Dinastía Shang TE
Dinastía Shang TE
Dinastía Shang TE
Cheng Tang murió 12 años después del establecimiento de la dinastía, su segundo hijo,
Wai Bing tomó el trono. A Wai Bing lo sucedió su hermano Zhong Ren. Estos dos
reinados fueron muy breves, de apenas 6 años entre ambos. Durante estos reinados el
control de la dinastía cayó en manos de Yiyin, canciller de Cheng Tang. A la muerte de
Zhong Ren, Tai Jia nieto de Cheng Tang obtuvo el trono. Tai Jia , no respetó las leyes
antiguas, cometiendo toda clase de ultrajes, por lo que Yiyin lo envió al exilio en busca de
que reflexionara sobre sus errores. Tras tres años en el exilio, Yiyin le permitió regresar y
recobrar el poder.
Desde el reinado de Tai Jia hasta el de Tai Wu, la dinastía gozó de un gobierno estable y
ordenado, lo que favoreció a un rápido desarrollo social. Tras la muerte de Tai Wu, la
dinastía entró en un proceso de decadencia, durante el cual se suscitaron varios
enfrentamientos por la sucesión dinástica, lo que sumado a crisis económicas de distinta
índole, provocaron que la capital del reino fuera trasladada de ciudad en varias ocasiones.
Este periodo de crisis se alargó por 9 reinados.
A la Xia le sucedería la dinastía Shang en el 1766 a.n.e. y de ella puede decirse que, aun
siendo la segunda, es la primera dinastía de la que se tiene evidencias sólidas acerca de
su existencia. Sus gobernantes controlaron gran parte del norte de China, desarrollando
una importante vida cortesana a la vez que tenían que hacer frente a los continuos
intentos de invasión de los pueblos limítrofes. Aún así, los emperadores continuaron
expandiendo sus dominios y hacia el 1300 a.n.e. ya habían duplicado los territorios bajo
su control.
Los Shang gobernaron durante 600 años hasta que en el 1122 a.n.e. fue reemplazada por
la dinastía Zhou tras ser derrotado el último rey Yin en una batalla contra dicho pueblo.
Esta dinastía, que se fundó en el siglo XVI a.n.e. y se prolongó durante casi seis
centurias, trasladó varias veces su capital hasta fijarla en Yin, actual Anyang (provincia de
Henan). Cabe decir que, en este periodo, con la formación de un estado y la
institucionalización de la propiedad privada, China entró de lleno en su proceso de
civilización.
Según otras fuentes, fue Tang quien, conociendo la sabiduría de Yiyin, pidió al príncipe
Xin que le dejase ir con él. Ante su negativa, Tang decidió tomar en matrimonio a la hija
del príncipe, y éste aceptó. Cuando el cortejo nupcial emprendió el camino hacia la corte
del rey Tang, Yiyin formaba parte de éste como cocinero. En cuanto llegó, Yiyin fue
bañado, envuelto en humo y untado con la sangre de un cerdo sacrificado.
Ese rito de purificación recuerda las pruebas del agua y del fuego por las que tenían que
pasar los ministros de la antigüedad antes de recibir su cargo. Después de la ceremonia,
Yiyin demostró su sabiduría discurriendo ante el rey sobre el poder de los alimentos y de
los sabores, y sobre la virtud que se necesita para gobernar.
Yiyin murió durante el reinado de Woding, hijo de Taijia, quien le enterró en el distrito de
Yanshi, provincia de Henan, con todos los honores debidos a un emperador. El papel
decisivo del ministro o del consejero, que ayuda a su señor a tomar el poder, será una
constante en la historia de los reyes en busca de la hegemonía durante la época de los
Reinos Combatientes. Ambos forman una pareja en la que el ministro, gracias a su
sabiduría, ocupa una posición predominante. De hecho, los antiguos cronistas adoptaron
el mismo esquema para relatar el final de las dos primeras dinastías Xia y Shang.
Otros personajes importantes dentro de la Dinastía Shang.
Tai Jia: Fue hijo de Tai Ding, y rey de China de la dinastía Shang. Fue un gobernante
autocrático, que trató a su pueblo de mala manera y rompió sus propias leyes. A pocos
años de su reinado se produjeron desórdenes internos en la corte. El primer ministro, Yi
Yin le advirtió que cambiara, pero el rey ignoró la advertencia, y resultó confinado al
palacio Tong, para que se arrepintiera.
Sima Qian cuenta que Yi Yin gobernó como regente durante tres años, hasta que
consideró que el rey había cambiado, y le invitó a volver a la capital y reclamar el trono.
Desde entonces, el rey se comportó bien. Sin embargo, los Anales de Bambú cuentan
otra versión muy distinta: Yi yin, tras el exilio del rey, habría alcanzado el trono, y
gobernado durante siete años, hasta que Tai Jia volvió en secreto y asesinó a su antiguo
primer ministro.
Principales aportes de la Dinastía Shang
El emplazamiento de la capital de Yin, las ruinas de Yin, está cerca de la actual ciudad
de Anyang. Los trabajos arqueológicos llevados a cabo allí sacaron a la luz once tumbas
reales sin descubrir de los Yin y los cimientos del palacio y los sitios de culto, todos ellos
conteniendo armas de guerra. Varios miles de objetos de bronce, jade, piedra, hueso y
cerámica se obtuvieron. El trabajo del bronce atestigua el alto nivel de esta civilización.
También fueron encontrados más de 20 000 huesos oraculares. Muchos caracteres
chinos encontrados en las inscripciones de las ruinas de Yin aún siguen en uso hoy en
día.
La dinastía Shang gobernó el norte de China durante más de seis siglos. Vivieron en
una cadena de ciudades a lo largo del Huang He y tenían su capital en Anyang, una
ciudad con muchos palacios y templos, construidos principalmente con madera
tallada. La dinastía Zhou sustituyó a la Shang en el año 1122 a.n.e.
El pueblo Shang cultivaba mijo, trigo y arroz, y también moreras para alimentar a los
gusanos de seda, gracias a los que producían un espléndido tejido. Criaban ovejas,
cerdos, vacas, perros y gallinas, y cazaban ciervos y jabalíes salvajes. Los Shang
empleaban caballos para arrastrar arados, carros y carretas. Al principio utilizaban las
conchas de cauri como moneda, y después se sirvieron del bronce. Eran muy hábiles
en los trabajos con bronce y jade, y realizaban objetos tanto religiosos como
cotidianos muy elaborados.
Hacia el año 1600 a.n.e., los Shang desarrollaron las primeras formas de la caligrafía
china: una escritura pictórica en la que cada letra representaba una palabra. La escritura
china que conocemos hoy evolucionó a partir de la escritura shang. Los Shang adoraban
a sus antepasados, a quienes consideraban sabios guías de su vida, y consultaban
oráculos cuando debían tomar decisiones.
El bronce es una mezcla de cobre y estaño que, cuando se pule, parece oro. Los Shang
prosperaron gracias a su trabajo con este metal, un material muy duro que tenía muchos
usos en herramientas, artículos domésticos y armas. El bronce también se utilizaba para
fabricar adornos y artículos religiosos o artísticos. Se fundía en moldes de ardua donde se
labraban ornamentos o motivos de cualquier índole. El uso del bronce supuso un inmenso
avance tecnológico en todo el mundo.