Castorina, J La Ideología de Las Teorías Psicológicas
Castorina, J La Ideología de Las Teorías Psicológicas
Castorina, J La Ideología de Las Teorías Psicológicas
2000
José Antonio Castorina
LA IDEOLOGÍA DE LAS TEORÍAS PSICOLÓGICAS EN LA EDUCACIÓN ESPECIAL
Perfiles Educativos, año/vol. XXII, número 89-90
Universidad Nacional Autónoma de México
México, D.F., México
pp. 77-91
http://redalyc.uaemex.mx
La ideología
de las teorías psicológicas
en la educación especial
JOSÉ ANTONIO CASTORINA*
This article deals with the ideological aspects which are involved
in the psychological theories when those are applied to special education,
particularly in the case of deaf children. In the first place, the author takes
into consideration the problem that represents the diversity of interpretations
about ideolog y Two perspectives are analysed: on one hand, a negative
perspective that includes the false consciousness and the symbolic violence;
on the other hand, a positive one in terms of Utopia. In both cases,
the author analyses the ways in which the psychological theories
about intelligence or learning convey social meanings.
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○
○
que plantean aquellos rasgos del conoci-
○
En la psicología contemporánea conviven miento psicológico y su recontextuación
○
○
diversas teorías acerca de los procesos cog- pedagógica permiten definir un campo de
○
○
nitivos. Así, hay versiones psicométricas de estudio “ideológico-cultural”, inseparable
○
la inteligencia, otras que la explican por la del análisis epistemológico. Una teoría psi-
○
○
“arquitectura computacional de la mente”; cológica plantea cuestiones metateóricas
○
○
incluso hay concepciones que se basan en referidas a su organización epistémica, al
○
un desarrollo por etapas “madurativas”, y modo de producir y evaluar su conocimien-
○
○
también se pueden mencionar variantes del to, y al mismo tiempo vehicula significacio-
○
○
enfoque constructivista. Se ha considerado nes “no dichas” o imaginarias respecto a sus
○
el aprendizaje como un proceso derivado de consecuencias sociales o a las demandas
○
○
la actividad individual; algunos lo han re- ○
sociales que la han originado. Las críticas
ducido al impacto de estímulos externos, epistemológica e ideológica tienen cada una
○
○
teorías psicológicas puede ser evaluada se- ellas para comprender en un sentido abar-
○
○
de conocimiento, por ejemplo si satisfacen Ahora bien, todo intento por situarse en
○
los criterios de validación empírica que la crítica ideológica enfrenta una primera
○
○
ellas mismas han instituido o si evitan pro- dificultad. No disponemos de una definición
○
○
es posible evaluar hasta dónde son pertinen- una diversidad de caracterizaciones: algunas
○
○
a los campos de la educación y la evalua- propias de un grupo social; otras a las ideas
○
○
Estos sistemas con pretensiones de cien- justificar un orden político; todavía en otras
○
indirectamente a ciertas prácticas, cuyo sig- base social de las ideas que producen; has-
○
gos (Castorina, 1995). También se han iden- cial en una realidad natural; finalmente se
○
tificado las concepciones del mundo que la puede identificar con las utopías formu-
○
○
parecen enmarcar y fijar límites a la inves- ladas por los pensadores y dirigidas a mo-
○
○
tigación psicológica sobre su objeto de es- dificar la realidad social. Cualquiera de es-
○
tudio (Overton, 1998). Más aún, con fre- tas versiones se ha formulado de acuerdo
○
○
cuencia las teorías psicológicas son con diferentes líneas argumentales, subra-
○
reapropiadas por el discurso pedagógico que yando rasgos que se han considerado rele-
○
○
las transforma según sus propios fines y los vantes para su definición (Thompson, 1985;
○
○
cología, Universidad de Buenos Aires. ctono@netizen.com.ar to los medios teóricos suficientes para for-
○
○
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mular una versión de conjunto aceptable. A flexión preliminar acerca de las cuestiones,
○
○
nuestro entender, cada línea argumental desde el punto de vista de las teorías de la
○
tomada separadamente de las otras proba- ideología.
○
○
blemente pierda mucho de su valor inter-
○
○
pretativo. Aquí vamos a reunir o articular LOS EFECTOS DEL
○
sin demasiado rigor conceptual varias de las “DESCONOCIMIENTO” EN LAS
○
○
caracterizaciones antes mencionadas. Por un PSICOLOGÍAS DEL CONOCIMIENTO
○
○
lado, quisiéramos enfatizar los aspectos “ne-
○
gativos” del término, tales como la falsa El enfoque clásico de la ideología como fal-
○
○
conciencia o la naturalización que hacen los sa conciencia fue formulado por Marx y
○
○
pensadores de las condiciones sociales de sus Engels (1970) en La ideología alemana, a
○
ideas, justificando así la dominación social. propósito de los filósofos neohegelianos que
○
○
Por el otro, daremos relevancia a los sesgos ○
concebían la superación de los conflictos de
más “positivos” de la interpretación de la la sociedad alemana de su tiempo por una
○
○
orientan la acción de los agentes sociales, y resolución en los términos de una liberación
○
gía como una herramienta para el análisis de cuyo resultado es una conciencia de lo que
○
○
la interpretación psicológica que naturaliza afirma, pero una falsa conciencia con res-
○
te respecto a los niños sordos.** Es también que las ideas están inseparablemente vincu-
○
importante examinar cómo ciertas prácticas ladas a las prácticas sociales, por lo que no
○
○
psicológicas y educacionales han contribui- se las puede aislar de estas últimas. Lo que
○
○
identidad deficitaria. Por último, vamos a era su creencia en que el nivel de estudio
○
○
dad de las teorías e interpretaciones psico- tralmente dar cuenta del drama histórico, al
○
lógicas con los proyectos sociales más o margen de las prácticas sociales que gene-
○
○
menos utópicos de otra identidad para los raban en buena medida las formas de la fe
○
○
aclarar que en este artículo no se asume extender quizá el reproche a las conceptua-
○
○
con ella. Se trata solamente de una re- dizaje independientemente de las condicio-
○
○
** En este artículo se particulariza en los niños sordos, pero Además, Marx y Engels explicaron dicho
○
○
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mente, las diferencias de clase se conservan ciones humanas aparecen mistificadas
○
por el desconocimiento de los mecanismos como relaciones entre cosas, lo que tiene
○
○
de formación de las ideas. De lo anterior se consecuencias de carácter ideológico. Se
○
○
infiere el rechazo a que los productos con- produce una reificación o cosificación de la
○
cientes pudieran ser disueltos únicamente vida social que congela su historia y pre-
○
○
por la crítica espiritual, sin exponer y mo- senta los procesos sociales como inevita-
○
○
dificar las prácticas sociales subyacentes. bles e inalterables. En otros términos, el
○
Esto lleva a pensar respecto de las teorías predominio de entidades inanimadas sobre
○
○
psicológicas en que por lo menos hay que la vida social le da un aire espúreo de na-
○
○
tomar distancia y examinarlas críticamente turalidad e inevitabilidad. En este sentido,
○
desde el punto de vista de las ciencias so- y con bastante libertad interpretativa res-
○
○
ciales. Así, se podrá explicar el sentido de ○
pecto a la versión original de la reificación,
algunas de sus afirmaciones básicas. trataremos de identificar formas de desco-
○
○
Buena parte de los estudios situados en nocimiento de los procesos sociales com-
○
○
taron de distinguir entre los mecanismos de aprendizaje concebidos por los psicó-
○
○
sociales y sus representaciones, a fin de es- logos. En otras palabras, ellos piensan
○
○
tablecer cómo éstas ponían obstáculos a la como “ideólogos” cuando al indagar en los
○
gels (1970) concibieron agudamente que los rales. Tales concepciones encubren un
○
significado social de sus actos y nosotros lectual al dejar en las sombras las prácti-
○
extendemos esta tesis al sentido que los cas sociales en las que ésta se constituye.
○
○
psicólogos dan a sus producciones teóricas Así, por ejemplo, en ciertas corrientes psi-
○
○
implicaba que se puede hacer algo social- sólo por causas biológicas internas al or-
○
○
mente al margen de nuestra interpretación, ganismo. Esto último lleva al enfoque clí-
○
vos” sin el sentido que les otorga el propio cepción de enfermedad o anormalidad y
○
○
actor social. Es preciso subrayar que para por consiguiente a la exclusión o reclusión
○
un marxismo antiobjetivista al que nos ad- de los niños. Estamos ante un modo de co-
○
○
herimos, no están primero los actos socia- sificar la vida psíquica, de interpretarla por
○
○
conscientes que los deforman, ya que por el gía alemana ya se adelantaba la tesis según
○
○
contrario ambos son inseparables (Williams, la cual al concebir las formas de concien-
○
análisis de Marx del “fetichismo de la mer- Pasemos ahora a examinar ciertas concep-
○
○
tal (1969). En virtud de las prácticas ma- para examinar las dificultades de los niños
○
○
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tervención implantado para lograr su even- trado que buena parte de los fracasos de
○
tual “corrección”. los niños en resolver las tareas se debe a
○
○
En primer lugar, uno de los criterios la traba cultural del instrumento conside-
○
○
principales que ha permitido a los psicólo- rado “neutral”. Es decir, lo que se evalúa
○
gos dividir a los niños en “deficientes” y “no en los niños de sectores populares o de
○
○
deficientes” ha sido su rendimiento intelec- minorías étnicas es su grado de familiari-
○
○
tual. Ahora bien, éstos han sido evaluados dad con una cultura que no es la suya.
○
—y aún lo son en el medio escolar— por Esta conclusión llevó a la prohibición de
○
○
los tests de coeficiente intelectual ( CI ) utilizar los tests de CI en grupos étnicos
○
○
que son una forma, entre otras, de opera- minoritarios en Inglaterra (Lunt, 1994).
○
cionalizar el constructo “inteligencia”. Cual- La creencia de los psicólogos en aptitu-
○
○
quier modelo de evaluación psicométrica ○
des intelectuales fijas e inmodificables en
utilizado por los psicólogos escolares pre- los individuos es un marco interpretativo
○
○
supone la existencia en el individuo de ca- más amplio que las hipótesis verificables y
○
○
Básicamente utilizan el concepto de “apti- trata de una “metanarrativa” que separa ta-
○
○
tud” cognitiva y una de las premisas del jantemente los procesos mentales endógenos
○
○
abordaje psicométrico tradicional es “que de los sociales, las aptitudes naturales de las
○
pliamente determinado por factores gené- cultura. Esta desvinculación de los compo-
○
○
biológico de la aptitud intelectual la con- cología del siglo XX, ya advertida por Vigots-
○
○
vierte en un atributo humano estable para ky (1991), es una herencia filosófica del
○
toda la vida, que es apenas modificable por dualismo cartesiano entre la mente y el
○
○
Tales instrumentos pueden ser cues- nista que convirtió los fenómenos psíquicos
○
dológico y aún epistemológico. Así, se ha cos. Ahora bien, estos presupuestos onto-
○
○
nes se añade una explicación genética; que tóricas, postulada en la Ideología alemana.
○
○
tal procedimiento se limita a los “resulta- En El capital (libro I, cap. II), la ideo-
○
○
dos”, sin considerar los procesos intelec- logía no se concibe como una pura ficción
○
que a los rasgos cognitivos propiamente a un efecto estructural del capitalismo. Por
○
de proponer las tareas no considera las ex- irreal, sino que expresa una inversión que
○
○
de prueba; finalmente, que las propias pre- dad (Eagleton, 1997). El cisma entre ideas
○
○
tests no se han justificado (Solity y Bull, la vida psíquica, ocultando a los ojos de los
○
○
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las prácticas sociales. En cuanto agentes comparado con niños que no lo habían ad-
○
sociales, ellos se representan los fenómenos quirido (Skliar, 1997b).
○
○
psicológicos asociados a la vida social regi- Cuando el modelo médico-organicista de
○
○
da por relaciones mercantiles, como natu- la sordera atribuye las dificultades mencio-
○
rales. Brevemente, es plausible que si la nadas sólo al déficit auditivo o al “interior”
○
○
sociedad se percibe dominada por entidades del organismo, está naturalizando los pro-
○
○
no humanas, así como “dada” e inmodifica- cesos cognitivos. La reducción de las difi-
○
ble, entonces también las aptitudes intelec- cultades intelectuales a las deficiencias bio-
○
○
tuales adquieren la naturalidad e inevitabi- lógicas expresa la separación tajante entre
○
○
lidad de las relaciones entre cosas. los procesos naturales y las interacciones
○
Se puede interpretar desde este punto sociales; es su “fetichización”. Simultánea-
○
○
de vista a la concepción de la inteligencia ○
mente, ésta tiene un efecto ideológico es-
y a la evaluación psicológica de los rendi- pecífico: el ocultamiento de las condiciones
○
○
mientos cognitivos en los niños sordos. En sociales del rendimiento intelectual del niño
○
○
primer lugar, los psicólogos han creído encon- sordo deja en las sombras la intervención de
○
trar una relación directa entre la deficiencia la cultura y las interacciones sociales en su
○
○
auditiva y las dificultades lingüísticas, socia- desarrollo. Cada vez que identificamos en
○
○
les e intelectuales de los niños sordos. “Los una teorización psicológica zonas de cosifi-
○
libros de psicología de la sordera definen cación de la vida psicológica, y que por eso
○
○
Es decir, el carácter natural del déficit de- estos niños derivaban únicamente de las li-
○
○
áreas mencionadas. En cuanto al rendimien- nitiva o a las aptitudes naturales que sub-
○
se puede hablar de una confusión con cep- insistente en los profesionales. Inclusive es
○
○
tual entre la deficiencia biológica de una una creencia del sentido común que atra-
○
lesión y la discapacidad, asociadas a las me- viesa en parte la cultura escolar (Castorina
○
○
didas sociales que diferencian el acceso para y Kaplan,1997). En todos los casos parece
○
○
los sujetos con déficits a los lugares donde evidente que siempre el rendimiento de los
○
se transmite el capital cultural (Skliar, niños sordos estará por debajo de los oyen-
○
○
1997a). Además, el intento de explicar las tes. Opera aquí una concepción de conjun-
○
○
dificultades de acceso al pensamiento abs- to según la cual los límites “naturales” para
○
tracto en los niños sordos, al margen de la la inteligencia del niño sordo no podrán ser
○
○
pre el rendimiento intelectual de los niños Por su parte, la descripción de las eta-
○
namente el lenguaje de señas, por ejemplo, ta, sea explícitamente o como resultado de
○
○
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genética. Así por ejemplo, es un clásico en por el enseñante. La propia sociedad es ca-
○
la evaluación psicológica la calificación de racterizada naturalísticamente como el me-
○
○
“inmaduros” para los niños de sectores po- dio exterior al que los niños deben adaptar-
○
○
pulares o con problemas de aprendizaje que se, velándose su heterogeneidad o la
○
no han alcanzado el nivel operatorio del significación social e histórica de los obje-
○
○
pensamiento. Se ignoran los rasgos esencia- tos de conocimiento. En realidad, no hay
○
○
les del método de interrogación clínica que objetos sociales de conocimiento sino un
○
atiende a la diversidad de las situaciones, al mundo social “fisicalizado” que impacta
○
○
modo en que cada niño da sentido a su sobre el sujeto. Finalmente, cabe señalar
○
○
entorno cultural y a los objetos que se le que la enseñanza, mediante la precisión tec-
○
proponen. Los niños son interrogados al nológica de los procedimientos con su exi-
○
○
margen de los contextos en que los objetos ○
gencia de rendimientos y adecuación en las
les son significativos. Por este camino se respuestas, llega a disimular aquellos signi-
○
○
socioculturales de que participan los niños Es sabido que los programas de enseñan-
○
○
diferencias entre los que pueden y los que una psicología conductista para el apren-
○
mayoría de las teorías del aprendizaje, pero proceso de enseñanza se basa en el condi-
○
○
aquí nos vamos a limitar al enfoque conduc- cionamiento de una respuesta “operante”
○
tista, dada su vigencia en la educación es- sobre el medio ambiente, de forma que si
○
○
subsistió el núcleo duro del programa ori- cia de tal respuesta. Gracias a este tipo de
○
○
ginal: los estímulos controlan las respues- aprendizaje “de afuera para adentro”, el
○
○
tas, quedando limitado el aprendizaje a una sujeto sordo es colocado en el lugar de las
○
sustitución de respuestas. Por una parte, se respuestas a los estímulos reforzadores del
○
○
valoran las respuestas en cuanto adecuadas oyente (Skliar, 1997b). En síntesis, el en-
○
○
como una “caja negra”, o se introducen al- matoria de dos enfoques unilaterales: al
○
○
gunos mecanismos que funcionan bajo la poder del déficit auditivo original o la
○
○
impronta de los estímulos. De este modo, aptitud intelectual que le está asociada
○
puede encontrar allí una historia de cono- operante controlada desde el programador.
○
cimientos, salvo como registro. Especial- No hay protagonismo del sujeto sordo, en
○
○
mente, cualquier sociogénesis del sujeto de un caso porque las aptitudes le definen un
○
○
aprendizaje queda obturada porque está cierto destino mental y en el otro porque
○
contexto cultural. Por otra parte, el medio que pretende corregir parcialmente dicho
○
○
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○
○
prácticas psicoeducativas orientadas por las minación de los sujetos llega a ser eficaz si
○
teorías psicológicas, hay aún otro modo de logra su reconocimiento, su confianza y su
○
○
concebir la mistificación y el disimulo de su fe en los depositarios del poder simbólico.
○
○
impacto sobre los sujetos. En La reproducción (1977), Pierre Bour-
○
dieu concebía al sistema educacional como
○
○
LA VIOLENCIA “SIMBÓLICA” una agencia institucionalizada para el ejer-
○
○
cicio de la violencia simbólica, mediante la
○
Cuando los niños dicen “y” en lugar de “ll” imposición de “un arbitrario cultural” tal
○
○
al pronunciar la palabra “llueve”, ha sido como un uso lingüístico o aun una interpre-
○
○
frecuente en el Río de la Plata que los maes- tación o práctica psicológica. Estas formas
○
tros rechacen este acto lingüístico (Ferrei- de la cultura son arbitrarias en el sentido
○
○
ro y Teberosky, 1979). Más aún, convencen ○
de que no se pueden deducir de un princi-
a los alumnos de que éste es un desvío de pio universal biológico o físico. Por otra
○
○
propia de un lenguaje “correcto” en el que poder entre clases sociales o entre grupos
○
debe haber una relación unívoca entre so- sociales, permitiendo su legitimación. Es
○
○
nido y grafema. Se puede hablar aquí de la crucial, por tanto, que dicha arbitrariedad
○
○
imposición de un dialecto sobre otro, una sea desconocida como tal por los sujetos
○
forma de asegurarse su poder sobre el cuer- que sufren la acción impositiva al momento
○
○
po social. De modo similar, cuando los en que ésta sea reconocida como legítima.
○
○
maestros y los psicólogos logran que los Justamente, el esfuerzo de los hablantes
○
niños con bajos rendimientos intelectuales por corregir su pronunciación a fin de ade-
○
○
adquieran conciencia de “sus límites”, están cuarlo a las exigencias del modo de hablar
○
mirada sobre sí mismos. Más aún, esta vio- dad del uso lingüístico (la pronunciación
○
○
aquel acto se transmuta en una relación último es impuesto como dominante (ya que
○
○
A este respecto, cabe evocar los térmi- 1995), la implantación de las teorías psi-
○
○
nos con que Bourdieu (1980) se refiere a la cológicas en las operaciones de diagnósti-
○
dad, todas virtudes que son honradas por la ca y las versiones maduracionistas de la
○
ética del honor” (p. 219). Probablemente inteligencia contribuyen con la autoridad
○
○
una reconstrucción de la historia del modo del profesional y del saber médico-psico-
○
○
en que fueron llevados muchos niños y adul- lógico a que los sujetos (particularmente
○
ria podría revelar los rasgos de lealtad, es- identidad deficitaria. Tal aceptación no
○
○
fuerzo, e intención honrada por parte de los proviene de una decisión adoptada volun-
○
○
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tariamente por cada niño, sino que resul- ciones programadas, evitándoles cualquier
○
○
ta de la transmisión de un “arbitrario” cul- actividad estructurante.
○
tural en la escuela: por ejemplo que ellos Recientemente, Bourdieu (1999) perfiló
○
○
no son capaces de aprender como los otros. su enfoque de la violencia simbólica al si-
○
○
Más aún, el propio fracaso escolar del niño tuarla en las coerciones que se encarnan en
○
sordo parece derivar, al menos en parte, del los cuerpos de los dominados. Un hablan-
○
○
ajuste de sus “límites” para pensar y ha- te, una mujer o un niño con dificultades
○
○
blar lo transmitido por maestros y psicó- cognitivas o lingüísticas aceptan como “na-
○
logos (Thoma, 1998). tural” la dominación simbólica de un sexo,
○
○
En el caso de los dispositivos conductis- de una forma cultural, del uso lingüístico.
○
○
tas de aprendizaje, lo anterior resulta evi- Incluso ellos llegan a aceptar como innatos
○
dente. Volviendo al ejemplo de la letra “ll”, los rasgos típicos de las oposiciones entre
○
○
la imposición de “cómo se debe hablar” se ○
blanco/negro, masculino/femenino, oyente/
cumple en buena medida mediante una con- no oyente, con cierto grado de complici-
○
○
cepción de aprendizaje, sea la propia de la dad. Pero estos sujetos no han podido evi-
○
○
psicología o la del sentido común de los tar tal adhesión porque la dominación se
○
docentes. Esto se lee en las prácticas de ejerce efectivamente sobre las disposiciones
○
○
enseñanza que eliminan la actividad de los o habitus, es decir los esquemas y modos
○
○
dialecto, ya que para imponer semejante social. Lo importante para subrayar aquí es
○
○
arbitrario social se precisa una transmisión que la dominación no impacta sobre la con-
○
○
que mantenga la pasividad del alumno. En ciencia, sino sobre la oscuridad de los ha-
○
este sentido, cualquier tipo de conductismo bitus encarnados en los cuerpos, al margen
○
○
te, la adaptación de las respuestas infanti- temente de cualquier coerción física. Por
○
○
tado por el conductismo operante facilita el sonrojo, “otras tantas maneras de some-
○
○
la violencia simbólica. Bajo el supuesto de terse a pesar de uno mismo y contra lo que
○
que todas las dificultades están ya dadas le pide el cuerpo, al juicio dominante”
○
○
cuado es una intervención externa y plani- cia simbólica condujo a este autor al aban-
○
○
ficada que coloque las cosas en su lugar, dono de la noción de ideología en cuanto
○
○
so aceptable, confundiendo el lenguaje con que separa tajantemente a éstos de las prác-
○
○
la lengua oral. Para imponer el arbitrario ticas “corporales” con el mundo. Por el con-
○
○
enseña al modo impositivo de las estimula- sino a aquellas creencias tácitas de la vida
○
○
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el cuerpo y son el fruto de un adiestramiento no discursivas que subyacen al intercam-
○
social. En su opinión, sostener la “falsa bio lingüístico. En semejante perspectiva,
○
○
conciencia” implica una tesis según la cual cualquier concepción que dé relevancia a
○
○
su liberación es posible por la toma de con- los procesos biológicos es vista con des-
○
ciencia de las representaciones equivocadas. confianza, ya que lleva a mistificar la di-
○
○
Al situar los habitus en la vida corporal, versidad cultural en nombre del universa-
○
○
Bourdieu abre una vía de análisis que pue- lismo naturalista. Es preciso reconocer que
○
de hacer comprensible los efectos casi má- más allá de sus virtudes críticas, el pensa-
○
○
gicos y tan perdurables del poder simbólico miento posmoderno disimula los rasgos ma-
○
○
en la constitución de la subjetividad, en teriales que también son parte central de
○
nuestro caso la identidad deficitaria en la los seres humanos. Una visión culturalista
○
○
educación especial. ○
de los fenómenos psíquicos y sociales ocul-
Hasta aquí hemos utilizado, para exami- ta los aspectos naturales o materiales que
○
○
nar las zonas de ideologización (en sentido les son esenciales, tales como los procesos
○
○
ción del fetichismo de las relaciones socia- salta a la vista por ejemplo en los estudios
○
○
les o de la violencia simbólica. Todas las de las lesiones neurológicas y sus conse-
○
los procesos mentales, por la cosificación o ve por la investigación científica. Una cosa
○
○
de los procesos psicológicos, así como por los procesos psicológicos y otra muy dis-
○
○
nos de base innata respecto de la sociedad. nente biológico de la vida psíquica. El cul-
○
○
La pregunta que surge de inmediato es: ¿la turalismo, al falsear el hecho de que los
○
○
ton, 1997; 1998) porque su aparente antí- impide entender el modus operandi de los
○
○
dido tenazmente la diversidad cultural, a rabo, pero las mujeres son explotadas en
○
como organizadores de la vida social. In- el cuerpo natural tratado por la biología.
○
○
cluso la vida psíquica ha sido interpretada En el caso de la sordera, hemos visto los
○
○
discursivamente, como parte del diálogo efectos de la violencia simbólica sobre los
○
social (Edwards, 1997). De este modo, cuerpos, o el modo en que la identidad de-
○
○
nada queda por fuera de la cultura (el sis- ficitaria se impone a partir de una inter-
○
○
tema de las prácticas discursivas con sus pretación de las lesiones orgánicas.
○
○
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○
ideas y los valores racionales que logran con-
○
Si retornamos a una indagación citada en vocar a los individuos en cuanto objetivos
○
○
parágrafos anteriores (Ferreiro y Teberosky, que alcanzar en la transformación de la so-
○
○
1979), podemos ver que el mismo sujeto ciedad. Se podría decir, un conjunto de
○
que aceptaba la violencia simbólica (una valores como la igualdad, la justicia o la
○
○
niña decía “hablo como argentina, no como libertad propuestos más allá de lo vivido
○
○
correntina”) también daba muestras de re- actualmente por ellos. Según Adorno (1962)
○
chazar la pretensión de evitar que cada gru- o Adorno y Horckheimer (1969), la ideolo-
○
○
po hablara su dialecto (la niña decía “no hay gía surge desde el momento en que la socie-
○
○
derecho de impedir hablar a la gente como dad mercantil no corresponde con su propio
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la gente habla”). También se ha menciona- concepto, en que la igualdad o la libertad no
○
○
do en reiteradas oportunidades que ciertas ○
se cumplen en la realidad social, que sin
prácticas educativas han impuesto de modo embargo requiere ser legitimada. Por eso la
○
○
selectivo ciertos trozos de conocimiento ideología está constituida por los contenidos
○
○
los que son portadores los niños de secto- En los momentos históricos en que los
○
○
res populares. Aun en tal situación los ni- sostenedores de un estado de cosas exigen
○
○
sándose en cuestiones que pueden resolver que podría no ser aceptable para gran parte
○
○
(Rockwell, 1982). Por otra parte, la iden- cir, cuando se tiende a identificar los valo-
○
○
tidad deficitaria no se impone sin resisten- res con la realidad o cuando se cree que la
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cia en la comunidad sorda, que ha logrado sociedad realiza efectivamente los valores.
○
○
la lengua de señales como primera lengua ma. Pueden ser “verdaderos en sí”, como las
○
○
Lo dicho pone de relieve una limitación no son verdaderas en cuanto tienen la pre-
○
○
sentido negativo: no permiten pensar la re- 200). Es decir que en determinadas condi-
○
sistencia a la imposición simbólica ni la ela- ciones históricas los individuos creen que
○
○
car la realidad educativa y social. Es decir, social. De este modo se oculta el exceso de
○
no logran atrapar el carácter activo de los significación respecto de toda realidad so-
○
○
proyectos de cambio. Por esta razón, trata- cial, que es la nota esencial de toda ideolo-
○
remos en lo que sigue de exponer una in- gía. Justamente, es a causa de este plus de
○
○
terpretación de la ideología que ofrece ras- significado y de autonomía relativa con res-
○
○
gos de positividad al dar cuenta de la pecto a su base social que los pensadores
○
resistencia de los sujetos de la educación pueden negar dicha base. Este contenido
○
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especial y permitir asociar a las teorías psi- trascendente es una idea regulativa de lo
○
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cológicas con los proyectos de renovación. existente, una “utopía” no realizada pero
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que permite cuestionar la realidad social: gún interés por su legitimación. En la edu-
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aquello que no es pero debería serlo. cación vinculada con esta posición sólo hay
○
Las notas que acabamos de mostrar bas- lugar para decisiones técnicas con respecto
○
○
tan para mostrar la diferencia entre la ver- a fines ya decididos. El conductismo parti-
○
○
sión “negativa” y la versión “positiva” de la cipa plenamente, entonces, de la concien-
○
ideología. Para la primera se podía salir de cia tecnocrática centrada en la adecuación
○
○
lo ideológico, aunque sea parcialmente, es- de los medios a los fines, claramente hege-
○
○
clareciendo las condiciones de producción mónica en la cultura contemporánea (Ha-
○
de las ideas o tomando conciencia de la ilu- bermas, 1984).
○
○
sión; para la segunda no hay que salir de lo ¿Cuál es la relación entre esta concien-
○
○
“ideológico”, sino afirmar con fuerza las ilu- cia tecnocrática y la utopía de que hemos
○
siones prospectivas. Es decir, insistir en los hablado? La base positivista del conduc-
○
○
contrastes entre los valores que se defien- ○
tismo ha eliminado toda problemática de
den y la realidad social, con el fin de trans- valores en el conocimiento psicológico y
○
○
Ahora bien, si adoptamos la versión po- nificativas en una comunicación crítica. Por
○
sitiva se modifica nuestro análisis de la con- tanto, es difícil que dicha corriente psico-
○
○
notación ideológica de las teorías psicoló- lógica promueva una “ilusión” de vida edu-
○
○
buscar las zonas de “mistificación o desco- realidad, identificándola con los resultados
○
las teorías o sus instrumentaciones. La cues- todo proyecto de defensa de los valores de
○
con proyectos cuestionadores o legitimado- para los grupos de niños sordos, por ejem-
○
○
res de una realidad educativa. Damos por plo, son impensables desde una psicología
○
estas disciplinas no son utopías. Sin embar- pecto al cognitivismo basado en la metáfo-
○
○
que otras teorías son compatibles con uto- de valores y derechos, una contracultura
○
○
El caso del conductismo resulta una vez respecto a los otros individuos (en oposi-
○
○
el psicólogo se ocupa de las relaciones en- derecho a la adopción del lenguaje de señas
○
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tre hechos del comportamiento y los estí- (un bilingüismo en oposición a la unicidad
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asociada con un proyecto de vida y con un científica apoya la crítica a la imposición
○
modelo de educación que son la negación oralista vigente en muchos medios educati-
○
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de la realidad educativa existente (Skliar, vos y la defensa del derecho al bilingüismo.
○
○
1997b). La psicología sociohistórica sumi- El enfoque constructivista es también
○
nistra por su parte una de las bases psico- compatible con ciertos proyectos educati-
○
○
lógicas del enfoque socioantropológico y es vos, una vez que se abandonan las versio-
○
○
también consistente con los valores socia- nes “recontextuadas” de la psicología ge-
○
les mencionados. El programa de investiga- nética impulsadas por los programas
○
○
ción de Vigotsky (1993) incluye la hipóte- educativos vigentes (Bernstein, 2000). Te-
○
○
sis de la zona de desarrollo próximo, una nemos, por ejemplo, la descripción de las
○
especificación de la tesis del predominio de “edades madurativas de la inteligencia” o
○
○
las relaciones interpsicológicas sobre las in- ○
una interpretación individualista y abstrac-
trapsicológicas. Las dificultades que expe- ta del proceso de constitución de los sa-
○
○
rimentan los niños sordos en su comunica- beres. Hay por lo menos dos postulados de
○
○
ción con oyentes infantiles y adultos se esta corriente de pensamiento que son par-
○
La identidad no deficitaria de los niños sor- Por una parte, está el reconocimiento bá-
○
dos depende de las relaciones contextuales sico de que los niños conocen el mundo al
○
○
específicas con aquellos que manejan el sis- reorganizar activamente sus ideas previas,
○
○
tema de señas. De este modo, se da pie para con los ritmos propios de sus historias per-
○
de la subjetividad por los mediadores cul- este postulado epistemológico? Sin duda un
○
○
turales justifica la crítica a la educación proyecto que sostiene el respeto por las di-
○
Skliar (1997b)— que la apropiación inicial pitalista la educación tiende a eliminar las
○
○
en la psicología cultural. Así, Bruner (1983) debe poder ser intercambiable con otro, sin
○
○
ha mostrado que los niños aprenden prime- importar los saberes previos de cada cultu-
○
○
cas de una lengua y más tarde las formas de gación de la realidad educativa existente
○
○
superficiales. Esto es, ellos adquieren pro- Por la otra parte, el postulado central
○
○
cedimientos más o menos rutinarios de co- del constructivismo afirma: “no se crea por-
○
○
propiamente gramaticales. En este sentido, porque se crea” (García, 1996). Esto es:
○
○
la imposición de estas formas de la lengua para comprender el mundo hay que trans-
○
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oral modifica el orden de adquisición de formarlo y ello quiere decir que primero los
○
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niños deben crear los instrumentos intelec- El alma de cualquier estudio de los aspec-
○
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tuales idóneos para interpretarlo. Si la crea- tos ideológicos de una teoría es el análisis
○
ción cognoscitiva precede a su comprensión concreto de las situaciones concretas en las
○
○
del mundo social y natural, entonces ellos que esta última parece dar cuenta de los fe-
○
○
mismos son capaces de formularse algo pa- nómenos de su campo. Por el momento, no
○
recido a las utopías, ya que pueden ir más hemos pasado de una formulación programá-
○
○
allá de lo dado, de su actualidad, están en tica. Hay mucho por hacer para interpretar
○
○
condiciones de inventar “los posibles” que el sentido social de la intervención psicoló-
○
aún no son. En otras palabras, la tesis cons- gica en la vida de los niños con dificultades
○
○
tructivista de que todos los niños —admi- de origen neurológico. Como mínimo, pode-
○
○
tidas sus diferencias— pueden pensar en un mos invocar una exigencia crítica para la psi-
○
mundo que todavía no es, les da esperanza cología del conocimiento y del lenguaje.
○
○
a los docentes. Es decir, que éstos pueden ○
Cualquiera que sea la corriente o programa
ayudar a los niños a imaginar la justicia para de investigación, se debe intentar acceder a
○
○
nos sitúa en un proyecto educativo que per- sus postulados o hipótesis. De lo contrario,
○
mite cuestionar la realidad social. los psicólogos no podrán evitar jugar a las
○
○
gía dominante. El propósito de este artícu- actividad crítica de las condiciones en que se
○
○
lo ha sido introducir algunas distinciones producen las ideas, en el espíritu del pensa-
○
eventual fertilidad en el estudio de las rela- Por último, los análisis anteriores pue-
○
ciones entre teorías psicológicas y sus con- den ser de interés para los educadores que
○
○
considerado los diversos enfoques reunidos ción especial. En particular, se debe subra-
○
ción de tales problemas cuando las teorías como “positivas”, de las teorías psicológi-
○
noción de ideología, al menos para nuestro propone un desafío a los docentes. Es de-
○
○
propósito actual cada enfoque parece atra- seable que no las asuman sólo porque se
○
par un aspecto relevante del modo en que presentan con pretensiones de “cientifici-
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las teorías psicológicas se vinculan con la dad” o porque cuentan con el aval de la
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