El Sistema Musculoesquelético
El Sistema Musculoesquelético
El Sistema Musculoesquelético
El sistema esquelético-muscular está formado por la unión de los huesos, las articulaciones y los
músculos, constituyendo en conjunto el elemento de sostén, protección y movimiento del cuerpo
humano, con características anatómicas adaptadas a las funciones que desempeña.
El músculo esquelético es el protagonista principal que genera el movimiento humano, por eso es
de vital importancia durante el ejercicio, el entrenamiento y las actividades deportivas.
Introducción
Introducción
El Aparato Locomotor humano está formado por un conjunto de estructuras que le dan al
organismo la capacidad de movimiento. Este aparato ha ido evolucionando con la especie, hasta
adquirir la llamada posición bípeda, en la que sólo se utilizan las extremidades inferiores para la
marcha.
Simultáneamente, los miembros superiores han ido adquiriendo movimientos cada vez más
precisos y delicados, dejando de ser miembros destinados a la marcha, para convertirse en
miembros de prehensión.
El Aparato Locomotor permite, por tanto, hacer cualquier tipo de movimiento, sea prehensil, o
de desplazamiento. Este Aparato está constituido por:
Sistema óseo.
Sistema muscular.
Articulaciones.
El esqueleto ofrece a los músculos las palancas óseas que permiten a estos transmitir a distancia
el efecto de las contracciones musculares.
Huesos
Los huesos representan el armazón del cuerpo humano, el esqueleto. Están rodeados de partes
blandas y unidos entre ellos por articulaciones, que tendrán movilidad gracias a los músculos.
Forman el caparazón protector de ciertos órganos como el cerebro, médula, órganos
intratorácicos, etc., y además representan una reserva importante de calcio.
En el hueso largo se distinguen dos partes: Un cuerpo largo o diáfisis y dos extremidades o
epífisis. En la superficie se observan salientes o apófisis que suelen ser las zonas de inserción de los
tendones y músculos.
El conjunto de huesos del organismo constituye el llamado esqueleto humano. Dicho esqueleto
está formado por la yuxtaposición de piezas rígidas, articuladas (unidas) entre sí.
Actúan como palancas óseas para favorecer los movimientos de las articulaciones, en el caso de
articulaciones provistas de movilidad.
Armazón sólido y resistente que amortigua las fuerzas que actúan sobre el cuerpo (gravedad,
golpes, choques...).
Forma estuches o cajas que protegen los órganos vitales (cavidad torácica-corazón, cavidad
craneal-cerebro...).
El esqueleto humano representa 1/3 del peso corporal de una persona adulta.
Está formado por 206 piezas, unidas entre sí por articulaciones, a excepción del hueso hioides.
No se tienen en cuenta en la cifra señalada los llamados huesos wornianos y sesmoideos de pies y
manos, que por ser variables en número según la persona, no se contabilizan como piezas fijas del
esqueleto.
Cada articulación está especializada en determinadas funciones, que pueden ir desde una
ausencia total de movilidad, siendo su función principal el cierre mecánico de una cavidad (función
protectora), como ocurre en las articulaciones de la calota craneal, o bien estar provista de una
gran movilidad y actuar de palanca ósea, como ocurre en la articulación de la rodilla.
Sinartrosis: son articulaciones inmóviles, carentes de cualquier tipo de movimiento. Los huesos se
articulan entre sí mediante entrantes y salientes a modo de sierra o puzzle, semejando una sutura
perfecta. Se las denomina articulaciones en forma de sutura. Ejemplo: huesos de la bóveda del
cráneo.
Diartrosis: están provistas de un amplio grado de movilidad. Las superficies articulares tienen
formas variables (esfera, receptáculo, etc.). Además, las superficies articulares están tapizadas por
una membrana cartilaginosa que facilita un encaje recíproco de las dos superficies articulares. La
articulación está rodeada periféricamente por una vaina llamada cápsula articular, que cierra y
aísla las superficies articulares. Los huesos se hallan, además, unidos por ligamentos de tejido
conjuntivo fibroso que saltan de un hueso al otro a través de dicha cápsula.
Según su estructura
Fibrosas: los huesos se unen mediante tejido fibroso o cartilaginoso. Ejemplo: articulación entre
los huesos que forman la bóveda craneal.
Cartilaginosas: ambos huesos se mantienen unidos mediante cartílago hialino o cartílago fibroso.
Ejemplo: sínfisis del pubis.
Cartílago articular: las superficies articulares están tapizadas por el cartílago articular que es de
naturaleza hialina. El cartílago carece de sensibilidad por no poseer ningún tipo de terminación
nerviosa. Tampoco posee vasos sanguíneos y se nutre por imbibición a partir del líquido que hay
en la cavidad articular.
La cápsula articular es una especie de manguito fibroso que se inserta por los bordes en el
contorno de las superficies articulares. Es laxa y floja, y estas características son mayores cuanto
mayor es la movilidad de la articulación.
Además, la cápsula se refuerza por otro tipo de ligamentos, llamados ligamentos externos, que
saltan de un borde a otro de las superficies articulares por fuera de la cápsula. Por si fuera poco,
de manera excepcional, en algunas articulaciones existe aún otro reforzamiento, un ligamento que
salta directamente de una cara articular a otra en el centro mismo de la superficie articular.
Ejemplo: ligamento redondo de la articulación de la cadera.
Se llama sinovial a la capa interna del aparato cápsulo-ligamentoso. Produce el íquido sinovial
que se halla en el interior de la articulación. El líquido sinovial es Jna especie de lubricante para la
articulación que además nutre a los cartílagos articulares.
Artrodias:
Trocleares:
Son articulaciones en forma de bisagra. La superficie cóncava de uno de los huesos se articula con
la superficie convexa del otro.
Trocoides:
Una de las superficies articulares es cónica y se articula con la depresión recíproca que presenta la
superficie de la otra.
Condílea:
Encaje recíproco:
También llamada en silla de montar. La superficie cóncavo- convexa de un hueso se articula con la
superficie convexo- cóncava del otro.
Enartrosis:
Músculos esqueléticos
La musculatura esquelética representa el 42% del peso corporal total, en un adulto sano y joven.
En la mujer es algo menor (36% aproximadamente). La musculatura lisa y cardiaca representa sólo
el 5-10% del peso.
Musculatura lisa y cardiaca: 5-10% del peso corporal. Está formado por los músculos de las
vísceras, vasos sanguíneos, corazón, etc.
Musculatura estriada: 42% del peso corporal. Está formado por la musculatura esquelética.
Estructura
La unidad estructural del músculo como órgano activo del movimiento es la fibra muscular
estriada. Su longitud y grosor varía mucho dependiendo del músculo de que se trate. Además la
fibra muscular es una célula multinucleada, cuyo sarcoplasma contiene miofibrillas.
Las miofibrillas son responsables de la estriación transversal que presentan las células al
observarlas al microscopio óptico y que le dan el nombre de musculatura estriada.
Se considera que la unidad activa más simple del músculo estriado está formada por la reunión de
un conjunto de fibras, cuyos extremos se reúnen para formar un tendoncillo común. Se habla de
fascículo primario o miona. Por tanto, el fascículo primario sólo puede dividirse en fibras
musculares.
Dentro de cada fascículo primario, las fibras musculares están separadas entre sí por finos
tabiques de tejido conjuntiva denominados endomisio. A su vez cada fascículo primario está
envuelto por una vaina de tejido conjuntiva denominada perimisio interno. Por el perimisio
interno circulan vasos sanguíneos para la nutrición de la miona.
Varios fascículos primarios están a su vez envueltos por otra vaina de tejido conjuntiva,
denominada perimisio externo formando el fascículo secundario y por último todos los fascículos
secundarios se agrupan entre sí por medio de una vaina de tejido conjuntiva denominada fascia
dando lugar al fascículo terciario o músculo propiamente dicho.
Inserción
La mayoría de los músculos esqueléticos se insertan en los huesos y esa unión se realiza por medio
de tendones. Los tendones son formaciones de tejido fibroso rico en colágeno, color blanco
nacarado, que se incrustan e insertan en las porciones rugosas de los huesos.
Hay algunos músculos esqueléticos que se insertan a aponeurosis o bandas fibrasas, tal como
ocurre con los músculos de la pared abdominal.
Otros se insertan en la piel, tal es el caso de los llamados músculos cutáneos, e incluso algunos lo
hacen enMúsculo esquelético y Fibras Musculares. Guía de Anatomía Funcional.
Índice de contenidos:
Introducción.
1. Introducción:
Saber cuáles son las características de los músculos es vital para crear programas de
entrenamiento más eficientes y funcionales.
Desde el Instituto de Formación Deportiva de Alto Rendimiento ISAF, queremos que conozcas
todo lo relacionado con este tipo de tejido muscular para que profundices un poco más en el
funcionamiento de nuestro cuerpo y puedas convertirte en el profesional deportivo que siempre
has querido ser.
Antes de nada has de tener en cuenta que el músculo esquelético no es el único tipo de tejido
muscular que existe en nuestro cuerpo.
Tejidos lisos
También llamados músculos involuntarios, que no son regulados por nuestro nivel de control
consciente como por ejemplo el endotelio de los vasos sanguíneos, y de revestimiento interno de
órganos.
Tejido cardíaco
Músculo especializado del corazón (miocardio), con similitudes estructurales a los músculos
esqueléticos.
Al igual que los músculos lisos, es de funcionamiento involuntario, ya que tiene un funcionamiento
autonómico, y está regulado por el sistema nervioso y el sistema endocrino.
Tejido esquelético
El tejido muscular esquelético está formado por músculos de acción voluntaria, regulados y
controlados por el sistema nervioso central.
Mantener las posiciones corporales. En este sentido, el tejido muscular nos permite estar sentados
o estar de pie de manera firme y estable.
El músculo esquelético es el protagonista principal que genera el movimiento humano, por eso es
de vital importancia durante el ejercicio, el entrenamiento y las actividades deportivas. Esto es
debido a que, en sus estructuras miofibrilares internas, es dónde se produce la verdadera “batalla”
entre la adaptación y la fatiga.
Para entender las funciones del músculo esquelético debemos saber cómo funciona.
El sistema muscular esquelético está regulado por el sistema nervioso central y autónomo, e
interactúa con importantes sistemas y órganos como la estructura esquelética, el sistema cardio-
respiratorio, el sistema digestivo, el sistema endocrino, el hígado, el riñón, entre otros.
Pero, son las células musculares, las que “sufren” los impactos de las cargas de esfuerzo, que
modifican las estructuras morfológicas y funcionales más importantes que impactan sobre la
salud, la aptitud y el rendimiento deportivo.
Ahora que ya sabes cuál es la función del músculo esquelético vamos a ver cómo está formado.
A modo de resumen, es importante describir las estructuras anatómicas que contienen al músculo
esquelético:
También destacar el papel del sistema tubular y del retículo sarcoplásmico, responsable de la
liberación y recaptación del ion Calcio, decisivo electrolito, cofactor de los mecanismos de
acoplamiento de los componentes de la unidad de contracción sarcomérica. Vamos a verlo más en
profundidad.
El músculo esquelético está compuesto por muchas fibras musculares y también por todo un
tejido conectivo que rodea a estas fibras y al músculo en sí.
fibras musculares
Fibras musculares
Debido a las características de las fibras musculares, su función es muy importante, para el
ejercicio y los deportes.
Son ricas en enzimas aeróbicas y en la cantidad de mitocondrias, así como en el tamaño de estas.
También tienen grandes depósitos de glucógeno y mucha mioglobina.
Al contrario que en las de tipo A, éstas tienen un cantidad de enzimas que degradan la glucosa
mediante la vía anaeróbica. Y en cambio, presentan una actividad aeróbica mucho menor.
Plasmalema
También se la conoce como membrana plasmática, membrana celular o citoplasmática. Se trata de
una capa de lípidos que cubre las células.
Sarcoplasma
Retículo sarcoplásmico
Está formado por un conjunto de membranas simples que rodean cada miofibrilla. Su función es la
de almacenar el calcio de la célula, un elemento muy importante para la correcta contracción del
músculo.
Miofibrillas
Las miofibrillas son las responsables de la contracción y la elasticidad del tejido muscular. Esto es
lo que permite al músculo hacer los movimientos correctamente. De ahí su importancia.
Las miofibrillas están formadas por diferentes elementos, igual de vitales para que el músculo
pueda realizar su función.
Sarcómero
El sarcómero o sarcómera es la unidad funcional básica del músculo estriado, lo que significa que
todos los componentes necesarios para que el músculo se contraiga los encontramos en cada
sarcómero.
Los sarcómeros permiten que el músculo haga grandes contracciones al contraerse al mismo
tiempo. Un ejercicio de coordinación sin el que no se podrían llevar a cabo funciones básicas para
el ser humano.
Cada sarcómero está formado por miofilamentos que es un conjunto de haces gruesos y delgados
involucrados en la contracción del músculo.
Los filamentos gruesos están formados por miosina, mientras que los filamentos finos o delgados
están compuestos de actina.
Cuando la actina y la miosina interactúan entre sí se produce el acortamiento del músculo lo que
permite la contracción muscular.
Como ves, conocer el músculo esquelético es realmente importante para hacer unas sesiones de
entrenamiento completas y personalizadas a cada deportista en caso de lesiones.
Sistema musculoesquelético
El sistema musculoesquelético (sistema locomotor) es un sistema del cuerpo humano que nos
proporciona movimiento, estabilidad, forma y soporte. Este se encuentra subdividido en dos
grandes sistemas:
El sistema muscular, que incluye todos los tipos de músculos del cuerpo. En particular los músculos
esqueléticos que son aquellos que forman parte de las articulaciones para producir los
movimientos. Así también como los tendones que son los que unen los músculos a los huesos.
El sistema esquelético tiene como componente principal los huesos. Estos se unen entre sí y
forman las articulaciones, dando a nuestro cuerpo un esqueleto fuerte y a la vez móvil. La
integridad y función de los huesos y articulaciones está dada por las estructuras accesorias del
sistema esquelético que son: cartílago articular, ligamentos y bursa (bolsa sinovial).
Además de su función principal que es dar estabilidad y movilidad al cuerpo, el sistema
musculoesquelético tiene muchas otras funciones: en el caso del esqueleto, éste tiene un rol
importante en funciones homeostáticas como almacenar minerales (ej: calcio) así como en la
hematopoyesis, mientras que el sistema muscular almacena la mayoría de carbohidratos del
cuerpo en forma de glicógeno.
Cuestionario de la tabla
Definición Sistema del cuerpo humano que proporciona movimiento, forma y soporte.
Huesos: Base mecánica para los movimientos, proporcionan la estructura del cuerpo, protegen los
órganos vitales, producen células sanguíneas y almacenan minerales.
Contenidos
Sistema muscular
Músculos esqueléticos
Estructura
Contracción muscular
Tendones
Sistema esquelético
Huesos
Cartílago
Articulaciones
Ligamentos
Bursa (Bolsas)
Funciones del sistema esquelético
Correlación clínica
Osteoporosis
Sarcopenia
Artritis
Distrofia muscular
Bibliografía
+ Muestra todo
Sistema muscular
Músculo liso, que comprende las paredes de los vasos sanguíneos y de los órganos huecos.
Sistema muscular
Sistema muscular
Músculos esqueléticos
Los músculos esqueléticos son las principales unidades funcionales del sistema muscular. Existen
más de 600 músculos en el cuerpo humano. Estos varían mucho en forma y tamaño, donde el más
pequeño es el músculo del estribo en el oído interno y el más grande es el cuádriceps femoral en
el muslo.
Los músculos esqueléticos del cuerpo humano están organizados en cuatro grupos por cada región
del cuerpo:
Músculos de la cabeza y cuello, que incluyen los músculos de expresión facial, de la masticación,
de la órbita, de la lengua, de la faringe y del cuello.
Músculos del tronco, que incluye los músculos de la espalda, músculos abdominales anteriores y
laterales así como músculos del piso pélvico.
Músculos de las extremidades superiores, que incluyen músculos del hombro, del brazo,
antebrazo y de la mano.
Músculos de las extremidades inferiores, que incluyen músculos de la cadera, muslo, pierna y pie.
Estructura
Muscle fiber
Myofibra
1/6
Cada fibra muscular está rodeada por una vaina de tejido conectivo laxo llamada endomisio.
Múltiples fibras musculares están agrupadas en fascículos o haces musculares, que están rodeados
por su propia vaina de tejido conectivo llamada perimisio. Por último, un grupo de fascículos
musculares que forman el músculo está externamente rodeado por otra capa de tejido conectivo
llamada de epimisio. Esta capa es contínua a otra capa de tejido conectivo llamada fascia profunda
del músculo esquelético, que separa los músculos de otros tejidos y órganos.
Esa estructura da al tejido del músculo esquelético cuatro propiedades fisiológicas principales:
Músculo esquelético
Músculo esquelético
Contracción muscular
Existen dos tipos de contracción muscular; isométrico e isotónico. Una contracción muscular es
considerada como isométrica si la longitud del músculo no cambia durante la contracción e
isotónica si la tensión permanece inalterada mientras la longitud del músculo cambia. Existen dos
tipos de contracción isotónica:
Contracción concéntrica, donde el músculo se acorta debido a que genera suficiente fuerza para
superar la resistencia impuesta. Este tipo de contracción sirve para facilitar cualquier movimiento
perceptible (ej: levantar una barra o caminar en una pendiente).
Contracción excéntrica, donde el músculo se estira debido a que la resistencia es mayor que la
fuerza que el músculo genera. Durante la contracción excéntrica, el músculo mantiene una tensión
alta. Este tipo de contracción normalmente sirve para lentificar un movimiento (ej: bajar una barra
o caminar cuesta abajo).
Axon motoneuronis
1/2
La secuencia de eventos que resulta en la contracción de una célula muscular comienza cuando el
sistema nervioso genera una señal llamada, potencial de acción. Esta señal viaja a través de las
neuronas motoras para alcanzar la unión neuromuscular, que es el lugar de contacto entre el
nervio motor y el músculo. Un grupo de células musculares inervadas por las ramas de un único
nervio motor es llamado unidad motora.
El potencial de acción entrante del nervio motor inicia la liberación de acetilcolina (ACh) desde el
nervio hasta la hendidura sináptica, que es el espacio entre la terminación nerviosa y el sarcolema.
La ACh se une a los receptores en el sarcolema y desencadena una reacción química en la célula
muscular. Esto involucra la liberación de iones de calcio desde el retículo sarcoplásmico, que a su
vez provoca una reorganización de las proteínas contráctiles dentro de la célula muscular. Las
principales proteínas involucradas son actina y miosina que en la presencia de Adenosin trifosfato
(ATP), se deslizan una sobre la otra y tiran de los extremos de cada célula muscular juntas,
causando la contracción. A medida que disminuye la señal nerviosa, el proceso químico revierte y
el músculo se relaja.
Unidad motora
Unidad motora
Tendones
Tendon
Tendo
1/5
Un tendón es una banda densa de tejido conectivo resistente y flexible que sirve para unir los
músculos esqueléticos a los huesos. Estos son encontrados en el extremo proximal (origen) y distal
(inserción) de los músculos, uniéndolos al periostio de los huesos en su porción proximal y distal
respectivamente. Cuando los músculos se contraen, los tendones transmiten la fuerza mecánica a
los huesos traccionando y causando el movimiento.
Por estar formados por tejido conectivo regular denso, los tendones tienen abundantes fibras de
colágeno paralelas, que les proporcionan alta fuerza de tensión (resistencia a la fuerza
longitudinal). Las fibras de colágeno dentro del tendón, están organizadas en fascículos y cada uno
de estos están envueltos por una fina capa de tejido conectivo denso llamada endotenon. A su
vez, grupos de fascículos están envueltos por una capa de tejido conectivo denso irregular llamada
epitenon. Finalmente el epitenon está rodeado por la vaina sinovial y unido a este por una
delicada banda de tejido conectivo llamada mesotenon.
Tendón
Tendón
La función principal del sistema muscular es producir los movimientos del cuerpo. Dependiendo
del eje y del plano existen varios tipos de movimientos que pueden ser realizados por el sistema
musculoesquelético. Algunos de los más importantes incluyen:
Flexion of leg
Flexio cruris
1/8
Flexión y extensión: son movimientos para aumentar o disminuir el ángulo entre los huesos
involucrados en estas acciones respectivamente. Este movimiento toma lugar en el plano sagital
alrededor de un eje frontal. Un ejemplo de flexión es doblar la pierna en la articulación de la
rodilla, mientras que la extensión sería enderezar la rodilla desde una posición flexionada.
Aducción y abducción: son los movimientos de acercar o alejar las partes del cuerpo de la línea
media, respectivamente. Estos movimientos se realizan en el plano frontal alrededor del eje
sagital. Por ejemplo, la aducción del brazo y la articulación del hombro implica alejar el brazo del
costado del cuerpo, mientras que la abducción implica traerlo de vuelta hacia el cuerpo.
Rotación: es el movimiento en que una parte del cuerpo rota alrededor de su eje vertical
(longitudinal) en un plano transverso. Este movimiento es definido en relación a la línea media,
donde la rotación interna implica rotar el segmento hacia la línea media, mientras que la rotación
externa implica alejarlo de la línea media. Como por ejemplo la rotación lateral o medial del
muslo.
Otra importante función de los músculos es la producción de calor. El tejido muscular es uno de
los tejidos metabólicamente más activos del cuerpo, donde aproximadamente 85% del calor
producido es resultado de la contracción muscular. Esto hace de los músculos, esenciales para
mantener la temperatura normal del cuerpo.
Sistema esquelético
El esqueleto humano adulto está compuesto por 206 huesos y sus cartílagos asociados. Los huesos
están sustentados por ligamentos, tendones, bursa y músculos. Los huesos del cuerpo están
agrupados dentro de dos divisiones distintas:
El esqueleto axial, que incluye los huesos a lo largo del eje longitudinal del cuerpo. El esqueleto
axial está formado por la columna vertebral, huesos de la cabeza y huesos de la caja torácica.
El esqueleto apendicular, que incluye los huesos del hombro, de la cintura pélvica, y de las
extremidades superiores e inferiores.
Sistema esquelético
Sistema esquelético
Huesos
Bone
Os
1/6
Sinónimos: Skeletal system, Systema skeletale
Los huesos son estructuras rígidas formadas por tejido conectivo denso calcificado. El tejido óseo
está compuesto por una matriz ósea mineralizada que consiste en fibras de colágeno tipo 1
dispersas por la sustancia fundamental. El componente celular de los huesos está representado
por tres tipos de células óseas especializadas llamadas osteocitos, osteoblastos y osteoclastos.
Los huesos están compuestos por dos capas distintas que difieren en apariencia y características
histológicas;
El hueso compacto (cortical) es la capa más externa y densa del hueso que le da su aspecto liso,
blanco y sólido. La superficie externa está cubierta por una capa de tejido conectivo denso llamado
periostio. En su superficie interna el hueso compacto está cubierto por el endostio, que es el límite
entre los huesos compacto y esponjoso.
El hueso esponjoso (trabecular) es la capa porosa y profunda del hueso. A diferencia del hueso
compacto, este es altamente vascularizado y más activo metabólicamente. Es encontrado
típicamente dentro de los extremos de los huesos largos y en las vértebras. En algunos huesos,
como el hueso coxal, esternón o fémur, la parte central del hueso esponjoso alberga la médula
ósea, que es el sitio de la hematopoyesis en el adulto.
Tejido óseo
Tejido óseo
Tipos de huesos
Humerus
1/5
Los huesos largos tienen forma tubular, con mayor diámetro longitudinal que transversal. Están
compuestos principalmente por hueso compacto, mientras que el tejido esponjoso y la médula
ósea se encuentran en los extremos de los huesos. Ejemplos de huesos largos incluyen: húmero,
ulna (cúbito), tibia y clavícula.
Los huesos cortos tienen una forma aproximadamente cuboide o redonda, y solo tienen una capa
fina de hueso compacto rodeando el hueso esponjoso. Como ejemplos se incluyen los huesos del
tarso y del carpo.
Los huesos planos son en su mayoría finos, aplanados y generalmente curvos. Contienen dos capas
paralelas de hueso compacto rodeando una capa de hueso esponjoso. Como ejemplos se incluyen
la mayoría de huesos del cráneo, escápula, esternón y sacro.
Los huesos sesamoideos, son tipos de huesos pequeños, redondeados y únicos que están
incrustados en los tendones musculares donde el tendón pasa sobre una articulación. El hueso
sesamoideo más grande del cuerpo es la rótula, pero existen muchos otros huesos sesamoideos
más pequeños en las manos y pies, generalmente muy cerca de las articulaciones.
Los huesos irregulares no entran en ninguna de las otras categorías. Generalmente, estos
contienen agujeros a través de los cuales pasan los tejidos blandos y las estructuras
neurovasculares. Como ejemplos incluyen las vértebras, el hueso coxal y algunos otros huesos del
cráneo.
¿Conoces los 206 huesos del cuerpo? Empieza a aprender con nuestros diagramas, ejercicios para
rotular y cuestionarios sobre el sistema óseo.
Un hueso largo típico consta de un eje largo (diáfisis) que se extiende hasta el cuello (metáfisis) y
cabeza (epífisis) en sus extremos proximal y distal. También, presentan varias marcas y
formaciones que dan paso a estructuras neurovasculares, así como los sitios de unión de los
ligamentos y tendones. Algunas de esas formaciones son:
Surco - ranura poco profunda en la superficie del hueso (ej: surco radial del húmero).
Faceta (carilla) - área lisa, plana, generalmente cubierta por cartílago (ej: faceta articular en la
vértebra).
Foramen - aquel que permite el paso a través de un hueso (ej: foramen magno del hueso
occipital).
Cartílago
Hyaline cartilage
Cartilago hyalina
1/7
El cartílago es un tejido conectivo flexible que se encuentra en varios sistemas del cuerpo. Está
compuesto de células especializadas llamadas condrocitos, fibras de colágeno y sustancia
fundamental rica en proteoglicano y fibras de elastina.
Cartílago hialino, que está compuesto por colágeno tipo II y sustancia fundamental abundante,
que le da su apariencia brillante. Este es el tipo de cartílago encontrado en mayor cantidad en las
articulaciones (cartílago articular). Así como en la nariz, laringe, tráquea y costillas.
Cartílago elástico es similar al hialino, pero contiene más fibras elásticas. Se encuentra en
estructuras como el pabellón auricular de la oreja, la trompa auditiva y epiglotis.
Fibrocartílago está compuesto por muchas fibras de colágeno tipo I, y una pequeña cantidad de
sustancia fundamental. Ejemplos de fibrocartílago incluyen discos vertebrales, pubis y otras
sínfisis.
Cartílago hialino
Cartílago hialino
Articulaciones
Cada hueso del sistema musculoesquelético está conectado con uno o más huesos mediante una
articulación. Estas proporcionan un punto de apoyo a los huesos, donde ellas giran y por lo tanto
permiten movimientos de partes del cuerpo. Sin embargo, el movimiento no es un atributo
necesario de una articulación ya que algunas articulaciones no se mueven, como las articulaciones
entre los huesos del cráneo. La integridad o estabilidad de una articulación está dada por varios
factores, incluyendo la congruencia ósea y estructuras que cruzan la articulación, como tendones y
ligamentos.
Basado en el tipo de tejido que mantiene los huesos vecinos unidos y el rango de movimiento que
exhiben, las articulaciones pueden ser clasificadas de la siguiente manera:
Las articulaciones sinoviales, son articulaciones libremente móviles donde los huesos no están en
contacto directo ya que están separados por un espacio llamado cavidad sinovial. Esta se
encuentra cubierta por una membrana sinovial que secreta el líquido sinovial que nutre y lubrica
las superficies articulares para reducir la fricción. Los huesos articulares de la mayoría de las
articulaciones sinoviales están revestidos con cartílago hialino. Estas articulaciones generalmente
tienen un amplio rango de movimiento, que está definido por la cápsula articular, los ligamentos
de soporte y los músculos que cruzan la articulación. Ejemplos de articulaciones sinoviales
incluyen la rodilla, hombro, articulaciones esternoclaviculares y del codo.
Las articulaciones fibrosas, donde los huesos están conectados por tejido conectivo fibroso. Los
huesos en este tipo de articulaciones están firmemente unidos de modo que la articulación
permite movimientos insignificantes. Estas son encontradas entre las suturas craneales, las
articulaciones tibioperonea distal y cubonavicular.
Las articulaciones cartilaginosas, son articulaciones donde los huesos están conectados por
cartílago. Los huesos tienen un rango de movimiento entre el rango de las articulaciones sinovial y
fibrosa. Estas están subdivididas en sincondrosis (ej: articulaciones costocondrales) y sínfisis (ej:
sínfisis del pubis).
Articulatio sphaeroidea
1/5
De acuerdo a los movimientos que permiten, las articulaciones sinoviales se subdividen a su vez
en:
Pelvis
264
86
88
Ligamentos
Los ligamentos son bandas fibrosas formadas por tejido conectivo regular denso que es similar en
estructura a los tendones. A diferencia de los tendones que conectan los músculos a los huesos,
los ligamentos conectan hueso con hueso. Además del sistema musculoesquelético, los ligamentos
también se encuentran en muchas otras partes del cuerpo, donde generalmente estabilizan,
mantienen órganos internos en su lugar y trasladan estructuras neurovasculares.
Ligamento iliofemoral
Ligamentum iliofemorale
1/5
En el sistema musculoesquelético, los ligamentos estabilizan los huesos articulares y refuerzan las
articulaciones. Dependiendo de la posición anatómica en relación a la cápsula articular, los
ligamentos están clasificados en:
Ligamentos capsulares, que son esencialmente engrosamientos de la cápsula articular que forman
bandas alargadas o estructuras triangulares. Estos ligamentos sirven para reforzar la integridad de
la cápsula articular. Un ejemplo de ligamento capsular es el ligamento iliofemoral de la articulación
de la cadera.
Ligamentos intracapsulares, son los ligamentos que se encuentran dentro de la cápsula articular.
Estos refuerzan la conexión de las superficies articulares, pero permiten un rango de movimiento
mucho más amplio que otros ligamentos. Ejemplos incluyen los ligamentos cruzados anterior y
posterior de la rodilla.
Ligamentos extracapsulares, son aquellos que se encuentran fuera de la cápsula articular. Estos
proporcionan la mayor estabilidad a los huesos articulares y son importantes para prevenir
dislocaciones. Pueden ubicarse muy cerca de la cápsula articular (e.j.: ligamento colateral medial
de la articulación del tobillo) o un poco más lejos (ligamentos vertebrales).
Bursa (Bolsas)
Bursa suprapatelar
Bursa suprapatellaris
Bursa son pequeñas bolsas en forma de saco de la cavidad articular, revestidas por membrana
sinovial. Se encuentran alrededor de las articulaciones, proporcionando amortiguación de los
huesos, tendones y músculos asociados y disminuyendo la fricción entre las estructuras
adyacentes.
La mayoría de las bursas están ubicadas cerca de las grandes articulaciones de brazos y piernas.
Por ejemplo, una de las bursas de la articulación de la rodilla es la bursa suprapatelar, encontrada
superior a la patela, entre el fémur y el tendón del músculo cuádriceps femoral. La bursa
suprapatelar permite que estas estructuras se deslicen una sobre otra sin fricción durante la
flexión y extensión de la articulación de la rodilla.
El sistema esquelético sirve para una variedad de funciones. Los huesos, dan forma al cuerpo y
proporcionan el sitio de unión a los músculos, tendones, ligamentos y cartílagos. Estos tejidos
funcionan juntos como un todo para generar una fuerza que proporcione la base biomecánica del
movimiento.
¿Sabías que colorear cuadernos de anatomía para colorear permite a nuestro cerebro captar la
información de una manera diferente y eficaz? Descarga nuestro cuaderno de anatomía para
colorear gratuito y pruébalo tú mismo.
Además, el sistema esquelético tiene muchas funciones metabólicas. Los huesos son el lugar de
almacenamiento de minerales importantes, principalmente calcio y fósforo. Esto hace que los
huesos sean esenciales para equilibrar el calcio en la sangre, lo cual es regulado ajustando la tasa
de reabsorción ósea.
Sistema musculoesquelético
Sistema musculoesquelético
Correlación clínica
Existe una variedad de condiciones que afectan los músculos, huesos y articulaciones. Los
desórdenes del sistema musculoesquelético pueden variar desde discapacidades físicas menores
hasta enfermedades. Las siguientes son algunas condiciones clínicas del sistema
musculoesquelético:
Osteoporosis
La osteoporosis es una condición que afecta la fuerza del hueso (la palabra osteoporosis
literalmente significa "hueso poroso"). Es una condición donde los huesos se vuelven frágiles y
quebradizos, llevando a un mayor riesgo de fracturas en comparación a un hueso normal. Como
resultado, incluso un pequeño golpe o accidente puede causar fracturas serias.
Sarcopenia
La artritis es un grupo de condiciones que afectan las articulaciones. Estas condiciones causan
daño a las articulaciones, generalmente resultando en dolor y rigidez debido a la edad. Pudiendo
afectar diferentes partes de las articulaciones y casi todas las articulaciones del cuerpo.
A medida que un individuo envejece, los tejidos articulares se vuelven menos resistentes al
desgaste y comienzan a degenerarse. Esta degeneración se manifiesta con hinchazón, dolor y en
algunos casos, pérdida de movilidad de las articulaciones. Los cambios que ocurren en ambos,
tanto en los tejidos blandos articulares como en los huesos articulares, es una condición llamada
osteoartritis. Una forma más seria de enfermedad es la llamada artritis reumatoide. Esta última es
una enfermedad autoinmune donde el cuerpo produce anticuerpos contra los tejidos articulares
causando inflamación crónica resultando en daño articular severo, dolor e inmovilidad.
Distrofia muscular
Lupus eritematoso
Miastenia gravis
Tendinitis
Bibliografía
Referencias:
Moore, K. L., Dalley, A. F., & Agur, A. M. R. (2014). Clinically Oriented Anatomy (7th ed.).
Philadelphia, PA: Lippincott Williams & Wilkins.
Netter, F. (2019). Atlas of Human Anatomy (7th ed.). Philadelphia, PA: Saunders.
Standring, S. (2016). Gray's Anatomy (41tst ed.). Edinburgh: Elsevier Churchill Livingstone.
Ross, Lawrence M; Lamperti, Edward D, eds. (2006). Thieme Atlas of Anatomy: General Anatomy
and Musculoskeletal System.
R.M.H McMinn: Last's anatomy (Regional and Applied), 9th edition, Ana-Maria Dulea (2014
Ilustraciones: