El documento aborda el caso de Ricardo Arriola cuyo derecho a la integridad personal fue violado cuando las autoridades utilizaron a su familia para ejercer presión psicológica sobre él. La constitución protege el derecho a la integridad personal física y mental, así como los derechos de la familia y la comunidad. En el caso de Ricardo, cuyas condiciones de salud mental fueron puestas en peligro, se comprometieron no solo sus derechos a la salud mental sino también los de su familia y comunidad.
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El documento aborda el caso de Ricardo Arriola cuyo derecho a la integridad personal fue violado cuando las autoridades utilizaron a su familia para ejercer presión psicológica sobre él. La constitución protege el derecho a la integridad personal física y mental, así como los derechos de la familia y la comunidad. En el caso de Ricardo, cuyas condiciones de salud mental fueron puestas en peligro, se comprometieron no solo sus derechos a la salud mental sino también los de su familia y comunidad.
Título original
En el caso que nos ocupa del señor Ricardo Arriola
El documento aborda el caso de Ricardo Arriola cuyo derecho a la integridad personal fue violado cuando las autoridades utilizaron a su familia para ejercer presión psicológica sobre él. La constitución protege el derecho a la integridad personal física y mental, así como los derechos de la familia y la comunidad. En el caso de Ricardo, cuyas condiciones de salud mental fueron puestas en peligro, se comprometieron no solo sus derechos a la salud mental sino también los de su familia y comunidad.
El documento aborda el caso de Ricardo Arriola cuyo derecho a la integridad personal fue violado cuando las autoridades utilizaron a su familia para ejercer presión psicológica sobre él. La constitución protege el derecho a la integridad personal física y mental, así como los derechos de la familia y la comunidad. En el caso de Ricardo, cuyas condiciones de salud mental fueron puestas en peligro, se comprometieron no solo sus derechos a la salud mental sino también los de su familia y comunidad.
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En el caso que nos ocupa del señor Ricardo Arriola, la intención de las autoridades
era (utilizar a la familia como mecanismo de coacción psicológica) entonces vemos
que con este hecho se le viola el derecho a integridad personal cuyo caso se abordara desde la perspectiva de la constitución política que:
DERECHO A LA INTEGRIDAD PERSONAL-Salud mental y sicológica
La Constitución proclama el derecho fundamental a la integridad personal y, al hacerlo, no solamente cubre la composición física de la persona, sino la plenitud de los elementos que inciden en la salud mental y en el equilibrio sicológico. Por otra parte, el artículo 12 de la Constitución proclama el derecho fundamental a la integridad personal y, al hacerlo, no solamente cubre la composición física de la persona, sino la plenitud de los elementos que inciden en la salud mental y en el equilibrio psicológico. Ambos por igual deben conservarse y, por ello, los atentados contra uno u otro de tales factores de la integridad personal vulneran ese derecho fundamental y ponen en peligro el de la vida en las anotadas condiciones de dignidad.
DERECHO A LA SALUD MENTAL-Derechos constitucionales comprometidos
Ahora bien, Vemos que En los casos de peligro o afectación de la salud mental y psicológica como lo es el caso del señor Ricardo, no solamente están comprometidos los derechos fundamentales que a ella corresponden sino los de sus allegados más próximos, los de la familia como unidad y núcleo esencial de la sociedad que merece especial protección, y los de la colectividad. De lo dicho se deduce que, al reclamar judicialmente la preservación inmediata del derecho a su salud mental, la persona invoca derechos fundamentales susceptibles de amparo por la vía del artículo 86 de la Constitución Política.
La vida humana, en los términos de la garantía constitucional de su preservación se
consagra en los artículos (arts. 1, 2 y 11 C.P.), entonces no consiste solamente en la supervivencia biológica, sino que, tratándose justamente de la que corresponde al ser humano, requiere desenvolverse dentro de unas condiciones mínimas de dignidad.
La persona conforma un todo integral y completo, que incorpora tanto los aspectos puramente materiales, físicos y biológicos como los de orden espiritual, mental y síquico. Su vida, para corresponder verdaderamente a la dignidad humana, exige la unión de todos esos factores como esenciales en cuanto contribuyen a configurar el conjunto de sus capacidades psicológicas y por esta razón se infringe en esta vulneración de este principio o derecho fundamental a la integridad personal.