Los Estimulos Fiscales
Los Estimulos Fiscales
Los Estimulos Fiscales
INTRODUCCIÓN
El tema “Los estímulos fiscales”, permite entrar en un ámbito del conocimiento jurídico
financiero, que parece por lo menos desordenado, por no llamarlo confuso. Es ésta la
percepción que se tiene al introducirse tanto en la escasa doctrina jurídica de que se
dispone al respecto, como en la propia legislación y los decretos que se emiten al respecto
Son escasas las referencias, por cierto indirectas, de los estímulos fiscales que
se hacen en nuestra Constitución, más exiguas aún las referencias directas. El artículo
25 constitucional otorga al Estado la rectoría del desarrollo nacional para que el fomen-
to del crecimiento económico y el empleo, así como una más justa distribución del
ingreso y la riqueza, permitan el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los
individuos, grupos y clases sociales.
Debe aclararse respecto del precepto citado, que si bien se refiere a exención de
impuestos, esta figura se vincula con los estímulos fiscales, como posteriormente se podrá
apreciar, en cuanto a que éstos se han identificado doctrinalmente a los subsidios, y que
comparten de alguna manera alguno de los principios rectores de la exención, toda vez que
los subsidios, estímulos fiscales y exención no deben representar un privilegio indebido.
También llama la atención que el Artículo 28 constitucional marca las pautas esen-
ciales de los subsidios, que son los siguientes: a) se pueden otorgar a actividades
prioritarias; lo que exigirá un estudio para definir actividades prioritarias; b) deben ser
generales; respecto de lo que se entiende, en principio, que el subsidio podrán disfru-
tarlo todos aquellos que encuadren en la definición del instrumento jurídico que lo
otorgue; c) el subsidio no es permanente sino que está acotada su vigencia temporal;
d) no debe ser una carga onerosa para las finanzas públicas; e) existirá un aparato
estatal de vigilancia de la aplicación de subsidios; f) se exige un ejercicio de evaluación
estatal, entendemos, por los subsidios otorgados.
1
CARRASCO IRIARTE, Hugo, Derecho Fiscal Constitucional, México, Oxford University Press, 2007, p. 139.
2
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Artículo 28, último párrafo.
3
Cuarto Tribunal Colegiado de Circuito. Jurisprudencia V. 4º J/1. IUS 2008. Registro 179585. Publicada
en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Novena Época. Tomo XXI, enero 2005, p. 1566.
Sin embargo, puede suceder que otra disposición legal establezca un estímulo fis-
cal y subsidie el pago; estrictamente no existe una exención fiscalmente hablando, pero
por virtud del estímulo fiscal o subsidio, se releva del pago al sujeto pasivo original.
Por lo dicho, toda vez que el principio de legalidad obliga a contribuir en términos
de ley, deberá existir otra ley de la misma jerarquía que complementando a aquélla,
establezca el subsidio que quita al sujeto pasivo la obligación principal de pago. Debe
aclararse que no pierde su calidad de pasivo, porque sigue encuadrando en lo que la
ley del impuesto consideró como hecho generador del mismo, pero una ley posterior
que establece el subsidio o estímulo fiscal le quita la obligación de pago.
Se podrá observar en la legislación ordinaria fiscal que en ella se utilizan los con-
ceptos de estímulo fiscal y subsidio, que son conceptos presupuestales y de fomento,
como si su naturaleza correspondiera a instrumentos fiscales de beneficio fiscal, cues-
tión que amerita ser tratado con más profundidad por la doctrina y en su caso corregirlo.
En el apartado B del mismo artículo 16, se otorgan exenciones del impuesto sobre
automóviles nuevos que se cause a cargo de las personas físicas o morales que
enajenen al público en general o que importen definitivamente en los términos de la Ley
Aduanera, automóviles eléctricos. Además, se exime del pago del derecho de trámite
aduanero que se cause por la importación de gas natural.
Por otra parte, el artículo 17, faculta a la Secretaría de Hacienda y Crédito Públi-
co para otorgar los estímulos fiscales y subsidios a la importación de artículos de
consumo y de equipo y maquinaria a las regiones fronterizas y en otro aspecto, a
cajas de ahorro y sociedades de ahorro y préstamo. De este artículo 17, que si bien se
refiere a estímulos fiscales y a subsidios, no se alcanza a desprender cuál fue el
razonamiento que lleva a homologar las figuras de estímulo fiscal con subsidio.
La Ley del Impuesto sobre la Renta cuenta con el Título VII denominado “De los
Estímulos Fiscales”, respecto de los cuales se hará referencia sintética, obviando los
detalles de operación de los denominados estímulos fiscales, toda vez que es objeto de
este documento estudiar en lo posible las características de los estímulos fiscales para
resaltar su naturaleza y poderlos clasificar ordenadamente.
El artículo 218 de la Ley del Impuesto sobre la Renta dispone un estímulo fiscal
consistente en disminuir de la base gravable de contribuyentes personas físicas, el
importe de depósitos, en las cuentas personales especiales para el ahorro, pagos de
primas de contratos de seguro que tengan como base planes de pensiones relaciona-
dos con la edad, jubilación o retiro o adquisiciones de acciones de las sociedades de
inversión que sean identificables correspondiente al ejercicio en el que éstos se efec-
tuaron o al ejercicio inmediato anterior.
Sin entrar en detalles por lo prolijo que resulta, podemos apreciar también un fin
parafiscal, de impulso a la actividad económica y más específicamente a la actividad
industrial, puesto que en términos generales se privilegia la deducción inmediata res-
pecto a materiales, herramientas, aparatos y equipo de tipo industrial.
Entre otras muchas cuestiones diversas, el resultado fiscal del ejercicio derivado
de los ingresos que generen los bienes, derechos, créditos o valores que integren el
patrimonio del fideicomiso, se dividirá entre el número de certificados de participación
que haya emitido el fiduciario por el fideicomiso para determinar el monto del resultado
fiscal correspondiente a cada uno de los referidos certificados en lo individual; el
fiduciario retendrá a los tenedores de los certificados de participación el impuesto
sobre la renta por el resultado fiscal que les corresponda.
En esos dos extensos preceptos no se encuentra ningún dato que indique que el
Estado aportará directamente un apoyo con bienes del erario público, es decir, no hay
estímulo fiscal ni subsidio en dinero, solamente un mecanismo de cálculo de las bases
impositivas, diferente y más favorable al generalmente utilizado. En eso consiste el
beneficio fiscal para impulsar la construcción de inmuebles para arrendamiento.
Además, se prevé que cuando estas empresas tengan accionistas que sean fon-
dos de pensiones y jubilaciones deberán entregar a dichos fondos, un crédito fiscal
por un monto equivalente al resultado de multiplicar el impuesto del ejercicio por la
participación accionaria promedio diaria que los fondos tuvieron en el mismo ejercicio
o por la participación accionaria al término del ejercicio, la que resulte menor.
La sociedad podrá acreditar el crédito fiscal que haya entregado contra el im-
puesto del ejercicio de que se trate. Dicha cantidad se considerará como impuesto
pagado para los efectos del artículo 88 de esta Ley.
También con evidente fin parafiscal, en el artículo 226 se otorga un estímulo fiscal
a los contribuyentes del impuesto sobre la renta consistente en aplicar un crédito fiscal
equivalente al monto que en el ejercicio fiscal aporten a proyectos de inversión en la
producción cinematográfica nacional, contra el impuesto sobre la renta o el impuesto
al activo que tengan a su cargo en el ejercicio en el que se determine el crédito. Este
crédito fiscal no será acumulable para efectos del impuesto sobre la renta.
Este precepto, aunque menciona que se otorga un estímulo fiscal, difiere de los
anteriores dispositivos en cuanto a que el mecanismo de apoyo a la cinematografía, en
este caso, sí implica la aportación estatal consistente en un crédito al productor, es
decir, este estímulo puede confundirse con subsidio. En otro aspecto, en ley se señala
expresamente que el crédito fiscal no será acumulable para efectos del impuesto sobre
la renta, lo que es una previsión importante que define de manera clara el alcance del
Para promover la inversión en capital de riesgo en el país, el artículo 227 junto con
el artículo 228 de la ley que nos ocupa establece un tratamiento fiscal para las perso-
nas que inviertan en acciones emitidas por sociedades mexicanas residentes en Méxi-
co, no listadas en bolsa al momento de la inversión, así como en préstamos otorgados
a estas sociedades para financiarlas, a través de los fideicomisos en los que se cum-
plan los requisitos que establece el propio artículo 227 y que obviamos.
Este decreto está referido a las personas morales y fideicomisos autorizados para
recibir donativos deducibles del impuesto sobre la renta, a través de sus labores de
asistencia o beneficencia a favor de personas y regiones de escasos recursos, así
como grupos vulnerables por edad, sexo o discapacidad y otras acciones filantrópicas.
Se razona que toda vez que como consecuencia de las modificaciones al artículo 93
de la Ley del Impuesto sobre la Renta, publicadas en el Diario Oficial de la Federación el 7
de diciembre de 2009, se estableció que las personas morales y fideicomisos autorizados
para recibir donativos deducibles del impuesto sobre la renta, podrán obtener ingresos no
afectos al pago de dicho gravamen por actividades distintas a los fines para los que fueron
autorizados para recibir dichos donativos, siempre que éstos no excedan del 10% de sus
ingresos totales en el ejercicio y en el caso de que dichos ingresos excedan del límite
mencionado, por el excedente deberán determinar y pagar el referido impuesto.
4
Diario Oficial de la Federación, 26 de mayo de 2010.
III.2. DECRETO 2
Las personas físicas cuyo domicilio fiscal esté ubicado en los municipios de
Mexicali, Baja California o San Luis Río Colorado, Sonora, obligadas a presentar de-
claración por el ejercicio fiscal de 2009 respecto de los impuestos sobre la renta y
empresarial a tasa única, podrán presentar dichas declaraciones en el mes de julio de
2010, sin recargos ni sanciones.
El pago de los impuestos a cargo que resulten se podrá efectuar hasta en seis
parcialidades consecutivas sin que para estos efectos se deban pagar recargos, y sin
que se deba otorgar garantía del interés fiscal.
5
Diario Oficial de la Federación, 20 de abril de 2010.
Los contribuyentes que con anterioridad al mes de abril de 2010 cuenten con
autorización para efectuar el pago a plazos de contribuciones omitidas y de sus acce-
sorios en los términos del artículo 66 del Código Fiscal de la Federación y que tengan
su domicilio fiscal en los municipios de Mexicali, Baja California o San Luis Río Colora-
do, Sonora, podrán diferir el pago de las parcialidades correspondientes al mes de
abril de 2010 y las subsecuentes que se les haya autorizado, reanudando su pago en
los mismos términos y condiciones autorizadas, a partir del mes de mayo de 2010, sin
que se considere que las parcialidades no fueron cubiertas oportunamente, por lo que
no deberán pagarse recargos por prórroga o mora.
Comparando esta porción del artículo 39 citado con el contenido del decreto de
otorgamiento de beneficios fiscales, nos percatamos que fue materia de éste último el
otorgar plazos ampliados para la presentación de declaraciones, con el beneficio adi-
cional de no cobro de recargos y sanciones.
Parece interesante el segundo párrafo de la primera fracción del artículo 39, que dice:
“Sin que las facultades otorgadas en esta fracción puedan entenderse referidas
a los casos en que la afectación o posible afectación de una determinada rama
de la industria obedezca a lo dispuesto en una Ley Tributaria Federal o Tratado
Internacional.”
El decreto del caso dicta medidas exactamente ajustadas a esta fracción, ya que
por esa vía se modificó el esquema de acreditamiento de pagos provisionales del Im-
puesto Empresarial a Tasa Única, respecto del Impuesto sobre la Renta; se difieren las
autorizaciones ya otorgadas de pago a plazo sin generar recargos por prórroga o mora,
además de que se ubica y limita territorialmente el goce de estos beneficios fiscales.
Comentario final respecto de este decreto sería que si bien se fundó en la frac-
ción III del artículo 39 del código citado, que autoriza al Ejecutivo Federal a: “Conceder
subsidios o estímulos fiscales”, en el decreto no se contiene ningún subsidio, entendi-
do como aportación estatal de numerario; tampoco se establece ningún estímulo fiscal,
entendido éste, no como sinónimo de subsidio sino como mecanismo de impulso a una
actividad económica determinada.
Decreto de fecha seis de mayo de dos mil nueve por el que se otorgan beneficios
fiscales con motivo de la situación de contingencia sanitaria provocada por el virus de
influenza,6 emitido por el Titular del Ejecutivo Federal con fundamento en el artículo 89
fracción I de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en los artículos
31 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, y 39, fracciones I, II y III
del Código Fiscal de la Federación, está fundamentado de la misma manera que el
decreto que antecede.
Se otorga un subsidio fiscal a las entidades federativas que eximan de los impues-
tos sobre nóminas y sobre hospedaje en los sectores de hotelería, restaurantes y
servicios de esparcimiento.
6
Diario Oficial de la Federación, 07 de mayo de 2009.
Tesis 1
De esta tesis entresacamos los siguientes criterios rectores: a) Los estímulos fisca-
les se emplean como instrumentos de política financiera, económica y social; b) El
Estado rector del desarrollo nacional, impulsa, orienta, encausa, alienta o desalienta
algunas actividades; c) La finalidad perseguida no debe ser arbitraria ni capricho-
sa; d) Respeto a los principios de justicia fiscal, cuando incidan en los elementos
esenciales de la contribución; e) El estímulo puede revestir la forma de deducción.7
Tesis 2
Se requiere que una ley establezca las cargas fiscales. Las disposiciones que
concedan estímulos fiscales respetan el principio de legalidad tributaria, cuando
la regulación de alguna materia queda acotada en forma exclusiva en una ley
formal y se conozca el alcance de las obligaciones de manera que no quede
margen a la arbitrariedad de la autoridad. Así, en materia tributaria, la reserva de
7
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. 2ª Sala. Jurisprudencia. Tomo XXXI. Marzo 2010.
Tesis 2ª/J. 26/2010. P. 1032. Registro 165028.
Tesis 3
Tesis 4
Los créditos fiscales son materia distinta a los estímulos fiscales. Los primeros
están previstos en el Código Fiscal de la Federación y son una obligación que las
8
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. 2ª Sala. Jurisprudencia. Tomo XXXI. Enero 2010.
Tesis 2ªJ/ 247/2009. P. 272. Registro 165577.
9
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. 2ª Sala. Tesis aislada. Tomo XXIX. Abril 2009. Tesis
2ª XXXVII/2009. Registro 167356.
Esta tesis aislada establece una diferencia también esencial entre estímulo fiscal
en el sentido de apoyo estatal por conducto de la hacienda pública, y una institución
contributiva que es también fiscal pero en otro sentido.
Como se anotó, los conceptos estímulo fiscal, beneficio fiscal, subsidio, subvención,
exención, condonación, acreditamiento, concurren en la legislación, los decretos y la inter-
pretación jurisdiccional. Intentar una hipótesis que explique la naturaleza básica del estímu-
lo fiscal es un objetivo que rebasa la dimensión de este documento, pero sí es posible dejar
asentadas diversas inquietudes que puedan servir de base a próximas reflexiones.
10
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tribunal Colegiado de Circuito. Tesis aislada. Tomo
V. Abril 1997. I.4oA 199 A. P. 228. Registro 199036.
Por eso, hipotéticamente pensamos que el estímulo fiscal se denomina así porque
es el fisco en una concepción histórica de “tesoro del emperador”,13 actualmente equi-
valente a recursos de la hacienda pública, el que vía presupuestaria otorga recursos
fiscales para impulsar un área económica cumpliendo con los lineamientos constitu-
cionales. Es decir, el estímulo no es un instrumento de recaudación, es un instrumento
de entrega presupuestal para el fomento, por eso paradójicamente es confuso el em-
plear el término estímulo fiscal en disposiciones estrictamente fiscales.
Sin embargo, la revisión de las leyes y preceptos, así como de los decretos y las
interpretaciones jurisdiccionales que en apartados anteriores se comentaron, demues-
tra confusión. Vale destacar que vía estímulo fiscal en ley y decreto se otorgan real-
mente beneficios fiscales.
11
Ver tesis aislada marcada con número 4, p. 23.
12
Ver tesis aislada marcada con número 3, p. 23.
13
DELGADILLO GUTIÉRREZ, Luis Humberto, Principios de Derecho Tributario, México, Limusa, 2009, p. 22.
14
Enciclopedia Jurídica Mexicana. Instituto de Investigaciones Jurídicas. Universidad Nacional Autóno-
ma de México, Tomo VI, México, Porrúa, 2002, p. 575.
CONCLUSIONES
LEGISLACIÓN:
DECRETOS:
JURISPRUDENCIA:
24
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. 2ª Sala.
Jurisprudencia. Tomo XXXI. Enero 2010. Tesis 2ªJ/247/2009.
P. 272. Registro 165577.
ENCICLOPEDIAS:
25