Apellido Zapata, Maria Teresa de Herrera
Apellido Zapata, Maria Teresa de Herrera
Apellido Zapata, Maria Teresa de Herrera
Las anteriores armas usaba Juan José Zapata y Caro, natural de Arcos de la Frontera (Cádiz),
quien obtuvo certificación de armas del Rey de Armas de S.M. Antonio de Rújula y Busel, en 4
de mayo de 1819.
Juan Pérez Zapata, Señor de Santa Engracia, cerca de San Juan de la Peña (Aragón), vino
desde Jaca con cien peones a la conquista de Valencia y sitió el castillo de Andilla, usando: En
campo de gules, una abarca de sable.
Palacio de los Zapata: Es el edificio civil más importante de Mallén, Zaragoza. De estilo
neoclásico (s. XVIII), tiene cuatro plantas, con fachada en ladrillo apoyada sobre zócalo de
piedra. Destaca la rejería de sus balcones, de gran calidad. En el centro de la fachada un gran
escudo de armas de la familia Zapata. Está catalogado como Monumento Nacional.
Fueron varios los españoles que llegaron con este apellido a Antioquia; sin embargo, varios de
ellos no dejaron descendencia, pues no dejaron varones que continuaran la sucesión.
Los siguientes españoles de apellido Zapata llegados a las montañas de Antioquia desde los
tiempos de la conquista de Remedios, Antioquia, por los años de 1560, no dejaron
descendencia que perdurara.
El primero del que se tiene noticia fue un capitán Juan Zapata, venido con los conquistadores
Martínez de Ospina desde Victoria y Mariquita. Fue casado con doña Potenciana de Meneses,
hija del conquistador Antonio de Meneses y de doña Luisa Noguerol. No se conoce
descendencia de éstos. Años después llegaron a Remedios los capitanes Luis y Francisco
Zapata de Cardenas los cuales pasaron de España al Nuevo Reino de Granada (Colombia);
asistieron a las campañas contra los indios Gualíes y luego pasaron a Remedios. Trajeron estos
señores una muy interesante información levantada en Llerena, el 9 de junio de 1578, ante el
Bachiller Tinoco, teniente de gobernador y justicia mayor de la provincia de León, en la cual
constan estos hechos: "Don Francisco Zapata Palencia, vecino de la Villa de Llerena, digo: que
yo me quiero ir a las Indias del mar océano a los Reinos del Perú, con licencia de Su Majestad,
que para ello tengo y para ello me conviene probar quién soy e las demás cualidades que se
requieran y han de tener las personas que a los dichos reinos pasaren; y a los testigos que se
examinen se les preguntará lo siguiente:
Citan luego una Real Cédula expedida en Segovia, el 22 de febrero de 1464, por el Rey Enrique
IV, y la cual fue confirmada por los Reyes Fernando de Aragón e Isabel de Castilla en Córdoba
el 10 de junio de 1492. La parte sustancial de la cédula dice: "Por ende, acatando e
considerando algunos servicios que vos, Gonzalo de Palencia, hijo de Gonzalo de Avila,
vecinos de la dicha ciudad, me habedes fecho e facedes, e porque sea ennoblecida e decorada
e sublimada vuestra persona e linaje"…os fago e constituyo hijosdalgos notorios e de solar
conocido, e podaís retar e desafiar devengar sueldos, traer armas e insignias, e vos llamar del
apellido que quiesieredes". Usando de tales documentos pasó a las Indias el citado don
Francisco y su hermano don Luis, trayendo el noble apellido de Zapata de Cárdenas, el más
ilustre que había en Llerena, que era nada menos que el de los condes de Barajas, a cuya
familia pertenecía el arzobispo del Nuevo Reino don Luis Zapata de Cárdenas, de quién se
decían sobrinos.
No se sabe que suerte corrió don Francisco Zapata. Don Luis Zapata de Cárdenas se
estableció en Remedios y casó con doña Mariana Valero, hija del conquistador García Valero, a
quien daba el título de tío.
Por declaraciones dadas en 1598 en Remedios por el capitán Diego de Ospina y otros
conquistadores se sabe algo de este capitán García Valero. Dicen estos declarantes "Que fue
uno de los primeros pobladores y conquistadores de las ciudades de Victoria, Santa Agueda y
los Remedios del Nuevo Reino de Granada; que por los años de 1558 entró con el capitán
Asencio de Salinas a la pacificación de los indios de Victoria y a la conquista de los indios de los
Remedios, donde gastó mucha parte de su hacienda; estuvo de capitán de infantería en la
campaña de Tocuyo y en el desbarate y muerte del tirano Lope de Aguirre; pasó como capitán a
la ciudad de Zaragoza, en compañía de don Luis Zapata, su sobrino y yerno, donde con
sesenta soldados desbarató tres veces gran número de indios; y últimamente fue maese de
campo del gobernador Gaspar de Rodas. Fue además tesorero real en Remedios y teniente de
corregidor. El capitán García Valero, parece fue hermano de Juan Valero también conquistador
y ambos eran españoles, pero no hemos podido hallar en los cronistas dato alguno sobre su
familia ni el lugar de España donde naciera. Se ignora igualmente el nombre de su esposa".
Del matrimonio del capitán Luis de Zapata de Cárdenas y de doña Mariana Valero quedaron,
que se sepa, tres hijos: Alonso (sacerdote), Catalina (esposa del capitán Juan de Toro,
fundador de la familia de su apellido), María de Herrera (esposa de don Baltasar de Burgos
Antolines).
Don Antonio Zapata Gómez de Múnera y don Victoriano Zapata SI dejaron descendencia:
Su partida de nacimiento: “En once días del mes de mil y seiscientos y nueve años, se baptizó a
Antonio, hijo de Juan Gómez de Múnera y de Francisca Jiménez Zapata. Fueron sus
compadres Pedro de Royo de Cantos y Catalina Zapata, su mujer- Baptizelo yo, el Licenciado
Francisco Royo”.
Para poder obtener algunos cargos, pidió a España a su hermana Juana de Cantos y Zapata,
viuda de don Pedro Lasso de Hermosa, le hiciese levantar su información de nobleza. Los
testigos declararon que conocieron muy bien desde que nació a don Antonio, y a Juan Gómez
de Múnera, natural que fue de Chinchilla, y doña Francisca Jiménez Zapata, sus padres. Que
saben que Juan Gómez era hijo de Antonio Sánchez de Múnera y de doña Beatriz Gascón; y
que doña Francisca era hija de don Antonio Jiménez Zapata, Señor del Villar y de doña María
de Cantos Barnuebo. Doña María de Cantos era hija de don Gaspar de Cantos (descendiente
del célebre don Martín Sánchez de Cantos, a quien los Reyes Católicos concedieron multitud de
mercedes) y de doña María de Alarcón, sobrina de los Señores y luego Condes de Valverde.