Book Aguas
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Versión impresa
ISBN 978-959-07-0339-3
Félix Varela
Versión electrónica
ISBN 978-959-16-0619-8
Editorial Universitaria
Procesos para el tratamiento de aguas residuales / Carlos Menendez Gutierrez y Jesús M. Pérez Olmo
PRESENTACIÓN
En 1984, los autores, en colaboración con el Dr. Jan Chudoba, del Instituto de
Tecnología Química de Praga, publicaron el libro Fundamentos Teóricos de
Algunos Procesos para la Purificación de Aguas Residuales, con el propó-
sito de que sirviera de apoyo a aquellos profesionales de habla hispana que
realizaban su trabajo de doctorado en la República de Checoslovaquia. Dos
años después se publicó la segunda edición de ese título.
Para continuar supliendo las crecientes necesidades de los profesionales de
este campo de trabajo, los autores publicaron en Cuba en 1991, bajo el título de
Procesos para el Tratamiento Biológico de Aguas Residuales Industriales
un texto enfocado fundamentalmente, tal como indica su título, en los procesos
biológicos para el tratamiento de aguas residuales. Doce años después se pre-
senta esta segunda edición con el mismo propósito.
Como generalmente ocurre, una vez que concluyó la preparación de esta
nueva edición, es que los autores se consideraron en condiciones de iniciar el
trabajo. Esto es consecuencia de la inconformidad natural que se experimenta,
a partir de la convicción de que toda obra humana es perfectible. También esto
forma parte de las enseñanzas que nos legó Jan Chudoba.
La justificación que nos anima ahora, como en las ocasiones anteriores,
estimulados por los resultados ya logrados, es continuar contribuyendo a la su-
peración de los profesionales dedicados a esta esfera de trabajo, con temas
actualizados y expuestos de manera más completa que en la primera edición.
Otra justificación quizás sea el de siempre haber pensado que el camino por
recorrer era más largo del que en realidad ha sido y que sentimos la necesidad
de expresarnos. Ambas justificaciones son igualmente válidas.
Agradecemos a todos los que han colaborado en este nuevo empeño, en
especial a la profesora Julia María Hernández por su apoyo en la preparación de
los materiales, y a nuestras familias por la paciencia manifestada una vez más.
Deseamos dedicar esta obra, que es a su vez un nuevo punto de partida a la
memoria de Jan Chudoba, que sigue estando entre nosotros.
a JAN
III
Ciudad de La Habana : Editorial Félix Varera - Editorial Universitaria, 2007. ISBN 978-959-16-0619-8
Procesos para el tratamiento de aguas residuales / Carlos Menendez Gutierrez y Jesús M. Pérez Olmo
LOS AUTORES
IV
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Procesos para el tratamiento de aguas residuales / Carlos Menendez Gutierrez y Jesús M. Pérez Olmo
ÍNDICE
Ciudad de La Habana : Editorial Félix Varera - Editorial Universitaria, 2007. ISBN 978-959-16-0619-8
Procesos para el tratamiento de aguas residuales / Carlos Menendez Gutierrez y Jesús M. Pérez Olmo
VI
Ciudad de La Habana : Editorial Félix Varera - Editorial Universitaria, 2007. ISBN 978-959-16-0619-8
Procesos para el tratamiento de aguas residuales / Carlos Menendez Gutierrez y Jesús M. Pérez Olmo
VII
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Indicadores de la Contaminación
CAPÍTULO 1
INDICADORES DE LA CONTAMINACIÓN
1.1. INTRODUCCIÓN
Generalmente el nivel de contaminación de las aguas residuales no
se mide a partir del conocimiento de la concentración de los distintos
constituyentes de un agua residual que pueden ser considerados conta-
minantes, sino determinando parámetros globales como son la demanda
bioquímica de oxígeno (DBO) y la demanda química de oxígeno (DQO)
entre otros. En ocasiones, fundamentalmente cuando se trabaja con
residuales industriales, las características de estos son tales que se
requiere conocer constituyentes específicos como los metales pesados,
tensoactivos, fenoles y otros.
En algunos casos, por ejemplo, para la determinación de trazas de con-
taminantes orgánicos en aguas superficiales y para beber, se emplean téc-
nicas analíticas especiales a saber la cromatografía y la espectrometría de
masas.
2
Indicadores de la Contaminación
§ a b 3 · §a 3 ·
C n H a Ob N c ¨ n c ¸ O 2 o n CO 2 ¨ c ¸ H 2O c NH 3 (1.1)
© 4 2 4 ¹ ©2 2 ¹
La diferencia en el contenido de oxígeno al inicio y al final del análisis,
por litro de muestra utilizada constituye la DBO de la muestra expresada en
mg de O2 L± .
Lógicamente la velocidad y extensión a la cual ocurre esta degradación
depende de la temperatura y del tiempo, de ahí que se ha aceptado para
estos dos parámetros 20 o C y cinco días respectivamente, tal como ya fue
expresado.
3
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
dLt
k cLt (1.2)
dt
donde:
Lt: DBO remanente, mg L±.
t: tiempo, días.
k´: constante de velocidad, día±.
Como toda constante de velocidad de reacción, kc es función de la tempera-
tura. Aunque el análisis típico o estándar se realiza a 20 oC el valor de kc puede
calcularse a otra temperatura mediante la relación:
kt k 20 ș T 20 (1.3)
en la que T = 1,056
La integración de la ecuación 1.2 conduce a:
Lt Lo e - kc t Lo10 k t (1.4)
4
Indicadores de la Contaminación
donde:
Lo: DBO última o total de la muestra, mg L±.
k: k´/2,3
Tal como se aprecia en la ecuación anterior, el conocimiento de la DBO
remanente de la muestra en un instante dado exige conocer Lo y k. La determi-
nación de Lt no es lo más común en el trabajo rutinario. Generalmente lo que
más interesa conocer es aquella parte de la demanda bioquímica de oxígeno que
se ha satisfecho en un intervalo de tiempo y a una temperatura dada. Así, si Lo
es la demanda total o última de un agua residual, y Lt es la demanda remanente
en un instante t dado, la demanda satisfecha o ya ejercida (Y) será:
Y Lo Lt DBOt Lo 1 10 k t (1.5)
5
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
sea suministrada, a fin de que la materia orgánica pueda ser degradada y tenga
lugar consumo de oxígeno.
Este aspecto reviste una gran importancia porque puede ocurrir que el agua
residual objeto de análisis contenga bacterias del género Nitrosomonas y
Nitrobacter, las cuales no degradan la materia orgánica, sino que oxidan dife-
rentes formas del nitrógeno con el consiguiente consumo de oxígeno (fenómeno
este denominado nitrificación), y por lo que se falsean los resultados. En las
siguientes ecuaciones se muestra la estequiometría del proceso de nitrificación.
o 2NO 3 2H 2H 2 O
2NH 3 4O 2 (1.7)
6
Indicadores de la Contaminación
7
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
8
Indicadores de la Contaminación
C 6 H12 O 6 6 02
o 6 CO 2 6 H2 O (1.8)
9
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
10
Indicadores de la Contaminación
X2
L (1.9)
2 X Z
1 X
y k log (1.10)
T t ZX
donde:
L: DBO última.
X: DBO en el tiempo t.
Z: DBO en el tiempo T = 2t.
Según Rhame, para t = 10 días, los valores de L y k que se obtienen son
comparables a los que se estiman cuando se usan otros métodos.
En la tabla 1.1 se comparan los valores de la DBO última y la constante de
de-oxigenación para residuales teneros, calculados por diferentes métodos.
11
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
§ y z· y
C x H y O z ¨ x ¸ O 2 o x CO 2 H 2O (1.11)
© 4 2 ¹ 2
4x y 2z
DTO (1.12)
MM
donde:
MM: Masa molecular del compuesto.
Para compuestos que contienen N en su estructura, la ecuación para la
demanda teórica de oxígeno es:
§ y3p z·
Cx H y Oz N p ¨ x ¸ O 2 o x CO 2
© 4 2¹
y 3p (1.13)
H 2 O pNH 3
2
4 x y 3 p 2 z 8
DTO (1.14)
MM
Si además el azufre participa en su composición,
§ y 3 p 2q z·
C X H y O z N p Sq ¨ x 2 q ¸ O2
© 4 2¹
(1.15)
y3p
x CO 2 H 2O p NH 3 q H 2SO 4
2
§4 x y 6q 3 p 2z ·
DTO ¨ ¸8 (1.16)
© MM ¹
12
Indicadores de la Contaminación
El mejor método para determinar la DQO es aquel que arroja valores igua-
les o cercanos a la DTO. Actualmente este método es el estándar del dicromato. 5
Este método utiliza una solución de dicromato de potasio cuya concentración
molar de equivalente es 0,25, en 50 % de ácido sulfúrico. Bajo estas condicio-
nes, con sulfato de plata como catalizador, la mayoría de los compuestos son
oxidados entre 90 y 100 %.6
No obstante, algunos compuestos no son oxidados o lo son solo parcialmen-
te cuando se utiliza el método estándar con dos horas de reflujo. Esto se ha
comprobado en algunas bases fuertes nitrogenadas como las metilaminas,
etilaminas, piridinas y sus derivados (tabla 1.2).
13
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
CH 4 2 O 2 o CO 2 2 H 2 O (1.16)
En la tabla 1.3 se representa esta relación para algunos compuestos orgáni-
cos comunes.
14
Indicadores de la Contaminación
nO 2
NOP 4 2 (1.17)
nC
donde:
nO 2 : Número de átomos de oxígeno necesarios para la oxidación completa
de un compuesto dado en CO2 , H2O, NH3 y H2SO4.
nC: Número de átomos de carbono en el compuesto dado.
15
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
DTO
NOP 42 (1.18)
Corg
DQO / 16
NOP 4 2
Corg / 12
3 DQO
NOP 4 (1.19)
2 Corg
Como se aprecia de la ecuación 1.21 aún queda una cierta fracción del
oxígeno que puede ser utilizado para la oxidación.
Debe destacarse que cuando la biomasa es considerada como sustrato, su
NOP es igual a cero:
C5 H 7 NO2 n 5nO 2 o 5nCO 2 2nH 2O nNH3 (1.22)
16
Indicadores de la Contaminación
1.6. NITRÓGENO
El nitrógeno en las aguas residuales se puede presentar principalmente en
forma orgánica, formando parte de proteínas, y en forma amoniacal. El nitrito
(NO2±) y los nitratos (NO3±) rara vez aparecen en las aguas residuales crudas,
y cuando existen, se trata fundamentalmente de aguas residuales industriales.
El conocimiento del contenido de nitrógeno en sus variadas formas re-
sulta de gran interés. Así por ejemplo, cuando un agua destinada a consumo
humano presenta nitrógeno orgánico, o nitrógeno amoniacal, es indicio de
contaminación fecal reciente, lo cual es un alerta sobre su peligrosidad. La
urea contenida en la orina del hombre y animales, se descompone aportando
nitrógeno amoniacal según muestra la siguiente ecuación:
CON 2 H 4 H 2 O
o CO 2 2NH 3 (1.23)
17
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
18
Indicadores de la Contaminación
1.7. FÓSFORO
El conocimiento del contenido de fósforo de las aguas residuales reviste
interés, pues este elemento constituye un factor imprescindible para la vida
de los organismos acuáticos al entrar a formar parte de su estructura.
La presencia de compuestos de fósforo en cursos receptores induce el
crecimiento de algas. Estas afectan de forma notable la calidad de las aguas
ya que pueden ser el origen de toda una secuencia de fenómenos, dado que
este elemento es el limitante para el desarrollo de estas formas de vida. La
luz y los compuestos de nitrógeno (los cuales son los otros elementos im-
prescindibles) son generalmente abundantes.
El deterioro de la calidad del agua debido a la aparición de color o sabor
desagradables no es el único problema que se genera como consecuencia de
la presencia del fósforo en un cuerpo de agua, sino que se produce otro no
menos grave y es que al morir las algas, estas ocasionan una contaminación
de carácter orgánico en el agua.
Por todo lo anterior es importante disponer de datos sobre la concentra-
ción de fósforo que se vierte a los cuerpos receptores, provenientes funda-
mentalmente de las aguas residuales industriales y domésticas.
Las aguas residuales de origen doméstico son relativamente ricas en
fósforo. Antes del desarrollo de los detergentes sintéticos, el contenido
de fósforo usualmente estaba en el intervalo de 2 a 5 mgL ± y las formas
orgánicas variaban de 0,5 a 1,0 mgL ± . Esta contribución humana se debe a
la ruptura de las proteínas con la consiguiente eliminación del fósforo en la
orina. En la actualidad muchos detergentes sintéticos contienen grandes
cantidades de poli fosfatos, pudiendo contener hasta 10 % en su composi-
ción. La sustitución del jabón por estos productos ha incrementado notable-
mente el contenido de este elemento en las aguas residuales.
19
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
20
Indicadores de la Contaminación
21
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
VT
Vi = Q i (1.27)
Q N
donde:
Vi: volumen de muestra a tomar en un instante (L).
VT: volumen total de muestra a recolectar (L).
N: número de muestras que se van a tomar.
Q : flujo promedio determinado previamente (Lh±).
Qi : flujo puntual en el instante de la toma de muestra (Lh±).
En la aplicación de este procedimiento es recomendable que durante el pe-
riodo de muestreo se tomen volúmenes de muestras, se conserven en frío y se
mida el flujo puntual en el instante de tomar cada muestra.
22
Indicadores de la Contaminación
23
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
24
Indicadores de la Contaminación
m DBO m Ocurrencia
-1
(mg L ) n 1 (%)
1 175 0,1 10
2 225 0,2 20
3 285 0,3 30
4 340 0,4 40
5 350 0,5 50
6 375 0,6 60
7 405 0,7 70
8 460 0,8 80
9 515 0,9 90
X 84 ,1 X 15 ,9
sn 1 (1.28)
2
Para el ejemplo anterior:
DBO promedio = 347,8 mg L±
25
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
450 230
sn 1 110
2
s: desviación estándar.
Fig. 1.12. Porcentaje del tiempo que la DBO será igual o menor al valor
indicado.
Cuando el número de observaciones es muy grande (de cincuenta a cien) se
recomienda agrupar la data por incrementos. Estos incrementos pueden tomar-
se de 50 mg L±.
Ejemplo 4.1
Suponga una data que tiene noventa y seis observaciones agrupadas por
intervalos de 50 mg L±.
donde:
n: Número total de muestras
m: Número de muestras en el intervalo analizado y los anteriores
m
100 : posición al graficar..
n 1
26
Indicadores de la Contaminación
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Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Sólidos
DBO DQO
Proceso Unidad suspendidos
(kg/u) (kg/u)
(kg/u)
Instalaciones de
250 - 1716
cría de reses
Instalaciones de cabezas
1,4 - 14,6
cría de pollos
Granjas lecheras 539 - -
Mataderos 6,4 - 5,2
Sin recuperar
11 - -
sangre PVS
Sin recuperar
4,7 - -
panza se agrega
Proceso de aves
1000 aves 11,9 22.4 12,7
de corral
Enlatado de
12,5 - 4,3
frutas y verduras t de
Refinación de producción
12,9 21 16,4
aceite vegetal
Producción de
m3 de vino 0,26 - -
vino
3
Producción de m de
8,6 - 14,7
cerveza cerveza
PVS: Peso vivo sacrificado.
Fuente: Evaluación rápida de fuentes de contaminación de aire, agua y suelo, OMS, México, 1988.
28
Indicadores de la Contaminación
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Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
siendo:
Q: caudal instantáneo (m3 ·s±).
W: ancho del estrechamiento, (m).
H: calado del agua en el punto de observación fijo, (m).
30
Indicadores de la Contaminación
1.9.2. Vertedores
Los vertedores consisten básicamente en una obstrucción en la que se es-
tanca el líquido y vierte por encima de ella (Figura 1.15).
31
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Vertedor rectangular
Estos pueden ser sin contracción lateral o con ella.
En aquellos casos en los que no exista contracción lateral, la cresta ocupa
todo el ancho del canal. El caudal viene dado por la ecuación,
siendo:
Q: caudal, m3 · s±.
L: longitud de la cresta, m.
H: carga sobre la cresta, m.
Las dimensiones que debe cumplir el vertedor se detallan en la fi-
gura 1.16.
32
Indicadores de la Contaminación
33
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Vertedor triangular
Este tipo de vertedor es uno de los más utilizados debido a que, para un
mismo caudal, se consigue mayor altura que en los rectangulares. Este efecto
se traduce en una mayor precisión en la lectura (figura 1.18).
El ángulo del vértice de este vertedor puede tener diferentes valores. Los
más usuales son 60° y 90°. La expresión que da el caudal en este tipo de verte-
dor es:
donde:
Q: gasto, m3 · s±.
H: altura del líquido con relación al vértice, m.
34
Indicadores de la Contaminación
Vertedor trapezoidal
Este vertedor tiene una forma similar al rectangular (figura 1.19). La expre-
sión que se emplea para calcular el caudal es:
35
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Notas bibliográficas
1 CHUDOBA, J., C. MENÉNDEZ Y J. PÉREZ O.: Fundamentos teóricos de algunos
procesos para la purificación de aguas residuales, Ed. ISPJAE, Ciu-
dad de La Habana, 1986.
2 THOMAS, M.A.: ³*UDSKLFDO GHWHUPLQDWLRQ RI %2' FXUYH FRQVWDQWV´Water
and Sewage Works, 1950.
3 MOORE, E.W., H.A. THOMAS, AND W.B. SNOW.:³6LPSOLILHGPHWKRGIRUWKHDQDO\VLV
RI%2'GDWD´Sewage and Ind. Wastes, vol. 22, no. 10, 1950.
4 RHAME, G. A.: ³7ZR3RLQW0HWKRGIRUHVWLPDWLRQRIILUVWVWDJH%2'´Sewage
and Ind. Wastes, vol. 28, no. 9, 1950.
5 Standard Method for the Examination of Water and Wastewater, Ed.
APWA-AWWA, 1995.
6 MOORE, W.A.:³'HWHUPLQDWLRQRIR[\JHQFRQVXPHGYDOXHRIRUJDQLFZDVWHV´
Anal. Chemistry, 1951.
7 ARGAMAN, Y. AND A. BRENNER:³([SHULPHQWDOHYDOXDWLRQRIPRGHOLQJDOWHU
natives and process parameters for the single-sludge nitrogen removal
V\VWHP´ IAWPRC Specialised Seminar, Copenhagen, Denmark, Au-
gust, 1985.
8 MENÉNDEZ, C.: Reporte Inédito, ISPJAE, Ciudad de La Habana, 1989.
9 ECKENFELDER, W.W.: Water Quality Engineering for Practicing Engineers,
CBI, Pub. 1980.
10 LOEHRS, H.C.:³9DULDWLRQRIZDVWHZDWHUSDUDPHWHUV´Pub. Works, vol. 99,
no. 81, 1968.
11 RODRÍGUEZ, C.: ³&DUDFWHUL]DFLyQGHODVDJXDVUHVLGXDOHVGH%HMXFDO´ Inge-
niería Hidráulica, vol. 19, no. 4, 1998.
36
Indicadores de la Contaminación
37
Pretratamiento de Aguas Residuales
CAPÍTULO 2
PRETRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES
2.1. COMPENSACIÓN
Los residuales líquidos industriales se caracterizan por la diversidad
de corrientes con diferencias en su composición y concentración. Aun una
misma corriente puede presentar variaciones horarias en sus propiedades. Cuando
los residuales manifiestan mucha variación en su composición se recomienda el
empleo de tanques compensadores.
La experiencia ha demostrado que los procesos de tratamiento se realizan
mejor si las fluctuaciones extremas en la carga del sistema pueden ser evitadas
o en última instancia ser atenuadas mediante la compensación.
En los tanques compensadores los residuales se retienen durante un periodo
en el que se llega a obtener un efluente relativamente estable.
La neutralización de corrientes ácidas o básicas, la estabilización de la DBO
y la separación de metales pesados, son algunos de los objetivos de la compen-
sación.
Aguas residuales con alta acidez o alcalinidad que no son compensadas
requieren de la neutralización mediante la adición de reactivos químicos.
La mezcla en el tanque de compensación generalmente se promueve con
aire. Un método común es el empleo de aereadores superficiales, con un consu-
mo de potencia de 4.10± ± ± W m±. Cuando se utiliza aire mediante
difusores, el consumo aproximado de este puede tener un valor cercano a los
4 m3 m± d±.1
39
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
40
Pretratamiento de Aguas Residuales
por lo tanto:
CE CS t
ln
CE C0 ș
V
donde: ș Q
entonces:
§ t·
CS CE (C E C0 ) exp ¨ ¸ (2.3)
© ș¹
En la tabla 2.1 se muestra un ejemplo numérico donde se ilustra el efecto
compensador del sistema mostrado, suponiendo por simplicidad, que el flujo de
agua residual es constante y la composición variable.
41
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
S 2e ǻ7
(2.4)
S 2i 2 .ș
42
Pretratamiento de Aguas Residuales
donde:
S2e: varianza de la concentración del efluente.
S2i: varianza de la concentración del afluente.
'T: tiempo de recolección de la muestra compuesta.
T : tiempo de retención (V / Q).
De acuerdo con lo anterior puede calcularse el tiempo de retención si se
conocen la varianza del afluente y la permisible o deseada para el efluente.
La varianza en el afluente, S2i se determina según:
n
1
S 2i
n 1
¦ Xi X 2
(2.5)
i 1
donde:
Xi: valor individual de la concentración de cada muestra tomada.
X : valor promedio de todas las mediciones.
n: número de muestras.
Se define el valor típico normal Z de la propiedad controlada como:
Xm X
Z (2.6)
Se
donde:
Xm: valor máximo que puede tomar la propiedad en el efluente del tanque de
compensación.
Se: desviación típica del efluente.
Procedimiento para el diseño
El procedimiento de diseño consiste en hallar el tiempo de retención reque-
rido en el tanque compensador para obtener las condiciones de salida deseadas.
El tiempo de retención y el caudal de agua a tratar, definirán el volumen de
tanque necesario.
43
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Ejemplo 2.1
Se estudió un agua residual cuyo caudal es de 1 500 m 3d±. Se tomaron
cuatro muestras diarias integradas durante 6 horas cada una en 10 días diferen-
tes. Los resultados se muestran en la tabla 2.2:
X
¦X 832,8
n
Si 367,438
Xm 1000
De la tabla de distribución normal (Anexo 2), para 90 % de confianza, el
valor de Z 1,30
Xm X 1000 832 ,8
Z Se 167 ,2
Se 1,30
44
Pretratamiento de Aguas Residuales
S 2e ǻ7
Se2 = 27955,84; Si2 = 135810,68
S 2i 2 .ș
El tiempo de retención en el tanque compensador será,
6 135810 ,68
ș 14 ,5 h
2 27955 ,84
T 0,6 d, por lo tanto, el volumen es,
V 1500 · 0,6 900 m3
45
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Ejemplo 2.2
La tabla 2.3 fue obtenida de una planta industrial durante un ciclo de produc-
ción de 8 horas. Cada intervalo de tiempo representa un periodo de muestreo de
1 hora. Determine el factor pico del efluente de un tanque compensador cuando
se utiliza un tiempo de retención de: a) 8 horas, b) 2 horas y compárelos con el
factor pico cuando no se utiliza compensación.
Valor máximo
Factor Pico
Valor promedio
400
Al inicio: FP 2 ,3
173,75
a) Asumiendo un tiempo de retención igual a 8 h:
V = 283,87 · 8 = 2270,96 m3
V
C1 C0
Q
C2
V
1
Q
46
Pretratamiento de Aguas Residuales
2270 ,96
250 173,75
C2 363 184 ,39 mgL1
2270 ,96
1
363
Después del segundo intervalo:
C1 = 70 mgL± Q = 45 m3h± C0 = 184,79 mgL±
2270 ,96
70 184 ,39
C2 45 182 ,17 mg L1
2270 ,96
1
45
Al proceder de manera similar para los restantes intervalos se obtienen los
resultados que se muestran en la tabla 2.4:
47
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
567 ,74
250 173 ,75
C2 363 203,49 mgL1
567 ,74
1
363
Después del segundo intervalo:
C1 = 70 mgL± Q = 45 m3h± C0 = 203,49 mgL±
567 ,74
70 184 ,39
C2 45 193 ,70 mgL1
567 ,74
1
45
Procediendo de manera similar para los restantes intervalos se obtienen los
resultados que se muestran en la tabla anterior para: T = 2 h.
Factor Pico para un tiempo de retención de 2 h en el tanque compensador:
226 ,30
FP 1,3
173,75
48
Pretratamiento de Aguas Residuales
Horario
Horario
Fig. 2.5. Determinación del volumen del compensador.
49
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
50
Pretratamiento de Aguas Residuales
Q 45,83 m3h 1
51
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
52
Pretratamiento de Aguas Residuales
2.2. SEDIMENTACIÓN
La sedimentación es un proceso físico de uso muy difundido en el trata-
miento de las aguas r esiduales. Puede utilizarse como p arte de un
tratamiento primario, o como una etapa del tratamiento secundario. El obje-
tivo de la sedimentación primaria es reducir la concentración de sólidos sus-
pendidos y la carga orgánica de un agua residual para facilitar los tratamientos
posteriores. La secundaria constituye un proceso importante para la clarifi-
cación del efluente de las unidades de tratamiento biológico y para el
espesamiento de los lodos orgánicos que se obtienen.
La sedimentación es efectiva para la remoción de sólidos suspendidos en la
medida en que la fuerza de gravedad que actúa sobre la partícula que se desea
53
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
54
Pretratamiento de Aguas Residuales
55
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
CD A U 2 ȡ
Fd (2.12)
2
donde:
CD: Coeficiente de arrastre (adimensional). Es función del número de
Reynolds para un tipo de partícula.
A: Área proyectada sobre un plano perpendicular a la dirección del movi-
miento, m2.
U: Velocidad de la partícula, m s±.
De las ecuaciones (2.10), (2.11) y (2.12) puede obtenerse.
dU ȡs ȡ C D A U 2 ȡ
m mg (2.13)
dt ȡs 2
En la ecuación 2.13 se ha expresado la fuerza resultante en función de la
dU
masa de la partícula y de su aceleración,
dt
La aceleración de la partícula en su movimiento de descenso a través del
seno del líquido puede obtenerse de la ecuación 2.13:
dU ȡs ȡ C D A U 2 ȡ
g (2.14)
dt ȡs 2m
Durante el descenso, se llega a una velocidad a partir de la cual la acelera-
ción de la caída se hace igual a cero, y por tanto, la velocidad de sedimentación
es constante e igual a:
1
§ ȡ ȡ m ·
2
U ¨2 g s ¸ (2.15)
© ȡs ȡ A CD ¹
para partículas esféricas,
ʌ d2
A (2.16)
4
56
Pretratamiento de Aguas Residuales
U ¨ g d¸ (2.19)
©3 CD ȡ ¹
El valor U es la velocidad de sedimentación m s±.
O sea, que la velocidad de sedimentación de una partícula esférica aislada
es función de su diámetro y densidad, así como de la viscosidad del líquido claro
en el que se encuentra suspendida, ya que, como fue mencionado, el coeficiente
de arrastre depende del número de Reynolds. Para emplear la ecuación (2.19)
se requiere conocer el valor del coeficiente de arrastre CD.
57
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
58
Pretratamiento de Aguas Residuales
59
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
60
Pretratamiento de Aguas Residuales
X 1 X r ³ U p dX (2.27)
0
U o
donde:
±Xr): fracción de partículas con velocidad ! Uo.
Uo: velocidad seleccionada como límite.
Xr
Up fracción de partículas con velocidad menor que Uo y que son
³U dX : removidas.
0 o
61
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
X 1 X r 1 ³U p dX
Uo 0
Uo = 0,03 cms±
De la figura, Xr = 45
Xr
³U p dX A1 A2 A15
0
1
X 100 45 0,4735
0 ,03
X = 70,78 %
62
Pretratamiento de Aguas Residuales
63
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
En este caso las curvas de profundidad contra tiempo a las distintas concentra-
ciones tienen la forma que se muestra en la figura 2.14.
64
Pretratamiento de Aguas Residuales
§ 75 60 · ǻ h2
¨ ¸ tiene una velocidad de sedimentación igual a
© 2 ¹ h0 , y así sucesiva-
mente, el porcentaje de partículas que sedimenta en veinticuatro minutos en un
sedimentador de 1,8 m de profundidad será:
ǻ h1 R1 R2 ǻ h 2 R2 R3 ǻ h3 R3 R4
R % (2.29)
h0 2 h0 2 h0 2
donde:
R1 = 100 % R3 = 60 %
R2 = 75 % R4 = 45 %
El procedimiento puede repetirse para distintos tiempos y obtener una rela-
ción entre la velocidad de sedimentación y el porcentaje de remoción.
Una vez que se llega al porcentaje de remoción de SS deseado, se estima la
carga superficial teniendo en cuenta que esta debe fijarse entre 1,25 y 1,75
veces menor que la velocidad de sedimentación. Así mismo, el tiempo de diseño
debe ser entre 1,5 y 2,0 veces mayor que el trabajado. De esta manera se
calcula el área del sedimentador y el tiempo de retención.
Ejemplo 2.5
Una suspensión floculenta que contiene 450 mgL± de sólidos suspendidos
llena una columna de 3,0 m con salidas laterales cada 50 cm. A distintos tiempos
se toman muestras y se determina la concentración de sólidos suspendidos. Los
resultados obtenidos se muestran en la tabla que se adjunta. Determine el por-
centaje de remoción total de sólidos suspendidos que se obtendrá utilizando un
sedimentador de 2,75 m de profundidad trabajando con una carga superficial de
25 m3 m± d±.
65
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Fig. 2.15. Gráfico auxiliar para el trazado de las curvas de la figura 2.16.
66
Pretratamiento de Aguas Residuales
67
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
68
Pretratamiento de Aguas Residuales
Fig. 2.19. Flujo másico debido a la Fig. 2.20. Flujo másico debido
gravedad. a la extracción de fondo.
69
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
70
Pretratamiento de Aguas Residuales
Una vez determinado el valor límite del flujo de sólidos G1, puede obtenerse
por un balance de masa, el área necesaria para la sedimentación:
Qt
A X (2.35)
G1 0
donde:
Qt: Flujo total que entra al sedimentador, m3d±.
X0: Concentración de SS que entra al sedimentador, gm±.
De la figura 2.21 puede deducirse que para una suspensión dada, el área
de sedimentación, y por tanto, la concentración de los sólidos de fondo se
modifica al cambiar el caudal de extracción de fondo. Debe tenerse presen-
te que cada vez que se cambie el caudal del fondo, se obtendrá un G b dife-
rente y se requiere, por tanto, trazar de nuevo la curva de flujo másico total.
Como se aprecia, el procedimiento anterior es tedioso porque para cada
Q u se necesita construir nuevas curvas de flujo. Este procedimiento gráfico
se simplifica notablemente cuando se utiliza el concepto de punto de situa-
ción (figura 2.22).
La concentración de sólidos a la entrada, X 0, se representa por una línea
vertical en el valor especificando X 0. La velocidad de flujo de sobrenadante,
U 0, viene dada por una línea denominada línea del sobrenadante, y que par-
tiendo del origen tiene una pendiente igual a U 0. El intercepto de la línea de
sobrenadante con la de operación (la de X 0), recibe el nombre de punto de
situación.
71
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
72
Pretratamiento de Aguas Residuales
73
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
74
Pretratamiento de Aguas Residuales
75
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Notas bibliográficas
1 ECKENFELDER, W. W.: Principles of Water Quality Management, CBI, Pu-
blishing Co. EE.UU., 1980.
2 BENEFIELD, L. AND C. RANDALL: Biological Process Design for Wastewater
Treatment, prentice Hall Series in Environmental Sciences, EE. UU., 1980.
3 PATTERSON, J.W. AND J.P. MENEZ³'HVLJQRIHTXDOL]DWLRQEDVLQV´$PInst.
Chem. Engrs. Env. Prog., vol. 3, no. 1, 1984.
4 ROBIND:+³7KH7KHRU\RIWKH'HVLJQDQG2SHUDWLRQRI6HWWLQJ7DQNV´
Transaction Institute of Chemical Engineering, vol. 42, no. 158, 1964.
5 EKAMA, G. A.; Et al: Secondary Settling Tanks. Theory, Design and Opera-
tion, Sudafrica, 1984.
6 RITTMAN%³$HURELF%LRORJLFDO7UHDWPHQW´Environmental Science Tech-
nology, vol. 21, no. 2, 1987.
76
Oxidación Biológica. Nitrificación
CAPÍTULO 3
OXIDACIÓN BIOLÓGICA NITRIFICACIÓN
77
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
3.2. METABOLISMO
Los microorganismos requieren de una fuente de energía y carbono para la
síntesis de nuevas células así como de nutrientes inorgánicos para sus diferen-
tes funciones.
El metabolismo es la combinación de un conjunto de transformaciones
bioquímicas necesarias para la síntesis celular (anabolismo) y la producción de
energía (catabolismo) que ocurren a través de procesos enzimáticos. De hecho,
78
Oxidación Biológica. Nitrificación
79
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
80
Oxidación Biológica. Nitrificación
81
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
donde:
E1 > E2 > E3 > E4 > E5 > E6
puede apreciarse además que la reducción del sulfato ocurre tanto en los
procesos anaerobios como en los anóxicos, aunque en los segundos se redu-
cen preferentemente los nitratos antes que los sulfatos.
El ATP y la actividad dehidrogenasa son los mejores indicadores de la biomasa
activa en los procesos de tratamiento biológico.2
82
Oxidación Biológica. Nitrificación
NO2
Degradable No degradable
83
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84
Oxidación Biológica. Nitrificación
85
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
86
Oxidación Biológica. Nitrificación
nen durante un cierto tiempo sin sustrato exógeno, muchos de ellos morirán.
La masa remanente puede llegar a contener menos del 10 % en peso de
organismos vivos, y será relativamente estable a la descomposición poste-
rior. Este fenómeno es utilizado en la práctica para la estabilización aerobia
de los lodos.
La oxidación del sustrato exógeno puede ser descrita según la ecuación:
§ 1 1 · 1
C x H y O z ¨ X Y Z ¸ O 2 o X CO2 Y H 2O (3.7)
© 4 2 ¹ 2
La oxidación del sustrato endógeno puede representarse:
C5 H 7 NO 2 5 n O 2 o 5 n CO 2 2 n H 2O n NH 3 (3.8)
La fórmula empírica C 5 H 7 NO 2 representa la composición media de
la materia volátil celular.7 Esta biomasa contiene 12,3 % de nitrógeno y
teóricamente requiere 1,42 g de oxígeno por cada gramo de biomasa
totalmente oxidado. Aunque la fórmula empírica anterior, de Hoover y
Porges, es la más difundida, hay muchas otras que también se utilizan. No
obstante en la práctica el equivalente de oxígeno de biomasa volátil varía en
el intervalo comprendido entre 1,3 y 1,5 gg± .
87
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
t
ln X t ln 2 ln X 0 (3.10)
tg
Escribiendo:
ln 2 0,69
ȝ (3.11)
tg tg
Sustituyendo en la ecuación 3.10 se obtiene,
ln X t ȝW ln X 0 (3.12)
La ecuación 3.12 también puede escribirse:
Xt X0 e ȝ t (3.13)
Conociendo el valor de P se puede, mediante la ecuación 3.13, calcular el
valor de la concentración de microorganismos a cualquier tiempo t.
Diferenciando con respecto al tiempo la ecuación 3.13, se obtiene la ecua-
ción cinética general de crecimiento.
dX 1 dX
ȝ; ȝ (3.14)
dt X dt
El término P es denominado velocidad específica de crecimiento. A partir de
la ecuación 3.14 puede concluirse que P solo depende del tiempo de generación,
tg, de un microorganismo dado. Sin embargo, esta conclusión es válida
solamente para altas concentraciones de sustrato.
Para bajas concentraciones de sustrato, P se hace dependiente de la misma
de acuerdo con la bien conocida ecuación de Jacques Monod:
S
ȝ ȝmáx (3.15)
KS S
donde:
S: concentración de sustrato limitante (mgL±).
Pmáx: Velocidad específica de crecimiento máxima h±.
KS: Constante de saturación (mgL±).
KS: VS = S para P = ½ P máx
88
Oxidación Biológica. Nitrificación
89
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
90
Oxidación Biológica. Nitrificación
91
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
dS ȝm S
X (3.19)
dt Y KS S
en tratamiento de residuales es frecuente encontrar que KS S, y la ecuación
3.19 queda:
dS ȝm
X (3.20)
dt Y
o también:
dS
KX (3.21)
dt
donde:
ȝm 1
K d
Y
De acuerdo con la ecuación 3.21 los sustratos de un solo componente son
removidos siguiendo una cinética de orden cero con respecto a la concentración
de sustrato (figura 3.10).
92
Oxidación Biológica. Nitrificación
Sustratos multicomponentes
La casi totalidad de las aguas residuales están constituidas por sustratos
multicomponentes, o sea, una mezcla de compuestos que integralmente se re-
portan como DBO ó DQO.
Cada uno de los compuestos que conforman el residual está presente en
concentraciones distintas, y se remueven de acuerdo con una cinética de orden
cero aunque a distintas velocidades, como se ilustra en la figura 3.11(a), donde
cada recta representa la variación, con respecto al tiempo, de la DQO de cada
uno de los constituyentes individuales.
En la figura 3.11(b) se aprecia que para un tiempo cualquiera la velocidad de
remoción del sustrato multicomponente y la concentración total del sustrato (ex-
presada como DQO) es la suma de las velocidades de remoción de los sustratos
simples y de la concentración de los sustratos respectivamente. En la medida
que un sustrato simple se agota, la velocidad de remoción disminuye instantá-
neamente, dando origen a un punto de ruptura en la curva de remoción.
Si el número de componentes es suficientemente alto, como es el caso de la
práctica del tratamiento de las aguas residuales, el punto de ruptura puede ser
sustituido por una disminución suave. Esta curva puede ser descrita por una
ecuación diferencial general que representa la cinética de una reacción química
simple:
dS
kn X 0 S n (3.22)
dt
donde:
dS
: Velocidad de remoción (mgL±d±).
dt
kn: Constante de velocidad de remoción (d±).
93
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
94
Oxidación Biológica. Nitrificación
§m·
r f¨ ¸ (3.23)
©M ¹
donde:
M: Número de componentes inicialmente presentes.
m: Número de componentes individuales remanentes.
r: Velocidad de remoción relativa.
En general, lo que ocurre es que no se conoce el número de componentes
originalmente presentes, ni la ley que describe su remoción de la mezcla.
Suponiendo un número grande de componentes, puede sustituirse el número
de componentes por la concentración.
La función f expresa además, en alguna forma, el decrecimiento de la velo-
cidad de remoción causada por el número reducido de componentes y, por tanto,
la disminución de la concentración total de sustrato con el tiempo. Para reflejar
esto, un exponente similar al de orden de reacción puede utilizarse.
La ecuación cinética se puede expresar:
n
dS §S· X0 n
kn X 0 ¨ ¸ kn S (3.24)
dt © S0 ¹ S0 n
donde:
S0: Concentración inicial de DBO ó DQO.
S: Concentración final de DBO.
X0: Concentración de biomasa.
kn: Velocidad específica de remoción de DBO.
n: Orden de la reacción.
La ecuación 3.24 también puede expresarse,
n
ǻ6 §S·
k¨ ¸ (3.25)
șX © S0 ¹
V
ș
Q
95
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
96
Oxidación Biológica. Nitrificación
dS S
km X (3.27)
dt KS S
ǻ6 S
km (3.27 a)
șX KS S
Cualquiera que sea el modelo cinético que se desee emplear, debe compro-
barse en qué medida se cumple en el caso particular bajo estudio.
97
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
ǻ6 S
vs
graficando
șX S0 , puede obtenerse el valor de k de la pendiente de la
recta correspondiente.
Los datos de la tabla 3.1a se arreglan según:
3.5. NITRIFICACIÓN-DESNITRIFICACIÓN
Es muy útil relacionar las concentraciones de nitrógeno con las de DBO. La
tabla 3.2 da algunos valores en dependencia del origen del agua residual. El
valor 0,2 puede considerarse representativo de este conjunto de datos. A falta
de disponer de análisis más precisos, puede ser adoptada esta relación como
buena para el cálculo de instalaciones de tratamiento. Generalmente la incorpo-
ración de aguas residuales industriales a las municipales, favorecen la disminu-
ción de esa relación.
98
Oxidación Biológica. Nitrificación
Procedencia N/DBO5
Municipal 0,17-0,20
Lecherías 0,05-0,04
Cervecerías 0,25
Papeleras 0,1-0.02
Centrales azucareros 0,1-0,2
Tintorerías 0,1-0,05
99
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
3.5.1. Nitrificación
En el estudio de la nitrificación es importante diferenciar entre las funciones
de oxidación del carbono y del nitrógeno propiamente dicho. Ambos procesos
pueden llevarse a cabo en una sola etapa o en etapas separadas, tanto en siste-
mas de biomasa en suspensión como en lecho fijo.
En casi todos los procesos biológicos están presentes las bacterias
nitrificantes, sin embargo para que la nitrificación tenga lugar es necesario que
100
Oxidación Biológica. Nitrificación
Nitrobacte r
NO 2± 1/2 O 2
o NO 3± (3.29)
A partir de la estequiometría de estas ecuaciones puede deducirse que se
requieren 4,6 mg de oxígeno para la oxidación completa de cada mg de N-NH3.
Si se acepta que el efluente de un tratamiento secundario convencional po-
see aproximadamente una concentración de 25 mgL± de N-NH3, esto tiene
como consecuencia una demanda de oxígeno al cuerpo receptor de 114 mgL±
por concepto de la ulterior oxidación a NO3±. Si esta demanda se compara con
la que normalmente tienen estos efluentes (demanda carbonácea), aproximadamente
50 mgL±, puede inferirse la importancia que posee el proceso de nitrificación,
su estudio y control.
La oxidación del nitrógeno amoniacal no tiene lugar de forma aislada, sino
que en realidad va acompañada de la síntesis de nuevas células además de
consumo de oxígeno. La síntesis de nuevas bacterias nitrificantes se expresa:14
±
15CO2 + 13 NH4+
(Nitrosomonas)
+
o 10 NO2 + 3 C5H7NO2 + 23 H + 4 H2O (3.30)
5 CO2 + NH4+ + 10 NO2± + 2 H2O
(Nitrobacter) ± +
o 10 NO3 + C5H7NO2 + H (3.31)
El rendimiento celular de estas reacciones está en el intervalo de 0,04 a
0,29 mg SSV (mg N-NH3)± para las bacterias Nitrosomonas y de 0,02 a
0,084 mg SSV (mg N-NO2±)± para Nitrobacter.15
Suponiendo para estas dos reacciones respectivamente rendimientos de 0,15
mg SSV(mgN-NH3)± y 0,02 mg SSV(mgN-NO2)± puede plantearse:
55 NH4+ + 76 O2 + 109 HCO3± ±
o C5H7NO2 + 54 NO2 + 57 H2O +
+ 104 H2CO3 (3.32)
101
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
102
Oxidación Biológica. Nitrificación
Temperatura, qC P n,m
10 0,3
20 0,65
30 1,2
Oxígeno disuelto
Generalmente la influencia de la concentración de oxígeno en la veloci-
dad de nitrificación ha sido objeto de controversias. No obstante, es acepta-
do, por evidencia experimental, que bajo determinadas condiciones se puede
obtener nitrificación completa aun a concentraciones de oxígeno tan bajas
como 0,5 mgL± . Un estudio relativamente reciente para analizar la influen-
cia de diversos factores en la nitrificación ha sido reportado por Stenstrom y
Song. 17 En este estudio se concluye que:
Tanto para sistemas de biomasa en suspensión como para medio fijo, la
concentración de oxígeno que limita la nitrificación está en el intervalo
comprendido entre 0,5 y 2,5 mgL±.
La concentración límite de oxígeno para la nitrificación en condiciones
estacionarias es función del tiempo de retención de la biomasa y de la
resistencia difusional al transporte de masa.
En la medida en que la concentración de oxígeno es menor, se requiere
mayor tiempo de retención de la biomasa para garantizar una completa
nitrificación.
Bajo condiciones transcientes de choques de carga orgánica, o de au-
mento de la resistencia a la difusión o competencia entre bacterias
heterótrofas y nitrificantes, la concentración límite de oxígeno puede ser
significativamente mayor que bajo otras condiciones.
103
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
104
Oxidación Biológica. Nitrificación
dX n dNa (3.37)
Yn
dt dt
Na
y ȝn ȝnm (3.38)
Kn Na
donde:
Xn: Concentración de microorganismos nitrificantes (mgL±).
Na: Concentración de N-NH3 (mgL±).
Yn: Masa de organismos nitrificantes obtenidos por masa de N-NH3 utilizado.
P n: Velocidad específica de crecimiento de los organismos nitrificantes a la
concentración Na (mg Xn (mg Xn)± d±).
Kn: Coeficiente de saturación para nitrosomonas (mgL± N-NH3).
Está demostrado que la energía que liberada durante el proceso de conver-
sión de N-NH3 a N-NO2± es aproximadamente tres veces mayor a la corres-
pondiente a la transformación del N-NO2± a N-NO3±.19 O sea, se requiere producir
el triple de N-NO3± que N-NO2± para liberar una misma cantidad de energía.
Según Adams y Eckenfelder20 esta es la posible explicación al hecho de que
generalmente el N-NO2± se halla en bajas concentraciones en los efluentes de
los tratamientos biológicos.
105
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
dX n (3.39)
ȝn X n
dt
Combinando las ecuaciones 3.37, 3.38 y 3.39 para explicar la velocidad de
crecimiento en función del consumo de N-NH3 se obtiene:
dNa 1 Na
ȝnm X (3.40)
dt Yn Kn Na n
O sea, que la velocidad de nitrificación es de primer orden con respecto a la
concentración de Nitrosomas, y de un orden intermedio con respecto a la con-
centración de N-NH3 .
La ecuación 3.40 puede escribirse de una forma equivalente si se define la
velocidad específica máxima de consumo de sustrato, Km
ȝnm
Km (3.41)
Yn
Entonces la velocidad específica de consumo de sustrato puede expresarse:
Na
K Km (3.42)
Kn Na
y la velocidad de consumo de sustrato, o sea, de consumo de N-NH3 para el
proceso de nitrificación será:
dN a Na
Km X (3.43)
dt Kn Na n
Se conoce que el valor de Kn a 20 oC es menor de 1 mgL±.22
En la tabla 3.4 se presentan tres valores reportados en la literatura de velo-
cidades específicas de crecimiento y coeficientes de saturación para
Nitrosomonas, a 20 oC.
En aquellos casos en los que la concentración de N-NH3 tenga un valor
cercano a los 25 mgL± o mayor, puede considerarse, desde el punto de vista
106
Oxidación Biológica. Nitrificación
dN a (3.44)
Km X n
dt
o sea, la velocidad de nitrificación solo es función de la concentración de las
bacterias nitrificantes, su velocidad específica de crecimiento máxima y del ren-
dimiento celular.
P nm Kn Referencia
-1
d-1 mgL N-NH3
1,32 3,6 22
0,84 1,0 23
1,62 0,6 24
ǻ; n ª Na º
V « ȝn m » X V bn X n V X n Qw (3.4)
ǻW ¬ Kn Na ¼ n
donde:
V: Volumen del reactor.
107
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
ǻ; n Na Q
ȝnm X n bn X n X n w (3.46)
ǻW K n Na V
Considerando que:
V Xn
șx (3.47)
Qw X n
y que en condiciones de estado estacionario se cumple que
ǻ Xn
0
ǻW
entonces, de la ecuación 3.46 se tiene que,
§ 1·
K n ¨bn ¸
© șx ¹
Na (3.48)
§ 1·
ȝn m ¨bn ¸
© șx ¹
De la ecuación 3.48 puede afirmarse que: la concentración de nitrógeno
amoniacal en el reactor, y por tanto, en el efluente, es función de la edad del
lodo e independiente tanto de la concentración de amonio en el afluente Nai
como del coeficiente de rendimiento Yn .
El desarrollo anterior demuestra que la nitrificación no siempre está pre-
sente, sino que se requiere un valor de edad de lodo mínima para que ocurra.
Suponiendo valores típicos21 se obtiene la figura 3.16.
En la figura 3.16 se aprecia que para altas edades de lodo el valor del
nitrógeno amoniacal es pequeño, pues ha ocurrido la trasformación de la
forma amoniacal a N-NO2 ± y N-NO3 ± . Para edades de lodo, cercanas a 3,5
d, la concentración de Na se incrementa bruscamente. Si T x 3,5 d, el valor
de N-NH3 aumenta hasta que se obtiene:
Na = Nai , que es la condición límite.
108
Oxidación Biológica. Nitrificación
Ko
Suponiendo que N | 0 , lo que es válido desde el punto de vista práctico, y
ai
1
ș x, m (3.49)
ȝn, m bn
De aquí puede concluirse que aunque a los efectos pr ácticos,
generalmente se considera que para que ocurra nitrificación se requiere una
edad de lodo superior a tres días, esto no es absoluto, ya que la edad de lodo
mínima depende de la velocidad específica de crecimiento máxima de las
Nitrosomonas y de su coeficiente de respiración endógena. También a los
efectos prácticos, el valor del coeficiente bn puede asumirse despreciable en
la ecuación 3.49.
Esto explica el fenómeno de nitrificación que se ha reportado a valores de
edades de lodo de dos días en el tratamiento de residuales de pulpa y papel.22
109
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Ejemplo 3.2
Calcular la velocidad máxima específica de crecimiento de las bacterias
nitrificantes bajo condiciones no limitantes de pH y oxígeno disuelto. Considere
una temperatura de 30 RC.
Para propósitos de diseño puede utilizarse le ecuación 3.35:
ȝn,m 0 ,65 e 0 ,098 t 20
Ejemplo 3.3
Determine el tiempo de retención celular de diseño (edad del lodo de diseño)
para que ocurra nitrificación.
En estado estacionario, la cantidad de sólidos que salen del sistema es nu-
méricamente igual a la que se produce. Por tanto, la relación entre la edad de
lodo mínima para que ocurra nitrificación y P n será,
1
ȝ n,m bn ȝn,neto
ș x,m
Asumiendo que bn = 0,
1
ȝn,m
ș x,m
Para diseñar puede considerarse que la edad del lodo que debe tomarse
debe ser al menos 3,5 veces la edad del lodo mínima,
șx,d 3,5 șx,m
șx,d 2d
Ejemplo 3.4
Considerando que la alcalinidad del medio en los ejemplos anteriores es
25 mgL± como CaCO3, estime la que debe ser añadida para satisfacer la de-
manda exigida por la nitrificación.
Cada mg de N-NH3 al oxidarse a NO3±, consume 7,1 mg de alcalinidad.
Para determinar el N-NH3 que se oxida,
110
Oxidación Biológica. Nitrificación
Na
ȝn ȝn,m
Kn N a
1
ȝn 0,5 suponiendo que Kn 1,0
ș x ,d
Na
0,5 1,73 Na = 0,41 mgL±
1 Na
La alcalinidad a consumirse durante la nitrificación es,
±= 24,59 mgL±
alcalinidad consumida 24,59 · 7,1 175 mgL±
alcalinidad a adicionar ± 25 mgL±
3.5.2. Desnitrificación
La denitrificación biológica implica la reducción microbiológica del ni-
trato a nitrito y finalmente del nitrito a nitrógeno gaseoso. El nitrato y nitrito
constituyen la fuente de oxígeno para este proceso. De tal forma, la
desnitrificación normalmente ocurre en ausencia de oxígeno molecular, pero
con la presencia de nitrato. Estos procesos son denominados anóxicos. De
modo que la desnitrificación transforma el nitrógeno de una forma poten-
cialmente objetable, nitrato, a otra biológicamente inerte, nitrógeno gaseoso.
La desnitrificación presenta cinco campos de interés, sin considerar los
riesgos que para la salud puede implicar un efluente con alto contenido de
nitrato:
Consigue recuperar una parte de la alcalinidad que fue consumida
durante el proceso de nitrificación. Esto es:
3,5 g como CaCO3 por cada g N-NO3 reducido.
Disminuye considerablemente los riesgos potenciales comúnmente aso-
ciados a la desnitrificación incontrolada que puede desarrollare en la
sedimentación secundaria.
Recupera una parte del oxígeno consumido por la nitrificación:
2,6 g de oxígeno por cada g de N-NO3 reducido.
Un reactor anóxico previo a la etapa de aeración mejora la sedimentabilidad
de los fangos, disminuyendo el índice volumétrico de lodos.
Contrariamente al pequeño número de especies nitrificantes, las de las
desnitrificantes es mucho mayor. De ahí que resulten más aptas para su acli-
111
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
112
Oxidación Biológica. Nitrificación
113
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
retención medio celular para prevenir el lavado de dichas bacterias del reactor
es mucho menor que el de estas últimas.
La velocidad de remoción de nitrato puede relacionarse con la velocidad
específica de crecimiento,
ȝD D
UD U Dm (3.53)
YD KD D
UD: Velocidad específica de remoción g N-NO3±(gSSV·d)±.
YD: Coeficiente de rendimiento SSV (N-NO3± remov.)±.
UDm: Velocidad específica máxima de remoción de nitrato
g N-NO3± (g SSV)±.
La influencia de la concentración de materia orgánica sobre la desnitrificación
puede expresarse mediante una relación similar,
S
UD U Dm (3.54)
KS S
donde:
S: Concentración de sustrato orgánico mgL±.
Como ambos, tanto la concentración de nitrato como de sustrato de
origen orgánico influyen sobre la velocidad de desnitrificación, una mejor
aproximación se obtiene cuando la velocidad de remoción de nitrato se
expresa,
S D
UD U Dm (3.55)
KS S K D D
Existen evidencias experimentales de que los valores de KD son relativamente
bajos (0,1-0,2 mg N-NO3± L±).26 A partir de este hecho, y analizando la ecua-
ción (3.52), puede concluirse que concentraciones de N-NO3 ± tan bajas como
1-2 mgL± no tienen efecto sobre la velocidad de desnitrificación. Por lo tanto, la
concentración de nitrato no influye en la velocidad de ese proceso, a menos que
la concentración sea mucho más baja que la del intervalo analizado. Esto último,
aunque cierto, quizás carezca de interés práctico por el valor tan bajo de
concentraciones de que se trata.
Por otro lado, el valor de KS dependerá del tipo de compuesto orgánico que
se emplee como dador de electrones. Valores de KS para el metanol han sido
reportados entre 0,1 y 72 mgL±.27
Cuando se emplea agua residual municipal como sustrato orgánico, expre-
sado como DBO, los valores de KS son mayores que los reportados para el
114
Oxidación Biológica. Nitrificación
115
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
1
UD kdD , considerando k 0,07 d±
șDm dD
116
Oxidación Biológica. Nitrificación
Q D0 D 1 k dD ș D,diseño
VX ș D,diseño Yn
Notas bibliográficas
1 MC CARTY, P. L.³7KHUPRG\QDPLFVRIELRORJLFDOV\QWKHVLVDQGJURZWK´$GY
in Water Poll. Res., vol. 2, Pergamon Press, EE. UU. 1964.
2 JORGENSEN, P.E., T. ERIKSEN, AND B. K. JENSEN: ³(VWLPDWLRQRIYLDEOHELRPDVVLQ
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]DWLRQUDWHDQG)'$+\GURO\VLV´Water Res., vol. 26, no. 11, 1992.
3 PÉREZ, J. Y C. MENÉNDEZ: Análisis cromatográfico de los residuales de pulpa y
papel antes y después de un tratamiento biológico, inédito, ISPJAE, Ciu-
dad de La Habana, 1986.
4 SERVIZI, J.A. AND R. H. BOGAN: ³)UHH HQHUJ\ DV D SDUDPHWHU LQ ELRORJLFDO
WUHDWPHQW´Proceeding, ASCE, vol. 89, sa, vol. 3, no. 17, 1963.
5 ECKENFELDER, W.W. AND'-2¶&ONNOR: Biological Waste Treatment, Per-
gamon Press, Oxford, 1961.
6 BENEFIELD, L. AND C. RANDALL: Biological Process Design for Wastewater
Treatment, Prentice Hall Series in Environmental Sciences, EE. UU., 1980.
7 HOOVER, S. R. AND N. PORGES:³$VVLPLODWLRQVRIGDLU\ZDVWHVE\DFWLYDWHG
VOXGJH´3DUW,,Sewage and Industrial Wastes, vol. 24, no. 3, 1952.
8 MCCABE, B.J. AND W. W. ECKENFELDER:³%2'UHPRYDODQGVOXGJHJURZWKLQ
WKH DFWLYDWHG VOXGJH SURFHVV´ -RXU Water Poll. Control Fed., vol. 33,
no. 3, 1961.
9 WILSON, I. S.:³&RQFHQWUDWLRQHIIHFWVLQWKHELRORJLFDOR[LGDWLRQRIWUDGHZDV
WHV´ Proceding 1st International Conference Water Pollution Resear-
ch, Pergamon Press, London, 1962.
10 WOHRMAN, K.: Biological Treatment of Sewage and Industrial Wastes,
vol. I, Ed. Mc Cabe, EE. UU., 1956.
11 GRAU, P., M. DOHANYOS, AND J. CHUDOBA:³.LQHWLFVRIPXOWLFRPSRQHQWVXEV
WUDWHUHPRYDOE\DFWLYDWHGVOXGJH´Water Res., vol. 9, no. 6, 1975.
12 ECKENFELDER, W.W.: Industrial Water Pollution Control, McGraw Hill,
USA 1966.
13 LAWRENCE, A.W. AND P.L. MCCARTY³8QLILHGEDVLVIRUELRORJLFDOWUHDWPHQW
GHVLJQDQGRSHUDWLRQ´3URF$P6RF&LYLO(QJUV-RXUSan. Eng. Div.
96 (SA3), 1970.
117
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
118
Lodo Activado
CAPÍTULO 4
LODO ACTIVADO
4.1. GENERALIDADES
Bajo la denominación del lodo activado se incluye un conjunto de procedi-
mientos de tratamiento en los que se destaca, como elemento común, el íntimo
contacto del agua residual con una masa biológica preformada y en suspensión,
en un tanque aereado. Esta biomasa esta constituida por un cultivo mixto de
microorganismos que forma, junto con otras sustancias orgánicas e inorgánicas
un conglomerado floculento. Mediante este proceso los compuestos orgánicos
contenidos en las aguas residuales son utilizados como sustratos.
La primera información que se tiene del empleo del lodo activado para el
tratamiento de aguas residuales data de 1914 en Manchester, Inglaterra.
A diferencia de los cultivos puros en los que las bacterias se mueven libremente,
en el lodo activado estas se encuentran en forma de zooglea, de manera que forma
con facilidad flóculos de buenas propiedades de sedimentación.
Entre los grupos y especies de bacterias que con más frecuencia se encuen-
tran presentes en los lodos activados, pueden citarse:
Pseudomonas, flavobacterias chromobacterias, azotobacterias, micrococos,
bacilos (b. subtilis, b. megaterium), alcalígenes, y nocardias. En menor propor-
ción se encuentran los hongos, levaduras y mohos.
Entre las bacterias nitrificantes pueden estar presentes las nitrosomonas y
las nitrobacterias. Es común que se reporte en lodo activado la presencia de
protozoos tales como vorticelas, opercularias y epistílis entre otros. Otros
microorganismos superiores presentes pueden ser los rotíferos.
En los lodos activados se aprecia con mucha claridad el vínculo presa-
predador en la relación que existe entre bacterias y protozoos. El papel de las
bacterias es descomponer, por oxidación, la materia orgánica. En el proceso del
lodo activado las bacterias son los microorganismos más importantes debido a
que son ellas las responsables de la descomposición de la materia orgánica con-
tenida en el agua residual a tratar. Los protozoos se alimentan de las bacterias
que se mueven libremente, y así contribuyen a la clarificación del efluente del
119
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
proceso del lodo activado, que de otra forma tendría una concentración más
elevada de sólidos volátiles en suspensión.
Por otra parte, los hongos filamentosos constituyen microorganismos inde-
seables porque su presencia puede traer como consecuencia dificultades con la
sedimentación de la biomasa. Estos microorganismos pertenecen a los grupos:
Sphaerotilus, leptomitus, laucothrix, thiothrix, geotríchum, y otros.
La composición del lodo activado, en lo cuantitativo, depende de la compo-
sición del sustrato que le sirve de alimentación y de los parámetros tecnológicos
del proceso: tiempo de retención hidráulico, tiempo de retención medio celular,
(edad del lodo) y la remoción específica de sustrato (carga de lodo).
De acuerdo con su facilidad de sedimentación, los lodos pueden clasi-
ficarse en:
Floculentos.
No floculentos.
Abultados.
Un breve análisis de las características fundamentales de cada uno de estos
tipos del lodo arroja los siguientes resultados:
120
Lodo Activado
Fig. 4.1. Influencia de la edad del lodo sobre la dispersión de los sólidos.
Fig. 4.2. Relación entre el índice volumétrico del lodo (IVL) y la veloci-
dad de sedimentación.
121
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
122
Lodo Activado
123
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Simbología
1. criba So: DBO ó DQO afluente
2. desarenador S2: DBO ó DQO efluente
3. sedimentador primario X: concentración de lodo en el TA
4. tanque de aereación (TA) Xr: concentración de lodo en la
5. sedimentador secundario recirculación
6. recirculación de lodo X2: concentración de lodo en el
7. afluente al TA efluente
8. lodo a digestión Qw: flujo de exceso de lodo
Qr: flujo de recirculación
V
șm (h ó d) (4.2)
Q0 Qr
124
Lodo Activado
ó (4.6)
o sea,
S0 S2
ǻ Bv
ș
kg m 3d 1 (4.8)
125
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
ǻ%x
ǻ Bv kg kg 1 1
d (4.14)
X
La edad del lodo puede calcularse a partir de la relación que existe entre la
masa del lodo que está presente en el sistema y la masa del lodo que se extrae
diariamente.
VX G
șx (4.15)
X w Qw X 2 Q0 Qw
donde:
G: Masa del lodo en el sedimentador secundario y en las tuberías. General-
mente no se comete mucho error si se supone que G = 0
Si los lodos del proceso forman buenos flóculos y poseen buenas propie-
dades de sedimentación, puede suponerse que la cantidad del lodo o biomasa
que se pierde en el sobrenadante del sedimentador secundario es desprecia-
ble cuando se compara con la que se extrae por la corriente Qw:
X 2 Q0 Qw ¢ ¢ X w Qw (4.16)
Cuando se está en presencia de lodos no floculentos, la pérdida de biomasa
en el sobrenadante del sedimentador secundario puede ser apreciable, pudiendo
llegar hasta 40 y 60 % del lodo total que se extrae, y no puede obviarse la
pérdida del lodo por este concepto.
En el caso en que las condiciones de los flóculos son tales que se cumple la
expresión 4.16, se tiene que:
VX
șx (4.17)
Qw X w
Por otro lado, si la extracción del lodo se realiza directamente del tanque de
aeración:
X Xw
la ecuación 4.17 se transforma:
V
șx (4.18)
Qw
Un aspecto importante a tener en cuenta es que en aquellos casos en los
que no exista recirculación, se cumple que el tiempo de retención medio celular
es igual al tiempo de retención hidráulico.
Tx = T cuando R = 0 (4.19)
127
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
128
Lodo Activado
129
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Tabla 4.1. Diferentes variantes del proceso del lodo activado (los parámetros
de carga están expresados como DBO5 y sólidos suspendidos
volátiles, SSV)
Variantes Bv Bx Tx T
(kg·m-3·d-1) (kg·kg-1d-1) (d) (h)
Sistemas de baja carga 0,1-0,3 0,05-0,10 ! 25 24-72
Sistemas de carga 0,5-1,5 0,2-0,5 3-15 4-12
media
Estabilización por
contacto
Sistemas de alta carga ! 1,5 ! 0,5 3 1-2
Lodo activado en dos
etapas:
Primera etapa 10 1-2 1 1
Segunda etapa 0,5-1,0 0,2-0,5 3-15 4-6
130
Lodo Activado
131
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Aeración escalonada
Cuando se emplean reactores de flujo de pistón en el tratamiento de aguas
residuales, la demanda de oxígeno es variable a lo largo de toda su longitud.
Si el suministro del oxígeno es uniforme, puede quedar en defecto a la entra-
da del tanque de aeración y en exceso a la salida (figura 4.10.a).
Con el objetivo de suministrar en cada momento el oxígeno requerido para
satisfacer la demanda, surgió la variante de la aereación escalonada (figura
4.10.b).
132
Lodo Activado
133
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Dosificación gradual
Esta variante es conocida como sistema Gould. Para uniformar la carga
aplicada y la velocidad de consumo de oxígeno a lo largo del tanque de
aereación, se dosifica la alimentación, introduciéndola por varios puntos a lo
largo de la longitud del tanque (figura 4.11).
El tanque de aereación se divide por medio de deflectores en tres o más
cámaras conectadas entre sí en serie.
El lodo que se recircula se introduce en la primera de las cámaras.
Este proceso se opera de acuerdo con un régimen hidráulico de flujo a
pistón y el sistema de aereación es a base de difusores. De esta manera se
logra una eficiencia de remoción entre 85 y 95 %. 10
Estabilización por contacto
Cuando el agua residual tiene una alta concentración de contaminantes
en forma suspendida no sedimentable y en forma coloidal, puede obtenerse
una buena eficiencia en la remoción por adsorción en el lodo bien aereado y
previamente estabilizado.
Esta variante del lodo activado se basa en el postulado de que la elimina-
ción de la DBO tiene lugar en dos etapas. La primera es la fase de adsorción
ya mencionada, llamada fase de contacto y la segunda, fase de oxidación,
en la que se lleva a efecto la asimilación metabólica de la materia orgánica
(figura 4.11.d).
134
Lodo Activado
donde:
X0: Concentración inicial de biomasa (mgL±).
S0: DBO inicial (mgL±).
S: DBO en el instante t (mgL±).
n: Orden de la reacción.
kn: Constante de velocidad de remoción.
Si la reacción es de orden cero (n = 0), la ecuación 4.20 integra:
S0 S k0 X 0 t (4.21)
Por tanto, la fracción removida viene dada por:
S0 S X0
k0 t (4.22)
S0 S0
Para primer orden (n = 1), de la ecuación 4.20 se obtiene:
S § X ·
exp ¨¨ k1 0 t ¸¸ (4.23)
S0 © S0 ¹
135
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
S0 S § X ·
y 1 exp ¨¨ k1 0 t ¸¸ (4.24)
S0 © S0 ¹
Para segundo orden (n = 2):
S 1
S0 X0
1 k2 t (4.25)
S0
X0
k2 t
S0 S S0
y S0 X (4.26)
1 k2 0 t
S0
136
Lodo Activado
n
dS Q0 S0 §S · Q S
kn X ¨¨ ¸¸ 0 (4.27)
dt V © S0 ¹ V
dS
en estado estacionario 0 , y la ecuación 4.27, queda:
dt
S0 S X
kn n S n 0 (4.28)
ș S0
donde:
V
ș d
Q0
X: Concentración de SSVLM (mgL±).
Resolviendo la ecuación 4.28 para:
n = 0; n = 1; n = 2;
se obtiene:
S0 S X
n=0 k0 ș (4.29)
S0 S0
X
k1 ș
S0 S S0
n=1 S0 X (4.30)
1 k1 ș
S0
X
1 4 k2 ș 1
S0 S S0
n=2 S0 X (4.31)
2 k2 ș
S0
137
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
138
Lodo Activado
139
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
cación. Esto puede apreciarse en la figura 4.15. El gráfico de esta figura fue
obtenido en un proceso a templa a partir del cual puede concluirse que existe
una relación lineal entre la velocidad de remoción de DBO y la concentración
inicial del lodo en el sistema.
140
Lodo Activado
Xc
Fig. 4.17. Relación entre la edad del lodo y la fracción de células activas.
Sin embargo, si el sistema del lodo activado está sobrecargado, es decir,
está siendo operado a bajos tiempos de retención, entonces un incremento
de la concentración del lodo dará como resultado un aumento de la eficien-
cia de purificación.
Teniendo en cuenta el efecto que tiene sobre la eficiencia de purificación la
relación que existe entre el tiempo de retención (T ) y la concentración de biomasa
(X), es que se definió la carga de lodo:
S0
Bx (kg kg±d±)
X
141
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
4.5.3. Temperatura
La temperatura es otro de los parámetros que inciden de manera importante
en la eficiencia de purificación.
Similarmente a lo que ocurre en las reacciones químicas, en los procesos
biológicos el efecto de la temperatura puede ser expresado a través de una
constante de velocidad en la que se cumpla la ecuación de Arrhenius:
K = A exp (-E/RT) (4.32)
donde:
K: Constante de velocidad cuyas unidades depende del orden de la reacción.
E: Energía de activación.
R: Constante de los gases.
T: Temperatura absoluta.
Aplicando logaritmo a la ecuación 4.32:
E
ln K ln A (4.33)
RT
Para dos temperaturas, T1, T2 y sus correspondientes constantes, K1, K2
puede obtenerse:
K1 E § T1 T2 ·
ln ¨¨ ¸¸ (4.34)
K2 R © T1 T2 ¹
En la práctica del tratamiento de aguas residuales el intervalo de temperatu-
ra no es muy amplio, por tanto, el producto T1T2 es aproximadamente constante
y la ecuación 4.34 puede escribirse:
K1
Ȟ T1 T2 (4.35)
K2
en la que
n = exp (E/RT1T2)
142
Lodo Activado
143
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Fig. 4.18. Fracción volátil de los sólidos suspendidos y la edad del lodo.
El coeficiente K varía generalmente entre los valores 0,2 y 0,7 en dependen-
cia de la edad de lodo.
Para sistemas de baja carga, suponiendo T x = 30 d
f0 = 0,60 y la ecuación 4.41 queda:
DBO5 T DBO5 d 0,173 X 2 (4.42)
Para sistemas de carga media, suponiendo T x = 5 d. f0 = 0,72 y la ecuación
4.41 queda:
DBO5 T DBO5 d 0,465 X 2 (4.43)
Para sistemas de alta carga, suponiendo T x = 1 d, f0 = 0,85 y de la ecuación
4.41 se obtiene:
DBO5 T DBO5 d 0,686 X 2 (4.44)
Si en lugar de trabajar con la DBO5 el sistema se está analizando en
función de la DBO última o de la DQO, la concentración de estas que apor-
tan los sólidos suspendidos del efluente secundario puede calcularse:14
DBOu s 1,42 f o X 2 (4.45)
145
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
146
Lodo Activado
V
Considerando que: Q ș
0
147
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
S0 S2 ǻS
Qw X b,w Q0 Qw X b,2 1
V Xb șx
dX b
y que en estado estacionario 0 , puede simplificarse la ecuación 4.47 y
dt
despejar el término Xb que representa la concentración de biomasa en el reactor
o tanque de aeración.
Y șx ǻ S
Xb (4.48)
ș 1 kb ș x
La ecuación 4.48 brinda la relación entre la concentración de biomasa en
estado estacionario y las variables edad del lodo, tiempo de retención y remo-
ción de DBO una vez que son conocidos el rendimiento (Y) y la constante de
autooxidación (kb).
En la tabla 4.2 se ofrecen algunos valores típicos de estos dos parámetros.
ǻ; b
El término
ǻ%v de la ecuación 4.52 tiene las mismas dimensiones que Y, kg
kg± y es denominado rendimiento observado:
kb
Yob Y (4.53)
ǻ%x
149
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
150
Lodo Activado
ȕ Y0 ǻ6 X b , N
0 (4.58)
ș șx
despejando Xb,N:
ȕ Y0 ǻ6 șx
X b ,N (4.59)
ș
La concentración de biomasa orgánica (Xb,o), se obtiene de la suma de las
ecuaciones 4.57 y 4.58:
Y 0 ǻ6ș x § 1 ȕ kd ș x ·
X ¨ ¸ (4.60)
b,o
ș ¨ 1 k ș ¸
© d x ¹
De acuerdo con lo anterior, la fracción degradable de los constituyentes
orgánicos de la biomasa, fd, es igual a
X b,D 1 ȕ
fd
X b,o 1 ȕ kd șx (4.61)
151
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
f 0 m Y0 ǻ6 X b . M
0 (4.62)
1 f 0m ș șx
despejando Xb,M:
f 0 m Y0 ǻ6 ș x
X b ,M (4.63)
1 f 0m ș
La concentración total de biomasa se obtiene sumando las ecuaciones 4.60
y 4.63:
Y0 ǻ6 ș x § 1 ȕ kd ș x f 0m ·
Xb ¨ 0 ¸
¸ (4.64)
ș ¨ 1 k ș 1 f m
© d x ¹
Teniendo en cuenta que:
X b ,o
Y0 ,ob
ǻ6
șx
ș
La ecuación 4.60 puede escribirse:
§ 1 ȕ kd șx ·
Y0 , ob Y0 ¨¨ ¸
¸ (4.65)
© 1 kd șx ¹
para
șx o 0
Y0 ,ob o Y0
obteniéndose un resultado que es lógico.
Por otra parte, para aquellos casos en los que:
șx o f
Y0 , ob o ȕ Y0
Este último resultado de que para altas edades del lodo el valor del coefi-
ciente Y0,ob tiende a la fracción no degradable de la biomasa, es coherente con la
realidad práctica. De aquí puede concluirse que para edades del lodo pequeñas
y moderadas, pueden utilizarse las ecuaciones 4.48 hasta la 4.54. Para altas
edades del lodo deben tenerse en cuenta las consideraciones que le siguen hasta
la ecuación 4.65.
152
Lodo Activado
Į f o X 0 X 1,N
0 (4.70)
ș șx
despejando:
Į f o X 0 șx
X 1,N (4.71)
ș
153
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
1 fo X 0 șx
X 1,M (4.73)
ș
La concentración total del lodo primario se obtiene sumando las ecuaciones
4.71 y 4.73:
fo X 0 ș x § 1 fo ·
X1 ¨Į ¸ (4.74)
ș ¨ f o ¸¹
©
La concentración total del lodo activado en el tanque de aeración en
condiciones de estado estacionario viene dado por la suma de la concentra-
ción total de biomasa (ecuación 4.64) y la de los sólidos suspendidos prima-
rios (ecuación 4.74):
Y0 ǻ6 ș x § 1 ȕ kd f 0m ·
Xt X b X1 ¨ ¸
ș ¨1 k ș 1 f 0m ¸
© d x ¹
f o X 0 șx § 1 fo · (4.75)
¨Į ¸
ș ¨ fo ¸¹
©
Ejemplo 4.1
Se desea mantener un sistema del lodo activado operando a una edad del
lodo de tres días para las siguientes condiciones de trabajo y de acuerdo con el
esquema de la figura 4.19.
Q0 = 15000 m3 d±
154
Lodo Activado
PB = Yob Q0 (S0±S2).
PB = 0,46 (15 000) (0,45).
PB = 3 105 kg d±.
3 0,50 ,45
b) X b 2 ,477 kg m 3
0,25 >1 0,03 3 @
Suponiendo X2 | 0:
3 750 2,477
3
Qw 5,662
Qw = 546,8 m3 d±.
d) Suponiendo: X2 | 0
(Q0 + Qr) X = Xw Qw + Xw Qr
37 155 3 095,98
Qr 10 693,57 m 3 d 1
3,185
Ejemplo 4.2
En una planta que emplea lodo activado está siendo tratada un agua residual
con las siguientes características:
Sólidos suspendidos totales = 0,275 kg m±
Flujo de agua residual = 3 785 m3d±
Volumen efectivo del tanque de aereación = 7 570 m3
DBO5 de los sólidos totales = 0,3 kg m±
DBO5 de los sólidos disueltos = 0,15 kg m±
Toda la DBO5 es removible, por tanto ' S = 0,3
155
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
E= 0,22
fom = 0,05
26 20
a) kd 26 o C 0,15 1,047 0,197 d 1
0,22 0 ,650 ,3 10
X b, N 0,21 kg m 3
2
156
Lodo Activado
157
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
1
Los pares de valores de
șx y ǻ%x que se obtienen para cada edad del lodo
se grafican según la figura 4.22. La pendiente de la recta que se obtiene da el
valor del rendimiento Y y el intercepto con el eje de ordenadas el valor de la
constante de autooxidación kb.
Ejemplo 4.3
Se desea determinar los parámetros Y y k b de un agua residual de ori-
gen industrial utilizando un tanque de aereación con un volumen efectivo
de 10 L. El agua residual sedimentada se alimentó a un flujo de 20 L d ±
para obtener un tiempo de retención de 12 horas durante todo el experi-
mento.
La extracción del lodo se hizo directamente del tanque de aereación
una vez al día, excepto para la primera de las corridas, que por ser
relativamente elevado, el volumen de extracción, se hizo en dos partes
(tabla 4.4).
158
Lodo Activado
S0 Se Qw X Xe
(mgL ) (mgL-1)
-1
(L d-1) (mgL-1) (mgL-1)
750 75 2,4 2700 10
800 96 3,0 2347 5
775 116 3,9 1757 2,5
825 148 4,8 1504 2,5
850 170 5,4 1360 2,7
Tx 1 ' Bx
Tx
(d) (d-1) (kg kg-1 d-1)
4,16 0,24 0,50
3,33 0,30 0,60
2,56 0,39 0,75
2,08 0,48 0,90
1,85 0,54 1,00
1
Al graficar
șx contra ' Bx se obtiene la recta de la figura 4.22.
159
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Rendimiento, Y = 0,53
Constante de auto-oxidación, kb = 0,007 d±
Ejemplo 4.4
A partir de la información suministrada en el ejemplo anterior, determine la
constante de velocidad de reacción:
S
Graficando ' Bx contra S de acuerdo con una modificación de la ecuación
0
160
Lodo Activado
vamente. Por otra parte, a medida que disminuye la carga orgánica o au-
menta la edad del lodo, existirá una acumulación de residuos celulares no
biodegradables y cuyo contenido de nitrógeno y fósforo es de 7 % y 1 %.
Por tanto el nitrógeno y el fósforo necesarios dependen de la edad del lodo.
Bajo estas condiciones, y teniendo en cuenta además que el requerimiento
de estos nutrientes puede ser estimado a partir de la cantidad de estos dos
elementos que están contenidos en el lodo que se extrae del proceso, se
tiene que la necesidad de ambos elementos será:
fd 0,78 f d
N kg d 1 0,123
0,78
PB 0,07
0,78
PB (4.76)
fd 0,78 f d
P kg d 1 0,026
0,78
PB 0,01
0,78
PB (4.77)
donde:
PB: Producción de biomasa (ecuación 4.51)
1 ȕ
fd , 0,78 (1 - ȕ )
1 k d ȕ ș X
§ X b,D ·
fd: fracción degradable de los SSVLM ¨¨ f d ¸
© X b ,o ¸¹
En las ecuaciones 4.76 y 4.77 se ha considerado que 77 % de la fracción
degradable es biológicamente activa.19
Notas bibliográficas
1 PAVÓN, J. L., M. W. TENNEY AND W. F. ECHELBORGER:³%DFWHULDOH[RFHOOXODU
SRO\PHUVDQGELRORJLFDOIORFXODWLRQ´-RXUWater Poll. Control Fed., vol.
44, no. 3, 1972.
2 BISOGNI, J. J. AND W. LAWRENCE:³5HODWLRQVKLSEHWZHHQELRORJLFDOVROLGVUHWHQ
WLRQWLPHDQGVHWWOLQJFKDUDFWHULVWLFVRIDFWLYDWHGVOXGJH´SWater Res.,
vol. 5, no. 9, 1971.
3 CHAO, A. C. AND T. M. KEINATH:³,QIOXHQFHRISURFHVVORDGLQJLQWHQVLW\RQ
VOXGJHFODULILFDWLRQVDQGWKLFNHQLQJFKDUDFWHULVWLFV´Water Res., vol. 13,
no. 2, 1979.
4 LOVETT, D. A., B. V. KAVANAGH AND L. S. HERBERT:³(IIHFWRIVOXGJHDJHRQ
substrate composition on the settling and dewatering characteristics of
DFWLYDWHGVOXGJH´Water Res., vol. 17, no. 4, 1983.
161
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
162
Lodo Activado
163
Transferencia de Oxígeno
CAPÍTULO 5
TRANSFERENCIA DE OXÍGENO
5.1. INTRODUCCIÓN
La transferencia de oxígeno es un elemento clave en los procesos bioló-
gicos aerobios.
Exceptuando casos particulares, la oxigenación de un medio se realiza
mediante la aereación aprovechando el hecho de que el aire contiene aproxi-
madamente 21 % en volumen de oxígeno.
La transferencia se puede realizar a través de la introducción de aire u
oxígeno en el agua o exponiendo el líquido a la atmósfera en forma de pe-
queñas gotas.
Cualquiera que sea el procedimiento seleccionado para producir la
aereación, existe una serie de elementos básicos del proceso en sí que son
comunes en todos ellos.
165
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
donde:
M: masa de oxígeno transferida en la unidad de tiempo (kg h±).
A: área seccional a través de la cual ocurre la transferencia.
KL, Kg: coeficientes de transferencia en la película de líquido y gas respec-
tivamente (L m ±h ±).
Cs: concentración de saturación de oxígeno en la fase líquida.
C: concentración de oxígeno en el líquido.
Pg, P: presión parcial de oxígeno en el aire.
A
donde: k L a K L , coeficiente global de transferencia de oxígeno, h±.
V
166
Transferencia de Oxígeno
167
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
k L a t k L a 20 o C ș t 20 (5.4)
El valor de T es función de las condiciones de trabajo. Se suele situar en el
intervalo de 1,015 y 1,040. El valor típico para todo tipo de aereador es 1,024.
2. Turbulencia. Un incremento de la turbulencia da como resultado un aumento
en el coeficiente de transferencia.
3. Altura del líquido. El efecto que tiene la altura de la columna del líquido bajo
aereación sobre el coeficiente global de transferencia de oxígeno depende
en cierta medida del método empleado en la aereación. Para muchos siste-
mas de aereación por difusión kLa varía con la altura de acuerdo con la
relación:
n
k L a1 § H1 ·
¨¨ ¸¸ (5.5)
k L a2 © H2 ¹
donde el exponente n tiene un valor cercano a 0,7 para la mayoría de los
sistemas.
4. Características del medio. El valor del coeficiente de transferencia de oxíge-
no del agua pura puede diferir considerablemente del de un medio que con-
tenga compuestos orgánicos u otras sustancias en disolución.
Con el objetivo de comparar la velocidad de transferencia de oxígeno en el
agua con la de otro medio cualquiera para un implemento de aereación par-
ticular se define el coeficiente D.
168
Transferencia de Oxígeno
k L a del medio
Į
k L a del agua limpia
El valor de D puede no ser constante y variar durante el proceso que tiene
lugar en el bio-reactor. En la tabla 5.2 se reportan valores típicos de D para
diferentes implementos de aereación.
La ecuación 5.2 queda entonces:
dC
Įk L a ȕ CsC 1,02t 20 (5.6)
dt
y si se toma en consideración la profundidad del tanque:
dC
Įk L a ȕ Cs,mC 1,02 t 20 (5.7)
dt
169
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
5.2.4. Procedimiento
Cálculo de kLa
El procedimiento general comprende la eliminación del oxígeno disuelto
en un volumen conocido de agua, mediante la adición de sulfito de sodio, y la
posterior reoxigenación hasta valores cercanos a la concentración de satu-
ración.5
1. El tanque de aereación se llena con agua limpia del acueducto.
2. Debe ser reducida la concentración de oxígeno disuelto del tanque hasta un
valor cercano a cero. Para esto puede utilizarse una solución de sulfito de
sodio a razón de 7,88 mg por cada mg de oxígeno disuelto del agua. Cuando
se desea acelerar la etapa de de-oxigenación puede utilizarse una solución
de Co2+ como catalizador a razón de 5 mgL±.
3. Una vez que la concentración de oxígeno disuelto alcanza un valor cercano a
0,5 mgL± se pone en funcionamiento el implemento de aereación.
4. A partir del momento en que la concentración de oxígeno sea igual a
1 mgL± se hacen mediciones de la concentración a intervalos regulares
de tiempo.
5. Se tabulan los resultados y se procede según se ilustra en el ejemplo 5.1.
170
Transferencia de Oxígeno
171
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
t = 25 oC Cs = 8 mgL±
Solución:
Se grafica en papel semilogarítmico (Cs - C) en función del tiempo t, según
la figura 5.3.
172
Transferencia de Oxígeno
2,3
Por tanto, considerando que kL a
t90 , de la figura 5.3 se tiene:
Velocidad I kLa = 20,35 h±
Velocidad II kLa = 10,60 h±
Velocidad III kLa = 6,52 h±
Ejemplo 5.2
Determine la capacidad de oxigenación del implemento utilizado para el ejem-
plo 5.1 cuando se trabaja a la velocidad II.
Solución:
CO = 0,024 kLa Cs = 0,024 x 10,60 x 8 = 2,03 kg m± d±
173
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
r
donde: rX (5.13)
X
ǻ6
y ǻ%X (5.14)
șX
r: velocidad de consumo de oxígeno mgL±d±.
X: concentración de sólidos suspendidos volátiles (SSV) en el tanque de
aereación mgL± .
Y c: kg O2 consumido (kg DBO removido)±.
b: kg O2 consumido (kg SSV autooxidado.d)±.
' Bx: remoción específica de DBO kg kg±d±.
' S = So - S mg L±.
T = tiempo de retención hidráulico d.
La ecuación 5.12 puede expresarse también tomando como base la DQO.
Valores típicos de Y c y b se reportan en la tabla 5.4.
174
Transferencia de Oxígeno
Procedimiento
Se realizan corridas experimentales a diferentes edades de lodo, 3 como
mínimo. Para cada corrida se registran los valores promedios de los siguientes
parámetros: So, S, X, T .
Para cada corrida:
1. Se toma una muestra representativa del licor mezclado del reactor y se intro-
duce en un recipiente en el que se pueda medir la disminución en el tiempo de
la concentración de oxígeno disuelto.
175
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
176
Transferencia de Oxígeno
Ejemplo 5.3
Los datos que se dan a continuación fueron obtenidos a escala de laborato-
rio trabajando a cuatro edades de lodo diferentes y midiendo en cada caso la
velocidad de respiración r de la biomasa obtenida en el licor mezclado. Determi-
ne los coeficientes Y c y b. (Tabla 5.5)
Tx X r ' Bx
(d) (mg L-1) (mg L-1 h -1) (kg kg -1 d -1)
3 800 26,6 1,25
5 1 200 35,0 1,00
7 1 800 30,0 0,50
10 2 500 20,8 0,25
Solución:
A partir de los datos de velocidad de respiración r se calcula la velocidad de
respiración específica rx.
177
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Cs,m
CO n Y c ǻ%V b X (5.16)
Cs,m C
donde:
'Bv: Razón de carga volumétrica, kg m± d±.
X: Concentración de SSV en el tanque de aereación, kg m±.
C: Concentración límite permisible de oxígeno disuelto, mgL±.
La masa de oxígeno que se disuelve en el agua en la unidad de tiempo en
condiciones normales (20 oC y 101,3 kPa y cero oxígeno disuelto) es:
178
Transferencia de Oxígeno
1
Q S 0 S 10 3 kg / g
k gO2 d 1,42 ǻP
f
donde:
' P: es la biomasa producida (kgd±).
f: es la relación entre DBO5 y DBOu.
En el desarrollo del epígrafe 5.3, solo se consideró el requerimiento de oxí-
geno para satisfacer las necesidades de consumo del agua residual y de la
biomasa. Sin embargo, el suministro debe ser adecuado para:
satisfacer la DBO del agua residual,
satisfacer la respiración endógena de la biomasa,
proporcionar un adecuado régimen de mezcla y
mantener una concentración de oxígeno disuelto en el reactor, que no
inhiba el proceso aerobio (generalmente superior a 0,2 mgL±).
179
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
180
Transferencia de Oxígeno
181
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
(b)
Fig. 5.8 Aereadores mecánicos. a) Aereador superficial. b) Aereador
de turbina.
182
Transferencia de Oxígeno
183
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
184
Transferencia de Oxígeno
E E0
ȕ Cs,m C Į1,02 t 20
Cs20 oC (5.20)
186
Transferencia de Oxígeno
187
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
C N t Qs n d v ȕCsC Į 1,02 t 20
x
G (5.28)
Nt: velocidad periférica del impelente m s±.
d: diámetro del impelente m.
x, n, v: características del implemento de aereación.
Es práctica común utilizar una relación entre el diámetro del impelente y el
diámetro equivalente del tanque de aereación entre 0,1 - 0,2 y una velocidad
periférica del impelente comprendida entre 3,1 - 5,5 m s±.
188
Transferencia de Oxígeno
Ejemplo 5.5
Con el propósito de aerear un reactor de 5 000 m3 de volumen efectivo se
requieren 300 kgO2h±.
Diseñe el sistema de aereación mediante difusores para las siguientes con-
diciones:
temperatura 28 0C
concentración de oxígeno disuelto límite = 2 mgL±
E = 0,90 Pa = 101,8 kPa
Presión de aire requerida en la descarga = 156,5 kPa
La información que se dispone del proveedor se detalla:
Qs = 0,2 m3 min± unidad± a 20 0C y 101,3 kPa
D = 0,8
C = 0,2076
n = 1,05
m = 0,70
p = 0,32
Solución:
Profundidad seleccionada (H) = 4,5 m
ancho = 8,0 m (d 2 H)
longitud = 139 m
Cálculo de Cs,m:
a 28 0C: Cs = 7,9 mgL±
U = 990 kg m±
H = 4,5 m
Pa 0,5P
Cs,m Cs h
Po
Ph = 0,0098 U·h (kPa)
Ph = 0,0098 · 990 · 5,0
Ph = 43,66 kPa
101,8 0 ,5 43,66
Cs,m 7 ,9 9,64 mgL1
101,3
Cálculo de las condiciones reales de trabajo de los difusores:
G = C Qsn Hm W±p D (E Cs,m - C) 1,02 W±
G = 0,2076 · 0,2 1,05 · 4,5 0,70 · 10 ± >0,8 (0,90 · 9,64 - 2,0)@ 1,02 8
G = 0,329 kg h± unidad± a 28 oC
189
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
300 kgh 1
ȣ 912 unidades
0,329 kgh 1 unidad 1
Espaciamiento entre unidades,
139 m
0,15 m
912 unidades
Flujo de aire del compresor,
Qs = 0,2 x 912 = 182,4 m3 min±
Potencia del compresor requerido:
E = eficiencia 70 %
' P = 54,7 kPa (' P = P2±P1)
P1 y P2 = presión a la entrada y a la descarga respectivamente.
Q s ǻ3
potencia kW
E
182,4 54,7
PT 237 kW
0,7 x 60 seg min 1
Capacidad de transferencia necesaria en condiciones reales.
GX 0,329 912
N 1, 27 kgO 2 (kWh) -1
PT 237
Capacidad de transferencia requerida en condiciones estándar.
N Cs20 0 C
No
ȕCs,mC Į 1,02t 20
1,27 9,2
No
>0.909,64 2 @ 0,80 1,028
No 1,86 kO 2 kWh 1
Se necesita disponer de un implemento cuya capacidad de transferencia en
condiciones estándar sea superior a 1,86 kg O2 (k w h)±.
Eficiencia de la transferencia de oxígeno,
190
Transferencia de Oxígeno
O2 absorbido
E 100
O2 suministra do
Se asume que el oxígeno absorbido es el que se necesita, 300 kg h±.
Oxígeno suministrado = 16,56 Qs = 3020 kg h ±
E = 9,9 %
La eficiencia de la transferencia en condiciones estándar:
Cs20 º C
Eo E
(ECsm C ) D1,02t 20
Eo = 15 %
El dispositivo que se utilice debe tener además una eficiencia de transferen-
cia de 15 % en condiciones estándard.
Ejemplo 5.6
Para el mismo caso del ejemplo anterior, considere el diseño de un sistema
de aereación con turbinas.
Información adicional del proveedor:
Pd = 0,95 Eo = 20 % a = 0,85
Solución:
Cs,m = 9,83 mgL±
Se asume como condición de trabajo que el oxígeno absorbido por el sistema
debe ser igual al oxígeno que se requiere = 300 kg h±
Oxígeno suministrado = 16,56 Qs
oxígeno absorbido
Eo 0,20
oxígeno suministrado
300
0,2
16,56 Qs
90,5 54,7
Pc 117,9k W
0,7 60
191
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
§ 1 · ª § P ·A º
Wc A ¨ ¸ R T1 « ¨¨ 2 ¸¸ 1» (5.30)
© 29 ¹ « © P1 ¹ »
¬ ¼
Ȗ
A
1Ȗ
192
Transferencia de Oxígeno
Cp
b = constante adiabática = 1,4 (para aire)
Cv
Cp, Cv = calores específicos a presión y volumen constantes respectivamente.
P2: presión a la profundidad que se introduce el aire kPa.
R: constante de los gases = 1,987 kcal (mol K)±.
T1: temperatura de entrada del aire al compresor 0K.
P1: presión del aire a la entrada del compresor kPa.
La ecuación 5.30 puede expresarse de una forma más sencilla,
ª§ P ·0 ,286 º
Wc 0 ,2398T1«¨¨ 2 ¸¸ 1» (5.31)
«© P1 ¹ »
¬ ¼
La potencia real del compresor está determinada por el rendimiento global
del mismo, K ,
K = KT · Km (5.32)
K T: rendimiento termodinámico (desviación de las condiciones de reversibilidad
adiabática)
K m: rendimiento considerando las pérdidas en el motor y la transmisión
Pc
P (5.33)
Ș
Para el cálculo del requerimiento de potencia en el caso que se empleen
turbinas, ha de considerarse tanto el accionamiento del rotor como el funciona-
miento del compresor,
PT = Pc + Pr (5.34)
PT = requerimiento de potencia total.
Pc = potencia del compresor.
Pr = potencia del impelente o rotor.
Por otro lado, se ha demostrado que la capacidad de transferencia de oxíge-
no (N) óptima de un aereador de turbina está vinculado a la relación entre la
potencia del rotor y la del compresor:
Pr
Pd (5.35)
Pc
Las mejores condiciones de trabajo se presentan cuando el valor de Pd es
cercano a 1.
193
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
194
Transferencia de Oxígeno
Ph = 38,81 k Pa.
Cs,m = 9,31 mgL±
La relación entre la transferencia de oxígeno en las condiciones reales y las
de referencia viene dada por:
E ȕ Cs,m C Į 1,02t 20
Eo 9,2
ª§ P · 0 ,286 º
Wc 0,2398 T1 «¨¨ 2 ¸¸ 1»
«¬© P1 ¹ »¼
P1 = 99,96 kPa
T1 = 28 0C = 301 0K
P2 = Po + Ph = 101,3 + 38,81 = 140,11 k Pa
Wc = 7,32 kcal kg±
m = 720 kg h±
Pc = 6128 W (potencia teórica)
Ejemplo 5.8
Una planta tiene 3 sopladores centrífugos, cada uno de ellos con una capa-
cidad en condiciones reales de trabajo de 43 m3 min±. Dos de ellos están en
operación y el tercero en reposo. Determine la cantidad de aire que es capaz de
entregar el sistema.
Se dispone de la siguiente información:
Eficiencia estándar de transferencia de oxígeno de los difusores = 12 %
(SOTE)
Profundidad de los difusores en el tanque de aereación = 3,5 m
Presión = 101, 5 kPa; T = 28 qC;
Densidad del agua = 990 kg m±
D = 0,85; E = 0,90
195
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Po 0 ,5 Ph
Cs,m Cs
101,3
0 ,90 9 ,262
0,85 1,02
8
E 0 ,12
9 ,2
E 0,082
E 8,2%
El cálculo del flujo másico de oxígeno que entregan los 2 aereadores se
realiza utilizando la eficiencia actual de los difusores y la capacidad estándar de
los sopladores.
Convertir la salida de los sopladores de las condiciones reales a las estándar
(20 oC, 101,3 kPa):
r m3 min 1 s m min .§¨ Tr
3 · § Ps ·
1
¸¨ ¸
Ts Pr © ¹© ¹
9 o
T en o R R C 491,67
5
9
Ts 20 491,67 527 ,67 o R
5
9
Tr 28 491,67 542,07 o R
5
§ 527,67 · § 101,5 ·
43 ¨¨ ¸¸ ¨¨ ¸¸
© 542,07 ¹ © 101,3 ¹
196
Transferencia de Oxígeno
ȕ Cs C
N N0 Į 1,02 t 20
Cs20
§ 0 ,9 7 ,92 2 ·
N 1,8 ¨ ¸ 0 ,85 1,02 8
© 9,2 ¹
N = 0,99 kg(kW- h)±
Por otro lado, se asume que la potencia utilizada para transferir el gas es el
75% de la nominal del motor: (0,90 · 0,85)
Por lo tanto, la potencia que es utilizada para transferir el gas es:
pkW = 0,75 · 40 = 30 kW
O sea, el oxígeno transferido es,
kg O2 d ± = N · pkW = 0,99 · 60 · 24 h d ± = 1426 kW
Notas bibliográficas
1 LEWIS, W.K. AND W. G. WHITMAN³3ULQFLSOHVRIJDVDEVRUSWLRQ´Ind. Eng.
Chem., vol. 16, no. 8, 1924.
2 DANCKWERTS, D. V.³6LJQLILFDQFHRIOLTXLGILOPFRHIILFLHQWLQJDVDGVRUSWLRQ´
Ind. Eng. Chem, vol. 43, no. 1, 1951.
197
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
198
Filtros Percoladores
CAPÍTULO 6
FILTROS PERCOLADORES
6.1. INTRODUCCIÓN
Los filtros percoladores o más correctamente denominados lechos
bacterianos, son sistemas de depuración biológica de aguas residuales, en
los que la oxidación de la materia orgánica se produce al hacer pasar, a
través de un medio poroso cubierto de una película biológica, aire y agua
residual. El agua residual fluye sobre la superficie del medio poroso o empa-
que en una delgada capa que está en contacto con la película biológica por
un lado y con el aire en los espacios intersticiales del empaque por el otro. El
fundamento del proceso está basado en las acciones producidas en todo el
espesor de la película biológica.
A favor del empleo de los filtros percoladores está el hecho demostrado, que
los cultivos fijos a un soporte o medio son afectados en menor medida, que los
cultivos suspendidos ante cambios de las condiciones ambientales, que preva-
lecen en un momento dado en las condiciones de trabajo del dispositivo de
tratamiento.1
La película biológica está constituida por un conjunto complejo de
microorganismos aislados y colonias de ellos, embebidos en una matriz de
polímeros, cuya estructura y composición es función de la edad de la
biopelícula y de las condiciones ambientales. 2
Como sucede con todos los sistemas de tratamiento biológico de aguas
r esiduales, los tipos y pr opor ciones de las diferentes especies de
microorganismos presentes en la población microbiana dependen de las con-
diciones de operación del sistema, especialmente la carga, y la composición
del agua residual.
Las condiciones aerobias se mantienen por el flujo de aire a través del
empaque o empaquetadura del lecho. La circulación del aire se realiza de
forma natural o forzada, a contra corriente o en el mismo sentido del flujo
de agua. Este flujo de aire es inducido por la diferencia entre el peso espe-
cífico del aire atmosférico dentro y fuera de la empaquetadura. En estos
199
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
200
Filtros Percoladores
201
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
202
Filtros Percoladores
203
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
colocan a lo largo de toda la altura del filtro por capas (por ejemplo, el Bionet).
Figura 6.7.
204
Filtros Percoladores
205
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
206
Filtros Percoladores
207
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
c) De alta velocidad.
d) De velocidad super alta.
6.5. RECIRCULACIÓN
Una de las razones que justifican la introducción de la recirculación es
para evitar la tupición del filtro. Para flujos elevados el limo o cieno biológi-
co se remueve más fácilmente del filtro a través de la autolimpieza.
La aplicación de la recirculación tiene como consecuencia además una
dilución de la concentración de las sustancias orgánicas del agua residual.
208
Filtros Percoladores
So R S2
Sm
1 R
Para el empleo del empaque de piedra en el tratamiento de aguas
residuales urbanas usualmente se recomienda que la DBO5 del agua resi-
dual a la entrada al filtro no sobrepase de 100 a 150 mg/l. Puede considerar-
se que un agua residual urbana decantada tiene una DBO5 media del orden
de 200 mg/l. Una recirculación R del 100 al 150 % es suficiente, en general,
para respetar esta regla. 7
Para aguas residuales con sólidos suspendidos debe ser utilizado un
sedimentador primario a la entrada del filtro, fundamentalmente cuando la
empaquetadura de este sea de piedra. Si el agua residual contiene bajo nivel de
sólidos suspendidos y el medio filtrante es de material plástico puede obviarse
en ocasiones el uso de la sedimentación primaria.
209
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
6.6.2. Temperatura
El efecto de la temperatura sobre el funcionamiento de los percoladores es el
resultado de dos efectos opuestos. Por un lado, la difusividad de los contaminantes
y el oxígeno aumenta al elevarse la temperatura, así como también se incrementa
la actividad biológica; por otra parte, la solubilidad del oxígeno en el agua disminu-
ye. El efecto neto resultante de los dos ha sido reflejado en diferentes expresiones
empíricas que establecen la relación entre la temperatura y la eficiencia del proce-
so. Tal es el caso de Shriver y Bowers12 entre otros.
210
Filtros Percoladores
211
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
ejercida por macroinvertebrados, larvas y gusanos que coexisten con las bacte-
rias, protozoos y hongos, en el limo acumulado.
212
Filtros Percoladores
DL C1
h (6.12)
kI W
213
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
H
k1 C
S2
e ȣn (6.15)
So
La constante de velocidad depende de la temperatura de acuerdo con la
ecuación 6.6:
kT k20 t 20
La constante de velocidad también depende de la cantidad de
microorganismos en la película. Esta cantidad es proporcional a la superficie
específica del medio utilizado.
214
Filtros Percoladores
So R S2
Sm (6.19),
1 R
Qr
R (6.20)
Qo
Sin embargo, la mayoría de las aguas residuales contienen sustratos com-
plejos con diferentes velocidades de remoción. Esto hace necesario utilizar
una forma retardada de la ecuación que describe la remoción global del
215
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
proceso. Esta ecuación retardada puede ser obtenida del modelo de reac-
ción de segundo orden como sigue:
dS
k2 S 2 (6.21)
dt
Asumiendo el comportamiento de flujo a pistón:
S2 1
(6.22)
So 1 k2 S o t
Utilizando el mismo procedimiento que para el modelo de primer orden:
S2 1
S0 1 So k 20 į t 20 Av H ȣ n (6.23)
n
ª So S2 º
« »
S
V
« 2 »
« S kA H » Q H
o
(6.24)
« o V »
« »
¬ ¼
b) Con recirculación,
n
ª Sm S2 º
« »
V
« S
2 »
« S kA H » Q Q H
0 r
(6.25)
« 0. V »
« »
¬ ¼
Ejemplo 6.1
Se desea tratar 3217 m3·d± de un agua residual industrial con una DBO de
850 mg·L± hasta obtener un efluente de 280 mg·L±. Se empleará una torre
de 6 m de altura cuyo empaque tiene un área específica de 100 m2·m±.
216
Filtros Percoladores
280
570
exp 0,008100 H ȣ 0 ,5 , n = 44 m3·m±·d±
Área,
Q R Q 3217 1.3217
A o o 146,23
ȣ 44
A = 146,23 m2
Volumen de empaque, V = H·A = 877,38 m3
Carga orgánica,
Sm Qo Qr 103
Bv 4 ,18 kg·m±·d±
V
Los valores de carga hidráulica y orgánica chequean para el tipo de filtro
deseado.
Ejemplo 6.2
Determine el volumen de relleno necesario para tratar 1200 m3d± de un
agua residual cuya DBO 5 es de 200 gm± si se desea obtener 90 % de
remoción.
Considere el modelo de primer orden, empaque plástico,
217
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
0 ,5
ª 200 º
« ln »
V 20 1200 3,0
« »
« 0 ,01 150 3,0 »
¬ ¼
V = 940 m3
Si H = 3 m,
entonces el diámetro de filtro a utilizar será: 20 m
Comprobando los valores de carga hidráulica y carga orgánica:
Q0 1200
Carga hidráulica: ȣ 3,8 m3m±d±
A 313
S 0 Q0 200 1200 103
Carga orgánica: BV
V 940
BV = 0,25 kgm±d±
Aun cuando el valor de la carga hidráulica está dentro del intervalo reco-
mendado para filtros sin recirculación, la carga orgánica tiene un valor algo
superior al recomendado. No obstante, podría considerarse que no es necesario
el uso de la recirculación a menos que se desee una mayor flexibilidad en la
operación. Hoy día lo más común, aun en casos como este, es concebir la
recirculación para seguridad de la operación y obtener una mayor flexibilidad de
trabajo.
Además de la ventaja que ofrece la recirculación en cuanto a evitar tupiciones
en el filtro, puede citarse la de la posibilidad de utilizar mayores alturas de filtro.
Esta ventaja puede hacerse más evidente en la medida que el material utilizado
en el empaque sea más ligero.
218
Filtros Percoladores
b) Con recirculación,
n
ª Sm º
« ln S »
V « » Q0 Qr H
« kAV H »
¬ ¼
Si R = 0,5 Sm = 140 mgL±
0 ,5
ª 140 º
« ln
V 20 » 1200 600 3,0
« »
« 0,01150 3,0 »
¬ ¼
V = 1009 m3
Si H = 3,0 m, entonces el diámetro de filtro a utilizar será: 21 m
Comprobando los valores de carga hidráulica y carga orgánica:
Q0 Qr 1800
Carga hidráulica: ȣ 5,3 m3m±d±
A 336
Sm Q0 Qr 140 1800 103
Carga orgánica: Bv
V 1009
BV = 0,25 kgm±d±
Tal como se aprecia, los valores de carga hidráulica y carga orgánica obte-
nidos coinciden ahora con los recomendados para un filtro de velocidad media.
Si se incrementara la altura de empaquetadura, se reduce el área y como
consecuencia aumenta la carga hidráulica sobre el filtro.
219
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Tabla 6.1. Factor por el que se afecta el volumen del filtro al aumentar la
altura H, para 5 valores de n
ALTURA
n
1,5 H 2H 3H
0,4 0,54 V 0,35 V 0,19 V
0,5 0,67 V 0,5 V 0,33 V
0,7 0,84 V 0,75 V 0,62 V
0,8 0,91 V 0,83 V O,75 V
1 V V V
220
Filtros Percoladores
221
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
1 R
F 2 Qr
§ R·
¨1 ¸ (6.27); R
Q0
© 10 ¹
Ejemplo 6.3
Estime el volumen de empaque necesario para tratar 2500 m3 d± de un
agua residual urbana cuya concentración de DBO5 es 250 mgL± si se re-
quiere un efluente con una DBO de 25 mgL ± . Considere una altura de em-
paque de 2,0 m.
E = 80 %
Asumiendo inicialmente R = 0, F=1
W = 250 · 2500 · 10± = 625 kgm3d±
2
ª 0,443 E º W
V « »
¬100 E ¼ F
222
Filtros Percoladores
2
ª 0,443 80 º 625
V « » 1962,5 m3
¬ 100 80 ¼ 1
Si H = 2,0 m, entonces el área será,
A = 981,25 m2
Verificando los valores de carga hidráulica y carga orgánica:
2500
ȣ 2 ,55 m3m± d±
981,25
625
BV 0,32 kgm3d±
1962,5
La carga hidráulica está dentro del intervalo que corresponde a los siste-
mas sin recirculación. Sin embargo, el valor de la carga orgánica es superior
al valor máximo de 0,2 kgm3 d± recomendado para esta variante de R = 0.
Asumiendo R = 1, F = 1,65
2
ª 0,443 80 º 625
V « » 1189 m3
¬ 100 80 ¼ 1,65
Si H = 2,0 m, entonces el área será,
A = 594,5 m2
Verificando los valores de carga hidráulica y carga orgánica:
5000
ȣ 8,41 m3m± d±
594,5
625
BV 0,52 kgm3d±
1189
Ahora tanto la carga hidráulica como la orgánica se corresponden con los
valores del intervalo para filtros de velocidad media. Por lo tanto, el volumen a
utilizar de empaque es de 1189 m3 y R = 1.
223
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
224
Filtros Percoladores
n
S kA Hȣ
e V
, (6.27)
S
0
se representa en papel semilogarítmico el % de DBO remanente en función de
la profundidad, H:
§ S · n·
ln ¨ ¸ kAV Hȣ n §¨ kA ȣ ¸H (6.28)
¨S ¸ © V ¹
© 0¹
De esta manera puede obtenerse una familia de rectas, dependiendo de la
cantidad de cargas hidráulicas seleccionadas, y cuya pendiente en cada caso
será, en valor absoluto, kAVX±n. Figura 6.16 del ejemplo 6.4.
225
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
§ S · n·
ln ¨ ¸ §¨ kA ȣ ¸H
¨S ¸ © V ¹
© 0¹
obteniendo la familia de rectas de la figura 6.16. Al calcular la pendiente
(-kAVX ±n) de cada una de las rectas,
226
Filtros Percoladores
S
100
S0
227
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
228
Filtros Percoladores
§ S ·
ln ¨¨ ln 0 ¸¸ ln kt AV H n ln ȣ (6.30)
© S2 ¹
§ S0 ·
graficando ln ¨¨ ln S ¸¸ en función de lnQ ha de obtenerse una línea recta cuya
© 2 ¹
No. Temp qC S0 S2 X Ln X
(mgL-1) (mgL-1) (m3m-2d-1)
1 20 213 44 2,176 0,777429
2 64 4,901 1,589386
3 87 6,529 1,876321
4 102 8,705 2,163933
5 25 197 26 2,176 0,777429
6 55 4,901 1,589386
7 61 6,529 1,876321
8 72 8,705 2,163933
9 96 10,881 2,387035
10 95 13,602 2,610246
11 107 16,322 2,792500
12 112 21,762 3,080182
13 30 212 22 2,176 0,777429
14 42 4,901 1,589386
15 49 6,529 1,876321
16 64 8,705 2,163933
17 88 10,881 2,387035
18 110 13,602 2,610246
19 114 16,322 2,792500
20 129 21,762 3,080182
§ S0 ·
Cuando se grafica ln ¨¨ ln ¸¸ vs ln X a cada temperatura, se obtienen 3
© S2 ¹
juegos de valores de n y kt. Tabla 6.5.
229
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Temperatura qC n kt
20 0,537 0,0189
25 0,579 0,0246
30 0,701 0,0351
230
Filtros Percoladores
231
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Temperatura 1 /T kt ln kt
Kelvin
293 0,003412969 0,021017 - 3,8624236
298 0,003355705 0,025724 - 3,6603309
303 0,003300330 0,028467 - 3,5589852
§ k · T 298
ln ¨¨ T ¸¸ 2693,9
© k298 ¹ 298T
298 T | (298)2 = 88 804, entonces,
§ k ·
ln ¨¨ T ¸¸ 0,030 T 298
© k 298 ¹
kT k 298 1,030t 20
Notas bibliográficas
1 PEDERSEN, K.:³%LRILOPGHYHORSPHQWRQVWDLQOHVVVWHHODQG39&VXUIDFHV´
in drinking water, Water Res., vol. 24, no. 1, 1990.
2 LAZAROBA, V. AND MANEM:³%LRILOPFKDUDFWHUL]DWLRQDQGDFWLYLW\DQDO\VLVLQ
ZDWHUDQGZDVWHZDWHUWUHDWPHQW´Water Res., vol. 29, no. 10, 1995.
3 ECKENFELDER, W.W. AND'-2¶&ONNOR: Biological waste Treatment, Per-
gamon Press Ltd., London, 1964.
4 VASEL, J. AND P. SCHROBITGEN:³2[\JHQWUDQVIHULQWULFNOLQJILOWHUV´Water
Res., vol. 25, no. 1, 1991.
5 FRUHEN, C.³6SDWLDOGLVWULEXWLRQRIVSHFLHVLQELRILOP´Water Sci. Tech-
nol., vol. 23, no. 8, 1991.
6 CHUDOBA, J., C. MENÉNDEZ Y J. PÉREZ: Fundamentos Teóricos de Algunos
procesos para la depuración de Aguas Residuales, Edit. ISPJAE,
Cuba, 1986.
232
Filtros Percoladores
233
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
234
Lagunas de Estabilización
CAPÍTULO 7
LAGUNAS DE ESTABILIZACIÓN
235
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
236
Lagunas de Estabilización
7.1.b
237
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
pH
Producto de la respiración bacteriana se libera CO2, que tiende a bajar el
pH. Por otro lado, la acción fotosintética provoca consumo del CO2 con el con-
siguiente aumento del pH. Por tanto el pH esta sujeto a variaciones horarias que
se relacionan con la energía luminosa incidente.2
Radiación Solar
Según Thirumurthi, para un buen funcionamiento de las lagunas facultativas
se requiere una radiación solar mínima de 4 langleysd± (4 cal cm±d±) por cada
(g DBQ aplicado·m±) (luz visible).3 De acuerdo con Eckenfelder,4 este valor es
de 9 langleys.d±. Ildeu Duarte, citado por Sáenz, reporta el valor de 6 langleys·d±
1
de radiación visible como valor de radiación mínima.5 En Cuba, los meses de
menor radiación son diciembre y enero, con un valor mínimo calculado como
promedio de 250 cal cm±d±.6 Esta es una de las razones de las excelentes
condiciones de los países tropicales para el funcionamiento de las lagunas facul-
tativas.
No toda la energía solar que llega a la laguna es utilizada. Después de
un cierto valor de intensidad de luz donde las algas se saturan, el resto no
es utilizado excepto para elevar y mantener la temperatura. Así, por ejem-
plo, el valor de saturación estimado para un cierto tipo de clorella 5 es
de 60 cal cm± d± .
Debido a que la intensidad de la luz varía a lo largo del día y de acuerdo a la
época del año, la velocidad de crecimiento de las algas varía también de la
misma forma. Este fenómeno da lugar a dos efectos fundamentales: el oxígeno
238
Lagunas de Estabilización
239
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Temperatura
Como ocurre en todos los procesos biológicos, la temperatura ejerce una
influencia marcada sobre las lagunas. En general, y para los intervalos de tem-
peratura normales en las lagunas, se puede decir que la velocidad de la depura-
ción aumenta con la temperatura, en especial en lo que concierne a la actividad
de las bacterias.
Sin embargo, y en lo que respecta a las algas, se han detectado disminucio-
nes importantes en su actividad fotosintética a temperaturas superiores a 30 º C,
relacionadas con la estimulación del crecimiento de algas menos productivas
(verdiazules) que las algas verdes (clorofíceas) a las que sustituyen. Puesto que
este fenómeno coincide con una gran actividad de las bacterias, y por tanto,
grandes consumos de oxígeno, puede ampliarse la zona anaerobia en las lagunas
facultativas durante la época de calor, y muy especialmente si el calentamiento
se produce de forma brusca. Normalmente esta situación es solo transitoria y
las lagunas vuelven a funcionar correctamente en la medida que la temperatura
disminuye.
240
Lagunas de Estabilización
En serie:
± mejora la calidad bacteriológica del agua,
± se obtiene mayor economía del área.
En paralelo:
± no mejora la calidad del efluente pero trae ventajas en su operación,
± mejor para la puesta en operación de las lagunas al ser estas más peque-
ñas, ya que se llenan más rápido y
± mayor facilidad para la limpieza.
241
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
V
si t= (7.12)
Q
Sustituyendo 7.12 en 7.11:
OMAX: gm±d±
242
Lagunas de Estabilización
243
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
S 1
S0 1 k ș (7.18)
donde:
S: DBO efluente (mg L±).
So: DBO afluente (mg L±).
k: Constante de la reacción de primer orden (d±).
T : Tiempo de retención hidráulico (d).
Para lagunas en serie, la ecuación de Marais puede representarse según,
S0
Sn
1 1 2 ș 2 .... 1 knșn
1 k ș 1 k (7.19)
7.6.3.1. La constante k
Como en toda constante cinética, el valor de k depende, de entre otros fac-
tores, de la temperatura.
Cuando no se conoce el verdadero valor de la constante de reacción, un
criterio conservador recomendado por Marais es el de 1,2 d±a 35 qC. Marais12
recomienda asumir este valor, debido a que para tiempos de retención hasta de
244
Lagunas de Estabilización
245
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Ejemplo 7.1
Dimensione una laguna facultativa para tratar 560 m3 d± de un agua resi-
dual de un proceso y cuya constante de velocidad de remoción es de 0,15 d±.
La DBO de entrada a la laguna es de 350 mg L± y la deseada en el efluente
debe ser menor de 50 mg L±.
1
Aplicando la ecuación 7.18 0,14
1 0,15 ș
T = 41 d
Volumen = 560 · 41 = 22 960 m3
Asumiendo una profundidad de 1,8 m,
22 960
Área de la laguna A 12 756 m 2
1,8
350 22 960
CO 15 g m 2 d 1
Comprobando la carga orgánica: 41 12 752
por tanto la carga orgánica tiene un valor que corresponde al intervalo ca-
racterístico para las lagunas facultativas.
Ejemplo 7.2
Determine el área total requerida para las condiciones del ejemplo anterior,
pero suponiendo 2 lagunas en serie.
Considere que k1 = k2 = 0,15 d± y T1 = T2
1
0,14
Para 2 lagunas en serie: 1 0,15 ș 2
246
Lagunas de Estabilización
T = 11,15 d
Tiempo total de retención para las 2 lagunas: 22,3 d
AT = A1 + A2 = 3 468 + 3 468 = 6 936 m2
Comprobando la carga orgánica
350 6 244
para la primera laguna CO 28 g m 2 d 1
11.15 6 936
175 6 244
para la segunda laguna CO 14 g m 2 d 1
11,15 6 936
La carga orgánica de la primera laguna es algo alta, pero se puede ver
compensada con la de la segunda.
En la práctica, k1 ! k2, y como consecuencia de ello, no siempre es tan
evidente la ventaja del empleo de 2 o más lagunas en serie para la remoción de
DBO. La mayor justificación en el uso de este arreglo se encuentra en la remo-
ción de patógenos.
V
H
3
AS AF AS AF (7.25)
247
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
248
Lagunas de Estabilización
§ Ȟ ·
E 15 Va -V H r ¨ 1 ¸ (7.27)
© 16 ¹
E: Evaporación mensual, mm.
Va: Presión de vapor del agua a la temperatura del agua, mmHg.
V: Presión de vapor del agua a la temperatura del aire, mmHg.
Hr: % humedad relativa.
Q : Velocidad del viento km.h±.
Por otro lado, en aquellos casos en los que se disponga de información nece-
saria, las pérdidas por percolación pueden ser estimadas aplicando la ley de
Darcy,
Q=PIA (7.28)
3 ±
Q: Caudal que percola m s .
P: Permeabilidad del suelo m s±.
A: Área expuesta m2.
h
I= gradiente hidráulico (7.29)
L
L: Distancia del fondo de la laguna al nivel freático.
h: Distancia de la superficie del agua en la laguna al nivel freático.
por tanto, la profundidad de la laguna es igual a K±/
249
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Q P.I.A
Para el suelo natural:
h 9 ,5
I 3,17
L 3
250
Lagunas de Estabilización
1,9
I 4,75
0 ,4
251
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
± corto circuito y
± presencia de materia flotante.
Aparición de moscas e insectos. Puede deberse a:
± crecimiento y vegetación de los taludes,
± sólidos flotantes.
Acciones de mantenimiento
± Limpiar las obras de entrada y salida.
± Mantener los taludes libres de vegetación mediante la chapea regular.
± Retirar sólidos flotantes de la superficie.
± Romper la nata que se forma, manualmente o mediante el empleo de
chorro de agua.
252
Lagunas de Estabilización
Notas bibliográficas
1 MENÉNDEZ, C.³3ULQFLSLRVGHGLVHxRGHODJXQDVGHR[LGDFLyQ´Ing. Hidráuli-
ca, vol. 10, no. 3, 1989.
2 MENÉNDEZ, C. Y L. GUERRA: Relaciones de alcalinidad y Ph en lagunas faculta-
tivas, Reporte de Investigación, ISPJAE, Ciudad de La Habana, 1990.
3 THIRUMURTHI, D.:³'HVLJQFULWHULDIRUZDVWHVWDELOL]DWLRQSRQGV´-RXUWater
Poll. Control Fed., vol.49, no. 9, 1974.
4 ECKENFELDER, W.W.: Industrial Water Pollution Control, 2d. Ed. Mc Graw
Hill, 1989.
5 SAENZ, R.: Lagunas de Estabilización, Manual DTIAPA, no. 14, CEPIS,
Perú, 1988.
6 MARTÍN, M. Y C. MENÉNDEZ:³'LVHxRGHODJXQDVGHR[LGDFLyQ´Ingeniería en
Procesos Químicos, vol. 3, no. 2, 1978.
7 MENÉNDEZ, C. Y L. GUERRA:³/DV/DJXQDVGH2[LGDFLyQ\OD3RVLELOLGDGGHO
8VR GHO 0RGHOR GH 0H]FOD &RPSOHWD´ Tecnol. del Agua, vol. 15, no.
136, 1995.
8 MCGARRY Y PESCOD: Stabilization Pond. Design criteria for tropical Asia.
Missouri Basin Egn. Health Council, Kansas City, 1970.
9 FINNEY, B. AND E. MIDDLEBROOKS³)DFXOWDWLYH:DVWH6WDELOL]DWLRQ3RQG'H
VLJQ-RXU´Water Pull, Control Fed, vol. 52, no. 1, 1980.
10 WHO: ³:DVWHZDWHU6WDELOL]DWLRQ3RQGV3ULQFLSOHVRISODQQLQJDQGSUDFWL
FH´:+2 EMRO Tech. Publication no. 10. World Health Organiza-
tion. Regional Office for the Eastern Mediterranean, Alejandría, 1987.
11 HERMANN, E.R. AND E.F. GLOYNA:³:DVWHVWDELOL]DWLRQSRQGV´,,,)RUPXODWLRQ
of design equations, Sewage and Ind. Wastes, vol. 30, no. 8, 1958.
12 MARAIS, G. VR.:³1HZIDFWRUVLQWKHGHVLJQRSHUDWLRQDQGSHUIRUPDQFHRI
ZDVWHVWDELOL]DWLRQSRQGV´%XOOHWLQWorld Health Organization, vol. 34,
no. 5, 1966.
13 P OLPRASERT, C. AND K. BHATTARAI³0RGHOIRU:DVWH6WDELOL]DWLRQ3RQGV´
Jour. Env. Eng. ASCE III, no. 1, 1985.
14 JAMES, A.³$QDOWHUQDWLYHDSSURDFKWRWKHGHVLJQRIZDVWHVWDELOL]DWLRQSRQGV´
Int. Conf. On Waste Stabilization Ponds, IAWPRC, Lisbon, Portugal,
1987.
253
Digestión Anaerobia
CAPÍTULO 8
DIGESTIÓN ANAEROBIA
8.1. INTRODUCCIÓN
La descomposición anaerobia conduce a la degradación de la materia orgá-
nica y su transformación, en ausencia de oxígeno libre, en compuestos más
simples como metano y dióxido de carbono.
255
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
residuales de alta carga. Sin embargo, a través de los años se han desarrollado
nuevas tecnologías basadas en el propio metabolismo anaerobio que facilitan el
tratamiento ya no solo de los lodos, sino que pueden ser tratados exitosamente
residuales orgánicos diluidos.
256
Digestión Anaerobia
257
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
258
Digestión Anaerobia
259
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
260
Digestión Anaerobia
262
Digestión Anaerobia
Ventajas Desventajas
x Soporta altas cargas x La granulación es lenta y no
(20 kg DQO/m3.d). controlable.
x Su construcción es x No todas las aguas favorecen
relativamente simple. la granulación.
x Con inóculo apropiado tiene x Sensible a las grasas en el
arranque inmediato. afluente.
x Aplicable a todas las escalas. x Sensible a las aguas que
x Operación sencilla. forman precipitados.
263
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Ventajas Desventajas
x Asimila muy altas cargas x Arranque lento y difícil.
(40 kg DQO/m3·d). x Requiere energía para
x Pequeños tiempos de mantener la fluidización por
retención. bombeo.
x Instalaciones compactas. x Presencia de sólidos
x Asimila sólidos suspendidos en el efluente.
suspendidos en el afluente.
264
Digestión Anaerobia
8.4.1.1. Bacterias
Las formadoras de metano son las bacterias clave en la digestión anaerobia.
Crecen más lentamente y son más sensibles a los cambios ambientales que las
formadoras de ácido.
La fermentación metánica es la etapa limitante de la digestión. Las
formadoras de metano son bacterias estrictamente anaerobias, y por tanto, sub-
sisten en completa ausencia de oxígeno molecular. Estas bacterias son poco
abundantes en un medio dado, como consecuencia de que la mayor fracción de
la energía que se libera en los procesos de oxidación anaerobia queda asociada
al CH4 que se forma, por lo que resta menos energía para ser utilizada en el
crecimiento.
8.4.1.2. Sustrato
El sustrato para las bacterias está constituido por los compuestos orgánicos
a ser estabilizados. Los compuestos orgánicos que se someten a digestión
anaerobia comúnmente son de estructura muy compleja, que como ya fue men-
cionado, son transformados a través de sucesivas etapas hasta la obtención de
los productos finales, constituidos fundamentalmente por CH4 CO2 y otros com-
puestos estables y de bajo contenido energético.
El menor crecimiento de las bacterias anaerobias comparados con el de las
aerobias para igual cantidad de sustrato consumido causa menor requerimiento
de nutrientes. Los sistemas anaerobios producen aproximadamente 20 %
menos lodo que los aerobios para el mismo sustrato, y los rquerimientos de
265
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
266
Digestión Anaerobia
± pH.
± Sustancias tóxicas.
8.4.2.1. Temperatura
El crecimiento de las bacterias metánicas es lento en comparación con la
mayoría de los otros microorganismos. El tiempo requerido por estas bacterias
para regenerar es función de la temperatura. A 35 qC algunas especies requie-
ren cuatro días para duplicar su número, mientras que otras necesitan diez días
o más. Una disminución de la temperatura implica un mayor tiempo de regene-
ración.
Intervalos de temperatura de interés pueden ser los correspondientes al ni-
YHOPHVyILOR±qC, con óptimo entre 28 y 33 q&\HOWHUPyILOR±qC,
con óptimo entre 50 y 60 qC).
Considerando la producción de gas como indicador de la degradación de
los compuestos orgánicos, podría decirse que el intervalo termófilo es supe-
rior. De hecho, pueden obtenerse resultados similares con tiempos de reten-
ción hidráulico de 7 a 14 días en el intervalo termófilo, a los que se obtienen
en el mesófilo con retenciones de 30 días. No obstante la ventaja de trabajar
en el intervalo mesófilo en los países tropicales radica en el hecho que no es
necesario el uso del calentamiento para mantener la temperatura dentro de
los valores del intervalo.
Harris y Dague15 han reportado la posibilidad de incrementos notables de la
carga de los filtros anaerobios a 56 °C con resultados de eficiencia de remoción
similares a los alcanzados a 32 °C con la mitad de la carga.
8.4.2.2. pH
Las bacterias metánicas ejercen adecuadamente su función en un intervalo
de pH comprendido entre 6,6 y 7,6, con un óptimo cercano al pH 7.16 Cuando la
velocidad de la producción de los ácidos volátiles es mayor que la de su trans-
formación en CH4, el proceso puede desequilibrarse, resultando en una disminu-
ción del pH, disminución de la producción de gas y aumento de las fracción de
CO2 en el gas producido. El control del pH es por tanto esencial para garantizar
una buena operación de los procesos anaerobios.
267
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
268
Digestión Anaerobia
Concentración mgL-1
CATIÓN Moderadamente Fuertemente
inhibitorio inhibitorio
Na+ 1500 ± 3000 3000
K+ 3500 ± 5500 8000
Ca2+ 2500 ± 4500 12000
Mg2+ 1000 - 1500 3000
Entre los diferentes parámetros que son de utilidad práctica para indicar si
un digestor está operando o no en buenas condiciones, y aun para predecir
futuras complicaciones en la operación, pueden citarse:
± La producción de gases.
± Contenido de ácidos volátiles y pH.
± La alcalinidad del medio.
269
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
270
Digestión Anaerobia
271
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Digeridos 50 50
272
Digestión Anaerobia
ª 2 º
V
« V f 3 V f Vd » . t (8.3)
¬ ¼
donde:
V: volumen del digestor.
Vf: volumen diario de lodo crudo.
Vd: volumen diario de lodo digerido.
t: tiempo de retención.
Ejemplo 8.1
Estime el volumen de un digestor para tratar 5000 kgd± (base seca) de un
lodo orgánico producido en otra etapa de tratamiento. Asuma que 75 % de los
sólidos es volátil. Utilice el método de las cargas.
Carga: 4 kg.m±·d±
Sólidos volátiles en los 5000 kg de lodo = 5000 · 0,75 = 3750 kg
3750 kg d 1
Volumen del digestor 937 ,5 m 3
4 kg m -3 d 1
Ejemplo 8.2
Determine el volumen de un reactor para digerir 3500 kgd± (base seca) de
un lodo que contiene 95 % de humedad. Asuma que 75 % de los sólidos es
volátil. Considere que hay una reducción del 60 % de los sólidos volátiles, con
una humedad de 92 %. Tiempo de retención de 25 días.
Si el lodo que contiene 95 % de humedad, su peso específico es 1,02 kgL±,
por tanto el volumen de lodo a digerir es:
3500
Vf 68,63 m 3
1,02 . 0,05 . 10 3
La masa de lodo después de la digestión será 40 % de los volátiles que
entraron más los fijos que no se degradan (25 % de los sólidos totales).
Sólidos volátiles en los 3500 kg de lodo = 3500 · 0,75 = 2625 kg
Sólidos fijos = 3500 · 0,25 = 875 kg
273
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
ª 2
V
« V f 3 V f Vd º» t
¬ ¼
ª 2 º
V «68,63 3 68,63 23,14» 25
¬ ¼
V = 958 m3
274
Digestión Anaerobia
ǻS
ǻ Bv
ș
donde:
Si lo que se desea es el volumen de CH4,
G = 0,35 (' BV± 1,42 DX)·V m3d± (8.9)
275
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
8.6.2.4. Nutrientes
El N y P que se requiere en los procesos anaerobios es menor que los que
exigen los aerobios,
N = 0,12 'X·V kgd± (8.10)
P = 0,025 ' X·V kgd± (8.11)
Ejemplo 8.3
Determine las dimensiones de un digestor completamente mezclado para
obtener 87 % de remoción de DQO de un agua residual cuyo flujo es de
750 m3 d± .
DQO del afluente = 16000 mgL±
Y = 0,1 kb = 0,02 d± k = 6 d±
X = 6000 mgL± Edad del lodo mínima = 15 d
Cálculo del tiempo de retención a partir de la información cinética:
ǻ6 S 0
ș
kX S
13920 16000
ș 3d
6 . 6000 2080
Volumen efectivo del digestor:
V = q · Q = 3 · 750 = 2250 m3
Comprobación de la edad del lodo:
X
șX
ǻ;
ǻX Y ǻ%V k b X
13920
ǻX 0 ,1 0,02 6000 344 g m - 3 d 1
3
Por tanto,
6000
șX 17 ,4 d
344
La edad del lodo es superior a la mínima fijada por las condiciones de
diseño.
276
Digestión Anaerobia
Procedimiento
Para las pruebas en laboratorio se emplea un reactor con un volumen
efectivo de 1 a 5 litros. El montaje del equipamiento necesario está
esquematizado en la figura 8.12.
1. Tomar un volumen de lodo digerido activo de una instalación en opera-
ción. Filtrar el lodo a través de una malla gruesa para eliminar partículas
como semillas, paja, etc. Si fuera necesario, diluir con agua corriente.
2. Introducir el lodo en el digestor. Mantener la temperatura constante a 35 °C
y agitado en contenido del reactor durante todo el tiempo que dure la
experiencia.
3. No alimentar agua residual ni extraer licor mezclado del reactor hasta
que se aprecie producción de gas. Asegurar que el dispositivo esté her-
mético para evitar fuga de gas.
4. Una vez que se aprecie producción de gas, introducir residual aplicando
una carga a 4 kg DBO m± d± , por un periodo no menor a un tiempo
equivalente a un tiempo de retención. Es aconsejable, durante este perio-
do inicial de aclimatación, alimentar el reactor 2 ó 3 veces en el día, de
manera tal que la carga total no sobrepase los 4 kg DBO m± d± .
5. El pH es un parámetro que siempre debe ser vigilado, pero más cuidado-
samente durante la aclimatación. En caso de disminuir por debajo de 6,
añadir alcalinidad para mantenerlo entre 6,5 y 7,5. El licor mezclado debe
tender a crear su propio sistema tampón.
6. Proceder a la alimentación del residual con un flujo continuo, con una
extracción diaria de un volumen igual al alimentado.
277
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
278
Digestión Anaerobia
dS S
a) Considerando que se cumple que kX se prepara la tabla 8.11
1
dt S0
' BX
(kgkg-1d-1) 5,0 4,0 2,75 2,0 0,75 0,50
S
S0 0,9 0,8 0,58 0,49 0,30 0,25
S
Se grafica ǻ B X contra
S0 según la figura 8.13. La pendiente da el
' BX
(kgkg-1d-1) 5,0 4,0 2,75 2,0 0,75 0,50
1
șX 0,5 0,33 0,25 0,16 0,05 0,036
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Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
'BX
280
Digestión Anaerobia
281
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
282
Digestión Anaerobia
Notas bibliográficas
1 HENZE0³)XQGDPHQWDOVRIDQDHURELFGLJHVWLyQ´Water Sci. Tech., vol. 15,
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4 VAN DER BERG, L. AND C.P. LENTZ:³&RPSDULVRQEHWZHHQXSDQGGRZQIORZ
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WUHDWPHQWRIEHDQEODQFKLQJZDVWH´3URFth Purdue Ind. Waste Conf.,
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5 LETTINGA, G. ET AL.³8VHRI8SIORZ6OXGJH%ODQNHW86%UHDFWRUFRQFHSW
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6 YOUNG,-&³)DFWRUVDIIHFWLQJWKHGHVLJQDQGSHUIRUPDQFHRIXSIORZDQDH
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10 LETTINGA, G. AND P.L. HULSHOFF³8$6%SURFHVVGHVLJQIRUYDULRXVW\SHVRI
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12 METCLAF AND EDDY: Ingeniería de Aguas Residuales. Tratamiento, Vertido
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13 HENZE, M. AND P. HARREMOES³$QDHURELFWUHDWPHQWRIZDVWHZDWHULQIL[HG
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14 SPEECE, R.E.:³7R[LFLW\LQDQDHURELFGLJHVWLRQ´3URFth Int., Symposium on
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283
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
284
Manejo de Lodos
CAPÍTULO 9
MANEJO DE LODOS
9.1. INTRODUCCIÓN
Un aspecto importante en el tratamiento de los residuales industriales líqui-
dos (RIL) lo constituye la manipulación de los lodos o fangos que se obtienen,
sean estos de naturaleza orgánica o inorgánica.
Los lodos producidos en los tratamientos biológicos de aguas residuales pue-
den provenir de los sedimentadores primarios y secundarios así como de los
tratamientos terciarios. Estos lodos están constituidos fundamentalmente de
materia orgánica, con una fracción volátil entre 60 y 80 %.
En los tratamientos físico-químicos como puede ser la coagulación, los lodos
que se producen son eminentemente de naturaleza inorgánica.
Uno u otro lodo posee en su composición agua en un alto porcentaje. Esto
dificulta tanto su manipulación como su disposición.
La magnitud del problema se evidencia en un cálculo sencillo al considerar
los residuales de una industria cuyos lodos corresponden a una población equi-
valente a 500000 personas. En ese caso se producen aproximadamente 0,09 kg
de lodo por habitante. Si se asume un contenido de humedad de 97 %, esto
significa que se manejan diariamente 3000 m3 de lodo.
La naturaleza de los lodos, orgánica o inorgánica, define el tratamiento al
que deben ser sometidos antes de su disposición final, pero en uno y otro caso
deben ser transportados y manipulados antes y después del tratamiento que se
emplee para los mismos.
285
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
donde:
Ws: masa de sólido (sólido seco), kg.
Ss: gravedad específica de los sólidos secos.
Wf: masa de sólidos fijos (fracción no volátil de los sólidos), kg.
Wv: masa de sólidos volátiles, kg.
Sf: gravedad específica de los sólidos fijos.
Sv: gravedad específica de los sólidos volátiles.
Teniendo en cuenta que la fracción filtrable de los lodos es relativamente
pequeña comparada con la no filtrable, los sólidos pueden ser tomados como el
residuo total después de secada la muestra a 105 ºC.
Si en determinada circunstancia la fracción filtrable es de tal magnitud que
no puede ser despreciada, debe trabajarse con los sólidos suspendidos o no
filtrables.
La gravedad específica de la materia orgánica puede ser tomada como
1,2 a 1,4, mientras que la de la materia inorgánica varía entre 1,5 y 2,5.
Una vez que se conoce la gravedad específica de los sólidos secos, puede
calcularse la de los lodos mediante la relación:
Ws Ww
S
Ws (9.2)
Ww
Ss
donde:
S: gravedad específica de los lodos.
Ws: masa de sólido seco.
Ww: masa de agua.
Ss: gravedad específica de los sólidos secos.
No es difícil demostrar que para los lodos orgánicos cuyo contenido de hu-
medad sea del 90 % o mayor, su gravedad específica puede ser tomada como
1,0 sin cometer mucho error.
El volumen de lodo, calculado a partir de su contenido de sólido y % de
humedad es,
Ws
V
§ 100 P · (9.3)
¨ ¸ ȡW S
© 100 ¹
V: volumen de lodo, m3.
P: contenido de humedad, %.
U w: densidad del agua, kgm-3.
286
Manejo de Lodos
A los efectos prácticos puede asumirse sin mucho error, que la densidad del
agua es 1000 kgm-3 en el intervalo de temperatura entre 20 y 40 ºC.
La ecuación 9.3 puede ser utilizada también en aquellos casos en los que se
desee calcular el flujo de lodo, Qs (m3d-1), si el término Ws está dado como flujo
másico (kgd-1).
287
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
526,5
Qsp 8,77 m3 d-1
0,06 1000 1
:VV IµÂ'%2Â4 · 10-3
= 0,55 · 300 · 0,35 · 3000 · 10-3VHDVXPLyIµ
= 173,25 kg d-1
Wss
Q ss
§ 100 P ·
¨ ¸ ȡW S
© 100 ¹
173,25
Qss 11,55 m3d-1
0,015 1000 1
288
Manejo de Lodos
Los lodos primarios y los inorgánicos, generalmente tienen una mayor con-
centración en cada una de las etapas de la secuencia de tratamiento que los
obtenidos de la coagulación mediante aluminio o la de aquellos que proceden de
lodos activados.
Los procesos que normalmente se utilizan en la secuencia de deshidratación
dependen de:
± Naturaleza y características del lodo.
± Método que se aplicará en la disposición final.
289
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
290
Manejo de Lodos
§ 100 ·
Ww ¨ 1¸ Ws (9.9)
© Cs ¹
Si se acepta que la densidad del agua es 1000 kg m-3,
Vw = Ww · 10-3 (9.10)
donde:
Vw: volumen de agua, m3.
293
Menéndez Gutiérrez, C. y J. Pérez Olmo
Por tanto
§ 100 ·
Vw ¨ 1¸ Ws 10 3 (9.11)
© Cs ¹
El agua que está asociada al cambio de concentración de un lodo desde (Cs)1
a (Cs) 2 es:
1 § 1 1 ·
Vw ¨¨ ¸¸ Ws (9.12)
10 © (Cs)1 (Cs)2 ¹
Ejemplo 9.3
100 m3 d-1 de un lodo con un contenido de sólidos del 5 % es deshidratado
por diversos tratamientos hasta alcanzar 20 %. Determine el volumen de líquido
claro producido.
(Cs)1 = 5 %
(Cs)2 = 20 %
Ws = 100 · 50000 · 10-3 = 5000 kg d-1
Aplicando la ecuación 9.12,
1 §1 1 ·
Vw ¨¨ ¸¸ 5000
10 © 5 20 ¹
Vw = 75 m3 d-1
Notas bibliográficas
1 SWANWICK, J.D.: Advances in Water Pollution Research, vol. II, Pergamon
Press, N.Y., 1963.
2 _____________ : Water Poll. Research, +HU 0DMHVW\¶V 6WDFLRQDU\ 2IILFH
London, 1966.
294
ANEXOS
ANEXO 1
VOLÚMENES MÍNIMOS DE MUESTRAS
Y CRITERIOS PARA SU CONSERVACIÓN
297
ANEXO 2
DISTRIBUCIÓN NORMAL ACUMULATIVA
298