Criticas Derrama Magisterial
Criticas Derrama Magisterial
Criticas Derrama Magisterial
Durante estos últimos días en que el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del
Perú (SUTEP) ha puesto contra las cuerdas al gobierno con sus medidas de fuerza, muchos
sectores se han preguntado de dónde saca recursos para actuar este polémico gremio docente.
Para algunos críticos, la respuesta podría encontrarse en los astronómicos recursos que maneja
la Derrama Magisterial, el fondo que administra Patria Roja a través del SUTEP y que se
nutre de los aportes mensuales de cada maestro.
Cabe precisar que durante el primer gobierno de Alan García se dispuso que el Ministerio de
Educación descontara su cuota a cada maestro para la Derrama.Sin embargo, durante el
segundo gobierno aprista, a fines del 2006, el Ejecutivo optó por no seguir efectuando el
descuento -según refiere una investigación de la revista Poder-, y fue entonces que la directiva
de la institución se vio obligada a solicitar que cada maestro autorizara por escrito el
descuento de sus haberes. Desde el 2007 el aporte es voluntario.
LOS MILLONES. De acuerdo con la información que figura en su propia página web, la
Derrama Magisterial administra fondos ascendentes a S/.1,537 millones 905,493, que
corresponde a la evolución positiva de sus recursos, si se tiene en cuenta que estos eran de
S/.647 millones 889,628 en el 2004.
Gracias a estos ingentes recursos es que esa entidad, que debe funcionar como un fondo de
previsión social, ha logrado invertir en diversas áreas, como los sectores construcción y
turismo, aproximadamente desde el 2002.
Se sabe que actualmente, esta institución cuenta con seis hoteles a nivel nacional como el
Nasca Lines, en Nasca; el Mossone, en Ica; el Plaza, en Ayacucho, el Gran Hotel Tacna; el
hotel San Jerónimo, en Cusco; y El Mirador, en Moquegua.
La Derrama también posee centros recreacionales para uso exclusivo de docentes, como el
centro recreacional Sarapampa, en Asia; el de Huaychulo, en Huancayo; el de Wanakawri, en
Cusco; el de Simbal, en Trujillo; y dos más en Arequipa y Ñaña.
Según la propia Derrama, desde 1995 la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP supervisa
de manera permanente sus actividades.
Cabe precisar también que la Derrama Magisterial, según sus propios estatutos, está dirigida
por seis miembros, cuatro de ellos miembros militantes del gremio del SUTEP, un vocal en
representación del Ministerio de Educación y un vocal representante del Sindicato de
Docentes de Educación Superior del Perú (Sidesp).
Como se sabe, la cúpula del SUTEP está bajo el control del Partido Comunista del Perú,
Patria Roja desde hace varios años.
En ese sentido, cabe mencionar que Pablo Helí Ocaña Alejo, actual presidente del directorio
de la Derrama Magisterial, es un activo militante del citado partido de izquierda extrema.
Señaló que los directivos de la Derrama usarían políticamente sus recursos si es que se
adueñan de un banco, "y hay que tener en cuenta que los pedagogos no son buenos
banqueros".
Agregó que no hay que saber demasiado de la historia de la Derrama para darse cuenta que se
creó "como un botín político", porque se le entregó el control a un sindicato.
"Eso de los montos deducidos a la inmensa cantidad de maestros a nivel nacional, ¿cuánto es?
¿Cuánto de lo prestado se ha recuperado? Lo peor que puede hacer un intermediario es prestar
a quien lo necesita, en lugar de prestar a quien puede repagar", consideró
Derrama
Magisterial (Foto: GEC)
Redacción Gestión
redacciongestion@diariogestion.com.pe
Actualizado el 23/08/2021 11:44 a.m.