Castellano

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w La disputa obedece a tos iate¥eses zr+ateo tales sobre el futuro zepazto de


gaaaacias; parte de 1a palabra •pazteciJla• que Celesttna dice que 1e corr spoq-
den a Sempronio, ya que el tmto con el criado era que ú 4an a paJ“tes iguales. Ce-
lestiria pwtende desviar la polé mica sabe el futuro reparto halagando al joven
criado cozi insinuaciones exó ticas, que supone seria lo que oié s 1e iragortaba a
Scoipmnio (ya 1e kabfa dado buen +esiJ1tado con Pá rmeno).
S empraá+ se zriues tra descoa5a do y sosgecba que Celestioa, codieiosa y
avara, no tiene 1s intenció n de repartir la ganancia, por eso, indignado porque
intente engaí'íarIo, maquina terribles amenazas.

c} ¿En qu+ ocasiones y con qu+ propó sito desliza CelesLina que su ropa
está vieja y eta? (pp. 104-106) ¿Có mo describe 1a rcacció n que ttivo
Melibea c+Jand o la a1cnhi eta ic mencionó el nombre de Cali sto* (p.
1 08) Eso descripcá Ó n, ise corresponde con la verdad*
Primero alude al escaso valor de su •manto viejo y roto• (p. 104), luego
alude a su •falda rota• (p. 105); ya en la escena siguiente (p. 106) vuelve a insistir
sobre el estado de su manto, Que ticne • treinta agujerOs•); peYO cOmO CaÍisto nO
acaba de caer en las insinuaciones, se decide finalmente a pedirle directamente
un manto y una falda (p.109) antes de entregarle el cordó n de Melibea.
Celestina exagera y dramatiza las violentas reacciones de Melibea, ya que
no só lo la insultarfa y la amenazaría con denunciarla y castigarlo (lo cual serfa
cierto, aunQue eOn me nos acritttd de IO qtle ella dice), siflo qt•e, segú in la vieja, sU•
fi•1i•fa una especfie de desmayo que la la cla retorcerse y entornar los ojos como
si el nombre de Calisto hubiese provocado tal conmoció n que In joven no acer•
tase a controlarse. Por lo cual, la descripció n de Celestina só lo parcialmente se
corresponde con la verdad, el resto es pura imaginació n de la asluta vieja para
hacer valer su astucia y mé ritos y angatusar mejor al enamorado Calisto.

d) ¿Qué hace Calisto con el cordó n y qué palabras le dirige? iCó mo se


burlan Celesiina y Semprmú o del desesperado amante° (pp. HO-111)
W Calisto toma el cordó n corto si fuese una reliquia sagrada, hasta ta1 pin-
to Ilega sol ridícula locura que hnblo con él personificandoJo y acariciú ndolo cx
mo si fuese lo propia Melibea.
Celestino y Sernpronio se burlan haciéndole ver que lo que tiene en la mano
no ce má s que de un cordó n y no su propietaria, para la que debe reservar tnles
caricias.

a) iA qué achva Celesiina el aermr• de Pá rmeno (p. 114) y por qué de-
fiende la vieja el valor de la amistad (p. 115)? Una vez mfis, icon qué
cebo pretende atraer al muchacho? (pp. 115-116) jCon qué intenció n
le habla de las habilidades de su madre, que, segú n la alcahueta, era
•en nuestro oficio la primera •* (pp. I 16- 117)
W Celestina achaca la enemistad de Pfirmeno y su error en permanecer fiel a
Calisto a su jux'entud y falta de experiencia, por lo que no sabe lo que le conviene.
El énfasis que pone en alabarle la amistad tiene por finalidad conseguir que
ambos criados se lleven bien para que favorezcan su negocio y las dá divas de

Celestína se gana el favor de Pármeno sugiriéndole que le va a proporcionar


muchachas jó venes, explota, pues, la represió n eró tica del joven como ya lo ha-
bía intentado al final del acto I.
La intenció n de Celestína al •alabarle• a Pá rrneno las habilidades como he-
chicera y alcahueta de su madre es la de 4iumillarlo; se tratn de una secreta ven•
ganza por los desprecios que sugieren los palabras del criado sobre el oficio y
los detenciones a que ha sido sometida Celestina

b) ¿Por qué Celestina le alaba su •cuerpo hermoso•? 5egéin la alcahuete,


qué • pecado » no debe cometer la muchacha* (p. 120) gCó roo la per-
slade d< 1a conveniencia d« tener dos amantes* (p. 12 I ) ¿Y qué le ha-
ce pzomerer a Pá weno* (p- 122)

• O• <
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GUÍA DE LECTURA

a} ¿Por qtié se enoja Melibea y despide a Ca Iisto* (p. 4ó }


W Porque en las palabras de Cnlisio se sugiere su deseo sexual hacia Meli-
bea, lo que é sta considera una falta de respeto hacia su honor y su pudor de
doncella.
b)¿PorqutpinsaSempromoguesuamo•esd1oco(p48)yQueesum
« hereje• (pp. 48 y 50)? ¿De qué dos unodos in te n ta que su am o olvide a
Melibea* (pp. 5 I -52)
W Considera que estd loco por el despropósito 9ue nvi pone considerar su fue-
go Interior mayor que el que abrasó la ciudad de Roma. Considera que es un
hereje porque hace afirmaciones que yuri contra la fe y la devoción cristiano, y
que son por tanto blnsfemas y ime verdadero herejía, tntes como que prefiere que
su alma sea como la de los animales antes que pasar por el purgatorio, o, irnos
grave aún, que su única fe y religión es el amor a Melibea, llegando a conside-
rarla su verdadero dios (lenguaje exaltado que era frecuente en los amantes del
amor cortés en su sublimación de la amada).
Por una pone, Sempronio intenta que su amo supere su angustia haciéndole
refr con chistes de sal gruesa sobre Melibea. Por otro parte, quiere convencerlo
de la inferioridad de Melibea argumentando la bajeza de la condición femeni-
na, que sería despreciable, maniptiladora, falsa. sucia v vicioso, según Ía rradicio-
nnl misoginia clásica y cristiano-medievaI¡ pretende de ese modo que Calísto, co-
mo hombre, se considere superior y desprecie a Melibea por mujer.

e) ¿Có mo le describe •Sempronio a esa mujer? (p. 54) ¿Qué otros datos
sobre la viejo le proporciona Pá rmeno* (pp. 58-6 1) Sin embargo, icó -
mo reacciona Calisto ante las explJcaciones de sus criados y ante la
posterior llegada de la alcahuetn? (pp. 54, 58 y 63)
W S e m p ronio trozo un retrato sumamente negativo de Celestina, ya que la
considera hechicera y experta en maldades, pmxeneta y falseadora de virgini-
dades, pero capaz de despertar la Iujuria de cualquiera (p. 84). A ese retrato, Pá r-
meno apiade su f+islorial de vieja prostituta, conocida por lai en lada ta ciudad,
experta eA a1cabuetertas y el coz”rozztger doztce11as con el pretexto de vender
filos y uaguez+tos, habítidasa en cualquier tipo de medicamentos y ateiles y rre-
mas para el rostro; era, ademá s, astuta y capaz de engañ ar a cualquiera, insis-
tiendo en su cará cter de hechicera (pp. 58-61).
Sin embargo Calisto no muestra prevenció n ni rechazo nlguno, por el contra-
rio siente un gran affin por conocerle y solicitar su ayuda, hasta el ptmto de que
ruega a Dios que favorezca los pasos rinda santos de Celestina, v gule así sus pre-
tensiones pecaminosas. Má s tarde llega a considerar que la vieja tiene tanto po-
der sobre él como el propio Dios (p. 58), y se humilla, Ileno de admiració n, ante
ella como si fiaese realmente un personaje sagrado o digno de adoració n.

d} ¿Q ué íingen la nlcnhueta y Alicia? (pp. 55-S6) ¿Y qué simtda Celestina


cuando ella y Sernpron lo 11 egan a caso de Col isto• ¿Cae Pú rmeno en la
trampa* ioue le aconseja el criado a su amo* (pp. ó 2-63)
m Fingen ambas que habían echado de menos a Sempmnio, y Elicia se
muestra enojada y lo insulta hacié ndose la ofendido por el largo abandono de
su amante. Cuando el criado siente ruidos arriba, Eficia lo enga8a dicié ndole la
verdad, omositszCuessMounpxlz oparamosrzzsimsenümienio;m/n
adm, ouando éste amenaza con subir a comprobar la ntieva treta urdida por Ce-
leslina, Elicia vuelve a engaiiarlo con unos fingidos celos que lo disiiaden. Se tra-
ta, pues, de un engaiio métltiple que In hab ilidad de ambas mujeres y la ingenua
vanidad de Sem nio no le permiten a éste Sesenta-ir.
Celestina finge que siente rriucho el estado de Calisto y que está dispuesta
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a) ¿Qué le dice Melibea para demandar sus espmnzas? (p. 162) Una vez
má s, iqué motiva las palabras de la muchacha? Sin embargo, ¿qué le
confiesa al instante a Cal isto y le re vela poco despué s ? (p. 1 63)
M Melibea ce muestre de nuevo reacia a las pretensiones amorosas de Ca-
listo y rechazo su amor como en la primera entrevista
La joven insiste en mgarle que no pongn en peligro sii buena fama, pues es
precisamente ese temor a perder la honra lo que ha retenido su entrega amom•

M ver la desesperada reucció n de Calisto, Melibea aparla definitimmente sue


preocupaciones por la honra y le confiesa su amor. Incluso le revela que en ree-
tldad ha estado enamorada de él desde que lo vio por vez primera , aunque lu-
chó Inú tilmente por disimt\1ar1o durante a)gú in tiempo.
b} Aungtze 1a misió n de 1os criados es proteger a stu senor, ¿oó mo se com-
p o rtan Pá zmeno y Sempronio mientras Catisro converse con Melibea?
(pp. t ó 5-t ó ó ) En ú ”ó rtico con trasto, ¿qué opina Calisto de sus criados?
(p, t 6b) ¿Oué Wsponde Sempmnio uando su sellar le pmgun\a si han
Gemido algo o han dormido en atgú tn momento* (p. 169)
M Los criados de Calisto reaccionan como cobardes echfindose a correr al
menor indicio de peligro que creen percibir.
Cnlisto alaba ante Melibea el valor y la anda.en de sus criados dispuestos a
todo por defenderlo, opinió n que resulta grotesco por su radical contraste con la

Sempronio se ufana de un valor y unas actitudes desafiantes y aguerridas,


tanto de é l como de su compabero, que son justamente lo contrario de lo que
fue su conducta mienu•as Calisio se entrevistaba con Melibea.

c) ¿Con qué mentiras y bravatas exigen su parte del botín? (pp. 1 70-1 71)
W Sempronio exagera sus méritos y los de Pfirmeno, por tanto su derecho a
participar en los beneficios de lo que ha pagado Calisto, inventá ndose unos ficti-
cios peligros por defender a su eeñ or. lo que habría ocasionado el destrozo y la
pérdida de las armas y la armadura que ahora tendrían que pagarse ellos mis-

d) Aunque Celestina se desdice de su promesa de repartir las ganancias,


¿con qué convincentes palabras defiende su trabajo y su derec ho a la
recompensa obtenida? (p. 172) ¿Qué acaba por provocar su muerte*
W Celestina argtiye que lo que le ha dado Calisto es suyo, pues lo ha ganadn
con su trabajo y no tiene porqué compartido con los criados Ademú s trata de
engañ arlos dicié ndoles que se le Ua perdido 1 a cadena de oro, y trata de desviar
sus pretensiones ofrecié ndose a consegu Jrles otras chicas.
W ntenció n de Celcstine de acudir a la justicia a denunciar a los criados de
Calisto por amenamas y al lonamieJ4 to de mornda acaba por ezasperarlos, y espe-
clalmen te las voces que da la v•e]a para despeTlnr a lOs vecinos pldlendo auxilio y
tachfindolos de rufianes es la causa mal qtie proVoca su muerte.

a) ¿Gó rno afectan esas muertes a la honra de Cal isto? (pp. 180 y 187) Sin
embargo, ¿qué es lo finico que en verdad le importe al joven galá n y
qué decisió n torna? (pp. 181 y 189)
W Chiste lamenta superficialrnente la pé rdida de sus criados, pero sJn de-
masiada aflicció n (•aJnoru o en otro tiempo habian de pagarlo• ) y, en contraste
con sus opiniones an ieriores, considera que Celestina era una mala mujer y pagó
por sus delitos, interesadas inculpaciones para tranqcilizar su mala conciencia
El egoísmo del caballero se manifiesta al mostrarnos que su ü n4ca preocupa-
ció n estrÍ ba en eÍ hecho de que estas muertes puedan interferir en sus planes

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amorosos inmediatos, por ello toma In decisión de coger como acompañantes a
sus criados de caballerizn, Sosia y Tristíín, y acudir a la cita de Melibea como si
nada hubiese pasado.
b} ¿Oné op*nan lstórt ySosia de los amores de su amo* (p. 184)
W Los jó venes criados, consideran los amores de su amo como causa de la
muerte de sus cornpafierti; por otra parte, espeeialment e Tristfin, ve en la iridife-
rencia y la cgoísta actitud de Cá listo una muestra del desprecio y la ingratitud
que los señ ores sienten por sus criados, y en sus palabras subíace un claro re-
sentimiento social (•¡Déjate morir sirviendo a personas ruines!•), que ya había
aparecido en Areú sa.

c) iDe qué se lamenta arriargamente Mclibm* (pp. 184-186) No obstante,


cuando en el acto XVE se encem de que sus padres planean casar1a,
¿manifiesta la misma preocupación por eMos* (pp. 199-200) ;Q\té está
dispuesta a hacer por Calisto y por que nadie la prive de sus • place-

r Melibea se lwnenta de la pérdida de su virginidad. especial mente porque


eso siipone una deshonra para sus padres, ya que se trata de una joven soltera, y
la fnI ta de virginidad era un impedimento para un matrimonio de conveniencia.
Sin embargo, cuando escucha los planes de sus padres para casaría se reaflr-
rrta en sus deseo de vivñ- libt-etriente el amor de Calisto, sin someterse a nñigún
matrimonio planeado y antes prefiere cer • buena amante que mía casada•.
En sr a bsolr ta en rrega al amor lamenta no haberse entregado a Calisto an-
tes, haciendo de su pasión amorosa un destino y una decision
inquehrantab4e,

filiH y cuHqJer interés de honor famil iar (p. 200). Esta su blimacJón de la pa-
sión amoms a y la fidelida d a ella hasta la mueVt e contrHst a cOn las relaeiones
amorosas que mantienen los criados con las ehIcas de CeÍestJ na.

d} En dramá tJ co con kms te con los sentimicntos de M el í bea, ¿qué piensa


n‹sa des« hija* (p. 2s)
W Las palabras de Alisa reflejan la ceguera de una madre ingenua, absolu-
tamente enfadada, pues cree que su hija es una criatura inocente y virginal,
que ni siquiera conoce las relaciones sexuales que implica el matrimonio . La
rriadre considera innecesario, dado lu inocencia de su hija, la posibilidad de pro-
ponerle la elección del hombre que más le guste pura esposo, como sugiere Ple-
berio.

a) ¿De qué se queja la rariacra? (p. 192) j Có mo contrasta la act itud de


Areusa ante Centurio con la que hablo mostrado ante Pfirmeno en el
acto VII*
Are ñsa ri íle a su ch filo o andante y se qtieja porque este dilapida en el jue-

gue le ordena.
Esta Areúsa se nos muestra lenguaraz y llena de genio y desparpajo, pro.
pios de una ramera experimentada en la vida y en el tralo rufianesco, muy Iejos,
pues, de aquella timorata y pudornsa joven a 1s que prácticamente tiene que
obligar Celesiina a acostarse con Pfirm e n o. Por tanto, debemos interpretar
aquella actitud del aclo VL1 como una farsesca y estudiada actitud pudibunda de
la astuto ramera para hacer valer sus favores; o bien, también cabe interpreiarla
como una incoherencia sicológica del personaje, atribuible n1 despisie del autor
que nñadió esle auto (como los otros cuatro más que conforman el Tratado de
Centurio de la •Trngicomedia •) varios años después de escrito la primera •Come-
dia de Calisto y Me1ibea•.
b) ¿Qué sentimientos expresa Elicia por Celestina y a quiénes considera
en lpnbles de la muerte de la a}cahueta y los criados? (p. 194)
M Elicia considera a Celestina como una verdadera madre y su tintas pro•
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¿pam qué me tocas la camisa?. . .•), íncl\‹so de msgá rsela 1leyado por la pasió n.
Má s directamente críticas son las palabras la empeadas por Cristo al referirse a
quitar las plumas al ave antes de comérselag en ellas la ideaJi zació n y el liinsmo
amoroso desaparecen para dar peso a la grnserfa del amante que só lo contempla
a su amada cOmO ObjetO eTÓ ticO. En cl mi smO seYt tidO, aunque de forma menos
b u rda, situan la comparació n del goce amoroso como el «mejor zumo de
frutas•. O con el comer y cl bmbmÜ , en tOdO cVsO la ObjctivacJ ó n efotica del cuerpo
de Meli bea está ya lejos de 1 a ideal izació n sub1 imadora de que hac fa gal a el
annette cortés, •cl dechado de la cortes fa y de la buena crianza» (como le repro-
cha M eliÓ Va). LOs c0mentariOs de la criada excitada QOr la eseeBa y II que Oye
a IOs arrtantes hace mas intensa la carga erotÍea del pasaje.

c} iCó mo se comporta Calisto cuar do cree que lx vida de su criado corre


peligro? (p. 218) iDe qué modo contraste em meti Ind con la que mos-
trd en ei acho Xiil? (p. 181)
N CaJisto ante la algazam üe la calle, abandona los brazos de s+i am nce y se
prec•p•ta en ayuda de su creado, son paTafse siQu teTa a vestlTse lH armad•1ra
Esta actitud dcl cahaHcro contrasta vivarnente con su egoísmo y cobardía
anteriores, que lo habla llevado a inhá birse ante la rriuerte de Pá rmeno y Sem-
pronto. Parece que el autor quisiera dignifÍcar al personaje antes de hacerlo rno-

g} AI prodncime In mueve de Ca1isto. ¿qué es lo qiJe TÚ stfin fomente


mú s? ( . 2 19-220) ¿Y Melibea * (pp. 219-220)
Tristá n lamenta principaInJente las condiciones dmmáticas de ta muez te
de su seRoV (eon la eabezn eompletarnent e destrozada) , y el hecho de que, por
ser inesperada y repentina, Haya utueUo sin confesió n, lo que suponía monr en

Los lamentaciones de Melibea iienen un cará cter terriblemente egoísta, pues


llora la p é rdida del eaballem en cuanto era fuente de placer, dicho y alegría
personales, incluso su planto culmina con un terrible clfman que resume su sen-
tirriiento mfis íntimo •iCó mo no gocé má s del gozo? •.

¿por qué le pone en practica? (pp. 223-224)


W Melibea es consciente de las graves consecuenclas que su muerte supon-
drá para sus padres, incluso tratn de disculpar su decisió n con ejemplos de la
antigtiedad. Sin embargo explica su suicidio como una fuerza fatal que la priva
de libertad de decisió n mutando sus sentidos y por tanto contra la que «nada
puedo hacer•. Resulta, pues, extraída esta combinació n de reflexió n racional y de
determinismo fatalista que anula esa misma razó n (•me priva de los sentidos•).

fl ¿Ou+ visión de! 'mundo* oRece PJeberio* (pp. 228-229) ¿A gué o a


quién atribuye la muerte óe s++ hija y por quémotivo? (pp. 229-230)
¿Oué relsció n guarda su queja con la intencion que guió a Rojas para
com@orter su obm? (p. 37)
• Pleberio nos ofrece una visió n del mundo absolutamente pesimista, como
un lugar de horror y desgracias en el que el horribre, víctima de la arbitrarie-
dad del destino y la fortuna, se afana por una felicidad engañ osa como un espe-
jismo, ineluso cn•ee en I a QOsibilidad de librarse dc su ira. PerO eOn lOs aÑ Os y la
experiencia comprende lo inutil de 1s pretensió n humana, pues el mundo es s6-
lo dolor y angustia (•un laberinto de errores, un desierto espantoso, una morada
de fieras. .. •) y nada bueno puede esperarse de é l. En esta maldició n se recoge la
tradició n cristiana y plató niea (efireel, valle de lá grimas, etc.) sobre el mundo y el
destino humano, pero se añ ade ademá s la imposibilidad de la ínsolidaridad so-
cial, la radical soledad del hombre (•DesconsoIado viejo, ¡qué solo estoyl •). Es
seguramente la mfis desolada y nihilista visió n de la vida humana y del mundo de
toda la literatura.
El anciano atribuye la muerte de su hija al amor, esa fuerza fatal que des-
truye a sus adeptos; pero ademá s considera que el motivo de ese trá gica muerte
reside en la venganza personal del amor, pues en su juventud estuvo tambié n
p reso de su fuerza, penn con los aiios consiguió librarse, saliendo incó lume de
aquella servidumbre; por eso interpreta que el amor se venga ahora de é l en la
persona de su hija.

• O• <
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lectora, ademfis reconoce su sabiduría , su experiencia y sus cualidades de traba-


jadora; aunque el planto supone una evidente exageración de las virtudes de alca-
huete, no cabe duda de que la joven sentía verdadero afecto hacia la vieja proxe•

La ramera considera culpables de su desgracia a Calisto y Melibea, a pesar


de que ellos son realmente ajenos a los tratos y desavcnencias entre la vieja y los
criados. Esta interpretación tergiversada de la cu lpa oculta en real idad una ani-
madversión y resentimiento social contra los señores, especialmente contrn Meli-
ben ue se habla hecho atente en el auto IX

c} i Oué planea Areílsa parn vengarse de Calisto y Melibea* (pp. 1P4 y


196)

sai amante el rufnfin Centurío (de euya cobardfa ella no pareec c0teVada) matc a

d)¿Dr icmodovonsgu«at«rs«aSosiz?(pp.£03-204)¿Agufp‹xso
nae+erecuerdan1osmainsde1ahermozaramera°¿ ieinformscón
lesonsacaMmuchacho°(p.206)
W /Lreúsa se atrae aí Ingenuo Sosia fia4agéadolo y haciéndole crer que está
enamorada de él.
La astucia y mañas de Awúsa mcuezdan a las de su maesoa CelesMa de la
que apareCC cDTnO desfaCaÓa aÁum na.

gu«CaüsoenAeoe)hu«üod«MsKbea
e} ¿Oué dice estar dispuesto a hacer por Areúsa * (p. 208) ioué c fraal-
canza el repertorio de muertes que le puede ofreoer? (p. 210) En iróni-
co contraste, ¿qué resuelve hncer? (p. 211)
W Cen ttiño se ofrece a dar muerte o a muttlar a on hombre. incluso a des-
BJÉar a tres juntos.0 a deÁot ar Áa Cam a u0a taujer tiVal; ó0BÉmente se Oóece

Centurio dice tener on wpertoÚo de setecier+tas setenta clases de o+uerte


El han Razón Cen tubo, qne Tabla insJsú do en matar a CaI isto, muestra
su
cobakótH hACieDÓO qMe OA0s ZufiBne6 de su aÚsmo geÁAje vayatt A ÑaCer ruido
SÓIO para darse un susto a los Criados de CaJÉstO.

a) iA qué atribuye Tristán el ofrecimiento de Areúsa * (pp. 213-214)


W El Joven Trislétn, más astuto e inteligente que su compaíiero comprende
qvie los ofrecimientos de Areúsa mu falsos y lo que pretendía, por envidia hacia
Melibea. era sonsacarle al estúpido Soeisa información gama vengarse de ella y
de calisto.

b) ¿Q1té elementos del ambiente y qué expresiones verbales dotan de un


refinado lirismo a las escenas 11 y m? (pp. 214-216) iQué situaciones y
Qué palabras de IOs pe rsonajes acent úan la sensttaÍidad } el efotismo
de la escena? (pp. 21 6-2 1 8)
W El canto de Lucrecia y Melibea es una canción de espera amorosa y alude
a la noche, al denso bosca]e del huerto y a las aves (creación de un •Locus amo-
enus• identlficndo como •locus amoris•), como contexto idóneo parn el encuen-
tm entre los amames; este contexto y la propia canción poética que cantan am-
bas mujeres (poema que gIosa un cantarcillo tradicional) crean un delicado am•
biente lfico. Porotrn parte, el margen de la canción, Melibea, en la escena m
comple tn el ctiadm de la sensualidad paisajfstica y el lirismo del encuentro amo-
mso aludiendo el ruido de las aguas de la cercana fuente y del viento suave en-
tre los árboles , asf como a las sombras que velarán el secreto de sus amores
Expresiones de matiz claramente sensual son las referencias de falsa protes-
ta de Melibea ante hs atrevidas caricias de Calisto intentando qiiitarIe la ropa
(•Deja mi ropa en su si rio, y si qu ieres saber si el vestido es de sedn o de lane,

• O• <
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Una de las intenciones de la obra, como confiesa el autor en el prólogo-carta


a un amigo, es dar una lección a los jóvenes enamorados (como parece serlo el
amigo al que se dirige), que sirva de utilidad y aviso a quienes se dejan Ilevar In
corriente por la íiierza del nmor, para que resisten sus usechanzas, pues sus hie-
gos acarrear sufrimiento y con frecuencia acaban Lamentablemente. En esta cor-
ta late, pues, el mismo sentido de condena que expresa Pleberio frente al amor.
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au0que en seatióos opuestos, pero sin duda et que kace CaJTsto esté vés cezcA
óe la realidad. V esto es porque el azaaate, aunQue ideaJice a su araada, basa
su admiracíóa en una conteraplación objetiva, ya gue parte de 1a realidad. En
cambio, el zeu“ato grotesco de las dos zauje¥es sólo pIaso+a elezaeqtos puza-
o+eqte subjetivos ez+ tos que et resezttJznieüto o Ta envidia les Jeva a caricatur t-
zar“ Ta veróad.

A);PorqutAreúsazacaz1asseiomñ(p.141)
W En las pala bras de Areíisa late un verdades resentimiento eocial y una
conciencia de igualdad que resulta muy moderna. Toda su crítica parece ema-
nada de la propia experiencia y se centra en la soberbia y el mal trato que las se-
ñ oms dan a las criadas, a las que explotan y de las que desconHan, de mvnera
que en eualquier momento las despiden sin la recompensa que se les debfa por

a) iQu é reconoce abiert nmente la joven y de qué pare ce arrepentirse?


;Quñsrv«obhydaa‹ñsmuaryporqut?(pp.145146)
m Melibea mconoce que está perdidarriente enamorada de Calá sto y se
arrepiente de no haberlo reconocido ante Celestina en la primera visita y haber
dado a entender que detestnba toda propuesta amomsa, de modo que eso pudie-
ra desviar el amor de Calisto hacia ella.
Melibea se ve obligada a ocultar su pasió n amorosa. ya que no estaba bien
visto en la época que una mujer cediera en un principio a las pretensiones del
enamorado.
b) Sin embargo, ¿qué le preocupa del remedio que Celcstina puedo pro-
ponerte? (p. 147) ¿En qué contradicció n incwe de inmediato* ¿A qué
atribuyes su vacilante actitud* (pp. 147-148) iQué acaba confesfindole
a la alcahueta (pp. I 50-ISI ) y a Lucrecia (p. 15 4 )*
W Melibea teme que la cura que le puede proponer Celeslina dafne su honra,
esto es su fnma y su buen nombre en la sociedad.
Sin embargo, cuando Celestina le sugiere que ante tales prevenciones no
puede ofrecerle cura, Melibea se contradice y le asegura que nada objetarB a sus

Esta actitud contradictoria de la joven obedece a In lucha interior que man-


tiene entre ceder a su pasión amoroso o renunciar a el1a para salvar su prestigio
social, an honra.
Melibea acaba coníesúndole abiertamente a Celestina su pas ión amomsa
hacia Callsto, tan violenta que le ha hecho perder todo pudor y vergilenza, así

A Lencia, q\ze ha astsLido a s\\ confesión amorosa y a la concesión de una


cita, te pide que guarde el eeczeto de sus amorfoa
c) Al ver salir a la alcahuete, ¿qué le aconseja Alisa a su hija? ¿Có mo re-
accionan nnte sus palabras Melibea y Lucreeia? (p. 152)
W AJisa aconseja a su hija que no tenga tratos con Celestina ni se He de ella,
ya que tiene mala fama de alcahueta y puede dañar la honra familiar si añade

Meli bea muestra una aeli tud hipócrita y simula ante su madre que estaba
ignorante de las pretensiones o peligros que su ponía la presencia de Celestina.
La criada comen la para sí la ingenuidad de la madre que trata de poner reme-
dio cuando ya es demasiado tarde
d) i Oué amena za prefiere lem pronto al ver marchar a la vieja* (p. 1 57)
W Sempronio muestra por primera vez su natural violento y ante el temor de
que Ía vieja se rú egue a repartir los ganancias, segú n lo acordado, prefiere una

• O• <
16:21

El pCcado de Ÿa mTtchac hc As no erttregarse a quien está eI+azUoraÓo de eŸŸa


y no ger mitir que his ŸMten Nos Óecr+ăs óe Nos ÓDrtes o g tacias que be h a Óaóo

La persuade de tener dos amanles con la idea del pzovecho a benefîcio que
óepara la muttipficacióo óe posibiJidades, pues mantenet” la ÏiJelidaü a r+na sol a
persona es perder opo r1uni óad ¢le mayor ganancia y placer y prcpio de una per-
sona ingcnria c incxpcrla.
Quc maatenga su amistaó com 'get prooio y gue no eütorpezca o ioterfieza
en los rtegocios que se lraen enlre raar+os Para ezpTotar a Calisto.

c) ¿Qfté aclitud manîficsŁa A1icia ante 1a vi¢la* (p. J 25)


W Elicia mantiene un concepto de la vida muy frecuente en eI Renacimienlo,
eI tópico clúsico del •ca pe diem•, •vivir eI dfa• o aprovechar ct memento pre-
sente para disfrutarlo sin pensar en ct future.

d} ¿Cuúl es, segčin los criados, el poõer dc1 am or* fp. 128) ¿Oué contra-
dicciones le echa en care Sempmnio a Pfirmeno* (pp. 128-129)
W El poder del annoy- cont lcva la locura, incInso se sprecJ a un sentido de
drama ismo tĞgico, como r¢I1cjan 1 as pale bms be ScnJpronio •¿Ya todos aJJJe-
mas* E1 m\ í mo se ma a peJ del •.
Sompron1o rccrímina a PńJjjJeno la incoherencia de su act bud, p los m1cn-
trcs dosa conscja a Cat is fo q+4c se clcje atascmrporcT amor de M c I ibca, ćl
mJsJno sÆ ha bMscad0 Tuna angantC.

c) Pese a tolo. ¢crees que Sem pronJo aeonscja mol a sJ i amo* (pp. 132-
133) ¿Oué piensan Pàrmeno y Sernpronio de Gelestina* (p. 135)
Se m pcrxiio acoaseja acertadamente a su amo, ya que le pióe modera-
cioß pacier+cia, pbtC? no 9Ñ m Tonable dRsRar q LtR MeliÑea caiga ren¢lida be ION°-
ma inmcdiata.
Los criaclos picnsan q etc Celts fina es una facsante, pues va a la igfesta a Ra-
cer sus üegocios de lercerias sinJrdanJo gate va a rezar.

Ę gQué i elacîón tîeriern todos esos terraas ents-e sí y con la obra°


W Todos estos temas implican ya un nuevo concepto del mundo y de la vida
humana plenamente renacentistn, pero con algtinos elementos de conexión con
la literature bajomedieval, tales como la importancla de la •fortuna• como g1Jín
determinnnte v at-bitraria del mundo y õe los hombres, y la critics a la corrup-
ciön y lascivia clerical. En el fondo, to que late rras todas estas claves es un pen-
samiento hedonista y escépfico en ct cual ct hombre y eI placer inmedia to en
esta vida son eI eje que determina toda actuación y toda moral, en definitive,
lina filosofïa õe la vida propia del nuevo humanismo. Esas claves morales õe la
sociedad son has que estún patentes en tod a la obra: cI gozo del cuerpo, sea en la
pasión amorosa o en la buena vida, e1 a fin de riqueza y el egofsmo insolidario
de quien piensa en sí mismo ante todo; eI sentimiento religioso. la ética altruista,
Ja cariõaõ cristiana, etc. estún pràciicamente excJuidos de la actuación de sus

g) i Cómo describen EJ iciu v AreIsa a Melibe a* (p. 1 38) jDe qi ié modo


contrnsta esa descrîpción con la que CaJisto hubía hecho de str arnuda•
(pp. 52-53) gCurd de elJas crees qtie se njtista a la verdad° gPor qué*
W Lnsrunner-as describes a MeIibea como una mujer vulgar. poco limpia, án-
em so fea y con eseasa gracia en eI cuerpo, ya que incliiso tie ne los pec hos caí-
dos; su hermosura es simple apariencia y ee sostîene tjnicamente en los ricos
vestidos y en los muchos cosméticos que utiliza , gracia s, en definitive, a su ri-
qi ieza y no a sus ct ialidades na tJ irales.
La descripción qi Je hacen ambas ml ijcres contrasts I-adica1mcntc con 1 a d e
Calisto, q\?e ideaÍiZa sus rBsgos físicos, aunque se hVsV en ÜsQeetos Teales, así se
nos dice que es riShia , que tiene los ojos verdes, se nos in Korma de detalles muy
precisos como has ccjas y pestaÌias, la born, Nos dientes, Nos lab ios, eJ óvaJo de la
cara, ct color del cti tis, incl uso lo forms de los pechos, las manos y las 1 fits, lo
qiJc eqn › ivrHe a todo Io que poclría aprcei arse a la ifista en una mujcr dc In ćpoea,
qi Je 1levabo crisi todo eI cuerpo c Jbierto (p. 53).
16:21

m Celestina, at enfatizar los males aparejados a la vejez (p. 92-93), estfi, indi-
mc1amen‹eaniomoúoa1ajoveoague‹ñsbnuieygoeede1ajuveo1uĄyagueñs-

pe diem• y el •CoIlige, virgo, rosas• (glosado por los poetas Marinos Horacio y An-
sonio, respectivamente), y que era ya un lugar comû n a principios del
Renacimiento. Con ello, In alcahueta intents crear un clima propicio para con•
veneer a Melibea de lo eonvemnte de gozar del amor.
Dando im paso más en la insinuneiõ n de su propõ sito, Celestina le habla de
que Dios prerrfia la caridad para con los enfermos y que si ha dotado a Melibea
de tanta beİleza que con ella puede aliviar eI sufrimiento de un erifermo, resul-
tarfa una crueldad no utilizarla corrio medicine caritativa, pues In pmpia natu-
raleza ofrece ejemplos de desprendimiento y caridad en los animates, y el hom-
bre no pueõe ser menos. El propó sito es, indudablemente, p rœlisponerla para
que se avenga aI ømor de Calisto. eurä ndolo asf de en •enfermedad de ømor•.
d j Segú n Melibea, ¿qué consecuencias traería pure eLa y para su farrñ lia
acceder a 1os deseos del «loco saltaparedes» ? (p. 95) j Cõ mo consigue
Celestina salir del grave aprieto en que se ha metido* iC on qué con-
vincentes argumentos, de índole persons y socJal, defiende la alcahce-
ta si1 rnisiõ n y su trabajo* (p. 9ò )
W Melìbea comprende que su eonsentimîento en tales amoríos supondrín la
deshonra personal de su persona como doncella, at perder la honestidad, pero
también la de su familia, que quedarla dífamada en su buen nombre.
Celestina sale del aprieto con una llamada al demonic para que la socorra
(•Eh, hermano...•). Penn, enseguîda, es su ingenîo eI que desvla el enfado de Me-
Iíbea haciéndole creer que ha habido un malentendido, que no le solicits un fa-
vor amoroso, sáno una reliquia para curar eI dole- de mueløs
Celestina defiende la inocencia de su persona hariéndose la indefensa y la ex-
plotada por los rices: Prîrnero aI sugerìr que ella es sólo la mensajera, y que ac-
tfie sin mala intención y por lástima ante el dolor de Calisto, pues su ohcio es
eervțr a los demás, incluso cargar con Its culpas, pero está resignada y acostum•
brøda a recibir de los poderosos ofensøs que no mercy
e} Pese a la inequfvoca intención de Ins palabrns de Celestina. iqué le res-
ponds y le ofreee Member? iQué pal øbrøz åe la joven revelan que ha
eritendió a la q++e se 1e ptde y que cstă dispt+csta a todo? (pp. 97-99)
W Melibea se muestra ahorø humilde y eomplaciente, incltiso muestrn sii
pesar por cl trato dado a la vieja; parece que In joven ha cambiado radicalmente,
o mäs bien ha encontrado un pmtexto parø dejarße seducir sin que ello supon-
ga en dlreeta y manifiesta voluntad de entrega, que irla contra las convenciones
de la honestidad.
La joven le enŒega el eordó n y la mønda volver aI dia sigulente parø dane
la oraeló n soLcitada, pero pone interés en que no se entere su madre y en que no
le cuente a Calisto str rechazo y enfado inicial, Jo que pone de manifiesto que no
se trota de trna obra caritanva, sino que esconde otras intenciones, y ask to com-
prende la criada. Las pHabras finales de la joven (• ni tu mensaje roe ha traído
todo eI provecho que espero ni de tu ida rrie puede venir dano•) dejan meridia-
namente cJaro que es consciente de la intencionalJdad de ese mensaje y que está
dispuestn a iniciar esa relació n. (p. 99).

a) iA qué atrîbuye la nlcahueta el éxito de su misión ? (p. 100)


W CeÏestina atribuye su ćxìto a varias causas: a su astucia gara caJmar la ím
de la joven, at diabto que iatercede eq su Favor. especialmcnte a1 alejar a 1a ma-
due, a Ine objetos en que trò eI hechțzo o que sitvicroŸ para hacer eÍ misrno,
tales eomo el accá te de culebra o eÍ Íiilado.

b) iCiiúl es lrr catisa de su primern dJspu ta con Sempronio? jCõmo inten-


ta la vieja enganlsar aI criado* (p. 101) ¿Oué opina Sempronio de la aI-
eehuetn? (p. 102)

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16:20

terminaba al air ante nnulmndo su Tazon, no le pcrmitfa aetuar con Íibetlad, y so-
lo se curaba con el logro de lo desVmdo (o con el si4icidio, como Ocurría eon fry-

Según Pármeno, hacer participe a Celestina de sus secretos supondrá que


perdveuhbeMdysuvo1uoMd,yaquelabejaooespersonade6arypobrd
mjenrlo y manipularlo. (p. 75).
Párrneno. despachado por el trato recibido (p.77-78), decide pasarse al ban-
óo de Sempronio y Celestúta. esto es, commpezse gara explotar la gasióü de
au aaaa, ya que iotezttar ser bonmóo colt su se6or y advertú“le óel peTigzo sólo
le acarrea disgustos y desprecios (se confirma así lo que ya le habla advertido
Celesiina al criticarle su «necia Iea1tad• y al hablarle sobre el traio que dan a sus
criados •los seiiores de este tiempos, p. 67).
c) iPor qué la alcahuete estd ian segura de que logrará convencer a Meli-
ben ? En su op4nJ ó n, icó mo se comportan las mujeres cuando son re-
queridas de amores? (pp. 82-83) ¿Con qué propó sito conjuro a Plutón
ypamquñnecesuaeIhüado2(p.85)
C slna 4 rad lo aMlbapo dos osa,po uehay
rodepormedto, on sos lo a odo,ypor óen a6soua e n ue p
- n«nüapwaamansa absdonxlnpordumsyxs•m« han
La día N«n‹ un» opnión vbH«ad‹ hs don«v1vs, papa d«)ae a: M
pñovtpoiodas)asjévezñwmueoan«sqñ•asypudomsaspe‹o v«zque

pues sc muestran mucÍlo mfis apasionadas y Mensuales que los hombres; por otra

zarse por romper esa dificu lt0d J niciaÍ, QeTo luego todo vendrá rodado.
Solicita la ayuda de Plutón, dios de los infiernos (encarnación clásica del de-
monio cristiano) para que le ayude a vencer la resistencia de Melihe¢ penetran-
do en su pecho a través del hilado. Así, este hilo q ue vende a Melihea cumple un
doble fin, es el pretexto para entraron su casa y es el medio de que el demonio
entre en el corazón de la joven haciéndolo perder su honestidad (p. 84-85).

a) iA qué peligros teme exponerse la viejo si se descubre su ilícito propó-


si to? (p. 86) ioué severas crfríeas le esperan si no lleva a cabo el traba-
jo que se le ha encomendado? (p. 86) Sin emlmrgo, ¿qué le anima a se-
guir adelante° (pp. 87-88)
M Celestina teme ser descubierta y condenada a los posibles castigos a que
en la época eran somefides las mujeres que acababan como alcahuetas: escarnio

generalmente en la hoguera, si el delito era considemdo grave o tenfa re l a c i ó n


con la hechicería,
Le resulta Jmposible, sin embargo, desistir por miedo de su empresa, pues
el lo le supondría el descré dito ante Sempronio, la ira de Calieto, que se consJde-
rarñ estafado y la acusará de falsa y aJcalnueta.
Celestina se da á nimos y se sJente a1Jviada porque interpreta favorablemente,
segú n }a superstició n popular, varios indieios o agü eros que par ella son incues-
tioriables: el tiQO de petsomas que ettcHtt H•a, las pMabwas que escucha, el NO
haberse troQemado, el que la saluden, el que no le ladren los perros ni se en-

ticion, se anima al encontraz'ae a la Cada de Melibeq en la puerta, lo que le fi


cÍlit art la entrada en Ía casa.

b) ¿A qué aó-ibuye Celescina esa íncompwns*ble decisión de Atisa? (p. 92)


W Celestina interpreta las facilidades que encuentra para quedarse a solas
con Melibea como intervención del diablo. que está actuando ya en su favor.
c} ¿Por qué crees que la vieja empieza por lamentarse de Ta vejez e incita
a la joven a gozar de •su florida juventud•? (p. 92) ¿Qué le dice a Meli-
bea sobre la belleza y la compasión, y con qué propósito? (pp. 94-95)

• O• <
sLf amO, 60s eche que Á a vieja obra asfjam Ñ aCeZ6e vader ante e3 jOver+ enamO-
faÓ O, pLf9s sabe qbte Calisfo la CStá 9scuChandD at Otr0 lado dC la pu9tta. P0r esD
QÁ Criad0 le WC0mi9nÓ a a sff amD, aUrTque 1nú f Í|mentC, que sCa dCsc0nGaÓ O y nO

e) ioué argurrienta sobre la necesidad de amar y sus consecue netas, y


hacia donde deriva sus palabms* (p. 65) Cuando descubre quién es en
realidad el muchacho, ¿có mo explota esa circunstancia? (pp. ó 6-67)
¿Qué ra.zones aduce para. convencer a Pfirmeno de la inutilidad de ser
fiel a su señ or, y qué le propone a cambio? (pp. 67 y 70) iCó mo consi-

W Los argumentos de Celestina intentan convecer a PBrmeno de los bonda•


des del amor y de lo natural y cristiano de esa atracción que siente Calisto y todo
lo creado, pues asf lo dispuso el pmpio Dios. Penn la verdadera intención es hale-
gar la reprimida sexualidad del joven Párrneno, para ponerlo de su part e y
apnrtarlo de la ciega fidelidad u su amo.
Celesrina explota la antigua relación con Pfirmeno intentando atraérselo alu-
dlendo a sii antigua convivencia y a la fntima relación que tuvo con sus padres.
En seguida va a utilizar diversos recursos para convencerlo: Le habla de una he-
rencia de su padre que ella conserva bajo juramento, se muestra maternal y pro-
tectora aconsejándole que mire por su provecho y desconfle de su amo, ya que
los señores nunca agradecer los servíelos recibidos y no merecen tma fidelidad
ciega como la que muestrn Pármeno; le aconseja la amistad con Sempronio, ya
que tienen intereses comunes y son de la mismo clase, por tanto no debe sentir
remordimientos por aprovecharse de las actuales circunstancias; por último, le
promete entregarle a Areúsa, de la que el joven onda enamorado (p. 67-70). La
promesa que resulta más definitiva para ganarse a Púrrneno es, sin duda, la de
conseguirle el amor de Aretisa, pues la vieja ha inttiido desde el principio que la
represión erótica del muchacho era su punto más débil, y por eso es el que va a
explotar, pintúndole las con fidencias amorosas que tanto gvistan airear los ami-

a) iCon qué propó si to diserta sobre la honra y la generosidad? (p. 73) El

[sslrnegooo]ha«mpszadobicn,asebaémicLomr]or•¿PozQuepo-
demosdecvguesusp1bmsconsiúyenuna«ona ca?
W La finalidad del discurso de Sempronio es provocar 1s prodigalidad de su
amo para con Celestina, que es trabajar en su pTopÍo Qro\echo, ya que ha
llegado a un acuerdo con la alcahuete para repartirse los beneficios obtenídos en
este ne-

Aunque inconscientemente, 1s premonició n optimista del criado constituye


una verdadera íronfa, pues preludia todo lo contrario de lo que va a ocurrir-, en
efecto, el final serfi una tragedia en la que se verfin envueltos todos los participan-
tes en este enredo amoroso.

•mccJ iador• tp. 75) y que se mal «no admite conmjos• (p. 76)3 Según
P á rmeno, ¿qué graves consecuencias le acarrearán a Calisto el amor
del que es víctima y su recurso a una « trotaconventos•? (p. 75) iQué
determinación acaba adoptando Pármeno y por qué razón• (p. 78)
W La posibilidad de establecer una relació n amorosa era muy diHcil en la
época, ya que las damas jó venes no podían salir solas a la calle, ni menos dialo-
gar con hombres, por tanto, era prec3eo recurrir a un intermediario, como ase-
gura Calisto, pues la diferencia social a que se alude no se refiere aquf a diferen•
cias econó micas sino a la diferencia en la libertad de actuació n entre hombres
y mujeres. En cuanto a que su ma1 no admite consejos, alude a que se pensaba
en la época que el arrebato o pasió n amorosa ero una especie de locura que de-

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