LECTURA No. 3
LECTURA No. 3
LECTURA No. 3
Enlaclínica,loscuadrosnosiempresontanclaramentediferenciados' Y a partir de ello diseñar un protocolo de trabajo que será exclusivo de cada
apareciendo, en las hipercinéticu.t:
h]p""*1t1:::::it:1t"::f:".Til;
"1 *""".1:l::je tensión en ras paciente, pero suficientemente elástico para introducir los cambios o variantes
:iffi;;;;;;;;;ü ; en ras hipocinéticas,
necesarios. Ha de tener, por tanto, una formación amplia, que le permita esco-
estructuras adyacentes, en un intento de mayor rendimiento' o ger las técnicas más adecuadas para cada persona.
dé una idea exacta de c1ál
;;;ülálit"o'ro"t"""o : :]^T::".""*"
'l iiño
o
No es nuestra intención dar un cúmulo de <recetas> que puedan ser usadas
o"r;;;; ;;;il u ¿t'to"iu es-básico para
"].:lY:]::::l:::'";t::X:
al pacien- mecánicamente, sino presentar las características generales que debe tener
.rmaterial fonético y la orientación preventiva
o
;" ;;;;; J^r)^r,
opuestos'
B
o toda reeducación vocal, con una serie de ejercicios como ejemplo, que pueden
te son, no sólo diferentes, sino prácticamente o servir de pauta inicial, pero que deben ser usados con reflexión y cautela por
o el logopeda que se inicia. Serán ejemplos de los que partir hacia un trabajo
más completo. La reeducación vocal en una disfonía tendrá como objetivo fun-
FUNCIONALES COMPLICADAS !
ENOPATOGENIA DE LAS DISFONíAS o damental reordenar la fisiología alterada. Ello puede hacerse de tres formas:
a una alteración ri
t" ""il::l:Tento de esfuerzo vocal puede dar lugar /\
q,
1. Reeducando el círculo vicioso del sobreesfuerzo vocal. /
ffi nnlÉ
ffiFE"T I HEHüffiffiñffiffi ffi¡' !üffit$ñHtffiffitxtñlit Hi'l
t
Este esquema desglosa el acto vocal para permitir una gradación del traba-
3.Informandoalpacientedelanaturalezadesusdificultadesvocales, (puber- jo reeducado r, alavez que una combinación de actividades que impida el abu-
posibilidades vocales reales rrimiento del paciente. Aquí sólo lo usaremos como guión didáctico, para deta-
ayudándole a explorar y experimená ""
fonías, Psicógenas' etc')' llar en qué consiste la rehabilitación vocal y el porqué de cada uno de ellos.
Enocasiones,elreeducadorhabrádeelegirunadeestasopciones,peroen
conseguir los mejores resultados' lnformación
general deberá combinarlas para
Esbásicoqueseinformealpacientedecómosevaaafrontarsurehabili- La reeducación vocal debe ir precedida de una explicación del mecanismo
tación de lavoz,sin descuida'to'
t'!""iot psicológicos' ua d3 cono-1i "]::-
que' segun anatómico y fisiológico de \a voz, con la profundidad y detalles adecuados a
y patológico de una laring"' t t-"^t'1::"nismos ;i
cionamiento normal
:: cada paciente, y con los medios más gráficos: láminas, ejemplos, símiles, etc'
creemos,hanconducidoasudisfonía.Debemosconcienciaralpacientede Asimismo, se ha de explicar el proceso de la rehabilitación vocal, sus dificulta-
des, pronóstico, etc. Se ha de dar confianza al paciente pata qve presente
quelareeducaciónconllevauncambioensushábitosvocales.Laspautasnue- de sus
y voluntarias' y sólo después ti
vas han de ser pensadas' precisas' "o*'otua"' en automatismos' dudas, preguntas y dificultades a 1o largo de ias sesiones'
y regular se transformarán j+
una ejercitaciÓi
"o""*"t" ;t . Una adecuada higiene vocal es imprescindible, durante y después de 1a
Enlaprimerafase,deentrenamiento,esimportanteeldetalle:ar,ialllz'arcon reeducación. El paciente ha de aprender, progresivamente, a disminuir sus
exactitudlasactitudesvocales,losmovimientosarealiza¡,lassensacion":1T: agresiones vocales y a ejercitar una prevención activa que le será útil siempre.
cibir.Enlafasedeuso,loesencialesdarsecuentadecuándoSeusaunmecanls-
vecesbasta una pau- Aunque lo incluimos al inicio del trabajo, se debe insistir €n una correcta higie-
tiempo para corregirlo.A
mo de esfuerzo o erróneo, y darse para hacerle reto ne vocal durante toda la reeducaciÓn
controlada, o un suspiro,
Sa, una ,",n,,."iu,, costoabdominal Aconsejaremos:
marelhábitocorrecto,sinnecesidaddeestarespecialmentependientedesutéc.
nica vocal' rncionales, simPles Y
1.Reducir hábitos tóxicos: tabaco, alcohol'
Presentaremoslareeducación-tipodelasdisfoníasfu Z.Reducir factores predisponentes: ambientes secos, calientes o excesi-
delascomplicadas,yposteriormen¿ladepatologíasque,porsufrecuenciao y vamente fríos, cambios bruscos de temperatura ambiental, exposición a aler-
características especiale'' l"t"'"t""* -"o""i: parálisis recurrenciales la genos, etc.
"'
tratamiento ¿" ot'o' tipos de
podrá aplicar
disfonías' se
puberfoniasl 3. No hacer uso prolongado de la voz en situaciones de labilidad larÍngea:
'"" "f describi';;, lu, adaptaciones necesarias (disfo. infecciones ORL, congestión nasal, faringitis, etc'
misma metodología que "o,'
I
níasintbntiles,etc');otras'porsuesplcificidadymenorfrecuencia'quedan
parciales' etc')'
4. No realizar reposo vocal, salvo el aconsejado por el foniatra o el ORL.
It
fuera de las posibilidades de este
manual Qaringectomías 5. Ttatar adecuadamente las alteraciones e infecciones de las vías aéreas
superiores, ya que afectan a los resonadores y al aparato respiratorio, y
I pueden
I
I
-.ü,
vocal' I
1. Información al paciente' Higiene Actitud postural
Z. Actitud Postural' o
¿ r ^ c1 ^--c- l^ 1^ -^^1.-^^^:Á-..^^^l L^ ,¡^.^-' rnn o1
r DalaiariÁn ^^-¡aa'i*1' -'in¡ "n'
plo, con sensación de desenroscarse, de ascender por una cuerda conlafuerza
El equilibrio se consigue a
partir de la.acción::::llTt:i:"t:t:""t#t""; de los brazos, de sentirse sostenido por una cuerda desde la nuca, etc.
;ff
cular, rs #ff;#;";;;;""'"'"ii'^1T"^i""'"",T'lrararera.
ytvuuvv""tJu"
::";:i#fl E^^-
y de forma sucesrva todo el organismo.
. en
elevación máxima con descenso máximo, etc. Para el cuello, lo más eficaz son
los movimientos suaves laterales anteroposteriores y giros; estiramientos sua-
ción de fuerzas alrededor 1^ ^^1,.ñ¡. r¡erreh
a- r a col111r.
;i: ffi il# I
Dc 1,"
h-I ser nur'arru lJ i ;;; e re cto gracias
:::":::t de
s se apoyan en una serie
y extensores::rt:"--.-'"-n
J" i"i::
ucin-
ves sintiéndose elevar con un hilo por la nuca, del cabello en lo alto del crá-
neo, manteniendo la mandíbula descendida, etc. Para favorecer la posición
grupos musculares flexores
il:ff ITJ :H,ffi ;""" ; il' !r i: "
der organismo'i::: ñcro
relacionan .oi l" fo'u"ión: cinturas
también
:1i::::
ayudan
::#:l ;
pélvica
a
v
' correcta de la laringe en el cuello, hay que buscar la posición correcta cervical:
estirada, pero sin tensión muscular, con descenso mandibular suficiente, que
::fffI.:'JJ#lJ"*, n"" se
:Í
E' favorecerá el descenso del hueso hioides, y de la laringe como consecüencia.
escapular' 1- ^^r..*r^ l.'mlrrr y
w sirve de sostén
La cintura pélvica permite
el apoyo de la columna lumbar Ttas el trabajo de la estática corporal, el paciente debe ser capaz de conser-
tronco' A través de los
l¡i
múscuios abdominales y del
,,-r
var la verticalidad con un equilibrio musculaq, es decir, conseguir un sostén
al diafragma a través de los del peso corporal ;¡
pies y las piernas' f"J"" el apoyo en el suelo' el reparto se apoyan la caia
suficiente sin tensión excesiva, y ello en todos los ámbitos de su vida: de pie,
"o' En la columna dorsal sentado, etc.
y, por tanto, o,,u bt'"t'" verticaliáaá' la cintura
relacionándose también con
torácica y los múscut;;*t;;t"rios' y movilidad de la laringe' ya
1a correcta posición
escapular, de la que depende Por tanto' el
cuello' nuca' maxilar y cabeza' Relajación
que equilibr" l" mt's"oiatura del fúncionamiento
es básico para un correcto
equilibrio estático del organismo produce un desequilibrio
de un grupo muscular Una vez identificadas las zonas de tensión muscular, es preciso reducirlas
vocal. La crispación repetida ya sea directa o indi-
estructuras de la fonaciÓn, para qu€ la postura y el equilibrio se mantengan. Con ejercicios de relajación
.
que altera la movilidide las
no se pretende el abandono total de la actividad muscular, sino eliminar las
rectamente.
correcto consistirá en: hipertonías agotadoras y el estado tensional, es decir, el trabajo muscular inne-
Restablecer el esquema corporal
cesario.
conciencia del gesto vocal
1. Reconocer los puntos de tensión y tomar En un primer momento pueden ser útiles los métodos globales tipo
<Schultzr. Favorecen la conexión con el terapeuta vocal y ayudan a descender
las'cinturas y la
"ot1"."toáorregir los puntos de apoyo deficientes y equilibrar el tono muscular general, contribuyendo a una imagen corporal adecuada.
potencian-
bloqueando grupos musculares'o Los métodos analíticos, tipo <Jacobsonr, facilitan el trabajo muscular seg-
actividad muscular, en ocasiones
mentario a partir de la contracción-relajación de los grupos musculares, ya que
do otros.
la relajación diferenciada permite \a realización de una tarea con un gasto de
corporal conllevará' por tanto' un trabajo energía mínimo: sólo actúan los músculos ejecutores, sin tener que vencer la
La reeducaciÓn de la estática
que pueda ser susceptible de desequilibrio: resistencia de sus antagonistas. Ayudan a percibir la sensación de eutonía de
sobre cada zona concreta
un gn¡po muscular y a mantenerla en la actividad.
o
o Cada paciente requerirá una orientación concreta de los ejercicios de
Verncali.dgd.Secomienzaestimulandolassensacionespropioceptivasde
planta de los pies' o
con un masaje suave en la relajación. El terapeuta ha de tener la suhciente flexibilidad de criterio para
apoyo al suelo, por ejemplo' o
I
a
{ usar, de cada método, los aspectos que más favorezcan la respuesta muscular
haciéndolerea|izat,"t.i*repetidos,descalzo.Todoellopalaqueconsigaper-
de sustentación' deseada.
cibir la sensación de mejor base o
q
Co|umnauertebral.seharacontrolarsuposiciÓnenelespejocomentando En las disfonías hipocinéticas no es conveniente utilizar los métodos glo-
se progresivamente al lrabajat bales, porque disminuyen demasiado el tono muscular del individuo. Se
la más correcta- La ¡ectificación "o"'"goi'á conseguiría posturas rígidas' !
o
o
forzadJsólo pueden usar entonces métodos activos sobre la zona del cuello, que favore-
cada segment". El ";;;;;zamiento
,t
o
CínrurapéIwca."-s""igiru,alatonicidaddelosabdominalesylaPosición cen la coordinación neuromuscular v tonifican los músculos intrínsecos de
rle. la colum.,u t'-t*Uu'.. n¡ircicios
de abdomina:T;;::i:::J"::il? vt la laringe.
$il; ¿
conciencia de su acrividad. Posteriormente, sin pajita y de forma voluntaria, el
paciente movllizará con suavidad esa zorra, contribuyendo a una respiración
Respiración adecuada.
presente la necesi-
;onorizado, tendremos Cuando ya se tealiza una ventilación costoabdominal comecta, se potencia-
rán las pausas, tras la inspiración y durante tres o cuatro segundos, con una
*J;ff."#T::'XAl:#:fiXii';;;;"""'ir"respiraciáhadeposibilitar
pero o*Oiu" mantenida'
de que se apro-
espiración larga y mantenida que ejercite la musculatura respiratoria y favo'
una presiÓn 'forma
y manteniendo
"á'* 'oft"i"nte' convifiiéndolo en sonido rezcala coordinación fonorrespiratoria. La respiración correcta se ha de traba-
veche totalmente el aire espirado,
correcta' jar en todas las posiciones: tumbado, sentado y de pie, tanto nasal como bucal.
una dinámica corPoral
respiratoria se basará en: En ]a inspiración es importante que no parbicipen los músculos de la base del
La reeducaciÓn
cuello, que no se eleve la zona esternoclavicular ni los hombros, no re.alizat
un contror
basculación de la pelvis ni flexionar posteriormente el cuello elevando la bar-
I rnstaurar uni *.pl:Tl:,:ff:?:::1-#::Tf;:ffJ*ita
repercutrr.el billa.
musculat del soplo sin
esPiratono- En ]a espiración se evitará el "empuje, de los abdominales al inicio, ya que
2' Conuol del aire
fonorrespiratoria correcta' contribuye al ugolpe de gloiiso, la elevación de los hombros y la espiración for-
3" ""u "oo¿i"u"iÓn zada con hundimiento esternoclavicular-
"""*''i' aunque pasi-
en reposo' ql" Rápidamente se intent¿rá t¡ansformar el aire err voz, inicialmente combi-
,,u, po
solicita'
d" *ol ;;
Partiendo de la respiración
;"" *
: i:
:'t lslolbfominal
{l;:T:: ll,,T;Jilf ;",:il::::3'l}i::li
ha de recordar que e1ts.tcl,:"^:'::;,i'e a etiminar hábitos de
Se
"
nando los ejercicios respiratorios con la fonación de vocales de forma suave y
mantenida, para luego pasar a trabajarlos conjuntamente con las vocalizacio-
en un inicio' ya que
contribuye'i nes. Para alargar la espiración, desde una inspiración correcta se hará sopla4
Es útil reforzarel nasal fonorrespirato.o'
con mar contror con suavidad pero mant€nido, un nhilo de aire fríor, mover la llama de una
ventilación bucal excesiva, ;l;;;con dilatación de
de vela sin apagatla o ejecutar'el sonido de la consonante /s/ o /f/, etc. Será
La inspiración ha f
'"' "o*'"iu'nü1 :1t:'1-"i*'
importante hacer sentir las naperturas, costales, con el diafragma descendido
lapartei"r"¡o,¿"|acajatorácica.se¿etehacersentirlaaperturadelaparte
en fona- el máximo de tiempo; es 1o que se denomina el napoyo abdominalo, básico para
h";;;;;;"' to tn¿t lenta posible
costalinf.eriortantoporlapartea","rt"rcomoporlaposteriorylateral'ydela
mantener un soplo de presión conti4ua y sostenida. Si no se trabaja previa-
zonaabdominal' La espiración de la'caia torácica'
La salida
tensiÓn mente el apoyo, se puede sobrecargar la musculatura laríngea al forzar la espi-
ciÓn, sin ni "rr;;;;;perior manteniendo al
"'rt'""o
del aire debe ser controlada n.rjJ, ;;;J,iro, "¡¿otnlnates' ración.
I
I
-t,.i#;]ñ:ffT?!!"l]:::" supino' tras unos
debe trabajarse en decúbito
I
I
t
forzada'le Resonadores. Articulación
I
I minutosderelajación.Hacemosnotara.lpacientesurespiracióndereposo:
a partir de una espiración
tr fácil' silenciosa y sin
cómoda, "'*;;' La laringe genera un sonido con un tono llamado fundament¿l. Este soni-
Para
inferior y abdominal'
invitamosatealiz[runainspiraciónnasalrápida,*u"^"ysilenciosa,nodema-
do, al pasar por las cavidades de resonancia, hace vibrar los elementos elásti-
ptoft'Ja' haciéndol" *"""t" ""t*t
"otu"t" cos de éstas, dando lugar a los armónicos. El tono fundamental más los armÓ-
'iuao
reforzarlassensacionesde"n",*]u,",útilexperimentarlasbocaabajoyen o nicos configuran el timbre de \a voz. Actúan Como resonadores la cavidad
decúbitolateral.Consu*u'o"',u,costillasflotantes,elpacienteadviertesu
t i; ;;;ración' T^:t#:A";;fiiiffl"; farrngea, las fosas nasales y la cavidad bucal.
movimiento horizontalizad' "" o La correcta relación entre las partes óseas, ñjas, y lasblandas, movibles, al
.;*:rx,Tffi :T;;""$;'""T1::*:'HH:T;;'"**1*1"
distino, ar".r,Lt,Jr'"á""""urt
movilidad de las
como exageradas
[abdomen)
!o
o
I
paso de la onda sonora con una presiÓn aérea adeutada es lo gue se denomina
<impostación>. Si la musculatura está relajada y correctamente colocada, las
a cavidades amplificarán y reforzarán de forma natural el sonido, haciéndolo
(esternón)'Algunasn""o"u"'l'Jl"uffi iil:"$T:'"ffi ;i,.li"ntiii a
rnás efrcaz.
una posición semejaqte " "lj,H;;;;tojáo*i."i, fáci1 de n:i"tollj:ltu
G
o
8. La ejercitación de los resonadores debe comprender la eliminaciÓn de
vicios funcionales: elevación de la barbilla, contracción de los maseteros,
:l"J;nli3li:l;lli"ilT;':;'"'*!,¡':::*:ffi ;'"X?:li"'#i""I"'
o
L
:ff
y:il1-'"-T^"::":H,:::::'r*"il$**lT;'ffi ':ffi'?:lJ:1lfl :ü 6
¿
o
retracción lingual, etc. Estas actitudes conllevan una disminución del volumen
/:ló 14. ^^":á^A-. A^ -^-^---^i^
;'''i'i'l:''-'tn:':t::
tsHs**gj -9lrul=''"""
t:.:.=,;:istJ***it-ii'
ya que contribuye
a agrandar la En las disfonías hipocinéticas es eficaz usa¡ la /i/ con una consonanre ren-
necesano'
al espejo si es sa y anterio4 que dé la referencia de la resonancia facial /t1i\/ o /plii/, ya que
velo faríngeo, frente
de descenso' des- es la vocal con más armónicos.
,^ *^-,,ríhrr1a con movimientos
"^"ti"ublcofaríngea'
activa
La retajación
de la mandíbul" J"o" ejercitarse y
""i,ltu'il""i't
te n s ad o s sm as e re r* ] á" t* *" " u:,1T:L'11:,:,"t"iJ : "
1 o
"ff'3ia "," ""i0
:,xtiru*i'ffi""lil1"i#l,T**:*kl'"T"%,i,ll\Tl,i1"
el velo, cierra la
faringe' or
linguar debe conte- Ttabajar la voz significa mejorar sus parámetros acústicos: tono, timbre,
il il;; hac-ia La relajación
intensidad, extensión, melodía, entonación y emisión.
lS¡1!:-n-:,"*":;;de::*:;;':::',.;#l.ir;
*i:r;1*¡it;3:rlxxT"{,:ii:"ft En las disfonías hipertónicas es importante iniciar el trabajo reduciendo los
percibir la (ataques vocales durosr, tan frecuentes.
*"n,ode su superncre ser capaces de
movimientos linguales "::ffi;;;t""iil reeducaciÓn de Desde un apoyo abdominal correcto, se emitirán fonaciones suaves, por
activación de los ejercicios práxicos
de reec
relajación precisa'
t;;;;;; "llo"los
ejemplo, d,e /m/, de sílabas /bo/, [bu/, /do/, /du/, /so/, /su/, de forma que
infenores y rela- cadavez consiga mejor nponerlavoz en el soplo,- suele ser dificil reducir este
dislalias. , ^r^ annr¡2d^ contra los incisivos
apoyall'"rr"r,*,rro la posi- hábito tan inconsciente, por lo que a veces será útil hacerles soplar algo de aire
La lenguaplana' adelantada' laúngeo' Guardar
,;:xi**::r"':;:':'iiti:ü".tr1"il:if jr*::'::HT"T:: antes de la consonante, o realizar (suspiros), desde el agudo al grave, 1o más
espontáneos posible.
gran
de bisílabos es
un ejercicio de iy11;;;e la orofaringe y el ascenso En las disfonías hipocinéticas se intentará conseguir un mejor cierre glóti-
c"-"ados potencian l1-ul" op".trrra bucal lcomo leniendo un co, a partir de tonificar el cierre aritenoideo, la glotis posterior. Esto se puede
niendo los labios la sensación
Mantener hu"""'lu' vocalizaciones' hacer con emisiones tensas y coftas de /i/ o /u/: i-/ i-/ u-/ u-,/, unidas
del velo palatino'
una patata
T;*.; luego a consonantes tensas, explosivas: kí-/ ki- / o ki-ki-ki, ti-ti-ti. otra forma
huevo en la boca o "4"it:l^1 útil es alargar las vocales de la sílaba tensa ti-// repetidas veces.
:fr j:'^'"icular)'así
1xXhhk*;*:X¡::";;XlX1"[1,""'lj:1
#i*'" *tt""o y la resonancia bucal'
Es La coordinación fonorrespiratoria se ha de afrontar desde el momento en
que se consigue instaurar una ventilación costoabdominal correcta. con una
como de iu' me3ills' "ttt"*I{ postura adecuada, sobre todo cervical, se harán emisiones áfonas de vocales
el caso de disfbnías
""" i1'],'::"::"J"ffi#:T
útil hacer -'"'opriJo'" """la reeducacron
Hasta este momento' que pueden facili- alargadas, series de números, días de la semana, meses o poemas de longitud
ejercicios soo re
los resonadores
Hay graduada, que serán con voz en las hipocinéticas. se aprovechará el trabajo
nrn". ntnocinóticas' y en:tro
" en un caso
con sobre resonadores, articulación y voz, para insistir en ello hasta conseguir un
'"^ el trabajo
tar r^vorece la distensiÓn mandibular
t",tl;;;tu
^^
hábito correcto.
un las disfonías hipercinétic"t, zaciónpasiva de
la mandfoula
/mo/
u,,icutanao /ma/, La percepción de los puntos de apoyo de la resonancia es habitual en la
v
ejercicios u" T"l,::::';;"i;ii
;j1,i1,""""'"'ó
'"r- educación del canto. Es útil también eívoz hablada, ya que ayuda a dirigir
(nosotros se la descerl(¡crrrwo
-^s^ ñaqtz ..) la columna de soplo espiratorio, distribuyendo el aire en las caviclades de
deqfiI es mejor h,acerlo sobr.e
/1a/ arat'ada(laaaa"')
vo4 forma uniforme y facilitando la vibración de las partes blandas. Las sensa-
i?rT"., hipocinéticas de sonrisa''pero sin
¿"'¿" ru'po'ición
o articulando /"/
e'ti'a"n"j'o'l;;;*' ciones propioceptivas son así más intensas. Los puntos de apoyo más utili-
La arriculación corre
cta o":i:::^t:
1Tn;1*j* t*"r'3i,fi
ta cavidadraríngea'
::l J4
1o que' c zados son: entrecejo, labio superior, toda la máscara facial y la parte alta de
la cabeza.
-#;TTH':ff"tlli*l.*::*;";"
limpiaráe t tt Empezaremos con un tono cómodo, a ser posible dándole la referencia de
,'"'J"ttot'
''- se trata entonces t""lx:T
d' hacer sentir el punto de articulaciÓ." ::i:."^t: para la nota al piano, y con la vocal más timbrada. Es útil la /i/ porque facilita las
,Iá Lcrr¡rv"
--^,:- r.¡irl posición lingual
Se
rencia de apertura
de laboca' iruffi;;;iJ '*-'- la posición
vv r^
.
sensibilidades palatales anteriores. si sale tensa, conviene partir desde el fone-
en los es' ma /ui/ buscando la sensación de salida de aire anterior hacia el labio supe-
vocal' r ^:^-¡irins de rle resonadores como
en los- ejercicios rior. Ttabajar en exceso sobre la /m/ pued,e dar lugar a un hábito erróneo de
Se intentará que' tanto
lo más:t1t::':::f:";tilizar el ejercicio del
r rinolalia abierta, dificil de corregir. como variante se pueden utilizar otras con-
voz, las
" "* -o"de
ficos "o"ut"' '"u" a *n:.:-"::t",: t:;;"r'"t"s cerrados' lo
que. sonantes:
ru percibir la resonanci
D saunders'
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with dysarthric speech'" I Speech Hear'
este caso, poca habilidad en la pronunciación, pero no se aprecia una patología
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Harold Starke' Londres' 1977' -disglosia- ni tampoco una patolo-
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considera un trastorno del desarrollo de la articulación, de manera que el niño
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of neurogenic communicafiue disorders'
En JoHNs, D. F. (dir'): Clinicat management
en la normal adquisición del habla.
Little, Browñ, Boston' l97B'
La dislalia es el principal motivo de referenci a para muchos logopedas,
sobre todo de pacientes con edades comprendidas entre los 4 y los 10 años, fre-
cuentemente más varones que mujeres. Tbnto los profesionales de la educa-
ción como los pediatras y los mismos padres han mostrado en las últimas
décadas un mayor interés en la evolución del habla y del lenguaje, con 1o que
cada vez son más los niños con dislalias que se benefician del tratamiento
logopédico.
La causa de estos etrores puede ser:
t
3. Un trastorno afectivo o emocional, principalmente caracterizado por
o la persistencia de una actitud propia de un niño más pequeño.
p 4. Una combinación de los anteriores Duntos.
c
Cuando la base es práxica, apreciamos errores en la producción de un
o fonema -por ejemplo /ss/, /r / o /d, /- o en la combinación de más de
o
o
o
un fonema -como es el ejemplo de las dobles consonantes-. Estos errores no
o
mejoran con la repetición o la imitación y deben ser tratados mediante ejerci-
o cios práxicos y miofuncionales. Cuando la base es discriminativa, ya sea por
¿
o
6 hipoacusia o simplemente por poca habilidad en distinguir las características
o
acústicas de los fonemas, los errores mejoran con la repetición y el tratamien-
o to se basa en aspectos perceptivos y discriminativos de la audición. Si aprecia-
Si el origen de la dislalia es de índole práxico, práxico-motor o psicomotor,
de un abor-
mos un trastorno emocional o afectivo debemos valorar la a¡ruda por poca sensibilidad propioceptiva, mala orientación, coordinación o preci-
daje psicológico. sión, perseguir errores es el medio más directo para encontrar la forma de
variables suelen
Como en cualquier otro aspecto de1 desarrollo' unas enfocar el tratamiento. Si se trata de un mal hábito lingual, deben analizarse
conllevan una
influir en otras: las simplificaciones práxicas de la articulación comportamientos bucales generalizados a la articulación.
de su propio repertorio,
reducción de los patrones fonológicos que el niño oye En las dislalias fonológicas, con sus componentes de impercepción e indis-
para diferenciar fone-
con lo cual nentrena) menos su audibilidad o habilidad criminación auditiva, no podemos limitar nuestra observación a la búsqueda
mas;aSuvez,sidiscriminamal,seequivocaenlareproducciónpráxica.A de errores y condiciones de los mismos, ya que esta relación informa exclusi-
uel pequeño' para que no le pre-
todo ello se le puede unir un deseo de hacerse vamente sobre el estado actual, que es transitorio y nada nos aporta acerca del
Sionenahab]armejor,demodoquecuandoloslogopedasconocemosalniño nivel de aprendizaje e integración paulatina de los fonemas- Es necesario apli-
porprimeravez,avecesyaoperanenélcausasdediferentesigno'Comocon- car técnicas de análisis prosódico y de diferenciación auditiva que clarifiquen
secuencia,e]tratamientodebeabatcatamenudo,variosaspectossimultánea los mecanismos de adquisición fonológica- Observaremos si el error compro-
o sucesivamente en el tiemPo' mete sonidos pertenecientes a la misma o a diferente categoría fonológica. En
Duranteeltranscursodelaexploración,queiniciarer¡rosconfrasescolo- este último caso, nos interesará saber si el cambio de sonido responde a un
quialesquedespiertencuriosidad,interéseiremosestrechandoelcercomoti- proceso de explosivización, fricación, nasalización o africación del fonema
que una primera
vacional hasta circunscribirnos en el ámbito del diagnÓstico conside¡ado correcto, o si ha intervenido un ensordecimiento o sonorización.
aPreciación nos haYa indicado' Un mismo error articulatorio puede ser el resultado de una o más transforma-
Larecogidadedatosquepermitirávalorarlossíntomasdebereunirdos ciones fonológicas flngram, 1983).
condiciones PrinciPales: Hay que tener en cuenta, además, que un error puede deberse a la influen-
cia sensorial o práxica de otros sonidos cercanos -coarticulación-. Ejemplo
1.Quee]repertoriomuestreloserroresconsusdiferentescalacteríSt'icas de ello son las anticipaciones, asimilaciones o metátesis.
y en la
o distorsión- y sus combinaciones er.lapalabra
-sustitución, omisión Así, una misma palabra erróneamente articulada puede ser el resultado de
frase. una o varias ttansformaciones, ya sean de carácter práxico, sensorial o por
2,Quelamuestlatambiénnosofrezcainformaciónsobrelosaspectos efecto de la coarticulación. Ejemplo de ello son:
socioculturales,psicosocialesyafectivosquepuedenincidirenelactualman.
tenimiento de los errores e incluso en su posible remisiÓn' So1: /tol/ Oclusivización.
Jugar: /fvbar/ Anieriorización de /x/ y /g/ según el eje práxico horizontal.
Pelota: / Iota/ Supresión dg la sílaba átona inicial.
-.il' ;
Exponemos una serie de consideraciones generales: Los síntomas patorógicos de un individuo adurto en relación
con la con-
ducta verbal aparecen con condicionantes añadidos a las causas
iniciales que
Ios produjeron. por un lado, existe e1 fenómeno de la habituación,
1. Creemos importante que el niño olo pasebien, y comprenda la utili-
paulatina acomodación de la praxis atípica a las características
es deci¡, la
dad de las actividades, ya que así mantendrá la actitud positiva necesaria para orgánicas de
la cavidad bucal, para resolver nuevas combinaciones articulatorias
desear colaborar. Además, así fomentaremos en él el gusto por la verbalíza- a raíz del
aprendizaje progresivo del léxico. por otra pane, nos encontramos
ción, la iniciativa y la creatividad comunicativa. anre un
comportamiento del sujeto que generalmente ha experimentado
2. Es fundamental mantener un contacto frecuente y fluido con la fami- cierta
incompetencia en el ámbito social, lo que promueve paliar las
lia y los demás educadores del niño, porque éstos tienen la posibilidad de irregularidades
de dicción a través de ra modificacién de sus patrones lingüísticos,
potenciar y prolongar en el tiempo nuesfto trabajo, así como de informarnos en ros que
evita palabras que le comprometan. El sujeto adulto que persevera
de aspectos relevantes para nuestra planificación. en errores
de pronunciación pretende dinamizar su conducta verbal seleccionando
3. Debemos favorecer la aceptación de sus propios errores como algo expresiones que, por efecto de la entonación, por su carácter
natural e incluso esperado en el curso normal hacia la correcciÓn. reflexivo y a
: ' 4. Realizar una programación que simpliñque los objetivos a favor de una causa del interés conversacional, sean socialmente aceptables y
..ti, . le distingan
por la naturaleza de su contenido. En su defecto, se verán
causa común. Pueden determinarse conjuntos de síntomas derivados de inoperantes más
probablemente los sujetos cuya profesión implique sobre
una única condición atípica, tanto en el marco de la sensorialidad como en el todola expresión
verbal.
de la praxia o los hábitos linguales. Así, los ejercicios basados en un mismo
un factor importante a considera¡ es la causa inicial de las i*egularida-
condicionante de diferentes síntomas resultan más efectivos.
des articulatorias. pensemos que, cuando un adulto con
errores de produc-
ción siente en un momento dado interés por la corrección de sus dificulta-
Los ejercicios de tratamiento de la dislalia son múltiples, aunque muy des, lo que realmente propone es poner fin a su desaliento
bien pueden clasificarse desde tres puntos de vista: o vacilación al
ejecutar las tareas propias de su actividad cotidiana. por este motivo,
su pre-
tensión se centra en encontrar soruciones inmediatas dejando al
margen ros
l. Los que refuerzanlas habilidades de percepción auditiva. c
I pormenores del proceso de deterioro en que se ha visto
implicado. se hace
2. Los que mejoran la praxis bucofonatoria. .!
dificil, plles, en el adulto, reconsiderar el probrema en todá su amplitud y
3. Los que deshabitúan actos linguales incorrectos. hacerle consciente tanto del carácter de las causas, sin lo cual un
trata-
.q miento pierde objetividad, como de los conceptos que rigen una terapia
En el primer punto nos referimos al reconocimento del carácter común logopédica.
de los sonidos, al análisis de las condiciones de producción y al recuerdo de Las razones por las cuales persisten ciertos malos hábitos
linguales son
las características particulares de los sonidos. Para el segundo punto utiliza- o principalmente fonéticas. En el período en que se resuelven los
¿ contrastes de
mos el soporte auditivo; a través de é1, el niño va descubriendo el origen de o,
o oposición práxica, es deci4, en el momento en el que el sujeto deja
o de mante-
los uruidos> producidos al azar por la parte anterior o posterior de la cavidad ner la conducta primaria de combinar los sonidos para formar vocablos
sólo
bucal. Se trata de animar la articulación a partir del empleo de consignas 0 articulados en las partes anterior o posterior de la cavidad bucal, distintamen-
f
I
I
.. i ,ilir' ! ii i
'.
A. Descondicionar el sonido que Los sonidos a descondicionar se sus- Facilitar mecanismos de autocorrec- Sonidos a descondicionar:
sustituye a otros: tituirán por otros con carácter com- cron (evitando una simple conduc- tktd
Ejercitando prax¡as de los opues- oensatorio ta de imitaciónl Sonidos compensatorios:
tos | /\ /\\ /\
Jugando vocalmente con los de d s-x g-j-k l-r
punto de articulación próximo
B. Presión sobre el habla: Se seleccionarán palabras que con- Mostrar, a la vez que el modelo, el Manipular el léxico para acomodarlo a
Distribución de imágenes según tengan los son¡dos cambiados o co nte n ¡do refere n ci al q u e co m porta dicciones absurdas y (seudo) correc-
un estfmulo <clave> no oroducidos (así favorecemos su incorporación tas
Descubrir el criterio con que se espontáneaJ Establecer un código visual o de posi-
emparejan los modelos ciones bucolinguales para el reco-
nocimiento silábico
Sensibilización práxica: Basado en masajes, succión, expul- Adquirir la conciencia propioceptiva Terapia miofuncional
Acciones guturales sión del aire y en actos coordinados (primer requisito para el aprendi-
Actos reflejos salivales de la lengua con labios y paladar zaje correctivo]
Recuperación del tono muscular
Reproducción inmediata y diferida de
D. Entrenam¡ento rítm¡co: los ejercicios propuestos marcan- Crear hábitos ps¡comotores de vocali- Las tareas se realizarán a partir de tres
Del sonido continuo y disconti- do continuamente las pautas a zación (especíticos y coordinados) cr¡terios:
nuo seguir y explicando la finalidad Adaptación del ritmo a las condicio-
Respiratorio oretendida nes del léxico seleccionado
De pausas entre palabras lmaginar secuencias fónicas varia-
De latencia enre sflabas 0as
Del número de unidades de que Conocer los valores correctos de un
se compone la palabra mensaie
Del espacio tónico de cada
patrón emitido
De fraccionamiento fonético
De variaciones de tiempo
'o¡!t6p un !e ugptzllo¡ñE uls /3ldo@¡OJ v'S 'NOs|s|VI O
'
((olaPou) eJq
(o6019lP) o (o6onf)
¡(suacse) stu -ntco Jod sepua6ns seue6gull
(u9[senc ua opluos lap Plcuep soJouos A sop.tos
-sru eun ue seluoplcutoc sopluos
-unpeJ Á elcuencaJl el ue ?ldeculq ep sauolccelap sel Jas uepand soptuos Jod sepue6ns souo0gu'll
JOCeqJ aluatslsJed opluos un Jel :uglccnpolo
saunuoc) so^\Pne ouloc peplllqlpne ep seluelsuos '€
-odellxe epand as enb sol eP so^ll [soc¡1¡cadsa Á ap seuolclpuoc sel 0p slsll9uv
seppu€relp so'seJ ap u?p)apo seuelc ap uglclstnbpe el ep Jued v
-ButJolul solelal Á so^llBcnpo sooenr
EJqele0
el ep sopluos ep elcuonses
er e olcedseJ uglcPnlls ns
sp^ll erqeled el ue etcuasejd ns
uglceJnp Á peptsuatul 'Ouo1
(so¡decuoc '{ -ceIoc seuolcecljlpoul sel ep u9!c
. (sBPelnsluP
-eqoJduloc eullelned el eluelpau Á :sopluos aJlue unuoc
sBJqeled Á soptuos ap sBfro6elec) ectaQlopn eouo| u ?tcts Je¡c9rec lep oluelulcouocau
eluoulPiuel enrlrpne uglcezlllqlsuas el op llued V
seuolcBqPJ6') lPnsl^olpnB Á oc¡ts¡cy -lnbpe ep se¡6et se¡ ep ovelwlcouoc
otuerulp9cold
Reconocimiento del carácter A partir de la sensibilizaciÓn audit¡va Conocimiento de las reglas de adqui' Acústico y audiovisual (grabaciones
y mediante la paulatina comProba- si ció n fonoa ud iol óg ica (categorías de sonidos y palabras lentamente
común entre sonidos:
ción de las modificaciones correc- y conceptosJ articuladas)
Tono, intensidad y duración
Su presencia en la palabra tivas
Su situación respecto a la
secuencia de sonidos de la
palabra
A partir de la adquisición de ciertas Detecc¡Ón de rasgos diferenciales Juegos educativos y relatos informa-
Análisis de las condiciones de
producción: constantes de audibilidad como auditivos (comunes y específicosl . tivos de los que se Pueda extrapo-
pueden ser las detecciones de lar un sonido Persistente (hacer
lmágenes sugeridas Por sonidos
hincapié en la frecuenc¡a Y redun-
sordos y sonoros sonidos coincidentes en una mis-
dancia del sonido en cuestión)
lmágenes sugeridas Por oclu- ma (escena), <juegoo o <diálogo>
sión o vibración
-
"r ", cisión muscular no será suficiente y aparecerán errores de articulación. dán_
r* """:;;is,'"";"iffi;;;;;;;""9::::"""i:ll"x::ff:"'T,'-:ii.,::l:
;:l"tT:::':"t;Tíiili'i""'o"""'",t":,:::::'T:::l?::'##:::'.TT
ápice'rinsual hacia ra
parte superior de ra
dose lo que denominamos disglosia.
1997
delniño Masson' Barcerona'
illllT:ii, i:1T,,K-'#;;,'; ' ;¡"nguni'
"*"-u,T'11o1'""';:;*;n*ooton'u"t'Y1)-Y:1"*i',::
Esimprescindible,enunprincipio,queeladultosefamiliariceconpuntos
Disglosia
dearticu]aciónfijos.Loquenoseríacorrectoenlareeducacióninfantil,acau-
sa de la inexperlncia en establecer
mecanismos psicomotoles, en ei adulto
sobre un proceso de alternancia de C. Bruno y C. Sánchez Hidalgo
condiciona automatismos por la reflexión
y
la praxis en dos sentidos, continuidad discontinuidad:
demostrado que
no na
í il: ":}1ff:'"ri
*Y:::.T:,
:i+:;1i1ffi
estructurál v su stoor, le'3)' Sin
ffii"ul;áalía [Btuestone v
ffi #:111*i:'""m:';ffi1"?'#$::il:##::mx*:
o blen que requiera":"
s:1:;;;;;ñ" del logopeda sino
Fig. f f -3 Protrusión lingual durante la deglución atípica'
cuadamente
En ocasiones no
es-sufic'"*:]i-Tt::#;ffi, t:"e suele ser
el otorrino'
fisura labial, así como la de cualquier otra asimetría o cicatriz'
Deben obser-
,_t¡:1ry;gg";15i:,*;'*,q""suelesere'1o'io*ino'
el ortodon varse el tono muscula¡, la movilidad y las praxias labiales, con y sirr emisión de
laringólogo,
¡ Debe observarse
ra forma det y,:*'^.:";:i;::ffi:;;#: Ll:il"l; fonemas-
. El cierre velofaríngeo puede ser comprobado mediante el soplo de una
y la funcionatto',r"u" de una ya que lo que
,ru" u"1" "t"'^rrrr,luforma I indicar la presencia llama o 14 succión con caña, pero ésto no siempre es suficiente,
algo oscura gran rapidez
coloración,que en caso de ser realmente nos interesa saber es si el velo puede moverse con la
":;*;;::tambiénobservar"lr1iff
paso de aire o dism
Ti"Hil'*11":J'T::'"iff l que requiere la sucesión de los fonemas en la frase.
ferrnite observar con exactitud la amplitud
La videofluoroscopia
de movimiento, la precisiÓn,
sí
el
el y de contacto del velo mientras los órganos articulatorios se
oo*uJ*" Uificultar con la ' punto la extensión
un mal hábito lingual
del esfinter
habla' mueven. Esto nos ofrece una idea mucho más real de la fisiología
"'-l' ' '^r puede
maloclusión dental
nrovocar
-"a¡le prov'
r
I "u
velofaríngeo (Zambrana, 1 999)'
I
¡
"""'ic";",':,i'i;;:':ilü:i:i:'::.:11#"iJtT':"'#H':#;"#ilil
¡ bucal conlleY "" 11"#J, durante la articu-
reposu IRATAMIENTO
I
I
," l"tgo" descendida en
"ot''"'piración
"ior,ii"*"t, ""*'"ua
"o" y'
i ración' como se ha mencionado, la disglosia plesenta muchas y variadas causas
Lalengua debe
ser rrexrie
l i:fil1t"",T;5:nili^r::lTi:l; por tanto, también dive¡sos tratamientos adecuados a las características de
la masticació"' f :T:#;;;"";t del habla'
de reposo' durante t":'r;;;;A* cada caso.
repercute "" cierre labial, déficit En primer lugar, hay que tener presente que la patología
que provoca una
cutud en esus tunciones qY". t"
de
y la degtución, es un
cla- y la fisiología
o La deglución atípica, Tl^Í t:j;;;;ión
*"r,r*ción disglosia suele alterar también otros aspectos de la anatomía de
protrusiÓn lingual qtt:t"
11'-3)'
fánética (figs' 11-2 v- humanas, por 1o que el tipo de tratamiento logopédico que se lleve
a cabo
-.¡l de succión v t" que la len-
que en ocasiones
Yt#;;;;;"t significativo deberá estar a veces incluido en un amplio programa que englobe
toda la.
ro ejemplo' ya trtu"""o,
'" ¡:";";i"biá'
Los labios representan
un pápcr
fonemas' pero
lll"l-n^r.".sos a.r""'"t, se ha
¡omrl h1:"*lt patología presente. Esto es lo que ocurle en los casos de síndromes congéni-
'"pt"""tttan de malfor-
il tos (p. ej., síndrome de Pierre Robin o de Crouzon), o en los casos
;::;xxin:""*ru::m:rg:;::ai:Tl"':'ilnJi:T:::ffi
y defrcit de rnovrrruo"' "'--
maciones orales aisladas (p. ej., fisura palatina).
paciente
En
y
estos
el
casos,
logopeda es
la disglosia
un miembro
es
I
il:k'{¡*X¡*,,"r,:*:k.ü:,:r,'".;i}:i'i:i:'"f ru*i:r
c 1. Distensión de labios y mejillas con agua
caliente y salada' inflándolos
resPonsabilidad del reloj'
I guimi nto er e der
sucesivamente, rotando según las agujas
; ;; ; rmita se
I
o";."^t""':" Ino por
;;ff"T;
parte : :,""fiff
ucr rr¡r¡v -- i;" * p e
2. El mismo ejercicio sustituyendo agua por aire'
áad surgirá o idÓneos
I debe-n ser los 3.Gárgarasconaguafríaybeberenporrónconlabocabienabiertapara
trabajo. r^ .l.,,ciófl de las sesiones
t1'1"t1^tllLl""iOt '
estimular la pared posterior de la faringe'
I esta muy comprome-
I | El marco situacional V Si la muscular
I
-.¡l ¡
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normal medida a 2
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I
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Masson, Barcclona. I 999. ¿ Severa: entre 70 y 90 dB
q
a Profunda: más de 90 dB primer grado: 90 dB \
calculado tambjén
segundo grado: entre 90 v 100 dB I
-
I
I
ralmente, estos niños tienen una mejor lectura labial debido a su mavor cono-
Sorderas prelocutivas I
cimiento del lenguaje en general.
Se producen importantes consecuencias afectivas y sociales (aislamiento,
En el caso de sorderas congénitas o adquiridas antes
del desarrollo del len- regresiones, etc.), algo diferentes de las del niño con so¡dera prelocutiva,
guaje,laimportanciadelapérdidaauditivadebeconsideralsecomounfactor pero que pueden afectar g¡avemente su desarrollo personal y su integración
del futuro ya que, en
áe probabilidad antes que una estricta predeterminación social.
como la inteligencia y
el desarrollo posterior, van a intervenir otros factores Si el niño adquiere una sordera importante durante los años de aprendiza-
facilidadcomunicativadelniño,laeficaciadelaintervenciónespecia|\zada,7a je básico del lenguaje (entre 3 y 6 años), necesitará una intervención logopédi-
deben tomalse pues
calidad del ento¡no familiar, etc. Los siguientes datos ca pata que pueda seguir alcanzando los niveles de adquisición normal. Si se
como meramente indicativos' produce más tarde, dicha intervención se centrará en el aprendizaje de 1a lec-
lpofiantes' Pueden
En caso de pérdida leve, no se producen problemas im tura labial y el mantenimiento de las cualidades vocales y articulatorias del
de ciertos rasgos
aparecet algunás dislalias por insuficiente discriminaciÓn niño, que puede empeorar gravemente por falta de un feed-back auditivo per-
fonéticos,problemasdeatenciÓnenclaseydiñcultadparapercibirlravozde manente.
intensidad. Muchas veces pasan desapercibidas para
la familia'
baja
Enlaspérdidasmedias,seobsewaunaapariciÓnnaturalyespon|áneadel
Ienguaje,peroconretrasoyseriasdificultades.Conunaprótesisadecuadayuna EN FOQU ES M ETODOTÓG ICOS
intervenciÓnlogopédicadurantelainfancia,sonniñosqueengeneralpueden
desarrollar..rn lá.riua¡e ngrmal y asistir a una escuela
ordinaria. Presentan diñ- Este capítulo se centrará enla intervención logopédica, limitándose al
cultades de compiensión en ambientes ruidosos o en
intercambios múltiples' caso de los niños con sorderas prelocutivas, pero es indispensable señalar
por encima dL los zo dB de pérdida, entramos en el grupo de los antiguamen- previamente que 1a sordera, con su alteración comunicativa consecutiva,
desarrollo espontaneo del lenguaje'
te denominadoS usordomudos': no se observa no puede limitarse a un problema de comprensión y producción del len-
laaudiciÓnresidualnÓesfuncionalporsísola(aunqueestéamplificada)yel guaje.
aprendizaiedel lenguaje oral es dificil, lento y' a vecest
muy limitado' La sordera prelocutiva genera un conjunto de alteraciones en el desarrollo
En]assorderasseveras,untrabajopfecozeintensivopuedepermitiralniño cognitivo, afectivo y social (v. Myklebust, 7975, y Marchesi, 1987, Lepot-Fro-
conseguirv||avozyunaarticulaciÓnmuyinteligible,yelaprovechamientode ment y Clerebaut, 1996), define también a menudo una identidad existencial y
proporcionarle una com-
sus restos auditivos.unidos a la lectura labial suelen cultural propia, y requiere un enfoque educativo global en el qtre debe inte-
i¡:.i
prensiónre]ativamentesatisfactoriaenbuenascondicionesdecomunicación. ,i I
grarse la logopedia. Por esa razón se dará aqui un repaso muy breve a las dis-
Enlassorderasprofunclas,todalacomprensiónverbaldelniñodependede . tintas opciones educativas que existen en la actualidad, acompañándolas de sus
resultan muy
su lectura labial. Salvo excepciones ,la voz y la pronunciación ti referencias básicas.
dificil'
alteradas. Su adquisición del lenguaje oral es particularmente l!: I
En efecto, resulta bastante obvio insistir en que cualquier programa de
Sinembargo,cabeseñalarqueelnivelmediodeaudiciónnoeselúnico
tr desarrollo comunicativo y lingriístico debe coordinarse con los demás progra-
parámetro a táne, en cuenta; la homogeneidad de los restos
en las distintas '- mas educativos, especialmente en sus aspectos cognitivos [v. p. ej , Furth,
frecuenciasesunelementomLrypositivo,inclusocuandoelumbralsesitúaa 1971, y su nlaboratorio para pensarr).
intensidadesmuyaltasporqueelgradodedistorsiónesmenory,portanto,IaS o Aunque, desde el siglo xvrtt, se han sucedido los cambios metodológicos
=
posibilidades de educación auditiva son mayores D con grandes polémicas pero de forma.bastante circular (ideas caídas en
por otro lado, la función auditiva no está completamente representada en E desuso vuelven a resurgir de la mano de nuevos profesionales que creen
en cuanto alapet'
la curva tonal y se observan diferencias muy significativas 6 haberlas descubierto por primera vez), podemos agrupar las distintas orien-
cepciÓn.ycalidaddesuhablaentreniñosconaudiometiassimilares. taciones en tres grandes categorías, siguiendo la clasificación de Pe¡ier
(1e87).
6
!
o
Sorderas Poslocut¡vas Io
I Métodos monol¡ngües orales
Las sorderas adquiridas después de un primer
proceso de aprendizaje del o
sobre el desarrollo ¿
lenguaje oral tienen, evidentemente, menos repercusiones o
o Método auditivo puro. Se aprovechan y se educan los restos auditivos
de los aspectos fonéticos, lexicales y morfosintácticos
del mismo' o
de1 niño, de manera muy intensiva, sin entrenar sistemáticamente la lectura
^^-^^^..^'.^i^. ^ñ ^rr.ñ+^ o la ¡nmnrensiÁn snn hastant€
de la comunidad, entendido como (segundo idiomao. Es la orientación del
actualidadesescasamenteaplicado,salvoenniñosconsorderasleveso <bilingüismo) sucesivo, aplicado actualmente en la mayoría de los cen-
medias.
tros educativos escandinavos (Jokinen, 1999) y, de forma más minoritaria, en
EE. UU. y otros países euroPeos.
Métodoaudioral.seutilizalaaudiciónresidualylalecturalabial,con
y
como vía perceptiva, el habla
posibles ayudas visuales o táctiles electrónicas, Aprendizaje inicial de la lengua de signos seguido del lenguaje
Es la aplicación más habi-
como única vía productiv a para elniño (Ling'
f 976)'
escrito. I a partir de este último, del lenguaje oral; recoge en parte la anti-
tual del método oral' gua idea de construir el habla a partir de 1o escrito y se aplica actualmente en
Montbriand, Suiza.
Métodosaudioralcsconapoyosalalecturalabial.Esunaorienta-
ciónparecidaalaanterior,perolalecturalabialsecomplementaconsistemas
cued-speech [Cornett, 1976,
visuales realizados por el interiocutor con la mano: Métodos m¡xtos
y AI<A Cwouts'
y Tbrres, 1988, o CNREE, 1992, parala adaptación española)
l9B2).Estasposturasmanualespermitendiferenciarlasconfusionesexisten. Método monolingüe bimodal. Se usan simultáneamente el lenguaje
tes entre distintos grupos de fonemas (p. ej.,
/p/b/rn/)' constituyen la hablado y los signos manuales; éstos se reaTizan siguiendo el orden sintáctico
corriente más nuerrá en la actualidad, dentro
del método oral: en España
del idioma oral que se está hablando e incluye signos convencionales que no
replesentalabaseesencialdeunametodologíagenera|deldesarrollodela pertenecen a la lengua de signos. A veces, frente a la ausencia de signos para
comunicaciÓn:elMétodoOralCompletado(MoC)(Tbrresycols',1995). acompañar ciertas palabras, se recurre a la dactilología o al cued-speech. (Para
un repaso a las distintas modalidades, v. Bornsteín, 1979; para el método bimo-
de los fonemas' De
Métodos audiorales con representación manual dal, Schlesinger, I97B; parala adaptación española, Monfort, Rojo, Juárez,
maneramáSomenosestlicta,totaloparcialmente,durantelacomunicación 1981, revisado en 1991, y CNREE, 1989.) Es una modalidad ampliamente utili-
seasocraungestodelamanoalapronunciacióndelosfonemas;esegesto zada en EE. UU. y derivada de los ántiguos trabajos de I-lEpée.
del mismo. Ha sido
,"",r"r¿u a" Jgorru forma las características articulatorias
yesuntipodeayudamuygenera|izadoentreloseducadores,peroengeneral Método bilingüe mixto. Estimula el desarrollo del lenguaje oral y de la
pocosistematizado.EnlospaísesfrancófonosesconocidoelmétodoBorel- lengua de signos al mismo tiempo, pero no se utilizan simultáneamente; cada
de los t¡astornos de la
Maisonny, concebido originalmen te patala reeducáción uno tiene su ambiente y sus funciones. En el caso de los niños sordos con
lectoescritura' Schulte ¡roza;, en Alemania, ideó
un sistema bastante comple- padres oyentes, que son la mayoría, el aprendizaje de la lengua de signos corre
,.. i
!r, el PMS, destinado a ser utilizado con el aparato Phonator' a cargo de adultos sordos, admitiendo a veces que los padres oyentes utilicen
'.ü,;
Habitualmente,estosgestossonreduccionesdelosejerciciosrealizadosen ' un sistemabimodal (Bouvet, 1981).
ortofoníaparaeldesarrolloylareeclucaciÓnficnética,porellosedenominana Por supuesto, es posible combinar, en distintas proporciones, ciertos aspec-
veces (gestos de recuerdo' (Juárez, 1982)' tos de los diferentes métodos, obteniendo así orientaciones eclécticas; por
ejemplo, algunos educadores que siguen un método bimodal utilizan también
Métodoaudioralcondactilología.Conocidobajoelnombredeméto. el cued-speech (Capouillez, 1986, o Juárez, 1992).
doRocheste¡(EE,UU.),hasidotambiénmuyutilizadoenlaURsSyenlospaí- o Por otro lado, ocurre también que los educadores introducen cambios
realizaciÓn del alfabeto manual, letra
6
ses del Este; simultanea la palabra con la según la edad del niño y, sobre todo, según su desarrollo general y comunica-
J
porletra,loquesuponenivelesdedi|rcultadvariablesenfuncióndelaorto- tivo. Esto representa bastante bien las posiciones actuales, más abiertas y ale-
fonema-grafema' jadas de los antiguos dogmatismos.
lrafia de cada idioma y de su literalidad
!
o
io En los últimos años, esa corriente ecléctica de aplicación individualizada
6
c
en función de cada caso y de sus circunstancias va ganando cada vez más
adeptos y se inscribe dentro de la filosofia de comunicación total.
Métodos bilingües .c
No cabe aquí la posibilidad de discutir sobre las excelencias respectivas de
.o
los distintos métodos, pero podríamos dejar constancia de algunos puntos fun-
Utilizaciónexclusivadelalenguadesignos.Esunaorientaciónteórica q damentales.
organización educativa'
que, actualmente por lo menos, no preconiza ninguna ¿
o
o
En primer luga4 cualquier niño necesita precozmente un sistema de
u,
Concebido como idioma comunicación flexible, eficaz y gratificante para el conjunto de su desarrollo;
nnrendizaie inicial de la lengua de signos' ^ o nar: lns sordos nrofirndos los severos. el lenzuaie oral
solo no puecle cumplir esa función, ya que su aprendizaje es muy dificil y se que deriva en una menor distorsión y, por tanto, en una mejor corrección
realiza con importantes desfases cronológicos respecto a los niños normo- protésica.
oyentes y las necesidades que van surgiendo. Otros muchos niños disponen de unos restos que, si bien no les permitirán
En segundo lugaq parece indispensable para alcanzar úrra voz y una arti- percibir la palabra ni ios ruidos significativos, constituyen, sin embargo, un
culación inteligible e incluso hasta agradable, y para llegar a una integración complemento muy útil para ia lectura labial.
profunda de las estructuras comunicativas y formales del idioma oral, que éste En cualquier caso, todo niño sordo se beneficiará con una estimulación
se vea estimulado precozmente. Ocurre otro tanto con la funciÓn auditiva y el auditiva, por pequeña que sea su dinámica residual, si dicha estimulación se
habla. pospone{, pues, los programas de educación auditiva y de desarrollo del hace precozmente; es importante que las vías y áreas auditivas ¡eciban señales
lenguaje oral, equiparando la situaciÓn del niño sordo con la de los niños y vean potenciado su desarrollo, ya que el sistema auditivo no sirve sólo para
oyentes bilingries, constituye un riesgo de consecuencias posiblemente irre- oír sino también para estructurar el tiempo y el espabio (Lafon, l9g7). Thm-
versibles. Hacer depender 1o esencial de la adquisición de la lengua oral de su bién constituye, como veremos, una condición indispensable parala educación
transmisión escrita es olvidar las diferencias de regisffo y las limitaciones fun- delavoz. Como, además, nuestro conocimiento sobre 1o que es capazde oír el
cionales de la comunicación gráfica. Puede suponer una herramienta podero- niño en los primeros años es impreciso, no debemos correr el riesgo de ver
sa pero en ningún caso llegar a los niveles proporcionados pol una verdadera alrofiadas capacidades que, quizá, resulta que son buenas.
interacción oral en situación natural. En los primeros tiempos, la educación auditiva se realiza a través de ejerci-
Se podría decir que el buen método es aquel que sea capaz de conseguir los cios muy específicos siguiendo un entrenamiento analítico bastante rígido, en
mejores resultados para cada caso concreto, teniendo en cuenta sus caracterís- parte porque iba ligada a la utilización de aparatos menos sofisticados y más
ticas personales, su entorno, y abarcando tanto los parámetros de desarrollo voluminosos que los actuales. Tbmbién en los años sesenta se elaboraron pro-
afectivo y social como los puramente académicos y terapéuticos' gramas de <estimulación pasivar, hoy prácticamente abandonados, en los que
Ttrdas las opciones que podemos elegir presentan ventajas e inconvenien- se pretendía una especie de nmasaje sonoro) a base de ruidos filtrados, música,
tes, variables según la edad y las características del niño y las condiciones del etc. (aparatos de Jouve o de Tomatis).
medio familiar y social, y queda mucho por estudiar sobre las consecuencias Actualmente, se concibe la educación auditiva del niño sordo como un pro-
del uso de cada uno de los recursos a nuestra disposición' ceso eminentemente activo, a partir de principios globales que poco a poco se
Afortunadamente, hoy día existe una mayor tendencia a estudiar objetiva- complementan con otros más analíticos a medida que el niño va creciendo,
mente estos temas: por ejemplo, Moeller y Luetke-stahlman (1990) estudiaron que vamos conociendo mejor sus posibilidades reales de audición y que la
el uso del inglés signaclo por parte de las familias, y Hyde y Power (i992), los madttez de las distintas funciones nos permite introducir ejercicios más com-
,".i efectos del sistema bimodal sobre el lenguaje de los profesores' plejos. Podemos distinguir así varias etapas en el proceso.
ü,;
Aunque en ambos casos se insiste en los aspectos positivos de estos siste-
mas, se ponderan también sus limitaciones y la presencia de algunas distorsio-
nes, a las cuales se debe prestar atención. Experiencia aud¡t¡va
Finalmente, conviene también lesaltal por encima de las polémicas que,
sea cual sea el método elegido, los resultados obtenidos hasta ahora en En general está a cargo de la familia que, a través de los programas de
cuanto al nivel escolar, dominio del idioma oral, nivel de lectoescritura y ortentación familiar (p. ej , los famosos cursos de la John Ttacv Clinic de Los
nivel cultural son desgraciadamente bajos si se considera el conjunto de la Ángeles), se entrena para:
población. Los casos con éxito resultan siempre de la combinación positiva c
de varios factores, entre los que destacan la precocidad del proceso educati- 1. Seleccionar en el entorno aquellos sonidos que parecen atraer más la
vo, su intensidad y cluración (más allá del período escolar clásico), la inteli- p atención del niño y/o a los que reacciona con más facilidad (gracias, por
gencia y personalidad de la persona sorda y la calidad de su entorno fami- .!6
supuesto, a su prótesis individual).
liar.
6
2. Introducir aquellos sonidos en juegos sencillos y activos que permitan
al niño descubrir la existencia del sonido y su capacidadpara producirlos o ;l
I
o
interrumpirlos (juguetes sonoros, etc.). j,
EDUCACIÓN nUOr¡Vn I 3. Reforzar las respuestas espontáneas dei niño a los estímulos sonoros li
a aleatorios del ambiente, indicándole su procedencia y causa. I
lr
Habla
Los amplificadores con tratamiento del sonido. A partir del estudio
de las características de la audición de los niños sordos, se han diseñado apa-
sordos' aun cuan- ratos que permiten introducir modificaciones en la salida con el objetivo de
La mayor parte de los logopedas que trabajan con niños
una cierta capacidad conseguir una mejor discriminación funcional, utilizando selectivamente y
do siguen u'a metodología mixta, insisten en estimular
en los restos auditi educando los restos auditivos de cada niño.
de reconocimiento del habla sin lectura labial, apoyándose
Partiendo de la teoría de que el niño sordo posee un (campo auditivo ópti-
vos, debidamente amplificados.
su reconocimiento de pala- mo) y que puede, gracias a su explotación adecuada e intensiva, desarrollar
En los niños con mayores restos, se estimula
y' a medida de sus sus capacidades de percepción del habla, Guberina fabricó el aparato SUVAG,
bras o pequeñas expresiones cotidianas conocidas por ellos
que modifica la curva de respuesta mediante una serie de filtros que permiten
Jr::-::"-::::::.:"""#:,:"1ffi ::;::T"":'ffi :i:Í:[ü'"UJ;H::; amplificar o reducir la intensidad de determinadas zonas del espectro (Asp y
En general, estoq aparatos incluyen sistemas de ñltros conectados a seña-
inlrmación-e¡ estímu- les luminosas que se encienden cada vez que el sonido contiene armónicos
general no percibidos por los sordos; transforman 9s1
correspondientes a dicho filtro (p. ej., Chromalizer) o a sistemas de represen-
losgravesañadidos[aparatodesonidodiferencialdeJohanson'Vocoderde
tación en barras verticales o curvas (el Audimat, que añade además informa-
Pimonow, aparato de compensación de Lafon)'
individual' pero' desde hace ción vibratorialocalizada en los distintos dedos de la mano)'
Hasta ahora, sólo se podían utilizar en sesión
portátiles: el Galaxia y el Tfansonic' que Otros aparatos, más sencillos, incluyen un feed-back visual sobre elementos
2 años, han aparecido do' ap""tos
los alumnos con sorderas más aislados como la intensidad (relé acústico a sonÓmetro con escala luminosa) o
pueden suponer una ayuda impoftante para
p'o""cho de una amplificaciÓn convencional' elementos discretos (indicador de nasalización, indicador de sibilancia, etc.).
profundas que sacan
",iu'o últimamente, IBM-France ha desarrollado un programa para ordenador perso-
éxitos con persQnas que nal, con tarjeta VCO, que permite utilizar sistemas de visualizaciÓn espectral y
El irnplante coclear' Despues de los primeros
y del relativo fracaso con adultos y adoles- su análisis a un nivel muy sofisticado, e incluye algunos juegos de entrena-
presentaban sorderas porro"otlá,
coclear multicanal adaptado a niños miento vocal, como el Speechviewer (Destombes y cols', 1987)'
centes sordos pr"lo"oii"o', el implante
En España, el equipo de Aguilera y cols. (1991) ha desarrollado una tarjeta
entreunoy6añosestáproduciendounenormecambiocuantitativoycualita-
de voz que permite distintos usos, entre ellos, la utilización de programas de
tivoenlasposibilidadesdeaccederalacomunicaciónaudiooral'paralosniños
visualización como el Isoton.
con pérdida auditiva superior a 80-90 dB'
de la primera infancia' se ha Otros equipos disponibles son el Visi-Pitch y el Avel, de usos más específicos,
En efecto, gracias a la plasticidad cerebral
La principal limitación de estos sistemas se sitúa en 1as propias caracterís-
demostradoqueesposibledesarrollarenestosniñosunaaudiciónfuncional,es
ticas de la percepción visual, que no permiten una discriminación suficiente
decir,capazdereconocerporaudiciónmensajesverbalespreviamenteconoci- y
informaciones visuales (v' Huarte de unidades complejas a velocidad normal; posibilitan el trabajo de elementos
dos y aprendidos con et ápoyo de otras . aislados (fonemas, sílabas, pequeñas secuencias), pero no el reconocimiento
Manrique, 1999).
-,-r^ ^_. en niños pequenol s al mismo del habla usual. En cuanto a los elementos prosódicos (visualizaciÓn de la cur-
Actualmente, se está generalizando su uso
de tratamiento de la señal de habla' va melódica), no se dispone aÍrn de información suficiente'
tiempo que se elaboran "'Lt'o' programas
Elimplantecoclearsediferencia,enefecto,delasprótesist¡adicionalesen
quenoesunampliñcadorsinouncodificadordeseñalesacústicasqueesti-
LECTURA LABIAL
muladirectamentelasterminacionesnerviosasconimpulsoseléctricos:en
propia cóclea'
normalmente la
otras palabras, realiza el trabajo que hace 'La lectura labial consiste en entender el mensaje de un interlocutor a par-
ma general de desarrollo del lenguaje y sigue siempre una orientación global. una ortofonía muy analítica, reaTízada fonema por fonema, sílaba por sílaba,
l,t: La habiiidad que pueda conseguir cada niño depende por supuesto de su intel! utilizando procedimientos de imitación y de apoyo explíóito: manipulación de
gencia, de su capaciclad de atención, de Su conocimiento del idioma y de la fre- Ios órganos articulatorios exteriores, depresores linguales, espejo, sensaciones
I
I '., i' cuencia de utilización de la comunicación oral con locutores diversos, en situa- exteroceptivas y propioceptivas (contacto de la mano para notar las vibracio-
It',,'u'i' ciones variadas. nes laríngeas o nasales, el soplo, el grado de tensión, etc.) hasta conseguir un
L_"-, .
resultado que se estimaba conveniente. Resultado quc, luego, se intentaba
reforzar y fijar en el habla del niño, primero en repetición y después en el len-
VOZ Y HABLA guaje espontáneo (para técnicas ortofónicas en castellano, v. perelló y Tbrtosa,
1978). con el auge de la estimulación precoz, aparte de otras consideraciones
La falta de un feed-back auditivo propio produce alteraciones muy impor- metodológicas, al ser imposible aplicar esas técnicas a niños tan pequeños,
tantes enTavozdel niño sordo que llegarán a ser el rasgo más llamativo de su ,rJ
¡¿l
o aparecieron programas más globales e indi¡ectos. cabe destacar las técnicas de
o
forma de hablar para las personas no acostumbradas' iil los ritmos ficnéticos del método verbotonal (Gajic y cols., 19g5). como dicen
Si se inicia la intervención logopédica rnás allá de los 2 años, incluso si no
!r-l
o estos autores <consiste en un procedimiento pedagógico que persigue la per-
,jil
existe ya voz natural, el balbuceo espontáneo de los primeros meses ha desa- .ittl
rilli I
9 cepción y la emisión de los sonidos del habla con su ritmo y su entonación,
parecido completamente y sólo quedan gritos estriclentes. Según el caso (entre :T.l .$
' i:il o mediante la utilización de estructuras rítmicas en el movimiento corporal y en
l;.rl
los extremos de la hipertonía y la hipotonía), 7a voz del sordo será demasiado o la fonación, en orden a las estructuras rítmicas del lenguaje" (pág. 75).
. aguda o demasiado grave, su intensidad será inestable con tendencia a ser d El ritmo corporal incluye los micromovimientos articulatorios en macro-
excesiva, tendrá un carácter demasiado gutural, nasal o atonal según exista
en o*
movimientos de todo el cuerpo, jugando con los contrastes, de forma progresi-
los I
cada momento escasez o exceso de tensión muscular. En la mayoría de va. osi tratamos, por ejemplo, de conseguir el fonema u, de característica fre-
casos no hay entonación expresiva ni acentuación, o se aplican a destiempo. q cuencia grave, de dirección cenada y de tensión grande, el cuerpo tendrá que
¿
El ritmo y las pausas se ven alteradas respecto al modelo normal; la velocidad o
o hacer también un movimiento cerrado y hacia abajo. si, por el contrario, pre-
de emisión, *y se torna con Íie- o
tendemos obtener una A, con sus características de abierta, media (por su ren-
]::::::,111i::-::::-'T":,::"pequeños' ,tr o
'I
,I
!i
o
formales, introduci¡ el elemento de sorpresa, la connotación divertida que per- o
mitirá fijar más eficazmente los nuevos contenidos. :ñ \\\\\
EL OUE LA OUE
LAS OUE adolescentes sordos ingleses y de Di Francesca (rg7z) en 17.000 alumnos nor-
LOS OUE
teamericanos de distintas edades señalan un nivel de lectura extremadamente
l. bajo, que no supera,.en término.medio, el nivel de un tercero de EGB, con un
- hay en el frutero están maduras.
Las naranias que porcentaje muy alto de a4alfabetismo funcional; es decir, de casos que sólo
átbol / veráes. .-Las que hay en el árbol están verdes' dominan la mesánica del deletreo pero sin apenas comprensión. Se debe, evi-
1. Los zapatos que hay en el escaparate son negros. dentemente y en primer lugar, a 7a pobreza lingüística general de los niños
sobre la silla / marrones sordos; su escaso conocimiento del idioma ]es enfrenta, en la lectura de textos,
2. Los niños que hay en el patio son mis hilos.
a un número t¿l de unidades desconocidas, tahto semánticas como morfosin_
iardín / tuvos.
3. Las señoñtas que están en la cocina son mis hermanas' tácticas, que su comprensión se vuelve esquemática y confusa, cayendo con
comedor / amigas. gran frecuencia en contrasentidos tremendos. pero ciertos estudios parecen
4. Los estudiantes que llegaron tarde están preocupados'
pronto / contentos. indicar también dificultades en mecanismos específicos de la lectura, como la
5. Las monedas que encontraste ayer son antlguas. codificación fonológica y el acceso indirecto al léxico (Alegria y Leybaert,
esta mañana / modemas.
1987). Aunque exista una corriente que insista en pasar directamente de la
visión al sentido, muchos autores recientes (p. ei , King y euigley, l9g5) insis_
ten en que la metodología de la enseñanza de la lectura en el niño sordo debe
tener en cuenta sus características, e incluir programas específicos para desa-
1.Medios audiovisuales: a base de diapositivas, y ahora de vídeos, que rrollar aquellas capacidades de tratamiento de la información escrita que pare-
represenran situaciones de diálogo de la vida cotidiana; generalmente, se tra- cen más retrasadas o perturbadas; incluyen ejercicios especiales y textos adap-
bajaengfupoyenlaproduccióndeenunciadoscadavezmáscomplejos. tados o con información complementaria (v. Monfort e Higuero, 1997).
2.Apoyos gráficos: las historietas, o (comicsD, que representan también La importancia del acceso preeoz a la cultura cle los cuentos infantiles, por
interacciones comunicativas de forma viva y divertida, permiten, asimismo, el ejemplo, exige su adaptación, en general gestual, a las posibilidades lingtiísti-
trabajo de determinados elementos como los nexos o las flexiones verbales cas de los pequeños sordos.
(sfeps senes del Gattaudet college, p. ej., los comics parahablar, en castellano). Aparte de esto, la lectoescritura constituye también una herramienta pode-
3. Ejercicios escritos: especialmente para los niños mayores y los adoles- rosa al servicio del desarrollo del lenguaje oral: nos permite visualizar la
centes, se suelen utilizar libros y cuadernos diseñados para el aprendizaje
por
estructura fonética del habla (sobre todo en idiomas como el castellano) v
alumnos extranjeros del idioma local, con algunas adaptaciones, evidentemen-
la estructura sintáctica de los enunciados.
te. El principal defecto de estos materiales reside en su frecuente monotonía; Es la razón por la que se recomienda su introducción precocísima, pero
por lo tanto, deben servir más de fuente de modelos y de ejercicios que de siempre muy individualiz.ada y con métodos adaptados a la edad del niño; en
material directamente utilizable por los alumnos sordos' general, se suele empezat entre los 3,6 y los 4 años. como en el caso de los
ejercicios formales, la transcripción escrita de las palabras y de los enunciados,
Actualmente, se está trabajando en crear (software) con el fin de permitir sea global o analítica, es un complemento al aprendizaje funcional y posterior
el autoentrenamiento de los alum'nos; con la aplicación didáctica de sistemas a é1, salvo en determinados métodos reseñados al principio.
de inteligencia artificial, se puede pensar en posibilidades futuras muy atra- El papel de la lectoescritura en la educación de los niños y adolescente sor-
yentes. Se debe recordar una vez más que todos estos ejercicios, generalmente =
E dos será muy diferente según la metodología seguida (monolingúie o bilingüe)
necesarios en caso de sordera profunda y severa, no constituyen la base del y según los objetivos que se plantean.
aprendizaje del lenguaje, sino una he¡ramienta de consolidación formal de lo A menudo, se entiende que el objetivo principal es disponer de una lectu-
6
que se adquiere en situaciones funcionales' .!
ra operativa en la vida profesional y en la vida cotidiana (comprender y relle-
nar impresos, ser capaz de interpretar información técnica, etc.): esto puede
'6
suponer la aplicación de estrategias que no requieren en efecto un dominio
LA LECTURA o absoluto del idioma.
o
o
Aparentemente, el lenguaje escrito podría constituir una alternativa Ópti-
I
. sin embargo, si se trata de poder acceder a textos complejos (literarios,
periodísticos o científicos) y, al mismo tiempo, de aprovechar dichos textos
ma para la adquisición de conocimientos e, incluso, parala comunicaciÓn de ¿
o' para enriquecer su propio nivel lingüístico, es indispensable disponer previa-
las personas sordas. De hecho, los primeros pasos de la educación de niños o
o
mente de un nivel de dominio de la lengua que parece dificil de conseguir sin
sordos (Ponce de León, Bonet, entre ofros) se basaron en un primer aprendi- g un uso habitual y natural del lenguaje oral en situaciones interactivas noüna-
zaje de <las letras". Sin embargo, resulta que la lectura es un aprendizaje extre-
adolescentes sordos ingleses y de Di Francesca (7972) en 17.000 alumnos nor-
teamericanos de distintas edades señalan un nivel de lectura extremadamente
bajo, que no supera,'en término medio, el nivel de un tercero de EGB, con un
l.
porcentaje muy alto de analfabetismo funcional; es decir, de casos que sólo
Las naranias que hay en el frutero están maduras' dominan la mecánica del deletreo pero sin apenas comprensión. Se debe, evi-
;,;;i/r;;á;a- ' '-¡-ás que hav en el árbol eslán verdes' dentemente y en primer lugar, alapobreza lingriística general de los niños
son negros'
Los zapatos que hay en el escaparate sordos; Su escaso conocimiento del idioma les enfrenta, en la lectura de textos,
sobre la silla / marrones
[ó" que nay en el patio son mis hiios' a un número tal de unidades desconocidas, tanto semánticas como morfosin-
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iardín / tuYos. tácticas, que su comprensión se vuelve esquemática y confusa, cayendo con
'ü;';;ñ#t"" que están en la cocina son mis hermanas' gran freguencia en contrasentidos tremendos. Pero ciertos estudios parecen
comedor / amigas.
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oronto / contentos.
que encontraste ayer son antiguas' codificación fonológica y el acceso indirecto al léxico (Alegría y Leybaert,
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1987). Aunque exista una colriente que insista en pasar directamente de la
visión al sentido, muchos autores recientes (p. ej., King y Quigley, 1985) insis-
ten en que la metodología de la enseñanza de la lectura en el niño sordo debe
tener en cuent¿ sus características, e incluir programas específicos para desa-
y ahora de vídeos' que rrollar aquellas capacidades de tratamiento de la información escrita que pale-
1. Medios audiovisuales: a base de diapositivas'
cen más retrasadas o perturbadas; incluyen ejercicios especiales y textos adap-
Ieplesentansituacionesdediálogode]avidacotidiana;generalmente,Setra-
baja en grupo y en la proclucción de
enunciados cada vez más complejos' tados o con información complementaria (v. Monfort e Higuero, 1997).
(comics)' que representan también La importancia del acceso precoz a la cultura de los cuentos infantiles, por
2-Apoyos gráficos: las historietas' o el
viva y divertida, permiten, asimismo' ejemplo, exige su adaptación, en general gestual, a las posibilidades lingüísti
interacciones cÁunicativas de forma
cas de los pequeños sordos.
trabajodedeterminadoselementoscomo]osnexosolasflexionesverbales
p' ej'' los Comics parahablar' en castellano)' Aparte de esto, la lectoescritura constituye también una herramienta pode-
(Steps Senes dnl Gattaudet College'
los niños mayores y los adoles- rosa al Selvicio de1 desarrollo del lenguaje oral: nos permite visualizar la
3. Ejercicios escritos: especialmlnte para
estructura fonética del habla (sobre todo en idiomas como el castellano) y
centes,sesuelenutilizarlibrosycuadernosdiseñadosparaelaprendizajepor
la est¡uctura sintáctica de los enunciados.
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siempre muy individualizada y con métodos adaptados ala edad del niño; en
1:
porlotanto,debenservirmásdefuentedemodelosydeejerciciosquede
sordos' general, se suele empezat entre los 3,6 y los 4 años. Como en él caso de los
material directamente utilizable por los alumnos
ejercicios formales, la tlanscripción escrita de las palabras y de los enunciados,
sea global o analítica, es un complemento al aprendizaje funcional y posterior
Actualmente,seestátrabajandoencrearusoftware,conel|rndepermitir
de los alumnos; con la aplicaciól
didáctica de sistemas a é1, salvo en determinados métodos reseñados al principio.
el autoentrenamiento
o El papel de la lectoesciitura en la educación de los niños y adolescente sor-
deintetigenciaartificial,sepuedepensarenposibilidadesfuturasmuyatra-
dos será rnuy diferente según la metodología seguida (monolingüe o bilingüe)
o
yentes.Sedeberecordarunavez*a,qo"todosestosejercicios,generalmente
y severa, no constituyen la base del y según los objetivos que se plantean.
necesarios en caso de sordera profunda o
de consolidacíón f,ormal de 1o p A menudo, se entiende que el objetivo principal es disponer de una lectu-
aprendizaje del lenguaje, sino una.he.rariri"nta
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.! ra operativa en la vida profesional y en la vida cotidiana (comprender y relle-
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nar impresos, ser capaz de interpretar informaciÓn técnica, etc.): esto puede
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suponer la aplicación de estrategias que no requieren en efecto un dominio
o
o absoluto del idioma.
LA LECTURA
I Sin embargo, si se trata de poder accedel a textos complejos (literarios,
{o 'periodísticos
Apalentemente,ellenguajeescritopodríaconstituirunaalternativaópti.de o científlcos) y, al mismo tiempo, de aprovechar dichos textos
e' incluso' parala comunicaciÓn 2 para enriquecer su propio nivel lingúístico, es indispensable disponer previa-
ma parala adquisición de conocimientos o
laspersonassordus.Dehecho,losprimerospasosdelaeducacióndeniños
o mente de un nivel de dominio de la lengua que parece dificil de conseguir sin
sordos(PoncedeLeÓn,Bonet,entreotros)sebasaronenunprimeraprendi- s un uso habitual y natural del lenguaje oral en situaciones interactivas norrna-
zajedeo}asletras,.sinembargo,resultaquelalecturaesunaprendizajeextre-
Los trastornos
del ápffarrdtzaje
del lengu aje escrito
M. Monfort
tNTRoDUcclón
como en cualquier aprendizaje ilevado a cabo por un gran número de per_
sonas, no debemos extrañarnos de que los niveles alcanzados
en el aprenáiza-
je de la lectoescritura no sean idénticos y se distribuyan
de forma regular a lo
largo de una dispersión de cada rado de una media; a partir
de ahí, un juicio
clasificador distinguirá muy buenos, buenos, medianos, malos y muy malos
lectores. El'logopeda va atratar en general con niños que se
sitúan enlazona
baja de la dispersión, por múltiples razones; algunas derivan de
cuadros gene_
rales (sordera, deficiencia mental) tratados en.otros capítülos, y
otras aparecen
en niños considerados como (normales,. La multiplicidad de factores
endóge_
nos y exógenos que pueden interferir negativamente en el aprendizaje
de la
lectoescritura nos ha llevado a preferir el título descriptivo de <trastornos
del
aprendizaje' a cualquier otro que implicara un d.eterminado juicio
etiológico.
DESCRIPCIÓN
tNTRoDUccrór
como en cualquier aprendizaje llevado a cabo por un gran número de per-
sonas, no debemos extrañarnos de que los niveles alcanzados en el aprendiza-
je de la lectoescritura no sean idénticos y se distribuyan de forma regular a lo
largo de una dispersión de cada lado de una media; a partir de ahí, un juicio
clasificador distinguirá muy buenos, buenos, medianos, malos y muy malos
lectores. El logopeda va a tratar en general con niños que se sitúan enla zona
baja de la dispersión, por múltiples razones; algunas derivan de cuadros gene-
rales (sordera, deficiencia mental) tratados en otros capítulos, y orras apareaen
en niños considerados como (normaleso. La multiplicidad de factores endóge_
nos y exógenos que pueden interferir negativamente en el aprendiz.aje de la
lectoescritura nos ha llevado a preferir el título descriptivo de ntr¿s¡.¡rro, ¿"1
aprendizaje> a cualquier otro que implicara un determinado juicio etiológico.
DESCRIPCIÓN
INTRODUCCION
DESCRIPCIÓN
>>>-3Á5
itrw
Thllal y Katz (1989), con la PET (tomografr.a de emisión de positrones),
investigaron anormalidades metabólicas en relación con trastornos del lengua-
-bienLaenpostura que parte de la existencia de un cuadro específico
la impresión
se apoya más
crínica queen argumentos contrastables. En efecto, si
je y de la lectura, y Larsen y cols. (1990) señalan una alta fiecuencia de casos analizamos el cuadro sintomatológico tampoco
encontraremos una sintomato_
de simetría del planum temporale (70 % en disléxicos, mientras que los no dis- logía claramente diferenciadora de otros tLtornos.
léxicos sólo presentan un 30 % de casos). Forma parte ya, desgraciadamente, de la
cultura popular y, peor aún, de
Bakker (1990), distinguiendo entre disléxicos de tipo L (caracteriz,ados por los prejuicios de muchos educadores, ra
costumbre de deÁnir la ¿istexra por ros
etrores sustantivos, omisiones y adiciones) y disléxicos de tipo P (con errores (errorestípicosr tales como inversiones silábicas, confusiones
auditivas y
de fragmentación como deletreo, vacilaciones, repeticiones), registra diferen- üsuales, adiciones, omisiones, etc.
cias en sus respuestas cerebrales evocadas y genera a partir de ahi plantea- Sin embargo, estas faltas (en rectura o en
escritura) no tienen nada de espe-
mientos terapéuticos específicos según el hernisferio más alterado. cífico; por un lado, serÍa bastante dificir comerer
otras, y por otro, aparecen en
Kershner y cols. (1991a y 1991b), revisando con test de escucha dicótica la todos los niños en la primera fase del aprendiz.aje.Además,
aunque tarde, sue-
famosa teoría de Orton que relacionaba la dislexia con problemas de laterali- len desaparecer poco a poco en ros sujetos
de más edad que, a pesar de eilo,
zación cerebral, afirman que el tema es más complejo de como se enunció ori- siguen teniendo grandes dificuitades en arcanzar
una lectura fruida y,/o una
ginalmente: nla dislexia es un trastorno mucho más dinámico y más sensible al expresión escrita correcta.
entorno de lo que se pensaba inicialmenter (1991b, pág. 560). Estos errores no son indicativos de naó.a;
es su persistencia en el tiempo y
A pesardel interés indudable de estas investigaciones (v. revisión en caste- su carácter fluctuante lo que llama ra atención
y puede constituir un rasgo de
llano en Ortiz, f 994), subsiste en todas ellas el problema metodológico de los especificidad.
criterios que se aplican a la hora de determinar qué sujetos están incluidos o En la lectura, estos niños presentan una
evolución muy lenta de la veloci_
no en el grupo de <disléxicos,. dad media que, con frecuencia, no supera
la del simple dálet eo (so/60 para-
Basta señalar, por ejemplo, que, en el trabajo de Bakker, el criterio se lirni- bras por minuto); envoz alta, er número
de errores y de vacilaciones es muv
ta a una lectura con un retraso igual o superior á un año, para una muestra de superior al promedio
alumnos de 9-10 años.
, La comprensión puede variar de un niño a otro, pero suele ser mala cuan-
do el texto se alarga.
De esta forma, nos encontramos con:
La escritura presenta errores de transcripción
fonética de diversas clases
i. Los que llaman ndislexia> al conjunto de trastornos que puedan afectar más allá de los primeros cursos de EGB
e incluso se registran en la copia, que
al aprendizaje de la lectoescritura. se efectúa siempre muy lentamente,
casi letra po? retra (esto se nota más en la
: ['.
2. Los que se oponen ala útlluación de ese término, por razones a Yeces copia desde lapizana en clase que en una exploraclOnl
ifig. ro-r1.
opuestas: Cervera y Toro (1980) porque niegan su propia realidad como enti- La actitud de rechazo hacia todo ro escrito es
mayoritaria y puede llegar
dad diferente; Chassagny (1577) porque diagnosticar unos síutomas no hace incluso a conductas de ansiedad neuróüca-
más que cristalizarlos. como se puede observaq, este cuadro se asemeja
bastante a lo que pode-
3. Los que reservan eI término de udislexiao exclusivamente a un grupo mos encontrar en niños de bajo nivel social, poco
motivados o de escasa inte_
determinado de niños; recibe entonces el nombre de dislexia evolutiva específica ligencia.
y se defiae más o menos como lo hace Eisenberg (1978): incapacidad para apren- Pero también es verdad que en estos tres
últimos supuestos suelen failar
der a leer normalmente a pesar de la enseñanza habitual, el rnedio socialments o todos los aprendizajes escolares, rnientras que
en los
adecuado, la motivación normal, sentidos exactos, inteligencia normal y ausencia "disléxicosr (pero tam-
de defectos neurológicos. Se trata pues de un diagnóstico por exclusión. Es la por
9
tura de Cristctrley (1970) y de muchos ótros. Se preguntará con razón si esa diso- ñ
ciación se refleja en diferencias significativas de tratamiento resp€cto a los niños
con problemas de lectura atribuibles precisamente a una falta de escolaridad esta-
6
ble, a un medio perturbado, a una falta de motivación o a un déficit intelec¡ral
más o menos importante. t a realidad es que no existen grandes diferencias en las
estrategias de intervención, lo que representa un argumento a favor de la oposi-
ción ál término odislexiar. Otra complicación proviene de que, si la mayoría de
o
o
Io
q
¿
'ftW,M;ffiW-ffiW
los partidarios de la dislexia específica la relacionan con un déficit constitucional o
q
q
^ L^-^r:+^;^ -^ár ;'.ni¡to nrrp áirho déficif se dé también en niños con escolari-
La postura que parte de la existencia de un cuadro específico se apoya más
de positrones)'
Tallal y Katz (1989), con la PET (tomografr'a de emisiÓn bien en la impresión clínica que en argumentos contrastables. En efecto, si
con trastornos del lengua-
investigarán anormalidades metabólicas en relación analizamos el cuadro sintomatológico tampoco encontraremos una sintomato-
je y de la lectura, y Larsen y cols' (1990) señalan una alta frecuencia de casos
1ogía claramente diferenciadora de otros trastornos.
desimetríade|planumtemporale(70o/oendisiéxicos,mientrasquelosnodis- Forma parte ya, desgraciadamente, de la cultura popular y, peor aún, de
léxicos sólo presentan un 30 7o de casos)' los prejuicios de muchos educadores, la costumbre de definir la dislexia por los
Bakker (1990), distinguiendo entre disléxicos de
tipo L (cancterizados por (errores típicos) tales como inversiones silábicas, confusiones auditivas y
y de tipo P (con errores
errores sustantivos, omisiones y adiciones) disléxicos visuales, adiciones, omisiones, etc.
registra dife¡en-
de fragmentación como deletreo, vaciraciones, repeticiones), Sin embargo, estas faltas (en lectura o en escritura) no tienen nada de espe-
cias en sus respuestas cerebrales evocadas
y genera a partir de ahÍ plantea-
cífico; por un lado, seria bastante dificil cometer otras, y por otro, aparecen en
más alterado-
mientos terapéuticos específicos según el hemisferio todos los niños en la primera fase del aprendizaje. Además, aunque tarde, sue-
con test de escucha dicÓtica la
Kershner y cols. (199fa y 1991b), revisando
len desaparecer poco a poco en los sujetos de más edad que, a pesar de ello,
famosateoríadeortonquerelacionabaladislexiaconproblemasdelaterali. siguen teniendo grandes dificultades en alcanzar una lectura fluida y,/o una
de como se enunciÓ ori-
zacióncerebral, afirman que et tema es más complejo expresión escrita correcta.
dinámico y más sensible al
ginalmente: ula dislexia es un trastorno mucho más Estos errores no son indicativos de nada; es su persistencia en el tiempo y
pág' 560)'
entorno de lo que se pensaba inicialmente" (1991b' su carácter fluctuante lo que llama la atención y puede constituir un rasgo de
Apesardelinterésindudabledeestasinvestigaciones(v.revisiónencaste- especificidad.
llanoenOrtiz,1994),subsisteentodasellaselproblemametodológicodelos En la lectura, estos niños presentan una evolución muy lenta de la veloci
criteriosqueseaplicanalahoradedeterminarquésujetosestánincluidoso dad media que, con frecuencia, no supera la del simple deletreo (50/60 pala-
no en el gruPo de ndisléxicos'' bras por minuto); envoz alta, el número de erroresy de vacilaciones es muy
Bakke¡' el criterio se iimi-
Basta señalar, por ejemplo, que, en el trabajo de superior al promedio.
un año, pafa vna muestra de
ta a una lectura con ufr retlaso igual o superior a
La comprensión puede variar de un niño a otro, pero suele ser mala cuan-
alumnos de 9-10 años. do el texto se alarga.
De esta forma, nos encontramos con: La escritura presenta errores de transcripción fonética de diversas clases
más allá de los primeros cursos de EGB e incluso se registran en la copia, que
que puedan afectar
1. Los que llaman udislexia' al conjunto de trastornos se efectúa siempre muy lentamente, casi letra por letra (esto se nota más en la
al aprendizaje de la lectoescritura' copia desde lapizarra en clase que en una exploración) (fig. 19-l).
a veces
2. Los que se oponen a la utilización de ese término' por razones La actitud de rechazo hacia todo lo escrito es mayoritaria y puede llegar
propia realidad como enti-
opuestas: Cervera y'ticro (1980) porque niegan su incluso a conductas de ansiedad neurótica.
diagnosticar unos síntomas no hace
dad diferente; Chassagny ltSZi¡ porque Como se puede observa4 este cuadro se asemeja bastante a 1o que pode-
más que cristalizarlos. mos encontrar en niños de bajo nivel social, poco rnotivados o de escasa inte-
3.LoSquereservaneltérminodendislexiaoexclusivamenteaunglupo Iigencia.
dislexia evolutiva específica
determinado de niños; recibe entonces el nombre de Pe¡o también es verdad que en estos tres últimos supuestos suelen falla¡
incapacidad para aplen-
y se define más o menos como 1o hace Eisenberg [1978): o todos los aprendizajes escolares, mientras que en 1os <disléxicoso (pero tam-
der a leer norma]mente a pesal de la enseñanza
habitual, el medio socialmente
D
inteligencia normal y ausencia
adecuado, la motivación no¡mal, sentidos exactos,
por exclusíÓn' Esla por
de defectos neurológicos. se trata pues de un diagnÓstico p
turadeCristchley(1970)ydemuchosotros.Sepreguntalácanrazó¡siesadiso- ñ
respecto alos niños o
ciación se refleja en diferencias significativas de tratamiento
una falta de escolaridad esta-
con problemas de lectura atribuibles precisamente
a '6
o a un déficit intelectua]
ble, a un medio pefiurbado, a una falta de motivación
.g
o
másomenosimportante'I¿realidadesquenoexistengrandesdiferenciasenlas
a favor de la oposi
estrategias de intewención, lo que representa un argumento o
de que' si la mayoría de
ción ál término udislexiao. Otra complicación provi'ene z
los partidarios de la dislexia específicala,"la"ion
n con un déficit constitucional v,
q
^ L^-^¡i+^;^ -.,:t. imni¡le nrre Áirhn ¡:léficit se dé tamhién en niños con escolari-
t niños con excelentes resultados 1. Las dificultades del lenguaje escrito (dislexia) se interpretan como la
poco en todos) nos podemos encontrar con manifestación o la cristalización de dificultades instrumentales funcionales; se
en materias cámo 1". matemáticas
y con uná actitud general en clase muy
aduce a una determinada inmadurez de ciertos aspectos considerados necesa-
positiva' en lectoescri- rios para un buen aprendizaie de la lectoescritura. Es la postura clásica de
Sería Puesel catáctet duradzro 3r selecnuo de las dificultades muchos ortofonistas franceses y constituye la base de la mayor parte de sus
turaloquedefiniríaalgrupodelosniñosdisléxicos.Debemosserconscientes, numerosos métodos de reeducación, que siempre se inician (y, a veces, se
o tres primeros cursos' es muy dificil
sin embargo ;" ;;", iuto¿ot ios dos limitan) a la reeducación de dichos factores asociados.
manteneT","."l""tiuidadyaqueellenguajeesc¡itoseconvierteenelsopor. 2. La dislexia se de.loe a trastornos constitucionales o hereditarios. Es la
te de todas las demás materias' postura de muchos médicos. Desde luego, existen evidencias clínicas indiscu-
OtraCalacterísticaqueseasociahabitualmenteconlandislexiaoeslapre- tibles que suscitan interrogaciones como 7a alta frecuencia de antecedentes
senciadetrastornosasociados,especialmentelosllamadostlastofnosinstru- familiares, la mayor proporción de niños que de niñas [v., sobre todo, el estu-
mentalesodéficitfuncionalesenaspectoscomoelconocimientodelesquema dio discriminativo de Ingram comparando niños con retrasos específicos en
corporal,laorientaciónderccha.izquierda,laesffuctul¿-cióntemporal,lalate- lectoescritura y niños con retrasos escolares generales, 1970), o Ia mayor
etc'
ralidad, la organización perceptiva' correlación entre gemelos que entre mellizos. El rasgo constitutivo más veces
estudios compara-
El problema que se plantea es que'
cr¡ando
":t??!:":: señalado se refiere ala falta de especialización hemisférica (v. revisión en
tivos,numerososniñosqueleenyLscribeng¡rfecumenteobtienenresulta- Young y Ellis, 1981). Crowder (1985) concluye prudentemente que olas prue-
que se utilizan p-ara medir esas aptitudes
dos muy bajos en los tests clásicos y lo contrario es bas apoyan abrumádorarnente la existencia de factores genéticos importantes
Piaget-Head'
(Bender, Santucci, Stambach' Frostig' '"t"') en.la dislexia, (pág. 204). En realidad, lo que puede heredarse desde luego se
igualmentecierto:niñoscongrandesdificultadesenlectoescrituralossupe- situaría al nivel de nterreno abonador, ofragilidad de ciertos sistemas>, etc.,
ran sin Problemas' pero no debe aplicarse a los síntomas concretos.
Engeneral,lacorrelaciónconlapresenciadetrastornosinstrumentales, 3. Scarborough (1991), por ejemplo, registra en los niños de padres con
es baja y no permite esta-
aunque se' sigrrl|,cativa, estadísticamente siempre antecedentes de dislexia una mayor incidencia de trastornos de la lectoescri-
blecerrelacionescausales(apartedequecorrelaciónnoessinónimodecau- tura, pero también un nivel inferior de desarrollo oral, ¡r no descarta tampoco
sa).NoSeencuentranentodosloscasos,nimuchomenos,ycuandoestánpre- la incidencia de una falta de estimulación hacia nlo escrito, por parte de estos
.ir
Sentes,esendistintosgradosycombinacionesvariadas.Lacorrelaciónmás padres.
alta,desdeluego',seregistracontfastornosanterioresosimultáneosdellen- Los trastornos del aprendízaje de la lectoescritura se consideran como un
guaje oral, algo que no resulta sorprendente' caso más del amplio abanicb de trastornos del lenguaje, y su interpretación se
de conducta o los trastornos emocro-
.-J _:.
Lo -i,"tá o"""" con los problemas lleva a cabo desde un enfoque psicolingüístico que combina los elementos
nales.Aunquealgunosautoresradicalesrelacionenladislexiacondiñculta- un valor comunes a la comunicación oral y escrita, y los rasgos específicos de esta últi-
personalidad (llegando incluso a dar
(rj;-
des en la estructuración de la ma, en función del tipo de código escrito utilizado (v. una revisión en Alegría,
simbólicoacadatipodeerror)yaunqueestosdatosdebantenerseencuen- 1 e8s).
taalahoradediseñarlosprogramasdeintervención,tambiénesciertoque 4. Algunos autores incluyen los trastornos de la lectoescritura en cuadros
noseobservanentodosloscasosyqueresultadiñcildiscernirsiformanpar- generales, en relación con determinados rasgos neurológicos (disfunciÓn cere-
tedelasCausasldelascontingenciasodelasconsecuenciasdeunfracaso bral mínima).
escolarquevasiempreligadoacualquierdéficitimpoltantedelalectoescri. 5. Frente a la presencia, bastante frecuente, de alteraciones en la afecti-
tura. vidad y en la conducta social en niños con udislexiar, muchos piensan que
estos trastornos derivan de la ansiedad que se crea en torno al tema del apren-
dizaje de la lectura desde los primeros años y de la que el niño dificilmente
TEORíAS EXPLICATIVAS puede librarse ya que al estrés del colegio se suman la presión familiar e,
incluso, el peso de una ureeducación>. El valor social que tiene la lectoescritu-
Sonextremadamentenumerosas,comoesnaturalcuandosetratadeun ra y el hecho de que constituye la primera presión social explícita y competiti-
cuadro de contornos indefinidos
y si., sust.ato orgánico evidenciable' Última-
va dotarían a ese aprendizaje de unas connotaciones que resultarían perjudi
descenso en la producción de nuevas
mente, sin embargo, se observa uir cierto ciales y bloquearían la evolución. Para otros (Mucchieli, 1966; Chassagny,
teoríasyunmayoresfuerzoinvestigadorparaentenderdeterminadosmeca- 1972 y, de alguna manera, Lobrot, 1972),1a dislexia es el síntoma de un tras-
sea buena o mala'
nismos que intervienen en la lectura' torno más profundo de la personalidad que no permite al niño afirmarse,
podemos agrupar las teorías explicativasen siete grupos, siguiendo la cla-
aprender conductas nuevas ni adaptarse a la escuela, postura que resulta
sificaciÓn de Estienne (1982):
4rI
incompatibl.e, evidentemente, con una defrnición <selectivao de la dislexia mente acogido o no por el entorno escolar. Los métodos que le proponen
son
frente a otros aprendizajes escolares. distintos y más o menos motivadores. Todas estas variables ejercen
una
6. Dentro de toda la problemática del fracaso escolar y su comprobada influencia en la calidad y la rapidez de este aprendiz.aje. Cada una
de las teo-
relación con los niveles socioculturales de los niños, existe una corriente, rÍas presentadas se centra en una u otra de estas variables. Aqui,
como en otros
sobre todo entre psicólogos escolares y sociólogos, que sostiene que la escuela campós, el peligro de las teorÍas monolíticas consiste en pri,rilegia.
ir,¿irtlnt -
es la principal (culpable) del rechazo que presentan algunos niños y que se tla- mente el papel de una variable despreciando las demás>.
duce en un aprendizaje insuficiente de la lectura, primer aprendizaje sistemá-
tico y sancionado por la sociedad. Sin negar la existencia de los problemas
esc¡lare6, esta postura no nos explica los casos de niños odisléxicosn que plo- ¿DIFERENTES TIPOS DE DISLEXIA?
yienen de ambientes culturalmente favorecidos ni los trastornos selectivos,
limitados únicamente a la lectoescritura, por lo menos en los primelos cursos. Dentro de un debate parecido al que se refie¡e a los modeios
de procesos
7. La otra explicaciÓn (exógena) se centra en los métodos de aprendizaje. lectores, se ha planteado la existencia de distintos tipos de
dislexia (v. nakker y
A pesar de la mala prensa del <método globalo respecto a la dislexia, los estu- cols., 1990 o cuetos, 1995): una se catactertzaría por un predominio
de dificul_
dios comparativos, en Su mayoría, resultan totalmente neutros en cuanto al tades de percepción visuomotora y la otra derivaria, sobre
todo, de dificultades
mérito respectivo de los distintos sistemas (Dehant, 1968). Esto no quiere fonológicas y de acceso al léxico interno.
decir que la forma de enseñar no intervenga en el desarrollo de las dificultades Por supuesto, en este tipo de dislexia se inclüirían también
los casos que
de lectoescritura (para exagerarlas o compensarlas), pero su influencia debe combinar.r, en proporcion es variables, ambas alteracione
s.
buscarse más en las formas de aplicación (mayor o m€nor rigidez, grado de La prevalencia de cada uno de los subtipos podría verse
influida también
individualización, actitud negativa o positiva del profesor, etc.) que en los plo- por las características del sistema ortográfico de los diferentes
idiomas (Cara-
pios métodos. volas y Bruck, 1993): un sistema ortográfico con irregularidades
frecuentes
(caso del francés) llevaría a un uso mayor de la viadirecta,
lo que no ocurriría
Haciendo un resumen de las distintas teorías explicativas, Torres de Bea en un sistema más consistente (caso del castellano), ro que,
aslrvez, podría
(1977) observa que un77 % de los autores que ha registlado se inclinan hacia influir en la frecuencia de aparición de determinados tipos de errores.
alguna que otra forma de explicaciÓn endógena (hereditaria, constitucional,
instrumental, etc.), mientras que el resto sitúa el origen del problema fuera del
piopio niño, en las condiciones de aprendizaje. EXPTORACIÓN
Parece, sin embargo, que en realidad nos encontramos con una multitud de
casos palticulares, y que intentar encasillarlos en modelos preestablecidos No aparece aquila palabra diagnóstico, por razones que pueden
fácilmen-
resulta inútil e, incluso, puede resultar perjudicial pala el propio niño que se ve te extraerse de lo anterior.
así etiquetado ante su familia y su plofesol;\a nairtraleza es bastante más com- Decir que un ni.ño es o no <disléxico> no tiene efectos prácticos
ya que no
pleja de lo que nuestras categorías mentales son capaces de conceptualizar. nos dice qué decisiones debemos tomar entre las distint¿s
opciones que exis-
Nos parece más efectivo abordar cualquier trastorno de aprendizaje desde ten para ayudarle.
un punto de vista interaotivo, partiendo de la idea que resulta de una inade- Podemos deci¡, sin embargo, que tiene tal niver de rectoescritura,
que ese
cuación entre las capacidades actuales de un niño y las exigencias del entorno. nivel es significativamente inferior al nivel de su clase o de su edad cronológi_
Puede ser que el niño no Se encuentre (maduloD para un aprendizaje clásico, ca o mental, y analizar cuáles son las dificultades más frecuentes que presenür
colectivo y magistral, y sin embargo, sea capaz de aprender en un contexto o en la lectura o en la escritura.
diferente. Puede sel que un método sea eficaz con una mayoría y resulte ine- 0
f
Es la función de la leximetúa.
-ftcaz con un niño en concreto. Mientras no entendamos que se puede actuar Deberemos añadir a continuación si esa diferencia está
asociada a otros
desde las dos vertientes del aprendizaje, nuestras lespuestas sólo abarcarán un déficit d'e aprendizaje escolar o no, a dificultades lingüísticas a niver
o
oral, a
tipo de Íastornos o un gn¡po limitado de niños con problemas. 6
q
trastornos evolutivos en aspectos perceptivos y motores, a limitaciones
cogni-
Citaremos, para terminar, un párrafo de Estienne (1982) que nos parece tivas y,/o a conductas que manifiesten una alteración d.e su relación
social o de
que describe perfectamente la situación, antes de abordar la exploración y la su personalidad.
intervención logopédica: nIJa dislexia, como entidad patológica, probablemen- Es la función de la psicometría, der examen rogopédico y de la exproración
z
te no exista. El niño que llega a la escuela y es sometido al aprendizaje dela o
psicológica en general.
6
lectura se introduce en ella con su pasado lingüístico y social particular, con su Para tomar finalmente una decisión orientativa, deberemos
conocer tam_
equipamiento biológico más o menos maduro. Según los casos, será correcta- o bién sus circunstancias familiares, antecedentes personales y las característi_
número En castellano, desgraciadamente, no existen muchas pruebas de Jectoescri-
(tipo de colegio' métodos empleados'
I
del entorno escolar tura (como existen para el francés o e1 inglés), lo que en realidad nos impide
cas básicas
contrastar resultados y obtener información crvzada.
de niños Por clase, etc')' I
con lbs padres y en el colegio'
Es la función de lal "ttt'""istas contestar por
datos deberá consistir en
I
¿"1 á" I
1. Lectura silenciosa de Fernández Huerta (i971), individual o colecti-
El objetivo ""áfl'i' ""o' 19-2'
orden a las preguntas
del esquema de la figura va. Mide la comprensión de textos a través de preguntas (12 textos, 50 pregun-
iogopédicas exceden el marco de
v tas). Baremada, sin datos, entre g y 14 añoS.
como las
"*nt"'";;;;';"lo'u*t"u'
únicamente en la leximetría' 2. Lectura oral de GarciaHoz (197I), individual. Se trafa de textos gra-
este capítulo,
"o' """t'utemás duados con la edad (de 6 a 12 años) que incluyen sílabas, palabras y frases. Se
indican norrnas de üelocidad y número de errores para cada edad.
3. Test de lectura de Pérez González (1978), individual. Explora la com-
prensión, exactitud y velocidad de la lectura, con baremos separados en niños
¿Ex¡stenenerentorno-f
aml'i:il""ff::',i:':,T:"#: de 1.o de EGB.
sl
éigniticativamente negatlvos
prioritario interventr r 4. Prueba de lectura I y 2 de Dela Cruz (1979), individual o colectiva, El
No -- nivel 1 está diseñado para niños de 5-6 años y pretende medir la capacídad de
los niños en comprensión auditiva, comprensión visual y discriminación
visual. El nivel 2 se compone de una prueba de lectura/ asociación a consigna
¿Existenobietivamente-retr1T^"d'"oiltl*?|,,,"r"t verbal y utiliza palabras, de una prueba de completar frases eligiendo entre
éignilicativos en el aprendlzaF varias palabras, de una prueba de frases y párrafos seguidos de preguntas a las
sí-
que se contesta eligiendo entre varias respuestas y de una prueba de búsqueda
-No de sinónimos entre 5 palabras escritas. El baremo está establecido con niños
de 2." de EGB.
t... Decisión sobre rnedidas 5. Test de ortografía 2 de Seisdedos (1980), individual o colectivo. Se
il: de orientacón escolar Y
lam¡liar compone de 50 f¡ases donde el sujeto debe encontrar los errores ortográficos
(ortografia arbitraria). Haybaremación desde 4.'o de EGB hasta 3.o de BUP y
para adultos de distintos niveles culturales y'profesionales.
)scritura son selectivas
-.) ¿Las d ificuttades de lectot
resPecl o al con¡unto de
los aorendizaies escolares
t 6. Test de dictado EH (Monfort y cols., 1985), individual o colectivo. Se
{.,:o'- 1
compone de un solo dictado de seis frases, con baremación para los cursos de
,i 2." a 5-o de EGB, con un total de errores y reparto porcentual según sean
i.;
-N,
de ortografía arbittarra, unión/separación de palabras o transcripción fonética
(diferenciada a $) vez en omisión/adición de letras y confusiones auditiyas,
Decisión sobre med¡das
de orientación escolar Y ornisión/adición de palabras, inversiones y confusiones visuales).
lamiliar. 7. Test de análisis de la lectoescritura de Cervera y Tbro (1980), indivi-
dual. El TALE es indiscutiblemente la prueba más elaborada realizada en cas-
tellano; se compone de pruebas paraTa lectura y escritura. El test de lectura
?X'"11?J$'*l¡'i"'"'i!1""T:T:i"''f
: o contiene letras, sílabas, palabras y textos de diferentes niveles, entre 1.o y 4.p
r
¡nteNención espec¡ahzaoa de EGB. Se tiene en cuenta la exactitud, velocidad y comprensión, Se insiste en
o
Ho ?Í- ó
el registro de la conducta. El test de escriiura se compone de copia, dictado y
a expresión espontánea. Las normas de corrección aparecen descritas con deta-
a lle. Hay baremos para promedios de errores, velocidad lectora, cotnprensión,
Decisión sobre el
programa a segulr o
errores del grafismo, errores de ortografia natural y de ortografia arbitraria,
ü errores en la copia, velocidad de escritura, errores sintácticos y contenido
q expresivo parala prueba de expresión espontánea.
o
B. Prueba de comprensión lectora de Lázarc Martínez (1980). Prueba de
Orienlación familiar Y escotar q
{ comprensión que puede aplicarse de forma colectiva. Las respuestas se hacen
o por selección entre varias propuestas. Incluye un baremo desde 3.o hasta 8-o
19-2-
de EGB y un análisis cualitativo. Se puede considerar más como una prueba de crrcunstancias, etc. Las maeshas, que tienen forzosamente
una visión gl0bal
comprensión verbal por escrito que como una prueba específica de compren- del niño con quien conviven a diario, al parecer sintetizan
con más éxito el
sión lectora. conjunto de factores.
9.CLI de Súarez y Meara (1985). Dos pruebas de comprensiÓn basadas Recientemente, se han publicado un gran número
de estudios, en distintos
en el sistema nelozer, individuales o colectivas, con baremaciÓn para el ciclo idiomas, cuyo objetivo es analizar qué factores prevros
podían detectar con la
superior de EGB. mayor seguridad el riesgo de presentar dificurtades
en el aprendizaje de ra lec_
10.COE de TEA (1988). Mide la comprensión de párrafos de inst¡uccio- tura, con ciertos resurtados curiosos como, por ejempro,
que dichos factores
nes de tipo laboral, es individual o colectiva y está balem ada para adolescentes pueden ser diferentes en 10s niños y en las
niñas (Haslum, lggg o Badian,
y adultos. 1990). Tbdos coinciden en Ia supremacia d.er factor
de rrauliaa¿ verbal y de
11 . Pruebas psicopedagÓgicas de aprendizajes instrumentales de Canals conciencia ringüística a niver fonológico (capacidad
de segmentar ias palabras
(19S8). Contierten pruebas de corrección, velocidad y comprensiÓn lectora y en sílabas y fonemas) como a nivel semántico-sintáctico
ortografia, con baremac\ón para 1os cinco primeros cursos de EGB- Pueden ser nusson y Naucle4 1990; Náslund, I 990; Badian,
fvellutino, 1g7g; Mag_
McAnult5r y Drf&, 1990; Jimé_
aplicadas de forma colectiva. nez y Artiles, 1990; Menyuk y cols., 1991, o Catts,
trg9I).
12. Edil 1 de Gomzález Portal [1989). Es una prueba c]ínica destinada al como el tema de la previsión, en cualquier aspecto
de la patología del ren-
análisis del tipo de dificultades en la iectura para niños que han seguido un guaje, es evidentemente primordial, parece más
interesante combinar la idea
año de aprendizaje- de <grupo de riesgo, por un lado y adopción de medidas
de flexibilidad der
13. CLP de Alliende, Condemarin y Milicic (1991). Se compone de dos aprendizaje, por otro, teniendo siempre en cuenta
a ambos protagonistas: el
pruebas pafa cada uno de los ocho primeros cursos y mide la comprensión lec- niño y la escuela- Deberían formar parte del grupo de nriesgoo
los niños que:
tora. Se ha adaptado el baremo a una muestra española.
1. Presentan dificultades de habla y/o d,e lenguaje,
2' Presentan conductas de inadaptación en ras tareas
de grupo (falta de
atención, hiperactividad, pasividad, etc.).
PREVENCION 3. Presentan dificultades perceptivas manifiestas, observables en el dibu_
jo o los juegos sensoriales
fclasificación, encastramiento, etc.-).
incluye este apartado pensando sobre todo en las pruebas <predictivas>:
Se 4.' Presentan retrasos psicomotores, especiarmente en motricidad fina,
se trata de un conjunto de pruebas uni o multidimensionales para niños de observables en ra prensión de ros objetos, ros trabajos
manuales, las activida_
preescolar, cuyos resultados se han intentado correlacionar con resultados pos- des de psicomotricidad, etc.
teriores en el aplendizaje de la lectoescritura. Las más utilizadas en nuestlo 5. Presentan antecedentes familiares en padres y/o hermanos.
paÍs son el ABC (Filho, 1.937), el test de Inizan (1963); el test Reversal (García
Manzano, 1977) y el Badimale de Molina (v. su fundamentación en Molina, Formar parte de un gmpo de ries$o no significa ser
segregado, sino recibir
I 981). atención preferente, en su caso ser objeto de una evaluación
psicopedagógica
Han sido duramente criticadas, en parte por la evidencia empírica de su mas detallada y, sobre todo, entrar en un programa
adaptado para eraprendi-
alto nivel de error, en pafte por su pretendido carácter específico cuando zaje de la lectoescritura.
sulndice de correlación con el éxito en lectura resulta sirnilar al que se obtie' En cuanto a las modificaciones que deberían ser introducidas
o en ra escue_
ne con cualquier test para determinar ei QI. D
c la, parece que las rrrás eficaces serían:
En una experiencia personal, con 120 niños de un colegio de Madrid, se
c
aplicó una combinación del ABC con un test de comprensión fBoehm) y un I I ' Reducir el número de niños por aura o incluir
6 a un profesional de apo-
registro fonético a niños de 5 años, y se contlastó 2 años más tarde con el pro- .l!
o yo que pueda ayudar a las maestras, dedicando un
tiempo especial a los niños
nóstico personal de las rnaestras de preescolar de estos niños, a quienes se que 1o necesitan, dentro de la misma clase.
't
pidió que clasificaran a sus alumnos según serían en el futuro buenos, media' 2' Evitar un aprendizaje excesivamen te precoz, ar menos que
se haga muy
nos o malos lectores. Ambos resultados se mantuvieron en secreto para no individualmente y siguiendo ra propia iniciativa de los
niños; fuera de esa posi-
influir en las maestras que tendrían a los niños ea2.o de preescolar y 1.o de I bilidad, la postura más realista consiste en no iniciar er aprenüz,aje
formal de la
EGB. Mientras el Índice de error de predicción de la <batería pledictiva) se o lectoescritura antes de r.o de EGB, dedicando el preescolar
z u or d"ru..ollo glo_
situaba en torno a\ 30 o/o, el error de 1as maestras no superaba e7 2 %- a bal de las capacidades de los niños, recordando que esas actividades
q sueren se¡
El defecto básico de los tests predictivos es que se limitan a las únicas capa- eficaces cuando los retrasos o trastornos son reves.
Frente a los casos más gra-
cirlaries ¡lel niño v no nos informan sobre su comportamiento, el entorno, las s Ves se renlripre hrhifir¡Iman+é 11ñ. i-+o-.^-^:Á- :-J:__:J__-1
3, No imponer un ritmo preestablecidO ni objetivos estrictos en el curri- ''--'"'qgm.'-r":rs,'.-¿ffi
Tbmando pues con precaución
culum del aprendizaje lector, para eviü4r acumular contenidos sobfe unas los datos que r proporcionan
los malos lectores tienen
baeec inestables. Debe ser posible hacer coincidi¡ varios ritmos de aprendizaje o"r."r-;;;;;;:"^:":
peores resultados ," i:t
:::L:lYorcionan, , parece qve
tie ne n q, d ". d i sc ri m i;a ;;á.1,,."
en una mi$ma clase.
4. Evitar que la lectura sea un tema de sanciones o de competitividad
eficaz de la " ";;;:::.":,Til:T ñ1X:^
" codificación
fonológica#i#:::":Y.l t:? menos complero
": ",
cu ando
y
entre los niños, o que se convierta en el centro obsesivo de toda la actividad
esColat
;J::fr""ffi .'1ff#,::3:'";ú';;;:::Tffi ;:lT'::;::,"-*""""'
5. Procura¡, sea cual sea el método, que su aplicación sea viva, activa y,
siempre que sea posible, lúdica. *:::*:#i"J:ffi i::J:Tr#T":ü1.1:''::**L::f#
cultades de reconocim.a
lo que se pensaba, justameate
o".,
";;;;;sar sus difi_
dízaje de la lectoescritura,
# ffi ;:":drum ft .l*m;*rru:ii
:
i:r letras Y de reconocimiento de las palabras que se integran luego en las estruc- invirtiendo ,",iti¿o ir"o,,*io_"
::i tornos del niño para ir "t parte de los tras-
turas sernánticas y sintácticas más probables. El proceso va desde abajo hacia hacia los factores explicativos.
arriba y resulta de niveles progresivos de análisis.
¡ f '1'.k.
i!: :
El segundo modelo, ilustrado por el njuego de adivinanza psicolingüísticar Distintos enfoques de la
{' , ,"^ intervención
de Goodman (1967) y defendido apasionadamente por Foucambert (f 976), es
un modelo de arriba hacia abajo: se insiste en la importancia de los esquemas podemos agnrpar
los distintos enfoques
previog del lcctor y en su capacidad para emitir hipótesis que la percepción, de ellas subidividas a su en tres grandes categorÍas,
vez ,lgrrrr. variantes. algunas
luego, eonfir¡na o infirma. "r,
Frente a estas dos posturas radicales aparece una tercera via,7a de los
Enfoque sintomatotógico
modclos interactivos (Rumelhart, 7977), en la que los procesos inferiores son
los gue activan los procesos superiores que, a su vez, facilitan el reconoci-
rniento y decodificación de las palabras. l' unos intervienen de forma
analítica- en el conjunto
observados, lingüísticos de ros trastornos
y asociados, siguiendo métodos foneticográficos.
o
Es la orientación de
s la mayor i., métodos franceses tradicionales
Gomparación entre buenos y matos lectores enmareriales impresos
'..a"-J" lo demuestran los cuadernos
I":lil:i,::t_ace "o_o de
IJ¡1a fuente de información para los terapeutas del lenguaje escrito son los
2' otros incluyen también el trabajo
6 dan la lectoescrirura de de los factores asociados,
egtudios corriparativos entre buenos y malos lectores en distintas tareas lecto- forma gf"Uri?É.a" pero abor_
mamente, aparecen programas orientación ideográfica. IÍti-
ras, que pretenden descubrir a qué nivel se sitúa la diferencia, apatte eviden- donde ," irr,un"
temente de su rendimiento lector general. ros mecanismos de arriba sobre
!,
"u";o -a,1,,""*o.:'all:?Ki:ixln"'""te
Ocurre sin embargo que, hasta ahora, los resultados son fiecuentemente ¿
EI enfoque sintomatológico
contradictorios y sorprenden a los propios investigadores (p. qi., el caso de q, presuDone qenp,,lñ--¡^ _-_
F,?fl
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le91).
para el idioma castellano, se pue.den utilizar materiales gráficos como el de
Carrillo y Carrera (1993) o informáticos como el progtama Hamlet (1998).
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i:' cL¡. -o
Conciencia sintáctica. Se utiliza la representación gráfica para desarro-
llar en los niños la capacidad de distinguir la presencia y colocación de las Fig. l9-3 Ejercicio de autodictado pat'a la diferenciación b-d y apoyo gráfico
palabras en enunciados simples, utilizando dibujos realistas mezclados con
símbolos o, directamente, con palabras escritas reconocidas globalmente.
para estos dos últimos puntos, existen ejercicios para preescolar en Mon- El apoyo gtáfico se emplea tambiérr en el trabajo de expresión escdta,
fort y Juárez (1987). especialmente en la flerración, ba;o la forma de historietás realizadas por los
propios niños.
Asociación semánüca. cada fonema se asocia a un ruido de 7a nattraleza
Actividades sobre aprendizaie y cofrección de errores (método onomatbpéyicd) o a una palabra ¡eferencia que forma parte de un
grupo de palaliras aprerididas ariteriorrrieiite de forma global (m de mamá..,).
En la corrección de los errores de reconocimiento o de producción (omi- Apogo cinestésico y/o ttictil. Incluye ejercicios de recortes de letras, reco-
siones, confusiones, inversiones de letras o sÍlabas) o durante el propio apren- nocimiento táctil de letras de madera o de papel de lija o realización en el aire
dizaje, existen una serie de técnicas que pretenden facilitar al niño la percep- de los movimientos gráficos (a veces con apoyo musical o rítmico).
ción y retención de los grafemas.
La utilización de estas técnicas se inscribe, por supuesto, en una metodolo- Combinación rnanipulativa. Partiendo de la idea de que se podrían ali-
o
gÍa sintética aunque con distintas modalidades. viar las dificultades perceptivas de los niño,s at¡ilentañdo el tamaño de las
letras y del espacio en que se combinan y permitiendo su riláflipulacióil
presentación multisensorial de los estímulos. Apoao gestual. cada 9 manual, muchos especialistas efnpiezan el trabaJo con un material no iiitpreso.
6
fonema se acompaña de un gesto de la mano, antes de asociarlo con su grafia o Letras móuiles. se trabaja la lectura j constirrcción de sílabas con letras en
correspondiente. Los gestos suelen ser bastante eclécticos: algunos recuerdan !
c
cartón o efl liiadera.
la forma de la letra (famoso método de Borel-Maisonny, 1950), otro.s la forma .q
Letras coloreadas. A veces se añade a lo anterior una combinación de colo-
o res. En casteilano, por terter un sistemá de correspondencia fortema-grafema
de pronunciar los fonemas, o el sonido que producen. o
Reaurso grdfico. Los ejercicios de lectura o de dictado se acompañan de
o
senclllo, se suele eiegir un color paia las vocales y ot¡o para las consoriántes.
un elemento gráfico que recuerda al niño la(s) característica(s) diferencia-
{o Flechas. En una hoja están dispuestas series de ietras a la izquierda y
¿
dora(s); luego se elimina progresivamente esa facilitacién (fig. 19-3)- o
o
series de letras a la derecha; la lectura y construcción de sílabas se basa en el
o
Puede combinarse con la técnica anterior y en general se usa cuando se trazado de flechas que unen dos letras de ambas series. En general se usa des-
observan confusiones visuales o auditivas, o pués de los sistemas anteriores.
rar previamente las condiciones del lenguaje oral (v. los capítulos sobre disla-
lias, retraso simple o disfasia infantil).
Pero, incluso en los casos que presentan un buen nivel de lenguaje oral,
muchos autores recomiendan ejercicios de <conciencia fonética y sintácticar
como paso previo a la correcciÓn de determinados síntomas del lenguaje escrito. .(^-^\'
--'..-----'/
Conciencia fonológica. A partir de contrastes, de juegos como el nveo,
vsor, de rimas, de deformaciones de palabras, del acompañamiento con pal-
madas, del silabeo, etc., se procura mejorar la capacidad de los niños en el aná-
- lisis de la presencia y colocación de las sílabas y los fonemas en las palabras
del vocabulario usual.
Distintos trabajos han demostrado la posibilidad de mejorar con cierta rapi- H
f:
4 f?
(/\
dez los niveles de conciencia fonológica en niños de preescolar y la repercu-
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sión pos tiva de esta mejoría sobre el aprendizaje de la lectoescritura (Lund-
-olo.
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berg y cols., 1988; Ball, 19BB; Hurford, i990; Blachman, 1991; Ball y Blachman, -ot" f
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Para el idioma castellano, se pue.den utilizar materiales gráficos como el de
Carrillo y Carrera (1993) o informáticos como el programa Hamlet (1998).
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Conciencia sintáctica. Se utiliza la representación gráfica para desarro-
llar en los niños la capacidad de distinguir la presencia y colocación de las
palabras en enunciados simples, utilizando dibujos realistas mezclados con
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Para estos dos últimos puntos, existen ejercicios para preescolar en Mon- El apoyo gráfico se emplea tambiérr eR el trabajo de expresión escrita,
fort y Juárez (1987). especialmente en la ilarración, ba.¡o la fornia de historietas realizadas pof los
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En la corrección de los errores de reconocimiento o de producción (omi- Apoao cinestésico g/o ttictil. lncluye ejercicios de recortes de letras, reco_
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ción y retención de los grafemas.
La utilización de estas técnicas se inscribe, por supu€sto, en una metodolo- combinación manipulativa. partiendo de la idea de que se podrían ali-
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Letras móuiles. Se trabaja ia lectura j constfucción de sílabas cori ietras €ñ
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la forma de la letra (famoso método de Borel-Maisonny, 1950), otros la forma Letras coloteadas, A veces se añade a lo antei"io¡ una combinación de colo-
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Recurso gtdfico. Los ejercicios de lectura o de dictado se acompañan de e sencillo, se suele elegir un color paia las vocaies y otro para las consonafltes.
un elemento gráfico que recuerda al niño la(s) característica(s) dife¡encia- {o Flechas. En una hoja están dispuesus series de letras a la izquietd.a y
dora(s); luego se elimina progresivamente esa facilitacién (fig. 19-3). ¿
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Puede combinarse con la técnica anterior y en general se usa cuando se fiazado de flechas que unen dos letras de ambas series. En general se usa des-
observan Confusiones visuales o auditivas, g pués de los sistemas anteriores.
Las combinaciones manipulativas habitualmente se emplean para trabajar En España, por ejemplo, Mateos [199]) y León (1991), después
de revisar
el aprendizaje o la corrección de la diferencia entre sílabas directas e inversas, los distintos programas diseñados para er idioma inglés,
mixtas y sínfonas-
frupo.r"., un progra_
ma de instrucción en tres fases (explicación, modelado y
práctica supervisa_
dr), cuyos efectos han podido controrar experimental-".rt".
De esta forma, distintas estrategias de sumarización
(Malone y Mastropie_
Actividades sobre tos procesos de arriba abaio ri, i992), d'e mapping y autocontrol (Billingsley y wildman, 1990)
han desem-
bocado en materiares concretos de entrenamiento (Huerta
y Matamala, 1990;
En la literatura especializada se encuentran todavia pocas actividades de vidar-Abarca y Gilabert, lggl). La apiicación de instrumentos
de diagnóstico
este.tipo, ya que reflejan una corriente relativamente reciente. Se recomien- cognitivo también se está empezando a uülizar para analizar
cualitativamente
dan como ejemplo los trabajos de León (199i), Martín Hernández (1993) o los fallos de comprensión de textos escdtos (Dessailly,
1990).
vallés (1995).
Pueden citarse, sin que representen un orden jerarquizado, actividades
que pretenden estimular la anticipación y la formación de hipótesis- Segmentación de los objetivos
l. Ejercicios de comprensión lectora en closed-set: asociar palabras o fra- Ya hemos señalado que esa forma de trabajar es una
característica de los
SeS a referentes plesentados de antemano permite fomentar una combinación
métodos con base pedagógica, pero también puede encontrarse
en ciertos
interactiva de ambos procesos- Por ejemplo, si un niño que acaba de aprender momentos de la intervención dentro de ot¡as metodologías (fig.
i: 19_a). .
.i: . '- la letra (quD tiene que colocar la palabra (paqueteD debajo de uno de los cuatro El caso clásico de esa segmentación es el aprendizaje dela
ortografia arbitraria.
t ..: ..
Daremos aquí un ejempro de un programa seguido para
dibujos de la ficha [queso-paquete-raqueta-bosque), la lectura de la sílaba upa, el entrenamiento
i . .i:::
de la velocidad lectora, d.iseñado para un niño concreto,
i_,
r :.... (vía de abajo-arriba) facilita el reconocimietno de la siguiente, <que>, por vía cuya comprensión es
t..
nr generalmente buena.
t3 ': del conocimiento previo de que la única palabra que empieza por (paD es
*b ri:)
.:l'
(paquete, (vía de arriba-abajo).
7. 2. Lectura de palabras ligadas a una información previa. Por ejemplo, se
! i:,
-
ir
(,r.
t.i i
presenta rápidamente al niño una lista de palabras y él debe levantar la mano Busca cuántas vec€s encuentras la palabra TIENE.
): .,.
cadavezque aparece un nombre de animal. Después haz lo mismo con la palabra OUE.
3. Lectura precedida siempre de una breve explicación sobre Io que va a Para terminar haz lo mismo con la palabra PELOTA
leer. .
¿$Xili'.:: Pelota.
4. Búsqueda de una información solicitada antes de la lectura y que cons- . Mi tío tiene frío.
.
tituye el único objetivo de la misma (buscar la edad de la víctima del acciden- .
Tengo una muñeca que llora.
¿Qué dices?
te en un suceso, el número de huevos que pone un pájaro en un texto de cien- . Dame un vaso de leche.
. Me han regalado una pebta nueva.
cias naturales, una dirección en una guía, etc.)- . Este niño no t¡ene suerte.
5. Reconocimiento y localiz-ación rápida de determinadas palabras dentro . No sé lo que han dicho de ti.
. Como tenía calor, se quitó la camisa.
de una scde o dentro de frases. . He perdido la pelota que me preslaste.
6. Leer frases o textos en los que faltan palabras o partes de palabtas- ó . Un avión militar pasó por enciÍ¡a de nuestras cabezas.
o . Me gustan las patatas fr¡ias que venden allí.
. a.cortaf el pelo porque lo tengo ya muy largo.
. lvle yoy
Estas actividades buscan reforzar los procesos de tratamiento activo de la .
Las hormigas t¡enen seis patas y dosantenas.
yamos a comprar la misfr|a peloia que tenía de pequeño.
'i; informacióir escrita y también trabajar la leitura en situaciones diversas, no . Esta pelota no bota y no vale para jugar al tenis.
. ¿Oué has hecho duranle las vacacíones de Semana Santa?
iL
limitadas siempre a la consabida situación del texto narrativo seguido de pre- o . No efltiendo nada de lo que dice ese hombre cuando da clase.
i:l
i'; guntas. . Mi abuela tiene miedo de quedarse sola por la noctre en slt casa.
l:j Dentro de este apartado, se podrían incluir todas las técnicas desarrolladas !q
lii
1,,
l:! parala mejoría de la comprensiÓn lectora que sebasan más en el entrena-. He encontrado la palabra TIENE veces
t,'¡ ta patabra eUE
i-,:i miento consciente de los procesos psicolingüísticos del tratamiento de la infor- qo
la patabra PELOTA
veces
veces
i,:¡
mación que en la simple práctica de la lectura. {o
l,:t
[,i, ¿
it Se trata esencialmente de hacer descubrir al alumno la necesidad de reali- q TIEMPO:
o
i zar un proceso activo y consciente sobre la estructura de los textos y de desa-
1,,
'r; rrollar hábitos de autocontrol. o
Fig. r9-4.
tii
$r
actuat (40 palabras por min) y de la
::jl._:: :1:_e]:cidad i"9" vetoci_
a) Con a¡ruda permanente
*Í*:i::"1':-t"":::"rT:ríapor.edai;;;ó;;"##;1"');",::
confeccionar un cuadrg de entrenamiento (fig.
l9-5j b) sin ayuda d.el párrafo
del párrafo.
La distancia entre su nivel actual y el nivel
¿"ro"á" ¿1."" lectura.
objetivo se divide en una serie
de niveles intermedios que deberá alcanzar progresivam a preguntas después
ente. ..^ L.-.^ !":,estar de leer un texto
El sistema se basa en aumentar primero
el tamaño del texto dentro de una ¡se aumenta progresivamente narrativo de
er t"*"no;,'""' X palabrar
rnisma velocidad media y luego volver a textos
cortos para aumentar la veloci_
dad, es deci¡, recorur el tiempo de lectura. a) Con ayuda del texto.
Los cuadros se inician generalmente con b) Sin a¡ruda del texto.
objetivos que se sitúan por
debajo del nivel actuel del niño (aquí 30 palabras por
min) para conseguir
uná mayor motivación iniciar del mismo, que por a preguntas tras
,rpu"rto d"r"o.ro"" ",,1^ .Responder
aumenta progresivamente
leer un texto teórico
detalle, El criterio para considerar aTcanzado el bmaño):
un ob3etivo es conseguir"r.el
de X palabras
(se
tiempo indicado o superarlo en 10 recturas consecutivas
(no necesariamen- Con ayuda del texto.
te el mismo día, claro). El cuadro de entrenamiento
está a disposición del
?)
b)
niño y es é1 misnlo quien cororea ros cuadros que Sin ayuda del texto.
representan los distintos
niveles propuestos. se pueden incruir también
refuerzos externos en deter- B. Resumir textos nar¡ati.
minados niveles, por ejemplo, al final de una vos de tamaño
creciente:
columna. En cada momento,
e1 niño puede así controrar sus progresos
y 1a distancia que le separa del 4) Oralmente.
objetivo siguiente, sin dependá. áe t" subjetividad ae tas reacciones b) Por escrito.
del adulto.
otro ejemplo en que podemos encontrar el sistema Un últir¡
-
objetivos es en e1 trabajo de la comprensión
de segmentación de
lectora. cuando se qurere mejó- - tos 0". o'*X"1"Ijil:.'"r:::""1'j"":r-11':9"
l.o{u-,, o dircs¿¡i¿ss propues_
ratla por simple entrenamiento, se suele seguir mente dirigidos global
una progresión parecida a d
";;;;-rr*i;,::f i:T-t:nto de
éstái
l'*h illh, I
"
Íd" ;; ;;; i.,:':fi .'ff [T,T **ii5 :f iil J li;l'iiiiii
1, Realización activa de pequeñas órdenes o
consignas escritas. encuentra ;fft?J;rHt:T iu't' ;;;;'.;#urto reen envoz atta
- ¡ cuando el niño se
{ilfiii,;r, 2. Cóntestff oralmente a preguntas escritas, de Ei progra
5ij correbirle)'
riii'
; ,, i" orden general. ma quizámás desarro,
3. Contestar a preguntas después de lee¡ flases.
4. Contestar a preguntas después de leer párrafos. ff #:'j:'.f ,*:?,x;H:*#H1":::",,";¡",l,,i"H*H}.T,:::,#i
5' F,iecutar determinadas acciones
comprejas tras la lectura de un pána_
fo explicativo:
Nuevas tecnotogías
La lectoescritura
rruaÑo liempo o
DELTEXTo
(en núméro d6 pelabra8) (en segundos)
ü'ffi.:*,f ilir;fürui_:x¿fi ::xTuT:lLl::xff"Ti[::
NNet | 2 | s I utilizado por el usuario de un programa
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Disfe rnia
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J. Sangorrín
q
I. Thrtamudeo tónico, caractertzado por un habla entrecortada con espas-
o mos que'afectan a diversos grupos musculares relacionados con la fonación,
que provocan un bloqueo del habla (speech block). El disfémico trata de resol-
'6
@
ver el bloqueo con un gran esfuerzo que intensifica aún más el tono muscular
y provoca un habla explosiva y violenta.
Io 2. Tbrtamudeo clónico, producido por breves y rápidas contracciones
o bucales que dan lugar a una repetición de parte de la palabra.
¿
o
o
q
El diagnóstico diferencial se est¿blece con respecto a: 4. Alteración funcional fonorrespiratoria al.tartamudeag
en forma de
haciendo coincidir una inspiracto"
:Trr"rr*t::,E;rltica, ".p"._-o¿ica con la
1. La Ncj-Fluencia Normal, o habla vacilante de la primera infancia, fenó-
meno normal en la adquisiciÓn del lenguaje del niño, cuya expresiÓn contiene
5. Economía de la expresión verbal.
de tar- 6- Línea meródica plana (entonación monótona al hablar).
detenciones del discurso y repeticiones de vocablos que dan un aspecto
7. Abuso de sinónimos: sustitución de palabr". qo" disfémico le
tajeo, pero que está exenta de bloqueos y otros síntomas'
resultan dificiles y a las que teme. "i
2. Los procesos de retraso evolutivo del lenguaje en clue se da un proble- g. uso de <muletillas> verbales y embolofrasias, que parecen
ma de insuficiencia linguoespeculativa, resultando un habla discontinua,
con ayudar al
por diñcultad para formular el pen- disfémico a enlazar las frases con más fluidez.
grandes pausas y repeticiones de palabras
' 9. Alteraciones del estilo, con nsaltoso sintácticos y frases inacabadas.
samiento en lenguaje [Disfluencia Semántica y Sintáctica)'
3.Lostrastornosdelafltridezverbalporcausaneurológica:elhabla
r0. Expresiones grandilocuentes, perífrasis y lenguaje redundante.
no han alcanzado a dar más que 2' Info¡mar brevemente al paciente (o a la familia) de las caracteristicas
ias teorías psicógenas hasta las somatÓgenas,
se busca del trastorno, despejando incógnitas e interpretaciones
I i¡ i explicaciones parcialmente plausibles de la cuestión. Actualmente eliminando posibles sentimientos de culpabilidad.
err<rneas al respecto y
de carácter
una aproximación integradora que relacione factores somáticos
y compli- 3. Esbozar la orientación terapéutica a seguir, así como
hereditario con factores psicolÓgicos responsables ile la persistencia
t i. una primera
: l; i
ii: ;
impresión de pronóstico, sin dar a príori falsas expectativas de solución.
cación del problema.
La más ambiciosa de las investigaciones que se realizan en la actualidad
En el caso de niños pequeños, es aconsejable la observación del
con esta perspectiva integradora es la que ha dado lugar a la
denominada Tbo- niño en ei
en la que se plantean ámbito familiar para evaluar la interacción verbal con los padres.
y
na neuropstcolingüística (Perkins, Kent Curlee, 199f )
de las mismas en Los datos más relevantes de la anamnesis pueden obtenerse con
numerosas hipótesis etiológicas y se busca la confirmaciÓn arreglo al
en neuroimagen siguiente esquema;
estudios experimentales. Los últimos avances tecnológicos
cerebral de los
funcional, por otra parte, muestran diferencias en la actividad
peso al catácter (familia directa) (ínea paterna) (línea marcma.)
disfémicos durante el tartamudeo que confieren un mayor
rreurológico de la disfemia. Antec€dentes familiares:
La elevada frecuencia de antecedentes familiares de tartamudez entre los
en inves-
disfémicos (en alrededor de un 75 % de ellos), así como los hallazgos a) de tartamudez,
cerebral para la audi-
tigaciones acereade peculiaridades en lalateralización b) de otros trastornos del habla,
grall número de disfémicos,
ción y en los tiempos de reacción vocal en un c) de zurderia,
d) de trastornos psíquicos,
hacequeseadmitalahipótesisdeunfactorgenéticodepredisposiciónaltar.
E de trastornos neurológicos.
tamudeo.
por otra parte, la no observaciÓn de estos datos en otros sujetos disfemicos
y 2. Historia clínica del pacient€, destacando:
y la evidencia de factores psicosociales responsables del mantenimiento
tomplicación del trastorno disfémico obliga a reconocerlo como un
problema
a) desarrollo del lenguaje,
de etiología multifactorial. b) circunstancias peculiares en la relación niño-padres y entorno,
de la
En ciertos sujetos que tartamudean, las causas pueden ser distintas c) enfermedades (particularmente neurológicas, trastornos neuropsicológicos y
queoriginaladisfemia(otartamudezicliopática),loquedaríalugaralacon- problemas de ajuste psicosocial),
ti
METODOLOEíN OT LA EXPTORACION {
o
Conducta verbal:
c) taquilalia, En la modalidad de expresión libre se evalúan la gravedad y características
d) pausas, prolongaciones, del trastorno. Las demás modalidades proporcionan información acerca de
e) economía de la exPresión. modificaciones del tartamudeo, de interés etiopatogénico y terapéutico.
Como exámenes complementarios pueden realizarse los siguientes si es
Conducta motora:
necesario:
4) esfuerzo,
b) tensión muscular, 1. Tbst de inteligencia.
movimientos secundarios, 2. Examen de la lateralidad.
d) alteración fonorrespiiatoria y fonoarticu-latoria' 3. EEG + Potenciales Evocados Cogniüvos.
e) ausencia de gestualidad (inhibición)' 4. Perñl de oersonalidad.
Fenómenos lingüísticos: Las pruebas de lenguaje se registran en vídeo a fin de tener datos objetivos
de medida que, a su vez, sirvan para mostrar posteriormente al paciente los
a) abuso de sinónimos,
detalles de su trastorno. Est¿ información le será tan útil al paciente como al
I)) pprífrasis, gxpresión redrlr-rdantg,
examinador.
c) nsaltosnsintácticos,
d) embolofrasias, nmuletillas" verbaleQ, El grado de severidad de la disfemia puede evaluarse objetivamente, por
el monotonía delavoz, ejemplo, mediante la escala de Wingate (1976). La valoración subjetiva en el
-l fl diñcultadlinguoesPeculativa. niño se realiza a través del diálogo ffatando de que exprese sus sentimientos,
los defina en lo posible y se sienta comprendido y apoyado. A partir de cierta
II 4. FenÓmenosemocionales: edad puede obtenerse una valoración subjetiva mediante procedimientos
autoinformados y escalas que cuantifiquen el grado de inadecuación conduc-
a) retraimiento,
t tual y las actitudes del disfémico respecto a su trastorno. <Es importante tanto
b) logofobia,
-l
c) fobia a determinados vocaflPs, una valoración objetiva como una valoración subjetiva a partir de la propia
d) ansiedad. percepción del disfémico. Si se trat¿ de un niño pequeño, se realiza una larga
ent¡evista con los padres para poder obtener amplia información sobre el
gvaluarse como niño, su historia, su carácter, su comportamiento y sus reacciones hacia la dis-
La intensidad de cada uno de los signoo observados Puede
ligera, moderada o graYe. fluencia (también las de los padres). A partir de cierta edad, puede evaluarse la
El examen incluye varios procedimientos (gue coinoidirán eon algunas de conducta y actitudes del disfémico mediante procedimientos autoinformados
regis" y escalas que valoren el grado de inadecuación conductua.l y la autopercepción
las técnicas auxiliares que posiblemento ge Utilican en Pl tratamiento),
trando en cada uno la proporción de dicfluenpia, del trastorno.o (Sangorrin, 1989.)
En estos procedimilntos se utiliza el lengU{e de diál-ogo la exposictén
y de Existen también protocolos de evaluación integrados en que se evalúa el
ol trastorno en todas sus dimensiones (conductual, cognitiva y afectiva) (Cooper,
temas (narración, descripción), ademát de Lá leetura eR Yoa alta' Se r€gistra
habla del paciente en distintas modelidadBs: €xFreqiÓn libre¡ habla en
voz l9e3).
cuchicheaáa (para determinar el papel dQ la f-OnapiÓn en el tartamUdeo); habla
en sombra (el paciente reproduce en vg4alta el diceurga del
examinador aaci
simultáneamente); habla enmascarada (aplicando en loF oídos dol paciente un TRATAMIENTO
ruido que ensordece la audiciÓn de su habla)' I
Cada una de estas modalidades de examen se registra con arreglo al o
Aún hoy día existen en la sociedad algunos equívocos en torno a este tras-
siguiente esquema: tomo, y no sólo a nivel vulgar sino incluso desde ámbitos supuestamente cien-
tíflicos. Es corriente, por ejemplo, la idea de que el tartamudeo en los niños
I,ecturq Nanación Iltslo$o
o pequeños sea sistemáticamente ignorado pretendiendo que (con el tiempo
I este problema desaparezcaD o que (es aún pronto para intervenio. Esta actitud
1. Expresión libre. {
a procede de la ignorancia sobre este trastorno, que impera en muchos ámbitos
2. Habla en voz cuchicheada.
fruto de estas investigaciones permite, por el momento, reconocer este tras- Los resultados del tratamiento dependen
en gran medida de la continuidad
torno de forma más adecuada y también una aproximación terapéutica más y tesón empleados paranegar a conseguir
el objetivo propuesto. con respecto
razonable y eFrcaz, particularmente en la intervención precoz. No es menos al sexo, se obtienen, al pareceq, mejores .erult"ios
teiapéuticos en niñas que
cierto también que el tratamiento requiere una especializ-adapreparación den- en niños, en varones que en mujeres (Arnold,
1g70), aunque probablemente
tro de la psicopatología del lenguaje. esto no es r¡na consecuencia del tratamiento
sino de que la evorución en muje-
res tiende a ser mejor.
En cuanto a la duración der tratamiento, parece
i.l más eficaz cuand.o no es
Enfoque terapéut¡co y pronóstico inferior a 6 meses, si bien, por otra parte, tampoco
mente prolongado garantiza una mayor eficacia.
un tratami";,;;;;;r;;
La frecuencia de las sesiones
La intervención precoz en ciertos casos se rcaliza de forma directa, ense- puede ser intensiva al principio.
ñando al niño formas de modif,rcación del habla que permitan una mayor flui- La existencia de otros t¡atamientos anteriores
puede representar una ven-
dez. Existen programas de tratamiento estructurados para estas edades tem- taja si han disminuido la intensidad de los
síntomas, o bien un inconveniente
pranas (Meyers, l9B9; Onslow, 1993), que se aplican en los casos de mayor si el resultado ha sido frustrante para el disfemico,
quien, en este caso, abor_
gravedad. No es raro el trastorno grave en niños pequeños. Estos procedi- daria er nuevo tratamiento con peor disposición
y *uyo, recero.
mientos pueclen ser necesarios, además del aconsejamiento a los padres. En Resultadificil determina¡ la efr.cacia de un tratamiento
si no se realiza una
otros programas, la intervención se realiza de forma indirecta instruyendo a evaluación continuada y a largo prazo d,er rendimiento
verbal der paciente.
los padres y modificando las circunstancias del entorno del niño para que Esto supone el regisfro diario de su actuación
verbal de un modo cuantificable,
éste tenga más facilidades para el desarrollo del habla fluida (Rustin, 1983). además der registro periódico rearizad,o por
otras personas (familia, otros jue_
La aplicación de uno u otro tipo de enfoque depende de la necesidad de cada ces aparte del terapeuta).
caso. para cada caso hay que plantear
una estrategia particul4r a seguir fuera de
En el tratamiento del disfémico conviene diferenciar el enfoque terapéuti- la sesión, para aplicar las nuevas pautas aprendidas
durante la misma.
co de la disfemia en su conjunto y el uso de procedimientos o técnicas auxilia- si bien existen programas estándar de tratamiento,
lo mejor es eraborar un
res para reducir la tasa de tartamudeo. El uso de estas técnicas representa úni- programa individualizado para cada caso:
camente un medio complementario, no lo esencial del tratamiento, pues no
existe ninguna técnica terapéutica capaz de eliminar la disfemia por sí sola, y
su utilización -específica e individualizada- debe enmarcarse en el trata- Pautas de conducta para el disfémico
t miento global del síndrome.
sI Inicialmente se valorarán las expectativas a conseguir: una fluidez total o
-...- bien limitarse a reducir la gravedad de la sintomatología. Se acordará con el una de las dificultades que plantea la disfemia es
el hecho de ser un tras_
paciente cuál será la previsión de duración del tratamiento, así como el com- torno complejo en el que, probablemente, hay
diversos factores causales y que
promiso de esfuerzo que representará el mismo. Se alentará al disfémico a está determinado por variables fisiológicas y
psicológicas que intervienen de
mantener una constante y tenaz participación activa para ir alcanzando pro- forma sirnultánea. El tratamiento no tiene
éxito cuando no se manejan ade_
gresivamente la fluidez. cuadamente dichas variables, o cuando el enfoque
está centrado sólo en pro_
Los indicadores de un mejor pronÓstico serían: o cedimientos psicoterapéuticos o conductuares
?- en sentido estricto, o sea, cen_
o trados exclusivamente en la mecánica del
habla; así pues, el tratamrento pare_
l. El conocimiento más adecuado, por parte del disfemico, de su propio ce más eficaz cuando se combinan ambos tipos
o de enfoque.
trastorno. p Los objetivos generares que hay que conseguir
o
pueden resumirse en algu_
Z. La menor gravedad de la disfemia (valorada tanto objetiva como subje- nas nonnas de conducta que sustituyan a las
o que comúnmente suelen tener
tivamente). o los disfémicos. Estas pautas se imponen paulatinamente
+
-l
t, '6
y según er caso se
3. La mayor colaboración del paciente (y de la familia si se trata de un hará hincapié más en unas que en otras;
i
7
€
I niño). o
o
o
{
,t 4. La menor importancia de factores de la esfera emocional asociados al l. Hablar con calma, sin precipitación.
tart2mlr¿leo {
o 2' Poner en práctica la autoobservación del
i,l
'fiii
aprendiendo a perder sensibilización al problema. Tbrtamudear abiertamente, Niños pequeños (hasta 6_7 años).
' prescindiendo de conductas de esfuetzo, escape y evitación Niños mayores (hasta 11_t2
años)
4. No desviar la mirada del interlocutor. Adolescentes.
.l 5. Ir eliminando movimientos parásitos, que resultan improductivos y Adultos.
l.i
,.I que no son necesarios para tener un lenguaje fluido.
6. Utilizar, en cambio, una gesticulación armónica que acompañe el
lji habla facilitando la fluidez.
Técnicas auxif¡ares y proced¡mientos
terapéuticos
7. Observar y definir 1o que sucede al tartamudear. No quedarse en la
impresión emocional desagradable, más o menos vaga, sino tratar de explicitar
y diferenciar Sus componentes emocionales, motor y verbal para conocer ""i'ii::ü#:,:::",",:J"::*"*".i:ili;j:1f
mejor el trastorno y poderlo tratar en sus diferentes niveles.
;.;:?caberererirsesó,o
8. Ir eliminando el uso de sinónimos. Decir las palabras que se querÍan
decir y no rehuirlas aunque parezcan dificiles. Empleo del gesto acompañando
al habla
9. Hablar con más entonación y menos esfuerzo.
10. Hablar lo más posible. No econoinizar la expresiÓn verbal' se instruye al paciente para
desinhibir su actitud esrática
El uso de gestos elocuentes y tensa al hablar.
ra" manos y brazos al habla4
armónica y expresamente "on de una manera
exagerada, junto
;";;;;;;;
Objetivos del tratamiento puede favorecer la fluidez
,aactitud,#:: ji^flT'::i^':?:1ü:;;;:;;#'";:'"11"'u"másmarcada'
¡carawezo,1g73). Estos p.o""or-,".rtos
modifican
Eliminar totalmente el tartamudeo es algo que no puede pretenderse como aparición.".Ti$*:ff Til'tr"f;,:T,::í;r**gl*"';T::i#fi ::;#
un objetivo a conseguir con garantías de éxito, sobre todo cuanto mayor es el desmesura¿"i"¡.".r"
disfémico. El punto de vista terapéutico más razonable al fratar la disfemia es :: ?lrl."::: h,ffi"l;[i*¡n propia habra, que
v probabr"-",,,"
buscar eliminar al máximo la sintomatología asociada al tartamudeo, típica de aumento de ras interfer";;';";.*:ii:#f i;::ria "nrn
la disfemia complicada, y en el caso del niño pequeño tratar de evitar que el Esta técnica aborda el aspecto
motor del rabra proporcionando
tartamudeo se comPlique. una mayor
En cuanto al habla, se trata de reducir la tasa (intensidad y frecuencia) de ;':T:$nH:il?i ""T##:ta ampritud aet espectro sono
T ro d e t a v oz
disfluencia, o, si se prefiere, aumentar la fluidez. pe der tartamudeo, que
no
comportamiento de desinhibición
* ;"; #J:1::"":'':,"frffiT;:::iil*:i
El tratamiento incluye los siguientes campos de acción: que fávore ce la fluidez.
1. Reducir el tartamudeo mediante el empleo de técnicas auxiliares.
Z. Descondicionar el habla de los factores externos que provocan habi- Téónica delcsoplo>
tualmente tartamudeo y de la respuesta de ansiedad que constituye otro
imporlante estímulo condicionado. consiste en habituar ar paciente
a dejar salir er aiie antes
3. Modificar las actitudes y los sentimientos y conducta verbal-social del € sión vocal' Ésta comenzari de iniciar la emi
o sin irri".rrr-pi. ra co¡riente
e actividad suavemente las de aire que pone en
disfémico. cuerdas vocales,
4. Mantener y extender el habla fluida en situaciones verbales cadavez t expresión. se ha de mantener oron,r"o iniciar de la
¡ la vibración"tr*irrurrjo
d, i;;;;;", "l
más comprometidas. dura la dicción de la f¡ase (Schwart;2, ,,o""r", mientras
{ñ Esta técnica
1SZZ).
efectiva siempre que el disfémico
El marco terapéutico incluye, pues, dos elementos:
f e-s
su uso resulta dificil en situaciones la ut'ice ar habla', aunque
I, fácilmente se olvida de ponerla
sociales a" p."riO., o",
en iractica.
I momentos en que
1. Pedagógico (aprendizaje de nuevos patrones de conducta verbal)' T
i
2. .Psicoterapéutico
(diálogo terapéutico centrado en el paciente, modifi- ( Audición
cación de los factores emocionales).
v, retardada