tecnológico y virtual cada vez más presente, y a la pérdida generalizada del respeto
y aprecio por la naturaleza, los ecosistemas y la vida.
De la misma manera, es fundamental una revolución en la educación de nuestros
maestros. Se requiere de manera importante y vital un proceso de formación a
formadores, en el que se enfaticen conceptos fundamentales de la educación, como
escenario creativo y en transformación. Recuperar su confianza, dignificar su trabajo,
potenciar en términos de estatus su posición ante la sociedad, recobrar el espíritu
de aprendizaje en su propio proceso, enfatizar la exploración, el descubrimiento y
fortalecimiento emocional, desarrollar modelos de aprendizaje y encuentro interior
basados en las reflexiones de la búsqueda del significado y el sentido de ser en lo
personal y lo profesional son ejercicios de gran importancia, si se quiere una verdadera
transformación de la escuela como un espacio de desarrollo del conocimiento y
el pensamiento. Gran parte de este esfuerzo, debe concentrarse en términos de
inversión de capital humano en los maestros y en menor grado en el sistema, dado
354
4. La ciencia, el largo plazo y las crisis
Ludger Wessjohann*
Director del Departamento de Química Bioorgánica del Leibniz Institute of Plant Biochemistry.
356
con mirar a los países que escuchan frente a los que no lo hacen. Estos últimos
aprendieron o todavía aprenden de la manera difícil - la ignorancia hacia la ciencia
no funciona, ¡el virus ama la ignorancia!
Actualmente, el reflejo de la política es destinar todo el dinero disponible a
la investigación del virus y a los planes de acción para la pandemia. Parte de ello
tiene sentido, pero no en la medida en que esto pone en peligro el futuro de la
ciencia y el apoyo al desarrollo en el aspecto más general durante muchos años
venideros, en el sentido de que obtiene fondos de los otros objetivos importantes
y más a largo plazo. Es probable que el próximo “cisne negro” en Colombia no sea
un virus, puede ser un terremoto, inundaciones, sequías severas en los llanos que
aumentan durante décadas debido a la pérdida de bosques, o una cepa de Malaria
resistente a las drogas y al frío que se está propagando. ¿Quién lo sabe? Nadie.
Por lo tanto, es importante tener una agenda, un plan a largo plazo. Un plan
que mejore la capacidad general y la resistencia del sistema científico colombiano
a lo largo de los años y que, por consiguiente, dependa de los resultados científicos,
sociales y económicos. Esto debe hacerse de manera independiente de la incidencia
impredecible del cisne negro. Solo se puede tener una mayoría de cisnes blancos
—avances positivos— si se invierte constantemente en ellos. O para seguir con la
analogía: si construyes tu casa, no invertirás todo el dinero en una sola pared, solo
porque parte de ella se haya derrumbado. Puedes reforzar el punto débil, pero con-
tinuarás con su construcción planeada, cuidando que especialmente los cimientos
sean mejorados y ahorrando, para que los futuros impactos sean mínimos y no
afecten a todo el edificio ¡El plan dado por la misión es un plano de los cimientos!
Los problemas que se arrastran, aquellos que no son inmediatamente visibles,
durarán mucho más allá de cualquier período de gobierno, pero son mucho más
peligrosos para el bienestar de Colombia que incidentes aislados como la crisis de
la coronavirus (o del zika hace unos años - vea lo que pasó con ella). Los problemas
que se arrastran no aparecen en los titulares o rara vez llegan a los medios de
comunicación, como la falta de educación o el fracaso del desarrollo regional.
La pérdida de biodiversidad se nota pero se convierte en la nueva normalidad. Incluso
el cambio climático en su mayor parte solo aparece en los titulares si ocasionalmente
aparecen efectos meteorológicos severos, pero es al menos más visible porque tiene
el potencial de destrucción del planeta. A largo plazo, las consecuencias de estos
358
5. Bioeconomía en la post-pandemia
Elizabeth Hodson de Jaramillo
Profesora emérita Pontificia Universidad Javeriana.
Miembro Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales
Guy Henry
Economista agrícola, y delegado regional para América Latina, cirad, France
Silvia Restrepo
Vicerrectora de Investigación y Creación, Universidad de los Andes
De acuerdo con los análisis globales iniciales del post-covid-19, parece haber consenso
en que una de las lecciones más evidentes es la importancia fundamental de la
producción y comercio sostenibles —cadenas agroalimentarias con sostenibilidad—
a nivel local y regional, lo cual destaca la relevancia de la bioeconomía que se
propone con un modelo de desarrollo territorial. Es un hecho que la agricultura
y el sistema alimentario van a ser consideradas como actividades estratégicas de
interés público nacional y que probablemente van a contar con más apoyo no solo
de todos los órganos del Estado y sus políticas, sino también de toda la sociedad
en general. Se plantea el fortalecimiento y la integración a nivel local de los
diversos sistemas productivos y la adición de valor a los recursos en un contexto
de sostenibilidad social, ambiental y económica. Se trata de interconectar diversas
actividades productivas y económicas y así establecer verdaderas redes de valor de
los productos para su valorización “in situ” con los consiguientes beneficios para
las comunidades y empresas así como para el bienestar de la población. El marco
360
y abióticos y de uso tradicional para darles valor agregado in situ y promover la
resiliencia. En forma paralela es necesario trabajar de la mano de economistas y
administradores con el fin de hacer más eficientes las redes de valor circulares, y
agilizar así la logística de distribución de todos los productos y subproductos de
los sistemas agroalimentarios.
La crisis climática es una de las mayores amenazas que enfrenta la humanidad
actualmente y se están evidenciando sus consecuencias. El cambio climático, la
destrucción y la degradación de los ecosistemas son la razón principal de la pérdida
de la biodiversidad, y es claro que constituyen una amenaza para el desarrollo y la
calidad de vida, facilitando la presencia y proliferación de zoonosis que afectan a
la población. La incidencia de contagios de una zoonosis ocurre como resultado
de complejas y delicadas interacciones entre ecosistemas naturales y humanos,
en condiciones socioeconómicas y estructurales que determinan si la zoonosis se
convierte en un brote, en una epidemia o en una pandemia. La deforestación, la
fragmentación del hábitat, la reducción en diversidad genética y el espacio reducido
para animales salvajes son factores relacionados con esto. Hay algunos trabajos que
demuestran esta correlación y sería muy oportuno y estratégico iniciar un proyecto
piloto en Colombia con el fin de monitorear los cambios en la biodiversidad —animal
y vegetal, dada su complementariedad—, así como la integridad de los ecosistemas
que podrían dar noción de lo que está ocurriendo y encontrar los puntos críticos.
Se requiere el estudio de aquellas poblaciones que debido a las actividades humanas
se ven altamente favorecidas en detrimento de otras, y facilitan el acercamiento
a las poblaciones humanas y se convierten en focos de transmisión de zoonosis.
Para impulsar este nuevo enfoque que requiere el país, la biotecnología es
la herramienta fundamental para conservar y adicionar valor a los recursos bio-
lógicos a través de su transformación y ha permitido avances innovadores en la
producción y sostenibilidad agrícola. Es una convergencia tecnológica en la que la
biotecnología es un elemento dinamizador que facilitará nuevas oportunidades de
emprendimientos a nivel regional.
El trabajo en el territorio comienza con la organización de una plataforma de
diálogo con los actores para, con ellos avanzar en la reflexión y los análisis nece-
sarios para la formulación de una estrategia de bioeconomía. La mejor alternativa
para la definición de estrategias y soluciones en este tipo de desarrollo y afianzar
Objetivos generales
362
climáticamente inteligente. La agricultura no debe ser vista per se sino
como un sistema agroalimentario sostenible integral en cadenas o
redes holísticas circulares, participativas e inclusivas.
2. El reposicionamiento de la actividad agropecuaria como sector
determinante para la recuperación de la economía mundial es
fundamental para preservar la seguridad alimentaria y nutricional
(san) y el desarrollo social, sin embargo con un enfoque integrado de
“sistema alimentario”.
3. Reconstrucción del tejido social en el espacio rural. Si respetamos la
economía circular, reconstruiremos el tejido social, promoveremos
el bienestar regional y se puede reducir la tasa de migración a las
ciudades. Para ello también es indispensable fortalecer el acceso de
toda la comunidad a las redes y a los avances en telecomunicaciones e
informática (conectividad).
Las propuestas pospandemia, derivadas de los retos y misiones que se su-
gieren como prioritarias son:
• Convocatorias de Colombia-Bio con énfasis en bioprospección para el
desarrollo de bienes y servicios con valor agregado, como fundamento
para las de bioeconomía.
Conclusión
364
6. La ciencia, la tecnología y la
innovación como constructoras
de un futuro diferente
Juan Benavides
Coordinador del foco de Energía Sostenible
366
fractura operativa y logística de las pymes, la dislocación de los ecosistemas de
emprendimiento, la ausencia de usos productivos de la digitalización y la banda
ancha, y el déficit de talento y formación en nuevas tecnologías. Hay una estrecha
ventana de tiempo para no caer en la trampa de la economía de subsistencia o del
retorno automático al pasado.
Algunos analistas opinan que, en la crisis, lo urgente ha barrido lo estructural.
En ciencia, tecnología e innovación —por lo menos— esta percepción es profun-
damente errada. Todo lo contrario. La implementación de las medidas de corto
plazo es complementaria y potencia el desarrollo concurrente de las iniciativas de
largo plazo propuestas por la Misión Internacional de Sabios 2019. Por ejemplo, la
recuperación verde y la bioeconomía configuran un continuo de oportunidades en
el tiempo. El desarrollo de la biomedicina se apoyará en la plataforma crítica para la
cuarta revolución industrial que se empezaría a construir con un plan de choque de
conectividad inteligente de la economía. La gran velocidad de los cambios ocurridos
nos puede acercar a la frontera tecnológica, si se toman las medidas correctas. El
futuro y la tecnología llegaron aceleradamente, por fuerza.
368
Figura 1. Se proyecta una expansión de cobertura en internet en Colombia hasta lograr
Arquitectura que el 90 % de la población tenga una buena conectividad. Si bien esto es una
crítica para la
oportunidad visión a largo plazo, horizonte 2030, para una Colombia equitativa, la cobertura
global de deberá ser del 100 % con velocidades 4g o mayores. Con lo anterior, todos los
Colombia. colombianos (capa beneficiaria) tendrán acceso y podrán contribuir o participar de
los beneficios de la teleeducación, telemedicina, teletrabajo, inclusión financiera,
acceso a energía y electricidad de bajo costo, datos e información inteligente (Smart
data), agricultura inteligente (Agritech), nuevos negocios y servicios de alto valor
agregado, emprendimientos digitales, entre otros.
Además, cumpliendo con la propuesta de una capa de identificación digital,
con la debida protección en términos de privacidad y seguridad, Colombia está en
proceso de asignar una identificación o cédula digital a cada ciudadano. La cédula
incluirá la historia clínica y datos biográficos de la persona. Actualmente se asignan
identificaciones digitales a los que llegan a la edad requerida y por reemplazo de
la cédula o duplicado. Incentivos deben darse de tal manera que los colombianos
deseen formar parte de este nuevo método, y así, el 100 % de la población tendrá una
Inversión
(Fundacional)
Capa IA + LM + RA + RV + LN + Robótica + Análisis de Big data y
Smart Data + IoT + Algoritmos Cúanticos + Impresión 3D +
de valor Desarrollo de nuevos materiales (nano y bio), sensores
AUDIENCIAS
• Legisladores • Desarrolladores de • Jefes de información IA = Inteligencia Artificial
negocios • Emprendedores LM = Lenguaje de Máquina
• Reguladores
• Arquitectos de plataforma • Comercializadores RA = Realidad Aumentada
• Científicos
• Científicos de datos digitales RV = Realidad Virtual
• Desarrolladores de
tecnología • Académicos • Profesionales LN = Lenguaje Natural
370
desafíos de inclusión, para la niñez que no tiene acceso a conectividad y
dispositivos para ese propósito. Esta es una de las lecciones aprendidas
que nos debe enfocar en la meta de conectividad y educación universal
como derecho básico para una Colombia equitativa.
2. Teletrabajo o Home Office ampliamente implementado en el sector privado
y público a través de plataformas como Google Meet, Microsoft Teams,
Zoom, Skype, Webex, Hangouts, entre otras, las cuales han aumentado
la productividad, con efectos positivos en la reducción del impacto
ambiental por la menor cantidad de desplazamientos en las ciudades.
3. Nuevas Plataformas de domicilios para generar ingresos, tales como, iFood,
Domicilios.com, Uber Eats, Merqueo, Brochero, tiendacercanapostobon.
com y otras. La primera plataforma de amplia penetración en Colombia
fue Rappi.
4. Aplicativos o herramientas para detectar y monitorear casos de covid-19
para mitigar el impacto de la pandemia.
5. Fabricación de desinfectantes, alcohol etílico e isopropílico (ipa) y
alcohol glicerinado, por parte de las licoreras e ingenios, por ejemplo,
Fábrica de Licores de Antioquia (fla) en Medellín e ingenios azucareros
en el Valle del Cauca.
6. Fabricación de respiradores artificiales por la alianza Haceb —electrodo-
mésticos—, eia (Escuela de Ingeniería de Antioquia), Industrias Médicas
Sampedro con apoyo de Ruta N, Postobón, bid y Bancolombia, entre
otros.
7. Fabricación de tapabocas reutilizables por las empresas textileras y de
confección, por ejemplo, Familia, Grupo Crystal: gef, Punto Blanco, Bay
Fresh, Galax y otras.
8. Fabricación de trajes de bioseguridad por las empresas textileras Fabricato,
Coltejer, Grupo Crystal, entre muchas.
Finalmente, es necesario enfocar una política pública inteligente para habilitar
las recomendaciones entregadas por la Misión de Sabios en diciembre 5 de 2019,
así como otras recomendaciones mencionadas en este epílogo.
372
debido a la quema de combustibles fósiles y a la deforestación, está afectando la
biodiversidad global y favoreciendo la expansión de virus y bacterias.
Así las cosas, la deforestación está en la raíz de las dos amenazas existenciales
más urgentes para la humanidad y para la vida en el planeta: (1) aumentando
el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas y las pandemias (actual y
futuras), al aumentar los contactos entre los humanos y los animales silvestres, y
(2) agudizando los impactos del cambio climático debido a la emisión de co2 a la
atmósfera y a la pérdida de enfriamiento evaporativo. La actual pandemia ha puesto
en evidencia que la salud humana y la salud económica dependen directamente de
la salud ecológica del planeta. Estas razones deberían bastar para prohibir y penalizar
la deforestación a escala global. En un trabajo incluido en el Volumen No. 3 de las
recomendaciones de la Misión, demuestro los efectos hidrológicos, climáticos y
biogeoquímicos de la deforestación en Colombia y en la cuenca amazónica (Poveda,
2020). Pero los impactos de la deforestación van mucho más allá, dado el papel
fundamental de los bosques y de todos los biomas en la evolución de la vida, en la
salud de los ecosistemas, en la conservación de la biodiversidad, y en su relación de
doble vía con el clima y el ambiente, a través de los intercambios de agua, energía
y carbono, a escalas local, regional, continental y planetaria.
Una de las propuestas del foco de Bioeconomía, Biotecnología y Medio Ambiente
de la Misión (Volumen No. 1) fue la de cambiar el actual modelo de desarrollo
del país, basado en la explotación de recursos naturales no renovables, incluyendo
los combustibles fósiles, y productos agrícolas primarios, para dar un salto hacia
la Bioeconomía, aprovechando la extraordinaria biodiversidad de Colombia, y
que mediante la utilización de las biotecnologías, permita garantizar la seguridad
alimentaria, así como descubrir, inventar, construir y diseñar materiales, productos,
procesos y servicios de muy alto valor agregado (Misión Internacional de Sabios,
2020, 216). Además, el desarrollo de la bioeconomía debe ser la política pública
clave para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ods), así como
para el logro del desarrollo integral sostenible e inclusivo de las distintas regiones
del país, y para el bienestar de sus comunidades. Este enfoque incluye no solo el
uso sostenible de los recursos naturales de Colombia, sino que también requiere
del conocimiento de la biodiversidad para la conservación y restauración de los
ecosistemas del país, y la implementación de sistemas productivos sostenibles de
Tabla.1. Cambios
Cambio relativo del Contribución a
sectoriales
CAMBIO sector en relación la disminución en el nivel de
SECTOR
con 2019 global de CO2 actividades y
Actividades (%) Mt CO2 por día Porcentaje Porcentaje
en las emisiones
diarias de co2
-17 [11-25), hasta el 7 de
Total dependiendo de -17 [-11 a -25) -17% (-11% a -25%) abril de 2020 en
distintas suposiciones
comparación con
Aviación –60% (–44% a –76%) -1,7 (-1,3 a -2,2) -60% (-44% a -76%) 9.7%
el mismo periodo
de 2019. La última
Transporte columna muestra
Terrestre y –36% (–28% a –46%) -7,5 (-5,9 a -9,6) -36% (-28% a -46%) 43% la contribución
Marítimo
de cada sector en
Industria –19% (–10% a –29%) 4,3 (-2,3 a -6,5) -19% (-10,1% a -29%) 25% el cambio total
absoluto en las
Sector Público –21% (–8,1% a –33%) -0,9 (-0,3 a -1,4) -21% (-8,1% a -33%) 5,1% emisiones de co2.
Fuente: Le Quéré
Generación de
–7,4% (–2,2% a –14%) -3,3 (-1,0 a -6,0) -7,4% (-2,2% a -14%) 19% et al. (2020).
electricidad
Sector
+2.8 (–1,0 a +6,7) +0,2 (-0,1 a +0,4) 2.8% (-1,0% a +6,7%) -0,9%
Residencial
374
El confinamiento humano, el cierre de fábricas, las restricciones de viaje, y
el cierre de ciudades, con la consecuente descontaminación de aires y aguas han
dado lugar a una benéfica recuperación de la vida silvestre y a una mejora en la
calidad del aire, aunque en los países pobres ha dado lugar a una sobre-caza ilegal
de grandes mamíferos. No es posible hacerse ilusiones con estos alivios ecológicos
temporales, ya que no responden a cambios estructurales sino a cambios obligados
de comportamiento. Además, otro daño colateral de la covid-19 es otra pandemia de
contaminación por plástico, debido a la fabricación, uso y disposición de material y
equipo de protección personal —guantes, máscaras, cubiertas para la cara, visores,
gafas, ropa, batas, delantales, cubiertas para la cabeza y para los zapatos, etc.—.
Otros problemas ambientales de la pandemia se refieren al crecimiento del 65 %
en el comercio electrónico con respecto al año anterior, así como por el aumento
en los servicios a domicilio de alimentos y bebidas, todo lo cual viene empacado
en plástico. Otro efecto de la pandemia es la caída del precio del petróleo, lo que
ha reducido los costos de producción de artículos de plástico y menos atractivo
el uso de materiales y productos reciclables. Ese plástico terminará en rellenos
sanitarios o incinerado. Los lixiviados de los rellenos sanitarios terminan en los
acuíferos, en los ríos, en las islas de plástico de los océanos y en sistema digestivo
y respiratorio de las especies marinas. Además, la incineración del plástico causa
contaminación atmosférica y cáncer.
Tampoco es posible ilusionarse por el momentáneo mejoramiento de la calidad
del aire por la disminución en las emisiones de co2 a la atmósfera. Es muy probable
que en la post-pandemia las emisiones de gases de efecto invernadero retomen las
tendencias crecientes de los últimos años o sean aún mayores, lo cual nos conducirá
a un calentamiento de la Tierra por encima de 2 °c —fácilmente 4 °c— con respecto a
promedios preindustriales. Nueve de los quince principales elementos que mantienen
estables el sistema climático del planeta ya han sido alterados sin retorno (Lenton et
al., 2019), lo que nos pone frente a un efecto dominó en cascada de consecuencias
desastrosas, y que pone en riesgo a la civilización humana y a muchas especies
vivas. Es hora de actuar ya para detener esta crónica de desastres anunciado, no
solo por lo tozuda realidad de los efectos nefastos del cambio climático, porque sus
duras consecuencias están afectando la vida y causando sufrimiento a millones
de seres humanos en la actualidad, sino porque además está de por medio la vida
376
obligado por la pandemia permiten vislumbrar el futuro; manifestaciones del sín-
drome de abstinencia de una sociedad global adicta a un hiperconsumismo que ha
sido mercadeado falsamente como paradigma de calidad de vida y bienestar, y que
para ser satisfecho demanda hoy un consumo de recursos como si hubiera cuatro
planetas Tierras, lo cual es insostenible por razones obvias.
¿A qué “normalidad” vamos a retornar? Si las recientes movilizaciones sociales
en Colombia demandaban, entre otras cosas, mejoras a la educación pública en
todos los niveles, ¿cómo atenderemos hoy la educación virtual que exige a los niños
y jóvenes tener computador, conexión a internet, redes de wifi, y padres dispuestos
a acompañar los procesos pedagógicos, mucho más en sectores urbanos y rurales
de alta pobreza, falta de recursos y violencia? Lo mismo ocurre desde la perspectiva
de maestros y docentes, para tocar solo un tópico del tema educativo. ¿Cómo
vamos a paliar los impactos económicos del desempleo masivo y de la parálisis de
casi todos los sectores por causa de la pandemia? ¿Cómo vamos a enfrentar los
impactos psicológicos, psiquiátricos y neurológicos del confinamiento y aislamiento
obligados por la pandemia? Es obvio que para enfrentar tales retos se requieren
grandes recursos económicos. La situación actual puede darnos pistas de cómo va
a ser el futuro cercano.
Para el efecto, examinemos el desempeño de diversos países del mundo, y en
particular de América Latina, en relación con los recursos económicos invertidos
para paliar los impactos socio-económicos derivados de las medidas de salud pública
contra la pandemia, así como para sostener el bienestar público. Los paquetes
económicos incluyen medidas fiscales, monetarias y financieras (Gourinchas, 2020).
El trabajo de Elgin et al. (2020) ha propuesto y estimado el Índice de Estímulo
Económico covid-19 (cesi, por su acrónimo en inglés), el cual permite comparar
de manera estandarizada las medidas económicas tomadas por 166 gobiernos del
mundo para paliar los impactos socio-económicos de la pandemia. En la Tabla 2
se presentan algunos de los resultados de dicho trabajo, incluyendo los primeros
20 países en cuanto al valor del cesi, así como algunos países de América Latina y
algunos del Caribe. Como vemos, Colombia ocupa el lugar 135 entre 166 países
en cuanto al valor del índice cesi, y penúltimo en América Latina y el Caribe,
superando únicamente a Surinam. Este desempeño de Colombia amerita una
profunda reflexión.
Tabla 2. Paquetes
RECORTE
MACRO- ÍNDICE DE de políticas
FISCALES DE TASAS DE
POSICIÓN PAÍS FINANCIERAS ESTÍMULO económicas de
(% pib) INTERÉS
(% pib) (cesi) varios países del
(%)
mundo destinados a
1 Bahrain 5,3 52,27 26 4,85 paliar los impactos
2 Oman -2,5 60 25,09 3,61 socio-económicos
de la pandemia y
3 Sweden 9,2 73,33 9,45 3,58 valor del Índice de
4 Austria 17,8 0 7,31 3,34 Estímulo Económico
covid-19 (cesi)
5 Malta 12,3 0 13,31 3,28
Editada a partir
6 Luxemburg 15,6 0 7,31 2,99 de Elgin et al. (2020).
7 United States 10,5 100 0 2,97
8 France 15,3 0 7,31 2,94
378
RECORTE
MACRO- ÍNDICE DE
FISCALES DE TASAS DE
POSICIÓN PAÍS FINANCIERAS ESTÍMULO
(% pib) INTERÉS
(% pib) (cesi)
(%)
9 New Zealand 5,4 75 8,86 2,91
10 UK 2,5 86,67 9,09 2,69
11 Qatar 13 43,73 1,43 2,55
12 Belgium 12,3 0 7,31 2,46
13 Malaysia 16,22 9,09 0,2 2,27
14 Germany 4,8 0 12,49 1,96
15 Canada 6 57,14 2,6 1,82
16 UAE 1,8 62,5 6,7 1,81
17 Australia 9,7 0,67 4,71 1,69
18 Estonia 7 0 7,71 1,66
19 Iceland 7,8 43,18 1 1,55
20 Slovenia 6,6 0 7,31 1,54
34 Chile 4,7 42,86 1,36 0,78
42 Honduras 2,2 14,29 2,8 0,46
48 Panama 3,25 0 2 0,26
56 Peru 0,78 44,44 0 0,14
59 Brazil 3,5 28,46 3,17 0,09
60 Guatemala 1,57 18,18 0 0,05
68 Costa Rica 0 44,44 0 -0,14
74 Paraguay 6,5 18,75 0 -0,23
82 Bolivia 0,46 0 1,18 -0,3
86 El Salvador 1,34 0 0 -0,32
90 Argentina 1 5 0 -0,35
91 Belize 1 0 0 -0,37
* Sobre fondo gris se resaltan algunos países de América Latina y el Caribe. La primera
columna denota la posición en el ranking de 166 países analizados. Los paquetes de
diversas políticas económicas se indican así: medidas fiscales como porcentaje del pib
(columna 4), medidas de política monetaria que incluyen dos variables como recortes en
tasas de interés por las autoridades de política monetaria, como porcentaje de las tasas
vigentes en febrero 1 de 2020 (columna 5), y el tamaño del paquete macrofinanciero
como porcentaje del pib (columna 6). El índice cesi se muestra en la última columna.
Agradecimientos
Agradezco a la Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín, y en especial
a la Facultad de Minas y al Departamento de Geociencias y Medio Ambiente,
por apoyar mis investigaciones y mi participación en la Misión Internacional
de Sabios 2019.
380
Referencias
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básica para preservar la biodiversidad y desarrollar la bioeconomía. En: Colombia
hacia una Sociedad del Conocimiento. Volumen 3. Misión Internacional de Sabios
2019, Bogotá [En prensa]
382
a que el país debe enfocarse desde ya en desarrollar la ciencia y la educación, para
hacer sostenible cualquier estrategia de desarrollo. Debemos reconstruir nuestra
economía, fracturada por la coincidencia entre la pandemia y la debilidad de unas
cadenas de valor ligadas a los sectores industrial y agrario, afectadas durante dos
décadas por políticas económicas que han favorecido la captura de rentas y no han
logrado erradicar la informalidad, y una escasa valoración del conocimiento y de
las posibilidades de la ciencia y la tecnología para dinamizarlas (la productividad
total de los factores tuvo crecimiento cero en los últimos 20 años).
La prioridad en este momento debe estar en el reto de la equidad. La abismal
agudización de la desigualdad económica, digital y social es el primer problema
que hay que enfrentar, y debemos hacerlo, en el corto plazo, con la audacia que
han tenido otros países latinoamericanos y de otros continentes, redistribuyendo
el ingreso para evitar el hambre y para cambiar la estructura de la demanda. La
falta de ingresos de los más pobres ha hecho que el hambre se dé mientras algunos
sectores campesinos no encuentren quién demande sus productos. Si no se da esa
restructuración del ingreso y de la demanda, la economía corre el riesgo de quedarse
con una herencia de altas tasas de desempleo y a la vez de inflación.
A mediano y largo plazo, nuestra capacidad de enfrentar los retos de equidad,
productividad y diversidad bio y cultural dependen de que aseguremos el acceso
universal a una educación de calidad, porque si no es de calidad no contribuye a
cerrar brechas, como se ha mostrado en las investigaciones de Stanislas Dehaene,
miembro de la Misión; y de que tengamos un sistema de ciencia robusto y articulado
con los sectores productivos.
Sin una educación para todas y todos, especialmente en los niveles de 0 a 5
años y en la media, no son sostenibles el alto crecimiento de la productividad ni
el aprovechamiento industrial de nuestra biodiversidad. Como lo muestra la expe-
riencia de los países que han vivido períodos largos de altas tasas de crecimiento y
avances importantes en su desarrollo humano, la formación profesional y técnica
debe reposar sobre la base de una educación básica y media de sólida fundamen-
tación científica.
La pandemia ha comenzado a darnos lecciones que coinciden y se entrelazan
con las propuestas de la misión:
384
9. La cultura es un patrimonio de inmenso valor para enfrentar cualquier
amenaza que se cierna sobre nuestra sociedad.
10. Nuestro sector energético tiene que transformarse y solo sobrevivirá
a partir de grandes inversiones en investigación de base y aplicada,
y no abandonándola. Y nuestro sector agrícola debe ir hacia la
fórmula de química verde más biorrefinerías, para asegurar un sistema
agroindustrial alimentario sostenible.
11. A pesar de la múltiple crisis que en dos meses ha borrado avances
de nuestra sociedad logrados en décadas, es posible ofrecerle un país
renovado a la generación de colombianas y colombianos que cumplirán
18 años en el 2042, como es la meta que la Misión le ha propuesto a
Colombia. Para dar el primer paso, la Misión ha propuesto un conjunto
de proyectos piloto experimentales, que les estamos proponiendo
liderar al gobierno, al sector privado, a las organizaciones sociales y
muy especialmente a las regiones, para experimentar en unos cuantos
pequeños municipios o en sectores de algunas ciudades, porque solo
un pacto de esta naturaleza podrá superar la crisis en tiempo razonable
y hará posible ese país que queremos para nuestras niñas y niños.
Los objetivos de largo plazo que se ha propuesto la Misión plantean desafíos
en la formación de niñas y niños, de adolescentes y de los 200 000 maestros
adicionales que requerimos para universalizar con calidad la educación media
y la de 0 a 5 años, así como en la recalificación de los maestros actualmente en
ejercicio. Nuestro sistema educativo debe articularse, flexibilizarse, romper las
fronteras disciplinarias, abrirle la puerta a la educación artística y a la hiper-
humanización en un mundo digital y virtual. De esa manera podremos formar
seres situados, capaces de pensar con criterio propio, de cooperar, de pensar en
las consecuencias de sus acciones, de construir conocimiento nuevo, de crear
estéticamente y de investigar. Debemos acompañar a nuestros educandos en
la construcción de su capacidad de agencia, abrir espacios para su desarrollo
socioemocional y deslegitimar la violencia, para que puedan actuar frente a la
incertidumbre y redefinir la forma en que vivimos. Y nosotros, sus maestros,
debemos transformarnos como personas y como maestros.
Agradecimientos generales
390
Velásquez, Rector de la Universidad de La Sabana y participantes en el foro In-
dustria-Universidad; Fanor Mondragón, accefyn; Camilo Yunes, vicerrector
Sede Manizales, Universidad Nacional de Colombia; profesores y estudian-
tes voluntarios que contribuyeron en la Organización del Foro de Ciencias
Básicas y del Espacio. Todos los participantes en nuestros foros y reuniones,
quienes respondieron nuestras encuestas, y los miembros de gobiernos de-
partamentales y locales que discutieron con los comisionados del foco.
392
Margarita Ronderos, Universidad Javeriana; Esther de Vries, directora del
programa de Doctorado en Epidemiología Clínica en la Javeriana; Ángela
Ruiz, profesora y directora del Grupo de Investigación Clínica Universidad
del Rosario; Gloria Sánchez, profesora y coordinadora del Grupo Infección
y Cáncer, Universidad de Antioquia; Lyda Osorio y Lena Barrera, profesoras
de Salud pública Universidad del Valle; Marion Piñeros y Armando Baena,
epidemiólogos en el iarc, Lyon; Maciej Orkisz, profesor de la Universidad de
Lyon, coordinador con la Universidad de los Andes y Javeriana; Eduardo Dávila,
Ingeniero de cnrs en ciencias de la computación Creatis; José Luis Méndez;
Asociación de Industrias Farmacéuticas Colombianas (Asinfar); Cámara de
la Industria Farmacéutica de la Asociación Nacional de Industriales (andi);
Elkin Echeverry; Yessica Gutiérrez; Jorge Areiza (Ruta n); Salim Mattar
(Universidad de Córdoba); Carlos Corredor (Universidad Simón Bolívar);
Hernando Baquero; Pedro Javier Villalba (Universidad del Norte); William
Reyes; Susan Benavides Universidad de Santander (udes); Gabriel Jaime
Tobón (Universidad icesi); Norma Serrano (Fundación Cardiovascular
de Colombia); Luis Guillermo Restrepo Vélez (Universidad del Rosario);
Academia Nacional de Medicina de Colombia; Instituto Nacional de Salud;
Instituto Nacional de Cancerología; Instituto de Evaluación Tecnológica
en Salud; Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos
(Invima); Organización Panamericana de la Salud.
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Nicolás Carrizosa (Secretaría Distrital de Desarrollo Económico); Fernando
Vicario (Organización de Estados Iberoamericanos); Javier Machicado
(Consultora Lado B); Julián Riatiga (Dirección Nacional de Derecho
de Autor); Fabián Dangond (Gobernación del Cesar ); Giovanny Peña
Betancur (Redecon); Antonio Cortés (Gobernación de Cundinamarca);
Diego García Reyes (Bogotá Design Festival); Juan Carlos Gaitán (Prana);
César Sánchez y Betsy Gelves (Comisión Gestora Plan Decenal de
Educación); Yesid Bernal (Ministerio de Tecnologías de Información y
Telecomunicaciones); Lina Parra (Sala del Ocio y la Fantasía, sofa; Carlos
Reyes (igda); Dilia Robinson, Joseph Dan Bush Murillo, Elkin Robinson
y Louis Gregory Robinson (Isla de Providencia); Gloria Patricia Zapata
(Ministerio de Educación); Cesar Augusto Zambrano (Universidad del
Tolima); Raiza Deluque y Roberto Hinestroza (Consejería de Juventudes);
Lina Arbeláez (pnud); Leticia Gennes (World Entrepreneurs); Juan Diego
Ortiz (Asanfe); Alcaldía de Villa de Leyva, Instituto Técnico Central (itc);
Jorge Mario Bergoglio (ied); Uniandinos; Fundación Universitaria Juan N.
Corpas; Corporación Universitaria Minuto de Dios (Uniminuto);
Universidad Pedagógica Nacional; Universidad Pontificia Bolivariana;
Lasalle College Institute (lci); Institución Universitaria Pascual Bravo;
Universidad Externado de Colombia; Orquesta Filarmónica de Bogotá;
Universidad del Rosario; Universidad Jorge Tadeo Lozano; Universidad
Antonio Nariño (uan); Universidad de Boyacá; Corporación Universitaria
Unitec; Arcadia Sonora; Secretaría de Cultura de Sopó; Universidad de San
Buenaventura; Corporación Lidérate; Corporación Escuela de Artes y Letras;
Universidad Santo Tomás; Mola Hub Moda Sostenible; Tarpui; Comisión
Profesional de Diseño Induvstrial; Premio Lápiz de Acero; Ascun; Curupira
sas; Universidad Tecnológica de Pereira; Colegiatura Colombiana; Dirección
de formación profesional sena; Designall, Art Not SAS; Colpensiones;
Connect Bogotá Región; Polifonía – Escuela Reúsate y Platzi.
Diego Torres, Cecilia María Vélez, Margarita Peña, Isaac Dyner, Ingrid Paola
Barragán, Martha Cortés, Luz Estela Gómez, Luz Piedad Arrigui, María del
Pilar Blandón, Paola Noreña, Carl Langebaek, Jorge Molina, Manu Forero
Shelton, Tatiana Rey, Enrique Forero, Marcela Macías, capitán de navío
(r) Francisco Arias, Jesús Antonio Garay, Sandra Rincón, Paula Cristina
Sierra, David Alonso, Luz Marina Mantilla, Carlos Alberto Mendoza,
Edwin Agudelo, Adriana Santos, Néstor Campos, Sven Zea, Arturo Acero,
Ernesto Mancera, Claudia Vaca, Luisa F. Dueñas, vicealmirante (r) José
William Porras, Señor Almirante Mauricio Soto, Señor Almirante Edgar
Romero, capitán de navío (r) Ricardo Ariza, capitán de navío (r) Carlos
Alberto Andrade, Señor contralmirante Francisco Hernando Cubides,
capitán de Fragata Alejandro Rueda, capitán de corbeta Julio Monroy,
teniente de navío Diana Sánchez, Capitán de Navío Juan Camilo Forero,
Mónica López, Carlos Alberto Ramírez, Juanita Goebertus, Iván Agudelo,
Luis Fernando Barrios, Luis M. Manjarrés, Juan Mayorga, Juan Carlos
Alonso, José Saulo Usma, Luz Stella Gómez Giraldo, Luis Fernando Gómez,
Analinda Torres, Gina Ortiz, Hilayalith Rodríguez, Ana Carolina Barrera,
Nicolás Bustamante, Edwin Agudelo.
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