15-Cultura Alimentaria Legumbres
15-Cultura Alimentaria Legumbres
15-Cultura Alimentaria Legumbres
alimentaria
Legumbres
Proteína verde, raíz y futuro de la gastronomía española
Nota: Este artículo fue entregado por Ismael Díaz Yubero a Distribución y Consumo meses antes de su fallecimiento, el 12 de noviembre de 2020.
Su publicación cuenta con el permiso de su familia.
H
ay unas 20.000 leguminosas catalogadas, pero que la salsa de soja, sus brotes o el tofú, también llamado
solo son comestibles menos de la quinta parte. queso vegetal, vayan estando presentes en nuestras me-
Unas veces se consume la semilla (garbanzo, gui- sas, además con frecuencia creciente.
sante, lenteja, soja, etc.), otras la vaina (garrofa, tamarin-
do, etc.) y otras la vaina y la semilla (alubia, tirabeque). Una importante particularidad de las legumbres es que
Además, el concepto de comestible es muy distinto en los están difundidas por todo el mundo. Otra que fueron fáci-
diferentes lugares e incluso cambia con el tiempo, porque les de recolectar por los homínidos, por lo que su consu-
las almortas, altramuces, habas secas, etc., se consumen mo es antiquísimo y finalmente que su conservación no
en momentos duros, aunque cuando la economía es fa- exige ni tratamientos ni cuidados especiales, por lo que
vorable se siguen produciendo pero con destino a la ali- su consumo puede prolongarse desde una cosecha a la
mentación animal. También hay ejemplos de lo contrario, siguiente. Estas características hacen que las legumbres,
como es el caso de la soja que en España, durante mucho aunque diferentes en los distintos lugares, hayan sido
tiempo se consideró que su único destino eran los pien- históricamente básicas en la alimentación de casi toda la
sos, pero la introducción de la cocina oriental ha hecho humanidad, como lo demuestra su hallazgo en muy dife-
VALOR NUTRICIONAL
Una particularidad de las proteínas que entran en la com- jos de las cifras medias actuales de consumo en España.
posición de las legumbres es su capacidad para formar Los problemas, del favismo, ocasionado por dos piridinas,
geles, lo que las hace muy propicias para que los grandes que son la divicina y el isouramilo y el latirismo ocasio-
cocineros formen espumas y emulsiones, que bien apli- nado por glucósidos cianogenéticos y alcaloides, en alta
cadas son muy útiles para modernizar los platos tradicio- proporción en las almortas, solo se presentan en casos
nales, en los que con frecuencia hay un exceso de grasas de dietas muy reiterativas en esta legumbre. Fueron, en
y de proteínas, en tanto que las elaboraciones modernas tiempos de hambre, causa de graves síndromes, por lo
nos permiten tenerlas en nuestra dieta mediterránea, sin que dieron lugar a la prohibición de su consumo y aunque
que se disparen las calorías ni el colesterol. siguen consumiéndose en las gachas, que se han con-
vertido en comida típica de las jornadas de caza. Hace ya
Los hidratos de carbono están en proporción moderada, muchos años que no se diagnostica la enfermedad en la
muy equilibrados para ser asiduos de una dieta sana, aun- población española.
que hay en su composición algunos polisacáridos, como
la rafinosa, la estaquiosa y la verbascosa, que son res- LAS LEGUMBRES EN LA GASTRONOMÍA
ponsables de las flatulencias. La fibra es elevada, aunque ESPAÑOLA
para que llegue a nuestro organismo es necesario que
garbanzos, alubias y lentejas se ingieran con su piel. Las legumbres fueron alimento frecuente, a veces tanto
que fueron protagonistas principales de la más impor-
En la composición de las legumbres hay muchos minera- tante de las comidas diarias, generalmente a medio día.
les y algunos en proporciones importantes, como calcio Constituyen una parte importante de lo que hoy llamamos
potasio, magnesio, zinc y fósforo. También tienen mucho “platos de cuchara”, pero desgraciadamente su consumo
hierro, como las lentejas, pero su absorción es limitada, ha disminuido y paralelamente la producción, por lo que
como lo es en general este mineral cuando forma parte es necesario proceder a la importación de las alubias, so-
de alimentos vegetales. La composición en vitaminas es bre todo de Argentina, garbanzos de México y lentejas, de
alta, sobre todo en las del grupo B y en algunas liposo- Estados Unidos y Canadá.
lubles, especialmente en A y en E, que es un excelente
antioxidante. Las cifras de consumo, que remontaron ligeramente en
los años más duros de la crisis económica, están otra vez
Se ha hablado mucho de los factores antinutritivos que en descenso y cuantificados en torno a 3 kilos de legum-
tienen las legumbres, pero realmente los efectos se mani- bres por persona y año, lo que desdoblado supone un
fiestan cuando la ingesta es muy alta, lo que está muy le- poco más de un kilo de garbanzos, un poco menos de un
tanza, el de Cuaresma y la olla podrida guriezana son es- denominaban a los alaveses “babazorros”, que quiere decir
pecialmente interesantes, como lo son las ollas ferroviarias comedores de habas. Pero hace unos tres siglos llegaron
que nacieron a finales del siglo XIX cuando se inauguró la las primeras alubias de América y en ellas encontraron los
línea de ferrocarril La Robla-Bilbao, que iba desde el norte vascos rurales, que entonces eran casi todos, una excelen-
de la provincia de León hasta la capital vasca. El trayecto te comida diaria. Tolosa, Guernica y Álava son variedades
duraba 16 horas y a la mitad del camino, aproximadamen- de alubias muy bien valoradas, que pueden ser preparadas
te, está la estación de Mataporquera, a casi mil metros de en diferentes guisos, pero de todos ellos destaca el que se
altura sobre el nivel del mar y con unas temperaturas muy hace con berza y con morcilla vasca (odoloste o buskantxa),
bajas. Los empleados del tren no tenían posibilidades de aunque también va muy bien la clásica de Burgos. Es conve-
disponer de comida caliente y como el hambre estimula niente hacer notar que la cocina vasca está muy condicio-
la imaginación, idearon un recipiente que mediante un nada por las estaciones climáticas y que estos platos son
serpentín enlazaba con la locomotora, que para andar ne- muy típicos y casi exclusivos de otoño e invierno.
cesitaba la inercia proporcionada por el vapor, que era el
origen del calor con el que se hacía la comida. La olla fe- Los garbanzos han sido uno de los alimentos más tradi-
rroviaria, de la que se conservan varios modelos se ha ex- cionales de la cocina en Navarra. De hecho presumen de
tendido por todo el territorio de Campoo-Los Valles y por tener los mejores del mundo, que son los de Burlada, pero
otras regiones, como Asturias, Vizcaya, norte de Burgos los de Asoaín, Egüe, Gorraiz y Elcano también se disputan
y de Palencia constituyendo un plato típico de la cocina el título. Su preparación estaba en función de las disponi-
de estos lugares. El problema está en discernir cual es la bilidades de recursos, por lo que podían ir desde los de
auténtica, porque en cada sitio la hacen con ingredientes vigilia, sin matanza ni otras carnes, a los de las grandes
diferentes, que van desde los necesarios para hacer un solemnidades en los que todos los cárnicos disponibles
guiso de patatas con carne, hasta los más típicos cocidos, estaban presentes. También son típicos los garbanzos re-
con alubias o con garbanzos. fritos, que son semejantes a la “ropa vieja”, pero sin carne
y con un refrito de cebolla, ajo y perejil.
En el País Vasco las habas fueron la legumbre fundamental
durante muchos siglos y aunque nunca fue muy aprecia- Las alubias blancas con espárragos frescos son una inte-
da en las proximidades de la costa, en Álava sí fue comida resante especialidad, pero sobre todo las pochas, que son
frecuente hasta el punto de que guipuzcoanos y vizcaínos alubias sin madurar frescas y exclusivas del periodo com-
prendido entre finales de julio y últimos de septiembre, longaniza, huevos batidos y piñones, haciendo un rollo un
porque después, según Sarobe Pueyo ya no se las debería punto esponjoso. En Cuaresma preparan las llamadas ju-
llamar pochas, o por lo menos advertir que son congela- días de ayuno, que se acompañan con una sardina en sala-
das. Hay muy variadas presentaciones y entre ellas algu- zón por persona y mezclando judías, garbanzos y acelgas
nas que son verdaderas delicias. Citarlas todas sería muy o espinacas en Alcañiz elaboran el denominado zancocho
largo, pero las recomiendo con codornices, con almejas o
con ancas de rana, porque son memorables. Cuenta Néstor Luján que la escudella era comida casi dia-
ria en casi toda Cataluña, aunque era costumbre variar la
La Rioja comparte con Navarra la cocina de las pochas, sopa diariamente. La legumbre empleada es con más fre-
en realidad es en las únicas comunidades en las que se cuencia son las mongetes (alubias) pero también pueden
cosechan, aunque hay veces que se imitan en otros luga- ser los cigrons (garbanzos) y en ocasiones ambos, como
res a veces incluso lejanos. Son excelentes las prepara- es el caso de la escudella monserratina, en la que es típica
ciones que hemos referido en Navarra, pero hay una es- la pilota (bola o relleno), que puede ser bastante variada
pecialidad, muy interesante, que es con falda de cordero, porque para hacerla se emplea manzanas, piñones, híga-
que les presta un sabor y una textura buenísimos Pero do, etc. Hay muy interesantes platos de mongetes, sobre
en La Rioja hay otra especialidad que son los caparrones, todo si son del “ganchet”, con variadas butifarras pero
que es como se denominan a las alubias pintas, aunque a también con perdiz, que es típico de la Plana de Vic. Se
veces se hace extensivo el término a las rojas o a las ne- cocinan estofadas y se añade un vaso de vino rancio y con
gras, pero nunca a las blancas. La preparación tradicional frecuencia algunos productos del cerdo en salazón, como
de los caparrones es con productos de la matanza, pero el morro y la oreja. En Lérida es muy apreciado el potaje
la verdadera especialidad es cuando se hace solo con a la lleidatana, que se hace con alubias blancas, azafrán
chorizo, que necesariamente ha de ser riojano, porque y butifarra y el bacalao guisado con mongetes. El farro de
sin duda es el mejor de todos los que se hacen en España Tarragona es una especialidad gastronómica, variedad de
para guisar. Los garbanzos también son frecuentes en la la escudella típica catalana, elaborada con alubias, gui-
cocina riojana y tanto el cocido tradicional, que necesa- santes y habas tiernas, que constituye la comida con la
riamente hay que alegrarle con salsa de tomate, fresco en que tradicionalmente se inaugura el carnaval. Las lentejas
su momento y aprovechando los tomates secos en otoño, no son muy frecuentes aunque con ellas se prepara el po-
invierno y primavera. ti-poti, un plato muy interesante que se hace añadiendo a
las lentejas una pasta hecha en mortero con pan frito, ajos
En Aragón el cocido tradicional está entre el madrileño y picados y zumo de limón.
la escudilla catalana. Pero además hay algunas variacio-
nes como los garbanzos a la tarazónica, que se hacen con También en las Islas Baleares las legumbres forman parte
huevos duros o una preparación típica de la cuenca del de la gastronomía tradicional. Las llamadas llegum escal-
Jiloca, en la que se utilizan las judías verdes como verdura. dit (habas, garbanzos, alubias o lentejas) son solamente
Siempre se han alternado los garbanzos con las alubias una cocción sin acompañantes de carne ni de pescado,
en la cocina tradicional aragonesa, pero últimamente las solamente sazonados con ajo, perejil y vinagre. Las fabes
alubias se están imponiendo. Algunos lo atribuyen a la casolanas (habas caseras) se hacen en greixonera (cazue-
difusión por Teodoro Bardají, uno de nuestros más impor- la) con manteca de cerdo, harina, especias y yemas de
tantes cocineros, de su receta del “Recao de Binefar”, en el huevo. Es interesante el cuinat (potaje) de garbanzos, que
que las alubias y el arroz comparten protagonismo. Es una se hace con la legumbre (alubias o garbanzos) disponible
receta típica de todo el “Alto Aragón” y muy apta para to- acompañada de rebanadas de pan tostado, que embeben
dos, porque no tiene exceso de grasa ni de calorías, al ser el caldo de la cocción y se sazonan con jugo de limón, lo
una receta vegetariana. En muchas otras comarcas arago- que hace que a pesar de su sencillez sea un plato muy
nesas se producen y cocinan variedades de alubias muy sabroso.
características. Son los boliches que son variedades re-
dondas y blancas aunque hay también pintas y negras. En En la cocina de la Comunidad Valenciana el arroz ha des-
Embún, en la Jacetania, los hacen con chorizo y jamón, en plazado a las legumbres, pero no siempre fue así, porque
Biescas, en el Alto Gállego los hacen muy bien con codillo primero los garbanzos fueron la base de la alimentación
de cerdo, ajo y pimentón y en Luesia, en las Cinco Villas, en las tres provincias levantinas y como ejemplo siempre
en donde una cabeza de ajo se convierte en ingrediente se cita la elaborada con judías blancas y lentejas conocida
principal, pero el sabor es mucho más importante que el como la olleta d´Alacant y la denominada olleta de music,
esperado en una elaboración tan modesta. que necesariamente debía proporcionar el ayuntamiento
a los músicos que amenizaban las fiestas, que estaba es-
En la provincia de Teruel es famoso el cocido de garban- tablecido que debería llevar alubias, asadura de cordero,
zos con morcillote, que se prepara con carne de cordero, morcilla, hueso de jamón y verdura de estación, que casi
Las legumbres cocidas son una de las conservas más deman- en función de las necesidades de cada cliente. El proceso es
dadas en todo el mundo y hay numerosos fabricantes que se similar en todos los casos. Una máquina dispensa la cantidad
dedican a su elaboración en diferentes puntos del globo terrá- precisa en cada tarro y estos avanzan por una línea donde,
queo. Sin embargo, España es uno de los países más importan- posteriormente, son llenados con el líquido de gobierno, cuyo
tes en este sector, ya que la industria conservera tiene un fuerte principal objetivo es facilitar la conservación de las propie-
arraigo en el país, donde se encuentran algunas de las primeras dades del producto. Después, se cierran los tarros con su
empresas que se fundaron. Una de ellas es Autor Foods, que correspondiente tapa para que sean totalmente herméticos
comenzó su andadura en el año 1918. Más de un siglo de ex- y circulan por una zona de lavado, donde se les aplica agua
periencia que hoy ponen a disposición del mundo para explicar a presión.
cómo se fabrican las conservas de legumbres cocidas.
El proceso consta de seis pasos: recepción, hidratación, coc- 5. Esterilización
ción, envasado, esterilización y etiquetado. Tras ellas comienza Los tarros circulan por cintas transportadoras hasta la zona
la etapa de distribución en el mercado nacional o la exportación, de esterilización. Aquí, se organizan en varios depósitos que
si su destino se encuentra fuera de España. son conducidos hasta las autoclaves, responsables del pro-
ceso de esterilización. Esta se realiza aplicando una presión
1. Recepción de las legumbres en seco y temperatura concreta durante un tiempo determinado para
La primera fase del proceso de elaboración es la recepción de lograr el acabado deseado.
las legumbres en seco. Su transporte, descarga y almacena-
miento es muy importante. Especialmente si, como Autor Foods, 6. Etiquetado
se fabrican legumbres ecológicas, ya que es preciso disponer Tras su paso por las autoclaves, las conservas circulan hasta
de naves diferentes: las convencionales están en una nave y las el área de etiquetado
que proceden de la agricultura ecológica, en otra diferente. Esta y envasado. En esta
separación es fundamental para garantizar que las legumbres zona se coloca la eti-
ecológicas no entran en contacto con las convencionales. queta correspondiente
a cada producto: las
2. Hidratación de las legumbres marcas propias de Au-
La materia prima se traslada hasta las balsas de hidratación, tor Foods (Picuezo Se-
donde se introducen. Posteriormente, estos depósitos se llenan lección, Picuezo, Ra-
de agua y aquí permanecen un tiempo determinado que varía binad y Rabinad Bio)
en función del producto para el que vayan a ser utilizadas. o las marcas de distri-
buidor para las que tra-
3. Escaldado bajan. A continuación,
Tras completar la fase de hidratación, las legumbres son condu- son organizadas por
cidas hasta otra área donde se realiza la cocción. Este proce- cajas de varias unida-
dimiento se conoce con el nombre de escaldado y consiste en des y por palés; y, así,
cocer las legumbres durante un periodo de tiempo muy breve. las legumbres cocidas
ya están listas para ex-
4. Envasado ponerse en los lineales
Ahora es el momento de introducir las legumbres en los en- de los supermercados
vases: tarros de cristal y latas de diferentes pesos y medidas de todo el mundo.
cultura
alimentaria
ha terminado siendo una despedida de las celebraciones poder adquisitivo y de la estacionalidad de las produccio-
navideñas, porque “hasta san Antón Pascuas son”. nes, pero en general no se diferencian demasiado de los
cocidos peninsulares, porque la base son los garbanzos
Hay especialidades muy interesantes, a veces estacio- (garbanzas los llaman en Las Palmas cuando es grande y
nales, como el puchero de brotes tiernos de hinojos, que están cocidos), aunque tienen la particularidad de que en
tiene origen serrano y cortijero de la Alpujarra y especial- la sopa se agrega una o varias cucharadas de gofio, que
mente apetecible en los meses estivales y la berza gadi- conforman al contactar con el caldo el llamado escaldón,
tana, con sus variantes jerezana y gitana, que no es una con lo que se conforma una sabrosa y original sopa.
verdura, ni col, ni similar, que está entre el cocido y el po-
taje de garbanzos, aunque se le pueden añadir también También tienen un puchero de lujo, llamado de las siete
algunas alubias blancas y todos los avíos que se quiera. Es carnes, porque lleva vaca, pollo, conejo, pichón, perdiz,
sabrosísima y riquísima en todas sus variantes. liebre, ternera y gallina. Si se cuentan estos ingredientes
salen ocho, pero primero Luis Antonio de Vega y después
En Melilla uno de los platos más típicos es el arroz al muchos canarios lo justifican, diciendo que tampoco los
horno, que tiene su origen en el aprovechamiento de los tres mosqueros eran tres, sino cuatro. Era típico de celebra-
restos del cocido, por lo que sus ingredientes principales ciones, especialmente de las bodas, pero la globalización
son el tocino, los garbanzos y los diversos productos pro- ha hecho que esta costumbre tradicional hoy sea residual.
cedentes del cerdo y en Ceuta son muy típicos los garban-
zos con chocos La clásica cocina de Extremadura es de subsistencia, lo
que significa que el aprovechamiento de los recursos, no
En las Islas Canarias, cada una de ellas tiene sus particu- muy abundantes, salvo en los domicilios de los hacenda-
laridades gastronómicas, pero en todas ellas el puchero dos y en los monasterios, tenía como base principal las
era comida diaria y en su elaboración entraban los alimen- legumbres y especialmente los garbanzos, que eran el
tos de los que en cada caso se disponía, en función del acompañante ideal para las diferentes chacinas y salazo-
nes del cerdo, programadas para que durasen todo el año, nente importante de los cocidos manchegos es el “relle-
que transcurría entre matanza y matanza. no”, elaborado con miga de pan, huevo batido, ajo y perejil,
que tenía como función fundamental complementar el pla-
Pero hubo un tiempo, bastante prolongado y no tan lejano, to cuando la carne no era abundante, aunque en la actua-
en el que la población mora y judía era bastante numerosa, lidad se considera una exquisitez. El potaje de vigilia, con
y su alimentación era muy parecida a la de los cristianos, bacalao, el “empedrao”, en el que el arroz acompaña a los
pero sustituyendo el cerdo por carnero o por gallina y de la garbanzos, las lentejas posaderas, o el potaje de judías,
fusión del cocido y de la adefina, típico y ritual plato sefardí son variaciones, no muy frecuentes, al tradicional cocido.
cocido en vasija de barro tapada, surgió el cocido tradicio-
nal extremeño, en el que como más significativa innova- Castilla y León es la región más productora de legumbres y
ción el carnero se sustituyo, por vacuno, principalmente sobre todo es en la que hay más variedad. Ávila, sobre todo
por falda de ternera o vaca. la comarca de El Barco, León, especialmente en El Páramo,
son grandes productores de alubias, Zamora con las lente-
Hay bastantes variaciones locales y algunas estacionales, jas de La Armuña y los garbanzos de Fuentesauco y Sala-
sobre todo en lo que se refiere a las hortalizas utilizadas manca con los pedrosillanos y otros interesantes puntos de
y especialmente al uso de hierbas salvajes, como los car- producción como Vaguellina, La Granja etc., son el origen
dillos, collejas, rabiacanes, etc., que aportan sabores y de legumbres de calidad más importante de España.
texturas, desgraciadamente casi olvidados, excepto por
verdaderos gourmets, que las esperan cada año y no las En lo que se refiere a variedades especialmente de alubias
perdonan. Nunca fueron frecuentes en la gastronomía ex- la diversidad es importante, porque hay blancas, negras,
tremeña ni las alubias ni las lentejas, pero cuando se pre- pintas, canela, morada, redondas, riñón, planas, grandes
paran suelen complementarse con morcilla, chorizo, toci- y pequeñas y en estas circunstancias es lógico que la va-
no, oreja, pestorejo y en general productos de la matanza. riedad de platos sea importante. Hay cocidos distintos y
con personalidad, por los ingredientes o por la forma de
Cuentan que el cocido nació en Castilla-La Mancha, por- consumirlos. La consagración de la olla podrida parece
que tiene la propiedad de poder hacerse sin la presencia que se produce en la corte que tenía su sede en Valladolid
de las mujeres, que tenían que ir a trabajar al campo, por lo y entre esa olla real y el cocido diario del campesinado,
que dejaban por la mañana todos los ingredientes en el pu- o de la emergente ciudadanía, había mucha similitud en
chero, para que cociesen lentamente, sin necesidad de vi- cuanto a la concepción y muchas diferencias en cuanto
gilancia y disponer a medio día de la comida dispuesta para al contenido, especialmente en lo que se refiere a la parte
ser ingerida. Este hecho hace que en algunos recetarios proteica, que aunque casi siempre eran básicos los pro-
antiguos se denomine al plato como “tocrúo” o “tojunto”. ductos del cerdo variaban en cantidad y calidad.
La realidad es que el cocido de Castilla-La Mancha no se Un apunte para aclarar que aunque la leyenda dice que el
diferencia demasiado del de otras regiones, aunque siem- cocido maragato tiene su origen a principios del siglo XIX,
pre mantiene la particularidad de estar dispuesto a reci- cuando unas tropas francesas amenazaban con atacar a
bir cualquier recurso del que se disponga ocasionalmen- una posición defendida por el ejército español, en el mo-
te. Por eso hay recetas que incluyen una perdiz entre las mento en el que estaban a punto de empezar el rancho y
carnes, pajaritos o un palomino y muy diversos vegetales, ante la posibilidad de que hubiese que acortar la comida,
como los espárragos trigueros o los cardillos. Un compo- el jefe ordenó servir primero las carnes, después los gar-
banzos y las verduras y finalmente la sopa, es decir prime- ron el colmo de la modernidad, que la burguesía madrileña
ro lo más sustancioso y al revés de como generalmente degustaba al salir del teatro. Transcribimos la receta que
se hace; lo cierto es que fueron los arrieros maragatos los el mismo Tío Lucas le dio a Ángel Muro, autor del libro “El
que decidieron invertir el orden de la comida, que gene- Practicón. Tratado completo de cocina”: Se mete en una oya
ralmente llevaban preparada. La calentaban y comían en de varro una livra de tocino muu partío, con Aceite para que
el lugar que correspondía a la hora habitual, es decir casi se rajogue bien y sechan cuatro libras daluvias con cevoyas,
siempre en el camino y como si se comían primero la sopa, agoa, perejil, comino, laurel, sal, pimentón i arrima la oya al
en los fríos meses de invierno, la carne y los garbanzos se fogón que cuesca cuatro oras”
enfriaban, optaron con buen criterio, mantener la sopa al
fuego hasta el final y de esta forma extraer los alimentos LEGUMBRES Y DIETA MEDITERRÁNEA
más nobles a la temperatura adecuada.
Para estar correctamente alimentado es necesario que las
calorías ingeridas provengan en un 50-60% de los hidratos
de carbono, un 30-40% de las grasas y de las proteínas el
Si hay un lugar en el que el cocido haya 12-15%. Se pueden conseguir estas cifras con muy varia-
das dietas y con la participación de muy diferentes alimen-
sido la comida más habitual, en las mesas tos. En España nos estamos alejando de estas cifras, por-
más ricas y en las más pobres y además que ingerimos más grasas y proteínas de las necesarias y
durante todos los meses, semanas y menos hidratos de carbono y paralelamente nos estamos
días del año, ha sido sin duda Madrid, alejando de la Dieta Mediterránea, la que hasta los años 80
del pasado siglo mantuvimos con fidelidad, que hacía posi-
convirtiéndose con méritos sobrados en ble una mínima incidencia de las enfermedades ligadas a
el plato más emblemático de la capital la alimentación.