StanDeclercq Con Cuadro y Correcciones
StanDeclercq Con Cuadro y Correcciones
StanDeclercq Con Cuadro y Correcciones
Stan Declercq*
Escuela Nacional de Antropología e Historia
Resumen: En este artículo elaboramos, con base en fuentes históricas, una tipología de com-
plejos sacrificiales y antropofágicos de los antiguos nahuas del Postclásico Tardío, según el tipo
de víctimas y sus beneficiarios. Presentamos un esquema que figura, de manera hipotética, la
fragmentación y la distribución de los cuerpos de estas víctimas. Proponemos una explicación
que radica en la “descentralización” de los cuerpos de las víctimas de guerra, es decir, del centro
ceremonial principal (el Templo Mayor para el caso de los mexicas tenochcas) hacia los calpulli de
los guerreros captores, o, en su caso, de los esclavos “bañados” hacia la residencia de sus dueños.
Se espera que la información histórica ayude a corroborar la información de los contextos arqueo-
lógicos referentes al canibalismo en el México antiguo y que las descripciones de los distintos
tratamientos sean —hasta cierto punto— detectables en el análisis de los restos óseos y sirvan
como indicadores para entender los patrones de deposición final.
Abstract: In this article we elaborate a typology of Aztec sacrificial and cannibalistic ritual
clusters, according to broad categories of victims and their beneficiaries. Based on early colonial
historical data, we present a table that reflects the hypothetical fragmentation and distribution of
the victim’s corpses. We propose an analysis that could explain the absence of multiple postcra-
neal human deposits at the Templo Mayor, by suggesting a mechanism of decentralization of the
bodies, away from the ceremonial center to the calpulli (a local unit of a city) and to the residential
* stan_declercq@hotmail.com
compounds. Ultimately, the information derived from written sources might help to understand
bone assemblages of extra funerary nature in archaeological deposits, which could be related to
cannibalistic behavior. Historical descriptions of ritual body treatment might give some clues of
complex deposition patterns.
Introducción
Mayor hacia los calpulli de los guerreros captores u otros beneficiarios.1 He-
mos elaborado un esquema (tabla 1) que representa de manera hipotética
la circulación de los cuerpos de las víctimas sacrificiales y antropofágicas y
sus formas de deposición.2 A lo largo del texto, comentaremos en detalle las
distintas secciones de esta tabla.
A través de una lectura de las fuentes históricas es posible hacer una
reconstrucción del contexto sistémico, en particular de las distintas modi-
ficaciones culturales del cuerpo. Esperamos que la información histórica
pueda ayudar a corroborar la información de los contextos arqueológicos
referentes al canibalismo en el México antiguo y que las descripciones de
los distintos tratamientos sean —hasta cierto punto— detectables en el aná-
lisis de los restos óseos y sirvan como indicadores para entender los patro-
nes de deposición final.3 Por supuesto, se trata de un ejercicio con un resul-
tado incompleto y en todo caso se limitará en algunos posibles escenarios.
Hemos dividido los tratamientos sacrificiales y antropofágicos en
“complejos rituales”, según el tipo de víctimas.4 La tipología de víctimas y
sus respectivos consumidores es posiblemente único en el continente. Los
mesoamericanos no comían a los fallecidos de su propio grupo, sino con-
sumían la carne de un individuo ajeno a la propia comunidad [Díaz del
Castillo 1977: ii, 65, Torquemada 1975-1983: ii, 312, Orozco y Berra véase
Alvarado Tezozómoc 1975: 368].5 Grosso modo, se trata de prisioneros o víc-
timas de guerra y de esclavos. Se entiende que un esclavo, a diferencia de
1
Lockhart [1999: 32] se refiere al calpulli como una parte constitutiva del altépetl, un terri-
torio que a su vez se podía dividir en distritos con cierta cantidad de viviendas
familiares.
2
Presentamos esta tabla en el “iii International Colloquium in Bioarchaeology”, noviembre
del 2018 en Mérida. Agradezco el apoyo de la Dr. Vera Tiesler para su elaboración.
3
La correlación se basa principalmente en resultados de investigaciones arqueológicas
en Mesoamérica con un énfasis en la presencia hipotética de canibalismo: Tlatelcomi-
la. Tetelpan, Ciudad de México, 500-300 a. C. [Pijoan et al. 1997, 1989]; Teopancazco,
Teotihuacan, Estado de México, 150-650 d. C. [Manzanilla 2015, 2017, Alvarado Viñas
2013]; Electra, Villa de Reyes, San Luis Potosí, 350-800 d. C. [Pijoan et al. 1990, 1997];
Cantona, estado de Puebla, 600-1050 d. C. [Rojas et al, 2004, Talavera et al. 2001]; La
Quemada, estado de Zacatecas, 500-900 d. C. [Nelson et al. 2015]; Tlatelolco 14, Ciudad
de México, 1325-1521 d. C. [Pijoan et al. 1997]; Zultepec, estado de Tlaxcala, 1325-1521
d. C. [Botella et al. 2000]; Toniná, Chiapas, 900-1521 d. C. [Ruiz 2020].
4
Cabe señalar que había otros tipos de víctimas sacrificiales que recibían un tratamien-
to post mortem distinto a lo señalado en este estudio.
5
Con esto no pretendemos decir que todas las sociedades eran caníbales [Declercq 2018].
230 Stan Declercq
Canibalismo divino
6
Hemos identificado un grupo de víctimas sacrificiales para el consumo exclusivo de
ciertas deidades como “canibalismo terrestre divino” [Declercq 2018]. No forman parte
del análisis que aquí presentamos (véase más adelante el caso de los ixiptlahuan-tláloc).
Del Templo Mayor al calpulli 231
7
Traducción de García Quintana [Chimalpáhin 2003]: “Auh ynic quintetecque <ynin> ma-
cuiltin ah[no]ç chicuacemintin pipiltin Tlalmanalco. In cecen tlacatl ca ma macuilcan quin-
quixtihque; <in intlac> ynic quintet[ec]que oncan yn toçahcaliuhyan, yn toquechtlan, qu[in]
quehquechcotonque. Yhuan yn nenecoc yn molicçali[uh]yan, yuan y nenecoc yn tlancuaçaliu-
hyan quincotonque, yn intlactlacayo…”
8
Según el Padre Santarén [Alegre 1842: 397-398], los acaxees de Durango no quebraban
a los huesos “sino por las coyunturas despedazan el cuerpo.”
232 Stan Declercq
Consumidor
Sacerdote Consumo de
corazón
(ídem)
Del Templo Mayor al calpulli 233
Captor 1: cuerpo del +cocción con maíz Consumo Señores/caciques Basurero doméstico
cautivo, y el muslo y agua
de carne hervida
aliados: de los distintos cap-
y pierna derecha (brazos y piernas)
(Tlacatlaolli. Sahagún, pedazo de carne? tores. Centro cívico-
Captor 2: muslo y Captor 1: Calpulli/Casa
pierna izquierda 2003, I: 148) Doméstica ceremonial: relleno
Captor 3: brazo Captor 2: Calpulli/Casa de estructuras a nivel
derecho, desde Doméstica calpullis?
el codo arriba Captor 3:
Dispersión múltiple
Captor 4: brazo Calpulli/Casa
de un solo individuo
izquierdo, desde el Doméstica
codo arriba Captor 4 : en distintos contextos
Captor 5: brazo Calpulli/Casa arqueológicos.
derecho, desde Doméstica
el codo abajo Captor 5: Calpulli/Casa +Re-uso(s)
Captor 6: brazo Doméstica +Hueso-trofeo del
izquierdo, Captor 6: Calpulli/Casa captor principal
codo abajo Doméstica
234 Stan Declercq
Centro cívico-ceremo-
nial: relleno
de estructuras o sepul-
tados como ofrendas?
Presencia de restos
óseos descarnados
sin x al fuego
(caso Tlatelolco.
Pijoan, 2019)
Centro cívico-ceremo-
nial: relleno de estructu-
ras o sepultados como
ofrendas? Presencia
de restos óseos descar-
nados sin exposición al
fuego (caso Tlatelolco.
Pijoan, 2019)
236 Stan Declercq
destacan las manos y los pies como parte del manjar de algunos gobernantes.
9
Véase Benavente [2001: 113], López de Gómara [1979: 327], “Relación de Ixcatlan” [rg
1994: 231], “Relación de Poncitlan, Cuiseo” [rg 1988: 185], Relación de Michoacán [Alca-
lá 2011: 59].
10
A Moctezuma le mandaban un muslo [Sahagún 2003: 148, Códice Florentino 1950-1981:
ii, 47].
11
Se trata del mes de Xócotl Huetzi.
12
Véase Graulich [1998: 110] sobre el consumo de corazones por parte del tlatoani.
13
Códice Ramírez [1975: 101], Durán [1984: I, 97], la “Relación de Tepuztlan” [rg 1985a:
187], “Relación de Texcoco” [rg 1986b: 62], Las Casas [1967: ii, 187], Torquemada [1975-
1983: II 242].
Del Templo Mayor al calpulli 237
El modo que tienen de comer los muertos es éste: júntase cuatro o seis ranche-
rías, las más vecinas, y en unas grandes ollas que ellos hacen echan el muerto
hecho cuartos, y déjanle cocer tanto tiempo que, tirando de los huesos, los
sacan blancos, limpios y sin ninguna carne; y éstos guardan en una casa, que
es como la de sus trofeos, para perpetua memoria y ejemplo a los hijos de los
hechos de sus padres y antepasados.
14
Según González González [2011: 285], el significado preciso de tlacatlaolli es “maíz
desgranado de hombre”.
238 Stan Declercq
Cuando cautivaban uno con tres o cuatro personas, el que más se había desta-
cado tomaba el cuerpo del cautivo, y el muslo y pierna derecha, el segundo más
destacado se llevaba el muslo y pierna izquierda, el tercero el brazo derecho, el
cuarto el brazo izquierdo, desde el codo arriba, el quinto brazo derecho codo
abajo, sexto, brazo izquierdo codo abajo.15
15
También Durán [1984: I, 130].
240 Stan Declercq
estas regiones corporales se ubica la mayor cantidad de músculos y los más vo-
luminosos del cuerpo. Esto hace pensar en posible canibalismo. No obstante, la
mayoría de los huesos, tanto de las extremidades como de la cintura escapular
y la pélvica, no muestran evidencias de exposición al calor [Pijoan 2019: 184].
Víctimas de guerra
Esclavos “bañados”
16
En ciertos casos, sabemos que los primeros cautivos eran entregados a los sacerdotes
para su sacrificio en el lugar de la batalla, delante de las estatuas de los dioses [Códice
Florentino 1950-1983: viii, 53, Sahagún 2003: ii, 671].
17
Para una mayor argumentación, véase Declercq [2018]. Para una interpretación distinta
que cuestiona el carácter ritual de estos casos, véase González Torres [1985], Graulich
[2016].
242 Stan Declercq
18
Pueblo de la provincia de Tlaxcala.
19
También Graulich [2016: 205], Códice Florentino [1950-1981: ix, 64].
20
Véase Declercq [2018].
21
También Benavente [2001: 98, 99, 100].
22
Las cursivas son mías. También la “Relación de Cholula” [rg 1985b: 132].
Del Templo Mayor al calpulli 243
silo que para esto tenían”. En el caso de los leprosos cautivos, sacrificados
en el templo de Iztac Cintéotl, encontramos la misma respuesta negativa:
“no eran comidos” [Sahagún, 2003: i, 252]. Pese a esta casi unanimidad, y
por motivos poco claros, en otra parte de su obra, Sahagún [2003: i, 144,
257] y Torquemada [1975-1983: iii, 181] sí señalan el consumo de ixipt-
lahuan-tláloc.
Víctimas diversas
23
“Cannibalism by trickery” [Isaac 2005].
244 Stan Declercq
24
Tradicionalmente, los fragmentos de huesos corrían la misma suerte que las piezas de
cerámica rotas: objetos fragmentados, incompletos y dispersos no recibían la misma
atención que las vasijas completas y decoradas. Estas características deposicionales tipo
“desechos” tradicionalmente descartadas impedían abrir hipótesis acerca de prácticas
de antropofagia.
Del Templo Mayor al calpulli 245
Referencias
25
Comunicación personal, marzo de 2020.
246 Stan Declercq
2003 Séptima relación de las Différentes Histoires Originales, Josefina García Quin-
tana (ed.). unam. México.
Códice Florentino
1950-1982 Florentine Codex. General History of the Things of New Spain. Fray Bernardino
de Sahagún, Charles E. Dibble y Arthur J. O Anderson (trads.). University
of Utah Press. Salt Lake City.
Códice Ramírez
1975 Manuscrito del siglo xvi intitulado: “Relación del origen de los indios que
habitan esta Nueva España según sus historias”. Porrúa. México.
Códice Tudela
1980 Edición de José Tudela de la Orden. Ediciones cultura hispánica del Insti-
tuto de Cooperación Iberoamericana. Madrid.
Cortés, Hernán
2002 Cartas de relación. Porrúa. México.
Declercq, Stan
2018 In mecitin inic tlacanacaquani: “Los mecitin (mexicas): comedores de carne hu-
mana”. Canibalismo y guerra ritual en el México Antiguo, tesis de doctorado.
unam. México.
Del Templo Mayor al calpulli 247