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Como Nacio Cristo

Los cromosomas son estructuras en el núcleo de las células que contienen ADN y genes. El ADN está empaquetado en los cromosomas de forma organizada mediante la interacción con proteínas. Los cromosomas normalmente vienen en pares y contienen la información genética heredada de los padres.
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Como Nacio Cristo

Los cromosomas son estructuras en el núcleo de las células que contienen ADN y genes. El ADN está empaquetado en los cromosomas de forma organizada mediante la interacción con proteínas. Los cromosomas normalmente vienen en pares y contienen la información genética heredada de los padres.
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LOS CROMOSOMAS

Los cromosomas son estructuras que se encuentran en el centro (núcleo) de las


células que transportan fragmentos largos de ADN. El ADN es el material que
contiene los genes y es el pilar fundamental del cuerpo humano.

Los cromosomas también contienen proteínas que ayudan al ADN a existir en la


forma apropiada.

Información
Los cromosomas vienen en pares. Normalmente, cada célula en el cuerpo
humano tiene 23 pares de cromosomas (46 cromosomas en total), de los cuales la
mitad proviene de la madre y la otra mitad del padre.

Dos de los cromosomas (el X y el Y) determinan el género masculino o femenino y


se denominan cromosomas sexuales:

Las mujeres tienen 2 cromosomas X.


Los hombres tienen un cromosoma X y uno Y.
La madre le aporta un cromosoma X al hijo, mientras que el padre puede contribuir
ya sea con un cromosoma X o con un cromosoma Y. Es el cromosoma del padre
el que determina si el bebé es un masculino o femenino.

Los cromosomas restantes se denominan autosómicos y se conocen como pares


de cromosomas del 1 al 22.
 

Estructura y función de los cromosomas


Las moléculas de ADN que conforman nuestro genoma (o el de otros organismos)
no se encuentran de forma libre en las células. Sería poco práctico y muy caótico,
algo así como tener metros de hilo de lana sueltos sin organizar en una caja de
zapatos. Gracias a los cromosomas, las moléculas del ADN están empaquetadas
de forma organizada, lo que facilita el funcionamiento del genoma y su correcta
transmisión cuando las células se dividen.
En los cromosomas la estructura y la función están fuertemente unidas. Por
ejemplo, la actividad del ADN, es decir, qué genes se expresan y qué genes no,
depende en muchos casos de cómo de accesible es la molécula del ADN a las
proteínas que participan en la expresión de los genes.

La estructura de los cromosomas está determinada por la interacción del ADN con
diversas proteínas que facilitan la mayor o menor compactación. Según las
necesidades de la célula o circunstancias fisiológicas del momento puede ser
necesaria una mayor o menor compactación.

Una característica de los cromosomas es que no siempre se presentan con la


misma estructura. La mayor parte del tiempo los cromosomas están desplegados,
como una larga fibra de ADN con proteínas.

La forma en X que solemos asociar a los cromosomas se manifiesta únicamente


durante un corto periodo de la división celular. No obstante, ese corto periodo en
el que están muy compactados es muy relevante, ya que, en esa etapa, los
cromosomas son esenciales para que el material hereditario se distribuya de
forma correcta y equilibrada entre las células hijas durante la división celular.

 ¿Cómo se llega de una hebra de ADN al cromosoma en forma de X


característico?

La estructura de cada cromosoma está fuertemente organizada y es producto de


diferentes niveles de compactación.

 El nucleosoma es la unidad fundamental de compactación del ADN y


consiste en un fragmento de ADN de doble cadena de longitud fija que
rodea un núcleo de ocho proteínas llamadas histonas.

Cada nucleosoma se conecta al siguiente por un fragmento de ADN, formando


una cadena de nucleosomas similar a un collar de perlas. Este nivel de
compactación permite que el ADN pueda copiarse durante la replicación o
expresar sus genes a través de la transcripción.

 En el siguiente nivel de compactación la cadena de nucleosomas se


enrolla formando un solenoide. En este nivel el ADN está tan
compactado que se dificulta la replicación y la transcripción.

 Los solenoides se compactan nuevamente en fibras de 300 nm que


pueden condensarse todavía más hasta dar lugar a los conocidos brazos
de los cromosomas.

La compactación final del ADN en el cromosoma es de 500 veces.

 ¿Todos los cromosomas son iguales?

La forma y número de los cromosomas varían entre diferentes especies. Los


cromosomas presentes en las células y los animales son lineares y hay más de
uno en cada célula. De hecho, suelen ir por pares. Por ejemplo, en la especie
humana la mayor parte de las células (es decir, todas menos los gametos) tienen
dos copias de cada cromosoma no sexual (también llamados cromosomas
autosómicos) y un par de cromosomas sexuales que pueden ser iguales o
diferentes.

Los humanos se caracterizan por tener 23 pares de cromosomas. Ese número es


característico de la especie. Los chimpancés y gorilas tienen 24 pares de
cromosomas (48 en total) y los ratones tienen  20 pares (40 cromosomas en total).

Los cromosomas bacterianos, por otra parte, son circulares y suele haber un único
cromosoma principal en cada célula bacteriana.

 ¿Qué elementos se distinguen en los cromosomas?

Una parte importante del cromosoma es el centrómero, región más estrecha del
cromosoma a la cual se unen las fibras del huso mitótico durante la división.
Los centrómeros definen la estructura y forma de los cromosomas, que se
clasifican según su posición relativa (la del centrómero) hacia un extremo o en el
centro del cromosoma.

El centrómero divide al cromosoma en dos brazos. El más largo se denomina q y


el más pequeño se conoce como p. Así, en función de la longitud de los brazos de
los cromosomas definida por la posición del centrómero encontramos:

 Cromosomas metacéntricos, que tienen los dos brazos de igual tamaño.

 Cromosomas submetacéntricos, que tienen un brazo de mayor tamaño


que el otro.

 Cromosomas telocéntricos, en los que el centrómero está más


desplazado y en los que el brazo pequeño mucho más corto que el
brazo largo.

 Cromosomas acrocéntricos en los que el centrómero está tan


desplazado hacia un extremo que prácticamente no tienen brazos
pequeños.

Otro componente muy importante de los cromosomas son


los telómeros, estructuras localizadas al final de los cromosomas.

Los telómeros están formados por secuencias repetitivas de ADN y tienen


diversas funciones como:

 Proteger los extremos terminales de los cromosomas y mantener la


estabilidad del genoma.

 Facilitar la replicación del material hereditario cromosoma. Cada vez que


el ADN se replica, su longitud se acorta algunas unidades. Gracias a las
múltiples secuencias repetitivas de los telómeros (de media hay unas
3000 repeticiones) las consecuencias de este acortamiento no son
mayores. Existe una enzima denominada telomerasa que se encarga de
mantener los telómeros y añadir la secuencia repetitiva a sus extremos.
No obstante, esta enzima solo está activa durante la etapa embrionaria
en la que las células se dividen mucho y en algunos tejidos. Por esta
razón, con la edad los telómeros pueden acortarse lo que puede llegar a
repercutir en la función de las células.

 ¿Cuáles son las funciones de los cromosomas?

La función principal de los cromosomas es contener, preservar y organizar el


material hereditario.

De forma más detallada podemos considerar como funciones:

 Soporte de la información genética.

 Empaquetamiento y protección del ADN. Los cromosomas facilitan la


compactación del ADN en el interior del núcleo. Además, las proteínas
asociadas que facilitan la protección frente a agentes químicos y las
estructuras como los telómeros contribuyen a preservar el ADN.

 Facilitar la correcta transmisión del material hereditario. La estructura


compactada de los cromosomas durante la división celular facilita que
las células hijas resultantes tengan el material hereditario correcto. Si
volvemos a la comparación del ADN con una madeja de lana, es mucho
más fácil repartir de forma equitativa madejas de lana enrollada que los
hilos sueltos.

 Facilitar la replicación y expresión del genoma.

 Preservar el material hereditario no solo durante la división sino también


a través de estructuras como los telómeros.

Los cromosomas y la división celular


En la división celular los cromosomas se condensan y la molécula de ADN unida a
proteínas y ARN forma una cromátida.

Una fase previa a la división celular es la replicación o copia de todo el material


hereditaria por lo que al inicio de la división cada cromosoma está formado por dos
cromátidas unidas por el centrómero.

Al final de la mitosis las cromátidas se separan y forman dos cromosomas


independientes, que se distribuyen de forma equitativa entre las células hijas
resultantes.

Los cromosomas están contenidos en una parte especial de la célula llamada


núcleo. Si usted tuviera un microscopio muy potente, podría ver los cromosomas
dentro del núcleo de la célula. 
Los cromosomas contienen sus genes.

LOS GENES 

Los genes son el plano por el cual se formó su cuerpo. Los genes son las
instrucciones para crear células nuevas. Ellos indican cuál será el color del cabello
y los ojos. Indican a cuáles enfermedades será propenso. Los genes le indican a
las células del cuerpo cómo producir factor coagulante. Hay decenas de miles de
genes a lo largo de los cromosomas. Todos los genes son idénticos en cada célula
y todos se encuentran organizados en la misma forma. 

Genes dominantes y recesivos

Cuando los 23 cromosomas del espermatozoide del padre y los 23 cromosomas


del óvulo de la madre se encuentran, éstos se parean. Los genes que contienen
los cromosomas se parean también. Los pares de genes, provenientes del padre y
la madre, contienen planos de construcción para una misma parte del cuerpo. Por
ejemplo, el gen del padre que indica el color de cabello se parea con el gen de la
madre que indica el color de cabello. 
Algunas veces uno de los genes en ese par es más fuerte e impide las
instrucciones del otro gen. Se dice que el gen más fuerte que toma control del
rasgo es un gen dominante. El gen cuyas características son obstruidas se
llama recesivo. Un gen recesivo tendrá oportunidad de imponer sus instrucciones
a las células solamente si se encuentra pareado con otro gen recesivo.

Supongamos que un bebé recibe un gen con instrucciones para ojos castaños por
parte del padre y un gen con instrucciones para ojos azules por parte de la madre.
El bebé tendrá ojos castaños ya que el gen de ojos castaños es dominante. Sin
embargo, ese bebé aún llevará en su cuerpo el gen con instrucciones para ojos azules
y podría pasarlo a sus hijos. 

Por cada par de genes, un niño puede heredar dos genes dominantes, dos genes
recesivos, o un gen dominante con un gen recesivo. La combinación de genes que
recibirá de sus padres ocurre al azar.

Si un trastorno ocurre en un niño cuando solamente uno de los padres tiene el


gen, se llama trastorno dominante. Si ambos padres tienen que tener el gen para
que el hijo tenga el trastorno, se llama trastorno recesivo.

EL NACIMIENTO VIRGINAL

Cuestionando el Nacimiento Virginal

En Mateo 1:22-23, el escritor del Evangelio interrumpe el flujo de la narrativa con


el fin de comentar cómo la concepción sobrenatural inusual de Jesús, que resulta
en el nacimiento virginal, sirvió como un cumplimiento de la Escritura.

La primer cita de cumplimiento de Mateo proviene de Isaías 7:14. Aparentemente,


parece un cumplimiento directo de la profecía, pero los lectores han planteado tres
cuestiones principales que tenemos que abordar.
En primer lugar, filosóficamente, ¿cuál es la probabilidad de que Jesús es el
resultado de una concepción virginal? En segundo lugar, teológicamente,
¿contradice un nacimiento virginal la creencia cristiana de que Jesús era
totalmente humano? En tercer lugar, históricamente, ¿es el nacimiento de Jesús el
cumplimiento legítimo de este pasaje de Isaías?

La primera pregunta tiene que ver con la posibilidad de que el mismo milagro y es
más fácil de abordar; la segunda cuestión se refiere a la razón teológica para un
nacimiento virginal, mientras que la tercera cuestión se refiere al significado
pretendido originalmente de la referencia de Isaías de una mujer joven
concibiendo un hijo.

¿Era posible?

La única razón para dudar de la posibilidad de que el milagro mismo sería un


compromiso previo con el naturalismo filosófico, es decir, la creencia de que el
mundo material es todo lo que existe y que no hay tal cosa como Dios o la
intervención sobrenatural. Desde esta perspectiva, los milagros no ocurren. Esta
cosmovisión asume que la ciencia puede explicar todo, pero este enfoque exige
más de la ciencia de lo que puede producir.

Si uno, sin embargo, reconoce la existencia de un Dios lo suficientemente


poderoso como para crear todo lo que existe, no queda ninguna razón para dudar
de que tal Dios podía intervenir en la historia en esta manera sobrenatural. Este es
de hecho el Dios que se presupone en cada página de la Biblia y que ha sido
adorado y servido por los seres humanos desde la creación del mundo.

¿Podría un Dios que llamó al universo con sus incontables galaxias a la existencia
que no pueda causar que conociera una virgen? Aunque los ateos comúnmente
adoptan el naturalismo filosófico, la mayoría de la población del mundo encuentra
insatisfactorio el ateísmo. Algunas cosas la ciencia no puede y nunca será capaz
de explicar. El nacimiento virginal es un acontecimiento milagroso, y no tenemos
ninguna razón para pensar que Dios podía o no proveer sobrenaturalmente lo
necesario para que Jesús fuese completamente humano, incluso sin la
contribución de un padre humano.

¿Era Necesario?

¿Por qué es teológicamente importante el nacimiento virginal? John Frame


resume provechosamente las principales razones:

El nacimiento virginal es doctrinalmente importante debido a: (1) La doctrina de la


Escritura. Si se equivoca la Escritura aquí, entonces ¿por qué deberíamos confiar
en sus afirmaciones acerca de otros eventos sobrenaturales, como la
resurrección? (2) La Deidad de Cristo. Si bien no podemos decir dogmáticamente
que Dios podría entrar en el mundo sólo a través de un nacimiento virginal, sin
duda, si algo es la encarnación es un evento sobrenatural. Eliminar lo sobrenatural
de este evento es inevitablemente comprometer la dimensión divina de la misma.
(3) La Humanidad de Cristo. Esto era importante para Ignacio y los padres del
segundo siglo. Jesús realmente nació; en realidad se convirtió en uno de nosotros.
(4) La impecabilidad de Cristo. Si hubiera nacido de dos padres humanos, es muy
difícil concebir cómo podría haber sido eximido de la culpa del pecado de Adán y
convertirse en una nueva cabeza de la raza humana. Y parecería ser sólo un acto
arbitrario de Dios que Jesús podría nacer sin una naturaleza pecaminosa. Sin
embargo, la impecabilidad de Jesús como la nueva cabeza de la raza humana y
como el cordero expiatorio de Dios es absolutamente vital para nuestra salvación
(Romanos 5:18-19; 2 Co. 5:21; Hebreos 4:15; 7:26; 1 Pedro 2:22-24). (5) La
naturaleza de la gracia. El nacimiento de Cristo, en el que la iniciativa y el poder
son de Dios, es una imagen acertada de la gracia salvadora de Dios en general de
la que forma parte. Nos enseña que la salvación es por un acto de Dios, no
nuestro esfuerzo humano. [1]

Viendo el nacimiento virginal como parte de la iniciativa de Dios en la salvación


nos recuerda a echarlo de una larga lista de nacimientos sobrenaturales.
Reflexionando sobre nuestra discusión de la “simiente de la mujer” de Génesis
3:15 en el último capítulo, vemos que la esterilidad y otros obstáculos amenazaron
constantemente la progresión de la simiente y que a menudo Dios intervino
sobrenaturalmente para asegurar la supervivencia de la semilla. (La concepción
de Isaac y la concepción de Rebeca de Jacob y Esaú inmediatamente vienen a la
mente).

Por tanto, el nacimiento virginal de Jesús representa el nacimiento final y más


sobrenatural en la sucesión de nacimientos en cumplimiento de la promesa de
Dios inmediatamente después de la caída en el libro de Génesis (Génesis 3:15).

¿Es un legítimo cumplimiento de la Profecía?

Pasar de una pregunta teológica a una histórica requiere una mirada más cercana
en el contexto original de la referencia de Isaías a la virgen concibiendo un hijo en
Isaías 7:14.

Entre 740 y 732 aC, Siria e Israel trataron de forzar el rey Acaz de Judá para
unirse a su coalición militar contra Asiria. Cuando se negó a unirse a su alianza,
invadieron con la intención de deponerlo y crear un rey en Judá que se uniría a su
lado. En lugar de confiar en Dios, Acaz recurrió a Asiria en busca de ayuda. Asiria
llevó ayuda, pero a un costo muy alto: en esencia, Judá se convirtió en un estado
vasallo de Asiria y se vio obligado a pagar un fuerte tributo. Esta serie de eventos
se conoce como la Guerra siro-efrainita.

En medio de esta crisis, el profeta Isaías vino al rey Acaz con una palabra de
aliento y una invitación a confiar en Dios: “Estate alerta, y ten calma; no temas ni
desmaye tu corazón. . . . No prevalecerá ni se cumplirá. . . . Si no creéis, de cierto
no permaneceréis” (Isaías 7: 4a, 7b, 9b).

Acaz, sin embargo, dudaba de Dios y no creía que Dios los libraría. En la mente
de Acaz, su única esperanza era Asiria. Acaz se negó a confiar en Dios o recibir
una señal del compromiso de Dios para rescatar, e Isaías respondió:

Por tanto, el Señor mismo os dará una señal: He aquí, una virgen concebirá y dará
a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. Comerá cuajada y miel hasta que
sepa lo suficiente para desechar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el
niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, será abandonada la tierra cuyos
dos reyes tú temes.(Isaías 7:14-16)
La señal de Dios a Acaz en Isaías 7:14 probablemente tuvo un cumplimiento
inmediato que directamente se relacionaba con la situación histórica original en la
guerra siro-efrainita. La palabra hebrea traducida como "virgen", "almah, denota
una joven que en la mayoría de los contextos en el Antiguo Testamento también
era una virgen soltera. [2] La joven podría haber sido un miembro de la familia
real, pero era más probable que fuera la "profetisa" de Isaías 8:3. Teniendo en
cuenta el flujo de la narrativa, el propio hijo de Isaías probablemente cumplió la
profecía. Los padres podrían haber dado fácilmente dos nombres al niño, sobre
todo cuando se eligieron los nombres simbólicamente como señales o portentos.

Señalando a Jesús

¿Cómo un cumplimiento histórico de la profecía en el tiempo de Isaías se


relacionan con el uso de Mateo de Isaías 7:14 en Mateo 1:23 para referirse a
Jesús?

Para responder a esta pregunta, es importante tener en cuenta el nacimiento de


un niño más en el contexto siguiente Isaías 7. Isaías 9:1-7 está ligado a las
profecías anteriores con referencia al nacimiento de un hijo, pero a diferencia de
los pasajes anteriores, la descripción del niño aquí fácil y rápidamente conduce a
una imagen de alguien que es más que humano y logrará una liberación que se
extiende mucho más allá del contexto histórico original de la guerra siro-efrainita.

De manera significativa, los traductores del Antiguo Testamento hebreo al griego


en el período Intertestamental tradujeron la palabra hebrea almah con la palabra
griega parthénos, un término mucho más específico para "virgen". Esto puede
indicar que, incluso antes del nacimiento de Jesús, los lectores judíos vieron la
profecía de Isaías 7:14 a la luz de Isaías 9:1-7 y pensaron que el nacimiento del
hijo de la promesa se cumpliría de manera sobrenatural “en este último tiempo.”
Mateo conocía claramente la profecía adicional en Isaías 9 1-7, porque después
invoca parte de este pasaje para describir la actividad de Jesús en Galilea, en
Mateo 4:15-16.
Todo esto nos lleva a interpretar la referencia de Isaías a la virgen concibiendo un
niño en términos de cumplimiento doble. La profecía tiene mucho sentido en su
contexto histórico original, pero otros factores dentro del contexto – el nombre
Emanuel y la descripción del niño en Isaías 9:6-7-también señalan en el tiempo
hasta el nacimiento de otro niño.

Jesús era la encarnación verdadera y final de Emanuel, “Dios con nosotros,” el


que iba a sentarse “en el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y
confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre.”

LA HERENCIA GENÉTICA Y LA SANGRE DE CRISTO

Del griego "monogenés" hijo único, unigénito, Juan 1:14. La cuestión de la


genética de Jesucristo es relevante para ciertos aspectos, aunque no cambia el
resultado de nuestra fe y de Su obra redentora en la Cruz. Lo que es muy
relevante es ver como Jesús dominaba la dimensión espacio-tiempo, como podía
transfigurarse (Mateo 17) a una apariencia distinta, cómo podía sanar
enfermedades genéticas (Lucas 18:35), como podía dominar las fuerzas de la
naturaleza (Marcos 4:35).

Para los cristianos bíblicos, Jesucristo es el Creador, y por lo tanto omnipotente y


omnipresente. Sabemos que quien estaba con el Padre en la Creación "Génesis
1:26", era Él. Quien aparecía a Abraham, a Moisés y a los profetas, era Él. Y quien
se hizo carne limitada para vivir entre nosotros, era Él. Quien dio Su vida porque
tenía poder para ponerla por nosotros, dar Su sangre expiatoria, morir en el
instante que Él quiso, fue Él. Quien resucito de entre los muertos, desafiando las
leyes de la genética y de la carne, era Él. Quien atravesaba las paredes y se
aparecía con el cuerpo humano que tenía las llagas y las muestras de la
crucifixión y la tortura, era Él. Quien ascendió al Cielo y quien vendrá en Su Reino,
es Él. Todas estas muestras del poder de Cristo no son posibles bajo una genética
como la nuestra, es necesario una genética divina, llamada la del unigénito del
Padre.

Jesucristo, pues tenía los 23 pares de cromosomas que están en cada una de


nuestras células, y que hacen falta para que un ser humano viva. Para que Jesús
tuviera cuerpo humano necesitaba la mitocondria que se hereda de las madres –la
del hombre no se hereda– y la cual permite al hombre seguir con vida –aunque
Dios podría haber hecho un cuerpo como el de Adán– pero decidió recibir nuestra
misma condición, Hebreos 2:14. Jesús, sin embargo además de la mitocondria de
su madre terrenal, recibiría otra mitocondria del Padre, sería el único ser humano
de la historia en recibir esta mitocondria, algo similar a la de Adán, y Jesús es
llamado el "postrer Adán". Por lo tanto tenía la mitad de los genes de Su madre
humana, y la mitad de los genes de Su Padre divino. Este hecho totalmente único,
fue lo que anunció el ángel Gabriel a María, virgen, de la tribu de Judá y de la casa
de David, desposada con un varón que se llamaba José, también de la tribu de
Judá y de la casa de David, en Nazaret, cuando le dijo: 

"¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres...


...María no temas porque has hallado gracia delante de Dios. Y ahora concebirás y
darás a luz un hijo, y llamarás su nombre "Jesús-Yahshua". Este será grande, y
será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre;
y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin. Entonces
María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón. Respondiendo el
ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá
con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de
Dios. Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez; y
este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril; porque nada hay imposible
para Dios. Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo
conforma a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia. Lucas 1:28-38.

Dos hijos nacen en este relato de forma milagrosa. El primero, el primo de Jesús,
Juan, el bautista, de su madre estéril y mayor, Dios modifica el cuerpo de Elisabet.
Y Jesucristo, de su madre virgen, donde Dios añade Su genética.
Por otra parte tenemos la sangre humana, que tiene características hereditarias
del ADN. Hay muchas especulaciones sobre el tipo de sangre de Jesús, y la
mayoría de teólogos e investigadores, además del código secreto de la Biblia
indican AB+, pero aparte de la relevancia más allá de ser un tipo común en los
judíos, como lo era María, la cuestión es que la sangre de Cristo tendría
componentes hereditarios de María y su linaje de la tribu de Judá, y otros directos
del Padre por el Espíritu sin ningún tipo de herencia genética humana. Una sangre
especial, la de Cristo, y sabemos que la Biblia enseña que en la sangre está la
vida. Pero en el caso de la Sangre de Cristo, estaba la vida humana santa y
perfecta genéticamente hablando y la vida espiritual incorruptible del Hijo de Dios.

"Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habitasen
sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los
límites de su habitación; para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando,
puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros."
Hechos 17:26-27.

A SU HIJO UNIGÉNITO...

La antropología cristiana nos aporta los conocimientos que relacionan a Jesucristo


con el hombre, y la historia del hombre desde su creación. La antropología del
unigénito y la nuestra van de la mano. Ahora bien, Dios envió a Su Hijo unigénito
"del Padre" con una genética que domina la genética humana, pues es la del
Creador del ADN, los ladrillos biológicos que Dios diseñó para nosotros, un ADN
que Adán y Eva recibieron y que cuando se rebelaron contra Dios comenzó a
deteriorarse de generación en generación. ADN que Cristo domina, corrige,
cambia, perfecciona, santifica y hace celestial para que vivamos eternamente
como Él, y con Él, para todos aquellos que Le aman, pero no para aquellos que no
quieren estar con Él. Dios nos ha dado a Su único Hijo, nos ha dado todo lo que
tenía. El corazón de Dios está por nosotros, por lo tanto no hay excusa para no
amarle, por muy duras que sean nuestras vidas, hay una nueva esperanza, una
nueva vida, otra vida, otra oportunidad, otra genética, otras circunstancias. Su
propósito y lo que Dios ha hecho es darnos una segunda oportunidad como
humanidad sin pecado, y una vez se establezca Su reino quiere que estemos ahí
para disfrutarlo. Para ello necesitamos un nuevo cuerpo con una nueva genética
inmortal, la del cuerpo resucitado y glorificado, como el de Jesucristo. ¿Quiere
usted ese nuevo cuerpo y vivir en el Reino de Dios eternamente? ¿Quiere usted
que sus seres amados también estén allí? Reciba a Jesucristo en su corazón hoy
y compártalo con sus seres amados.

Pero la conclusión final es que la genética de Jesucristo, humana y divina, ha sido


el puente para revelarnos a Dios, pues Jesús es la imagen de Dios vivo. Y "aquel
Verbo fue hecho carne y habitó entre nosotros... ...A Dios nadie le vio jamás; el
unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, Él le ha dado a conocer. Aquel de
quien decían los que: ...repentinamente apareció con el ángel una multitud de las
huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían: ¡Gloria a Dios en las alturas, y
en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres! Lucas 2:13-14.

"Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo eres tú, Yo te he
engendrado hoy, y otra vez: Yo seré a él Padre, y él me será a mí hijo? Y otra vez,
cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de
Dios. Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, y a
sus ministros llama de fuego. Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del
siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. Has amado la justicia, y aborrecido
la maldad, por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría más que a
tus compañeros. Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, y los cielos son
obra de tus manos. Ellos perecerán, mas tú permaneces; y todos ellos se
envejecerán como una vestidura, y como un vestido los envolverás, y serán
mudados; pero tú eres el mismo, y tus años no acabarán. Pues, ¿a cuál de sus
ángeles dijo Dios jamás: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos
por estrado de tus pies? ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para
servicio a favor de los que serán herederos de la salvación? Hebreos 1:5-14.

Jesucristo entró en el "kosmos" que Él creó, el cual, el hombre corrompió, pero el


cual Jesús transformará en una nueva creación perfecta. Para vivir en esa nueva
creación necesitamos un nuevo cuerpo, una nueva genética incorruptible, santa y
perfecta, la del cuerpo resucitado y glorificado, como el de Jesucristo.

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