Hacia La Tesis p31-37
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Fernando Palazzolo
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por lo que es preciso que este tenga en claro sus propias motivaciones e
inquietudes sobre el campo de estudio. El interés se presenta aquí como
el prisma desde el cual debería producirse la definición de nuestros pri-
meros pasos en la investigación.
Para dar este paso inicial en cualquier investigación puede partirse del
interés personal, que se define en la relación entre los gustos, las intui-
ciones, las ideas que se creen correctas, los prejuicios, el propio recorri-
do académico, entre otros. Pero además, la mirada personal se desarrolla
en el seno de demandas colectivas, pues el conocimiento científico toma
sentido y relevancia en la compleja trama de los procesos sociales.
Así, puede identificarse un interés que halle sustento o razón de ser no
necesariamente en la Academia, pues muchos interrogantes tienen ori-
gen en actividades, relaciones o pensamientos que hasta el momento no
pudieron ser vinculados con precisión a los contenidos de un campo dis-
ciplinar. Suele ocurrir que pensamos en una idea que parece imposible
de ser abordada por el campo desde el que trabajamos, pero es necesario
no descartar ninguna posibilidad de antemano.
Este primer acercamiento a la definición de nuestro objeto de estudio
puede graficarse utilizando un esquema de pirámide invertida, para ir de
lo general a lo particular:
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Ver más adelante el apartado titulado “¿Qué es un área temática?”.
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se presenta como un recorrido lineal y obligatorio hacia la definición de
cada aspecto de la investigación. Si bien las áreas temáticas enmarcan
a los temas, nada supone que estas deban ser definidas con antelación.
De hecho la mayoría de los investigadores lo hacen al revés: primero de-
limitan el tema y luego lo circunscriben en el área temática que más se
adecue a su trabajo.
Como último nivel en esta pirámide aparece la definición del problema
de investigación. Cuando se enuncia el tema, la investigación aún se
encuentra en un marco de generalidades. Así, sobre un mismo asunto
pueden formularse distintos problemas de investigación.
También existen otros criterios de búsqueda en la definición de un tema:
consultar las discusiones trabajadas en nuestro campo de estudio; reco-
ger las inquietudes de otras personas; preguntar y debatir con profeso-
res; hacer una lectura crítica de libros, revistas especializadas, artículos,
ponencias y demás materiales que disparen reflexiones en torno al cam-
po de saberes; participar en conferencias, congresos, discusiones y de-
más formas de exposición y de reflexión alrededor de las problemáticas
de la comunicación.
Es necesario tener en cuenta que la instancia de realización de una tesis
supone un momento de libertad de acción que tal vez no se encuentre en
otros espacios de producción académica. Es este el momento de encarar
un proyecto que satisfaga los deseos y las necesidades del tesista (tanto
personales como sociales), pues por lo general no estará limitado por
otras cuestiones que no sean las normas básicas que debe cumplir cual-
quier investigación científica para ser presentada como tal.
En esta instancia, uno de los prejuicios habituales entre los tesistas es
pensar que si el tema elegido no es novedoso u original, no es digno de
ser estudiado. Si bien es importante encontrar nuevos aspectos o factores
estudiables, una investigación no debe pretender ser una nueva verdad
sobre el campo disciplinar. El hecho de que el tema en proceso haya sido
abordado en otros trabajos no impide avanzar en su desarrollo27. Es muy
común escuchar: “Elijo este tema porque no hay nada hecho al respecto
en el campo”. Tal vez deberíamos pensar que si no se ha hecho nada es
porque realmente ese tema no es pertinente o relevante para ser estu-
diado. En consecuencia, la cuestión de la originalidad no debería ser un
factor limitante en la elaboración de una tesis de grado.
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Además, es necesario aclarar que nunca dos temas son idénticos, ya que las construc-
ciones están puestas en relación directa con contextos particulares.
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política académica de cada casa de estudios, cuestión que puede facilitar
nuestra delimitación.
Por ejemplo, en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la
Universidad Nacional de La Plata, se han definido nueve áreas temáticas
de desarrollo prioritario –conocidas formalmente como Programas de
investigación– que contemplan (y contienen) un gran abanico de posibi-
lidades de estudio dentro del campo. Estos programas de investigación
son los siguientes:
Junto con las líneas de investigación que aborda cada programa, se pro-
ponen diversos objetos posibles de ser abordados dentro de cada una de
estas áreas temáticas. El crecimiento, la revisión y la actualización en la
investigación de la comunicación –como en cualquier otro campo de la
investigación social y de las ciencias en general– va redefiniendo tanto los
programas como los objetos y líneas que cada uno de estos incluye. En
el caso de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP,
en el año 1998 se definieron cinco programas de investigación, pero una
evaluación del campo de la investigación en esta institución determinó
que las posibilidades y miradas se habían ampliado con el tiempo y la
experiencia, y que era necesario agregar y redefinir los programas. Desde
el año 2005, los programas de investigación son nueve. Si bien las áreas
temáticas están predefinidas por las instituciones de enseñanza y los cen-
tros de investigación o financiamiento de la investigación, el desarrollo
de los procesos investigativos necesariamente las va modificando.
A diferencia de las áreas temáticas, los temas, como fue señalado, no es-
tán previamente definidos por las unidades académicas o por el campo
de la comunicación, sino que son construcciones conceptuales a las que
el tesista arriba según el camino trazado. Veamos algunos ejemplos28:
28
Todos los ejemplos fueron tomados de planes de tesis de grado de la Facultad de Pe-
riodismo y Comunicación Social de la UNLP.
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Tema de investigación Área temática
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Ya veremos en otros capítulos que la pertinencia al campo termina por definirse y
precisarse en la construcción del problema de investigación y en su fundamentación
conceptual.
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Así formulado, pareciera estar más íntimamente relacionado con proble-
máticas posibles de ser abordadas desde las ciencias naturales o ambien-
tales. De todas formas, si nuestro interés está puesto en ese tópico, pue-
de llevarnos a un primer acercamiento sobre el tema que definiremos,
investigando, por ejemplo, la recepción por parte de la comunidad de
las estrategias comunicacionales impartidas desde el gobierno municipal
en relación con el impacto ambiental de la erosión de las playas en el
partido de La Costa.
La pertinencia está dada por el reconocimiento de una tradición en in-
vestigación que el campo –a través de años, de sujetos y de trabajos– ha
ido forjando para su desarrollo. Si bien nuestra investigación no debe
responder necesaria y positivamente a lo hecho por otros –si así fuera,
el conocimiento correría el riesgo de ser estanco–, es fundamental que
recupere el saber previo en el sentido de dar cuenta de la experiencia del
conocimiento en esa área.
Es relevante señalar que también es muy frecuente observar la situación
contraria, pues muchos tesistas creen imposible abordar un tópico de
interés desde el campo de saberes en el que investigan. Aquí el problema
es el opuesto al que señalábamos en párrafos anteriores, ya que se sub-
estima el alcance de las herramientas y de los saberes del campo al no
estar bien informados sobre las posibilidades que poseen dentro de este.
La pertinencia es la primera máxima a la que debe responder un tema.
Si pensamos otra vez el esquema de la pirámide invertida, veremos que
en el nivel más abarcativo se encuentra el campo de saberes. Si nuestro
tema no responde a esta pauta, es imposible avanzar en la investigación.
No puede fijarse una regla sobre la cantidad de información que deba
brindar un tema para establecer su pertinencia; pueden ser más amplios
o más específicos según lo requiera la investigación, según lo requiera el
objeto de estudio que se está construyendo. En este sentido, y retoman-
do los ejemplos mencionados, el tema “Análisis de los procesos comu-
nicacionales en las asambleas barriales” presenta una definición menos
detallada que “El discurso televisivo en la estrategia comunicacional de la
Iglesia Universal del Reino de Dios en la TV argentina de aire”, ya que este
último aporta más datos sobre el objeto en construcción, exponiendo
qué aspecto de qué actor social y en qué escenario lo va a investigar. De
todas formas queda claro que ambas formulaciones presentan un anclaje
comunicacional definido. El tema solo tiene validez dentro de la inves-
tigación que lo contiene, y no pueden darse modelos para confeccionar
tipos de tema. Cada uno es una construcción particular para una investi-
gación específica, y por eso las comparaciones no siempre dan una idea
cabal del tipo y la cantidad de información que se requiere.
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Temas simples, investigaciones complejas
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Ver capítulo “La centralidad del estado del arte en la construcción del objeto de estu-
dio”.
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