Perversa Obsesión

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CAMBIOS EN LA ATMÓSFERA- Capítulo 1.

He estado pasando por algo, 1855 días desde que termino la pandemia de abril
del 2017 y parece que toda la humanidad ha avanzado excepto yo, no eh visto a
mis amigos, paso días sin comer, días sin ver la luz del sol, todo el tiempo en mi
casa, de que sirve tener tanto dinero, una casa grande, varios autos, una piscina
enorme, sino tengo con quien compartirlo, como cuando pido comida hecha,
mayormente quiero que sea comida rápida, ya que odio comer solo, la soledad
y el aburrimiento son los mejores amigos del hombre, siempre y cuando sepas
como tratarlos, sino serán tus peores enemigos, como en mi caso.
Me desvelo viendo las estrellas por cualquiera de las ventanas que tiene mi casa,
me paseo por los lujosos jardines que tengo, nado por mi onda piscina, dime,
¿Qué haces cuando estas aburrido? Algunas personas salen de fiesta y se
divierten, pero no me gusta la gente, ¿Te compras un piano? Listo, me aburrió
al mes, tal vez ¿Una guitarra? ¿Un bajo? ¿Un violín? ¿Una batería? O así hasta
comprarte toda la tienda de música, hasta tener tu propio estudio de música en
tu gran casa, ¿Sino me gusta aprenderme canciones de tus artistas favoritos podría
hacer mis propias canciones? Listo, no me gustan, sinceramente ya no sé qué
hacer, encerrado en una enorme casa, pero yo solo la veo como 4 paredes.
A veces me pregunto ¿Qué me paso? Muchas marcas querían colaborar
conmigo y ahora ni mi madre me dirige la palabra, tenía planeado dirigir una
película y un programa de televisión, pero por la pandemia se tuvieron que
cancelar, me ubican como el “famoso fantasma” nadie me ha visto, ni saben nada
de mi desde el 2017, ¿Redes sociales? No tengo, al menos no activas, a veces me
gustaría conocer a alguien y compartir este aburrimiento conmigo, un chico con
el cual aburrirme con él pero también divertirme, que me ame como yo lo amaría
a él, que me demuestre cariño enfrente de los demás sin importar el que dirán,
que no se avergüence de tenerme, creo que si estuviera con otra persona este
sentimiento no existiría, me sentiría mucho mejor, me sentiría enamorado
aunque anteriormente dije que no me gustan las personas, antes salía de fiesta
todas los noches, de vez en cuando habían besos con otros chicos. 32 años, de
tez oscura, 1.75 cm, delgado, cabello rubio y lacio, y siento que nunca eh gustado
de alguien bien, solo siento atracción física, no eh estado en ninguna relación, no
eh encontrado a ningún chico que busque una relación o que sienta lo mismo
que yo por otros.
Tal vez debería cambiar mi forma pesimista de ser, acomodar mi cuarto, ordenar
mi casa, ver la luz del sol, llamarles a mis amigos y tal vez salir a una fiesta, me
propongo a que el aburrimiento tenga un nuevo amigo ahora, rápidamente me
metí a bañar sin importarme el agua helada, me puse mi mejor ropa y le marque
a mi mejor amigo Ethan, rápidamente contesto.
- Dios mío, Liam ¿Eres tú? – preguntó Ethan.
- Si así es, después de 5 largos años decidí salir de mi cuarto ¿Quieres ir a comer
algo con Nicole? – preguntó emocionado Liam - Si, ya le digo - dijo Ethan.
5 años sin ver a mis mejores amigos ¿Será que me extrañaron? ¿Será que
cambiaron? ¿Será que yo cambie para mal? ¿O para bien? ¿Engorde? ¿Baje
mucho de peso? No sé, solo sé que me debería de tranquilizar, ellos no me van
a juzgar, son mis mejores amigos de la vida. Dos horas después estábamos juntos,
decidimos ir a una cafetería, los tres pedimos un café y un pan, empezamos a
hablar de nuestras vidas.
- ¿Y qué tal? ¿Cómo les trato la vida estos cinco años? – Pregunto emocionada
Nicole.
- Bien, hice varios viajes y varias amistades alrededor del mundo ¿Y tú Liam? –
dijo Ethan
- La verdad mal, me aislé del mundo hasta hoy que decidí volver a mi normalidad,
a mi yo de antes – comento decepcionado Liam - ¿Y eso? - Creo que me daba
miedo seguir adelante y parecerle aburrido a la gente, después de todo lo que
paso en el mundo, pero creo que ya estoy listo para seguir adelante –
Las pláticas y risas siguieron con el cálido sol, platicas que no entendía, pero no
me importaba saber el contexto, entonces era tranquilo, mi mente estaba
despejada y yo sentía paz interior, hasta que llego el momento de pagar la cuenta,
les dije que yo invitaba y así fue, al pedir la cuenta llego el mesero. Alguien de tez
blanca, como de 1.70 cm, delgado, con pelo rizado, castaño oscuro corto para
una mujer, pero largo como para un hombre, al verlo sentí algo que no había
sentido, interés en alguien, la necesidad de que me viera como yo lo andaba
viendo, pero no me iba a enloquecer por alguien que vi hace 5 minutos, pero
sentía varias emociones y sentimientos a la vez que no pude comprender al
instante, antes de darme la cuenta escribió algo en una servilleta, y después me
dio la carta, al abrir la vi la servilleta, tenía un numero con una notita que decía
“llámame pronto”, solo vi cuando sonrió, y yo también le sonreí, me despedí de
mis amigos y cada uno fue a su casa, no le quise mandar mensaje todavía, me
espere un rato para no verme intenso.
Toda mi vida creía que nadie iba a llegar por su cuenta a mi vida, y me sentí bien
al ver que alguien llego sin pedírselo ni conocerlo, después de pensarlo tanto
decidí mandarle un “Hola”, ya era tarde y así que decidí dormir, pero al despertar
al día siguiente ya estaban sus “Buenos días” , ni siquiera sabía su nombre, pero
había algo adentro que no había sentido con nadie, me sentía incomodo, pero
no de la mala manera, paso el tiempo, llego la tarde, me dijo que si quería salir
con él a pasar la noche en un antro, dije que si aunque estaba inseguro de mi
afirmación y tenía miedo de lo que pasaría, estaba nervioso pero a la vez ansioso
de verlo.
Llego la noche y me puse mi mejor ropa, incluso mejor que la de ayer, me dijo
el lugar y la hora, era en el bar “CORSO” a las 8:00 p.m. Y a esa hora estuve.
Llegando lo vi, vi sus cejas pobladas y sus labios gruesos, sus pecas y sus rulos, fui
hacia donde estaba el, pero también venia hacia mí, eso pasaba a tiempo normal,
pero yo lo veía en cámara lenta, con música para bailar de fondo, risas de
personas que no me importaba por qué se reían, las luces moradas y azules
amputándonos a la cara, cuando nos topamos él dijo:
- Hola, mucho gusto, mi nombre es Charles – Me lo dijo con una sonrisa que
hizo que se le achicaran los ojos.
- Hola, mi nombre es Liam –
- ¿Quieres tomar algo? – Me pregunto.
- Si, tu pide, yo invito – Le dije.
Después de varios tragos anduvimos hablando de nosotros, conociéndonos,
tiene 29 años, es modelo de ropa, vive como a una hora de mi casa, trabaja los
fines de semana en esa cafetería en la que lo conocí, no estoy soñando, tengo mis
ojos abiertos, tuvimos una química enorme desde el inicio de la conversación,
con el sentía algo en el estómago, no eran nauseas, sino como algo lindo, eran
como varias mariposas volando en todo mi cuerpo al mismo tiempo.
¿ESTO ES AMOR? - Capítulo 2.
Siento que por primera vez me está empezando a gustar alguien, es extraño ¿Así
se siente amar? ¿Realmente lo estoy amando o solo me gusta su compañía? Es
como si sacudieran mi mundo, todo da vueltas, estoy tan confundido, pero se
siente tan bien que es indescriptible esta sensación, que ojalá dure para siempre.
Conforme la noche la avanzaba y los tragos iban en aumento me sentía atraído,
quería mirarlo a los ojos y decirle todo lo que provoco en mí, pero claramente
no podía ¿Qué iba a pensar de mí? Probablemente diría que estoy demente
acabamos de conocernos y tiene razón capaz y ni siquiera siente atracción por
mí, Seré solo un amigo más ¿Cierto?
Disfrute pasar tiempo con él, pero todos esos pensamientos comieron mi mente
poco a poco, tanto que perdí la noción del tiempo y cuando me di cuenta era
media noche entonces solo escuche cuando dijo que tenía que irse que ya era
tarde, en un intento de verlo un poco más le ofrecí llevarlo hasta su casa, pero se
negó. Se despidió diciendo ‘’deberíamos repetirlo’’ a lo que respondí que me
encantaría, en ese momento me invadió una felicidad el de verdad quiere volver
a verme.
Volví a casa sintiéndome bien al fin experimenté el amor, esta vez fue de verdad.
Con este sentimiento me acosté sobre mi cama y por lo general odio a la gente
que se mete en mis sueños, pero ¿A Charles? No, ni un poco, solo espero que
mire a ambos lados mientras cruza mi mente. A la mañana siguiente me desperté
algo tarde eran las 10:30 y al revisar el celular ahí estaba un mensaje suyo dando
los buenos días. Decidí llamarlo, quería escucharlo…
Liam: Hola, ¿Charles? disculpa a cabo de ver tu mensaje, la resaca me está
matando.
Charles: Te entiendo, estoy igual.
Liam: ¿Quieres ir a tomar un café? Dicen que es genial para aliviar la resaca.
Charles: Lo siento, no puedo tengo sesión de modelaje hoy, tal vez otro día con
gusto.
Liam: Claro, está bien entiendo, pues mucha suerte hoy, lo harás bien.
Charles: Gracias, lo necesitare, hoy me espera un largo día, hablamos luego tengo
que irme, cuídate.
Después de que Charles colgara me pregunte ¿Qué acabo de hacer? ¿Estuvo
bien llamarlo? ¿Y si fui muy intenso? Esta situación me ésta consumiendo,
necesito salir de aquí y despejar mi mente, pero a donde o con quien podre ir.
Maldición, sigo atrapado en estas cuatro paredes, solo quiero volver a sentirme
como me sentí la noche anterior, siento que lo necesito, pero ¿Por qué? Lo acabo
de conocer, tal vez solo necesite la forma en la que me hizo sentir, no creo
depender de el mucho ya que recién lo conozco.

Pensé que íbamos a poder salir seguido, pero siempre está ocupado con sus
sesiones de modelaje, solo quiero confirmar que ocurrió, la forma en la que me
hizo sentir no creo que suceda con cualquier persona, todo mi cuerpo se revolvió,
como si hubiera un terremoto de 9,6 dentro de mi ¿El provoco ese terremoto?
Llego el fin de semana y le pregunte ansioso si quería volver a salir, el acepto,
fuimos a una cantina llamada “Baldía”, llegue y ya estaba el, esperándome.
- Hola – Le dije - Hola, esta semana estuvo cansada – comento
- Yo solo sé que estoy aquí para ti, sé que estas cansado, pero ¿Quieres ir a bailar?
- Si, me encantaría para distraerme –
Ambos sonreímos y fuimos al centro de la pista a bailar, la música no nos
importó, ni el ritmo, parecía que ninguno de los dos sabía qué hacía, nos miramos
a los ojos, note que sus pupilas se dilataron y sé que los míos también lo hicieron,
me tomo de la mano y decidí a atreverme a darle un beso, sin que me importara
lo que dijeran los demás, fueron como 10 segundos, el tiempo se pasó lento, ojala
hubiera durado toda la vida, pero algo ocurrió, esa sensación la termino el, se
separó de mis labios y me dijo preocupado “no puedo hacerle esto a ella” y se
marchó, yo confundido intente seguirlo, pero no lo volví a encontrar por ningún
lugar, la única opción que vi fue escribirle un mensaje.
Liam: Oye ¿Qué paso?
Lo espere 30 minutos solo, cuando supe que ya no iba a regresar me fui a mi
casa, todo el camino mi mente me destrozo, todo fue mi culpa, no debí haber
hecho eso, solo no quiero que me deje, la pasamos bien cuando estamos juntos,
me gusta estar con él, siento que no quiere hablarme ¿Qué hice mal? ¿Me volverá
a hablar? Solo quiero saber cómo se siente, porque este sentimiento extraño por
él es real. En la madrugada de esa noche, recibió el último mensaje, lo vio hace
2 horas, no lo respondió, decidí mandarle otro.
Liam: Lo siento, enserio perdóname, solo quiero hacerte sentir bien.
Maldita sea y si no siente lo mismo que yo por otros chicos, no sé cómo
arreglarlo, me odio, odio como mi mente me carcome siempre que hay un
problema, otra vez siento un terremoto, pero de diferente manera de como lo
sentí la otra vez, esta sensación la odio, ojalá se acabe de una vez.

¿ME ESTOY ENAMORANDO? – Capítulo 3.


Creí que estábamos comenzando a tener algo, creí que solo éramos nosotros dos,
pero parece que ya existe una mujer en su vida, ella es el motivo de este
problema. No sé qué debo hacer. Ya no estoy seguro si el siente lo mismo que
yo siento por él.
Tal vez me estoy apoyando demasiado en el para volver a ser yo mismo
nuevamente y por eso me siento así. Pero es inevitable, en el poco tiempo que lo
conozco me hizo sentir feliz, seguro, amado, nunca me había sentido así con
nadie más.
Y ahora me siento como si todo eso no valiera nada, como si las salidas que
tuvimos solo eran una distracción. Ahora solo me queda esperarlo hasta que el
vuelva a hablarme. Quisiera que me llamara para hablar las cosas.
Aunque quisiera estar junto a él, no deseo presionarlo. Hace días no hablamos y
no responde mis mensajes. Cada instante que no está junto a mí se siente tan
solitario, desordenado, perdido, con demasiada incertidumbre. Un torbellino de
emociones desenfrenadas.
Hace mucho que perdí las ganas y la habilidad de llorar, pero ahora siento que
me está destrozando el corazón en mil pedazos, y me encuentro llorando, como
si no hubiera un mañana. Me pasaron tantas cosas en la mente y en la vida
durante estos años que siento que todo lo que no llore antes lo estoy liberando
ahora mismo.
Justo cuando menos lo espere, a la hora de la comida después de varios días,
envió un mensaje.
“Necesitamos hablar, ¿quieres qué salgamos a cenar?” es todo lo que decía. Le
dije que sí, me alisté antes de la hora acordada y salí antes de casa directo al
restaurante, tenía tantas dudas. Preferí quedarme esperando en mi carro y una
vez que el llegara entrar.
Una vez llegó la hora, él estaba delante del restaurante, salí rápido de mi vehículo
y me le acerqué, nos saludamos y entramos. Al sentarnos a la mesa lo primero
que hicimos fue ordenar una bebida, cuando el mesero se marchó el tomo la
iniciativa.
Se disculpo y dijo que no estuvo bien haber huido antes, se sentía un cobarde.
Le dije que no se preocupara y pensé en lo último que me había dicho ese día,
“ella”. ¿Quién era? ¿Debía preguntarle? Y si se enfadaba por preguntarle, ¿Qué
haría yo?

PENSAMIENTOS CONFLICTIVOS– Capítulo 4.


Paso una semana después de los acontecimientos del restaurante. Un día nuevo
empieza, una nueva oportunidad que la vida me da, a veces me pongo a pensar,
¿Algún día podré ser feliz?, todos son felices y ¿Yo no puedo?, me preocupa que
no pueda ser lo suficientemente valiente para decirle lo que siento, muchos me
dicen que en cuanto el amor a veces soy inseguro, acompañado de una
autoestima baja debido al largo tiempo que pase solo, cuando me aleje de todos
deje de preocuparme de lo que la personas pensaban sobre mí, y aprendí a
valorarme más a mí mismo, pero esto nuevo que siento me hecha una vez más
para atrás, no me importa que es lo que los demás piensen de mí, pero si me
importa lo que esa persona piense de mí. ¿Debería mandarle un mensaje?
– Hola, Charles, como ¿amaneciste el día de hoy?
– ¡Hola! Liam, tengo un poco de dolor en el cuello, pero todo bien.
– Oh, que mal, ¿dormiste mal?
– Si, ayer fui a una fiesta y llegué muy cansado a mi casa.
– Espero que el dolor pase pronto.
– Gracias, bueno te dejo, hoy tengo que darle una sorpresa a mi novia, es nuestro
aniversario.
– Ohh… Si está bien, bueno, no lo recordaba, ¿Quizás me enamore muy
rápido?, ¿Me estaré ilusionando?, quizás mis sentimientos no están claros aún,
pase mucho tiempo alejado del mundo que olvide un poco la importancia de ser
prudente, la atracción del momento, las hormonas alteradas, la ilusión del primer
amor, y el aislamiento de mis amigos, me han llevado a este camino, es un
sentimiento tan increíble, pero a la vez frustrante, sigo preguntándome, ¿Por qué
no puedo ser feliz?, ¿Acaso el mundo está en mi contra?, siento que me enamoro
de verdad y aparece ella, creo que debo de dejar de ilusionarme, creo que saldré
un rato a despejar la mente. *Suena el teléfono de Liam y le contesta*
– Hola Liam ¿Cómo estás? Hace días que no se nada de tu romance, ja, ja, ja –
dijo Nicole.
– Hola Nicole, estoy en un conflicto, sabes creo que deberíamos hablar, necesito
que me aconsejes sobre esta situación, ¿te parece si nos vemos en el café? –
pregunto Liam.
– Si está bien, nos vemos en 30 minutos, en el café que está a dos calles de tu
casa.
Así que tome una ducha, me aliste y salí de mi casa rumbo al café, me preguntó,
¿Es correcto este amor?, empiezo a pensar que esto ya no importa, si quiero estar
con él, y ya no importa lo que piensen de mí. *Liam llegó el café y se sentó junto
a una mesa con Nicole*
– Bueno, cuéntame, ¿Qué ha pasado con él? – pregunto Nicole.
– Estoy enamorado de él, pero no sé si sea correcto, él tiene novia y la verdad
no quisiera crear problemas, pero a la vez quisiera que fuéramos algo más –
contesto Liam.
– Bueno… deberías de dejar de ilusionarte, pero coméntale eso que sientes,
quizás no sea tan grave, quizás te entienda y decida qué pasará entre ustedes –
dijo Nicole.
– Tienes razón, aparte estuve pensado, es mejor arriesgarse y dejar las
inseguridades de momento, a nunca intentarlo.
– Exactamente, bueno así que está decidido, solo no te des un paso hacia atrás.
– Con miedo, pero seguro.
Agarré mis cosas y me fui a mi casa, me recosté un rato a pensar como se lo diré,
pasaron las horas y llego la noche, pensé en llamarle, pero me arrepentí, hasta
que él me mandó un mensaje, me contó cómo fue su día, y aproveché el
momento de pedirle que fuéramos a hablar a algún lugar, le dije que tenía que
comentarle algo importante y que no podía esperar, el acepto y me cobijé con
mis sabanas para descansar del día de hoy.
¿QUIERO SENTIR ESO? – Capítulo 5.
La pregunta con la que me levante fue ¿Por qué le dije eso?, me he bañado y por
décima vez arrepentido de haberle dicho a Charles que saliéramos a comer,
definitivamente como siempre, primero hable y luego pensé. No puedo decirle
lo que siento, él no es gay y tiene novia, las probabilidades son 1 de 100 pero, el
sentimiento me carcome y hoy definitivamente tengo la oportunidad de decirle,
más no se si tengo el valor.
Charles y yo quedamos de acuerdo de vernos en un restaurante por su trabajo.
La cabeza me da vueltas, tengo casi cuatro guiones de declaraciones y todas son
patéticas.
Cuando llegué al restaurante él ya estaba ahí, ¿Por qué tan puntual? No me dio
tiempo de pensar unos minutos más.
-Hola- Me dice charles mientras tomo asiento en la mesa, quedando enfrente de
él.
-Hola - Me limito a decir, es patético, yo lo cite y no puedo decir nada más que
eso, muy bien Liam enserio.
-Debo decir que me sorprendió el que me invitaras a comer de manera
espontánea, aunque mencionaste que debías decirme algo importante-
-Ah sí, pero primero ordenemos- Excelente Liam, retrasando el tema, al menos
debo ir soltándolo de manera sutil.
Los dos ordenamos, platicamos un poco de trabajo. Minutos después le llega un
mensaje.
-permíteme- Me comenta.
Lo veo fijamente, observo cada rasgo de su cara, me gusta, estoy enamorado de
Charles eso no puedo negarlo, pienso en las posibilidades de todo lo que puede
pasar si le digo, me consumen los nervios y simplemente de mi sale lo peor.
-soy gay y me gustas, enserio me gustas Charles- dios mío, ¿Enserio lo solté así?,
que fue eso Liam ¿QUÉ FUE ESO?
No hay definición de las ganas que quería que la tierra de la nada se abriera y me
tragara, se suponía que iba a ser disimulado. En la cara de Charles se puede ver
claramente la sorpresa ante mis palabras.
No hubo respuesta inmediata por parte de él, lo cual era de esperarse, por lo que
solo hubo un largo silencio incomodo que decidí interrumpir.
-Discúlpame si te tomé de sorpresa enserio, no era mi intención incomodarte, de
hecho, debatí un rato el decirte o no, solo que no pude quedarme y guardarme
el sentimiento, porque me gustas mucho Charles.
Otro silencio incomodo. No había palabras por parte de Charles, sus ojos me
miraban fijamente como si estuviera procesando cada palabra que dije.
-Supongo que tu silencio me da entender algo, será mejor que me retire-
Que imbécil fui, ¿una probabilidad de 100? Enserio, era de suponerse, él no es
gay, el no siente lo que yo por él.
-Espera Liam- Dice Charles en casi un grito parándose para alcanzarme ya que
yo había avanzado casi a la salida del restaurante. - Siéntate de nuevo, hablemos
por favor-
- ¿Está sintiendo lástima? ¿Es eso? -
Tomo asiento al igual que él. Y un silencio incomodo por tercera vez, hasta que
por fin decide hablar.
-Yo… también siento lo que tu sientes, esa atracción por los hombres, esa
atracción por ti-
¿Qué?, unos minutos acá las probabilidades se elevaron, ¿Enserio siente lo
mismo?
-Mi silencio fue de miedo Liam, tu pudiste expresar tus sentimientos de una
manera tan libre, yo nunca había admitido mi sexualidad en voz alta hasta ahorita-
Cada palabra más irreal, pero y ¿su novia?
- ¿Y tu novia? Porque si sabes lo que sientes, ¿Por qué sales con ella? No tiene
sentido-
-Ella me gusto, pero poco a poco descubrí… Esto que aún tengo miedo de
aceptar, por ello sigo con ella, no quiero que los que me rodean lo sepan, no aún.
-Lo que significa que tu no saldrás del closet aún cierto? - Le digo
-Espero entiendas que no es tan fácil para mí, como lo es para ti-
¿Mentirle a su novia? Suena irracional hacer eso, pero el siente lo mismo que yo
y eso ya es mucho que pedir, no importa ser “otro” o incluso el “amante”. Por
ahora seguiré con esto si a él le conviene.

¿MIEDO A QUÉ? – Capítulo 6.


A pesar de todo lo que ocurrió ese día en el restaurante sigo pensando que es lo
que realmente quiere, ¿Será que me está mintiendo?, porque no le quiere decir
a sus amigos, algo me decía que estaba mintiendo. A pesar de todo lo que pasaba
por mi cabeza, nunca daba con una respuesta razonable, y me preguntaba,
¿Algún día se va armar de valor para decir lo que realmente le gusta? Y dejar de
mentirle a su novia.
Cada día que pasaba no daba una explicación como lógica a lo que estaba
pasando entre mí y el, yo cuando le dije sobre mis sentimientos, tal vez esperaba
un “yo también siento lo mismo” pero fue todo lo contrario, tiene miedo a salir
y decir como es el realidad, yo siempre quise sentir su amor, y no a escondidas,
hasta que un día paso lo que tenía que pasar, me llega un mensaje a las 8 de la
noche de charles para salir a comprar ropa, nos pusimos de acuerdo cuando y a
qué hora nos veríamos, todo iba bien hasta el momento que llegue al lugar de la
cita…
Él se encontraba con su amiga Perla, una chica delgada, de tez morena, con ropa
que la hacía ver hermosa… Pero no todo fue de color rosa, al momento de llegar
se notaba un poco tenso Charles, estaba nervioso, su comportamiento era
diferente al cual siempre conocía, le pregunte que sí que tenía a lo cual respondió,
que su amiga por poco se enteraba por un mensaje que leyó del celular de él,
esto cada vez me iba confundiendo más, ¿porque no quiere que se entere la
amiga si era su amiga de confianza no?, lo que me ponía a sobre pensar todo, y
yo estaba cansándome poco a poco... Siempre pensaba algo diferente mi mente
no dejaba de sobre pensar todo lo que ocurría entre charles y yo, parecía que
todo se estaba acabando, ya no quería seguir con el misma “relación a
escondidas”, terminó nuestra salida por lo cual la primera que se fue, fue la amiga
de Charles, Perla, y nada más nos quedamos él y yo, al principio nos quedamos
en un silencio incómodo entre Charles y yo, después de un rato fue que él le
dirigió la palabra y me dijo que si como estaba, no me había podido preguntar
por el tema de la amiga, y fue donde me enoje y le pregunte que sí que tan difícil
era decir, “hola, como estas Liam”, tan solo con eso tuve más que suficiente para
salir de ahí enojado, frustrado, pasa el tiempo y llega la noche…
Y oh que emoción un mensaje de charles, lo abrí por la desesperación de que
excusa iba a usar ahora, y el mensaje era todo lo contrario, el escribió un mensaje
pidiendo perdón por lo que había pasado en ese lugar, tal vez no era el momento
adecuado para él, por su amiga, a lo cual me puso a pensar que por que lo decía,
si solo era una amiga, ¿no?, no le respondí nada, y el volvió a enviar un mensaje
diciendo que si podíamos salir lo cual por mi enojo le quería decir que no, pero
mi amor hacia él decía que si, en mal forma y arrogante, le escribí un “okey, está
bien”, llega el día que salimos y lo vuelve hacer, llega con su “amiga” y ese día fue
en el que explote, y a los 10 minutos de a haber llegado al lugar me fui de ahí
con el pretexto de que me sentía mal, pasa la tarde... Y ni un mensaje de Charles,
lo cual me hacía sentir mal porque ni daba indicio como de preocupación... Llega
la madrugada una notificación de mensaje, y era charles y por la preocupación
que tenía yo por él, conteste rápido y le pregunte que sí que le había pasado a lo
cual el me contesto que estaba bien, que se le había hecho tarde.
Se queda dormido y al día siguiente como siempre, pidiendo perdón por no
responder, a mí esto me estaba cansando, por lo cual lo volví a citar en el
restaurante donde le había dicho sobre todo lo que sentía por él, llega el día y
con ella la hora que lo había citado, y sorpresa me dejó plantado en el restaurante
sin ni una respuesta, estuve 4 malditas horas sentado esperando a una persona
que jamás llegó, me fui del restaurante con un enojo y una tristeza enorme, era
una sentimiento que ni yo podría describir, y al llegar a mi casa solo quería dormir
y así fue, me encerré en el cuarto con los ojos hinchados de tanto haber llorar,
tanto así que me quedé dormido entre mis llantos y lágrimas, desperté hasta el
día siguiente con un mensaje nuevamente de Charles diciendo que si podíamos
hablar, a lo cual le respondí que sí, y ese día no iba tan enojado que al momento
de llegar al lugar de la cita, nos pusimos a pelear de todo, del por qué mentía, no
pareciera que le importara mis sentimientos, y por un comentario fue que todo
se fue tornando más incómodo, le dije que sí porque no salía de una buena vez
del closet y decía que realmente sentía una atracción por los hombres, que sí que
tanto pensaba que dijeran los demás o la opinión de otros que tanto le importaba,
desde ese día le dije que si no salía del closet y decía lo que realmente quería, me
iba a perder…
Nos dejamos de hablar por 3 días, al tercero, estaba encerrado en mi cuarto con
un ánimo no tan bueno, cuando veo el celular y hay una notificación de Gmail,
el día anterior la cual no había visto, y al parecer Charles había vuelto a activar
sus redes sociales, y con esa venia una foto con su supuesta “amiga” y ahí apareció
el perfil de la “amiga” entre y ella tenía una foto donde decía “feliz un año y 3
meses “de ahí fue donde caí en un llanto y lágrimas casi hasta quedar vacío.
¿¿Porque me mintió??, se ve tan feliz sin mí... Como si no me necesitará.

CELOS- Capítulo 7.
Estaba molesto, no quería ni verlo en pintura, lo ignore por una semana entera,
pero también este sentimiento de ira estaba mezclado con tristeza y decepción,
sé que tarde temprano iba a pasar esto ¿Qué esperaba? Ni siquiera ha salido del
closet, me nombre “rompe hogares” yo solo, todo lo que buscaba en una relación
él no me lo dio, nunca lo hizo y aun así estoy celoso, pero no de él, sino de ella,
ella si puede decir “Charles es mi novio” o “Felices 1 año y 3 meses” con una
publicación en las redes, esto me está sacando de mí marco, ella esta arruinando
lo nuestro, decidí que lo iba a ir a ver sin avisar, eran las 6 p.m. Y yo ya estaba en
su casa, solo le escribí un “Ábreme” ignorando todos mensajes, excusas, sus
“disculpas” anteriores, a los 5 minutos él estaba en la puerta y me abrió, se intentó
disculpar por última vez, pero lo interrumpí.
-No me necesitas, lo sé, te ves tan feliz sin mi- Le comenté molesto.
-No Liam, solo que ella es mi novia y tú y yo pues no somos na…-
- ¿Qué? ¿No somos nada? ¿Solo por qué no tienes el valor de decirle al mundo
que eres gay? Mira, ella me está fastidiando, Perla y tú no están igual de juntos
que nosotros, yo te amo más de lo que ella lo hará, tienes que entenderlo- Le
interrumpí molesto.
-Creo que estas siendo egoísta, no estás pensando en mí y en mi miedo a que
todo el mundo se entere- Me respondió molesto.
- ¿Qué se enteren de tu secreto? No me llames egoísta, solo odio compartir lo
que sé que es mío, esto que estás haciendo no está funcionando, eres mío-
- ¿Sabes qué? Estas siendo muy celoso y posesivo, vete de mi casa ya –
Cuando me dijo eso, mi cara de enojo se convirtió en una de asombro, no negué
su decisión y me fui, ese asombro se convirtió en preocupación, al llegar a mi
casa, vi que me bloqueo de WhatsApp, no sé qué estaba pensando, no quiero
que me deje, solo quiero que cambie, no quiero ser reemplazable, no no no, ¿Y
si se va por siempre? ¿Qué hago? Tengo que hacer que tome una decisión, ella
o yo, Pero ¿Cómo? Después me acorde que en mi caja fuerte tengo un haz bajo
la manga, un arma, lo puedo forzar a tomar una decisión rápido, al día siguiente
vi que subió una historia a en sus redes sociales, donde fue al cine con Perla, el
plan perfecto, cuando salgan del cine, los acorralo y los amenazo, ella estará
muerta si o si, y por fin estaremos juntos, sin obstáculos, solo él y yo, los espere
afuera del cine por 2 horas y llego el momento.
- ¡CHARLES! Llego tu maldita hora de tomar una decisión - Le grite furioso.
- ¿Quién es el? - Pregunto Perla.
- ¿No lo sabes aun? Tu novio es gay y lo sé porque mientras andaba contigo,
andaba conmigo-
-Perla, eso no es cierto- Le dijo Charles.
Saque el arma, y note como ambos se asustaron.
-Mira, escógeme, ella muere, nosotros lo celebramos y somos felices, que te
parece-
Solo vi su reacción de quererla proteger y eso hizo que mi rabia aumentara aún
más.
- ¡MIRA MALDITA SEA, SI TE VAS CON ELLA LOS MATO A AMBOS!
- Le grite furioso
-Solo quería ser tu número 1, no al que escondieras Charles, al que presumas en
tus redes, el que no te avergüence- Dije con lágrimas en los ojos.
De pronto me entro la idea ¿En verdad quiero esto? Lo estoy forzando a estar
conmigo, no quiero estar con alguien que no le apetece estar conmigo por gusto
¿Charles es quien esperara que fuera? Yo le daba todo a él y el solo lo intentaba,
bajé el arma y le dije:
-Púdrete Charles-
Me fui, sin saber que estaba pasando a mí alrededor, sin importarme que iba a
hacer Charles al respecto.

AMOR POSESIVO- Capítulo 8.


Esto no me puede estar pasando, el debía de ser mío si o si, pero ... porque la
estaba prefiriendo a ella, no ve que yo le puedo dar más que nadie, más que
cualquier persona, más que ELLA. La rabia me consumía por dentro, lo único
que necesitaba era que él se diera cuenta lo que quiere y necesita lo cual soy yo.
No importa si me amaba de poco en poco, si me lastimaba yo le perdonaría todo,
yo iría del infierno al sol solo por él.
Sí, puedes empezar de nuevo.
Puedes correr libremente.
Puedes encontrar otros peces en el mar.
Puedes fingir que eso estaba destinado a ser.
Pero no puedes estar lejos de mí.
Estoy cayéndome a pedazos por tu ausencia y lo peor es que no quiero verte
nunca. Estoy hundiéndome en el hábito de amarte. En ese momento tuve una
idea para así poder estar juntos sin que nadie nos lo impidiera. Tomé mi celular
y rápidamente encontré el número de quien deseaba contactar. Solo vasto dos
tonos para que pudiera contestarme.
-Hola necesito que esta noche no se presente, si gracias. Y así comenzaba mi
plan, nada podrá detenerme.

No podía creer lo que acababa de pasar jamás pensé que Liam fuera capaz de
tanto, y creo que era mejor irme a casa además era lo más prudente. No había
podido dejar de pensar en cómo se pudo sentir Liam, sentía ¿Lastima por él?
pero el debía de esperar, no estaba seguro de mi sexualidad, pero sabía que si se
lo contaba a alguien más se reirían e incluso podría afectarme hasta en mi carrera.
Deje a perla en casa y me dedique a irme a la mía, lo único que quería era
descansar y poder meditar bien todo lo que siento.
El trayecto no fue muy largo en unos minutos ya estaba buscando las llaves de mi
casa cuando pude notar que la cerradura está abierta y eso me desconcertó ya
que yo recuerdo haber cerrado. Entre lo más sigiloso posible y vi una sombra
enfrente de las ventanas, al estar en contraste de la luz no pude distinguirlo hasta
que escuché su voz.
-Hola Charles, no crees que la noche es maravillosa.
- ¿Qué haces aquí?, pensé que ya no querrías saber nada de mi- Dios estaba
seguro que esto no terminaría para nada bien.
-Sabes lo he pensado y creo que te mereces alguien mejor, alguien como yo, ¿No
lo crees? -
-No te quiero cerca, estuviste enfrente de mí con un arma y me amenazaste con
matarme, ¿Crees que me gustaría estar con alguien como tú? -
-Lo que tú no sabes es que te di todo lo que tenía y tú lo tiraste a la basura, porque
lo que no entiendes Charles.
- Cogería una granada por ti Lanza mi mano en una cuchilla para ti.
- Saltaría frente a un tren por ti. Sabes que haría cualquier cosa por ti, por qué si
fueses mío, mi alma al diablo seguro vendería, pasaría por todo este dolor.
- Sí, moriría por ti, y yo solo pido tu amor a cambio, ámame como yo te amo.
Dios este chico estaba loco, el empezó a tirar todo lo que había a su alrededor
mientras gritaba, estaba desesperado se escuchaba con sus gritos hasta que se
acercó a mí, no podía moverme estaba en shock cuando sentí un fuerte dolor en
la cabeza y luego caí.
Por otra parte, los vecinos de charles habían oído demasiado ruido de parte del
joven y al ser molesto llamaron a la policía. Pero en eso uno se fijó como un
chico vestido de negro se llevaba al joven Charles y lo metía en un auto con más
razón llamaron a la policía para que llegarán a tiempo pero lamentablemente
llegaron tarde él ya se había ido llevándose con él a Charles.

MARIONETA- Capítulo 9.
¿Qué me está pasando? ¿Realmente soy así? Esos pensamientos llegaron
momentos después de haber secuestrado a Charles, debo dejarlo ir, pero es que
no puedo soltarlo, este chico es como un arma, es peligroso para mí, necesito
dejarlo ir, pero no puedo.
Lo había dejado en mi sótano, decidí ir a verlo, él estaba asustado, eran las 8
p.m. La misma hora de nuestra primera cita, diferentes situaciones, ya había
probado como era en el amor, una mala experiencia, me hizo tanto daño en tan
poco tiempo, no lo podía creer, él ni siquiera podía verme directo a los ojos,
después de verlo fijamente por 5 minutos decidí hablar.
-Mira, me hiciste daño, tuve que llegar a estos extremos, me siento un monstruo,
solo quiero que seas feliz, pero esa necesidad me está haciendo daño a mí, al
saber que no me necesitas para serlo - Le dije mientras me acercaba a él y lo
desataba.
Sabía que tenía que dejarlo de ir, esta era mi oportunidad, cuando lo desate y le
dije “vete” sentí su cara de alivio.
-No importa todo lo que me hayas hecho sentir, te veo como un 10,
lamentablemente no te quiero volver a ver en mi vida, mantente alejado de mí,
por favor, VETE- Le dije.
Charles sin palabras, se fue y me dejo en una desolación enorme, no sabía que
hacer, sé que no debería, pero daría lo que fuera para arreglar las cosas con él,
como si fuera una marioneta, para que el hiciera lo que fuera conmigo, lo que le
apetezca.
Quiero hablar con él, realmente lo quiero llamar... Quiero ir a su casa y tocar esa
puerta, después, subiré a mi carro y lo iré a ver, llegar a su casa y estacionarme,
luego le llevaré a mi casa y saldremos a pasear por el parque, y buscaremos el
amanecer, Arreglar las cosas ¿Realmente eso es lo que quiero? Necesito aire
fresco, quiero su compañía, la necesito, sin el a mi lado siento que la vida no tiene
sentido, es demasiado complejo para mí ¿Cuál es su deseo? Puedo cumplirlo
¿Es mi voluntad o la suya? Realmente es suya, la del maldito Charles... Me
convertí en su marioneta poco a poco, el me controla.
Después de tantos pensamientos de como arreglar las cosas, me entro una voz,
como si mi conciencia me estuviera ayudando a despejar mi mente de esas ideas,
estoy tan perdido e intento volver a él, pero para mí, él está encerrado en algo
que odio ver, mejor me relajare, por un momento me detendré e intentaré
respirar, estoy a punto de gritar, DEJAME ESCAPAR.
Supongo que todo paso por algo, tenía razón, espere mucho de él, voy a cortar
los hilos que me hacían ser su marioneta, en algún punto de esta historia tendría
que entrar en razón.
¿ASÍ ES COMO TE QUIERO OLVIDAR? - Capítulo
10.
Pasaron semanas desde que me di cuenta que no lo necesito, desde ese día no
paro de ir a fiestas la sensación que me da es increíble no sé cómo no descubrí
esto antes, me siento genial, creo que encontré la manera de olvidarme de él,
muy pronto solo será un mal recuerdo, empezare a ir a todas las fiestas y me voy
a divertir como no tienes una maldita idea, pero la verdad solo voy a tomar hasta
poder soltarte, hasta olvidarme de lo nuestro, de todas esas lágrimas, enojos,
celos, pensamientos, sobre todo eso, esos pensamientos que no me dejaron
dormir varias noches. Me sentía en las nubes, como atrapado en un sueño, perdía
el conocimiento, la noción del tiempo, si esa es la única forma de olvidarlo, lo
hare no puedo caer tan bajo y deprimirme por él.
Bueno hoy es noche de divertirse, como todas las anteriores, solo toca esperar
para que empiece la diversión esta sensación me causa una felicidad de manera
inexplicable, el alcohol, las risas, la música hasta el tope, llego la noche y salí al
antro, siempre que llego parezco ser el rey de la fiesta, soy el que inicia con la
diversión, empezaba con cualquier tipo de bebida, no me importaba que fuera,
las luces amarillas que me apuntaban a la cara, empezaba a perder la noción del
tiempo y de la realidad, me mareaba pero esta sensación era divertida, pero
quería llevarla al límite, me salí del antro, con trabajo y podía caminar, la música
me retumbaba en los oídos, vi a unos tipos en un callejón, se estaban drogando,
creo que era justo lo que necesito para levarlo al máximo, llegue y les pedí un
poco de heroína, me preguntaron si era mi primera vez, les dije que sí, ellos me
enseñaron a inyectármela, minutos después de haberlo hecho ellos se fueron con
risas, me sentía increíble, relajado, sin preocupaciones, sin la imagen de Charles
en mi mente, me sentía en el cielo, creo que esta sensación es similar a ser un
Dios, pero seguía habiendo algo, ira, no importa que tanto tomara, me divirtiera
y en este caso me drogara, seguía teniendo una pizca de ira en mi interior aunque
me sintiera completamente relajado, en un impulso de ira decidí marcarle a
Charles, para decirle sus cosas en la cara. En su momento no me di cuenta, pero
en vez me marcarle a Charles le marque a Ethan, el teléfono sonó y el me
contesto, solo le deje decir “Bueno”
- Te odio Charles, fuiste lo peor que me ha pasado, ¿sabes? YA VEO LA
LUZ, para olvidarte ando saliendo a fiestas, probando cada sustancia que me
encuentre, me siento tan bien sin ti, gracias a ti me siento mejor que nunca
ahora–
No deje que hablara Ethan, momentos después me empecé a sentir muy mal,
momentos después vomite, eran las 4 a.m. Después de vomitar me dormí, no
sentía mi cuerpo, no podía moverme, solo sentía un vacío.
En la mañana sentí que dos personas me estaban cargando ¿Quiénes eran? ¿A
dónde me llevaban? ¿Me van a matar o algo así? Me subieron a una camioneta.
- No me gusta que estes así Liam-
Esa voz se me hacía conocida, ¿Será Charles?
- Despierta, por favor Liam-
Otra voz, igual se me hacía familiar, usé todas mis fuerzas para abrir los ojos y lo
primero que vi fue a Nicole intentando despertarme y a Ethan manejando un
carro.
- Hasta que despiertas, ya nos habías preocupado, ¿Estás bien? – pregunto
Nicole.
Por más que quisiera no pude responderle, mi cuerpo no reaccionaba.
- Escuche lo que le tenías planeado decir a Charles y sé que así no es como
quieres olvidarlo, no es sano para ti, ni para nadie, nosotros te queremos y
por eso decidimos llevarte a un psicólogo que te ayude a superar toda esta
situación – me dijo Ethan.
- Estos son mis amigos de la vida y yo dejé de tomarlos en cuenta la mayor
parte del tiempo gracias a Charles, lo puse en un pedestal cuando no se lo
merecía, tal vez esas palabras que me dijo Ethan me hicieron realmente ver
la luz.
- Lo más probable es que Charles este tranquilo con su novia y yo aquí
sintiéndome débil sin poder moverme, pero no sé qué es más difícil, dejar ir
la situación o estar de acuerdo con ello.

PERSONALIDAD- Capítulo 11.


Después de que Ethan y Nicole me dejaran en mi casa, me encerré en mi
habitación, sin esperar nada tenía muchas dudas en mi cabeza, estaba
confundido, triste y sobre todo drogado, el peso que cargan mis hombros es
demasiado para mí, solamente deje que la noche empezara, la solicitud de ir al
Psicólogo, lo pensé unos 30 minutos antes de decidir que no iría, mi mente era
confusa y empecé a escuchar diferentes voces con diferentes ideas ¿La droga tal
vez?, no dejaba de cuestionarme mi sanidad mental, y con ello vinieron las voces.
- ¿Llorar por alguien? Eres una nena que no resiste nada, escoria de la escoria,
solo muérete, ¿Quién necesita de ti?, la gente se olvidó de ti hace mucho tiempo,
¿Tus amigos? hipócritas, o eres nada ni vales la pena, por eso Charles no avanzo
contigo, eres un loco obsesivo, nadie quiere a esas personas, Solo muérete tienes
razón, soy una basura de persona, encerré a Charles e incluso lo privé de libertad,
soy lo peor de lo peor, mis amigos seguramente solo me tienen lástima y en esta
habitación 4x4 solo veo mi penumbra y sombra, las paredes blancas y la lluvia
que cae me ponen a pensar sobre lo que hice, el humano nace sin nada y se va
sin nada, lo único que conservamos es la experiencia y el sentimiento, pero, ¿Si
no puedo experimentar ni sentir que razón tiene seguir viviendo?, las voces me
hablaron de nuevo.
-Si tus amigos y nadie más te necesitan, ¿Para qué sigues aquí?, tratando de ser
normal y tratando de aparentar cosas que no eres, la sociedad no te necesita,
comprende, solo eres un tarado que trato de romper lo lógico, desde el momento
en que saliste del closet y te declaraste gay, perdiste en la vida-
(Suspire) - Puede ser, la vida es dura, da vueltas en muchos sentidos, no puedo
ser feliz, y estoy harto de este hecho, sigo viviendo en este bucle de emociones
que me carcomen por dentro, ¿Por qué vivir?, tantas cosas que darme y me diste
infelicidad, no sé qué pensar, mi mente seguía dando vueltas y seguía escuchando
muchas voces, si esta fuera una historia ¿Qué enfermo me haría sufrir esto?
Baje las escaleras y encendí las luces, la lluvia seguía cayendo sin fin, el sonido y
la soledad me seguían, el arma con la que apunte a Charles se encontraba en la
mesa de la sala, me senté en el sofá de cuero en la gigantesca habitación
rectangular que llamo sala, agarre del mango el arma y lo pensé
momentáneamente, con la boca del arma en mi cabeza y con las lágrimas en las
mejillas, reflexione acerca de mi vida, vi los momentos más incómodos, tristes y
felices, junto a mis amig… (Hipócritas no lo olvides Liam en la vida el único amigo
que tienes eres tú) Cierto, Esos pedazos de hipócritas, Me usaron, me
recomendaron incluso ir al Psicólogo, pero nunca me ayudaron ellos, solo son
basura, en esta vida solo me tengo a mí, baje el arma y la descargue, pensando en
los sucesos recientes, Charles… Lo amo y no puedo cambiarlo, pero este dolor
de no tenerlo no puedo quitarlo de mi pecho, este dolor que me hace recaer y
tener pensamiento inusual es una molestia incurable.
La Salida más fácil está a solo 3 pasos de mí, pero aún no, no es momento, Si no
puedo tener a Charles, entonces solo me queda desaparecer, Charles es mi
mundo y mi amor por él simplemente no puede pasar de un día a otro, Creo que
va siendo tiempo de acabar con este sufrimiento llamado “Amor”, Lo pensaré
mañana con menos resaca y más tranquilidad.
Subí las escaleras y me metí a mi habitación y seguidamente entre a mi cama,
antes de que todo se desvaneciera solo escuche unas palabras de alguien.
-La muerte es solo el comienzo Liam-

¿EL FIN? – Capítulo 12 y último.


Ya es de mañana siento que la cabeza me va a explotar, no recuerdo nada de lo
que hice ayer, solo tengo algunos deja vú de lo que pasó anoche y tengo un gran
sentimiento de frustración, irá, tristeza mezclados con un dolor punzante en el
pecho, miles de sentimientos negativos que no entiendo por qué sucedieron,
quisiera saber ¿Qué tanto hice ayer? Se cuestiona Liam totalmente confundido.
Me encuentro en la misma situación del de hace unos meses, a diferencia que
me siento peor, tengo un gran vacío por dentro ¿Será por Charles? Cada que
pienso en el escucho a mi corazón quebrarse y doler, como si me estuviesen dado
una apuñalada, en eso escucho una voz oír decir.
- ¿Qué pasa? ¿Te duele? Te lo mereces, eres una basura de persona, nadie te
necesita, solo les estás arruinado la vida a las personas que, si tienen futuro, tu
única salida es tu muerte.
No, no, no… No siento las piernas, me cuesta respirar, y el dolor del pecho se
hace aun mas intenso e insoportable como si tuviera en el fondo del mar
ahogándome lentamente.
Me tomaré un tiempo para sentirme mejor y poder respirar.
Inhala y exhala varias veces apresuradamente.
- ¿Y si tiene razón? ¿Qué debería hacer? - Piensa Liam, no tengo la voluntad
para suicidarme y no quiero entrar a un hospital psiquiátrico. Yo, yo… - Guarda
silencio por unos minutos y de un momento a otro, en un impulso de
desesperación se dirige al almacén y saca un tanque de gasolina que esparce por
todo el salón y saca de su bolsillo un encendedor que entró por ahí y lo deja caer
al suelo, mientras veo como todo se prende tan rápido como el amor que llegue
y que siento aun por mi amado Charles, y bien… ¿Así terminara mi vida? ¿Qué
hice mal? Y así el lugar se prende en fuego y rápidamente se quema.
Sus vecinos pueden ver las llamas arder y se comunican con la estación de
bomberos, al llegar al lugar ya casi se encontraba echo cenizas todo el almacén,
a lo cual los bomberos veían imposible que se pudiera salvar algo de ese lugar.
Tiempo después se da el suceso en las noticias locales, sus amigos lo buscan por
todas partes, pero no lo encuentran no quieren dar por hecho que falleció en ese
fatal “accidente’’. Pero buscan y buscan, sin dar respuesta, hasta aceptar la cruda
y triste realidad.
Charles se siente algo culpable del fallecimiento de Liam, pero elige seguir
adelante con su novia Perla hasta que puede sentir como un escalofrió recorre su
torso lentamente y sienta la mirada de alguien se posa en él, sintiéndose
observado por alguien, por lo que elige cerrar su ventana.
Charles Charles, no sé qué me hiciste, pero te volviste mi perversa obsesión, y
no te dejare ir así de fácil como crees, así que disfruta tus últimos de felicidad
amor mío.
Atte. Liam

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