Aleaciones Hierro
Aleaciones Hierro
Aleaciones Hierro
Estructura Cristalina
Esto produce zonas en las cuales la red cristalina está ordenada las que llamaremos
granos y zonas denominadas límites de grano o fronteras de grano, en donde no existe
orden alguno. En la figura 4 se muestra una micrografía obtenida con un microscopio
electrónico, donde se aprecian granos y sus fronteras.
Para observar esto en un microscopio, se pule una superficie plana, lo que corta los
granos en cualquier dirección. Para mejorar la visualización se aplica sobre la superficie
una solución ácida denominada ataque, la cual corroe los granos en mayor o menor
grado, dependiendo de su orientación cristalina. En la figura 5 se muestra una
metalografía con granos de acero ampliada 175 veces.
Diagrama Fe-C.
La austenita es la más dúctil de las fases del diagrama Fe-Fe3C, su estructura es cúbica
centrada en las caras. Esta fase permite un proceso de difusión con el carbono mucho
más rápido, tiene una solubilidad máxima de carbono del 2.11 % a 1148 ºC. Solubilidad
aproximadamente 100 veces superior a la de la ferrita. Las transformaciones de fase de
la austenita son muy importantes en los tratamientos térmicos de los aceros como se
verá más adelante. La ferrita-δ solo se diferencia de la α en el tramo de temperatura
donde existe. Al ser sólo estable a altas temperaturas no tiene interés técnico.
La microestructura que se desarrolla depende tanto del contenido en carbono como del
tratamiento térmico. Si el enfriamiento es muy lento se dan condiciones de equilibrio
pero si los enfriamientos son muy rápidos se producen procesos que cambian la
microestructura y por tanto las propiedades mecánicas.
Se distinguen varios casos. Los aceros eutectoides son aquellos en los que la fase
austenítica sólida tiene composición del eutectoide 0.77 % (figura 4.2).
Esta transformación de fases necesita la discusión del carbono ya que las tres fases
tienen composiciones diferentes. Para cada grano de austenita se forman dos fases con
láminas de ferrita y otras de cementita y relación de fases de 9:1, respectivamente (punto
b de la línea xx’). Las orientaciones entre grano son al azar.
Los aceros hipoeutectoides son aquellos en los que la fase austenítica sólida tiene un
contenido en carbono inferior a la del eutectoide 0.77 %. Los cambios en la
microestructura de un acero de esta composición se dan en la figura 4.4. Para T ≈ 875 ºC,
la microestructura de la fase γ es homogénea con granos orientados al azar (punto c de
la línea yy’). Al enfriar se desarrolla la fase α y nos encontramos en una región bifásica α
+ γ (punto d de la línea yy’). En este punto se ha segregado un poco de fase α, al bajar en
temperatura (punto e de la línea yy’) aumenta el contenido en fase α (aunque la
proporción depende de la composición inicial del acero hipoeutectoide).
En la
Si un acero
con
microestructura perlítica se calienta a una temperatura inferior a la del eutectoide
durante un tiempo largo (p. ej., T = 700 ºC; t = 18 – 24 h) se forma una nueva
microestructura denominada esferoidita, que es cementita globular o esferoidal. Las
partículas de Fe3C aparecen como pequeñas esferas incrustadas dentro de la matriz
ferrítica-α. Esta transformación tiene lugar mediante la difusión del carbono pero sin
cambiar las proporciones relativas de la fase ferrita y cementita.
Al igual que los aceros las fundiciones se pueden clasificar como fundiciones
eutécticas, cuando el contenido en carbono es del 4.3 % en peso, fundiciones
hipoeutécticas cuando el contenido en carbono es menor y fundiciones hipereutécticas
cuando el contenido en carbono es mayor. Según el diagrama de fases, las fundiciones
funden a temperaturas entre 1150 y 1300 ºC considerablemente más baja que la de los
aceros (del orden de 1500 ºC). Por tanto funden y se moldean con mayor facilidad y de
ahí el nombre que reciben.
Sin embargo, las fundiciones se clasifican más por el estado en que se encuentra el
carbono. Ya se ha comentado que la cementita es metaestable y descompone para dar
ferrita y grafito. En enfriamiento lento y la presencia de algunos elementos
(principalmente el silicio con una concentración superior al 1 %) favorecen este proceso
y la presencia de otros elementos y los enfriamientos rápidos lo impiden. Las
propiedades mecánicas de las fundiciones dependen de la composición y del
tratamiento térmico. Los tipos más comunes de fundiciones son: gris, esferoidal, blanca
y maleable que se verán posteriormente.
Aceros y fundiciones.
Tabla 1
Propiedades Mecánicas. Barras de acero en caliente.
Constituye la mayor parte de todo el acero fabricado. Contienen menos del 0.25 % en
peso de C, no responde al tratamiento térmico para dar martensita ni se pueden
endurecer por acritud. La microestructura consiste en ferrita y perlita. Por tanto, son
relativamente blandos y poco resistentes pero con extraordinaria ductilidad y tenacidad.
Son de fácil mecanizado, soldables y baratos. Se utilizan para fabricar vigas, carrocerías
de automóviles, y láminas para tuberías edificios y puentes. Otro grupo de aceros de
bajo contenido en carbono son los de alta resistencia y baja aleación. Contienen
concentraciones variables de Cu, V, Ni y Mo totalizando ≈ 10 % en peso. Poseen mucha
más resistencia mecánica, que puede aumentar por tratamiento térmico y mantienen las
propiedades de fácil mecanizado. Se emplean en componentes donde la resistencia
mecánica es crítica: puentes, torres, columnas de soportes de edificios altos, bastidores
de camiones y vagones de tren.
Contienen entre el 0.25 y 0.60 % en peso de C. Estos aceros pueden ser tratados
térmicamente mediante austenización, temple y revenido para mejorar las propiedades
mecánicas. La microestructura generalmente es martensita revenida. Las adiciones de
Cr, Ni y Mo facilitan el tratamiento térmico que en su ausencia es difícil y útil solo para
secciones de pieza relativamente delgadas. Son más resistentes que los aceros bajos en
carbono pero menos dúctiles y maleables. Se suelen utilizar para fabricar cinceles,
martillos, cigüeñales, pernos, etc.
Generalmente contienen entre el 0.60 y 1.4 % en peso de C. Son más duros y resistentes
(y menos dúctiles) que los otros aceros al carbono. Casi siempre se utilizan con
tratamientos de templado y revenido que lo hacen muy resistentes al desgaste y capaces
de adquirir la forma de herramienta de corte. Generalmente contienen Cr, V, W y Mo, los
cuales dan carburos muy duros como Cr23C6, V4C3 y WC. Se utilizan como
herramientas de corte, matrices para fabricar herramientas de herrería y carpintería. Por
ejemplo, cuchillos, navajas, hojas de sierra, brocas para cemento, corta tubos, troqueles,
herramientas de torno, muelles e hilos e alta resistencia.
La fundición gris
El grafito suele aparecer como escamas dentro de una matriz de ferrita o perlita, la
microestructura se observa en la figura 4.10. El nombre se debe al color de una
superficie fracturada.
Desde un punto de vista mecánico las fundiciones grises son comparativamente frágiles
y poco resistentes a la tracción. La resistencia y la ductilidad a los esfuerzos de
compresión son muy superiores. Esta fundiciones amortiguan la energía vibracional de
forma mucho más efectiva que los aceros. Así los equipos que vibran mucho se suelen
construir de esta aleación. A la temperatura de colada tienen mucha fluidez por lo que
permite moldear piezas de forma muy complicadas. Además, la fundición gris es uno de
los materiales metálicos más baratos. Se utiliza en bloque de motores, tambores de
freno, cilindros y pistones de motores.
No es frágil y tiene propiedades mecánicas similares a las de los aceros. Presenta una
mayor resistencia a la tracción que la fundición gris. Se suele utilizar para la fabricación
de válvulas y engranajes de alta resistencia, cuerpos de bomba, cigüeñales y pistones.
La fundición blanca
Contienen poco carbono y silicio (< 1%) y se obtienen por enfriamiento rápido. La mayor
parte del carbono aparece como cementita en lugar de grafito, y la superficie fracturada
tiene una tonalidad blanca. La microestructura se representa en la figura 4.12.
La fundición maleable
Aceros
inoxidables.
En realidad, lo que ocurre es que lo que se oxida es una capa superficial de cromo, que
actúa como película impermeable y transparente, impidiendo el paso del oxígeno al
interior del metal. Si por efectos del desgaste o rayadura, esta capa se rompe,
inmediatamente se forma una nueva con las propiedades de la anterior.
Los aceros inoxidables austeníticos también se obtienen por recocido y son los más
comunes [se tiene la microestructura austenítica por la presencia de grandes cantidades
de Ni] son: