PARASHA Ajarei Mot 22
PARASHA Ajarei Mot 22
PARASHA Ajarei Mot 22
“Entonces el SEÑOR habló a Moisés después de la muerte de los dos hijos de Aarón,
cuando se acercaron a la presencia del SEÑOR y murieron. “
Como leemos en Levítico 16, vemos que Dios le ordena a Aarón, el Sumo
Sacerdote, que no repita los mismos errores de sus hijos, y que no ingrese al Arca Santa
de una manera indigna, sino moriría también. Luego instruyó a Aarón para que ofreciera
un sacrificio para él, su familia, y como leemos en 16:24, para toda la casa de Israel como
expiación por sus pecados.
Esta parasha nos abre el camino hacia la moralidad y la santidad. En hebreos 7:23-
27 dice así: “Los sacerdotes anteriores eran más numerosos porque la muerte les impedía
continuar, pero Yeshua conserva su sacerdocio inmutable puesto que permanece para
siempre. Por lo cual Él también es poderoso para salvar para siempre a los que por medio
de Él se acercan a Dios, puesto que vive perpetuamente para interceder por ellos. Porque
convenía que tuviéramos tal sumo sacerdote: santo, inocente, inmaculado, apartado de los
pecadores y exaltado más allá de los cielos, que no necesita, como aquellos sumos
sacerdotes, ofrecer sacrificios diariamente, primero por sus propios pecados y después por
los pecados del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, cuando se ofreció a sí
mismo. Porque la ley designa como sumos sacerdotes a hombres débiles, pero la palabra
del juramento, que vino después de la ley, designa al Hijo, hecho perfecto para
siempre, juramento, que vino después de la Ley, designa a un Hijo, hecho perfecto para
siempre.
Todavía más, Dios le ordenó a Moshé que enseñe esos mandamientos a toda la
nación: “Kol adat benei Israel”, todo judío debía estar presente para resaltar el hecho de
que la santidad no pueda lograrse mediante una existencia ermitaña, a través de la
negación de uno mismo, la meditación o escalando el Himalaya, sino sólo al tratar a los
demás con jésed, justicia, consideración y amor, acercándolos y acercándonos así a
Hashem.