1700 La Gran Guerra Del Norte
1700 La Gran Guerra Del Norte
1700 La Gran Guerra Del Norte
DEL NORTE
G RADO EN REL AC I ONES I NTERNAC I ONAL ES
U N I V E R S I DA D R E Y J UA N C A R L O S
ANTECEDENTES
En el año 1697, accede al trono sueco el joven Carlos XII,
trono de un imperio que chocaba con los intereses de
Polonia, Rusia y Dinamarca.
En el plano internacional, Suecia se encuentra aislada tras
declararse neutral en la Guerra de los Nueve Años, la cual
tenía el fin de frenar la expansión francesa. En el plano
nacional, además, está sumida en una gran hambruna.
Dinamarca quería ajustar cuentas con
Suecia por la pérdida de la provincia
de Escania, por lo que empezó a
buscar apoyos en Europa, acercándose
a Pedro I de Rusia, que tenía la
intención de recuperar las tierras del
Báltico y que estaba obsesionado con
la salida al mar.
Por otra parte, hacia finales de 1699,
los nobles livones capitaneados por
Johann Patkul conspiraban con Polonia
para entrar en esta coalición de Rusia
y Dinamarca.
BANDO ANTISUECIA
CON ALIANZAS
DESARROLLO DEL CONFLICTO
La Gran Guerra del Norte fue el resultado de rivalidades históricas en la que se
materializó el choque geopolítico de Suecia con Polonia, Rusia, Dinamarca y
Brandemburgo.
En febrero de 1700, el ejército sajón invade la Livonia sueca; en marzo, son los
daneses los que acceden a Gottorp y sitian Tønning. Carlos XII decide ocuparse
primero de Dinamarca ya que acaba de firmar el Tratado de La Haya con
Inglaterra y Holanda, principales potencias marítimas.
Gracias a este acuerdo, en junio de ese mismo año, una flota anglo-holandesa
con ayuda de la sueca supera a la marina danesa, que se refugia en Copenhague.
Simultáneamente, el ejército sueco-alemán avanza hacia Holstein.
Carlos XII invade la isla de Zealand, por lo que Federico
de Dinamarca firma la Paz de Tarvendal en agosto. Tras las
campañas de los meses anteriores, Suecia consigue sacar
de la guerra a Noruega y Dinamarca.
Meses más tarde, en octubre, Carlos decide encargarse
de Livonia, y desembarca su ejército en Pernau.
Igualmente, se ocupa de los rusos, que estaban asediando
Narva, y libera la ciudad en la batalla homónima, a pesar
de la enorme superioridad rusa.
A pesar de las victorias, Carlos XII se niega a firmar la paz
con Augusto II de Polonia, ya que piensa que eso
mantendría la paz pero por poco tiempo, por lo que
continúa con la guerra. B ATA L L A D E N A RVA
En el año 1700 tiene lugar una guerra civil en Polonia, en
la que es derrotada la familia Sapieha, contraria a Augusto,
por lo que Carlos pretende de lo que queda de esta
familia le ayude en el conflicto.
En enero de 1702, Carlos XII de Suecia invade la
Mancomunidad polaco-lituana y vence en Kliszow,
consiguiendo que Estanislao Leszczynski sea
proclamado rey en 1705.
En el mismo año de 1702, Pedro I de Rusia toma
Nöteborg. Mientras tanto, Carlos se dedica a
expulsar rusos de Polonia-Lituania.
Cinco años más tarde, tras una serie de batallas y
eventos con el ejército sueco, Rusia ofrece la paz a
Suecia. Carlos intenta invadir Rusia, pero se ve
obligado a desplazarse hacia el sur de Ucrania.
NÖTEBORG
En esta etapa de la guerra tiene lugar la batalla de
Poltava, decisiva para el futuro del Báltico y San
Petersburgo. En este enfrentamiento, quien sale
derrotado es el ejército sueco, que se rinde en
Perevdochna.
Tras numerosas batallas y altercados, Carlos queda atrapado en Turquía
por una plaga desde 1709 hasta 1714, acontecimiento que Federico de
Dinamarca y Augusto de Polonia aprovechan para retomar sus puestos en
la guerra.
Dinamarca declara la guerra en octubre de 1709. Mientras tanto, las
potencias marítimas del bando sueco están ocupadas con la Guerra de
Sucesión Española, por lo que el ejército danés desembarca sin ningún tipo
de oposición en Escania.
En la batalla de Helsinborg, en marzo de 1710, Suecia vence a los daneses.
A comienzos de ese mismo año, Augusto vuelve a Varsovia. Para desgracia
sueca, caen en manos rusas Riga, Pernau y Reval.
En septiembre de 1713, también se hacen con Stettin, que los rusos usan
para tentar a Prusia con la entrada a la guerra en el bando aliado.
Entre los años 1712 y 1714, Pedro de Rusia se había
hecho con Finlandia.
Carlos sabía que no podría obtener una victoria
total, pero las concesiones que propone a sus
enemigos no les son suficientes. Suecia lanza una
ofensiva diplomática con el fin de dividir a los
enemigos.
En 1715, Prusia y Hannover se unen al conflicto, algo
que influye en la fallida invasión de noruega por
parte de los suecos en el año siguiente.
El 11 de diciembre de 1718, Carlos XII de Suecia C O RT E J O F Ú N E B R E
muere de un disparo al frente de la vanguardia sueca DE CARLOS XII
en el avance hacia Oslo, dejando el trono vacío y sin
heredero, el cual será ocupado en 1720 por
Federico de Hesse.
En 1719, se firma la paz con Hannover y con Prusia; y, al año siguiente, con
Dinamarca, aunque forzada por Gran Bretaña.
Tras la batalla naval de Grengam cesan los ataques rusos en la costa sueca, pero
en 1721 se reanudan, provocando la rendición de Suecia.
El Tratado de Nystadt se firma en septiembre de 1721 y, mediante el mismo,
Suecia recupera Finlandia, renuncia a Ingria, Estonia y la Livonia sueca, y pierde el
istmo de Carelia en favor de los rusos.
Con Polonia se continúa la guerra hasta la renovación del Tratado de Oliva diez
años más tarde, en 1731.
El Tratado de Nystadt convierte a Rusia en la sustituta de Suecia, convirtiéndose
en la potencia hegemónica en el Báltico.
CONSECUENCIAS
El conflicto se había prolongado durante casi veinte años y había llevado a los
contendientes al agotamiento total, pero no fue hasta la muerte del monarca
sueco cuando se iniciaron las negociaciones de paz, que se prolongaron hasta
1721, el año del fin oficial de la guerra.
Posteriormente, y como reacción a las empresas militares de Carlos XII, se
implantaría en el país una nueva constitución, en la práctica republicana, con el
objeto de limitar el poder real al tiempo que se ponía fin a la hegemonía de
Suecia en el Báltico.
En lo sucesivo se vería abocada a convertirse en un peón más en el juego de
alianzas que sobre el tablero europeo disputaban las grandes potencias, entre las
cuales se contaría Rusia.
Tras (y durante) la guerra se dio una gran crisis demográfica, no
tanto por las muertes que la guerra causaba sino por la propagación
de infecciones, la incautación y destrucción de cosechas o la
suspensión de la actividad económica en el ámbito rural, a
consecuencia de la huida de la mano de obra y de las requisas de
animales de tiro y semillas de cultivo.
El fracaso del proyecto anti-ruso británico fue tanto una causa como
una consecuencia del éxito logrado por Pedro I.
A mediados del siglo XVIII ya estaba asentada la hegemonía rusa, por
otra parte debido a las alianzas matrimoniales con los germanos.
Pedro I planeaba modernizar Rusia y ser una potencia más grande,
sobre todo en el terreno occidental, pero no sería hasta la época de
Catalina la Grande cuando se materializarían sus proyectos
meridionales.
La victoria rusa, que trastocó la estabilidad política de la Europa
del este, hizo que cambiase todo el sistema de relaciones
internacionales del continente.