La Máquina
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La Máquina
INTRO
El Club Atlético River Plate nació el Día de la Patria del año 1901. Durante sus primeras décadas
ganó varios títulos entre los que se destacan cinco ligas, dos Copas Aldao y tres copas
nacionales. Sin embargo, no fue hasta los años 40 cuando tuvo su primer gran explosión.
La Máquina es el apelativo del equipo de River que ganó 10 títulos oficiales durante esta
gloriosa década, comúnmente considerado por la prensa especializada como el mejor del
mundo en su momento, uno de los más notorios en la historia del fútbol Mundial y el mejor
del fútbol Argentino.
Se recuerda en particular, de aquel equipo, a la delantera compuesta por Juan Carlos Muñoz,
José Manuel Moreno, Adolfo Pedernera, Ángel Labruna y Félix Loustau, aunque también
fueron normalmente titulares en distintas etapas Aristóbulo Deambrossi, Carlos Peucelle,
Alberto Gallo y Renato Cesarini, además de producirse en ese equipo los debuts de unos
jóvenes Alfredo Di Stéfano y Amadeo Carrizo.
Como nombramos anteriormente, la clave del equipo estaba en el ataque. Solían formar con
una, hoy impensada, 2-3-5 pero que en su momento era muy usada alrededor del mundo. El
esquema de los cinco delanteros de La Máquina era conocido por “raíz cuadrada” debido a
que asemejaba a este símbolo matemático en su forma.
Pese a que era conocida por su hinchada como “Los caballeros de la angustia” porque ganaban
muchos partidos por la mínima diferencia, el mote de la máquina nace por primera vez cuando
el periodista Borocotó así los denomina para calificar el rendimiento del equipo luego de la
victoria 6-2 ante Chacarita en 1942. Sin embargo, se reconoce como fecha de nacimiento de
aquel equipo el 21 de septiembre de 1941, cuando el técnico Cesarini decide ubicar al wing
izquierdo Pedernera en el centro del ataque, quien a partir de la goleada de ese día ante
Independiente comenzaría a ser el líder y conductor del equipo.
Si bien la base de este equipo perduró hasta 1947 inclusive, se le llama “La Máquina” al
período en que Pedernera jugó como centrodelantero atrasado entre 1941 y 1946 antes de
pasar a Atlanta.
La posesión del balón y el cambio de posiciones serían utilizados como una constante en un
equipo que comenzaba su juego en los centrales Ferreyra y Vaghi y giraba alrededor del
volante central Rodolfi. Por izquierda Ramos y por derecha Yácono eran los acompañantes del
anteriormente nombrado en la mitad de la cancha, ellos se encargaban de contener a los
punteros (o wines como se les llamaba en ese entonces) del equipo rival, en marcas zonales
pero férreas.
Si por algo se magnificó aquel conjunto además de por el espectáculo y la calidad de sus
futbolistas, fue por la movilidad de los mismos y es que los defensas rivales no sabían cómo
contrarrestar a un equipo con tanta movilidad en sus posiciones, de repente el wing derecho
pasaba al izquierdo o Pedernera dejaba su sitio a Moreno y viceversa para sorprender y
terminar penetrando al rival. En definitiva, un equipo que jugaba de memoria y la tocaba de
forma mágica. Por ello muchos consideran a aquel conjunto como uno de los antecesores del
fútbol practicado por la “Naranja Mecánica”. Equipo del que hablaremos en un próximo video.
El año más glorioso de La Máquina fue en 1941, curiosamente antes de ser compuesta por sus
cinco delanteros históricos, cuando logró conquistar todos los títulos en juego: La Primera
División de Argentina, la Copa Escobar, la Copa Ibarguren y la Copa Aldao venciendo a Nacional
de Montevideo. Al año siguiente irrumpe como titular Félix Loustau en lugar de Deambrossi,
conformándose así la delantera más famosa, y River Plate repite el torneo Argentino,
coronándose campeón, así como también en la Copa Ibarguren. Sin el Charro Moreno, quien
emigró a México, volvería a ganar el torneo argentino y la Copa Aldao en 1945, esta vez ante
Peñarol.
Ya en 1947 “La Máquina” había quedado para la historia como la mejor delantera del fútbol
argentino y de la misma solo quedaban Moreno, Loustau y Labruna, que dejaron en esa
temporada otra delantera para la historia, la formada por: Reyes, Moreno, Di Stéfano, Labruna
y Loustau. Todo ello en una temporada en la que Alfredo Di Stéfano anotó 27 goles. Sin
embargo, el estilo de juego había cambiado a uno más directo y veloz, con Moreno como
lanzador alimentando el sistema de "doble punta de lanza" conformado por Di Stéfano y
Labruna. En este año volvieron a ganar el doblete Torneo-Copa Aldao
Era tal la magnitud de aquel equipo que Ernesto Lazzatti, medio centro de Boca y por entonces
máximo ídolo del club de la Ribera, dijo en una ocasión que uno jugaba contra La Máquina con
toda la intención de ganarle, pero como gustador del fútbol a veces preferiría quedarse en la
tribuna viéndola jugar. Precisamente contra Boca Juniors, La Máquina tuvo notables
actuaciones, recordándose particularmente las dos goleadas en menos de un año logradas el
19 de octubre de 1941 por 5 a 1 y el 19 de agosto de 1942 por 4-0, ambas en el Estadio
Monumental, que hasta nuestros días siguen siendo las máximas goleadas de River en
Superclásicos.
Este gran equipo tuvo seguidores internacionales que replicaron su estilo de juego. Real
Madrid en España, Millonarios en Colombia, Universidad Católica en Chile y América en
México son algunos de los equipos que cambiaron su estilo de juego para ser como La
Máquina.
La importancia de ese equipo fue tal que al día de hoy Labruna es el máximo ganador y
goleador de la historia de River, el Charro Moreno fue elegido como el tercer mejor jugador
argentino del Siglo XX, solo por detrás de Maradona y Di Stéfano, quien también llegó a formar
parte de La Máquina, Loustau es recordado como el mejor extremo izquierdo de la historia de
nuestro fútbol, y Pedernera es reconocido como el primer “falso nueve” de la historia de este
deporte.
Sin lugar a dudas, fue un equipo histórico del fútbol argentino y para muchos el mejor, pero no
el único. Por eso, en próximos videos hablaremos de formaciones tales como Los Matadores,
Huracán del 73, el Boca de Bianchi, el Imperio Rojo de Pastoriza o el equipo de José. Así que te
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Y hasta acá llegamos con la historia de hoy. Si te gustó, no olvides suscribirte, darle like,
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agregar, nos vemos en la próxima edición de Sentate que te cuento.