Dimetilsulfóxido

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Dimetilsulfóxido (DMSO)

Uno de los productos más eficaces en el uso terapéutico, en conjunto con el


dióxido de cloro, es el dimetilsulfóxido (DMSO).
Sus formas de aplicación son:
• Externa: de manera tópica y aplicando el DMSO en forma de spray.
• Interna: a través de ingestión, ya que esta sustancia tiene una toxicidad muy baja
y no es considerada peligrosa.
El DMSO se extrae de la pulpa de la madera, en realidad es un disolvente sobrante
de la industria papelera.
También es una de las sustancias activas del Aloe vera y se utiliza para proteger
órganos en trasplantes, por su escasa toxicidad. Aunque siempre se debe comprobar si
el paciente padece un cuadro extraño de alergia (casos muy raros), aplicando un poco
de DMSO en el brazo, antes de decidirse a tomarlo por vía oral.
El DMSO atraviesa fácilmente la piel, las membranas mucosas y la membrana
hematoencefálica.
Los estudios realizados en 1963 revelaron que podía aliviar el dolor, reducir la
inflamación, impedir el crecimiento bacteriano, suavizar el tejido cicatrizado, mejorar
el suministro sanguíneo. Es un excelente calmante y relajante muscular y actúa como
freno contra la inflamación en el cuerpo, también como diurético.
• Fórmula: C2H6OS
• Descubierto por el ruso Aleksandr Záitsev en 1866. Uso medicinal
divulgado por el Dr. Stanley W. Jacob en 1963.
• Líquido orgánico sin color extraído como subproducto en el
procesamiento de la pulpa de la madera en la fabricación del papel que
contiene sulfuro.
• A partir 1940 se utiliza como disolvente orgánico.
• A partir de 1961 se utiliza como criopreservante (para transplantes).
• Como medicamento está autorizado para cistitis intersticial.
• Se utiliza para reducir el dolor y la inflamación.
Adicionalmente, se descubrieron mejorías en los siguientes síntomas: dolor de
esguinces, torceduras, quemaduras, artritis, en huesos fracturados los dolores eran
eliminados por completo, posee un importante factor en la regulación del sistema
inmune.
Se ha demostrado que el DMSO elimina virus y hongos, y puede ser eficaz contra
las cataratas, lesiones deportivas, esclerodermia, miastenia grave, y otras
enfermedades.
En estudios con personas con el síndrome de Down, el retardo mental se ha
disminuido considerablemente.
También se utiliza para preservar embriones humanos o como conservante de
células madre, células de la médula espinal y órganos para trasplantes.
El DMSO tiene el rango más amplio y el mayor número de acciones terapéuticas
jamás demostradas en un solo producto. También tiene la habilidad de aumentar de
forma acumulativa sus efectos, ya que actúa eliminando la enfermedad en sí misma y
no solo los síntomas.
Curiosamente, se ha observado que se requiere de poca cantidad de DMSO para
obtener resultados positivos con el paso del tiempo. Es una cualidad distinta de esta
sustancia bastante única, ya que la mayoría de los fármacos habitualmente requieren
de dosis mayores, incrementándose las dosis con el tiempo, para mantener los niveles
terapéuticos.
No existe absolutamente ninguna duda en cuanto a sus propiedades biológicas,
sumamente interesantes y muy valiosas, y se utiliza como adyuvante en muchos
productos médicos autorizados. Una de sus curiosas propiedades es que se disuelve
tanto en agua como en otros solventes orgánicos, aceites, alcoholes, acetonas, etc.
Además, es capaz de atravesar rápidamente la epidermis (barrera natural) y las
membranas celulares, y la barrera hematoencefálica del cerebro.
De momento se reconoce el uso interno por la FDA para el tratamiento de la cistitis
intersticial, que es una enfermedad crónica de la vejiga.
Habitualmente, se utiliza como transportador de sustancias a través de la piel,
pero hay que tener cuidado porque transporta tanto lo bueno como lo malo, es decir
no mezclar con sustancias nocivas o venenosas, ni guardarlo en
botellas con gotero de goma, ya que se disolvería al entrar el líquido, causando
efectos tóxicos.
En lo que se refiere al dolor, es capaz de reducirlo, debido a su efecto de
transportar agua u otras sustancias a zonas deshidratadas, y por ser un vasodilatador
que estimula la circulación, mejorando el suministro de sangre. Calma y reduce varices,
trombos, calambres, queloides, cicatrices. Lo podemos utilizar muy bien para aliviar
hematomas o eliminar el dolor de cabeza.
En relación con el sistema inmune, se ha podido observar el aumento de la
producción de glóbulos blancos y macrófagos, al mismo tiempo que se observó una
regeneración en el síndrome de intestino permeable y el atraso efectivo del cáncer
(Ayre, 1967).
Una de las curiosidades del DMSO, es que se congela a temperaturas
relativamente altas. El punto de congelación es de alrededor de los 18 °C para un
DMSO de concentración al 99-100%. En el caso que ocurra, simplemente se pone al
baño maría y se descongela.
Por esta razón se recomienda utilizar DMSO al 70%, cuyo punto de congelación es
más bajo, y además no irrita la piel, pues la irritabilidad se produce por la alta
concentración.

Precauciones:
• No se debe mezclar y aplicar el DMSO con productos tóxicos, pues
penetrarían en el organismo a través de la piel.
• No se debe guardar en botellas de cristal con gotero de goma, ya que es
un disolvente y los subproductos de esta reacción entrarían en la
solución.
• No se recomienda hacer enemas con DMSO, porque se estarían
reintroduciendo toxinas al sistema.
• El DMSO puro se congela a sólo 18 °C, y es demasiado fuerte cuando está
puro, por eso se recomienda usarlo al 70%.
• Úselo puro (sin diluir al 70%), si es para aplicación externa, o diluido en un
vaso de agua, si es para beberlo.
• Está contraindicado en los casos raros de exceso del aminoácido
Metionina en la sangre.

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