Criterios Polemicos Del Tnla
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SE CONSIDERA
I.-
RESUMEN DE LOS AGRAVIOS EXPRESADOS POR EL
RECURRENTE : En síntesis, expresan los apelantes , sentirse
agraviados por: 1.-Por que en el Considerando Hechos Probados
Numeral 9, se haya tenido por probada irregularidades de parte de los
demandantes, basados en una auditoría interna que fue realizada en
violación de los derechos constitucionales consignados en los
artículos 34 numeral 4), 87, Cn., así como del arto. 2 numeral 1 del
Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo. Dicha
violación al procedimiento, involucra: a) que los auditados no
estuvieron presentes, no se realizaron notificaciones conforme a
derecho y dicha auditoria no fue solicitada por el |, ni se permitió a
sus miembros aportar documentos o hacer asistidos por abogados o
expertos contables para la defensa de sus derechos. b) Que
adicionalmente se violentaron los principios de transparencia,
legalidad y debido proceso, objetividad de los resultados de la
auditoria y rendición de cuentas que señala el artículo 4 de la Ley
681 “Ley Orgánica de la Contraloría General de la República y del
Sistema de Control de la Administración Pública y Fiscalización de los
Bienes y Recursos del Estado” C) Que el origen del FONDO SOCIAL,
nace de los salarios de los trabajadores del Ministerio del Relaciones
Exteriores y no de fondos estatales, razón por la que dichos fondos
no son auditables de parte del Ministerio de Relaciones Exteriores, ni
de la Contraloría General de la República. D) La administración de
dicho FONDO SOCIAL, fue cedida por el Ministerio del Relaciones
Exteriores al SINDICATO DEMOCRATICO DEL MINISTERIO DE
RELACIONES EXTERIORES (SITRAD-MINREX). E) El medio de
prueba documental denominada Acta de Auditoría Interna del
MINREX, es una prueba ilícita por cuanto fue obtenida en violación a
las garantías del debido proceso de control de bienes del Estado,
consignados en los artos. 51, 52, y 53 de la Ley 681 y en detrimento
de los derechos del Sindicato referido, y de sus miembros quienes
fueron despedidos sin justificación legal alguna. 2.- Que en el
considerando de Fundamentos de Derecho Tercero el juzgado de
primera instancia haya referido que los fondos no son patrimonio del
sindicato, aun cuando el arto. 3 inciso d) del Reglamento de
Asociaciones Sindicales faculta al Sindicato a adquirir cualquier titulo
y administrar bienes mueble o inmuebles que requiera para el
ejercicio de sus actividades, siendo el fondo social, adquirido por el
sindicato de forma lícita, mediante acuerdo con el Secretario General
del Ministerio de Relaciones Exteriores, de tal manera que
correspondía a la Asamblea General del Sindicato determinar la
forma en que la Junta Directiva Sindical debía rendir los Informes de
la Administración de dichos fondos, así como también determinar
cualquier sanción disciplinaria en contra de cualquier miembro que
hubiese mal administrado los mismos. 3.- Que en el Considerando
ocho de los hechos probados, se haya dicho que basado en el
dictamen de auditoría interna, quedó demostrado que existió
irregularidades en la administración del fondo social, en el que
supuestamente se refleja un perjuicio económico de C$401,014.58,
violentando los actores el arto. 48 incisos a y d C.T. 4.- También las
resoluciones del Ministerio del Trabajo, fueron violatorias al debido
proceso y el fuero sindical de los actores por haber sido sometidos a
un proceso disciplinario por causa justa, por causas que solo
correspondía conocer a un proceso disciplinario a la Asamblea
General del Sindicato. Además porque se sustrajo de la competencia
de la Ley 476 a los actores, correspondiendo conocer de tal causa a
la Comisión Tripartita en primera instancia y a la Comisión de
Apelación del Servicio Civil en segunda instancia, violentando
derechos de los servidores públicos a la estabilidad. 5.- Que en el por
tanto de la sentencia se haya resuelto no ha lugar a la demanda con
acción de reintegro interpuesta por los actores. Por consiguiente
piden que se revoque la sentencia recurrida y se ordene el efectivo
reintegro.
II.-
DE LA AUDITORIA INTERNA Y LOS ASUNTOS SINDICALES:
Observa este Tribunal Nacional Laboral, que el punto toral de queja
de los recurrentes consiste en determinar si la auditoría realizada a la
administración del Fondo Social cedido en administración al
SINDICATO DEMOCRATICO DEL MINISTERIO DE RELACIONES
EXTERIORES (SITRAD-MINREX) , de parte del MINISTERIO DE
RELACIONES EXTERIORES, que consistió en la prueba fundamental
que ocasionó su despido, fue o no una actuación que violentó leyes
de orden público. En la tarea de revisar el referido agravio, a este
Tribunal lo que le compete es determinar si tal actuación se
constituyó o no en violación de los derechos y garantías de orden
sindical que invocan los demandantes y aquí recurrentes. En tal
dirección, ha quedado demostrado en las diligencias de primera
instancia la existencia del denominado fondo social, que tiene como
propósito “la dación de canasta básica mensual, sanidad dental,
compra de anteojos, prestamos y otros a trabajadores del MINREX,
que ganen sueldos mensuales menores de (C$ 6,000.00) SEIS MIL
CORDOBAS NETOS ”; según se puede comprobar de la lectura de la
documental denominada ACUERDO, visible en los folios 78, 163 y
207, aportada por ambas partes. Este Fondo Social, cuyo propósito
ya referimos, fue administrado por el MINISTERIO DE RELACIONES
EXTERIORES, hasta el veintiuno de Noviembre del año dos mil tres,
fecha en que se firmó un acta de acuerdo entre el MINISTERIO DE
RELACIONES EXTERIORES Y EL SINDICATO DEMOCRATICO DEL
MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES (SITRAD-MINREX), a
través de la cual a partir de dicho momento la administración de ese
Fondo Social pasó a cargo de la mencionada organización sindical,
mediante la ya referida Acta de acuerdo que dice en sus partes
conducentes: “TERCERO: (ACUERDO) Siendo que en días pasados
se firmó el Convenio Colectivo que regirá por dos años entre la
Representación de la Máxima Autoridad del MINREX y SITRAD y que
de manera verbal se convino el traspaso de la Administración de este
fondo social al Sindicato, por lo que Acuerdan: trasladar y traspasar
al Sindicato del MINREX, (SITRAD) tanto la Administración del fondo
social como el saldo existente hasta el momento; las facturas
aportaciones serán trasladadas directamente al sindicato para su
debida administración, quienes se comprometen a administrarlo de
manera clara y transparente, rindiendo informes de manera pública”
(Folio 163 y 207) (Negritas y subrayados de este Tribunal). De tal
manera que el SINDICATO DEMOCRATICO DEL MINISTERIO DE
RELACIONES EXTERIORES (SITRAD-MINREX), no solo adquirió el
derecho de administrar el fondo social, sino la obligación de rendir
informes de manera mensual. Ante ello la pregunta que surge es
¿ante quien debería rendirlos? Esta pregunta, nos la aclara la
documental visible en el folio 162, consistente en memorando que le
dirigiera el Secretario General del Ministerio de Relaciones Exteriores
a la Directora de Recursos Humanos de dicha institución, en el que le
expresa: “…sobre el dinero entregado, el sindicato tendrá la
obligación de presentar informe mensual de sus gestiones y Gastos ,
soportados con fotocopia de los Estados de Cuentas de Banco, donde
deberán tener firmas mancomunadas, para la emisión de cheques,
además están obligados a guardar todos los soportes fehacientes del
Gasto, con el objetivo de presentarlos al momento de una revisión
orientada por la Direccion Superior de este Ministerio.” (Negritas y
subrayados de este Tribunal), hecho que era del pleno conocimiento
del SINDICATO DEMOCRATICO DEL MINISTERIO DE RELACIONES
EXTERIORES (SITRAD-MINREX), puesto que en Acta y Acuerdo de
las cuatro de la tarde del doce de noviembre del año dos mil tres de
dicha organización sindical, que rola en el Folio 160 y 161, la Junta
Directiva del referido Sindicato acordó en el punto 2: “El señor Uriel
Galeano Montoya, una vez le sea entregado en tiempo y forma su
nuevo cargo, esta obligado a entregar informe de los ingresos y
egresos realizados durante cada mes a la Dirección Administrativa , a
los Funcionarios del Servicio Exterior y a la Organización Sindical”
(Negritas y subrayados de este Tribunal). Por consiguiente, el mismo
sindicato era consciente que el MINISTERIO DE RELACIONES
EXTERIORES, podía perfectamente ordenar que se realizara
auditoria en calidad de revisión especial y seguimiento a los ingresos
y rendición de gastos del fondo social, no así a bienes propios del
sindicato como quiere hacer ver la parte demandante y recurrente,
hecho último que se descarta pues la auditoria se realizó únicamente
para revisión de la administración del fondo social que es propiedad
de los trabajadores de la Institución a quienes ésta debe proteger y
no son del sindicato, lo que indica que no son bienes o recursos
sindicales, conforme a lo expresado en la prueba documental
consistente en Informe de Auditoría In terna Número MI-002-008-10-
07, (Folios 14-37 y 164-187) dirigido por el Licenciado Guillermo A.
Lara Sandino, Auditor Interno al Licenciado Samuel Santos López, en
su calidad de Ministro de Relaciones Exteriores, que en el punto II.
Objetivos dispone: “El objetivo especifico de nuestra revisión especial
y seguimiento consistió en verificar el cumplimiento, confiabilidad y
suficiencia de la información administrativa, proporcionada por el
Sitrad-Minrex, responsable del uso y manejo del Fondo Social del
periodo objeto de nuestra revisión… ” De tal manera que por haberse
así acordado por las partes, a juicio de este Tribunal Nacional, la
auditoría Interna de la Institución tenía competencia para conocer y
revisar, por lo que no existe con tal actuación violación a los
convenios internacionales 87 y 98, ratificados por Nicaragua de la
Organización Internacional del Trabajo, descartándose que hayan
existido con tal auditoría, actos de injerencia de parte de la
Institución Estatal en los asuntos sindicales, pues los bienes del
fondo social no eran, ni fueron parte, de los bienes del sindicato
referido, razón por lo que no cabe acoger los agravios de los
recurrentes en tal sentido .
III.-
DEL CUMPLIMIENTO DEL DEBIDO PROCESO EN LA AUDITORIA
PRACTICADA. Siguiendo con el orden lógico de lo expuesto en el
considerando anterior, se quejan los recurrentes que el proceso de
auditoria interna violentó garantías del debido proceso, estatuidos en
los artículo 34 numeral 4), y 87 Cn. y artos. 51, 52, y 53 de la Ley
681, (“Ley Orgánica de la Contraloría General de la República y del
Sistema de Control de la Administración Pública y Fiscalización de los
Bienes y Recursos del Estado”) así como de los convenios 87 y 98 de
la O.I.T., por cuanto los aquí demandantes y recurrentes no fueron
parte en el proceso de auditoría, hecho que al ser contrastado con las
documentales aportadas por ambas partes se comprueba que del todo
no es cierto, por cuanto en el informe de auditoría interna Número
MI-002-008-10-07, se puede observar que los Señores demandantes
tuvieron parte en la misma, según Folios 16, 17, 18, 21, 23 y 28, que
además según carta del quince de Octubre del año dos mil siete,
dirigida por el recurrente ABSALON MONDRAGON, al Licenciado
LUIS OCTAVIO RODRIGUEZ, Secretario General del MINREX, le
expresa: “Además le reafirmamos una vez más que las
inconsistencias determinadas en el informe de los auditores internos
se deben a una mala presentación contable, y a falta de
conocimientos contables del responsable de llevar los registros y
controles de nuestro sindicato, así mismo le informamos que estamos
en el proceso de preparar los informes contables debidamente
soportados, por el periodo de mayo a septiembre del 2007”, (Folio
149), hechos que no se contradicen con lo ya expuesto por el mismo
destinatario al mismo receptor, en la documental visible en el folio
150 consistente en carta con fecha cinco de octubre del año dos mil
siete en el que le expresa en sus partes conducentes: “..Tengo el
agrado de dirigirme a usted, con el propósito de aclarar el informe
borrador que envía el auditor interno el día 02 de octubre del
presente año…..le solicito que extienda el periodo en un tiempo
prudencial en el cual nuestro contador ayude a demostrar cómo se
han utilizado los fondos y poder dar respuesta a loS señalamientos
presentados por el Lic. Guillermo Lara Auditor Interno en carta con
fecha 13 de Septiembre del 2007...” A esto, debe sumarse que los
demandantes son firmantes de las Actas de Reunión en la Oficina de
Auditoría Interna del Ministerio de Relaciones Exteriores, con fechas
dos de octubre del dos mil siete, y treinta y uno de agosto del año
dos mil siete, visibles en los folios 151-152 y 158-159,
respectivamente. De tal manera que en todo el proceso de Auditoría
Interna, los demandantes ABSALON MONDRAGON MOLINA Y
SANTOS FRANCISCO MONDRAGON MOLINA, fueron participes y no
excluidos, cumpliendo de esta manera con las garantías procesales
que ahora dicen haberles sido violentadas, razón por la que no cabe
acoger los agravios en este sentido.
IV.-
DEL PROCESO ADMINISTRATIVO DE AUTORIZACION PREVIA
PARA EFECTUAR EL DESPIDO Y CAUSA JUSTA DE ESTE: Se
quejan los recurrentes que las resoluciones del Ministerio del
Trabajo, fueron violatorias al debido proceso y el fuero sindical de los
actores por haber sido sometidos a un proceso disciplinario por causa
justa, cuando estas solo correspondía conocer a un proceso
disciplinario a la Asamblea General del Sindicato. Además porque se
sustrajo de la competencia de la Ley 476 en sus instancias
respectivas. En el caso sub-judice, se observa que si bien es cierto
se trata del despido de dos servidores públicos, protegidos por la Ley
476 Ley del Servicio Civil y de la Carrera Administrativa, según el
arto. 231 C.T. es competencia del MITRAB autorizar los despidos de
los trabajadores que ostentan fuero sindical, lo que fue efectivamente
cumplido, pues se demuestra en autos que el empleador cumplió con
el pre-requisito procesal de tutela del que resultaron las resoluciones
administrativas dictadas por el Ministerio del Trabajo a través de la
Inspectoría Departamental del Trabajo de Managua, de las ocho de la
mañana del veinticinco de enero del año dos mil ocho y de la
Inspectoría General del Trabajo de las diez y veinte minutos de la
mañana del veintiséis de febrero del año dos mil ocho, visibles en los
Folios 61al 66 y 67 al 73, que autorizaron los despidos de los actores
y aquí recurrentes quienes fueron participes de dicho proceso
administrativo. En el mismo sentido rolan las pruebas de la causa
justa de despido, específicamente el documento indubitable
consistente en Informe de Auditoría Interna Número MI-002-008-10-
07, (Folios 14-37 y 164-187) dirigido por el Licenciado Guillermo A.
Lara Sandino, Auditor Interno al Licenciado Samuel Santos López, en
su calidad de Ministro de Relaciones Exteriores, que es el mismo que
tuvo como sustento la autoridad administrativa del trabajo para
autorizar el despido conforme a los Artos. 48 y 231 C.T., mismo que
fue tenido como prueba documental en el juicio (Folio 204). Y
finalmente, no rola en autos pruebas que demuestren que los
recurrentes iniciaron algún proceso de impugnación por vía
constitucional en contra de las resoluciones del Ministerio del
Trabajo, razón por la que dichas resoluciones causaron estado, lo
que lleva a concluir en la legalidad de los despidos de los actores.
Por lo que no queda masque confirmar la sentencia recurrida en
todos y cada uno de los puntos recurridos al resultar improcedentes
los agravios.
POR TANTO:
En base a lo considerado, disposiciones legales citadas y Artos. 129,
158, 159 Cn., Ley No. 755, Artos. 270, 271, 272 y 347 C.T., 1 y 2
LOPJ, los Suscritos Magistrados del Tribunal Nacional Laboral de
Apelaciones, RESUELVEN : I.- Téngase por apersonados a los
Señores ABSALON MONDRAGON MOLINA Y SANTOS FRANCISCO
MONDRAGON MOLINA y déseles intervención de ley como en
derecho corresponde. II.- No ha lugar al recurso de apelación
interpuesto por los Señores ABSALON MONDRAGON MOLINA Y
SANTOS FRANCISCO MONDRAGON MOLINA, en contra de la
sentencia definitiva dictada por el Juzgado Segundo de Distrito del
Trabajo de la Circunscripción Managua, de las nueve de la mañana
del veintinueve de septiembre del año dos mil once, en el juicio
laboral promovido por estos en contra del ESTADO DE LA
REPUBLICA DE NICARAGUA. III. En consecuencia, se confirma la
sentencia recurrida. IV.- No hay costas. Disentimiento: “DISIENTE la
suscrita Magistrada de Tribunal, ANA MARÍA PEREIRA TERÁN de las
consideraciones y resoluciones de mayoría, al considerar que en el
presente asunto de una valoración conjunta de la prueba se
desprende que el “FONDO SOCIAL” administrado por el SINDICATO
DE TRABAJADORES DEMOCRÁTICOS DEL MINISTERIO DE
RELACIONES EXTERIORES (SITTRAD MINREX) estaba constituido
por contribuciones mensuales voluntarias del personal del Servicio
Exterior de dicho Ministerio (Ver Fol. 78 y 90), por ende no eran
fondos públicos pertenecientes al Estado de Nicaragua. Luego,
conforme la plena autonomía sindical estatuida en el Arto. 87 Cn, el
Arto. 3 del Convenio 87 O.I.T., Arto. 2, Núm. 1) del Convenio 98
O.I.T. y los estatutos de dicho sindicato (Ver Fol. 41 al 52, Artos. 10,
Lit. c), 17, Lit. c), 23, Lit. c) y 27), el conflicto entre la Junta
Directiva y los trabajadores del MINREX, debía dilucidarse a lo
interno de la Asamblea General del Sindicato referido, que es donde
precisamente se hacían públicas las actuaciones e informes de la
Junta Directiva, donde se aprobaban o no las cuentas de éstos y
donde se dilucidaba la destitución y/o expulsión de la Junta Directiva
de donde resulta incompatible que sea el Empleador quién pretenda
“resolver” la problemática sindical de sus trabajadores mediante el
despido de los sindicalistas objetados, lo que podría interpretarse
como una injerencia del Empleador en la organización y
administración del Sindicato referido. La O.I.T., en el Libro de
“Recopilación de decisiones y principios del Comité de Libertad
Sindical del Consejo de Administración de la O.I.T.” 5ta. Edición
revisada, Pág. 101, ha dicho: “La libertad sindical implica el
derecho de los trabajadores y de los empleadores a elegir
libremente a sus representantes y a organizar su administración y
actividades sin injerencia alguna de las autoridades públicas.”
(454). “La idea fundamental del artículo 3 del convenio núm. 87 es
que los trabajadores y empleadores puedan decidir por sí mismos
las reglas que deberán observar para la administración de sus
organizaciones y para las elecciones que llevarán a cabo.” (455) .
Luego, el informe de auditoría con el cual se pretendía demostrar la
causa justa de despido de los trabajadores sindicalistas (Ver Folio 14
al 37) resulta ser insuficiente, por cuanto las conclusiones en ella
anotadas (Falta de Probidad, etc.) no fueron probadas y
reproducidas en su totalidad en la vía jurisdiccional, ante el Juez, en
base al Principio de Inmediación, amén de que conforme el Arto. 275
C.T. las autoridades laborales no gozamos de competencia funcional
y territorial para dilucidar o convalidar cuestiones administrativas de
auditorías. Por las razones aquí dadas, estoy por la
REVOCATORIA.”. Cópiese, notifíquese y con testimonio de lo
resuelto, vuelvan los autos al juzgado de origen.
SE CONSIDERA :
UNICO:
DE LA NULIDAD COMETIDA EN EL CASO SUBJUDICE: Revisando
el caso de autos, nos encontramos con que mediante auto de las
nueve de la mañana del nueve de noviembre del año dos mil once, se
citó a las partes para que en el término de las cuarenta y ocho horas
más el término de la distancia, comparecieran a celebrar trámite
conciliatorio conforme dispone el art. 310 C.T. que reza: “Presentada
la demanda en forma debida, la autoridad laboral, dentro de las
veinticuatro horas, dictará auto admitiéndola. El auto contendrá
además lugar, fecha y hora para la contestación de la demanda y
para el trámite conciliatorio que se hará en la misma audiencia” .
Dicho auto les fue notificado a las partes vía exhorto y por medio de
cédula judicial el diecinueve de septiembre del año dos mil once,
según consta en las diligencias de primera instancia en los folios 12
al 15. No obstante, de la lectura de dicho expediente este Tribunal se
percata que no rola en autos la constancia de celebración de dicho
trámite, bien por falta de comparecencia o por falta de acuerdos, sino
que únicamente consta en autos la contestación de demanda, que se
contiene en los Folios 16 y 19, consistiendo todo ello en que no se
evidencia en el expediente del caso de autos que se haya celebrado
dicho tramite conciliatorio, vulnerándose el Principio de Conciliación
estatuido en el art. 266 C.T. que reza: “Todos los procedimientos y
trámites estarán fundamentados en los siguientes principios: … i)
conciliación para que los procedimientos laborales, tanto
administrativos como judiciales, se hagan más expeditos y
eficientes a través de este trámite, basado en el convencimiento
que es indispensable buscar el acuerdo entre las partes, evitando
en lo posible la proliferación de los juicios y promoviendo buenas
relaciones entre trabajadores y empleadores…” y por ende el
referido art. 310 C.T. ya citado. Lo anterior, también violenta
colateralmente los Principios de Inmediación y de Publicidad de las
Actuaciones, contenidos en el ya citado art. 266 inc. c) y d), por
cuanto se ignora si el trámite fue o no celebrado con presencia de la
autoridad judicial, y por no constar en autos un trámite sustancial de
orden público sin el cual no puede tener validez el presente juicio. En
tal sentido siendo que se han violentado normas del debido proceso,
cuyos resultados derivan en nulidad, en observancia a las normas
que a continuación se citan: 1.- Art. 34 Cn. numeral 4 que reza:
“Toda persona en un proceso tiene derecho, en igualdad de
condiciones al debido proceso y a la tutela judicial efectiva y, como
parte de ellas, a las siguientes garantías mínimas:…4.- a que se le
garantice su intervención y debida defensa desde el inicio del
proceso o procedimiento y a disponer de tiempo y medios adecuados
para su defensa…”; 2.- Art. 7 Pr.: “…Los procedimientos no
dependen del arbitrio de los jueces los cuales no pueden restringirlos
ni ampliarlos, sino en los casos determinados por la Ley…” y 3.- Art.
14 LOPJ: “Los Jueces y Magistrados deben guardar observancia del
debido proceso en toda actuación judicial, cualquiera sea la
naturaleza del proceso, brindando las garantías necesarias a las
partes para la adecuada defensa de sus derechos. También deben de
impulsar de oficio los procedimientos que la ley señale y ejercer la
función tuitiva en los casos que la ley lo requiera” , y teniendo en
cuenta además lo estatuido en el Arto. 318 C.T. que dispone : “En
cualquier estado del juicio podrán las partes llegar a un
avenimiento. En este caso no procede ningún recurso.” , es decir,
que el trámite conciliatorio también puede verificarse en cualquier
estado del pleito, lo que procede a consideración de este Tribunal
Nacional es declarar la nulidad absoluta de la sentencia definitiva
dictada por el A Quo, a las doce y treinta minutos de la tarde del siete
de junio del año dos mil trece, que rola en folios 78 y 79 del
expediente de primera instancia , debiendo ordenarse que se remitan
las diligencias al Juzgado Subrogante, por haber emitido opinión el
Juzgado A Quo a fin de que este proceda a convocar a las partes a
celebrar el trámite conciliatorio y una vez agotado este trámite en
caso de ser necesario dicte la sentencia definitiva que en derecho
corresponde. En un segundo orden, para evitar que a futuro se
cometan nulidades de esta naturaleza, se hace una exhortación al
Juzgado A-Quo, a observar las garantías del debido proceso y a
resolver las peticiones de las partes en debida forma, pues de la
lectura de las diligencias, además de la nulidad señalada
anteriormente, se observa que el día dos de Julio del año dos mil
trece se le notificó al actor la sentencia definitiva, quien recurrió de
apelación el día octavo después de notificado y en consecuencia el
Juzgado A quo, admitió el recurso de apelación mediante auto de las
dos y cinco minutos de la tarde del cuatro de noviembre del año dos
mil trece, a como en derecho corresponde, no obstante, emplazó a la
parte demandada para que dentro de tercero día después de
notificada alegara lo que tuviese a bien, es decir contestara los
agravios, cuando lo correcto es haberle concedido el término de diez
días conforme al Art. 132 CPTSS y Acuerdo Número 126 de la Corte
Suprema de Justicia, del veintiséis de junio del año dos mil trece, en
el que se ordenó que en su numeral II que: “…en cuanto al Recurso
de Apelación de sentencias definitivas, deberán aplicarse los
términos establecidos en la nueva ley procesal…” , omisión procesal
que dio lugar a que la parte demandada presentara escrito en el que
solicita la reposición del auto de admisión de la apelación para que
se le concediera dicho término para contestar los agravios, sin
embargo dicho remedio no le fue tramitado, ni mucho menos resuelto
por el Juzgado de primera instancia, todo lo cual es comprobable de
la lectura de los folios 78 al 86 de las diligencias de primera
instancia, previniéndosele al A Quo ser más cuidadoso en la
tramitación de los asuntos a su cargo.
POR TANTO:
En base a lo considerado, disposiciones legales citadas y Artos. 129,
158, 159 Cn., Ley No. 755, Artos. 270, 271, 272 y 347 C.T., 1 y 2
LOPJ, este TRIBUNAL RESUELVE: I. De oficio se declara la nulidad
absoluta de la sentencia definitiva de las doce y treinta minutos de la
tarde del siete de junio del año dos mil trece dictada por el Juzgado
Local Único Civil y Laboral por Ministerio de Ley de la Libertad,
Chontales que rola en folios 78 y 79 del expediente de primera
instancia. Así mismo p or haber emitido opinión el Ponente del
Juzgado A Quo, pasen las diligencias al Juzgado Subrogante que
corresponda a fin de que proceda conforme se le indica en la parte
considerativa de la presente sentencia. II. No hay costas.
Disentimiento: “DISIENTE la suscrita Magistrada de Tribunal, ANA
MARÍA PEREIRA TERÁN , de las consideraciones y resoluciones de
mayoría, porque si bien es cierto el trámite conciliatorio no se llevó a
cabo, no existe ánimo de las partes de conciliar al observar que el
demandado incluso opuso la excepción perentoria de falta de acción
bajo el supuesto de “no deber nada” al actor, retrotrayéndose de
forma innecesaria el proceso a un trámite no esencial dado el litigio
cerrado de las partes, todo de conformidad con el Art. 143, LO.P.J.,
que a la letra, reza: “Son deberes de los Magistrados y Jueces: …
3. Convalidar los actos procesales verificados con inobservancia
de formalidades no esenciales, si han alcanzado su finalidad y no
han sido impugnados, en los términos de ley, por la parte a quien
pueda afectar”; por lo que considero se debió resolver el fondo del
asunto.”. Cópiese, notifíquese y con testimonio concertado de lo
resuelto, vuelvas las diligencias a su lugar de origen.