Los Clubes Deportivos Con Fútbol Profesional Argentinos
Los Clubes Deportivos Con Fútbol Profesional Argentinos
Los Clubes Deportivos Con Fútbol Profesional Argentinos
1. Introducción
Quien haya prestado atención al mundo del fútbol tanto a escala planetaria como en la
Argentina, en la última década, notará sin demasiado esfuerzo, que se han venido
produciendo cambios notables. Si bien el juego en sí mismo se ha modificado muy poco, el
espectáculo ha sufrido enormes modificaciones asociadas a la potenciación de la
importancia económica y cultural de la TV, en especial del cable, y el posicionamiento de
grandes grupos económicos vinculados al mundo mediático. El otro gran negocio, que
parece haber saltado toda lógica, es el de las transferencias de jugadores, El deporte y el
fútbol en particular se presentan como un escenario sumamente tentador tanto para las
grandes corporaciones mediáticas, como para grandes empresarios locales y regionales.
Muchos de esos cambios tienen como unos de sus protagonistas a las instituciones
deportivas y a sus dirigentes. En ese ámbito, la aparente novedad neoliberal acerca de las
bondades acción “natural” del mercado sobre las relaciones sociales, sumada a la
ponderada racionalidad empresarial por sobre la lógica asociacionista, vinculada al
voluntariado y a la solidaridad, parece estar ganando una batalla más, esta vez dentro del
universo del fútbol argentino. Es una lucha desigual, en la cual el Estado parece haber
tomado partido. En esa competencia, uno de los ejércitos se siente cómodo y seguro acerca
del resultado final, contra otro que sólo cuenta con algunos lauros sostenidos a partir de un
pasado legitimante, y ciertas virtudes éticas utilizadas como bandera. Los hechos... no
parecen valer demasiado a la hora de las elecciones... ellos quedan enmarcados en
esquemas discursivos que les dan sentido. A la hora de adoptar las direcciones a seguir,
son esas elaboraciones discursivas o modelos ideales las que pesan. Sin embargo, una de
nuestras tareas será la de desbrozar hechos de discursos (que son obviamente tan o más
reales que aquellos), así como desembarazarnos de la tentadora mezcla entre modelos
ideales con las prácticas sociales más concretas.
La ofensiva de la cultura asociada al nuevo-viejo mundo empresarial, que reconoce una
historia más que centenaria, se posó no sin razones, en la crítica, la puesta en duda, sobre
la aptitud y las virtudes de la clase dirigente, mecanismo que forma parte de uno de los
elementos constitutivos del sentido común. El ámbito del fútbol no escapa a esta tónica
generalizada aunque reconoce una tradición propia más lejana. Un hipercriticismo
paralizante respecto de la acción de los dirigentes de turno, fue siempre un costado
adherido a la constelación de las ideas y prácticas de los hinchas.
A ese debate se suma otro que pone en cuestión la naturaleza de las propias
instituciones deportivas. El avance de los intereses de los grandes grupos económicos sobre
los espacios vírgenes del terreno dominado por los clubes con deportes profesionales,
especialmente el fútbol, con su negocio principalísimo en Argentina: la venta de jugadores
al exterior, y obviamente el negocio mediático, publicitario, de merchandising, etc.
Esta coyuntura hizo emerger, dio nueva vida y visibilidad a un tema antiguo: la
naturaleza de la vida política y económica de los clubes, en medio de una gran crisis de sus
bases tradicionales de sustento, las masas societarias que viven una sistemática
devaluación desde hace décadas.
Se intentará aquí ayudar a pensar el futuro de la pasión del dirigente por gobernar a su
institución. Pensar el futuro de la pasión del hincha, en el marco de as posibles
modificaciones de las instituciones y del espectáculo en general.
Los clubes de fútbol han nacido y recorrido su historia -hasta ahora- bajo el formato de
Asociaciones Civiles sin fines de lucro (AC).1 Actualmente tenemos clubes centenarios como
AC viviendo en muchos casos graves crisis económicas y/o financieras e institucionales, y
en medio de una nueva realidad conformada por el crecimiento del negocio mediático del
espectáculo deportivo.
El tema no es nuevo pero ha tomado forma de una polémica más o menos aguda en
diferentes escenarios, especialmente en franjas de la dirigencia política, algunos periodistas
deportivos con opinión y naturalmente en la dirigencia de los clubes con deportes
profesionales.
Tanto en el esquema general a seguir en el curso de la búsqueda del material
testimonial, así como la armazón argumental seguimos a Palomino. 2 Este "modelo" parte
de las siguientes premisas:
La pregunta sobre "la gestión realmente existente", sobre la realidad, remite a un
diagnóstico sobre "como están las cosas" y plantea un abanico de respuestas respecto a las
posibles soluciones.
Pero, las respuestas vienen no sólo del diagnóstico sino también de las preferencias,
orientaciones y valores, sobre el "deber ser de la realidad". En ellas se combinan: a)
posibles soluciones a problemas reales con b) modelos normativos acerca de "qué deberían
ser los clubes" o "qué deberían ser otras instituciones y organizaciones" que podrían tomar
eventualmente a su cargo la gestión del fútbol profesional".
Además del marco conceptual y de una breve introducción histórica, nos detendremos en
un paneo de la coyuntura que presentan los intereses, relaciones de fuerzas y debates. Un
rápido repaso a las propuestas parlamentarias que en los años pasados plantearon posibles
salidas. Luego se verá a las asociaciones civiles (AC) como modelo de organización social
para pasar a revisar las realidades que viven esas instituciones (vida política, situación
económica y financiera, problemas de gestión) así como algunos pantallazos del contexto
asociados al negocio del espectáculo. Se describirán dos casos típicos:
Lanús-Chebel y Boca-Macri.
Luego se pasará al modelo sociedad anónima (SA) para plantear la realidad de las SA y
los intentos del capital empresarial en el fútbol. Seguirá un análisis de la tensión existente
en el mismo funcionamiento del capitalismo y que el mundo del fútbol agudiza entre los
intereses y la pasión.
Finalmente haremos una apertura a los futuros posibles y el papel que podría caberle al
Estado.
Marco conceptual 4
La idea central gira en torno al sentido, al significado social y a la potencialidad que
tienen los clubes deportivos actuales.
R. Putnam, analista de las relaciones básicas de la sociedad civil en los sistemas
democráticos, percibe una caída de la vida asociativa en los clubes deportivos y en general
en EEUU. 6
Esto tiene varias implicaciones debido a que esas instituciones son el ámbito en el cual
se ejercen virtudes cívicas, entrenamientos en la vida social y democrática, en las cuales se
ponen en marcha dispositivos de reglas que deben ser respetadas por los participantes -con
gran semejanza de una práctica deportiva- a la manera de un sistema político. En este
sentido capital político debería entenderse en la intersección de la vida social con la
gimnasia del diálogo, de la presencia personal, el cotejo de ideas disímiles o afines en la
comunicación, actitudes que aceitan la convivencia con ciudadanos de diferentes orígenes u
opiniones, prácticas que estructuran la formación de los consensos en las sociedades
democráticas. Así, la caída del peso de esa tradición asociativa implica un deterioro de
redes sociales democráticas básicas.
En el caso de Argentina los clubes cumplen un papel abandonado por el Estado, brindan
espacio e instalaciones para que alumnos de escuelas públicas practiquen deportes, además
suelen becar a alumnos, tienen colonias para niños, etc. Los clubes han participado
activamente en la construcción de la sociedad civil (junto con Iglesia, sindicatos, etc.).
Por otro lado, y en un nivel más elemental, los clubes cumplen un papel importante en el
proceso de socialización. 7 Desde un espacio territorial y un universo identitario fuerte, los
clubes construyen vínculos sociales básicos muy conectados con la institución familiar
cruzando las estructuras de la vida cotidiana y del sentido común. 8 Una socialización en
medio del cotejo de la opinión ajena, de la vida asociativa que crea raíces para la vida en
democracia.
El capital social también abarca la forma y el contenido esa socialización. Las
asociaciones (junto a instituciones como la escuela, así como otras más informales como la
esquina, el bar, etc.) han construido una red de escenarios de encuentro. Además, le han
dado un estilo propio a esa conjunción, a la que han sumado un fuerte lazo identitario.
A este análisis se podría sumar al capital social, un capital simbólico y otro político.
Este último podría medirse teniendo en cuenta a las asociaciones como escenario de
generación de cuadros dirigentes políticos para los partidos progresistas, es decir dirigentes
que nacen a la vida pública con una gimnasia democrática. En este sentido, se verán ciertos
rasgos del quehacer político en los clubes, en 5.2.4., a partir de un uso libre de la tipología
de Weber respecto de ejercicio del poder. 9
A su vez un capital simbólico, que se puede asimilar a los lazos identitarios, hábitos,
sentimientos comunes de una comunidad, a espacios de generación o recreación de
creencias y valores. Respecto de las identidades, no será tema a tratar aquí pero no
podemos omitir comentar que tal vez ellas mismas sean puestas en duda en un escenario
institucional modificado. No porque creamos que con SA la pasión morirá, ni siquiera se
atenuaría. No vemos razones para ligar necesariamente los dos fenómenos. Sí podría
suceder que el hinchismo y la pasión podrían quedar disociadas de la participación activa -
poca o mucha- en la vida del club. Ese fenómeno requiere mucha atención, y a él le
dedicaremos un espacio especial mas adelante. 10
Presentamos aquí algunas grandes líneas del pasado del fútbol y del espectáculo
futbolístico que han sido desarrolladas en otros trabajos. 11
Los inicios de la práctica del fútbol entre integrantes de la colonia inglesa estuvo
vinculada a la fundación de clubes, bajo un modelo asociativo más o menos elitista y
cerrado. Con la popularización del fútbol, los jóvenes de los sectores populares se vieron
envueltos en una especie de moda del fútbol dentro de la cual se incluía la fundación de
clubes como AC abiertas a todo aquel que pagara la cuota social.
Así, hacia mediados de la segunda década del siglo nos encontramos con clubes
originados a partir de la iniciativa de la colonia inglesa, las empresas (como los FFCC o
grandes tiendas), alumnos de escuelas secundarias o universidades, empleados medios
nucleados a partir de su trabajo, hasta los fundados desde la iniciativa de los jóvenes
habitantes en las barriadas porteñas.
Luego de una notable selección, idas y venidas, se fue constituyendo una estructura más
o menos estable a la organización de la liga oficial. Durante las décadas de 1920 y 1930 el
espectáculo futbolístico creció notablemente, en una evolución paralela a la sustentada por
los medios de comunicación masiva (revistas, diarios populares y deportivos y la radio).
En 1931 el fútbol se profesionaliza, dando origen a una serie de tensiones algunas de las
cuales subsisten hasta la actualidad: la que vincula al capital con la democracia y la que
vincula las relaciones mercantiles con el universo afectivo y pasional. 12
La evolución del fútbol, de los clubes y del espectáculo futbolístico podría presentarse en
esta propuesta de desarrollo cronológico por etapas:
3. Etapa de la llamada "fiesta" de los `40 y `50. Con canchas llenas, cifras más altas de
asistentes. Aislamiento deportivo internacional.
4. Momento inicial de la crisis del espectáculo, décadas de `60 hasta segunda mitad de
los `70. Aparece el llamado "fútbol espectáculo", caen recaudaciones.
6. Años `90. Despegue del negocio mediático y publicitario. AFA rica, clubes en crisis.
Muchos clubes grandes vivieron una profunda depresión en la década de 1980, como
Boca. Luego, revertieron la situación y llegó un período de relativo esplendor en principios
de los `90 con la TV. Así llegó dinero fresco que benefició principalmente a los clubes
grandes, durante ese breve momento se financiaron grandes desatinos en compras masivas
como por ejemplo, en la experiencia de Otero-Lalín en Racing o los primeros años de Macri
en Boca, o los contratos y primas en River que se asemejaron a los pagados en el primer
mundo.
Todo este capítulo se refiere a la situación coyuntural tanto por los sucesos y situaciones
en las que se desarrollaron las iniciativas pro-SA como por los argumentos a través de los
cuales se debatió y se debate actualmente.
Hacia fines del `90 ante la “debacle” económica y financiera que padecía River
(deudas, instalaciones tomadas por el personal por falta de pago, servicios cortados,
deudas enormes con la DGI), el entonces presidente Carlos S. Menem y el Secretario
de Gobierno, Alberto Kohan, entrevieron la posibilidad de apurar proyectos SA. En
aquel momento la entrada de dinero “fresco” por la venta de JJ Borrelli al fútbol
griego descomprimió la situación.
Durante 1993, Macri se reunió con C. Menem para hacerle saber de su iniciativa.
Menem convocó a Olivos a Julio Humberto Grondona, Presidente de la Asociación del
Fútbol Argentino (AFA), le presentó a Macri y expresó: "Mire Julio, hay muchos
empresarios que quieren invertir en el fútbol, los reglamentos de la AFA se los
impiden. Habría que hacer algo para que esta gente pueda hacer sus inversiones y
puede colaborar con el fútbol". 14
En la asamblea, quien abrió la lista de oradores fue el Presidente de Velez, Ricardo
Petracca, que realizó un emotivo discurso en el que destacó el valor solidario que
significaban los clubes. Al terminar señaló:
"Velez no vende sentimientos, su mística, ni sus ilusiones. Porque tanto los sentimientos,
la mística como las ilusiones son intangibles. No se ven pero se llevan en el espíritu". Su
discurso fue muy aplaudido. Se paró el presidente de Boca (Alegre) y lo abrazó. Al igual que
el de River, Davicce. 16
Luego habló el Sr. Popescu, en nombre de Mandiyu: "me preocupa el futuro de los
clubes (...) Las SA no buscan perjudicar a nadie, simplemente produciría una ayuda al
mantenimiento"
Hacia mediados de 1998 Galmarini citó a cenar a algunos de los dirigentes más
importantes de los clubes del fútbol argentino: A. Davicce, D. Pintado, de River
Plate; R. Gamez, de Vélez Sarsfield; D. Lalín, de Racing; F. Miele, de San Lorenzo.
Galmarini dijo después: "En esa mesa, todos estaban de acuerdo con la privatización.
Miele y Lalín se entusiasmaron con la idea. Aunque River ponía algunos matices:
Dávicce decía que como asociación civil la empresa funcionaba bien" 19
Los últimos meses de 1999 marcaron la preparación de las fuerzas a medirse en una
Asamblea general de clubes sobre el tema. Los últimos días hubo una “arremetida”
en los medios de los dirigentes pro-SA. 21
En esa nueva asamblea, realizada en el predio que la AFA tiene en Ezeiza, los clubes
rechazaron unánimemente una vez más la posibilidad de conversión en SA, dejando
a Macri en soledad. Se decía que Macri contaba con cierto consenso, pero que
finalmente no lo apoyaron. Dentro de los dirigentes cercanos a Macri que no votaron
con él había estado Miele. 22
3.1.2. Intereses
Quienes han participado de las iniciativas a favor de la modificación del formato actual
(AC) de los clubes deportivos, y quienes se han opuesto a ellas, han intentado ver detrás de
las diferentes posturas intereses de distinta índole:
Unos pocos juristas, así como algunos agentes de bolsa -al margen de posibles
conexiones económicas- han aparecido como defensores principistas de las
SA 27 Para algunos de éstos los defensores de las AC representan una actitud
corporativa en defensa de intereses mezquinos de la dirigencia actual del fútbol.
El segundo con E. Duhalde, D. Santilli, F. Galmarini, etc. El tercero ya habría hecho una
propuesta para hacerse cargo del "gerenciamiento" de Racing. También se ha supuesto la
presencia de otro vinculado a Daniel Scioli, diputado justicialista. Ultimamente, se ha
hablado de intereses de los grupos extranjeros presentes en el fútbol internacional. 28
Resulta innegable para los actores el vínculo estrecho de dirigentes de fútbol, grupos
económicos y personajes políticos menemistas. 29
En este tono el Dr Chebel -presidente de Lanús, señaló: "Creo que hay que preguntarse,
de cara a la opinión pública, qué se persigue con estos intentos sistemáticos de boicotear el
carácter social de los clubes, instalando, a través de una prensa cómplice e interesada en
su parte del botín, la supuesta necesidad de que los equipos de fútbol sean manejados por
empresarios. (...). Este gobierno (Menem) no me da garantías de que entre gallos y
medianoche, no se borre un párrafo en un artículo o no se agregue alguna cláusula de la
ley y el traspaso termine convirtiéndose en algo forzoso" 30
Desde dependencias del Estado como la AFIP, se ven con buenos ojos a las SA
porque supone que obligaría a blanquear los dineros del fútbol, y posibilitaría
recaudar más. 31
Para Gamez "las SAD serán corporaciones o grupos amigos del menemismo que
buscarán desembarcar en el fútbol, para hacer negocios, acumular poder o buscar imagen
a través de la popularidad de la pelota. Son ministros de algo y se llevan plata. Y al día
siguiente embajadores... Si Granillo dice que hay dirigentes que se llevaron plata ya puedo
decir que él también hizo sus negocios", tal como lo afirmó en Telefe, Trubuna Caliente. 32
Las iniciativas Pro-SA parecen estar conectadas a los proyectos neoliberales similares
a las privatizaciónes y a las reformas del Estado.
En realidad, esta hipótesis es confirmada por propias declaraciones de personajes como
Mauricio Macri en las que sostiene que el país se modificó con C. Menem y está faltando
otra adecuación final que es la reformulación de en el mundo del fútbol con las SA. Según
M. Macri, el país cambió sus estructuras pero el fútbol no. 33
Eduardo Slutsky ex secretario de Velez dijo: "Desde que asumió este gobierno (Menem)
nos quieren hacer creer que lo privado-empresarial es la solución para todo, como si se
tratara de un dogma. Para eso hundieron las empresas que estaban bajo el control del
Estado, las hicieron dar pérdidas y después las privatizaron.
Hay que ganar esta pulseada. Nos quieren asociar a la corrupción que administraba los
ferrocarriles o YPF y no lo vamos a permitir.(...). 34
"Este sistema no pudo hacer con el fútbol lo que sí hizo con el país, trasladar a pocas
manos un fenómeno nacional y popular" afirma el Sec. de River Dr José María Aguilar.
Desde los principistas AC, el fútbol -una especie de baluarte nacional y popular- resiste la
embestida empresarial-globalizante.
"Este sistema no pudo hacer con el fútbol lo que sí hizo con el país, trasladar a pocas
manos un fenómeno nacional y popular" 35 afirma el Sec. de River Dr José María Aguilar.
Desde este sector se prevé la formación de un foro en defensa de las AC: Rafael Bielsa
lo encabezaría. Estarían Chebel, Aguilar, Torres (de Independiente)
En realidad, la década menemista no logró la transformación de los clubes, pero sí dejó
su sello en el principal negocio del fútbol: la TV, y los lazos entre TyC y la AFA. Y esto
influye en la propia estructura institucional y deportiva. TyC inició su vinculo con la AFA en
1985, logro en 1991 prolongar el contrato hasta 2014. Los dueños del capital accionario se
han multiplicado, así como las propiedades de la empresa.
Unos de los dueños más importantes es el magnate Tom Hicks, titular del fondo de
inversión más grande del mundo, presidente del CEI. En Brasil, Hicks controla el 85% del
Corinthias, posee el Juventus y compró el 49% de Traffic, dueña del fútbol por TV en Italia.
Así dueño de Torneos y Traffic, Hicks sería el principal interesado en un club argentino. 36
-Lo que pasa es que es muy difícil cambiar un esquema que demostró ser exitoso,
porque nuestro fútbol tiene dos Copas Mundiales y catorce Copas América con su selección
mayores y tres mundiales con las juveniles. Es una de las principales potencias del
mundo". 37
"¿Por qué no pudimos con el fútbol? Es así: no pudimos. Creo que nosotros mismos nos
asustamos. Yo viví adentro de los clubes, sé cuánto le han dado a la sociedad, pero hay
que admitir que hoy no se lo dan más y que, tarde o temprano, este modelo será
aceptado" 38
Dijo Scioli al respecto: "la AFA es juez y parte. porque si salen las SA los empresarios
arribarán al fútbol y cambiará el perfil de la dirigencia" 39
Los proSA sostienen que la reforma del fútbol -por lo menos hasta diciembre de 1999-
era imposible hacer desde dentro de las estructuras del fútbol. Pero, hacerlo desde la
iniciativa parlamentaria a su vez presenta otros problemas: por ejemplo, tal vez un grado
mayor de exposición y debate público.
La unanimidad que se venía observando hasta ahora era irreal, ver argumentos de
los dirigentes en la polémica, 3.2.
Las votaciones en contra en las anteriores asambleas tal vez estaban orientadas en
contra de la dupla Menem-Macri, más que motivadas por posturas principistas.
Tal como se viene observando, si se tienen en cuenta las opiniones y las posturas de
los dirigentes se pueden detectar diferentes grupos:
a. Existen dirigentes de los clubes de fútbol que defienden las AC desde una postura
principista (E. Chebel, presidente del Club Lanús; E. Slutsky y Carlos Heller, ex
vicepresidente del Club Boca Juniors).
c. Desde el otro lado también podrían señalarse grupos principistas que suponen que
las SA beneficiarían a los clubes (Macri)
Lo curioso de la situación y lo complejo de ella, radica en que los proAC principistas
formaron un grupo común con los pragmáticos, hasta marzo de 2000. Han estando dentro
del mismo bloque. Eso hace que al defender a las AC a veces se pueda aparecer
defendiendo a esos dirigentes que se enriquecieron con ellas.
Esto se relaciona con el tipo de vínculo que logró establecer Grondona con los clubes
chicos. Muestra el sistema de alianzas establecida: los principistas AC prefieren al padrino
Grondona, su paraguas los protege de las amenazas de desaparecer, pero, a la vez los
vínculos de ellos con "don Julio" pueden atravesar por momentos tensos 40
Chebel: los clubes más importantes de España no son ni serán SA. "Todos sabemos que
el fútbol está en crisis y hay que cambiar algunas cosas. No hay dirigencia en la Argentina
que no ése sospechada. Pero ante la honestidad no se puede combatir y nosotros tenemos
muchas cosas que mostrar". 41
Por otro lado, entre los proAC están los de gestión exitosa (Chebel) así como los que
tuvieron poco éxito en su gestión (Corso).
3.2. La polémica
Se intentará aquí hacer muestreo de los argumentos a través de los cuales discurrió y
discurre la polémica entre dirigentes de fútbol, políticos y periodistas. Este capítulo puede
resultar útil para testear cómo en la polémica se han cruzado en los contenidos de los
discursos los diferentes niveles de la realidad social, mezcla que se intentará resolver a
través de la propuesta del capítulo 5.
Antes de entrar en tema se señalan una serie de perfiles de personajes según sus
discursos, si bien este ítem ya se ha esbozado y se volverá a retomar. Los tres
grupos estarían formados por los principistas pro AC, los pro SA y los "pragmáticos",
que son la mayoría.
En otro órden, pueden caracterizarse los que hablan en primera persona, como si el club
fuesen ellos y los que hablan como representantes de los asociados, etc.
La pregunta central sería ¿las AC están en condiciones de seguir organizando el gran
negocio en que se transformó el espectáculo del fútbol?, ¿qué papel solidario, comunitario
cumplen o podrían cumplir los clubes deportivos como AC?
¿El formato de AC sin fines de lucro es el adecuado para organizar el espectáculo tal
como esta funcionando?. ¿Porque no utilizar la estructura SA que es la ideada por la
sociedad para organizar la vida de las instituciones que -como las empresas y los clubes-
manejan enormes masas de capitales?
A partir de las diferentes iniciativas proSA y las respuestas a ellas, tanto dentro como
fuera de la AFA surgieron una gran cantidad de argumentos respecto de la posible inclusión
de las SA en el fútbol y el deporte profesional argentino.
Principistas AC
a. Sostienen que las SA no son mejores que las AC. Pueden fracasar y de hecho
ninguna o muy pocas duraron cien años. 42 En este sentido se muestra que las SA
pueden fracasar; todos los días aparecen en los diarios empresas privadas que
quiebran. Y en el fútbol hubo algunos intentos que no funcionaron. 43
b. Las AC cumplen un rol social que difícilmente a alguna SA le interese cumplir. Con
las SA se perderían las actividades sociales y comunitarias, así como las asociadas al
deporte social, que realizan las AC. 44
c. Se esgrimen ejemplos extranjeros. Los clubes más exitosos de España no son SA. 45
h. La iniciativa pro SA forma parte del plan neoliberal contra las AC como instituciones
que constituyen redes sociales que resisten ese proyecto. Por eso las AC implican
resistencia frente al proyecto globalizante. 53 Clubes aparecen como reductos frente a
la globalización. Clubes (AC) como entidades comerciales que no discriminan, entre
grandes y chicos 54
j. Los clubes como reserva solidaria frente al retiro del Estado y la penetración
mercantilista. 56
Principistas pro SA
c. El modelo SA será beneficioso por que el riesgo de la inversión correrá por cuenta de
la empresa, así el club no perderá nada. 60
d. Las SA son más controlables por el Estado y su justicia, así se frenarían los negocios
negros, y los clubes sanearían sus cuentas y finalmente terminarían estando más
protegidos que ahora. 61
f. La idea básica asociada a la coyuntura crítica de los clubes, sería abrir la puerta para
que los clubes pudieran recurrir a capitales frescos privados, para que los clubes
emerjan de la crisis. 63
g. La actual situación camina al caos, todas las economías de los clubes están mal y es
necesario poner un punto final. Es necesario un "recambio". El caso Racing usado
como testigo. Necesidad de un respaldo de los dirigentes con su patrimonio
personal.
En la actual situación los clubes como AC van a desaparecer, no van a cumplir con sus
funciones sociales. Con un sistema mixto tal vez esto se pueda corregir
Chacho Alvarez planteó una visión crítica sobre algunas de las actuales estructuras del
fútbol. "Yo pienso que tendría que haber alguna flexibilidad. Hoy, tomando el caso de
Racing, suena ridículo que Lalín y Destéfano estén luchando por una sociedad sin fines de
lucro. Creo que con los resguardos legales que correspondan se podría ir hacia un sistema
mixto -sin caer en lo compulsivo ni en una suerte de privatización- que permita que el
fútbol, por ejemplo, financie actividades deportivo-institucionales, porque de lo contrario
van a desaparecer como clubes sociales", opinión cercana a la diputada Elsa Fernández de
Combes. 66
"-¿Cuál es su posición?
-Yo siempre dije que si el Parlamento legisla para que los clubes sean SA, debería
hacerlo de tal modo que la conversión sea optativa. Esta posibilidad saldrá desde adentro
de la organización. Pero si fuera impuesto por el Estado de modo optativo tendría que ser
aceptada. 67
Muchos dirigentes de clubes grandes sostuvieron que veían bien las SA para los clubes
chicos en dificultades. Los dirigentes de los clubes chicos, en cambio, sostienen que los
capitales no se fijarían en ellos. Los dirigentes de los clubes chicos saben que los capitales
irán a los grandes. Los dirigentes de los clubes grandes dicen que quieren SA para que
salven a los clubes chicos.
"A mí no me gustan las sociedades anónimas para los clubes grandes, como San
Lorenzo. Para los chicos, en cambio, puede ser un buen camino alternativo" dijo F. Miele 69
Macri dijo algo similar: "Las instituciones de la envergadura de Boca nunca podrán ser
privadas, lo que no impide que las de menor tamaño puedan llegar a serlo" 70
Muchos dirigentes de clubes chicos reconocen que sus instituciones atraerían poco a los
capitales y piensan que los capitales engrandecerán más aún a los ya grandes. 71
Víctor Vesco (Pte. de Rosario Central): "No creo en los clubes SA. Es un modelo difícil de
implantar en la Argentina. Y ni que hablar en Rosario. Nos costó un "perú" conseguir un
buen sponsor para la camiseta; no me quiero imaginar lo que costaría conseguir un dueño
confiable para la institución. Además, los clubes deben cumplir funciones sociales, y éstas
perderían si pasaran a manos de una empresa" 72
En este sentido Heller sostiene "¿Cual es la razón para suponer que un club que tiene
pocos ingresos los va a multiplicar por el sólo hecho de convertirse en una SA? La gente
cree que una SA significa que hay un señor rico con mucho dinero que pone plata y compra
jugadores, que va a poner su plata para que un club se salve y funcione (...) Estoy seguro
de que un club que recauda puede ser un negocio si se lo explota como una SA, pero me
gustaría que privatizaran Arsenal de Sarandí o Defensores de Cambaceres, a ver como
hacen para ganar guita" 73
Otra posición sostiene que ve bien la llegada de las SA pero que no le parece viable para
su club, aunque sí para el resto. Lo han dicho Macri, Miele, H. Grondona, etc. 74
Héctor Grondona: "Si yo fuera dirigente de Arsenal no dudaría en convertirlo en una SA.
Pero creo que con 52 mil socios, el patrimonio y los recursos que tenemos, Independiente
puede afrontar las deudas. No necesitamos convertirnos en una SA. Pero si sale la ley
(Granillo) habrá que decidir en una asamblea de socios y ver qué es lo mejor. No podemos
correr en desventaja" 75
Angel Malvicino (Pte de Unión): "Creo que los clubes no se deberían privatizar, pero el
fútbol profesional sí. Porque en este último se manejan intereses puramente comerciales y
es necesario generar permanentemente recursos. Y, de esta forma, crear los mecanismos
para que los clubes puedan desarrollar otras actividades sociales" 76
Argumento idiosincrático
Varios dirigentes hablan de la forma de ser argentina, sostienen que nuestra idiosincracia
pone obstáculos a las SA. Además algunos sostuvieron la inviabilidad pero por el peso de
una tradición no demasiado aclarada.
Aquí no parece haber lugar para los principios, en general son explicaciones para los
demás. Ninguno de estos sostiene que él no lo haría en defensa de tal o cual tradición, sino
que esa tradición "frenaría" cualquier iniciativa de cambio. 77
Desde otra óptica, se ha visto La solución a los problemas del deporte moderno sería una
vuelta al amateurismo. Postura contraria al deporte profesional y anti-SA de O. Bayer, quien
se despachó contra la formación de hinchadas de empresas. Por la recuperación del
"espíritu olímpico". "Soy un utopista, lo sé. Pero la inmoralidad sólo puede derrotarse con la
ética a cara abierta, comenzando de cero. Para volver al fútbol de los años treinta hay que
empezar a defender el deporte como hicieron los ecologistas con la naturaleza. Los
maestros en las escuelas y colegios, los padres y vecinos en los clubes de barrio. Tienen
que volver los aficionados, los "amateurs". El juego por el placer de jugar. Y enseñar a
despreciar al deporte comercial. Además, los gobiernos deben comenzar a combatir el
negocio mediante impuestos cada vez más altos en beneficio de escuelas y campos de
deportes sin fines de lucro. Utopías, pero un comienzo contra el negocio vergonzante." 79
Si el problema del fútbol es la eficiencia de sus dirigentes la solución no pasa por las SA.
Si esto es así, el eje es la responsabilidad de los dirigentes en lo que ocurrió en el pasado y
lo que suceda en el futuro. 80 (...) "Debemos ver cuál es la responsabilidad de cada uno
antes de meternos en esta discusión" 81
Se dice que si las SAD. no se aceptan porque sería desplazada toda la dirigencia, toda la
corporación de dirigentes actuales del fútbol argentino. Así, Macri sostiene que: "Pretender
que la AFA incorpore la figura de las SA es invitar a los directivos a que digan "nos vamos a
casa". 82
-El fracaso es legislativo. Más aún: es un fracaso de la clase política, que dejó al fútbol
como un compartimento estanco. La situación actual es el cáncer que destruyó a los clubes
en los últimos años. (...)
"-La figura debe ser impuesta desde el poder nacional. En Francia, Italia y España e
Inglaterra existió la misma resistencia y, en todos los casos, la reforma vino desde afuera
del fútbol". 83
4. Propuestas parlamentarias
1. Los proyectos que prevén la transformación de los clubes de AC sin fines de lucro, en
SAD, sea ese cambio obligatorio u opcional (proyectos Galmarini, Scioli).
No nos detendremos en estos casos. Han perdido consenso político y han sido
desaprobados por los teóricos del derecho. El problema básico es que las AC no se
pueden transformar en SA, para el derecho argentino. Según el artículo 50 del
Código Civil no se pueden transformar las AC en SA ya que los bienes de las AC
liquidadas tienen un destino previsto por sus estatutos o son considerados vacantes
y aplicados a los objetos que disponga el Consejo Legislativo (van a entes de bien
público) 84
2. Los que prevén la coexistencia entre las AC y las SA, bajo una mismo nombre. Aquí,
de lo que se trata es de ver la naturaleza de los contactos entre ambas
organizaciones (Proyectos de la Comisión Granillo Ocampo, proyecto FREPASO,
diputada Fernandez Combés)
3. Los que prevén la posibilidad de concesionar una parte de las actividades de la AC,
como el fútbol profesional. (Proyecto UCR, o tal vez idea de "gerenciamiento" que
maneja AFA)
Cuando los juristas fueron preguntados por problemas tales como la aparición de
testaferros mediante los cuales un grupo económico podría terminar siendo propietarios de
varios clubes, las respuestas fueron un leve encogimiento de hombros 85, o del tipo: "El
derecho no legisla para las patologías" 86
En este sentido, la CD y en especial el presidente del Club Atlético Lanús ha elaborado un
escrito en el cual critica tanto la base conceptual como muchas de las disposiciones del
anteproyecto. Algunos temas que objeta se refieren a: el objeto de la SAD puede
extenderse a actividades no profesionales; el capital social fijado es impreciso; no crea
herramientas contra testaferros; la prestación accesoria "implica el desprendimiento de las
AC de todo aquello que puede generarle recursos" ; no prevee casos de retiro de la SAD;
no previene la posibilidad de la constitución de monopolios; no es claro el funcionamiento
de las asambleas de las SAD; confuso tratamiento de casos de disolución o liquidación de
las SAD; confuso tratamiento de los contratos sobre transferencia de jugadores menores de
18 años; amplitud de excenciones impositivas a SAD y no a las AC que no celebren
convenios con alguna SAD, etc. 87
La elección de la oferta más conveniente debe tener en cuenta los intereses de la acción
social y deportiva amateur de la AC.
El franquiciado deportivo es el ejercicio del derecho al uso y explotación de los bienes
que componen los activos referidos a la disciplina deportiva profesional. (art.98, el texto
habla de "respeto de esencias y arraigos territoriales"... poco específico). Se especifican los
significado de esos "activos" (a. 100)
El franquiciado pagará un derecho de ingreso y un canon mensual. (a101). Aquí parece
haber un problema a futuro... se estima un porcentaje de los ingresos de explotación.
Pueden haber prorrogas modificaciones etc. (102) Se fija un plazo máximo de duración de 6
años. (a.103)
Derechos y obligaciones del franquiciado (a 104 a 10). Respecto de las SAD (art. 112 a
124): temas como domicilio, (problema, peligro de mudanza), objeto, capital social mínimo
(será fijado por la superintendencia, no fija el monto) debe ser efectivizado, acciones,
accionistas (fija un tope del 20% del capital social para los capitales aportados por SA del
exterior, obviamente aparece el tema de testaferros, etc.). Prohibe tener acciones en más
de una SAD. Los miembros de las CD -ni parientes- de la AC no pueden ser accionistas de
la SAD, intentando evitar el vaciamiento de la AC.
El proyecto de ley del deporte de la UCR, firmado por el diputado Normando Alvarez
Garcia, no prevé la aparición de las SAD. Sin embargo, estipula la posibilidad de la
concesión -previa decisión de asamblea de socios- total o parcial de las actividades
deportivas profesionales (a.30,31). Deberán tener contabilidades separadas.
El artículo 32 fija condiciones similares a los demás proyectos: los concesionarios deben
ser argentinos y los extranjeros no pueden pasar del 25% del capital. Las personas físicas y
jurídicas no pueden tener concesiones en más de un club. Se fija que el capital de
concesionario no puede ser menor al que se fije como monto del canon, ese capital inicial
debe ser avalado por un seguro de caución (reserva, fianza) que debe ser guardado por el
tiempo de duración de la concesión. No se habla de tiempo de duración, de controles
internos ni externos.
5. Modelo de análisis 90
Tal como puede verse en la serie de argumentos del capítulo 3.2., en la polémica que
apareció en torno al tema, quienes arremetían con la propuesta de las SA la sustentaban
con el argumento de oponer la realidad de los clubes como AC, la actual crisis de los clubes
de fútbol, con el modelo propuesto de SA como solución. En esta lógica no se operaba
enfrentando dos realidades con dos realidades sino oponiendo a la realidad crítica de las
instituciones con un modelo supuestamente impoluto de las SA, y no con la realidad de las
SA en el país.
A la hora de reflexionar sobre el tema, la propuesta es evitar en lo posible producir tales
mezclas. Así, parece adecuado, para evitar esos saltos en el razonamiento, primero intentar
aislar los modelos ideales de las realidades y luego sí, comparar, relacionar. Es decir, evitar
el riesgo de comparar un modelo ideal, normativo, que suele registrarse sólo en un papel
escrito o en las mentes, y que tiene poco que ver con la realidad, con una realidad concreta
que por definición estará lejana o cercana del modelo ideal pero que obviamente no puede
asimilarse a él.
5.1. Modelo AC
Una asociación de este tipo es un conjunto de personas que se unen para alcanzar un fin
común determinado. El grupo se da una organización, que pasará a ser considerada por el
derecho una persona jurídica y necesitará ser registrada como tal. La asociación se
constituye por medio de un acta, se suelen regular a través de estatutos, que contemplan
habitualmente: denominación, fines, domicilio, ámbito territorial de acción previsto, órganos
directivos, forma de administración, procedimiento de admisión y pérdida de la calidad de
socio, deberes y derechos de los socios, normas electorales, patrimonio fundacional,
recursos económicos previstos, etc. La Asamblea General es el órgano supremo, se reúne
anualmente para tratar los estados de sus cuentas, balances y patrimonio. La CD y el
presidente representa a la asociación, actúa en su nombre y ejecuta los acuerdos
adoptados por la asamblea.
Según el régimen legal vigente una asociación nace por la concurrencia de tres
elementos: en primer lugar, un sustrato o base, una entidad que aparezca independiente
de los individuos que la integran y que tienen la iniciativa voluntaria de crearla; en un
segundo término la finalidad de "bien común" y, finalmente, el reconocimiento en virtud del
cuál el ordenamiento jurídico otorga a tal entidad la cualidad de persona jurídica.
en caso de que generen utilidades, éstas no se distribuyen entre los socios sino que
se revierten en el patrimonio de la entidad, *en caso de disolución, por voluntad de
los socios, por decisión administrativa, o por disposición legal (art, 50, Cód.Civ.), se
dispone que "los bienes y acciones que a ella pertenecían, tendrán el destino
previsto en sus estatutos; y si nada se hubiere dispuesto en ellos, los bienes y
acciones serán considerados como vacantes y aplicados a los objetos que disponga
el Cuerpo Legislativo, salvo todo perjuicio a tercero y a los miembros existentes de la
corporación". En la mayoría de los casos, los estatutos de las entidades civiles
prevén que el eventual remanente resultante del balance final de liquidación será
destinado a otra institución sin fines de lucro o que dicha decisión será adoptada por
la asamblea de socios. 93
las cuestiones derivadas de los derechos que tienen los socios y que pueden ser
causa de interpretaciones divergentes a la hora de las decisiones; derecho de uso y
usufructo que se legitima con su contribución periódica -no aporte, en términos
societarios- de modo que no son propietarios del patrimonio social, no tienen
derechos que se materialicen en partes del mismo y, en caso de renuncia, carecen
de todo derecho de reintegro o reembolso al igual que ante la eventual liquidación
de la entidad. 94
Abandonando los aspectos formales volvemos a las tesis de H. Palomino, quien sostiene,
siguiendo a H. Putnam, que el significado social de los clubes reside en el cúmulo, el
volumen de capital social que estas instituciones ejercitan. La práctica de estar asociado a
un club presenta una serie de actitudes que "son isomórficas con aquellas que nutren la
democracia americana: anotar puntajes, esperar turnos, controlar el cumplimiento de las
reglas de juego, responsabilizar al otro por sus conductas y actitudes, en suma
responsabilizarlo por su discurso; competir pero sabiéndose participe de una sociedad o
comunidad más amplia". 95
Situándonos ahora en nuestra realidad, existen prácticas que desde la sociedad civil
construyen o podrían construir, potencialmente, hábitos que ayuden a edificar la vida
democrática. En este sentido, sostendremos fuertemente en este trabajo que actividades
sociales regulares y masivas como la práctica y la organización del deporte masivo, así
como la participación en la vida de las asociaciones, son o pueden ser los cimientos sobre
los cuales se constituyan fuertes columnas de apoyo de formas de convivencia democrática
que bien pueden tener efectos en el propio sistema político.
A partir de este análisis sostenemos la existencia de una conexión más o menos directa
entre el capital social y este "capital político". El capital social puede ser pensado como
reciprocidad, resolución de problemas de acción colectiva y ensanchamiento de identidades
sociales. Este volumen de relaciones sociales presenta una densidad notable dentro del
universo de la vida asociacionista. 97
El capital social tiene que ver con los lazos humanos estructurados a través de la vida
asociativa, a través de las redes de organizaciones, basadas en el "contacto vital cercano y
el sentimiento de sentirse partícipe de una actividad en la que al tiempo que se aceptan
ciertas reglas se hace comprometer al otro en el control o transformación de esas reglas". 97
Por otro lado, estas prácticas asociativas también se podrían incluir en un volumen de
"capital político", en el sentido de gimnasias de prácticas electorales, participativas, de
intercambio de iniciativas, organización y gestión, etc.
Además, los clubes son escenarios de socialización. Espacio que brinda ocasiones de
interacciones interpersonales en los que se construyen las competencias sociales de los
individuos -en especial de los jóvenes. Espacios de contacto con la vida cotidiana, de
expresión del sentido común y, porque no de su posible reformulación. 99 Resulta hoy un
lugar común -aunque no por eso olvidable- sostener que los clubes son actores
principalísimos en la formación de identidades colectivas que parecen ser más fuertes que
antaño debido al repliegue de otros tipos de lazos simbólicos vigentes hace algunas
décadas. No cabe duda que este capital social y político está articulado por un capital
simbólico constituido sobre la base del contrato emocional que establezcan los hinchas con
sus clubes. Así, ese capital simbólico reconoce una historia tan larga como la de las propias
instituciones y se basa en el hinchismo, las rivalidades, el ritual del espectáculo y
básicamente en la pasión. Este costado no funciona como mero soporte sino que actúa de
manera decisiva en las propias características que adopta el capital social y el político.
Por otro lado, los clubes han ido ocupando un lugar abandonado por el Estado, a partir
de las políticas agresivas que modificaron su papel en la sociedad. En este sentido, muchos
clubes ocupan un espacio "semipúblico" a pesar de ser entidades privadas. 100
Básicamente, las AC tienen como objeto social el bien común de los socios (elemento
que muchas veces se superpone con el "bien público") y no el lucro. Si bien pueden incluir
dentro de sus actividades los buenos negocios, los beneficios deben volcarse hacia el
fortalecimiento de redes sociales básicas. Además, por lo menos desde el punto de vista
hipotético, no se contrapone en absoluto ese fin social y comunitario con la eficiencia en la
gestión diligenciar.
Finalmente, si se mira el largo plazo, los clubes como AC han sido instituciones
altamente exitosas. Los propios propulsores de las SA hacen cuentas sobre los activos con
los que cuentan los clubes, que en muchos casos se edificaron sobre la base de una
relación más o menos estrecha con la comunidad y con el propio Estado, relación que pocos
de los dirigentes actuales estarían de acuerdo en reivindicar. 101
La realidad de los clubes está más o menos alejada del modelo así como de la excepción
que significa por ejemplo Lanús. Es una realidad "negativa y contrastante" 102
La actualidad presenta a varios clubes en una situación crítica con sus quiebras,
convocatorias de acreedores, espectáculos pobres con escenarios semivacios, con el
aditamento de la violencia. Por otro, emergen "signos de una circulación de la riqueza, o
por lo menos del dinero como nunca antes", con algunos estadios remodelados, una mayor
relación con el show business, los grandes ingresos generados por la AFA, el desarrollo de
grandes empresas periodísticas con el fútbol como eje, la aparición de diarios
exclusivamente dedicados al deporte, etc. 103
Se podría armar un cuadro de los activos y pasivos de algunos de los clubes.
Fuente: Revista Noticias 1/8/98
Boca:
Según Picado, Boca tiene un patrimonio de 15 millones entre el estadio y la sede,
cotizó en 25 millones la Casa Amarilla, recibe 4 millones de Nike por sponsorización,
otros 3 por los "Productos Boca" que les aporta por un año una empresa del grupo
Clarín que le compró el merchandising, y 23.000 socios que pagan $10 por mes. Su
plantel -revalorizado por Bianchi- se cotiza entre 40 y 50 millones de dólares. "Pero
el valor que Boca posee es el sentimiento, la hinchada". Aún con sus ingresos Boca
tiene un pasivo grande. 104
Independiente:
Tiene un pasivo 27.8 millones, un activo de 38 millones sumado sus bienes de uso:
estadio, sede social, complejo de Wilde, etc. Sus ingresos anuales por el fútbol son
de 9.3 millones. Pero sus egresos suman un millón más. 105
Huracán:
Dice Carlos Massarino su presidente: firmó con TyC la concesión de la publicidad
estática, a través de una empresa que se llama "Internacional". "Nos pagan 250 mil
dolares. Mucho menos que Boca que cobra 1.2 millones". Massarino no está de
acuerdo con la privatización. "Sí estoy de acuerdo en que los clubes necesitan
urgente buenos administradores" 106
Defensores de Belgrano:
Es la niña bonita del ascenso por la ubicación de su estadio, en Libertadores y
Comodoro Rivadavia, cotizado en alrededor de 20 millones. Pero el dinero líquido
que factura es el de un maxikiosco. De publicidad estática, recibe 5.000 por mes,
10.000 por cuota de socios y 15.000 por concesiones. Y gasta 15.000 en el fútbol
profesional." 107
En líneas generales puede decirse que pocas asociaciones civiles en la Argentina tienen
tantos bienes como los clubes de fútbol. Algunos de ellos acumulan más de 50 millones de
dólares entre estadio, sedes sociales, terrenos, filiales. Y si a eso se le suman el valor de los
planteles, y de la "marca" del club, la capitalización crece. Como se ve, hay clubes que
tienen inmuebles por 20 millones de dólares, pero facturan apenas 50.000 por mes.
A pesar de esos activos la realidad muestra que en los clubes no hay dinero. Así aparece
la tendencia a reducir primas y salarios, a vender lo más posible, a no comprar.
Boca en el clausura 99 fue el más taquillero recaudó 3.2 millones de los cuales sólo le
quedaron 1.3 millones hechas todas las deducciones.
La apatía de la masa societaria reconoce una historia que viene de algunas décadas.
Además, el contexto se da en el marco de la disminución de la cantidad de socios, y la
caída de la participación política y electoral. Si bien se ha sostenido que buena porción de
razones están vinculadas a causas socio-económicas y culturales que se deberían estudiar
en si mismas, aquí nos contentaremos con señalar que las prácticas políticas que desdeñan
la participación democrática tienen el efecto nocivo de repeler al socio, primero su
colaboración activa y más tarde su propia calidad de socio. Ver estilos de política.(ver
5.2.4.)
Este tema, este problema del desarrollo de las asociaciones merece toda una
investigación particular con un trabajo de campo y una profundización teórica particular.
A todo esto se le suma la imposibilidad de desarrollar trabajos con objetivos deportivos a
mediano y largo plazo, lo que repercute en la de que el espectáculo brindado sea de
mediocre calidad.
En este sentido, Julio Lopardo (de San Lorenzo) dice: "No se puede analizar si los
proyectos a largo plazo dan mejores resultados o no, por que los clubes grandes no tienen
posibilidades de encararlos. Los únicos que pueden trabajar sin urgencias, con tiempo y
tranquilidad, son los equipos que no están comprometidos a ganar un campeonato sí o sí.
Nosotros, hace algún tiempo, pudimos aguantar al Bambino Veira durante cinco años y
finalmente salimos campeones. Pero ahora las cosas son distintas. El mercado del fútbol se
mueve constantemente, existe una rotación de jugadores que antes no existía y que no se
puede dejar de lado. Hoy la cosa es "tengo cuatro, mañana vendo dos, doy a préstamo
otros dos, compro tres...", y hay que seguir ese tren para no quedar fuera del mercado.
Además, no siempre surgen pibes de las inferiores que se pongan la camiseta de Primera y
de inmediato rindan. Y, porque los tiempos son muy cortos, no se los puede esperar. A la
vez, San Lorenzo tiene la obligación de contar con un técnico importante, y estos técnicos
también cuentan con menos tiempos para sacar chicos, porque además de defender el
prestigio del club tienen que defender el suyo" 110
Para clubes como Boca, "Los que mandan son los resultados. Solo que ahora los tiempos
son más reducidos" Bianchi. 111
causas culturales relacionadas con los cambios en los hábitos de uso del tiempo
libre, (poco o nada se sabe sobre el tema y tampoco nos detendremos aquí)
razones vinculadas a los estilos del quehacer político dentro de las instituciones
(5.2.4)
la presión exitista de los hinchas, tanto en los clubes grandes como en los chicos.
problemas asociados al mundo del negocio del espectáculo (ver 5.2.2.) y los
relacionados con mercado en el cual se inscribe el espectáculo del fútbol (ver en
5.2.3.)
5.2.2. Breve nota sobre la evolución del mercado del espectáculo y del negocio
del fútbol profesional 112
De artesanía ha devenido en la más grande empresa del espectáculo a nivel planetario.
Está entre los diez negocios que más dinero mueven en el mundo. Durante las últimas
décadas se ha formado un poder constituido por una serie de agentes como los
intermediarios-representantes-apoderados-capitalistas-empresarios-dueños de pases, DT,
periodistas, dirigentes, barras bravas, medios concentrados, etc.
El despegue del negocio se registró con la llegada de J. Havelange a la FIFA, en 1974.
Desde allí comenzó una política de ampliación del mercado hacia nuevos continentes,
sumada el arribo simultáneo del sponsoreo y la publicidad de ADIDAS, por ejemplo.
Pero el salto cualitativo en las cifras globales aparece con la irrupción de la TV, en
especial de las vías satelitales en su conexión con el cable, que multiplicó los ingresos por
publicidad, trayendo una cadena de inversiones.
El año 1990 es una fecha clave, entre otras cosas, porque la empresa Nike lanzó una
política muy agresiva para disputar el mercado mundial de artículos deportivos.
En Argentina, este fenómeno coincidió con la aparición de la tríada exitosa en distintas
áreas (deportiva, estructural-corporativa, empresarial) formada por Grondona, Maradona,
TyC que marcó una ruptura en la evolución del negocio. 113 Es decir, entre los mundiales del
`86 y del `90 se produce esa transformación en los ámbitos mediáticos, especialmente la
TV, la publicidad estática, el merchandising.
La lucha de las grandes empresas (Adidas, Nike, Reebock, etc.) entre sí, en la disputa
por el mercado planetario, se puede ver claramente, por ejemplo, en las cifras que se
manejan en las licitaciones que las selecciones abren a la hora de sponsorear sus
camisetas. El mismo Grondona se ha manifestado sorprendido cuando en 1998 Reebock
hizo su oferta -insólita para él- de 60 millones para confeccionar la camiseta de la selección
Argentina. "No lo podía creer", dijo. Sus asesores le habían recomendado pedir 20 millones,
y él pensaba que exageraban. 114
Conjuntamente con este fenómeno, los precios de los pases internacionales y también
locales crecieron notablemente. En algunos casos los contratos y primas locales siguieron el
ciclo positivo. Pero las entidades locales no han podido manejar los niveles que se manejan
en el primer mundo.
Por otro lado, el juego permanente de compras y ventas de estrellas en los equipos
europeos implica una inversión -que tiene cierto riesgo- pero que ofrece una amortización
muy rápida del gasto. Además, no es un secreto que el fútbol es un excelente negocio para
el lavado de dinero, más accesible que el tráfico de armas, la prostitución, o la droga. Esto
también ha influido en la aparición de cifras "infladas" en el mercado de pases de jugadores
a nivel internacional. 115
Si bien el mercado de pases tiene una escala global, naturalmente existen roles bien
demarcados: unos, poseedores del capital invierten y otros poseedores de la materia prima,
la ofrecen y la venden. Quienes compran, las economías de los clubes europeos grandes y
medianos, son -en muchos casos- incomparablemente más importantes que las de los
clubes grandes de la Argentina (ni hablar de los chicos). Por ejemplo, Boca maneja cifras
similares a las del Fiorentina respecto del merchandising y sponsoreo, y vende muchas
menos entradas. Además, los grandes clubes están relacionados todos con grandes
corporaciones empresarias (Agnelli-Juventus, Berlusconi-Mílan, etc. Tal como podría ser
Macri-Boca)
En ese marco los clubes se pelean por el porcentaje de la torta que reparte TyC. La
pelea tiene dos vertientes: por un lado solicitarle a TyC un porcentaje mayor a repartir en
conjunto, y por otro el tamaño de la torta que cada club se lleva de lo que paga TyC. En
este sentido la pelea se ha centrado en la lucha entre los clubes grandes y los chicos.
Cuando se firmó el contrato con TyC loc clubes grandes amagaron con la formación de
una Liga de grandes. En realidad quedó constituida de hecho. En ella participaron dirigentes
como Heller, Davicce, Miele, etc. Por otro lado siempre estuvo presente la idea de armar un
torneo chico con los clubes grande o medianos y plazas fijas en el interior. Actualmente
esta idea es sostenida por Macri y Avila. A la TV sólo le interesan los equipos grandes, y
este proyecto coincide con la idea de Macri de un Boca hegemónico, en la cual las
diferencias entre los muy grandes y el resto se amplíe hasta que deportivamente sea
inviable que un chico gane alguna vez el torneo.
Podría afirmarse que los clubes argentinos han entrado mal parados al nuevo
escenario aparecido fruto de los cambios ocurridos desde fines de los `80, a pesar
de haber participado en los acuerdos y contratos.
Obviamente, estos planes de Avila (también sostenidos por algunos dirigentes de clubes
grandes), y que han sido discutidos en la AFA, contrastan con los intereses de la mayoría
de los clubes que entran en la categoría de clubes chicos.
Se ve claramente que otro de los problemas que presenta el espectáculo es la merma en
la asistencia de espectadores. Este problema -que no será tratado aquí, y que merecería un
estudio aparte- se vincula a razones que en algunos casos exceden al fútbol y en otros no.
Entre las razones que lo exceden, se suelen señalar las vinculadas a los cambios en los
hábitos de consumo, la ciáis socio-económica, etc. 118 Las causas futbolísticas podrían
asociarse a la tipo de espectáculo brindado (deterioro del fútbol jugado), a las condiciones
de los estadios, la violencia, etc. 119
La situación de los clubes como AC se relaciona directa o indirectamente con el estilo del
ejercicio político, con la forma en que se desarrolla la actividad política dentro de las
instituciones. En este sentido, la forma que adquiere el quehacer político dentro de estas
asociaciones constituye un capítulo de la política general, así como formas peculiares del
submundo de los clubes deportivos. 120
Nuevamente este tema requeriría de una investigación aparte. Se intentará aquí a modo
de breve esbozo, una caracterización de los perfiles de los dirigentes actuales del fútbol a
través de las maneras de vincularse con la masa de asociados y las formas de actuar en las
instituciones. 121
Es posible pensar que una las razones de la crisis de los clubes se relaciona con el
alejamiento de los socios o -en el mejor de los casos- de la cristalización de una manera de
asociarse, que implica poca participación y la presencia de una especie de democracia por
delegación que extrema la carencia del hábito de la rendición de cuentas y de los vínculos
establecidos a través de mandatos más o menos revocables. 122
De esta franja de fenómenos se desprenden una serie de elementos como el peso de
una tradición democrática representativa, participativa, o de una democracia delegativa
(O`Donnell) en la vida de los clubes. Además, muchas instituciones han sido edificadas
sobre la base de la altruista y "heroica" tarea de caudillos con estilos a veces poco
democráticos. Otra serie de problemas, son los vínculos que se establecen entre la eficacia
y la eficiencia con los estilos participativos y democráticos. Reiteramos que no existen
trabajos en los que se traten a los clubes como objeto de estudio, por lo tanto nadie ha
analizado la evolución de todos estos fenómenos.
¿Qué tipo de política se hizo y se hace en los clubes? ¿La forma que adquiere el
quehacer político, tiene relación con el alejamiento o el acercamiento de la población a los
clubes? ¿Los dirigentes se plantean modificar los cambios de la oferta desde los clubes
hacia la sociedad o sólo se trata de seguir la corriente inercial que de hecho desalienta la
participación?
&nAquí sólo haremos un breve intento por tipificar algunos de los estilos de dirigencia.
Los diferentes modos se vinculan a tradiciones asociadas al quehacer político general,
mientras que otras se deben a la vida interna de los clubes. Las diferencias se centran en la
forma de generar legitimidad y consenso: desde las ideas, propuestas, objetivos, a través
de debates, hasta la formación de grupos de choque, como las barras bravas, etc.
Algunos de los sostenedores de los clubes como AC parecen ver la vida democrática
interna más como una carga, que como el origen de los beneficios del formato
AC. Esta posición puede apreciarse en el siguiente caso: ante la pregunta si habrá
llegado la hora del dirigente rentado, Davicce respondió: "Más que el dirigente
rentado debe haber gente no discutible. Por ejemplo, la del grupo Macri. A
Mauricio nunca se lo podrá acusar de ninguna maniobra en detrimento del
patrimonio de Boca. Las imputaciones quedan para los que somos Juan Pueblo. A
River tendría que llegar un Pérez Companc, un Pagani de Arcor, un Pulenta de
Peñaflor... Pero no vienen. (...) Nosotros tenemos que mantener esto, porque los
adversarios se arman, son fuertes, tienen coherencia, muestran un manejo casi
unipersonal de corte empresarial (por Macri) y, si bien nuestra bandera es la de las
AC y no la vamos a regalar nunca, eso no quita que no tengamos una organización
que nos proteja". 125
b. Los caudillos.
Es interesante observar como se expresa un defensor de las AC como el presidente
de Gimnasia y Esgrima de Jujuy, Raúl Horacio Ulloa: "Bajo ningún punto de vista
Gimnasia apoyará las sociedades anónimas en el fútbol. Porque el sentimiento yo no
se lo vendo a nadie. Por más plata que pongan, antes de venderlo presento la
renuncia. Apoyo cualquier cambio que implique un progreso, pero ésta no lo
comparto" 126
Se notará el uso de la primera persona del singular. No cabe duda que esto denota
formas, prácticas y concepciones acerca de las relaciones entre los dirigentes, las
instituciones y los socios.
Entre los caudillos, se pueden detectar a los viejos personalismos como por ejemplo
Armando y ahora Miele, que asumen liderazgos queriendo aparecer como especies
de mecenas, mezclando los negocios propios con los manejos económicos de la
entidad. Sea como sea, por años han gobernado casi sin oposición.
En general, la forma que adquiere el quehacer político es el formato tradicional: dar algo
a cambio de apoyo político; algo similar al feudal don y contradon. Con el tiempo, esta
tradición originó el poder que tienen ahora algunas barras bravas, "usadas" para generar
apoyos, terminaron por constituirse ellas mismas en poderes paralelos.
El mundo de los dirigentes de fútbol ha sido visto durante décadas como una
corporación de mafiosos, con códigos internos gangsteriles, o en el mejor de los casos,
como caudillos "blancos" al estilo Amalfitani. A esto hay que sumar la mala prensa de toda
dirigencia por el solo hecho de serlo.
Sin embargo, durante las últimas décadas han aparecido dirigentes con otras
perspectivas y otras actitudes (Chebel, etc.). Sin querer trazar relaciones causales
inadecuadas, cuando esta tradición parece brindar ciertos frutos es cuando aparece la
arremetida pro-SA.
Finalmente emerge toda otra área de fenómenos que no serán tratados aquí; son los
que vinculan la política interna de los clubes con la política nacional, las alianzas y
diferentes alineamientos ideológicos y/o coyunturales.
Un problema vinculado con el tema global de la realidad de los clubes como AC esta
asociado a los intereses de los dirigentes en ver a sus asociaciones como instituciones con
objetivos comunitarios, sociales, o sólo como clubes de fútbol con una muy accesoria
atención a otras ramas de actividades sociales y deportivas.
¿La vida asociativa tiene el mismo tono en estos clubes o en estos dirigentes que ven a
sus clubes sólo como un equipo de fútbol?. Parecería que esta óptica y esta práctica atenta
contra la vida participativa comunitaria, le fija límites, coarta la integración o mejor, está
poco preocupada por ofrecer contactos renovados hacia sus vecindarios, que por otra
parte, bien podría ser una política consciente para remozar la propia hinchada.
Insistimos que todo el tema de lo que acontece dentro de los clubes no ha sido
abordado por ninguna investigación concreta, aquí nos manejamos por declaraciones o
entrevistas a dirigentes. Y en este último caso han aparecido opiniones de alguno de ellos
para quien la actividad social, la inversión en ella, es una rémora debido a que son recursos
quitados al fútbol. 128
En este caso, para estos dirigentes "de fútbol" su acción debe ser "la administración de
la pasión". Es decir, son explícitamente sólo hinchas destacados que llegan a la dirección.
Suena curiosa la situación generada: estos clubes tienen una vida social y deportiva -
acotada y sin vuelo, pero la tienen. Por ser clubes de escasa convocatoria futbolística, los
socios que hacen uso de sus instalaciones suelen no ser hinchas de ese club de fútbol
(frecuente en casos como Ferro, Argentinos Jrs, Velez, etc.). Así, aparece en la cabeza de
estos dirigentes el conflicto: estos socios no hinchas son vistos como intrusos, que luchan
porque cada vez más dineros sean ocupados en esas actividades y no tanto en el fútbol,
además alguno intentaría disputar la posibilidad de tener alguna cuota de poder interno. Así
el conflicto se establecería entre dos calidades de socios: los hinchas de fútbol, y los no
hinchas pero usuarios de las instalaciones deportivas y sociales.
Por otro lado, habría que hacer ciertas distinciones entre los clubes en general:
grandes con llegada a nivel nacional: con mayor despegue de Boca y River en
relación del resto en las últimas décadas.
clubes chicos que dominan un espacio territorial acotado y con una buena llegada
social (Lanús)
Toda esta serie de cuestiones también se suele vincular a los problemas que viven
actualmente las instituciones.
Otro de los temas en los que se insiste es el de la posible aparición del dirigente rentado,
que a priori chocaría con el modelo de asociación civil voluntaria. Muchos sostienen que con
buenos asesores, técnicos preparados, se podría mantener el sistema actual, del dirigente
voluntario. Otros no creen que esa salida sea suficiente.
Muchos ven en el sistema vigente un escenario sin controles y sin eficiencia. "La AFA y
los clubes defienden un sistema actual que facilita negociados y sospechas no sólo en las
millonarias transferencias de jugadores, sino inclusive en los cuantiosos dineros que, según
dicen los papeles -no la realidad- se paga a jugadores y técnicos en más de un equipo
grande. "Nuestro proyecto afectaría el cobre de comisiones por retornos, obliga a un
registro de los intermediarios y toca el tema de los pibes de inferiores representados por
dirigentes o testaferros de dirigentes" afirma un abogado de la comisión Granillo. "Para que
le quede claro -advierte a su vez un importante funcionario- acá se tocan cosas muy
sensibles. ¿O acaso alguien sabe cuál es la verdadera cifra del contrato que la FIFA tiene
firmado con la Coca Cola?" 130
Una solución posible sería la fijación de normas que obliguen a los dirigentes a hacerse
responsables ante la institución por los manejos económicos realizados en su gestión. Pero
este tema también tiene varias versiones, como las que presentan Boca y Lanús
Ha dicho Macri: "Me inclino por la convivencia de las SA y las asociaciones civiles. Pero
en este último caso los dirigentes deben responder con sus patrimonios por los resultados
de sus gestiones. En Boca modificamos los estatutos y desde la próxima elección los
dirigentes se harán responsables del patrimonio que reciben" 131 En realidad para ser
candidato a la presidencia de Boca hay que tener un capital que llegue a un 20 % del
presupuesto anual de la institución. Obviamente, este requisito vulnera normas
democráticas y establece un voto censitario ya que fija condiciones relacionadas con la
riqueza para el socio con voluntad de candidato.
Dos formas muy diferentes de entender el lazo que une al dirigente con la
responsabilidad personal en su gestión.
Dentro de este capítulo que se centra en las realidades de los clubes como AC, nos
detendremos en fijar la atención en los dos casos paradigmáticos actuales; la del Club
Atlético Lanús bajo la gestión del Dr. Chebel como el caso modélico para los pro-AC y el de
Boca con Mauricio Macri como modelo para quienes sostienen la necesidad de un nuevo
estilo dirigencial.
Chebel sostiene que "los clubes de fútbol no son sólo para ganar dinero. Si se utilizara
sólo el criterio mercantilista sería el principio del fin. Los clubes deben ganar dinero, pero
para aplicarlo a un plan con su comunidad". 132
Por otro lado Macri sostiene que "el fútbol tiene que estar manejado por estructuras
profesionales, no solamente por el amor y el tiempo libre de sus dirigentes. (...) Boca
mueve 40 millones de dolares por año. Es una gran empresa, esto no es una PYME. Una
empresa que maneja ese dinero requiere una estructura de conducción muy profesional,
con cuadros muy importantes. Quiero que Boca sea escuela del fútbol mundial". 133
Caso Lanús-Chebel
Quienes sostienen que el tipo social de las AC pueden tener éxito muestran como
ejemplo la experiencia de Lanús, con balances positivos, con participación, con eficiencia.
Dice su presidente: "Unos 250 dirigentes trabajan ad honorem en distintos cargos, todos
pagan sus plateas y cuando se vende un jugador al exterior viajan tres directivos. Lo que
casi todos los clubes dicen que es imposible, Lanús lo logró y vendió a Carlos Roa y Oscar
Mena al Mallorca de España y al goleador Ariel "Chupa" Lopez a Génova de Italia sin
necesidad de intermediarios". La última Memoria y Balance dejó un superavit de más de 3
millones, el triple de Boca.
El club está inserto en una comunidad de 600 mil habitantes, que tiene 27 villas
miserias. Tenemos 30 mil socios, 27 disciplinas deportivas, grupos de reflexión, convenios
con la Universidad de Lanús, plan de acción social para cinco mil chicos, servicios médicos
casi gratuitos y becas para ex combatientes de Malvinas" 134
La política interna de Lanús es dominada desde hace varios períodos electorales por una
lista de unidad con un sólo período posible de reelección. Su gestión y sus reuniones son
públicas así como sus decisiones. Los dirigentes se autocontrolan, estatutariamente se
estableció que ante balances negativos son responsables. La publicidad y la unidad interna
evitan la necesidad de recurrir a la barra brava. Además, sus dirigentes se ufanan por su
estrecho vínculo con la comunidad del lugar como uno de los objetivos más importantes de
la gestión.
Si bien la comparación entre los estilos dirigenciales puede ser válida, también es cierto
que es necesario hacer notar que entre Lanús y Boca existen grandes diferencias. Resulta
curioso que Chebel intente plantarse en el mismo terreno. Tal vez sería más interesante
alejarse que acercarse a Boca. Mostrar las diferencias no en los pesos sino en las cantidad
de socios realmente cotizantes, socios que votan, socios que participan de las actividades
sociales. La idea sería: Lanús como club comunitario y Boca como un club productor de
mercancía para consumo inmediato del espectáculo a nivel nacional.
En este sentido, ha sostenido Chebel, que la competencia entre Boca y Lanús sería como
enfrentar "a tanques con tenedores", dice que Lanús demuestra que "se puede ser social,
comunitario, semipúblico y se puede ser también eficiente. Eso es lo que queremos decirle
a la sociedad argentina". 136 Especialmente si se tiene en cuenta que "todo el dinero anual
que Lanús dedica al fútbol no llega a los 6 millones de dolares, cerca de la mitad del
presupuesto total del club. (...) Recibe algo menos de un millón de dolares al año de la
TV" 137 Boca, en cambio cobra 5 millones sólo por el campeonato oficial, aunque sumados
todos los torneos (Supercopa,etc.) cobra 12. En Boca se firmaron contratos por 20 millones
con Nike, casi 6 con Quilmes, el Fondo, y el merchandising.
Caso Boca-Macri
El empresario Ingeniero Mauricio Macri, hijo del poderoso Franco Macri, propietario
de uno de los grupos económicos más importantes del país, desde la presidencia de
Boca Juniors se transformó en un polo de atracción dentro y fuera del mundo del
fútbol. Básicamente, podría decirse que ha pretendido introducir, en la dirección de
Boca, estilos de conducción habituales en el mundo empresario tales como los
manejos unipersonales, las ilusiones oligopólicas, etc. Estos manejos y algunos
desplantes lo transformaron en un primer momento en un personaje difícil de digerir
para los demás dirigentes. 138
En diciembre del `95 el "chanta y cheto" al que todos miraban de reojo asumió en Boca.
Era visto como el empresario que aprovechaba sus millones para hacer de Boca su
plataforma política, para incorporar el club a sus negocios, hasta para divertirse con el
chiche nuevo de un equipo de fútbol. 139
Macri logró sacarse de encima a Maradona. Con Bilardo y Veira lo institucional iba por un
lado y lo futbolístico por otro. Con Bianchi logró unirlos. Bianchi apareció frecuentemente
como autor del éxito y eso originó permanentes roces mediáticos entre el DT y el
presidente.
Durante los primeros años de gestión, Macri apareció derivando algunos de sus
millones para comprar jugadores. Fueron las eras Bilardo y Veira. Con Bianchi llegó
el cambio: las recaudaciones, los ratings de Fútbol de Primera que suben con Boca
ganados. Con el éxito de Boca, toda la industria relacionada al espectáculo gana.
"Boca Crece", la sociedad de merchandising que Boca formó con el Grupo Clarín,
tiene ya 65 licenciatárias y unos 450 productos pueden ser adquiridos en
supermercados, y que dejarán un negocio estimado en 30 millones de dólares.
Desde prendas de vestir hasta almohadones con los colores y la marca Boca podrán
comprarse no sólo en el primer puesto propio, en los shoppings.
Boca Crece implicó una inversión de 800 mil dólares. Con Nike se firmó un contrato de
20 millones por 5 años. Boca abandonó tiempos dispendiosos y no paga como River:
Gallardo cobraba una prima de 1,8 millones mientras que el mas caro en Boca cobra 500
mil.
El objetivo fijado era que reditúe la inversión de 5 millones en las divisiones inferiores.
Ese dinero, que antes figuraba como gasto, fue cambiado de rubro en el balance y ahora se
incluye como activo. Son trucos contables que permitieron a Macri un balance con un
superavit de medio millón, 40 millones de ingresos y 39,5 millones de gastos, como para
que el éxito deportivo se conjugue con el económico. Ese mismo balance incluyó como
ingresos diferidos (billetes recibidos por adelantado) casi 30 millones y admite un pasivo de
50, con un total de activos de 68 millones. 140
Por otro lado, el Fondo de Inversión instalado en la Bolsa de Valores, juntó apenas unos
500 cuotapropistas, nunca tuvo volumen y recibía silbidos de cargada de agentes y
operadores anti Bolsa si se lo mencionaba en la sala. Los inversores y Boca ganaron 2
millones cada uno por las ventas de Pineda a Italia y del peruano Solano a Inglaterra. Pero
el negocio comenzó a vislumbrarse fantástico apenas Palermo comenzó a meter goles y su
cotización se fue a las nubes. 141 Aunque luego cayó junto con la lesión del goleador.
Las opiniones del empresario Santiago Soldati sobre la gestión Macri al frente de
Boca, son sumamente interesantes por lo diáfanas. Entre otras cosas Soldati expresa
las analogías contenidas entre el mundo del fútbol y el del mundo de los negocios.
Sugiere que Macri -conocedor de las segundas- las ha aplicado con éxito a un
universo gobernado hasta ahora bajo otro tipo de lógicas. Dice Soldati: "Contemplar
la inversión a plazo, alentar el esfuerzo y destacar las individualidades. Prever
derrotas y tener siempre claro el objetivo: ganar. (...). La gestión Macri demostró
que aplicando sanos principios empresarios de organización y conducción humana,
se pueden obtener extraordinarios resultados en otros campos, como el deportivo.
Ahora ya es tiempo de disfrutar del éxito y darle rienda suelta al sentimiento" 142
Mauricio Macri ha mostrado cierto equilibrio en su cara visible desde los medios de
comunicación. Abierto al diálogo, como pocos empresarios, ha luchado por mantener
la frialdad del hombre de negocios. Sin embargo, el mundo pasional del fútbol, a
veces lo ha traicionado, especialmente en temas referidos a Maradona, la disputa
verbal con Bianchi y los contactos con los jugadores por premios. En sus expresiones
mediáticas pueden verse los fundamentos de su propuesta de gestión "innovadora"
"Hay que crear un método de trabajo en el que los hombres sean prescindibles. Poner al
club primero y a los hombres después", dijo Macri 143 El presidente tiene una clara visión de
lo que es su club; para él, se asemeja a una empresa, peculiar, pero empresa al fin. 144
Teniendo en cuenta sus anteriores proyectos (Deportivo Español, Badagoz, etc.) Macri
está pensando "en grande". Por ejemplo en un Boca como AC, tal como está ahora, sin
oposición y con él como cuasi dueño. Sumado a ello, con la puerta abierta a la instalación
de las SAD, él participaría en varios clubes. Así mantendría un sistema de clubes-empresas
con cabeza en Boca con los que hacer negocios con jugadores, triangulaciones, inversiones,
etc.,
-Son las dos caras de una misma moneda. En este mundo siempre hay cosas que son
absurdas frente a otras. Hay lugares donde la gente se muere de hambre y hay otros en
donde dejan la comida en el plato porque no tienen más hambre. Yo digo: aunque la gente
tenga poco, gasta lo que puede para ver a sus ídolos en un partido de fútbol. Ya que no
tiene pan, por lo menos tiene circo" 145
5.3. Modelo SA
Frente al modelo AC y a realidad de los clubes como AC, aparece el modelo propuesto de
las SA. Es el invocado para dar transparencia al negocio y aportar capitales.
La SA es una asociación con fines de lucro, integrada por partes anónimas, con un
estatuto que fija las formas a seguir por la sociedad, un directorio que administra, elegido
en una asamblea. El capital es aportado por los socios, múltiples accionistas. La fórmula
permite representar a grupos de intereses. A mayor cantidad de acciones mayor poder en
la toma de decisiones. A su vez existen distintos tipos de acciones, algunas de las cuales
dotan a sus poseedores de privilegios en las decisiones.
Una SA es una sociedad mercantil en la que sólo se tiene en cuenta el capital aportado
por cada socio. El capital que constituye la base de la sociedad se traduce y distribuye
mediante alicuotas (acciones) que confieren a su titular la condición de socio. Una
característica fundamental de la SA es que el socio sólo aporta el capital y no responde de
forma personal de las deudas societarias, arriesgándose sólo a perder el importe de las
acciones suscriptas pero sin comprometer su patrimonio personal.
Sus características básicas la definen como forma excelsa de la sociedad comercial, las
SA garantizarían transparencia, podrían acercar finalmente recursos genuinos a los clubes,
se sanearían sus finanzas, los gobiernos podrían recaudar impuestos, las cajas aportes
previsionales, las obras sociales las cuotas de los empleados, en fin todo el mundo saldría
ganando. 147
A diferencia de las AC, las SA implicarían transparencia, el fin del amiguismo que viene
de la mano de la ineficiencia, el fin del manejo de una institución con plata ajena.
Significaría la llegada de la eficiencia empresarial, con lo que las grande y las pequeñas
“corruptelas” de los pequeños empresarios que buscan salvarse a través del fútbol,
desaparecerían.
Una SA permitiría aportar capitales frescos de los grandes grupos económicos nacionales
e internacionales que posibilitarían la contratación de algunos astros y tal vez frenaría la
sangría de jugadores hacia el exterior. Así, el espectáculo recibiría nuevos impulsos y podría
atraer a muchos espectadores que han abandonado las tribunas. Además de estos
argumentos, siempre aparece el que sostiene que "cuando se administran fondos propios
son más controlables que los fondos de terceros, que son de los socios. Creo que todos los
clubes deberían ser SA. En Boca serviría porque los socios van a ser acccionistas del club,
propietarios, dueños de un pedazo de Boca" 148
Otros sostenedores del modelo SA se arriesgan a afirmar que serían un freno contra la
violencia. En este sentido, Macchi ex presidente de la Bolsa, dice "me parece el único
instrumento que permite al hincha, que es el único que pone, participar también del
negocio del fútbol. Y voy a ir más lejos. Esta figura es un antídoto contra la violencia. Ese
hincha que ve que le refriegan millones de dólares delante de sus ojos y no sabe por
cuanto le venden un jugador, tiene la posibilidad de participar en un Fondo que tiene una
gran transparencia" 149
La idea sería la siguiente: con una SA los hinchas se transformarían en socios
capitalistas. Desde ese rol participaría activamente y transparentemente en las decisiones...
¿qué mejor antídoto contra la violencia que la participación del socio?.....
Como introducción al tema de la realidad de las SA, reproducimos lo esencial de las ideas
de Carlos Melconián, economista y asesor financiero, hincha fanático de Racing: "Es
probable que el cambio hacia segmentos privatizados se haga gradualmente. No sé qué es
lo que va a resultar del cambio, sí sé que es lo que se quebró. Se quebró la metodología de
las asociaciones sin fines de lucro; porque, hoy día, decir sin fines de lucro significa tierra
de nadie, que no haya balances ni transparencia, que el dirigente Fulanito vaya a las peñas
a comer locro y termine siendo candidato. Quisiera que alguien me explique cómo es
posible que, habiéndose triplicado o cuadruplicado los ingresos de los clubes, las deudas se
hayan incrementado en la misma proporción" Así respondía Melconian a algunas preguntas.
Luego la publicación le dio un espacio aparte que tituló: "El lucro no excluye la pasión",
ofrece un buen ejemplo de la mezcla de niveles -ideal con el real- que intentamos evitar
aquí, su contenido es: "Lo que quebró es la metodología o definición jurídica de
asociaciones "sin fines de lucro", es decir, la tierra de nadie. Los clubes son poco
representativos y no tienen manejo profesional. Por ejemplo, los servicios (hoteles,
transportes) les pasan tarifas mucho más caras. La plata es ajena, y nadie da cuenta de
nada.
Los ingresos del fútbol aumentaron tres o cuatro veces, pero los clubes también
multiplicaron sus deudas en esa proporción. Y por desinterés de los socios, las asambleas -
en Racing han terminado en escándalo y con la Policía en la puerta- no son una forma de
control eficiente. Los candidatos las arman con tipos que sólo levantan la mano a la hora de
votar. A los que están al frente de los clubes les gustan el poder o la plata. O son
millonarios y ya están salvados. El que vive de su trabajo y no está para perder el tiempo
no integra una Comisión. Hay clubes europeos que tienen control. El 24% de las acciones
del Manchester se reparte entre 21.400 socios minoritarios, el 17% entre 6 directores y el
59% entre 124 inversores institucionales. Lo dirige un grupo que, cuanto más gana el club,
más ganan ellos. Y tiene superávit. Acá, hasta el comerciante de barrio busca una estrellita
por 5 o 10 mil pesos para ir tirando. Con gente eficiente en el club, nadie se llevaría a un
pibe por esa plata. La ley, si sale, tiene que ser severa para evitar cosas turbias, como que
una empresa se haga cargo de Racing e Independiente al mismo tiempo. Un club debe dar
ganancias para invertir, para comprar jugadores. El socio accionista tendría un porcentaje;
y no sólo amarguras, como ahora. Racing es "una religión", dicen, pero el tema de lo
pasional lo usan quienes viven de este sistema. Y yo hablo de buena gestión administrativa.
Lo pasional, que la pelota entre el arco, se mantiene. Los clubes no son más pasionales sólo
por ser "sin fines de lucro". 150
Al igual que a Macri, para Melconian el club es una empresa. Si algo se quebró en la
sociedad es la idea "natural" de la necesidad de las asociaciones que agrupan a ciudadanos
solidariamente. Una vez quebrado ese sentido que hacía de la participación una especie de
horizonte mental -a menudo lejano en la práctica, pero omnipresente en el imaginario-, sí
es posible pensar que no son necesarias las AC y luego pasar a la realidad de las SA en el
fútbol profesional.
En este sentido el ejemplo del equipo de football americano de Miami, comprado por el
propietario de Blockbuster es paradigmático: luego de una gran inversión y una notable
campaña deportiva, el empresario decidió que el negocio no era redituable y abandonó al
club. Al año posterior los fanáticos vieron a su equipo en el final de la tabla. 152
Las SA pueden fracasar; todos los días aparecen en los diarios empresas privadas que
quiebran. Suelen ser dominadas el poseedor de la mayor cantidad de acciones, uno sólo; es
un modelo de asociación antidemocrático y, naturalmente, no tiene porqué ser lo contrario.
La SA es un formato muy adecuado para los grupos de grandes propietarios, sin capital
repartido, muy concentrado el capital y la autoridad. Para participar en decisiones hay voto
calificado según la propiedad. 153 Es un escenario diferente al que rigen el mundo de las
reglas de la democracia -como en las AC-: un hombre un voto. En las SA se vota por
mayoría, se aceptan grupos. La asamblea es soberana en la que se vota por grupos, y
puede apañar desfalcos de los directores. 154
Para controlar las SA no se necesita el 51% de las acciones, con un capital más o menos
representativo que depende de cada caso, el 15 o el 20%, alcanza.
Hay una fantasía que dice que en las SA los dirigentes responden con su patrimonio. Sin
embargo, tal como se vio arriba, los socios responden sólo con el capital aportado a la SA y
no con su patrimonio. Si el señor Macri es dueño de un club, el capital que va a arriesgar es
el que puso en la SA, no su propio capital.
El diputado radical Normando Alvarez Garcia sostiene que pensar que las SAD
garantizarán un resultado económico favorable es una falacia. La realidad nos indica que los
quebrantos de las sociedades anónimas, en nuestro país, van en aumento y que ninguna
institución se ha mostrado tan sólida como los clubes. Tengamos en cuenta, solamente,
que en los últimos 30 años quebraron más de 100 bancos en la Argentina".157
Continuando con el análisis de la realidad de las SA, nos detendremos en los intentos de
emprendimientos del capital privado en el fútbol argentino:
Mandiyú. de Corrientes. En 1993, Eduardo Seferián, presidente del club, manejó todo
el fútbol profesional. Pesentó un proyecto en AFA para que los clubes pudieran ser
manejados por particulares (ver capítulo 3). Más tarde, el empresario Luis Legnani
mostró un cierto interés por adquirir el club. Finalmente, el empresario menemista,
Roberto "Tito" Cruz se hizo cargo de su manejo, invirtió en jugadores, se hizo cargo
del pasivo del club y llevó a Maradona como DT. Hacia principios de 1998 Cruz
intentó volver a manejar el club pero culminó dejando un tendal de deudas y la
desaparición de la entidad. Hoy Mandiyú no existe.
Quilmes. En mayo de 1993 recibió una oferta para privatizar el fútbol por parte de un
grupo empresario encabezado por Pedro Pompillo y respaldado por el grupo SOCMA,
de la familia Macri. El elegido para conducir ese proyecto era Cesar Luis Menotti.
Actualmente Quilmes, en asamblea de socios, acordó cederle el concesionamiento de
su fútbol al grupo Exxel.
Deportivo Español. En 1993, dos meses después del fracasado intento en Quilmes, el
mismo grupo pretendió insetrarse en el fútbol de Español. El propósito apuntaba a
invertir 20.000.000 de dólares y llevar al equipo a Mar del Plata. El abogado del
grupo era Osvaldo Amadeo Otero y el nombre de Menotti volvió a sonar para el
cargo de director general.
Alvarado de Mar del Plata. José Aldrey Iglesias, viejo socio y frustrado aspirante a la
presidencia de Deportivo Español, quiso privatizar Alvarado con el apoyo del
intendente de esa ciudad, Mario Russak. La empresa Telemarket, con Hugo Jijkis y
Eduardo Metzger a la cabeza y con Cesar Luis Menotti como manager gerenció el
fútbol en 1994. Llegaron jugadores conocidos que no cobraron, el club nunca
emergió económicamente y hasta le cortaron la luz. 158
Deportivo Italiano: El grupo Macri intentó quedarse con el manejo del fútbol. Su
intención también era llevarlo a Mar del Plata bajo el nombre de Italmar.
Chaco For Ever de Resistencia Chaco. En julio de 1993, Jorge Yunes, presidente del
club, buscó empresas que quisieran hacerse cargo de la transformación del club en
SA con la intención de saldar las deudas. Con el aval de los socios cedió a la empresa
Sol de América SA (de la Sra. Rosa Portal) el manejo del fútbol con el compromiso
de hacerse cargo del pasivo y reforzar el plantel. Incorporó DT y jugadores, pero a
los 45 días explotó la crisis. Cuanto todos fueron a cobrar, la empresa resultó
insolvencia, quedando con una deuda de más de 200 mil dólares. Actualmente la
entidad debe 2 millones, tiene decretada la quiebra y espera el remate. 159
Atlanta y Defensa y Justicia. Excelens, empresa cuyo propietario era del ex dirigente
de Boca, Hector Martinez Sosa, se hizo cargo del fútbol profesional de ambas
entidades a fines de los `80. Entre enero de 1987 y junio de 1989, estuvo en
Defensa y Justicia, con Jorge Castelli como manager, pero ante mejores perspectivas
se fue del club de Florencio Varela y desembarcó en Atlanta. Allí logró el ascenso de
Primera B al Nacional B, pero tras esa conquista deportiva la empresa se desligó y el
club volvió a caer, económica y futbolísticamente. 160
All Boys. A fines de los años `80, recibió el apoyo de Nueva Era S.A., empresa de
Pablo Rey, hoy presidente del club.
Villa Dálmine de Campana. Fue apoyado por la empresa Siderca. Hoy sin ningún
sponsor, actúa con el nombre de Atlético Campana.
Aldosivi de Mar del Plata. Durante las temporadas 97-8 y 98-9, Jorge Solari se hizo
cargo como DT e inversor a la vez. Luego de un buen desempeño deportivo el
primer año, en el segundo se incorporó un empresario local. Pero la supuesta
ecuación que supone que a más dinero, más éxitos deportivos, no se confirmó.
Cuando los resultados no llegaron, quienes aportaron los capitales se fueron.
Atlético Mar del Plata. En febrero de 1998, Oscar Ruggeri se hizo cargo de los gastos
del fútbol: sueldo de los entrenadores, mantenimiento de las instalaciones y
provisión de ropa a todos los equipos. A cambio, maneja las futuras transferencias y
le da un porcentaje al club. 161
Villa San Carlos de Berisso. En 1996 Hugo Frontini fue técnico, presidente y se hacía
cargo de casi todos los gastos del equipo. Sin embargo, para los actuales dirigentes
no fue una buena experiencia. Aducen que se desvirtuó el sentido original del
emprendimiento: "Utilizó al club con fines comerciales por sobre los deportivos",
confesó un importante directivo actual. Frontini después fue DT de Lugano y
Sacachispas.
Dos empresarios de la zona (Banegas y Semplici) llegaron en 1998 al club. Todavía
lo están gerenciando: "Nuestra experiencia va bien porque el fútbol reactivó otras
disciplinas como el patín y el básquet. Pero este caso, en el que quienes aportan son
de la zona y además hinchas del club, no puede trasladarse a los clubes grandes en
donde se manejan intereses también grandes", dice el vicepresidente de San Carlos,
Miguel Angel Ippoliti. 163
Deportivo Merlo. El empresario Héctor Restaino se acercó al club que tenía grandes
problemas económicos, en junio de 1999 y firmó un contrato por cinco años para
manejar el fútbol. Aportó sponsors y se encargó de los contratos de los futbolistas.
Hoy es el DT, se presenta como candidato a presidente en las próximas elecciones.
Según él el gerenciamiento o la privatización del fútbol es la única salida que les
queda a muchos clubes del ascenso, sostiene que. "Si no, se van a tener que
fusionar con un equipo de Primera o ser filiales para poder sobrevivir". En Deportivo
Merlo, hoy en Primra C y candidato a ascender, el presupuesto mensual es de 18 mil
dólares, y en el caso de venta de algún jugador, el club y Restaino cobrarán distintos
porcentajes.
Inglaterra:
"Es cierto que el fútbol inglés es el más agresivo del mundo en términos comerciales
y que el Manchester United es el club más rentable del planeta. Tiene una
facturación inclusive mayor que la de los Chicago Bulls (146 millones de dólares
contra 88) aunque con menores ganancias (34 contra 50 millones de los Bulls).Pero
también es cierto, y esto no se dice, que apenas 6 de los 21 clubes ingleses tienen
hoy una mejor cotización desde que ingresaron a la Bolsa. 167
España:
El fútbol español fue tomado como sinónimo de ejemplo por la conversión de sus
clubes en sociedades anónimas. La TV (principal fuente de ingresos) paga 250
millones, o sea, cinco veces más que en la Argentina. Hubo 11.5 millones de
espectadores en el último torneo, cuatro veces más que en nuestro país. Pero
también es cierto que sus paquetes accionarios son una burla que nadie controla.
Basta con un ejemplo cercano y reciente: si la ley española establece que una
persona puede poseer sólo una acción y limita, además el ingreso del capital
extranjero ¿cómo puede explicarse entonces que Marcelo Tinelli sea el nuevo patrón
del Badajoz? 168
Es decir, el negocio del fútbol español con las SA parece tener pocos controles, con
denuncias sobre evasión impositiva, empresarios que poseen más de un club y lavado de
dinero de la mafia. 169 Por ejemplo, Antonio Asensio controla varios clubes y tuvo en sus
manos la definición del ascenso a Primera.
La crisis del modelo SAD que comenzó en 1991. El gobierno tuvo que emitir un nuevo
decreto para corregir. Hubo, además, denuncias de incentivación y sospechas de resultados
arreglados. Otro de los casos más difundidos es el de Jesús Gil y Gil acusado de falsificar
balances para que el Atlético de Madrid se convirtiera en SAD y no perdiera la categoría.
Además, la justicia lo investiga por conexiones con mafia italiana y lavado de dinero.
El ex presidente del Valencia, Fernando Roig, falsificó carnés para comprar acciones a
través de testaferros, cobró comisiones irregulares y compró jugadores de modo irregular,
entre los cuales estaba el arquero Gustavo Campagnuolo, actualmente el San Lorenzo. 170
El Dr. Sergio Quesada Rettschlag, especialista español en gestión deportiva, fue miembro
del Consejo Superior del Deporte (CSD) de España, cuando se produjo lo que se conoció
como reconversión de los clubes. "La experiencia española fue altamente positiva pero no
creo que sea trasladable a otras realidades. Por lo que me he enterado del fútbol argentino,
las condiciones son muy diferentes. Yo no me animaría a decir que se puede aplicar lo que
se hizo en España. En primer lugar, no existen en mi país más de dos clubes por ciudad. Si
en Buenos Aires hay más de 20 clubes, creo que no serían viables como SA. Por otra parte,
en España, los equipos negocian directamente sus contratos de televisión, mientras que
aquí ya están otorgados hasta el año 2014: otra dificultad para que una SA tenga éxito. Por
último, la situación de origen es muy diferente. En España los clubes habían llegado a una
deuda monstruosa con el CSD, es decir, con el Estado, mientras que aquí el Estado no es
acreedor de los clubes" 171
Italia:
Presenta un fútbol rico, son sus enormes contrataciones y contratos, con sus
empresarios mecenas, Agnelli, Berlusconi, etc. Sin embargo, "el proceso mani puliti
en Italia dejó al desnudo sospechas más que fundadas de lavado de dinero en varias
sociedades, al constatarse que venían perdiendo dinero. Cuando se propuso un
viraje al modelo inglés, a fin de que cotizaran en Bolsa, fueron muy pocos los
equipos que pudieron presentar los últimos tres balances. El modelo de mecenazgo
italiano puso en evidencia, además, lo que muchos empresarios buscaban en el
fútbol eran beneficios políticos y vidriera para realizar otros negocios. 172
Brasil:
Los movimientos del capital en el fútbol son muy recientes y no permiten extraer
conclusiones sobre su evolución.
A partir de las modificaciones incluidas en la ley Pelé, aparecen una serie de
iniciativas. La empresa Hicks se asocio con dos clubes, el Corinthians y el Cruzeiro; al
Atlético Mineiro y al Santos llegó con consorcio CIE.Octagon/Koch Tavares; al Vasco
da Gama el Bank of América; al Flamengo la suiza ISL; como se ve aparecen casos
en los que un empresa está asociada a varios clubes. La llegada de estos capitales
está sustentada en la prospección respecto de la amplitud de un mercado sin
explotar. En el caso del Corinthians y el Cruzeiro la empresa invierte unos cien
millones, construirá nuevo estadio, contratará algunos astros, explotará toda una
nueva línea de merchandising. Se supone que estos movimientos también producirá
una burbuja en el nivel de los pases y contratos que ya tiene cierta influencia en el
fútbol argentino. 173
Las realidades del fútbol y naturalmente, de los clubes, reconocen toda un área de
temas que pueden asociarse a la difícil convivencia entre intereses, los negocios y las
economías de los clubes por un lado, y la pasión, la tradición asociada a ella que liga al
fútbol con el hinchismo.
Según Hirshman, "la pasión por ganar dinero se ha legitimado culturalmente: estamos ya
en pleno capitalismo; las pasiones han dejado de estar divorciadas de los intereses". Si esta
batalla ha sido por fin ganada en toda la línea, las SA llegarán al fútbol. 174
Ante el cambio de tamaño y -en cierta medida de la naturaleza- del negocio, muchos
sostienen que se ha producido cierta inadecuación de muchos dirigentes y una rápida
adaptación entre los menos probos de ellos. 175
El mercado del fútbol parece seguir la lógica del capitalismo argentino:
subcontrataciones, terciarización, en un contexto de fragmentación del mercado de trabajo.
Esto se puede ver en la realidad de los jugadores que juegan en un club pero cuyo pase
pertenece a otro, su propiedad que suele estar dividido entre varios que generalmente
pocos conocen realmente. 176
Estas novedades chocan con cierta tradición cristalizada en el sentido común futbolero -
en crisis- que se ha negado a asociar la pasión con los intereses. Tradicionalmente los
hinchas aparecían en lucha contra las necesidades del mercado y hemos visto algunos
ejemplos en los capítulos precedentes.
Pero esto a su vez ha entrado en crisis. Se ha ido modificando, por ejemplo cuando los
hinchas actualmente tienden a evaluar a sus equipos y a sus jugadores a través de su valor
en el mercado de pases ("tenemos a este que vale tanto y si lo vendemos ...o las frases
que sostienen cosas como "fulano nos hace perder tantos millones de dólares") 177 Es decir,
cierta intromisión de los intereses en la tradición pasional.
Sin embargo, bien podría pensarse que con la presencia de las SA el negocio tal vez se
reestructuraría y las empresas podrían retener a quienes son, en buena medida, parte del
gran imán de pasión. Es decir, este fútbol comprime o expulsa a la pasión de su cauce, de
su objeto. ¿Por qué no pensar que con las SA, el espectáculo renueve la esperanza de
presentar en plenitud a la pasión -tal vez remodelada- sus máximos objetos del deseo?.
En adelante, intentaremos introducirnos, ver más de cerca, algunas de las caras que
presenta la pasión y su relación con la dirección de los asuntos del fútbol y su negocio. 179
Personajes como Havelange o Avila han percibido muy bien el cruce entre ambas caras
del fenómeno: la pasión -como fundamento motivante del espectáculo del fútbol- activando
el enorme negocio mundial. Esta pasión fundante tiene como sustento dos ejes
yuxtapuestos: por un lado, el deseo del éxito, por el otro el estilo, o sea el modo en el que
se participa de la competencia y, eventualmente, se obtiene el triunfo.
La convivencia ha sido notada por los grandes personajes del mundo del fútbol: "El
fútbol es un negocio seguro, porque la pasión no decae nunca" dijo Joao Havelange. 180 Por
su lado, ante la pregunta acerca de la envergadura del negocio mundial de fútbol, sostiene
Avila: "Es muy difícil calificarlo y clasificarlo. Pero sí le digo que el fútbol es el deporte
número uno en casi todo el mundo por que está movido, básicamente, por la pasión. Mire
lo que está pasando en Asia, en Africa... el mercado futbolístico se ensancha cada vez más.
Por consiguiente, sí es un muy buen negocio." 181
Hasta aquí se ve la percepción de la fuerte ligazón entre el negocio y la pasión del
hincha como consumidor, como público del espectáculo. Sin embargo, quienes promueven
el modelo SA perciben que sus deseos están obstaculizados por la presencia de otro
fenómeno.
Así, la pasión suele ser vista por los pro-SA como obstáculo para SA, debido a que la
pasión (no los principios) de los dirigentes impediría la llegada del cambio. 182
El problema radicaría que en los clubes todo sería "política" mientras que para ser
eficientes debería haber management. Casi todo es consenso, rivalidades, jugar con
sentimientos, fidelidades, confraternizaciones, odios. Sería una barrera contra la inclusión
de los negocios en el fútbol. La pasión suele asociarse a los avatares más negativos de la
vida política interna de los clubes, y eso, naturalmente suele ser obstáculo para gestiones
eficientes. El problema es el tipo de vida política interna que tienen los clubes y que
produciría ese efecto nocivo.
Es decir, emerge una segunda faceta adherida a la pasión, la que se puede asociar al
deseo de gobernar, de direccionalizar el logro de la pasión fundante. Es la pasión por
gobernar la política del fútbol que se da en cada institución, que suele ser el pivote sobre el
cual gira la vida de la mayoría de los clubes con fútbol profesional.
"Si la casi totalidad de los clubes de fútbol están muy endeudados o quebrados, aunque
uno sólo lo admitió, es absurdo pensar que todos los dirigentes son ineptos o corruptos.
Falla el sistema, que consiste en esto: se gana una elección y se asume un club
semiquebrado por tres o cuatro años. Durante los dos primeros se trata de administrarlo
con corrección de acuerdo al ingreso. En el tercero, dice el dirigente: "Si sigo austero, soy
impopular y pierdo la próxima elección. Mejor gasto, contrato y mejoro futbolísticamente al
club. Si así gano, veremos qué hago con la deuda. Y si pierdo el problema será de otro". Y
así sucesivamente.
Creo que todas las empresas, los bancos, instituciones y hasta recaudaciones del Estado
pueden ser privatizadas y así funcionarían mejor. No conozco "hinchas" del Banco Nación
(salvo en el rugby) ni de las cajas de jubilaciones, ni de la DGI. Puede haber quienes vivan
más cómodos si los organismos son estatales pero no "hinchas". Pero cuando hay
sentimientos sociales de por medio, no privatizaría, como no lo hace ninguna iglesia. No me
gustaría que viniera un Tinelli español a comprarse Boca o Lanús. Pero tampoco la situación
de endeudamiento de los clubes puede seguir así. Me gusta la privatización de la
administración aunque es muy difícil en la práctica. Puede intentarse que un grupo
empresario maneje contratos, publicidad e ingresos en general y le diga a los dirigentes -
elegidos democráticamente- "hay tanto para gastar".
Es difícil porque el que administra, con riesgo patrimonial asumido, tratará de resguardar
su lógica ganancia y no enfrenta elecciones. Pero tampoco hará desquicios financieros ni el
fútbol dará pie a los dirigentes aventureros que van a los clubes a buscar fama o satisfacer
un hobby. Debería intentarse esto antes de ir más allá" 183
Es decir, ¿qué pasión es la que está en juego aquí? ¿se trata de la pasión de los hinchas?
que es el fundamento del espectáculo; ¿qué sucede con el hincha-dirigente apegado a los
lazos políticos articulados en la tradición del formato AC? En este sentido contestaba
Grondona a la pregunta:
En la medida en que los que quieren las SA sean socios, se interesen por la vida
política de su club y sean elegidos por la masa societaria, entonces se podrá ir dando
esta situación. De otra manera no lo veo posible. Porque la gente del fútbol tiene la
pasión encima. En cambió, si se transforman en SA aparecerá gente con la mente
puesta en el signo pesos. Nada más." 184
Para Grondona la pasión de los dirigentes los hace actuar con una lógica pasional
diferente a la lógica de los pesos. La pasión en los dirigentes se vincula a la del hincha
sumada a la pasión por dirigir la institución, siendo hincha. Es decir, están actuando dos
pasiones: la del hincha del común, que presiona por éxitos deportivos, por la retención del
ídolo, y la del dirigente por participar y dirigir una AC, que además comparte la anterior.
Esta doble veta permite comenzar a tratar la hipótesis que sostiene que las SA serían la
"privatización de la pasión". Tal vez provocaría una transformación del hinchismo del
común, tal vez ante una CD desdibujada, sólo se gritaría contra jugadores y los DT,
eliminada la cuota de participación simbólica de la hinchada en la formación de la
orientación dirigencial. Es decir, creemos que las SA funcionarían muy bien montándose
sobre la pasión del hincha.
Sí podría agregarse que la presencia omnímoda de las grandes empresas futbolísticas,
con el dominio de los grupos mediáticos, en el contexto de las sociedades actuales,
produzcan modificaciones tendientes a transformar el espectáculo futbolístico en un show,
un producto diseñado para ser consumido por un publico domesticado en el estadio y
obviamente, por el público televisivo.
El hinchismo pertenece a un universo de las relaciones sociales simbólicas que comparte
sólo algunas variables con la forma que adquieren las organizaciones que participan del
espectáculo deportivo moderno. Esa pasión aparecerá mientras aparezca el propio
espectáculo, con AC o SA. Es decir, mientras exista el espectáculo del fútbol -tal como lo
conocemos- existirá el público-hincha.
Es decir, una lógica dirigencial y administrativa que no apunta a la ganancia sino a la
gestión de una organización fuertemente vinculada a su comunidad. Una institución que
maneja millones no dirigida por una lógica empresaria. Esto es percibido por muchos como
una situación paradójica y anacrónica. Una realidad que vincula a los clubes con las AC y
que la define como único formato posible para cumplir el papel de constructor de redes
sociales básicos. Una tradición pasional que parece fuera del tiempo.
La forma de hacer política en Lanús, por ejemplo, opaca la versión que da Ramos de la
vida política en los clubes, aunque sea una excepción. Existe la otra raíz del vínculo
pasional-dirigencial, la que se asocia a la naturaleza imperiosa del éxito deportivo
(especialmente en los clubes grandes).
Así, la tensión entre los dirigentes de fútbol parece estar puesta entre una pasión
futbolística por gobernar las cosas del fútbol asociada al éxito deportivo, y otra pasión
puesta en la vida asociativa, en los objetivos de la asociación puestos en la actividad
comunitaria (deportiva o no).
Por eso Melconian dice que con las SA lo pasional que está centrado en que la pelota
entre en el arco, se mantendrá. 185 Para el agente de bolsa no entra en su horizonte mental
que pueda existir una pasión diferente, como la del dirigente que lucha por su comunidad a
través del club.
Finalmente estamos ante una crisis, una lucha en la que se oponen la lógica del
asociacionismo, con un modelo de sociedad ciudadana, con la del negocio (pasión e
interés), con un modelo de sociedad con gobierno absoluto del mercado, en la que existen
sólo mercancías dialogando entre sí. La última está triunfando en toda la línea. Dentro de
esta transformación cultural se inscribe el problema de los modelos de éxito que están en
juego, así como la destrucción de las redes sociales que giran en torno a algunos de los
clubes.
La lógica del club social y deportivo amateur es a su vez diferente de la que mueve al
club de fútbol inmerso en el negocio. Este último vive desde hace muchas décadas
realidades contrastantes.
Así, de la oposición entre intereses y pasión nos detuvimos en el intento de despejar los
ingredientes de esa presencia pasional por el fútbol. Por un lado, la pasión del hincha -que
creemos sobrevivirá a la presunta aparición de las SA. Por otro, la pasión del dirigente-
hincha. Esta pasión también puede mostrar dos o más costados, la primaria común al
hincha, que pivotea sobre la búsqueda del éxito deportivo -entre otras cosas, con sus
consecuencias indeseables o no. Pero también (y sumada a la anterior, tal vez atenuando
sus efectos negativos) existe en algunos dirigentes la pasión por el trabajo comunitario.
El dirigente hincha movido sólo por la búsqueda del triunfo electoral en el supuesto de
que su gestión devendrá en el triunfo deportivo, no podría -en principio- presentar
obstáculos a la terciarización, aunque sí a la aparición de SA. La lógica de la pasión del
dirigente comunitarista es muy diferente. Ella sólo puede existir en una AC en pleno
contacto con su comunidad y la convivencia con la lógica empresarial parece, en principio,
imposible.
¿Qué es lo que está en juego en toda esta situación; si es que hay algo en juego?
Está en juego una realidad: la de algunos clubes que han constituido ese capital
social, cultural y político del que hemos hablado.
Está en juego una posibilidad, una potencialidad, que se puede frustrar: los clubes
como AC han sido, son y serán una puerta abierta a la participación. Si la
introducción del capital privado implica un riesgo para su existencia, lo que queda de
las redes sociales básicas se verían nuevamente en peligro y, para el futuro de una
sociedad civil en reconstrucción, sería un espacio social obturado.
En realidad, estos dos elementos no nacieron unidos. En los clubes nacidos desde los
sectores populares, la mayoría de los actuales, eran sólo clubes de fútbol al nacer y
lentamente fueron convirtiéndose en clubes sociales y deportivos. Ahora se pone en
cuestión esa totalidad. Así, desde este punto de vista, de prosperar la introducción
del mundo empresario, los clubes vivirían una ruptura interna: la pasión futbolera
(que probablemente no morirá, aunque sufrirá cambios) gobernada por empresarios
y escindida de una militancia social devaluada, disociada del fútbol, con el riesgo de
perder tal vez el motor convocante más importante, sumado al riesgo de bancarrota
por deserción de los capitales y el peligro de desaparición de sus actuales activos.
Un hinchismo con SA será tal vez más controlable, más diáfano, más demostrable,
adolescnete, modelado con el merchandising, pero menos conectado con la vida del
club. En realidad el hipercriticismo paralizante también tiene esa cara, y es una
tendencia muy arraigada -sería interesante aunque enormemente difícil reconstruir la
historia de esa postura poco edificante.
Además, podría ser una vía que podría frenar el necesario proceso de capacitación
para dirigentes de las AC. Es decir, el aporte de conocimientos llegaría de la mano de
los empresarios, mientras que los dirigentes tendrían pocos incentivos para
capacitarse en la gestión dirigencial.
Una pregunta interesante ha sido hecha en algunos medios: ¿quién querría invertir
en un fútbol devaluado?. Ante la inquietud de Avila, en el sentido de que para que
vengan los capitales habría que reestructurar el fútbol (con plazas fijas en el interior
y pocos equipos de la capital y el gran Buenos Aires), surge la pregunta acerca de
cómo evolucionará el mercado del espectáculo y el negocio.
Además, ¿los controles los harán el Estado o la propia AFA? Un peligro sería la
aparición de las SAD como "blanqueo de la perversión" del negocio del fútbol actual -
caso Gil y Gil. Pero sería continuidad, homologación de lo peor y más oscuro de lo
que existe hoy, en concurrencia con la tendencia del capital actual a difuminar las
relaciones de propiedad. 191
Se volvería a presentar la oposición actual, con las AC, entre la pasión por el éxito y
la retención del astro, y la ganancia devenida de su venta al exterior.
Uno de los temas vinculados a la crisis de los clubes se vincula a la reconstrucción
del capital social. Una tradición que fue modelo de deportividad, de excelencia,
aunque a veces asociado a ciertas prácticas autoritarias o caudillísticas o verticales
en los que los hábitos de participación en las asociaciones fueron poco comunes.
Además, están los problemas vinculados con el hinchismo: se apostará también aquí
todo para intentar ganar.
¿Los dirigentes se plantean modificar los cambios de la oferta desde los clubes hacia
la sociedad o sólo se trata de seguir la corriente inercial que de hecho desalienta la
participación?
Los clubes como AC tienen enorme potencialidad como para reconstruir el capital
social contenido en ellos. La base podría ser un ejercicio de limpieza y reconstrucción
de las prácticas políticas internas y nuevos lazos con la comunidad, apuntando a
reconstruir relaciones horizontales, solidarias, asociativas. Para eso se necesita hacer
frente a un modelo cultural y a una lógica del éxito que ha ganado mucho espacio en
la sociedad: un modelo que privilegia un objetivo propio, el triunfo por sobre todo, y
un individualismo exacerbado.
¿Cómo valuar la historia del capital simbólico construido desde principios de siglo,
que ha derivado en construcción de capital económico y social de los clubes, en el
proceso de transformación en SA?.
¿Qué interés puede y debe tener el Estado actualmente existente, respecto de la vida
asociativa que proponen o podrían proponer los clubes?
Si, tal como se ha repetido, los clubes han sido factores trascendentes de desarrollo
comunitario y si el Estado pretende remozar las redes sociales básicas, resulta notorio que
debe apoyar de alguna manera esa acción social de las instituciones. 194 Por ejemplo podría,
en principio, estudiar la verdadera situación de los clubes, tipificándolos según diferentes
criterios y luego actuar según la función social que ellos cumplen.
El Estado debe actuar para que no se cierren los clubes. Puede apoyarlos de diferentes
maneras: pagar un porcentaje de los que gastan en servicios, si las escuelas usan las
instalaciones, dar beneficios a esos clubes, organizar eventos y situaciones con esos clubes
para atraer a la gente, a los vecinos para que participen. El Estado puede ayudar a los
clubes a que no necesiten de subsidios para sobrevivir incentivando la capacitación, y la
reflexión de los dirigentes para generar ofertas viables.
9. Fuentes y bibliografía
Fuentes
Diarios:
Clarín
Crónica
La Nación
Olé
Revistas:
Noticias
Tres Puntos
Siglo XXI
Línea
El Deporte
Página 30
Mística.
Entrevistas:
Dr E. Chebel, Presidente del Club Atlético Lanús,
Dr. Ricardo Nissen,
Dr. Guillermo Ragazzi,
ex diputada Lic. Elsa Fernandez Combés.
Proyectos de ley del deporte: Galmarini, Scioli, Alvarez Garcia, Fernandez Combés.
Anteproyecto de ley de Sociedades Anónimas Deportivas (Dres. De Bianchetti,
Martorell, Nissen, Porcelli, Ragazzi)
García Ferrando Manuel: "Aspectos sociales del deporte", Ed. Alianza, Madrid, 1990.
Notas:
10. Para "capital cultural, simbólico", Bourdieu P. "La distinción", Ed Taurus, España,
1998; "Cosas dichas", Ed. Gedisa, Barcelona, 1993.
11. Ver Frydenberg Julio: "Prácticas y valores en el proceso de popularización del fútbol,
Buenos Aires 1900-1915" en Revista de Historia Entrepasados Nº 12, Bs. As, 1997.
"Huelga y reestructuración del espectáculo: un singular juego en el nacimiento del
fútbol profesional argentino", mimeo.
Scher y Palomino: "Fútbol pasión de multitudes y de elites", CISEA, Bs. As, 1988.
12. Uno de los efectos -tal vez no el más importante, pero sí el más resonante- de la
profesionalización y el consecuente crecimiento del espectáculo y sus negocios fue el
asombro causado en la opinión pública de todos los tiempos por las fortunas
invertidas por los clubes en las compras y ventas de pases de jugadores. Por
ejemplo, en los años '30, la compra de cracks como Peucelle, Bernabé Ferreyra, etc.
También forman parte de la mitología del fútbol nacional los casos como el de Sívori,
que River vendió a Italia en 300.000 dólares y construyó, con ese dinero, la tribuna
cerró la herradura del Monumental. A mediados de los `60 sorprendió la compra de
Roberto Matosas por 33 millones de pesos moneda nacional. En otro orden, en la
década del setenta la AFA cobraba por derechos de televisación de la selección
30.000 dolares por partido. Ahora cobra 800.000.
13.Mística, 24/7/99
17.Clarín 23/10/93 p. 47
19.Noticias 1/8/98
20.Crónica, 1/7/99
21.Por ejemplo: Macri entrevistado por el periodista Fernando Niembro; Miele opinando;
Hugo Santilli, ex funcionario menemista y ex presidente de River, (apareciendo como
candidato a futuro presidente de River) entrevistado por el periodista Ernesto
Cherquis Bialo; opinaban también la franja de dirigentes que no tienen una posición
de principios como Héctor Gondona (revista Noticias); Araujo (TyC) -editorializó el
programa de televisión “Fútbol de Primera”, con argumentos a favor de las SA;
diferentes agentes del gobierno se pronunciaron en el mismo sentido (Menem,
Granillo, Galmarini, Scioli, Duhalde)
22.En aquella oportunidad dijo Macri. "Es increíble que una sociedad que ha
transformado todas sus estructuras, en un país donde parecía imposible que se
privatizara y desregulara el mercado petrolero, pero que se hizo mediante una ley, y
que funciona bien, el fútbol siga cometiendo los mismos errores de siempre". Tres
Puntos, 26/8/99.
27. Entre los juristas: el Dr. Guillermo Ragazzi y el Dr. Ricardo Nissen. Entre los agentes
de bolsa: Carlos Melconian.
28. Según versiones, la empresa PSN (Panamerican Sports Network) propiedad del fondo
de inversión Hicks, Muse, Tate & Furst, estaría interesada en "gerenciar" el fútbol
profesional de Racing. El fondo administra actualmente el fútbol del Crizeiro y del
Corinthians. Su área de comunicaciones tiene participación en Torneos-Traffic,
Cablevisión y El Sitio, entre otros medios. Además, PSN tiene derechos de difusión
de los torneos Mercosur, el fútbol italiano, las eliminatorias sudamericanas y
europeas, y las competencias de Formula 1. La empresa Torneos-Traffic, que es la
unión entre TyC Argentina y la Traffic brasileña, tiene los derechos por la televisación
de la Copa Libertadores del 2000. Clarín, 16/2/00, p. 49
29. "El diputado radical Normando Alvarez García (UCR, Jujuy) está convencido de que
“la existencia de cuatro proyectos por parte del oficialismo marca una intención
política de rapiña muy clara. Pretenden entregarles los clubes a los grandes grupos
económicos con intereses en el fútbol, apropiándose del aporte de varias
generaciones de argentinos". Mística, 22/8/98
40.En febrero del 2000, una de las últimas propuestas para solucionar la crisis de
Racing es la del llamado "gerenciamiento". Según versiones no confirmadas, cuando
Grondona presentó el proyecto dentro de la AFA, se levantaron las voces opositoras
de E. Chebel y otros (pocos). Esto hizo que la iniciativa se demorara para su
"estudio" y tratamiento. Olé 3/2/00, y versiones difundidas en el programa
"Competencia" de Radio Continental. Unos días después, el 7 de marzo se apobaba
la novedad.
41.Crónica, 1/7/99
43.ídem
51.Mística, 22/8/98
52.Crónica, 1/7/99
54.Carlos Heller (ex vicepresidente del C.A. Boca Jrs.) Tres Puntos, 26/8/99
56.Ricardo Petracca (ex presidente del C.A. Vélez Sarsfield) Clarín, 23/10/93
57.ídem
58.Mauricio Macri (presidente del C.A. Boca Juniors) Revista La Nación 22/9/96
63. Fernando Miele (presidente del C. A. San Lorenzo de Almagro) Mística, 22/8/98
66. Tres Puntos, 26/8/99. En la entrevista con la ex diputada F. Combes, la idea básica
que expresaba era la siguiente: el enemigo número uno son las estructuras
corporativas de la AFA-Grondona; el proyecto de ley del deporte que contempla el
franquiciado del fútbol profesional, podría aportar en ese sentido a desactivar, a
blanquear a la AFA.
69. El Gráfico, 7/10/98. Como se ve Miele y los Grondona han dicho cualquier cosa en
cualquier momento. Dirigentes como Hector Grondona y Fernando Miele (que logró
instaurar en los estatutos de San Lorenzo de Almagro que nadie pudiera ver los
libros contables ni siquiera los socios) digan que no les parece mal las SA en el
fútbol, pero no para los suyos, implica que hablan desde la acción de un tipo de
actividad poco transparente como la que ellos llevan en sus respectivos clubes.
Suelen decir que sería una solución para los clubes chicos con problemas
económicos. Pero ¿por qué no sería solución para ellos? tal vez por que
imposibilitaría el manejo discrecional que ellos hacen de los fondos de sus clubes.
80.Crónica, 1/7/99
84.Existen artículos al respecto en La Ley del Dr. Gil Domínguez y del Dr. Ricardo
Nissen. Además se puede ver el tema en Ragazzi G.E. op. cit.
86.Tres Puntos 26/8/99. Algunas objeciones a ese tipo de iniciativas han sido señaladas
por el diputado radical Jorge Benedetti: "Hay preguntas que Galmarini y Granillo
nunca pudieron contestar. Por ejemplo, ¿cuál va a ser el capital accionario del socio
de un club que pagó su cuota durante 20 años? Por otra parte, me parece una
barbaridad inducir la entrega de los clubes desde el Congreso. La situación de
España fue muy diferente y, entre otras cosas, responde a otra idiosincrasia. Si
alguien pasa por la cancha del Manchester United, el gran equipo que cotiza en
bolsa, un lunes a la tarde, se va a encontrar con un edificio cerrado. Si recorre Vélez
o San Lorenzo, verá pibes jugando a la pelota, gimnasios abarrotados, chicos de
colegios haciendo gimnasia..." Mística, 22/8/98
87.Club A. Lanús, J.E. Chebel, "Dictamen sobre Anteproyecto de ley de SAD". s/f.
88.Proyecto de ley, p. 39
89.El texto dice que los clubes que pasarían al sistema nuevo tienen que tener una
situación sólida, la pregunta que aparece es ¿para qué quieren capitales si su
situación es sólida?. P. 52.
90.Tal como ya se ha dicho, la línea analítica seguida fue sugerida por el Lic. en
Sociología Hector Palomino. Ver Palomino Héctor, op. cit.
96. Putnam R. "Jugar al Bowling sólo: el deterioro del capital social Norteamericano" Una
entrevista a R. Putnam. en Lecturas: Educación Física y Deporte, Revista digital,
Nº16, octubre 1999. En EEUU, existe una arraigada tradición de vida cívica dentro
del universo de la sociedad civil ya detectada por Tocqueville. Dice Putnam que ese
tipo de "capital social tradicional" que remite a la vida cívica de las clases medias de
las pequeñas comunidades de los años `50, se han ido modificando con el tiempo
hasta llegar a un cierto deterioro actual.
99. Ver Gramsci. Ver Wolf Mauro "Sociologías de la vida cotidiana" E. Cátedra, Madrid,
1988.
100. Tres Puntos, 13/5/98. Algunos de los dirigentes de fútbol perciben estos
perfiles que poseen real o potencialmente los clubes: "La lucha contra la conversión
de los clubes en SA es la defensa de un espacio social. No la defensa de un negocio",
ha dicho Carlos Heller. Tres Puntos, 26/8/99. Chebel sostiene que los clubes de
fútbol no son sólo para ganar dinero. Si se utilizara sólo el criterio mercantilista sería
el principio del fin. Los clubes deben ganar dinero, pero para aplicarlo a un plan con
su comunidad.
101. Dijo Slutsky: "¿Qué empresa argentina ha durado cien años? Ninguna. Los
clubes, con todos sus lastres, son uno de los pocos espacios de aire libre que quedan
en este mundo globalizado. Por eso hay que resistir. En un momento en que las
quiebras de las PYMES son moneda corriente, permitir que los clubes se transformen
en empresas es empujarlos a la desaparición". Mística, 22/8/98.
112. Al igual que muchos de los temas que se tocan en este apartado éste ítem
merecería de un proyecto y una investigación aparte. En este sentido, podrían
tenerse en cuenta tres temas: 1. Evolución, actualidad y problemas del mercado del
espectáculo deportivo. 2. Los estilo del quehacer político dentro de las instituciones
deportivas. 3. La política y el deporte. Sus conexiones. (Una introducción a este
último problema se tratará en el próximo informe).
113. Por ejemplo TyC factura entre 250 y 300 millones de dólares por año, y paga
a la AFA 55 millones por derechos. Tres Puntos, 25/8/99.
116. Avila desea que existan plazas fijas y que no dependan de condicionamientos
deportivos.
117. Opiniones de Avila extractadas de Noticias, 1/8/98. Los dichos de Avila hacen
pensar que si en una industria devaluada, su empresa rinde enormes dividendos, es
por su estratégica posición de monopólica.
118. Parece liviano adjudicar la merma en las entradas sólo a razones extra
futbolísticas. ¿Acaso en Europa no se modificaron los hábitos de consumo?, allí el
número de asistentes ha crecido.
119. Este tema también podría ser objeto de una investigación aparte.
138. "(...) Mauricio Macri, en cuatro años como presidente de Boca él pasó a ser
más importante y popular que su padre, que hace treinta años es un poderoso
empresario" dice Raúl Gamez irónicamente sobre las intenciones de Macri, Tres
Puntos 26/8/99.
144. Una interesante entrevista a Macri: "-¿Por qué cosas tuvo que pagar derecho
de piso en el ambiente del fútbol? ¿Por ser nuevo o por llegar con un poder
económico muy fuerte?. -No creo haber pagado por nada, pero sí sentí que me
tenían desconfianza. Proponer cambios no genera simpatías entre quienes quieren
que todo siga igual. Pero el ambiente del fútbol se está modificando. Se va
arrimando gente nueva y esto genera un clima más propicio para que las cosas
cambien.
-Si los nuevos buscan cambios es porque hay estructuras obsoletas... -Sí. Hay mucha
disparidad en los métodos de trabajo. Algunos clubes están muy atrasados,
desorganizados. Acá hay ingresos muy grandes y en el medio, dirigentes amateurs
que entran al club a las siete de la tarde. Y seguro que en sus trabajos no manejan
tantos ceros como en los contratos del fútbol. Eso genera convocatorias de
acreedores, deudas, desmanejo, desorden...
-¿Ese es un debate que falta en el fútbol? -Sí: cuál debe ser el rol del dirigente y cuál
el de los clubes.
-¿Y cuáles serían las bases? -Copiar lo hecho en Europa.
-Donde siempre salen campeones los mismos... -Pero es obvio. Si hay alternancia, es
todo más romántico, más lindo... es como Heidi. Pero si los equipos grandes no
ganan mucho más que los chicos, se muere el tema. Si la gente la tienen los
grandes, si la AFA y la TV giran alrededor de los grandes, no podemos forzar la
máquina permanentemente sacándole recursos al grande para dárselos al chico,
porque así terminamos matando al fútbol. El fútbol argentino, en el reparto de los
ingresos es el más generoso del mundo." Mística, 31/10/98
153. Esto remite al voto censitario frecuente en los sistemas electorales del siglo
XIX.
155. En las entrevistas los Dres. Nissen y Ragazzi no negaron la posibilidad de que
aparezca toda esta serie de problemas.
167. Las cifras de los Chicago Bulls se corresponden con su mejor momento
deportivo y no con el de 1999-2000. Ezequiel Fernández Moores en Tres Puntos
26/8/98.
175. Por ejemplo, el periodista que hace las veces de vocero de la empresa TyC
tanto en el programa de TV "Fútbol de Primera" como en el de radio en la emisora
La Red, ha formulado declaraciones en este sentido durante todo 1999.
179. Naturalmente el tema tratado aquí es sólo una primera aproximación a lo que
podría ser una investigación del fenómeno de pasión en el fútbol en los territorios de
la psicología social y el análisis cultural.
182. Ante la pregunta hecha sobre las causas de la votación contra las SA en la
AFA, hacia fines de 1999, Grondona respondía: "No se puede decir alegremente que
como se hizo en un lado se puede hacer acá también. Acá los clubes históricamente
cumplieron funciones sociales que el Estado no pudo cumplir muchas veces. Y esa
tradición no se puede abandonar de la noche a la mañana". Tres Puntos, 26/8/99.
186. "Se puede ser público, comunitario y ser eficiente, crecer, prestar servicios a
la comunidad de carácter invalorable y a pesar de todo fomentar la integración
social, la alta competencia deportiva y desarrollar actividades culturales" E. Chebel
en "Declaración del CA Lanús", s/f.
187. Según Chebel los "dirigentes zonzos, solidarios, ingenuos, locos, soñadores,
bohemios, pícaros, etc., pero en fin, últimos identificables de especies en extinción
que simplemente aman a su club, a su gente, a su pueblo". En "El principio del fin",
Declaración del CA Lanús, E. Chebel, s/f.
189. Ver Bourdieu P. en Cosas Dichas, Gedisa, Barcelona 1993. Esta situación
tiende a modificar las condiciones en las que se desarrolla el propio deporte. Cuanto
más lejana y esotérica la práctica de los jugadores, más espectacularidad necesitan
los espectadores para sentirse conmovidos.
194. Resulta interesante tener en cuenta que sólo Heller y Chebel son los únicos
dirigentes que han mencionado que el Estado tiene un papel que cumplir en el
problema de los clubes como AC. Dijo Chebel: "Hay que cambiar, no caben dudas,
pero no digo profesionalizar el fútbol. Se puede ser eficiente de las dos maneras,
pero lo fundamental es lograr redefinir el rol del Estado en políticas deportivas". La
Nación, 1/7/99.