Hilanderas de La Seda

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LAS HILANDERAS DE SEDA: CIÑA HISTORIA MURCIANA DE 1911

L miércoles 20 de septiembre de seda de Murcia en los primeros años de


E 1911 las hilanderas de la Fábrica
grande de seda, de la Puerta de Cas­
tilla, protestaron contra una rebaja en el
este siglo. Chicas, la mayor parte proce­
dentes de la huerta, unas de catorce o
menos años, trabajaban once horas dia­
jornal de diez céntimos. «Entonces se las rias en condiciones de explotación. Dig­
multó en cinco céntimos por jornal. A la nos de notar son la gran dignidad con la
hora del almuerzo un grupo de 30 a 35 cual se expresan las obreras, la ausencia
operarias abandonó el trabajo por no es­ de rencor de parte de las trabajadoras (por
tar dispuestas a tolerar la rebaja que se les lo menos las de la Fábrica pequeña), y el
hacía. Las demás transigieron y entraron hecho de que la huelga fuera proseguida
de nuevo a reanudar la faena diaria.» {El por mujeres. Pablo Iglesias, en una con­
Liberal, 21-IX-1911). ferencia que dio en el Centro Obrero de
El día siguiente, las trabajadoras de la Murcia el 14 de agosto de 1912, comentó
Fábrica grande pasearon por las calles en la apatía y la falta de asociación que nota­
manifestación pacífica «con banderas im­ ba en la clase obrera murciana, «síntoma,
provisadas de cañas y trapos multicolo­ sin duda de la influencia de este caligino­
res»; apedrearon unos cristales de la fá­ so clima» {El Liberal, 15-VIII-1912). Sin
brica, consiguiendo que sus compañeras embargo, las mujeres de la huerta habían
se juntaran a ellas. Después se declararon dado el año anterior prueba significante
en huelga las trabajadoras de la Fábrica de asociación y de protesta contra la ex­
pequeña de seda y las de la Fábrica de plotación.
tejidos, protestando sus condiciones de En los textos que siguen las hilande­
trabajo. A las doce, unas dos mil mujeres ras hablan sobre las condiciones de su
habían abandonado los talleres. trabajo:
Aquella tarde, las hilanderas persua­
dieron a los obreros de varias fábricas
murcianas que dejaran el trabajo. Los co­ EL TRABAJO DE LA MUJER
merciantes de la Platería y la Trapería ce­
rraron sus tiendas. Los únicos desórde­ Preguntamos a algunas de la huelga
nes fueron ocasionados por los chiquillos por los motivos de sus quejas y nos con­
que rompieron cristales y faroles. El vier­ taron cosas que caen, dentro de la ley del
nes, a pesar de una reacción exagerada de trabajo de lleno.
parte del gobernador Avedillo, quien hizo Nos manifestaron que sus sueldos son
venir a Murcia desde Cartagena un bata­ tan mezquinos, que se considera feliz la
llón de un regimiento de infantería, la paz que llega a ganar tres reales, siendo el
laboral volvió a Murcia, con la vuelta al sueldo casi común el sesenta céntimos.
trabajo de casi todos los obreros, con la De estas doce perras chicas se les re­
excepción de las hilanderas. bajaron el miércoles dos, y además aña­
Las entrevistas y artículos que publi­ dieron que el sistema de multas que allí
có El Liberal de Murcia durante la huel­ existe, dejaba sus sueldos muchas sema­
ga nos ofrecen detalles bastante intere­ nas reducidas a la más mínima expresión.
santes sobre la vida de las hilanderas de Decían más: el trabajo que ellas ha­
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cían era de mujeres, y a veces de hom­ Al toque del último pito de la fábrica,
bres, teniendo en cuenta que las que nos que es a las seis menos cinco de la maña­
relataban estas cosas eran en su mayoría na, tenemos que estar todas dentro del
niñas de doce a catorce años y aún mu­ portal, quedándose fuera y perdiendo por
chas de menos edad. tanto un cuarto de día la desgracia de
Las hacían trabajar más de once horas retardarnos un poco: nos dejan salir a al­
y durante ellas, ¡cuidado con hablar ni morzar a las ocho y cinco y a las ocho y
con distraerse, porque la dura represión veinticinco hay que estar trabajando, sa­
y la multa caía sobre sus cabezas! limos a comer a la una y diez de la tarde y
Y en estas condiciones, se propuso la a las dos menos cinco hay que estar tra­
rebaja de sus ridículos sueldos. bajando nuevamente, hasta las siete me­
Hemos de hacer constar, porque es de nos cuarto. (Hay que advertir que la ma­
justicia, que algunas trabajadoras de la yoría de las trabajadoras pertenecemos a
fábrica pequeña de la seda, nos manifes­ la huerta y que estamos distanciadas
taron que en ésta son los sueldos más próximamente una legua de terreno, ¿a
lúcidos y merecen otras consideraciones. qué hora nos levantaremos y a qué hora
Lo que sí aseguramos nosotros es que llegaremos a nuestras casas? Todo este
todo esto, que hoy sale a la superficie, trabajo es retribuido con el sueldo, por
está pidiendo a voz en grito una escrupu­ término medio, de 0,60 pesetas diarias,
losa inspección de trabajo de la mujer, (pues si bien es cierto que hay algunas
que acabe con todos esos abusos. {El Li­ pocas que ganan 0,80 pesetas, la mayoría
beral, 22-IX-1911). sólo ganan 0,50; de ahí hay que descontar
que a fin de semana un 90 por 100 cuan­
do vamos a cobrar, pues cada uno tene­
LAS HILANDERAS HABLAN mos de 40 a 90 céntimos de multa); de
forma, que por estar distraídas ese corto
Señor Director de El Liberal. tiempo envueltos en vapor y con las ma­
Muy señor nuestro: Las abajo firman­ nos metidas en agua hirviendo, nos rega­
tes, hilanderas de la fábrica de seda de lan diariamente la gran cantidad de 45 a
San Diego, con el mayor respeto nos di­ 50 céntimos, pero tenemos la ventaja de
rigimos a usted para rogarle se digne dar que aunque no comamos y vayamos des­
cabida en las columnas de su popular pe­ calzas y en cueros, estamos trabajando
riódico, a las siguientes líneas con el fin nada menos que en seda, y ¡desgraciada
de llamar la atención de nuestras autori­ de la que diga una palabra! pues es retri­
dades, del centro de Reformas Sociales y buida con un bofetón o cuando menos
del público en general y de evitar distur­ con 8 a 10 días de arresto.
bios como los pasados, a los que nosotras Esto como comprenderán, es insufri­
somos ajenas, protestamos enérgicamen­ ble e intolerable, por lo que rogamos a
te, pues nunca fue nuestro ánimo promo­ nuestra primera autoridad, que para evi­
ver escándalos, y, si sólo demostrar el in­ tar disturbios permanezca dicha fábrica
calificable abuso que con nosotras se vie­ cerrada y que una comisión del centro de
ne cometiendo, el cual es como a conti­ Reformas Sociales y otras de personas
nuación explicamos: sensatas, se informen y vean si es cierto
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lo que decimos y juzguen si es justo lo ciones que antes estábamos y que dichos
que pedimos. señores gestionarían todo lo que pudie­
Como no dudamos que seremos aten­ sen para alcanzar todas las mejoras posi­
didas en nuestro ruego, le damos antici­ bles.
padas gracias y nos ofrecemos de usted Esto creemos lo dirían de buena fé y
affmas, y ss.ss. que b.s.m. no dudamos de que estén dispuestos a
trabajar sin descanso y llegar al último
Las hilanderas de la fa de S. Diego sacrificio, si necesario fuese, por defen­
{El Liberal, 26-IX-1911) dernos, lo que les agradecemos con toda
nuestra alma; pero nuestro modo de ver,
y con sentimiento hemos de decirles, que
SOBRE LA HUELGA o nosotras no hemos sabido explicarnos,
o ellos no nos han comprendido; pues lo
Hablan las hilanderas que nosotras deseamos de dichos seño­
res, es que inspeccionen lo que nosotras
Señor Director de El Liberal decimos y vean que si pedimos aumento
Muy señor nuestro: Tal vez abusando de sueldo es porque con lo que nos dan
de su amabilidad y obligadas por la nece­ no tenemos ni para lo que es más necesa­
sidad, volvemos a molestarle para rogarle rio en la vida; y que si queremos menos
dé cabida en las columnas del periódico horas de trabajo, no es por trabajar me­
que tan dignamente usted dirige, al si­ nos y sí porque las que venimos de lejos
guiente escrito: nos es poco menos que imposible, sobre
Recordarán usted y todos los lectores todo venir en invierno al trabajo; pues
de EL LIBERAL, que en el anterior es­ tenemos que salir de nuestras casas a las
crito, rogábamos a nuestra primera auto­ cuatro de la mañana y como no tenemos
ridad que la fábrica de San Diego perma­ más alumbrado cuando le hace que la luna
neciese cerrada Ínterin tanto que ella, sin más adoquines que sendas estrellas
como la Junta de Reformas sociales no se escusamos decir cómo llegaremos y para
informasen de si era justo lo que pedía­ eso cuando llueve, que damos más caídas
mos; para lo cual hacíamos un llamamien­ que dio Nuestro Señor Jesucristo y en el
to, no sólo a dichos señores, sino a toda verano rodeadas como estamos de tubos
persona sensata; y el resultado de todo de vapor y con las manos metidas en agua
esto ha sido lo que a continuación deci­ hirviendo, en el centro del día, compren­
mos: den como estaremos: esto es lo que hay
Ayer fuimos citadas al Ayuntamiento que ver.
por la Junta de Reformas sociales, a don­ También hemos de hacer constar que
de acudió una comisión que se nombró al vemos con sentimiento, que, a pesar de
efecto, en representación de todas, y cuan­ nuestra actitud pacífica, se cumple lo que
do creíamos que la citación era para escu­ dichos señores nos dijeron de que la fá­
char nuestras quejas y ver la forma de brica no se abriría y que se pondría un
venir a un acuerdo, nos encontramos con piquete de la guardia civil para reprimir­
que sólo era para aconsejarnos que vol­ nos: esto como comprenderán es arrojar­
viésemos al trabajo en las mismas condi­ nos un guante, que nosotras, aunque con
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dolor, pero con dignidad y energía reco­ retribuidas y somos tratadas por nues­
gemos; pues si bien somos débiles muje­ tros superiores con tanta amabilidad, he­
res, opondremos a la fuerza la astucia; y mos acordado ayer mañana hacer causa
si hoy somos jóvenes de 15 a 22 años, el común con nuestras hermanas las desgra­
tiempo pasa y por ley natural mañana ciadas de la fábrica grande; y para demos­
seremos madres de familia, y ya que no­ trarlo, a la hora del almuerzo hemos re­
sotras sufrimos la explotación, a nuestros suelto no volver al trabajo, demostrando
hijos les haremos comprender que el tra­ así nuestra protesta por lo que viene su­
bajo honra, pero que la esclavitud humi­ cediendo. En vista de que era la hora de
lla; que en el momento que debe de haber entrada y no lo hacíamos, salió nuestro
esclavos se concluyen los señores, que sin director, hablándonos con la amabilidad
el trabajo no hay pan, ni ropa, ni calzado que acostumbra. ¿Qué ocurre que no pa­
y todo lo necesario a la vida, pues el dine­ sáis al trabajo? A lo cual nosotras le he­
ro no se come, ni la tierra ni nada produ­ mos explicado la causa. Entonces nos dijo:
ce si no se trabaja. Creo que por lo menos entraréis a apurar
Dándole gracias anticipadas y rogán­ el capillo que hay en las perolas, a lo que
dole nos perdone las molestias de que le nosotras hemos accedido gustosas.
somos objeto, nos repetimos de usted Lo que tenemos el gusto de hacer pú­
afectísimas, ss.ss. Las hilanderas de la fá­ blico para satisfacción de nuestro direc­
brica de San Diego. tor.
Dándoles gracias nos ofrecemos de
usted atentas s.s., las hilanderas de la fá­
brica pequeña.
Señor Director de EL LIBERAL (El Liberal, 28-IX-1911)
Muy señor nuestro: Con sumo placer
nos dirigimos a usted para rogarle inserte Brian J. Dendle
en su popular periódico las siguientes lí­ Académico C. de la Real Academia
neas: «Alfonso X el Sabio»
Las hilanderas de la fábrica pequeña, Catedrático de Literatura de la
que no tenemos queja alguna de nuestro Universidad de Kentucky
director, pues estamos relativamente bien (Estados Unidos)

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