Convivencias Cuaresmales 2011
Convivencias Cuaresmales 2011
Convivencias Cuaresmales 2011
1ª parte:
Preparación para la Exposición del Santísimo Sacramento
Todos: Ven Espíritu Santo llena los corazones de tus fieles y enciende en
ellos el fuego de tu amor.
GUÍA: Oremos: ¡Oh! Dios, que has iluminado los corazones de tus hijos
con la luz del Espíritu Santo; haznos dóciles a tu Espíritu para gustar
siempre el bien y gozar de su consuelo. Por Jesucristo Nuestro Señor.
(Comienza una música suave de fondo, luego de unos momentos uno o dos
lectores proclaman lenta y alternadamente el salmo 42: Tengo sed de Dios,
del Dios vivo) [Lo lee el segundo lector].
GUÍA: Nuestra alma tiene sed de Ti, Señor. Tú eres esa fuente que puede saciar nuestra
sed. Tú eres nuestra salvación, en quien podemos confiar. Durante este retiro que
comenzamos queremos buscarte como la cierva busca corrientes de agua. Queremos
ver tu rostro, queremos encontrarnos contigo...
Es Jesús la fuente de la cual queremos beber, que esta agua manifieste nuestro anhelo de
beber siempre de ella… En esta actitud de oración, en que deseamos buscar al
Señor para encontrarnos con Él, queremos seguir permaneciendo. Señor, Tú eres esa
fuente de la cual queremos beber en este día de retiro y todos nuestros días. Bendícenos
y condúcenos a Ti. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
LECTOR 5:
Este texto del profeta Isaías tiene como contexto el hecho de que el pueblo de Israel esta
desterrado en Babilonia, pero el profeta ya desde el capitulo 46 comienza a anunciar la
liberación, liberación que vendrá como un segundo éxodo realizado por el mismo Dios.
Esta liberación se dará mediante la vida entregada de un siervo, siervo del cual el profeta
no da identificación, pero si dice que este dará su vida por la liberación del pueblo, y lo
novedoso de esta entrega, esta en que es una entrega voluntaria, es el siervo sufriente el
que da su vida, y de este modo en esta donación, se realiza el plan divino de salvación. Es
así que el profeta narra la pasión de este siervo que se anonado, sufriendo el dolor de la
muerte, siendo burlado por los hombres, para luego ser exaltado y reconocido como el
salvador de todos los hombres.
La palabra del Señor se realiza por medio de este siervo que confunde por su manera de ser
salvador, una manera que se compara a la muerte de un cordero manso que es entregado
al matadero, así responde este siervo, con mansedumbre, humildad, y por sobre todo total
donación de la visa misma, a sanar las heridas y los sufrimientos de nuestros dolores.
Adoración al Santísimo Sacramento.
GUÍA: Aquí estamos Señor para adorarte, para decirte desde nuestra fragilidad que Tú
eres nuestro Dios. Hoy, como los discípulos de Emaús, queremos reconocerte en el
Pan, queremos reconocerte como presencia viva que anima nuestras vidas. Hoy,
como ellos, queremos pedirte que te quedes en nuestro corazón, queremos
pedirte que te quedes en nuestra vida, en nuestra comunidad, por eso te decimos
todos juntos: ¡Quédate con nosotros, Señor!
PETICIONES ESPONTÁNEAS
ACCIÓN DE GRACIAS.
Todos: Te damos gracias, Señor. (Se puede cantar alguna antífona adecuada)
LECTOR 11: Te damos, gracias, Señor, porque nos llamas a seguirte como discípulos
tuyos.
LECTOR 12: Te damos gracias, Señor, porque nos invitas a anunciarte en medio del
mundo, por confiar en nosotros con nuestra fragilidad.
GUÍA: A ti, Señor, te reconocemos como Dios de nuestra vida, ven a reinar en ella. A ti
te reconocemos como origen y fuente de la vida, por eso te adoramos cantando:
Canto Eucarístico: Que la lengua humana
cante este misterio
la preciosa sangre
y el precioso cuerpo.
Quien nació de Virgen
Rey del universo
por salvar al mundo
dio su sangre en precio
Se entregó a nosotros
Se nos dio naciendo
de una casta Virgen;
y, acabado el tiempo,
tras haber sembrado
la palabra al pueblo,
coronó su obra
con prodigio excelso
Vivir es caminar.
Moverse, seguir adelante, abrir camino y otear horizontes.
Quedarse quietos no es vivir; es pasividad, inercia y muerte.
Y correr tampoco es vivir; es atropellar acontecimientos.
El caminar mantiene nuestros pies en contacto con la tierra,
nuestros ojos abiertos al vivo paisaje,
nuestros pulmones llenos de aire nuevo.
A cada instante estamos del todo donde estamos,
y del todo moviéndonos al instante siguiente
en el flujo constante que es la vida.
Y nuestro caminar es caminar contigo, Señor;
a tu lado; en tu presencia y a tu paso.
Caminar en la presencia del Señor:
eso es lo que queremos que sea nuestra vida.
Caminar contigo.
De la mano, paso a paso, día a día.
Sabiendo siempre que tú estás a nuestro lado,
que caminas con nosotros y nos ayudas en nuestra búsqueda.
Sabiendo siempre, que lo más importante es caminar
CÁNTICO 3: (cada una recita una frase numerada y todos juntos respondemos
la antífona)
PETICIONES ESPONTÁNEAS
PADRE NUESTRO, con las manos cogidas
ORACIÓN FINAL (la hacemos fuera de casa, quemando las hojas y los papeles)
GESTO ENVIO