סדור אני עמי לשבת

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 20

‫סדור אני עמי לשבת‬

SIDUR ANI AMI DE SHABAT


PARA COMUNIDADES BENÉ
ABRAHAM

Ceremonia de Kabalá
Rezos de Shajarit
Servicio de Habdalá

Por: Jajam Rab Dan Ben Abraham


INTRODUCCIÓN

A continuación se proporcionan breves explicaciones sobre los tres segmentos principales que constituyen
este documento, para que sea del mayor provecho y utilidad de quienes lo empleen.

¿Qué es un “Sidur”?
El Sidur es un devocional o libro de oraciones en el que se define un séder, es decir, el orden en el que han
de ofrecerse ciertas plegarias y dirigirse la liturgia de una determinada ceremonia. En otras palabras, el Sidur
es una guía, principalmente para rezar, y también para conducir los rituales de cada festividad.

¿Por qué leer las plegarias?1


Desde la antigüedad, las oraciones prediseñadas son bastante comunes en el judaísmo, como lo vemos en el
modelo que el Rabí Iehoshúa enseñó a sus estudiantes (y como Iojanán había enseñado a los suyos, Lc
11:1ss). Es imperativo aclarar que el Sidur en ninguna manera sustituye las oraciones espontáneas –aquellas
que fluyen desde el corazón y la inspiración de cada individuo– sino que provee una ayuda para lograr una
mejor comunicación con el Eterno, debido a que puede orientarnos en aspectos tales como:

La estructura u orden que deben tener los rezos


La reverencia con la que debemos acercarnos al Creador
Qué palabras usar para expresar nuestras alabanzas y acciones de gracias
Por qué cosas hemos de orar e interceder
Citar las Sagradas Escrituras en medio de nuestras oraciones

¿Qué se entiende por “Kabalá”?


El término kabalá quiere decir ―recibimiento‖; por lo tanto, Kabalat Shabat alude a la Bienvenida del Día de
Reposo. Consiste en una reunión familiar que con profunda alegría se celebra cada viernes a la caída del sol,
en honor del día que fue bendecido y santificado por HaShem para nuestro beneficio.

Para recibir apropiadamente el sagrado Shabat, de acuerdo a la norma y protocolo de nuestro pueblo judío,
se sugiere prepararse, no solo espiritualmente2 –con una motivación adecuada– sino también en un sentido
físico, teniendo en cuenta lo siguiente:

 La mujer de la casa es la responsable de la cocción de los dos panes de Shabat, los cuales deben ser
trenzados3. Cierta ración de masa debe separarse para hornear una pequeña torta junto a los otros panes, y
una vez cocinada, la esposa la dará a su marido y le dirá: ―esto es jalá‖ (es decir, la porción del sacerdote,
Nm 15:18-21).
 Cada miembro de la familia se vestirá elegantemente, como para una ocasión muy especial.

1
Las nuestras no son ―vanas repeticiones‖, y el Maestro claramente señaló que son los gentiles quienes las hacen cuando oran (Mt
6:7-8). En este caso, cada quien debe [a medida que lee] reflexionar en la profundidad de cada palabra que declara ante HaShem.
2
Es imprescindible tomar en cuenta que el espíritu del Shabat radica en el cese de todo tipo de trabajos y actividades ―seculares‖
(incluso hablar nuestras propias palabras) y en el anhelo por una conexión más profunda con la Presencia Divina (Isa 58:13-14).
3
Respecto a la receta del pan de Shabat y ciertos tips al cocinarlo, la dama puede buscar asesoría en personas conocedoras del
tema.
 La casa debe estar limpia y ordenada, y hay que arreglar la mesa con el mantel más bonito del que se
disponga, junto con la vajilla y las copas más finas, dignas de una celebración solemne.
 El menú debe ser un poco de más categoría que el que se sirve en las comidas cotidianas.
 El vino que se vaya a servir tiene que ser diluido para así disminuir los niveles de alcohol.

¡En todo momento tenga presente que, mediante esta celebración, procuramos inundar el hogar con un
ambiente de paz imperturbable y adoración al Soberano del Universo!

¿Qué significa “Shajarit”?


Desde hace milenios, en el judaísmo han existido tres períodos diarios de oración –tal como vemos en Dn
6:10– llamados shajarit (matutino), minjá (vespertino) y arbit (nocturno). Se trata de momentos establecidos
(y consagrados) para orar de manera privada y/o corporativa. En Hch 3:1, por ejemplo, puede verse a los
apóstoles, como buenos judíos, cumpliendo con la costumbre de presentar en el Templo las plegarias de la
tarde (revise aparentes referencias también en Hch 10:3,9,30; 16:13). Una clara alusión a ello se halla también
en el Salmo 55:17.

Unidos a esta significativa práctica de Israel, los netzaritas ofrecemos nuestros rezos y peticiones cada
mañana de Shabat. Vale la pena mencionar que, de acuerdo con la ancestral tradición judía, quien instituyó
este rezo matinal fue el mismísimo patriarca Abraham (Gn 19:27).

Asimismo, es nuestra costumbre realizar dichas oraciones en dirección a la santa ciudad de Ierushaláim,
conforme a lo que las mismas Escrituras nos sugieren (1 Re 8:27-51; Dn 6:10).

Estas rogativas, las cuales deben hacerse con suma atención y de forma pausada4, deben ser precedidas por
un prolongado tiempo de hitbodedut (recogimiento, meditación), expresado en oraciones libres y
personales, y cánticos al Eterno impregnados de júbilo y abstracción.

¿Qué quiere decir “Habdalá”?


Así como recibimos con gran gozo el Shabat, hacemos una despedida del día de descanso para dar paso a
una nueva semana. La ceremonia con la que realizamos tal cierre se denomina Habdalá (separación), y su
propósito esencial es hacer distinción entre lo santo –el Shabat– y lo profano/común —el resto de los días
de la semana (cf. Eze 44:23). Dicho ritual puede llevarse a cabo en el hogar o preferiblemente junto a la
congregación, después de haber celebrado un servicio de enseñanza el sábado por la tarde.

4
Ya que la idea es que las súplicas se hagan simplemente de manera audible, el jazán proyectará su voz sin necesidad de gritar; por
su parte, la comunidad hablará con un volumen moderado, evitando alzar demasiado la voz. Del mismo modo, es vital que la
congregación ore de forma sincronizada, es decir, que nadie se adelante o se retrase, y por ello es favorable convenir un ritmo en la
lectura (¡de ser posible ensayarlo!) para que se escuche con completo orden y armonía.
CEREMONIA DE RECEPCIÓN DEL SHABAT

Sobre la mesa de Shabat deben estar los panes trenzados (cubiertos con una manta blanca, de ser posible),
el vino o jugo de uvas, y los recipientes con sal y miel. Es bueno explicar el significado de cada ritual al
menos ocasionalmente, sobre todo cuando hay invitados.

A la hora indicada se encienden las velas, esto es, 18 minutos antes de la puesta de sol, para lo cual
es recomendable contar con un almanaque hebreo que indique dicha hora. Se enciende como
mínimo una vela, aunque la costumbre es prender dos (por la mitzvá de recordar y guardar el
Shabat) en memoria de la creación y de las cuatro matriarcas. Los netzaritas encendemos una
tercera en honor del Mashíaj, la luz de este mundo.

Las encargadas de encender estas candelas son las damas (porque por Java se apagó la luz de la
Torá, y porque ellas son las luminarias del hogar), y después de hacerlo recitan la respectiva berajá,
con los ojos cerrados o cubiertos con las manos reverentemente, para que al abrirlos lo primero
que vean sea la luz del Shabat. Es recomendable, asimismo, que los caballeros estén ausentes
durante el encendido.

ENCENDIDO DE LAS VELAS


Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano del universo, que nos santificas con tus preceptos, y
que nos das el privilegio de encender las candelas de Shabat. Amén.

Las velas –preferiblemente blancas– deben ser encendidas en la misma mesa de Shabat, o al menos
en la misma habitación, y permanecer allí hasta que su fuego se extinga. Es ideal que se cuente con
un candelabro apartado únicamente para las velas de Shabat.

Es costumbre que la mujer ore asimismo por su familia (esposo e hijos), y dé gracias al Eterno por
la llegada de Su sagrado día de reposo. Un varón puede asumir esta tarea de no haber damas
presentes.

Así se da comienzo al Shabat. Unos a otros se desean Shabat shalom y se instalan en la mesa.

Previo al próximo paso se declara el Shemá Israel, tras lo cual es conveniente leer (o recitar)
los vv. 5-9 de Debarim 6 y Vaikrá 19:18b.

Paso 1: SHALOM ALEJEM


Antes de cantar debemos pedir directamente a HaShem que envíe sus mensajeros celestiales. Este
cántico puede interpretarse a capella o asistido con un reproductor de música, y con el ritmo que
los presentes prefieran. El por qué se entona el Shalom Alejem está explicado en el glosario al final
de este documento.
Shalom alejem malajé hasharet malajé Elión Que la paz esté con ustedes, ángeles
mélej maljé hamelajím HaKadosh Baruj Hu. ministeriales, ángeles del Altísimo, el Rey de
reyes, el Santo, bendito es.

Boajem leshalom malajé hashalom malajé Que su venida sea en paz, ángeles de paz,
Elión maljé hamelajím HaKadosh Baruj Hu. ángeles del Altísimo, el Rey de reyes, el Santo,
bendito es.

Barejuni leshalom malajé hashalom malajé Bendíganme con paz, ángeles de paz, ángeles
Elión maljé hamelajím HaKadosh Baruj Hu. del Altísimo, el Rey de reyes, el Santo, bendito
es.

Beshibtejem leshalom malajé hashalom Que su residencia sea en paz, ángeles de paz,
malajé Elión mélej maljé hamelajím HaKadosh ángeles del Altísimo, el Rey de reyes, el Santo,
Baruj Hu. bendito es.

Betsetejem, leshalom malajé hashalom malajé Que su salida sea en paz, ángeles de paz,
Elión mélej maljé hamelajím HaKadosh Baruj ángeles del Altísimo, el Rey de reyes, el Santo,
Hu. bendito es.

Paso 2) POEMA A LA MUJER VIRTUOSA


El marido le recita en voz alta la porción bíblica de Mishlé 31:10-31 a su esposa (o en su defecto un
hijo a su madre). Al llegar al v. 28 los hijos se acercan a su madre y le dicen algún elogio o
bendición.

Después de leer el Eshet Jaíl a su esposa, el marido ora por ella y por las justas de Israel. Es una
ocasión propicia para que éste la halague y le exprese palabras de afecto y gratitud.
¡En la casa de Israel es costumbre que este poema incluso se cante!

Paso 3) KIDUSH
Se sirve vino en la copa y se le agregan 3 chorritos de agua, luego se prosigue con el pasaje bíblico
que está abajo. Si no es vino puro, los chorritos de agua no son necesarios, pues estos son para
diluir el licor. La copa –llena hasta el tope– se alza, tomada en la palma ahuecada de la mano
derecha.

El sexto día fueron completados los cielos y la tierra, y todo su contenido. Elohím completó en el
séptimo día toda su labor que había hecho, y cesó el séptimo día toda su labor que había hecho.
Elohím bendijo el séptimo día y lo santificó, porque en él cesó de toda su labor que Adonai había
creado para hacer. (Bereshit 1:31—2:1,3).
Sabrí maranán Con su permiso, señores (esto dice el oficiante)
Lejaim ¡A la vida! (así responden los presentes)

La berajá por el vino suele cantarse.


Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam boré Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano
perí haguefen. Amén. del universo, creador del fruto de la vid.
Amén.

Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano del universo, que te has complacido en nosotros, y
con beneplácito recordamos la obra de la creación, el principio de las convocaciones de santidad, y
en tu santo Shabat nos deleitamos junto a la Casa de Israel. Bendito eres tú, Eterno, que santificas
el Shabat.

A continuación, quien oficia la reunión devuelve un poco del vino de su copa a la jarra, bebe un
sorbo, y luego le sirve a los presentes en sus respectivas copas, tras lo cual todos brindan y beben
en conjunto.

NOTA: Ver instrucciones en el paso 2 de la Ceremonia de Habdalá sobre qué hacer si no se tiene
vino para el Kidush.

Paso 4) BENDICIÓN A LOS HIJOS


En el orden que se indica, primero varones y luego hembras, el padre bendice a sus hijos tomando
sus manos, abrazándoles o poniendo su mano sobre las cabezas de ellos.

Para un hijo: (esto es, todos los hijos juntos)


Que el Eterno te haga como Efraím y Menashé. “Que el Eterno te bendiga y te preserve; que el Eterno
ilumine Su rostro hacia ti y te otorgue gracia; que el Eterno eleve Su rostro hacia ti ponga paz en ti. Y
pondrán Mi Nombre sobre el pueblo de Israel y yo los bendeciré” (Bemidbar 6:24-26).

Para una hija: (esto es, todas las hijas juntas)


Que el Eterno te haga como Sará, Ribká, Rajel y Leá. “Que el Eterno te bendiga y te preserve; que el
Eterno ilumine Su rostro hacia ti y te otorgue gracia; que el Eterno eleve Su rostro hacia ti ponga paz
en ti. Y pondrán Mi Nombre sobre el pueblo de Israel y yo los bendeciré” (Bemidbar 6:24-26).

Se puede finalizar añadiendo más palabras de bendición, exhortación o felicitación, y una oración
espontánea.
Paso 5: BENDICIÓN POR EL LAVADO DE MANOS (antes hay que remover anillos y pulseras)
Los caballeros se lavan las manos en primer lugar, y posteriormente lo hacen las damas; no
obstante, si hay demasiadas personas, solo lo hacen los caballeros. Durante todo el proceso cada
persona debe estar en silencio, dando lugar a la introspección.

Una jarra y un recipiente (si son de vidrio, mejor) serán usados para tal fin. El individuo se acerca a
donde estén dichos utensilios (por lo general, una mesa cercana a donde la familia está reunida),
toma la jarra por el asa con la mano derecha y la pasa a su mano izquierda, vierte tres chorritos
sobre la mano derecha (exterior-palma-exterior), pasa la jarra a la mano derecha y repite el
procedimiento. Acto seguido, coloca la jarra sobre la mesa y recita con las manos en alto la
bendición. Finalmente, en caso de ser el primero en lavarse, se seca las manos con una toalla por sí
mismo, si no, la persona que se lavó antes estará esperándole con la toalla para secarle las manos y
dársela para que haga lo mismo con el próximo.

Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam asher Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, soberano
kideshanu bemitzvotav, vetzivanu al netilat del universo, que nos has permitido el lavado
iadaím. Amén. de manos. Amén.

El lavamiento de manos, lejos de ser un simple rito religioso y carente de sentido, es un acto
simbólico que hacemos con la motivación de purificar las acciones de nuestras manos con el agua
de la Torá, de modo que en todo tiempo nuestras obras sean halladas justas ante el Eterno (Sal
24:3-4; 26:6; 1 Ti 2:8). Aún el lavarse primero la mano derecha tiene un significado: que en todo
cuanto hagamos prevalezca la misericordia antes que el juicio. Por otro lado, a través del netilat
iadaím evocamos a los levitas que se purificaban antes de ministrar en el Santuario (Ex 30:18-21),
teniendo presente nuestro rol como kohaním en el Reino del Eterno (Ex 19:6; 1 Pd 2:5,9; Apo 1:6;
5:10; 20:6).

Además de esto, la ablución de manos tiene que ver con la higiene (y la posterior ingesta del pan).

Previo al partimiento del pan, se lee y comparte una porción de las Escrituras, para así
priorizar el alimento espiritual antes que el físico.

Paso 6: BENDICIÓN POR EL PAN


El pan es una alusión al sustento de HaShem, y se usan dos como analogía de la doble provisión de
maná que recibían nuestros ancestros cada sexto día en el desierto. Asimismo, en la misma Torá
existe la orden de tener panes en la mesa durante el Shabat (Lev 24:5-6).

Los panes de Shabat, denominados jalot, serán descubiertos por el oficiante –seguido por voces de
celebración–, quien después de esparcir sal sobre ellos (Lev 2:13) los juntará y alzará para luego
decir la bendición:
La berajá por el pan suele cantarse.
Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano
hamotzí léjem min haáretz. Amén. del universo, que extrae pan de la tierra.
Amén.

Inmediatamente, el oficiante procede a cortar el primer pan en pedazos (con la mano o un


cuchillo), y lo rocía con miel (Sal 19:9-10; 119:103). Luego, toma su pedazo, lo sumerge tres veces
en un montoncito de sal aparte, mientras dice “HaShem Mélej. HaShem malaj. HaShem imloj leolam
vaed”, y se lo come. De esa manera, invita a los presentes a que se levanten de su lugar para tomar
con sus manos sus respectivos trozos de pan.

NOTA: Será decisión del señor de la casa si cortar y servir la otra jalá el viernes en la noche o
dejarlo para el desayuno del día siguiente. De no disponerse de panes de Shabat, se puede usar
cualquier otro pan.

Después de la comida:
Después de que todos coman pan, sin pasarlo de mano a mano, se sirve la comida de Shabat. Al
terminar se concluye con el cántico ladino del paso 7. El pan de Shabat no se pasa de mano a mano
porque es figura del pan de la Torá, que cada quien debe buscar directamente.

Paso 7) BENDIGAMOS ♪♫
Todos los comensales deben estar presentes al interpretarse este canto:

Bendigamos al Altísimo, al Señor que nos creó; démosle agradecimientos por los bienes que nos dio.
Alabado sea su Santo Nombre, porque siempre nos apiadó. Load al Señor que es bueno, y para siempre
su merced.

Bendigamos al Altísimo, por su Ley primeramente, que vincula nuestras almas con el cielo
continuamente. Alabado sea su Santo Nombre, porque siempre nos apiadó. Load al Señor que es
bueno, y para siempre su merced.

Bendigamos al Altísimo, por el pan segundamente, y por todos los manjares que comimos juntamente.
Pues comimos y bebimos y alegremente nos apiadó. Load al Señor que es bueno, y para siempre su
merced.

Bendita es la casa nuestra, el hogar de Su presencia, donde guardamos Sus fiestas con alegría y
permanencia. Alabado sea Su Santo Nombre, porque siempre nos apiadó. Load al Señor que es bueno,
y para siempre su merced.

//Hodú ladonai ki tob, ki le‗olam jasdó// (―Load al Señor que es bueno y para siempre Su merced”)

Finalizado el cántico, se eleva una tefilá espontánea de agradecimiento por los alimentos, y se da
por concluida la celebración.
SERVICIO DE SHAJARIT

 Al leer los nombres El Eterno o HaShem pronunciaremos ―Adonai”.


 Cada vez que el líder diga ―Bendito eres tú, Adonai‖ (y haga una breve pausa) los presentes deben
inclinarse ligeramente y susurrar ―bendito es Él y bendito es Su Nombre‖.
 La comunidad debe responder ―amén‖ solamente cuando halle subrayada dicha palabra.

Líder: Anajnu mapilím kol tajanunenu sejut Iehoshúa HaMashíaj.

Comunidad: Ofrecemos nuestras plegarias por los méritos de Iehoshúa el Mesías.

Líder: Bendito eres tú, Eterno, que nos has dado la vida para bendecirte y proclamar unidos la
gloria de Tu reino.

Comunidad: He aquí que nosotros unimos ahora nuestra alma al alma de nuestro justo Mesías,
para recibir los méritos del Tzadik de Israel, y contar así con la frescura de Su Kedushá, para subir a
las gradas celestiales y entrar en la presencia de HaKadosh Baruj Hu, y depositar allí nuestro
sacrificio de la mañana, expresado en la ofrenda de nuestros labios.

Líder: ¡Vamos, cantemos a Adonai! Cantemos jubilosos a la roca de nuestra salvación.


Acerquémonos a Su rostro con gratitud, con salmos cantemos jubilosos a Él. Pues un Dio grande es
Adonai, y un gran Rey sobre todo lo que existe. Las entrañas de la tierra, las cumbres de las
montañas son Suyas. Suyo es el mar ya que Él lo hizo, y lo seco Sus manos crearon. Vamos,
postrémonos e inclinémonos, ante Adonai nuestro Hacedor. Pues Él es nuestro Dio y nosotros
pueblo de Su pastoreo y rebaño de Su mano. Y digan amén (amén).

¡Canten a Adonai un canto nuevo! ¡Canten a Adonai toda la tierra! ¡Canten a Adonai! Bendito Su
nombre, anuncien de día en día Su salvación. Declaren entre las naciones Su gloria, entre todos los
pueblos Sus maravillas. Pues grande es Adonai y alabado grandemente, temible es Él sobre todo lo
divino. Pues todos los ―dioses‖ de los pueblos son vacuidades, ¡Adonai [en cambio] los cielos hizo!
Honor y majestad ante Él, fuerza y belleza hay en Su santuario.

Atribuyan a Adonai, familias de los pueblos, atribuyan a Adonai gloria y fuerza. Atribuyan a Adonai
la gloria de Su nombre, alcen tributo y vengan a Sus atrios. Póstrense ante Adonai en la belleza del
Santo, tiemble ante Él toda la tierra. Declaren entre las naciones: ―Adonai reina‖. Juzgará a la tierra
con justicia y la gloria del gran Dio cubrirá las naciones.

Mujeres: Se avergonzarán todos los que sirven ídolos, aquellos que se jactan en vacuidades; se
postrará ante Él todo lo existente. Oyó y se alegró Tzión, se regocijaron las hijas de Iehudá por tus
juicios, Adonai. Pues tú, Adonai, eres el más alto sobre toda la tierra, grandemente fuiste exaltado
por sobre todo lo que existe. Bendito es el Eterno por siempre y para siempre, nuestro uno y único
Dio, desde la eternidad hasta la eternidad y decimos amén (amén).

Hombres: La luz está sembrada para el justo, y para los rectos de corazón la alegría. ¡Alégrense los
justos en Adonai! Y den gracias a la memoria de Su santidad. Yo y mi casa serviremos a Adonai,
nuestro uno y único Dio verdadero, y no hay nadie más. Bendito sea Su nombre eternamente y
para siempre y digamos amén (amén).

Líder: Adonai reina, la tierra entera está llena de Su gloria.


CANTO:
//HaShem Mélej, HaShem malaj, HaShem imloj leolam vaed//
//Vehaiá HaShem lemélej al kol haaretz. Baiom hahú ihié HaShem ejad ushmó ejad//
(―HaShem reina, HaShem reinó, HaShem reinará por siempre y para siempre.
Y será HaShem el Rey sobre la Tierra, y en aquel día HaShem será Uno y Su Nombre Uno‖)

Líder: Canten a Adonai un canto nuevo pues maravillas ha hecho, salvación para Él de Su diestra y
de Su brazo santo. Ha anunciado Adonai Su salvación, ante los ojos de las naciones descubrió Su
justicia.

UN SALMO CANTADO PARA EL DIA DE SHABAT


Bueno es agradecer a Adonai y cantar a Su nombre altísimo. Pronunciar por la mañana Su amor y
Su lealtad por las noches. Con el arpa y con el decacordio, con una canción solemne de lira. Pues
me he alegrado Adonai con tu obra, sobre las obras de tus manos cantaré alegremente.

Comunidad: ¡Cuán grandes son tus obras Adonai, muy profundos son tus pensamientos! Un
hombre ignorante no sabe, y el atolondrado no entiende esto: Al florecer los impíos como la hierba
y al prosperar todos aquellos que obran iniquidad, sólo es para su destrucción eterna, pues he aquí
que tus enemigos, Adonai, he aquí que tus enemigos se perderán, dispersos serán todos aquellos
que obran iniquidad.

Líder: Alzaste como el búfalo mi cuerno, me ungiste con aceite fresco, mis ojos han descubierto
aquellos que me acechan. Cuando se alzaron contra mí los malvados, lo oyeron mis oídos. El justo
como la palma florecerá, como el cedro en el Líbano crecerá. Plantados en la casa de Adonai, en los
atrios de nuestro Dio florecerán. Aun florecerán en su vejez, vigorosos y frescos serán para decir
que recto es Adonai, mi Roca, en quien no hay injusticia.

CANTO:
//Tzadik katamar ifraj, ifraj… Tzadik katamar ifraj//
//////Keérez balebanon isgué//////
(―El justo como la palma florecerá, como el cedro en el Líbano crecerá‖)
AMIDÁ PARA BENÉ ABRAHAM
(Con mucha solemnidad)

Ponerse de pie para recitar la Amidá, con total concentración, evitando cualquier interrupción.

Líder: Oh Adón, abre mis labios y publicará mi boca tu alabanza

Comunidad: Bendito eres tú, Adonai, nuestro Dio y Dio de nuestro padre Abraham, de bendita
memoria, el Dio grande, el portentoso y el temible, el Dio alto, dispensador de misericordias
favorables, creador de todo, memorioso de la piedad de los ancestros, y traedor de un redentor,
nuestro justo Mesías, para los hijos de sus hijos, para loor y renombre de tu gloria.

Líder: Bendito eres tú, Adonai, escudo de Abraham, escudo nuestro, escudo de tu pueblo Israel.

Comunidad: Tú eres poderoso para siempre, Adonai, tú das vida a los muertos, grande eres en
salvación.

Líder: Veneemán atá lehajaiot metím. Baruj atá Adonai, mejaié hametím.

Comunidad: Y confiable eres tú para dar vida a los muertos. Bendito eres tú, Adonai, que da vida a
los muertos.

Líder: Baruj kebod Adonai mimekomó.

Comunidad: Bendita es la gloria de Adonai desde Su morada.

Líder: Haznos retornar, nuestro padre, a tu Torá y acércanos, nuestro rey, a tu servicio y
devuélvenos en un retorno completo ante ti, pues fuimos robados y alejados de ti y extraviados por
senderos de oscuridad, nosotros y nuestros ancestros, y obligados a servir a dioses extraños en una
provincia apartada.

Comunidad: Pero tú, Adonai, fuiste compasivo y misericordioso: enviaste por nosotros la luz de la
Torá, la luz de tu justo Mesías, y nos encontraste y nos trajiste de vuelta a tu Santa Casa. Bendito
eres tú, Adonai, que deseas el retorno de todas las ovejas perdidas de la casa de Israel (amén).

Líder: Perdónanos, nuestro Padre, pues hemos transgredido. Indúltanos, nuestro rey, pues hemos
hecho mal, pues tú eres el Dio bueno e indulgente.

Comunidad: Bendito eres tú, Adonai, que con gracia abundas en perdonar, a nosotros y a nuestros
ancestros y a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos con amor.
Líder: Cúranos, Adonai, y seremos curados, sálvanos y seremos salvos, pues nuestra alabanza eres
tú. Trae sanación y curación para todas nuestras enfermedades y para todas nuestras dolencias, y
para todas nuestras aflicciones. Pues el Dio curador, misericordioso y fiel eres tú.

Comunidad: El bendito eres tú, Adonai, que curas a los enfermos de Su pueblo Israel, amén.

Líder: Toca tu shofar magno para nuestra liberación, y eleva tu estandarte para reunir a nuestros
exiliados. Reúnenos juntos rápidamente desde las cuatro esquinas de la tierra a nuestra tierra.

Comunidad: Bendito eres tú, Adonai, que reúnes a los expulsados de Su pueblo Israel.

Líder: Y todos tus enemigos y todos quienes te odian prontamente sean expurgados, y todos los
que hacen maldad prontamente sean desarraigados y quebrados y destruidos y derrotados
rápidamente en nuestros días.

Comunidad: Bendito eres tú, Adonai, que quiebras a los enemigos y derrotas a los arrogantes y
anulas los planes de los malvados contra nosotros y contra tu pueblo Israel.

Líder: Sobre los justos y sobre los piadosos y sobre el remanente de tu pueblo, la casa de Israel, y
sobre los sobrevivientes de la casa de sus escribas y sobre los conversos justos y sobre nosotros,
fluya por favor tu misericordia.

Comunidad: Adonai, nuestro Dio, otorga buena recompensa a todos los que confían en tu nombre
verdaderamente, y pon nuestra suerte con ellos, y que nunca nos avergoncemos, pues en ti
confiamos, y en tu gracia magna verdaderamente reposamos. Bendito eres tú, Adonai, reposo y
confianza de los justos.

Líder: Nuestro Dio y Dio de nuestros ancestros, se eleve, venga, llegue, sea vista y sea recibida, sea
escuchada, sea considerada y sea recordada delante de ti nuestra memoria y la memoria de
nuestros ancestros, la memoria de Jerusalén tu ciudad.

Comunidad: Y la memoria del Mesías hijo de David tu siervo, y la memoria de todo tu pueblo la
casa de Israel frente a ti, para la supervivencia, para el bien, para la gracia, el amor y la misericordia
en este sagrado día de Shabat.

Líder: Otorga paz, bien y bendición, vida, gracia y amor y misericordia sobre nosotros y sobre todo
Israel tu pueblo. Y bendice nuestro Padre a todos nosotros como uno con la luz de tu rostro, pues
en la luz de tu rostro nos diste a nosotros, Adonai nuestro Dio, Torá y vida, amor y bondad, justicia
y misericordia, bendición y paz.
Comunidad: Y que sea bueno ante tus ojos bendecirnos y bendecir a todo tu pueblo Israel, con
gran fuerza y paz, amén.

Líder: Sean gratas las palabras de mi boca, y la meditación de mi corazón frente a ti, Adonai, mi
roca y mi redentor.

Comunidad: Mi Dio, guarda mi lengua del mal, y mis labios de decir falsedad, y que ante mis
maldecidores mi alma calle, y mi alma sea humilde como el polvo en todo. Abre mi corazón a tu
Torá, y que tus mitzvot que has apartado para mí persiga mi alma.

Líder: Sean gratas las palabras de mi boca, y la meditación de mi corazón frente a ti, Adonai, mi
roca y mi redentor.

Todos:
(Inclinarse hacia la izquierda) El que hace la paz en las alturas,
(Inclinarse hacia la derecha) Él en Su misericordia hará la paz sobre nosotros,
(Inclinarse hacia el frente) y sobre todo Israel, amén.

KADISH PARA BENÉ ABRAHAM

Líder: Engrandecido y santificado sea Su nombre magno (amén), en el mundo que creó según Su
voluntad, reine Su reino, florezca Su salvación y se acerque Su Mesías (amén), en sus vidas y en sus
días y en la vida de toda la casa de Israel, pronto y en un tiempo cercano. Digan ―amén‖ (amén).

Comunidad: Sea Su nombre magno bendito por siempre y para siempre. Bendito y alabado y
honrado y exaltado y adorado y glorificado y elevado y loado sea el nombre del Santo Bendito Sea
(amén), por encima de toda bendición y canción, de toda alabanza y consolación dicha en este
mundo, digan ―amén‖ (amén).

Líder: Sean recibidas las oraciones y las peticiones de toda la Casa de Israel frente a su Padre en los
cielos. Digan ―amén‖ (amén). Sea una paz magna de los cielos, vida y saciedad, salvación y
misericordia, solaz y curación, redención y perdón, indulto, abundancia y éxito para nosotros y para
todo Su pueblo Israel, y digan ―amén‖ (amén).

Líder: Bendigan ustedes al Eterno.

Comunidad: Bendito es Adonai el bendito por siempre y para siempre.

Líder: Bendito es Adonai el bendito por siempre y para siempre.


Todos: (en dirección a Ierushaláim, con la mano izquierda cubriendo los ojos y la derecha en el corazón)
Canto tradicional: Shemá, Israel, Adonai Elohenu, Adonai Ejad.
(En voz baja) Baruj shem kebod maljutó le’olam vaed.

Líder: Y amarás al Eterno tu Dio, con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todos tus bienes.

Todos: Y estas palabras que te enseño hoy estarán sobre tu corazón, y hablarás de ellas a tus hijos,
al acostarte y al andar por el camino, y cada vez que te levantes y cada vez que te acuestes, amén.

Finalizado el Kadish y el Shemá Israel, se da lugar a la exposición de la Torá. Una vez culminada la clase, se
procede a confesar colectivamente el Alenu.

ALENU
(Todos a una voz, esperándose unos a otros, confiesan el Alenu)

A nosotros corresponde afirmar nuestra fe en HaShem, y atribuir grandeza al Creador de la obra de


la creación. Nosotros agradecemos a nuestro Adón el habernos rescatado de los pueblos idólatras,
acercándonos a Su verdad. (Inclinarse) Nosotros reverenciamos y agradecemos al Soberano del
universo, el Santo Bendito que creó los cielos, y la tierra es su obra (enderezarse). Él es la suprema
verdad y así está escrito en su Torá: "Reconócelo hoy y grábalo en tu corazón, que el Eterno es Dio y
reina en los cielos y sobre la tierra. Él es único".

Por lo tanto, confiamos en la pronta manifestación de Tu gloria que hará desaparecer los falsos
valores de la tierra y destruirá toda suerte de idolatría. Confiamos en un mundo mejor, orientado
por nuestra fe en Ti. Entonces la humanidad Te invocará y todos los impíos tornarán hacia Ti. Todo
el universo reconocerá tu supremacía, todos los hombres pondrán en Ti su esperanza. Tú serás la
creencia de todos los seres humanos.

Tú reinarás sobre el universo por siempre y para siempre, pues así está escrito en tu Torá: "El Eterno
reinará por siempre y para siempre". HaShem reinará por toda la eternidad, entonces el Eterno será
Uno y hacia Ti correrán. Todos los hombres pondrán en Ti su esperanza. Tú serás la creencia de
todos los seres humanos. Tú reinarás sobre el universo por siempre y para siempre. “HaShem
reinará por toda la eternidad, entonces el Eterno será Uno y su nombre Uno‖ y a Ti pertenecen el
honor y la gloria, el poder y la alabanza por los siglos de los siglos, amén.

Líder: Y en tu Torá, Eterno nuestro Dio, escrito está:


Todos: “Shemá Israel; Adonai nuestro Dio, Adonai uno solo es” (amén).
CEREMONIA DE HABDALÁ

Inicia a la hora señalada (por un calendario que marque la hora de finalización de Shabat) o al verse en el
cielo 3 testigos (tres estrellas, aunque a veces el día está nublado y no se pueden apreciar, y por ello es tan
útil poseer el anuario).

Se recomienda tener todos los elementos reunidos en la mesa: Sidur, copa con vino, frasco de especias,
velas, fósforos.

Paso 1) Encender la vela trenzada con el erub encendido antes de la entrada de Shabat.
En caso de que no se cuente con este tipo especial de velas, se pueden tomar dos velas ordinarias y
juntar sus mechas. Si no se dispone de un erub, se puede encender la candela con un yesquero o
fósforos. Dicho encendido se realiza posterior a la bendición del paso 4.

Paso 2) KIDUSH

Levantar la copa de vino en la mano derecha y recitar lo siguiente:

El principal de Tzión (Sión), he aquí que viene, y yo enviaré un emisario de buenas nuevas a
Jerusalem. Alzaré la copa de salvación e invocaré el nombre del Eterno.

Quien dirige: Por favor, oh Eterno, sálvanos.


Los presentes: Por favor, oh Eterno, sálvanos.

Quien dirige: Por favor, oh Eterno, haznos prosperar.


Los presentes: Por favor, oh Eterno, haznos prosperar.

Haz que prosperemos, haz que nuestros caminos tengan éxito, haz que prosperemos en nuestros
estudios y envía bendición, holgura y éxito en todo lo que emprendamos, como está escrito:
Recibirá bendiciones del Eterno y rectitud del Dio de su salvación. Los judíos tuvieron luz y alegría;
regocijo y honra. Y también está escrito: Y David tenía éxito en todos sus caminos, y el Eterno
estaba con él. Que así también nosotros hallemos gracia y buen entendimiento en los ojos de Dio y
los hombres. ¡Oh Dio de Ieshúa, respóndenos!

Sabrí maranán Con su permiso, señores (esto dice el oficiante)


Lejaim ¡A la vida! (así responden los presentes)

La berajá por el vino suele cantarse.


Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam boré Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano
perí haguefen. Amén. del universo, creador del fruto de la vid.
Amén.
_________________________________________________________________________________________________________
Si no tiene vino para el Kidush no se dice “Boré perí haguefen‖. Se puede utilizar jugo u otro licor (o
agua, de no tener ninguno de estos), en su lugar se dice ―shehakol nihiá bidbaró‖ (que todo creó
con Su palabra).
_________________________________________________________________________________________________________

Solamente quien dirige toma del vino en la copa, dejando un poco para el momento de apagar la
vela.

Paso 3) POR LAS ESPECIAS AROMÁTICAS


“Los Cabalistas nos dicen que durante Shabat, cada uno recibe un alma extra, o sensibilidad espiritual
extra. Así como el Shabat se va, así también lo hace el alma extra, causándonos que nos sintamos
débiles. Por ésta razón olemos algunas especias (¡sales aromáticas espirituales!) para reconfortar a
nuestra alma por la pérdida de Shabat” (Lori Palatnik).

Se utiliza una mezcla de canela y clavos de olor, contenida en un frasquito, y se agita para que el
olor se impregne.

Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam boré Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano
miné besamím. Amén. del universo, Creador de especias aromáticas.
Amén.

El jazán es el primero en oler las especias, y posteriormente lo hacen los niños de menor a mayor,
para luego pasarlas al resto de los presentes.

Paso 4) POR LAS ILUMINACIONES DEL FUEGO


“Los Sabios nos dicen: Al caer la noche al final del primer Shabat del mundo, Adam tuvo temor y
lloró. Entonces el Creador le enseñó a hacer fuego y, por medio de su luz y su calor, a ahuyentar las
tinieblas y sus terrores. Encender una llama es un símbolo de nuestro primer trabajo en la tierra. El
Shabat se va y comienza el día de trabajo, cuando encendemos el fuego. Y nosotros, que ya no le
tememos a la noche, le damos gracias al Eterno por la llama mediante la cual convertimos los
productos crudos de la tierra en cosas útiles y bellas. La vela doble nos recuerda que todas las
cualidades se dan en opuestos. Tenemos el poder de crear muchos fuegos diferentes, algunos útiles,
otros perjudiciales. Estemos en guardia para nunca permitir que este don del fuego devore la vida
humana, consuma ciudades, abrase campos y contamine el aire puro de la atmósfera, oscureciendo
los cielos. Que el fuego que encendamos sea santo; que traiga luz y calor a toda la humanidad.”
(Eliyahu ben Jaíl).

Baruj atá Adonai Elohenu mélej ha‘olam boré Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, Soberano
meoré haesh. Amén. del universo, Creador del fulgor del fuego.
Amén.

Se encienden las luces de Habdalá y se invita a los presentes a recrearse y refugiarse en su fuego
en tanto dure, antes de que sea despedido el sagrado Shabat. Asimismo, se prosigue con esta
bendición:
Bendito eres tú, Eterno, Dio nuestro, soberano del universo, que hace la distinción entre lo sagrado
y lo profano, entre la luz y las tinieblas; entre Israel y las demás naciones; y entre el séptimo día y
los seis días de actividad. Bendito eres tú, Eterno, que hace la distinción entre lo sagrado y lo
profano.

Llegado este punto, se apagan las luminarias con el vino (o el jugo/licor que se esté usando). El
oficiante bien puede humedecer la yema de sus dedos y extinguir con ésta la llama, o rociar un
poco de vino sobre un plato y empapar allí la mecha de las velas.

Quien dirige: Y así dirán ustedes al viviente: tú estarás en paz, tu casa estará en paz y todo lo que
posees estará en paz (luego de la oración final, esta frase será la bendición que los presentes se
declaren entre ellos).
Los presentes: Yo estaré en paz, mi casa estará en paz y todo lo que poseo estará en paz.

(Se acostumbra a recitar esta frase por las autoridades locales, nacionales, por el pueblo de Israel, y
cuando se recita por Jerusalén se hace viendo hacia esta ciudad. Ejemplo: El Rab estará en paz, su
casa estará en paz y todo lo que él tiene estará en paz).

Quien dirige: Bendito es el varón que confía en el Eterno. El Eterno será su protección. El Eterno
otorgará vigor a su pueblo; el Eterno bendecirá a su pueblo con Shalom.

¡SHABUA TOB!

NOTA: Lo mejor es que se realice el servicio del ofertorio posterior a la Ceremonia de Habdalá y no
durante el Shabat (cf. 1 Cor 16:1-2).

_________________________________________________________________________________________________________
GLOSARIO

Erub: Una de las prohibiciones de Shabat es no encender fuego nuevo en Shabat, por tal motivo
fue instituido el erub de fuego, que no es más que un velón el cual es encendido antes de la
entrada de Shabat (cosa que no lo hace un fuego nuevo). Este fuego que debe permanecer
encendido todo el día de Shabat, se utiliza para encender la cocina, para calentar los alimentos que
serán consumidos a lo largo del Shabat. Es importante siempre recordar que está permitido
calentar alimentos, no cocinarlos de cero. Ejemplo: puedo calentar un huevo que fue previamente
sancochado antes de Shabat, pero no puedo sancocharlo en Shabat; puedo calentar un pan, pero
no hacerlo en Shabat.

Habdalá: Es la ceremonia que marca el fin simbólico del Shabat y anuncia la llegada de una nueva
semana. El Shabat termina (y la nueva semana comienza) al anochecer del sábado.

Kidush: El Kidush es una bendición que se dice sobre el vino en el Shabat y festividades del Eterno.
El requerimiento de recitar el Kidush en la noche del viernes y festividades es de carácter bíblico,
basado en el cuarto mandamiento que marca la obligación de recordar el Shabat (Éxodo 20:8).

Ladino: Ladino es el idioma hablado por las comunidades judías descendientes de hebreos que
vivieron en la península ibérica hasta 1492, llamados sefardíes. El ladino, aunque procedente del
castellano medieval, presenta también rasgos en diferentes proporciones de otras lenguas
peninsulares y mediterráneas. Al ser una lengua judía, contiene alguna aportación del hebreo, con
alguna influencia del turco e incluso del griego, principalmente, dependiendo del entorno. Además,
el judeoespañol contemporáneo contiene una cantidad notable de vocablos del francés, por
influencia de la Alianza Israelita Universal en ciudades como Salónica, Estambul y Esmirna.

Shalom Alejem: Escrito por cabalistas de la ciudad de Safed a finales del siglo XVII. De acuerdo al
Talmud de Babilonia, dos ángeles que simbolizan a la buena y a la mala inclinación (iétzer hatob y
iétzer hará respectivamente) acompañan a cada persona en el camino de vuelta a su casa desde la
sinagoga los viernes por la noche. Si la casa ha sido preparada para el Shabat (velas encendidas
previamente, y la mesa preparada con jalá y vino), el ángel que representa a la buena inclinación
recita una bendición diciendo ―que el próximo Shabat sea igual‖; el que representa a la mala
inclinación está obligado a responder ―amén‖. Pero si la casa no ha sido preparada para Shabat, el
ángel que representa la mala inclinación dirá lo mismo; y el ángel que representa la buena
inclinación estará, igualmente, obligado a decir ―amén‖.
SERVICIO DEL OFERTORIO

Jazán: Bendito eres tú, Eterno, nuestro Creador, porque nos has santificado por el mandamiento
del ofertorio.

Congregación: Reconocemos que todo es tuyo, que en ti somos y por ti vivimos, y de lo enviado
por ti te ofrecemos nuestras dádivas de amor.

Jazán: A ti, oh Poderoso de Israel, honramos ahora con nuestros diezmos y ofrendas voluntarias.

Congregación: Reconocemos que tú, oh Adonai, nos has bendecido esta semana y nos has dado
el poder para hacer las riquezas.

Jazán: Sean nuestros diezmos y ofrendas aceptables delante de ti, porque al mirar nuestros
corazones, veas en ellos gratitud, devoción y temor reverente.

Congregación: Líbranos, oh Adonai, de tomar con nosotros lo que es tuyo. Líbranos de la


tentación de la avaricia. Líbranos del amor al dinero. Líbranos de retener más de lo que es
permitido. Líbranos de robarte la gloria y la honra que solo a ti pertenecen.

Jazán: ¡Venga ahora, oh Poderoso de Israel, venga ahora! Te rogamos que sobre todo tu pueblo
congregado aquí, para ofrecerte este sacrificio espiritual, venga ahora sobre nosotros tú soplo de
vida, tu soplo de bendición y prosperidad para nosotros y para nuestros hijos, hasta la cuarta
generación según has dicho en tú Torá, amén veamén.
Se procede a ofrendar, y después de haber ofrendado a HaShem se dice lo siguiente:

Jazán: Bendito eres tú, oh Adonai, Creador del Universo, que nos has permitido el honor de
cumplir el mandamiento del ofertorio.

Congregación: Haz con nosotros, oh Adonai, y con nuestros hijos, como hiciste con Abraham,
Itzjak y Iaakob, a los cuales alcanzo tu mano después de haberte honrado con sus diezmos y
ofrendas.

Jazán: Sea aceptado el ruego de tu pueblo, oh Adonai, nuestro Proveedor, y vean todas las
naciones que tu pueblo es bendecido y prosperado por tu mano.

Congregación: Que así sea, oh Adonai, que así sea por siempre y para siempre.

Jazán: Por los méritos de tu hijo amado, Ieshúa HaMashíaj Mélej Israel, amén veamén.
Hatikvá
Himno de Israel

Kol od balebab penimá


Néfesh iehudí homiá
Ulfaate Mizraj kadimá
Ain leTzión tzofiá

Od lo abdá tikvatenu
Hatikvá bat shnot alpaím
Lihiot am jofshi b'artzenu
Éretz Tzión v'Ierushaláim

Mientras en lo profundo del corazón


Palpite un alma judía
Y dirigiéndose al Oriente
Un ojo aviste a Sión.
Nuestra esperanza no estará perdida,
La esperanza de dos mil años,
De ser un pueblo libre en nuestra tierra
La tierra de Sión y Jerusalén

También podría gustarte