SABADOmañana
SABADOmañana
SABADOmañana
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2 PEDRO 3:14
Sábado Mantengámonos
“sin mancha, sin defectos
y en paz”
Mañana
9:20 Video musical
9:40 am
SERIE DE DISCURSOS:
๏ No pierda el entusiasmo
(Romanos 1:14, 15)
Kenneth Flodin
Ayudante del Comité de Enseñanza
Efesios 6:15 — Teniendo los pies calzados y listos para anunciar las buenas
noticias de la paz.
Así es, todos tenemos que estar listos para predicar en cualquier momento. En esta
serie veremos cinco cosas que nos ayudarán a estar listos para predicar y enseñar.
Romanos 1:14, 15 — Tengo una deuda con griegos y con extranjeros, con
sabios y con insensatos. 15 Así que estoy deseando [¿Lo vieron? ¡Con
entusiasmo, con fervor!] anunciarles las buenas noticias […].
Como Pablo, quienes sienten entusiasmo por la predicación están al rojo vivo,
quieren con todo el corazón que la gente conozca a Jehová. ¿Pero podría algo ir
apagando ese fuego? ¿O existe la posibilidad de que se extinga por completo, de
que perdamos el deseo de ayudar a la gente que, aun sin darse cuenta, anhela la
paz? Sí. Es muy difícil mantener ese fuego en el corazón cuando nos enfrentamos a
problemas como un territorio apático, la crítica, la persecución o la oposición de
familiares, o las dificultades de la vida diaria. Esos problemas también se pueden
comparar a un fuego, pero a un fuego que destruye, como los grandes incendios
que ha habido últimamente en la parte oeste de Estados Unidos. Sí, tales
problemas pueden ahogar nuestro entusiasmo por la predicación. Y ¿qué podemos
hacer? Hay una expresión que suelen utilizar a menudo los bomberos. Y es esta:
“El fuego se combate con fuego”. Para detener un incendio que se ha salido de
control, a veces se enciende un fuego que se pueda controlar. Ese fuego controlado
consume todo el material combustible que hay. Y, cuando llega allí el fuego
descontrolado, no tiene nada que consumir, así que se apaga. El fuego se combate
con fuego. Y el fuego del entusiasmo apaga el fuego de los problemas.
Acompáñenme a 1 Timoteo 4:16. Si nos falta entusiasmo, si el entusiasmo se nos
apaga, podríamos perder oportunidades de ayudar a otros a salvarse, a vivir en paz
con Dios. Vean lo que dice 1 Timoteo 4:16…
✓ Lo primero fue orar a Jehová. ¿Habrá incluido el hermano en su oración las
palabras de Romanos 12:11? Sí. Bien pudiera haberle pedido a Jehová que su
espíritu los llenara a ambos de fervor. ¿Recuerdan cuando dijo: “No sé en qué
momento nuestro día de predicación se convirtió en algo tan rutinario”?
Pidámosle a Jehová que nos “llene de fervor” para predicar con entusiasmo.
Que la falta de interés de la gente del territorio no sea un reflejo de nuestra falta
de entusiasmo.
✓ ¿Qué más notaron que hizo la pareja para avivar su entusiasmo? Consultaron las
publicaciones para ver qué sugerencias útiles encontraban. Si estudiamos la
Biblia con regularidad, tendremos presente por qué nos esforzamos en la obra
de hacer discípulos. Pensemos en todo lo que aprendemos de la actitud de
Jesús, del valor con el que predicaron los apóstoles a pesar de la persecución,
del ejemplo de Pablo, de Áquila y Priscila, de Esteban y de otros siervos del
pasado. Todos ellos pueden contagiarnos su entusiasmo.
✓ ¿Y notaron cuál fue el objetivo que se puso la pareja del video? Decidieron salir
a predicar de vez en cuando con hermanos que los mantuvieran animados. Y,
sea que estuvieran llamando a las personas por teléfono o predicando de casa
en casa, siempre hablaban de lo que podían hacer para predicar mejor.
Robert Ciranko
Ayudante del Comité de Redacción
El esposo dijo: “Sí, teníamos que prepararnos mejor”. ¿Se ha sentido alguna vez
así? Igual que la pareja del video, podemos, primero, preparar nuestro corazón y
nuestra mente y después ver cómo podemos usar nuestras herramientas. Nuestra
meta debe ser la misma que la del apóstol Pablo. En 1 Corintios 9:23, él escribió
que quería hacer “todas las cosas por las buenas noticias, para compartirlas con
otros”.
Si hace esto, estará listo y muy bien preparado para la obra de hacer discípulos y
será muy feliz al dar a conocer a otros las buenas noticias de la paz.
Anthony Morris
Miembro del Cuerpo Gobernante
En este discurso de la serie “Esté listo para predicar ‘las buenas
noticias de la paz’ ”, vamos a ver la importancia de tomar la
iniciativa. Primero, vamos a ver por qué debemos tomar la iniciativa, cómo lo
podemos hacer y, por último, veremos quién está con nosotros, dirigiéndonos, en
esta obra tan importante.
Juan 4:6 — De hecho, allí estaba el pozo de Jacob. Y Jesús, que estaba cansado
del viaje, se sentó junto al pozo. Era alrededor de la hora sexta.
Juan 4:7 — En eso llegó una mujer de Samaria a sacar agua. Jesús le dijo:
“Dame de beber”.
Solo dijo eso, “Dame de beber”. Bien, ¿y qué aprendemos de esto? Como dijimos,
Jesús estaba cansado, y nosotros también nos cansamos, y con facilidad; difícil
evitarlo. Si Jesús, que era perfecto, se cansaba, nosotros más aún. Puede que a
veces pensemos: “Bueno, creo que le puedo predicar a esta persona, pero es que
no tengo ganas. Estoy cansado”. Jesús no pensó así. ¿Queremos imitar a Jesús?
Pues, incluso cuando estemos cansados, pensemos en los demás y aprovechemos
la oportunidad para empezar una conversación. Ese es el primer paso.
Juan 4:9 — Pero la samaritana le preguntó: “¿Cómo es que tú, que eres judío,
me pides agua a mí, que soy samaritana?”. (Porque los judíos no tienen trato
con los samaritanos).
Y viceversa tampoco. Así es, por el prejuicio, no tenían trato. Y encima era una
mujer. Y lo que sucede es que a las mujeres no se las trataba nada bien durante esa
época. Entonces, era una mujer, una samaritana, pero Jesús le pidió agua, y así
empezó una conversación con ella. Bueno, de esto aprendemos una lección
valiosa. Jesús no permitió que el hecho de que ella fuera una mujer —y una
samaritana (porque él andaba en territorio samaritano)— lo llevara a retenerse de
hablar con ella. Nada de eso. La lección, entonces, ¿cuál es? No juzguen a las
personas por las apariencias, cosas como el color de piel, la cultura… Este mundo
ya tiene muchos jueces. Pero los testigos de Jehová no estamos para juzgar. Son
Jehová y Jesús los que tienen que juzgar. Y jamás piensen que no van a querer
escucharlos. Eso está mal. Jesús no hizo eso. Y, como dijimos, él fue el modelo
perfecto. Inténtelo. Y, si se siente muy nervioso, pídale a Jehová que lo ayude con
su espíritu, que le dé el valor que necesita para poder hablar con otros sobre su
nombre y su propósito.
Y de aquí también podemos sacar otra lección muy importante. Al conversar, no se
apresure a predicar de inmediato, sino que deje que la conversación fluya. Justo
Juan 4:25 — La mujer le dijo: “Yo sé que va a venir el Mesías, al que llaman
Cristo. Cuando él venga, nos lo explicará todo”.
¿Vieron? La mujer dijo lo que estaba en su corazón. Sigamos con el versículo 26.
Juan 4:26 — Jesús le contestó: “Ese soy yo, el que está hablando contigo”.
¡Guau! ¿Se imaginan? ¡Qué honor tan grande! ¡Ella estaba hablando con el mismo
Mesías! Pero pónganse ustedes a pensar en lo siguiente: ¿qué tal si Jesús, en vez de
esto, hubiese empezado la conversación diciendo: “Soy el Mesías. Dame de
beber”? ¡Quién sabe! Pero Jesús, quien era muy sabio y tenía el espíritu santo de
Jehová, primero empezó a conversar con ella. Pues nosotros deberíamos tratar de
hacer lo mismo: intentar conversar primero. Podríamos empezar con un
comentario sincero que despierte el interés de la persona. Por ejemplo, imagínese
que va al médico y está en la sala de espera. Y usted se pone a pensar un poco y ve
que hay alguien ahí que lo está mirando y usted le dice: “Ay, ojalá llegue el día en
el que ya no me enferme más”. Bueno, podrían verlo y pensar para sus adentros:
“¿Y este loco qué?”. O podrían decirle: “Eso no suena mal. ¿Usted de verdad cree
que eso sea posible?”. En cualquiera de los dos casos, usted empezó a conversar,
tomó la iniciativa. Ahora queda en manos de Jehová. Él es quien se lleva la honra,
pase lo que pase.
[Se sienta otra pareja en la mesa de al lado para comer. La mujer pidió el mismo
plato que Yuri. Yuri empieza una conversación con ella.]
Bueno, todos pudimos ver cómo tomó la iniciativa, aunque, claro, al principio se
congeló un poco, no supo qué decir… Es normal ponerse un poquito nerviosos.
Después de todo, nadie es perfecto. Y, cuando vio que la señora se iba a ir, salió
corriendo a entregarle un tratado. Mejor vaya con calma. Sencillamente empiece
una conversación y deje que el espíritu de Jehová la dirija, tal como hizo Jesús.
Y así, poco a poco, podrá ir introduciendo el mensaje en la conversación con la
persona de manera natural. Ahí tenemos, mis hermanos, una buena técnica.
Inténtenlo. Jehová los va a bendecir.
Y, por último, quiero que recuerden esta idea que los va a animar y a ayudar a
siempre tomar la iniciativa al conversar con otros sobre las buenas noticias de la
paz. No la olviden porque, aunque muchos la conocen, es un excelente
recordatorio. Está aquí, en Apocalipsis 14. Vamos al versículo 6, que, como dije, ya
seguramente conocen. Y dice:
Apocalipsis 14:6 — Vi a otro ángel que volaba en medio del cielo. Tenía buenas
noticias eternas que anunciarles a los que viven en la tierra: a toda nación,
tribu, lengua y pueblo.
Gary Breaux
Ayudante del Comité de Servicio
Para que entendamos por qué debemos volver a hablar con las
personas que han mostrado interés, Pablo comparó nuestra obra con la que hace
un agricultor que siembra una semilla. ¿Qué tiene que hacer el agricultor para que
una plantita crezca? Los expertos dicen: “De todas las cosas que ayudan a una
planta a crecer, el agua es, en definitiva, la más importante”. Y también se ha
dicho: “Hasta que la semilla germine, la tierra debe mantenerse húmeda, no se
debe permitir que se seque”. Así que ¿qué sucederá con una semilla sin agua?
Nada, no crecerá. Es de suma importancia regar la semilla para que esta germine y
eche raíces, y para que siga creciendo. Pues, de las palabras de Pablo en
1 Corintios 3:6 podemos aprender que algo parecido sucede con las semillas de la
verdad que sembramos al predicar. Leamos lo que dijo Pablo aquí, en 1 Corintios
3:6.
1 Corintios 3:6 — Yo planté, Apolos regó, pero Dios siguió haciéndolo crecer.
Aunque toda la gloria va a Jehová por hacer que esa semilla crezca, ¡qué bonito es
que nos permita contribuir en el proceso! ¿Notaron la importante función que
cumplió Apolos? Él fue quien regó. Por decirlo así, Apolos mantuvo húmeda la
tierrita en el corazón de cada uno de ellos. No dejó que esta se secara. Muchas
personas que muestran interés en nuestro mensaje andan en busca de la verdad
acerca de Dios. Para que su interés crezca y sigan aprendiendo, hay que visitarlas
una y otra vez. Esto requerirá que nos preparemos bien y que hagamos buenos
planes. Si visitamos cuanto antes a quien muestra interés, demostramos que de
verdad nos importa esa persona, que queremos que crezca en sentido espiritual y
llegue a tener una amistad con Jehová.
Cuando haga planes para salir a predicar, imite el ejemplo de la hermana que
vimos en el video y aparte un tiempo específico para hacer revisitas. Las revisitas
son igual de importantes que otros aspectos de nuestro ministerio. Esas visitas que
hacemos para cultivar el interés de las personas son esenciales para poder
comenzar un curso bíblico. Muchas veces felicitamos a las personas en la
predicación cuando vemos las bonitas flores que tienen en su jardín, ¿no?, tal
como hizo la hermana del video que vimos. Pero ¿por qué se ven tan bonitas?
Porque seguramente la persona las regó en un cierto horario. Quizás hasta tiene
programado uno de esos sistemas de riego automático para que riegue las plantas
Por supuesto, debido a que las personas andan tan ocupadas en estos días, a veces
es difícil encontrarlas en casa, aunque nos hayan dicho que van a estar. Así que, en
ciertos casos, una opción podría ser pedir los datos de contacto, tal vez su
teléfono. Para poder hablar de nuevo con las personas, algunos publicadores
preguntan: “¿Le envío un mensaje?”. Quizás por este medio sea posible seguir en
contacto con la persona y cultivar su interés. Y, si no es posible conseguir los datos
de contacto y la persona no está en casa en el momento acordado, tal vez podría
dejarle una notita, tal como hizo la hermana del video. Así la persona se dará
cuenta de que usted no se olvidó de ella. La obra de hacer discípulos requiere que
seamos pacientes y que no nos rindamos. Con respecto a esto, miren lo que dice
Eclesiastés 11:6. Eclesiastés 11:6 dice:
Cuando uno siembra semillas de verdad, no sabe exactamente dónde o cuándo
germinarán. Puede que haya muchas cosas que no se puedan controlar. Lo mismo
sucede con nuestra obra de hacer discípulos. Hay que tener paciencia y ser
positivos, porque no sabemos quién va a aceptar la verdad.
¡Qué privilegio! ¡Poder ser colaboradores de Dios y así demostrar que lo amamos a
él y también a nuestro prójimo! ¿Verdad que nos da mucha alegría poder volver a
hablar con quienes ya han mostrado interés en las buenas noticias? Y no lo duden.
Las personas a quienes les prediquen jamás olvidarán los esfuerzos que hagan por
volver a hablar con ellas cuanto antes y enseñarles la verdad.
William Malenfant
Ayudante del Comité de Enseñanza
Hebreos 6:1 — Por lo tanto, ya que hemos dejado atrás las enseñanzas básicas
acerca del Cristo, avancemos hacia la madurez […].
¿Y no es eso lo que queremos que nuestros estudiantes hagan? Que no se queden
solo con las enseñanzas básicas de la Biblia, sino que maduren espiritualmente.
Y esa madurez de la que habla Pablo se obtiene a medida que los estudiantes van
aprendiendo y valorando lo que aprenden sobre la verdad. Nuestros estudiantes
tienen que aprender a amar a Dios y sus normas. Tienen que darse cuenta de que
todo lo que él nos dice que hagamos es para nuestro bien. Él nos ama de verdad.
Cuando los estudiantes de la Biblia ven los buenos resultados de obedecer a Jehová
y de hacer las cosas como él dice, su amor por él crece.
Fijen su atención en el siguiente VIDEO. Por favor, noten cómo una hermana
ayuda a su estudiante a progresar y madurar espiritualmente.
Proverbios 3:5, 6 nos dice específicamente qué es lo que Jehová quiere que
hagamos. Proverbios 3:5, 6 dice:
Si hacemos todo lo que él nos manda, le demostramos que confiamos en él. Como
resultado, él nos verá como sus amigos. Y Jehová cuida muy bien de sus amigos. Él
nunca les va a fallar.
Salmos 1:2, 3 — Sino que disfruta con la ley de Jehová; [Y, bueno, la ley de
Jehová se encuentra en la Biblia. El salmo sigue diciendo:] día y noche lee su ley
y medita en ella. 3 Será como un árbol plantado junto a corrientes de agua, un
árbol que da fruto a su tiempo y cuyas hojas no se marchitan. Todo lo que él
haga tendrá éxito.
Así es: todo lo que él haga como cristiano, lo que haga por obedecer a Dios,
tendrá éxito. Si leemos la Biblia y ponemos en práctica lo que dice, Jehová nos
bendecirá. Ahora, si su estudiante siente que no es capaz de entender lo que la
Biblia dice —tal vez porque no tenga muchos estudios—, por favor, dígale que le
ore a Jehová y que le pida constantemente y sin cesar que le dé la ayuda que
necesita para comprender su Palabra. Santiago 1:5 nos asegura que Jehová está
listo para darle sabiduría a todo el que le pida su ayuda constantemente.
Hablemos ahora sobre la lección 10. Se nos ha dicho que tenemos que invitar a
nuestros estudiantes a las reuniones lo antes posible, porque lo que escuchen y
observen en las reuniones puede tocar sus corazones y ayudarlos a madurar
espiritualmente. Así que, cuando muestre el video ¿Cómo son nuestras reuniones?,
que está en la lección 10, ese será un buen momento para invitarlo con cariño a
que asista a las reuniones. También tenga la costumbre de invitar a diferentes
hermanos a que lo acompañen al curso. De esa manera, su estudiante conocerá a
varias personas de la congregación y eso lo ayudará a sentirse más cómodo cuando
asista a las reuniones.
3 Juan 4 — Nada me da más alegría que oír que mis hijos siguen andando en la
verdad.
Sí, Juan estaba hablando de sus hijos espirituales. Y esa felicidad también puede ser
nuestra.
¿Qué nos ha enseñado toda esta serie de discursos? Hemos visto cómo podemos
mantener el entusiasmo al predicar. También nos ha enseñado a prepararnos bien
para hablar de la verdad con otros. Aprendimos a tomar la iniciativa para predicar
informalmente, a volver a hablar con quien muestra interés y a ayudar a los
estudiantes a madurar espiritualmente. Si hacemos nuestro mejor esfuerzo en la
predicación, sea que la gente nos escuche o no, tendremos paz, porque sabremos
que Jehová está contento con nosotros. Hebreos 13:15, 16 nos dice cómo agradar
a Dios. Y, sin duda, eso es algo que todos queremos hacer, ¿verdad? Leamos
Hebreos 13:15, 16. Dice así:
Cuando ustedes se esfuerzan por predicar “las buenas noticias de la paz”, le están
haciendo un sacrificio a Dios y pueden estar seguros de que Jehová estará muy
contento al ver todo lo que, por amor y lealtad, hacen por él.
Mark Sanderson
Miembro del Cuerpo Gobernante
Un hermano de 18 años tenía que decidir qué iba a hacer
cuando terminara la escuela. Se había criado en la verdad y tenía
el deseo de ser precursor regular. Pero también lo habían aceptado en una
universidad y le habían ofrecido una beca y otras ayudas para pagar sus estudios.
Tenía muchas preguntas. Por ejemplo, ¿cómo iba a poder mantenerse? Sus
profesores y otras personas en la escuela lo presionaban para que fuera a la
universidad. ¿Qué decisión iba a tomar el hermano? La verdad es que puede que
tú, que estás escuchando este discurso ahora, estés pasando por una situación
parecida o tengas que tomar la decisión en un año o dos. ¿Qué camino vas a
elegir? Hay algo que debes tener claro: Jehová quiere que tengas no solo una vida
normal, una vida más o menos buena; quiere que tengas una vida genial, increíble.
Quiere que seas feliz ahora, pero también durante el resto de tu vida. Por eso, en
Eclesiastés 11:9 la Biblia dice:
Muchos jóvenes han encontrado verdadera paz y felicidad al escoger una vida en
el servicio de tiempo completo. Pero ¿QUÉ SIGNIFICA ESTO DE SERVIR A
TIEMPO COMPLETO? El servicio de tiempo completo no es solo una cosa.
En realidad, pueden ser muchas cosas. Puede ser servir de precursor, quizás en tu
propia congregación, o servir en otro lugar: en otra ciudad, provincia, estado o
incluso en otro país. O también puedes hacer otras cosas, como trabajar en
proyectos de construcción, quizás haciendo Salones del Reino o de Asambleas o
construir oficinas remotas de traducción o incluso construir o remodelar una
sucursal. O si prefieres puedes llenar una solicitud para servir en Betel y hacerte
betelita. De verdad, hay tantas cosas geniales que puedes hacer para servir a
Jehová, cosas que un joven como tú puede disfrutar en el servicio de tiempo
completo.
¿Qué son esas cosas? ¿De qué cosas está hablando Jesús? Para descubrir la
respuesta, vayamos al versículo 25. Aquí vamos a ver de qué estaba hablando
Jesús cuando dijo las palabras que leímos antes.
Mateo 6:25 — Por eso les digo: dejen de angustiarse por su vida, por lo
que van a comer y beber; o por su cuerpo, por lo que van a ponerse. Al fin
y al cabo, ¿no vale más la vida que el alimento y el cuerpo que la ropa?
Mateo 6:26 — Observen con atención las aves del cielo. No siembran ni
cosechan ni almacenan en graneros, pero su Padre celestial las alimenta.
¿Y acaso no valen ustedes más que ellas? 27 ¿Quién de ustedes, por
angustiarse, puede alargar un solo codo la duración de su vida?
28 Además, ¿por qué se angustian por la ropa? Aprendan una lección de
cómo crecen los lirios del campo. No trabajan duro ni hilan; 29 pero les
digo que ni siquiera Salomón en toda su gloria se vistió como uno de
ellos. 30 Entonces, si Dios viste así a la vegetación del campo, que hoy
está aquí y mañana se echa al horno, ¿no los vestirá a ustedes con mucha
más razón, gente de poca fe? 31 Así que nunca se angustien y digan:
‘¿Qué vamos a comer?’, o ‘¿Qué vamos a beber?’, o ‘¿Qué vamos a
ponernos?’. 32 Porque es la gente de las naciones la que busca todas estas
cosas con tanto empeño. Su Padre celestial sabe que ustedes necesitan
todas estas cosas.
¿Verdad que cuando la comida no tiene sal no tiene muy buen sabor? Pero le
pones un poquito de sal y ¿qué pasa? Ahora está muy rica. Por eso, recuerda:
cuando vayas a hablar con tu familia, échale un poquito de sal a tus palabras.
Así estarán más dispuestos a escucharte y podrás ayudarlos a ver lo buena que
es tu decisión. Pero también puede ser que tu familia no esté de acuerdo
contigo. Si es así, mira lo que dijo Jesús en Lucas 7:35. Aquí Jesús dijo:
¿Cuál es el punto? Que, a veces, cuando tomamos una decisión, no siempre
está claro desde el principio si fue una buena decisión. Pero, cuando da buenos
resultados, cuando las cosas te salen bien, cuando tu familia ve que estás
contento, que te va bien, ven tu felicidad, tu satisfacción… entonces, ¿qué pasa?
Bueno, puede que tus familiares vean que la decisión que tomaste fue buena, y
así queda demostrado que lo que decidiste fue sabio.
Santiago 1:4 — Pero dejen que el aguante complete su obra, para que
ustedes sean completos y sanos en todos los sentidos, y no les falte nada.
¿Qué quiso decir Santiago? ¿Cuál es el punto? Bueno, en inglés tenemos esta
expresión: “No pain, no gain”. Algo como: “Sin dolor —o sin esfuerzo— no hay
recompensa”. Si quieres estar en forma o ser muy bueno en un deporte, seguro que
a veces vas a estar cansado y te va a doler el cuerpo. Y, como puede que al
principio no seas muy bueno en lo que estás haciendo, quizás algún día te duela
un poquito el orgullo. ¿Pero qué haces? Si quieres ser bueno, si quieres lograr esa
meta, no te puedes rendir. Tienes que seguir esforzándote. Nos pasa algo parecido
cuando nos ponemos metas espirituales. Lo que Santiago dijo nos enseña que las
pruebas nos ayudan a descubrir nuestras debilidades. Quizás nos damos cuenta de
que tenemos que mejorar algo en nuestra forma de ser, nuestra personalidad, o
quizás algo en nuestra relación con Jehová. Quizás necesitamos más fe o
necesitamos más confianza en Jehová. Si seguimos adelante, si aguantamos
durante las pruebas y no nos rendimos nunca, nos hacemos más fuertes, nos
hacemos más fuertes en sentido espiritual. Y nuestra relación con Jehová, nuestro
amor por él, nuestra fe en él, nuestra confianza en él sigue y sigue creciendo. Así,
como escribió Santiago, llegaremos a ser “completos y sanos en todos los
sentidos”, y no nos faltará nada. Por eso, cuando vengan estas pruebas, porque van
En el siguiente VIDEO, fíjate en cómo algunos siervos de tiempo completo han
encontrado paz a pesar de los tres obstáculos: la preocupación por el dinero, la
presión de otros y los desafíos inesperados.
Mis primos me presionaron para que estudiara una carrera. Yo sabía que
lo hacían porque me quieren. Si no estudiaba la carrera, ellos se iban a
sentir decepcionados, y eso afectaría nuestra
relación. Yo estaba muy angustiado. Quería ser
precursor para demostrarle a Jehová que confío
Anvil Bajracharya
en él. Estaba seguro de que él me ayudaría a NEPAL
disfrutar de mi servicio y a ser feliz. También
quería que mis primos supieran que los valoro
mucho. Así que pensé en maneras de demostrarles mi cariño con lo que decía y
hacía. Ellos han podido ver que ahora soy mejor persona y que me intereso más
por los demás. Y también se han dado cuenta de que estamos aprendiendo cosas
buenas y de que somos más felices y nuestra vida tiene verdadero sentido.
Algunos familiares que no son Testigos tal vez te den consejos sobre qué estudiar o
qué trabajo te conviene más. Tienen buenas intenciones y te están diciendo lo que
creen que es mejor para ti porque te quieren mucho. Pero, querido joven, estamos
convencidos de que las bendiciones que disfrutarás en el tiempo completo serán
mucho mayores que cualquier obstáculo que encuentres. Recuerda lo que nos
contaron los hermanos que salían en el video. Las decisiones de Harley le
permitieron ir a Betel y lo ayudaron a sentir que Jehová lo amaba mucho. Anjil
tuvo que ser muy valiente, pero las decisiones que tomó lo ayudaron a preocuparse
más por los demás, y sus familiares pudieron ver que había tomado una buena
decisión. Y Carlee no se rindió cuando le llegaron las pruebas. En vez de eso,
aprendió a amar aún más a las personas y se convirtió en una cristiana mucho más
fuerte en sentido espiritual.
Queridos jóvenes, ¿por qué estamos tan convencidos de que el servicio de tiempo
completo los ayudará a tener una vida increíble de verdad? Porque esa es la
decisión que muchos de nosotros tomamos cuando éramos jóvenes. ¿Se acuerdan
de ese joven de 18 años que tenía que decidir qué hacer con su vida? Bueno, ese
era yo hace unos cuantos años. Y estoy tan feliz de que, gracias a Jehová, gracias a
Querido joven: Jehová te ama. Él quiere que tengas una vida increíble y
emocionante. Si puedes hacerlo, elige el camino del tiempo completo. Nunca te
arrepentirás. Ese será un camino que te ayudará a ser feliz y a tener paz al lado de
nuestro maravilloso Dios, Jehová.
¿Es posible sentir paz si estamos pasando por pruebas muy difíciles? ¿Cómo nos
cuida Jehová cuando estamos bajo mucha presión?
En el siguiente video, conoceremos a hermanos que han sentido la paz de Jehová
en sus vidas. Se titula: Nuestros hermanos tienen paz a pesar de las dificultades: la
oposición, las enfermedades, los problemas económicos y los desastres naturales.
Yo creo que sin amigos me sentiría muy sola. Estaría pensando todo
el tiempo en mi enfermedad. Un día conocí a Marissa, en una
asamblea. Ella es muy buena conmigo y muy espiritual.
Cuando me llevaba al hospital, nos íbamos a comer juntas. Antoinette Fabian
Yo creo que la comida es algo que une a la gente, ¿verdad? ESTADOS UNIDOS
Y le dije: “Mira, me voy a poner este gorro”. Y me puse un gorro
así como de chef. Y entonces le digo: “En menos de una hora yo
regreso, venda o no venda”. Y así fue. Y, para sorpresa de ella,
no regresó ni un pan. Así que ella, cuando fui a vender por
segunda vez, me dice: “Vete pero ahora sin ese gorro”. Y empecé a
planchar ropa a domicilio. Se miraba extraño, porque
normalmente ese trabajo aquí lo hace una mujer,
pero un varón que vaya a planchar ropa a una casa
no se ve. Pero no me quería quedar de brazos
cruzados viendo a ver qué pasa. ¡No! Tenía que
poner mis manos ágiles para buscar el pan. Luego
predicaba un día y otro día iba a planchar. Y al otro día a predicar y al otro día a
vender pan. Entonces mi mente seguía ocupada en hacer algo, ya sea por el Reino,
ya sea por mi hogar, ¿verdad? Y eso me ayudó mucho.
Felix: Muchas gracias por las oraciones que haces por los hermanos de Rusia.
Valen mucho. Eres un ejemplo para nosotros.
Antoinette: Gracias. Es muy bonito que me digas tú eso. Los dos hemos pasado
por cosas muy difíciles. Seguro que estar en la cárcel fue superduro.
Felix: ¿Sabes, Antoinette? En la cárcel, los hermanos tenían un dicho: “Si te
preguntas ‘¿hay algo peor que esto?’, no tienes que esperar mucho para
averiguarlo”. En otras palabras, cuando piensas “no puede haber nada peor”,
está a punto de pasarte algo peor. Y, cuando nos dijeron la sentencia, pensamos:
“Ya está. Esto es lo peor que podía pasar”.
Estos ejemplos que acabamos de ver son de personas normales con “los
mismos sentimientos que nosotros”. Pero ellos sintieron paz incluso
cuando pasaron por pruebas muy difíciles. ¿Cómo lo lograron?
Cuando Miguel perdió su trabajo, siguió centrado en servir a
Jehová. Además, estuvo dispuesto a hacer trabajos humildes para
mantener a su familia. Margaret estaba preparada para un desastre natural. Y,
cuando sintió mucha angustia, le abrió su corazón a Jehová. Para afrontar la
depresión, Nikki buscó información en nuestras publicaciones y les pidió ayuda a
los ancianos. Aunque se enfrentó a una persecución brutal, Félix trató bien a
quienes lo maltrataban. Él sabía que actuando de esa manera demostraría ser un
buen cristiano. Y nuestra querida Antoinette, a pesar de su enfermedad, no se
centra en ella misma, sino en ayudar a los demás. Y, como ella dice, la cura para
ella —igual que para todos nosotros— es el Reino de Dios. Si usted está pasando
por una prueba, céntrese en lo que sí pueda controlar, ayude a los demás, sea
agradecido y apóyese en Jehová y en su organización. Y, si no está pasando por
pruebas difíciles, prepárese para cuando lleguen fortaleciendo su amistad con
Jehová. No se angustie, el miedo a lo que pudiera pasar a menudo es peor que la
propia prueba. Confíe en Jehová. Y no olvide que él jamás abandona a sus amigos.
Los hermanos y hermanas a los que acabamos de escuchar son grandes amigos de
Las bendiciones que recibimos cuando aguantamos una prueba nos dan fuerzas
para el futuro y nos ayudan a ser la clase de personas que Jehová quiere que
seamos. La paz interior y la felicidad que sentimos son un regalo de Jehová. Estos
hermanos de distintas partes del mundo nos recordaron que no debemos dudar
nunca de que nuestro maravilloso Padre celestial bendecirá a todos los que lo
aman.
Les damos las gracias a los hermanos que fueron entrevistados por sus
comentarios tan sinceros. Podemos aprender muchas lecciones de sus
experiencias. Las historias que contaron demuestran que podemos
seguir sintiendo paz aunque estemos pasando por pruebas difíciles.
Jehová siempre ayuda y cuida a sus siervos leales.
Llegó el momento del discurso de bautismo. Animamos a los que se van a bautizar
a prestar mucha atención. ¿Por qué andar por el camino de Jehová conduce a la
paz? ¿Qué tenemos que hacer para no salirnos de ese camino? Escuchemos con
atención al hermano William Turner, ayudante del Comité de Servicio, en el
discurso “Sigan andando ‘por el camino de la paz’ ”.
William Turner
Ayudante del Comité de Servicio
Igual que los cristianos del siglo primero, ustedes aprendieron la verdad acerca de
Jehová, y todo lo que aprendieron los ha motivado a bautizarse. Ustedes han hecho
lo que todos los siervos de Dios: se han quitado la vieja personalidad. Pero hay otra
cosa más. Deben hacer lo que dice el versículo 23, “seguir renovando su forma de
pensar”. La mente, nuestros pensamientos…, debemos cuidar las cosas que
¡Qué bien! Qué bueno que desde que eras una niña querías conocer a Dios. Pero,
durante todo ese tiempo que pasó antes de que te hicieras Testigo, ¿pasaste por
alguna prueba que te desanimara?
Sí, claro que sí. La verdad es que hice cambios muy rápidos y dejé de celebrar
las fiestas y de usar imágenes. Pero mi madre no entendía aquellos cambios y se
le hacía difícil aceptarlos, tenía miedo de que me hubieran lavado el cerebro.
Así que, después de unos meses, me obligó a volver a casa con ella, y por eso
tuve que dejar de estudiar y de asistir a las reuniones. Poco después, empecé a
juntarme con gente que influyó en mi manera de hablar y de comportarme.
Seguro que eso fue muy difícil. Entonces, ¿qué te ayudó a no rendirte y a seguir
andando en el camino de la paz?
Me di cuenta de que estar en paz con Jehová podía implicar no estar en paz con
mi familia. Pero sabía que, para que mamá aceptara la verdad, yo tenía que
andar en el camino de Jehová y no rendirme. Por eso, una noche, llorando le
pedí a Jehová que me perdonara y que me ayudara. Y, sin darme ninguna
explicación, unos días después, mi madre me envió a vivir de vuelta con mi tía.
Así que volví a estudiar la Biblia y un año después, a los 15, me bauticé.
¡Qué bien! Se ve que Jehová te escuchó y contestó tu oración. Y, desde entonces,
¿sientes que Jehová ha seguido guiando tus pasos?
Una buena amiga me ayudó a ver que tenía que hablarle a mi mamá de otra
forma. Así que un día la llamé y le dije que la quería mucho y que la valoraba, y
que quería que nos lleváramos mejor. Le expliqué que nunca había dejado de
quererla, pero que ahora mi amor por Jehová estaba en primer lugar. Aquella
conversación fue un antes y un después. Ahora conversamos más y entiende
mucho mejor por qué decidí hacerme Testigo. Ver cómo Jehová guía mi vida
hace que esté más decidida a seguir andando en el camino de la paz.
Muchísimas gracias, hermana Alfonso, por tus comentarios y por el buen ejemplo
que nos pones.
Vamos a ver el segundo punto: ¿EN QUÉ SENTIDO NOS DA PAZ ANDAR POR EL
CAMINO DE JEHOVÁ? Para responder, vamos a comparar el recorrido que han
hecho hasta hoy, el día de su bautismo, con un camino o una carretera. Y al hacer
esta comparación encontraremos muchas cosas parecidas. Por ejemplo, los dos
caminos tienen límites, un propósito y un destino.
Como vimos, algo que todos podemos hacer es buscar formas de hacer cosas
buenas por los demás, sean testigos de Jehová o no. Por ejemplo, la pandemia
nos ha dado muchas oportunidades de ayudar a los demás. Hemos estado
pendientes unos de otros y hemos distribuido comida y otras cosas. Y piensen
en lo que hacen nuestros hermanos una y otra vez para ayudar a los que sufren
por los desastres naturales. Piensen unos minutos en las personas que tienen
alrededor. ¿Qué cosas buenas podrían hacer por ellas? ¿Qué creen? ¿Hay
Ahora vamos a entrevistar a la hermana Gloria Herd. La hermana Herd lleva más
de 70 años bautizada y ha disfrutado de una vida maravillosa en el servicio
especial de tiempo completo junto a su esposo, el hermano Samuel Herd, del
Cuerpo Gobernante.
He aprendido que, cuando Jehová nos asigna una tarea, también nos da lo que
necesitamos para cumplirla. Los superintendentes viajantes y sus esposas me
han enseñado mucho. Para mí es un honor trabajar con estos hermanos tan
fieles, y algunos de ellos nos visitaban a mi familia y a mí cuando era una niña.
Ver su lealtad, lo felices que eran y la paz interior que tenían me hizo mucho
bien. Aprendí mucho de todos ellos y tomé la decisión de seguir su buen
ejemplo.
Otra cosa que me ha ayudado a tener paz es orarle mucho a Jehová. Muchas
veces teníamos muy poco dinero, o incluso nada, pero nunca nos faltó qué
comer y nunca nos perdimos ninguna reunión ni asamblea. Algo que he
aprendido es que no necesitamos dinero para que Jehová nos bendiga. Él
escucha nuestras oraciones, las contesta, y uno siente como si su respuesta
cayera del cielo.
¡Cuánto poder tiene la oración! Gracias por mencionarlo. Ahora, dinos: ¿cómo te
ha ayudado a mantener la paz con otros andar en el camino de la paz?
He trabajado y he vivido con muchas hermanas, y todas eran muy diferentes.
He tenido que aplicar las palabras de Romanos 12:18, que dice que, hasta
donde dependa de mí, viva en paz con todos (y todas). Así que, para mantener
la paz, algunas veces he tenido que adaptar mi personalidad. Por ejemplo, en
una de aquellas ocasiones, llegamos a casa de una hermana un martes. Y algo
de lo que le dije la molestó mucho, y se enojó conmigo. Pensé: “No voy a
echarle más leña al fuego, porque tenemos que estar juntas toda la semana”.
Así que decidí que era mejor que ella viera por mi conducta que me había
malinterpretado. Así que pasaron los días y la tensión fue disminuyendo. Y el
lunes, cuando nos íbamos, ya éramos muy buenas amigas, me dio un fuerte
abrazo y nunca más volvimos a hablar del tema.
Se ve que resolviste muy bien la situación. Está claro que eres una mujer muy
espiritual. Por último, ¿cómo te ha ayudado a tener paz con Dios andar en el
camino de la paz?
Bueno, cuando ves que Jehová te está ayudando una y otra vez, sientes que
tienes su aprobación. Ahora que Sam y yo ya somos mayores, hemos visto que
Jehová nos ha concedido el deseo que teníamos por muchos años, la meta de
servir en Betel. Y estoy convencida de que, mientras le sea leal a Jehová, él
continuará dándome paz. Y nosotros también estamos seguros de eso.
Muchísimas gracias, hermana Herd. Gracias por tus comentarios tan animadores y
por todo lo que nos has contado.
¿En qué cosas es posible que necesitemos hacer cambios? Fíjense en lo que dice el
apóstol Pablo en 2 Corintios 13:11.
¿Observaron TRES ÁREAS EN LAS QUE PODEMOS HACER AJUSTES, según dijo el
apóstol Pablo?
2 Timoteo 2:23 — Rechaza los debates tontos y sin sentido, pues sabes que
provocan peleas.
3. Veamos una tercera área que Pablo menciona en el versículo 11. Él aquí dijo:
“Sigan […] viviendo en paz”. Piensen en las hermanas que entrevistamos hace
un rato, ¿recuerdan lo que ellas hicieron? Ellas se enfrentaron a situaciones que
amenazaban la paz. Pero le hablaron a Jehová sobre el asunto. También
pensaron en textos bíblicos que pudieran ayudarlas y reflexionaron en cómo
esos textos podían servirles en su situación en particular. Eso no solo las ayudó
a conservar su paz interior, sino a conservar la paz con los demás. Por eso,
¡demuestren sus cualidades espirituales! Sigan promoviendo la paz. Y sean
cariñosos y generosos con todos, especialmente con sus familiares cercanos,
tanto si son Testigos como si no lo son.
Para concluir queremos recordarles a ustedes, los que se van a bautizar, que el día
de hoy no solo marcará el resto de su vida, sino también su relación con
Jehová.nAsí que reflexionen en lo importante que es este día. Estamos orgullosos
de ustedes. Nunca se van a arrepentir de la decisión que han tomado: dedicarle su
vida a Jehová. Pero no olviden esto: tienen que seguir adelante, el camino no se ha
terminado, en realidad acaba de empezar. Así que les pedimos que hagan todo lo
posible por seguir en el camino a la vida. Recuerden lo que hemos aprendido hoy:
Si siguen haciendo estas cosas, no solo van a tener paz, pues como dice al final de
2 Corintios 13:11 — “El Dios de amor y de paz estará con ustedes”. Nunca olviden
esta promesa, es una promesa que Jehová les hace a todos los que andan por el
camino de la paz.
Gracias, hermano Turner. Al igual que el año pasado, los preparativos
para el bautismo pueden variar. Los ancianos de cada congregación
han hecho planes, de acuerdo con las circunstancias locales, para
que los candidatos puedan bautizarse después de que concluya
esta sesión. Le damos gracias a Jehová por el alimento espiritual tan
oportuno que hemos recibido en esta sesión. En la siguiente sesión, veremos cómo
evitar algunas cosas que pudieran acabar con la paz. También aprenderemos qué
podemos hacer para promover la paz. Y veremos la primera parte de la producción
audiovisual. Ahora vamos a cantar juntos la última canción de esta sesión, la
canción 54, “Este es el camino”. Después de la canción, pueden hacer una oración
de conclusión.