UNIDAD DIDÁCTICA 1.

NÚMEROS RACIONALES

EDUCACIÓN MATEMÁTICA II
ÍNDICE
Objetivos
Introducción
1.1. Los números enteros
1.1.1. Revisión de números enteros: números positivos y negativos
1.1.2. Operaciones de números enteros
1.2. Números racionales: fracciones, orden y operaciones
1.2.1. Noción y primeras propiedades de los números racionales
1.2.2. Operaciones con números racionales
1.3. Forma decimal de un número racional
1.4. La proporción aritmética
1.5. La adquisición del concepto de número racional
1.5.1. El número racional como medida
1.5.2. El número racional como reparto
1.5.3. El número racional como operador
1.5.4. El número racional como razón
1.6. El aprendizaje significativo del número racional
1.6.1. Qué entendemos por aprendizaje significativo del número racional
1.6.2. El proceso de representación del número racional
1.6.3. Errores de aprendizaje del número racional y estrategias didácticas
1.6.4. La génesis del pensamiento proporcional
1.7. Ejercicios
Resumen
OBJETIVOS

• Adquirir la noción y sentido de número entero negativo como opuesto del número entero
positivo.

• Conocer las operaciones entre números enteros, su jerarquía y las propiedades aritméticas
y conjuntistas de los números enteros.

• Conocer los números racionales y distinguir los enteros de los estrictamente racionales.

• Reconocer los números racionales en situaciones cotidianas de división y reparto y en el

estudio de la proporción.

• Reconocer fracciones equivalentes y saber obtener la fracción irreducible de una fracción

dada.

• Conocer las operaciones entre números racionales, los racionales positivos y negativos y las
propiedades de las operaciones.

• Conocer la potenciación de números racionales y sus propiedades.

• Conocer el orden natural de los números racionales y su compatibilidad con las operaciones
básicas.

• Conocer el valor absoluto en el cuerpo de los números racionales. En particular, saber cuál
es el valor absoluto de un número racional y, dado un número positivo, distinguir qué
números tienen por valor absoluto ese número.

• Calcular la forma decimal de una fracción y la fracción generatriz de un número decimal.

Distinguir decimales exactos, periódicos puros y periódicos mixtos.

• Calcular la razón entre dos valores de una magnitud. Reconocer magnitudes proporcionales
y utilizar la regla de tres.

• Conocer el proceso de adquisición del concepto de número racional en sus diferentes

facetas: como parte de la unidad, como razón, como operador y como reparto.

• Conocer las principales metodologías didácticas para la enseñanza del número racional en
la etapa Primaria.
INTRODUCCIÓN

Un número racional es todo aquel que se puede expresar mediante una fracción. Por fracción
entendemos el cociente exacto de dos números enteros. En ocasiones ocurre que al calcular el
cociente de dos enteros, este cociente es exacto. Por ejemplo, Al dividir 6 entre 2, el cociente es
el número entero 3. Sin embargo, no todos los cocientes de números enteros se pueden
expresar como números enteros. Por ejemplo, observamos inmediatamente que no podemos
encontrar un número entero que exprese exactamente el cociente de 5 entre 2.

El cuerpo de los números racionales es, dicho grosso modo, el conjunto de números que aglutina
en sí todos los cocientes posibles de números enteros. Dicho de otro modo, cuando 𝑎 y 𝑏 son
números enteros con 𝑏 ≠ 0, el número 𝑥 que verifica la relación 𝑎 = 𝑏 ∙ 𝑥 es un número
racional. Más aún, cuando 𝑎 y 𝑏 varían en el conjunto de los números enteros, 𝑥 recorre todo el
cuerpo de los números racionales.

El extraordinario interés que tienen los números racionales viene de su gran versatilidad. Tienen
aplicaciones tanto aritméticas (los números racionales pueden entenderse como divisiones de
enteros, por tanto juegan un papel en problemas de reparto) como geométricas (sirven para
expresar proporciones de longitudes, superficies, etc.).

Además, los números racionales gozan de unas propiedades aritméticas muy ricas. Además de
las operaciones que ya conocemos porque ya las tenían los números enteros (suma, resta y
multiplicación), los números racionales introducen la división como operación inversa de la
multiplicación. Esto es lo que les da la estructura de cuerpo. En este tema estudiaremos todas
estas operaciones, por tanto la estructura de cuerpo de los números racionales y cómo se
compatibiliza esta estructura con el orden natural presente en el conjunto de los números
racionales. Además, exploraremos la doble visión de los números racionales como fracciones y
como números decimales (exactos, periódicos puros y periódicos mixtos) y aprenderemos a
pasar de una forma a otra. Antes de todo ello, que será la parte nuclear de la Unidad,
repasaremos las nociones elementales sobre el conjunto de los números enteros y su aritmética,
haciendo especial énfasis en la noción de número negativo, su sentido e interpretación.
Finalmente, dedicaremos dos secciones a establecer las principales cuestiones sobre el proceso
de aprendizaje del número racional y algunas nociones sobre didáctica del número racional en
Primaria.
Los números enteros

Revisión de números enteros: números positivos y negativos

Recordaremos, en primer lugar, algunas cuestiones sobre números enteros. Nos centraremos
específicamente en su definición, en el sentido de los números negativos y la definición del
número opuesto, en orden dentro del conjunto de los números enteros y en las operaciones de
números enteros. Este repaso, si bien resulta interesante por sí mismo, conviene también ser
recordado cuando se aborde el estudio de los números racionales, con el fin de analizar
semejanzas, analogías y diferencias entre ambas estructuras de números.
De todos es bien conocida la estructura de los números naturales. Se trata de la colección de
unidades enteras no nulas:
ℕ = {1,2,3, … }
Esta estructura se revela, sin embargo, insuficiente, tanto para expresar matemáticamente
muchos aspectos de la realidad cotidiana, como para satisfacer algunas necesidades de tipo
aritmético:
1. La realidad cotidiana nos presenta abundantes ejemplos que requieren de considerar
números por debajo de 0. Así, debemos hablar de temperaturas bajo cero.
2. Cuando consideramos magnitudes vectoriales (es decir, aquellas magnitudes que vienen
dadas, no sólo por una cantidad, sino por una dirección y un sentido, como la velocidad,
la aceleración o la fuerza), necesitamos una manera de manifestar como diferentes dos
cantidades de esa magnitud que, siendo idénticas en cuanto a su valor (absoluto)
tienen sentidos opuestos (por ejemplo, dos coches que van a la misma velocidad pero
en sentidos opuestos).
3. El conjunto de los números naturales, que es cerrado para la operación suma, sin
embargo, no es cerrado para la resta: en efecto, si bien en ocasiones la resta de dos
números naturales vuelve a ser un número natural (por ejemplo, 8 − 3 = 5), en
ocasiones no se da esto (por ejemplo, 3 − 8). Esto significa que el conjunto de los
números naturales no admite la resta como una operación bien definida, por lo que es
necesario ampliar este conjunto numérico de cara a la buena definición de la operación
resta.
Las tres circunstancias que acabamos de explicar justifican la necesidad de ampliar el conjunto
de los números naturales añadiendo los números negativos. De la necesidad de incorporar al
cálculo los números negativos, surge el conjunto de los números enteros,
ℤ = {… , −3, −2, −1,0,1,2,3, … }
Los números enteros se representan gráficamente en la recta numérica como los naturales, pero
debe observarse que su representación se extiende a izquierda y derecha de modo doblemente
infinito y simétrico respecto de 0:

−2 −1 0 1 2
Figura 1.1. Representación gráfica de los números enteros

Si 𝑎 ∈ ℤ, se llama opuesto de 𝑎 al entero −𝑎. Por ejemplo, el opuesto de 2 es −2; el opuesto de

−7 es −(−7) = 7; el opuesto de 0 es 0.
A continuación expondremos las principales propiedades del conjunto ℤ de los números enteros
(de momento en cuanto conjunto ordenado; después describiremos sus propiedades
algebraicas derivadas de la existencia de ciertas operaciones aritméticas):
1. El orden usual de los números induce una relación de orden en ℤ.
2. No existe primer elemento (mínimo). Dicho de otro modo, el conjunto de los números
enteros, con el orden usual, no está acotado inferiormente. Algunos de sus
subconjuntos tendrán mínimo y otros no.
3. No existe último elemento (máximo). Dicho de otro modo, el conjunto de los números
enteros, con el orden usual, no está acotado superiormente Algunos de sus
subconjuntos tendrán máximo y otros no.
4. Todo número entero tiene un sucesor. Recuérdese que en un conjunto ordenado, el
sucesor de un elemento, 𝑎, es otro elemento, 𝑏, tal que 𝑎 < 𝑏 y, además, no hay ningún
otro elemento, 𝑐, en el conjunto que satisfaga 𝑎 < 𝑐 < 𝑏, es decir, que esté entre
ambos.
5. Propiedad de tricotomía: dados dos números enteros 𝑎, 𝑏, siempre se cumple una y
sólo una de las siguientes relaciones: 𝑎 < 𝑏, 𝑏 < 𝑎, 𝑎 = 𝑏.
6. ℕ ⊂ ℤ, es decir, el conjunto de los números naturales es un subconjunto del conjunto
de los números enteros. Dicho de otro modo, todo número natural es un número
entero.

Definición. Dado 𝑥 ∈ ℤ, llamamos valor absoluto de 𝑥 a la distancia de 𝑥 a 0. Se denota |𝑥|. Se

tiene que
𝑥 si 𝑥 ≥ 0
|𝑥| = {
−𝑥 si 𝑥 ≤ 0

Ejemplo. |5| = |−5| = 5.

El valor absoluto es siempre un número mayor o igual que 0. Consiste, esencialmente, en tomar
el mismo número, si éste es positivo, y su opuesto, si éste es negativo, de forma que el resultado
siempre es positivo.
Conviene observar que un número entero siempre tiene un valor absoluto y solo uno. Pero es
interesante que nos hagamos la pregunta inversa: dado un número entero, ¿cuántos números
enteros tendrán como valor absoluto el número dado? En términos matemáticos: si 𝑎 ∈ ℤ,
cuántos números enteros, 𝑛, satisfarán que |𝑛| = 𝑎. Claramente, se nos abre una triple
posibilidad:
1. Si 𝑎 < 0, entonces no hay ninguna solución, puesto que ningún número entero tiene
valor absoluto negativo.
2. Si 𝑎 = 0, entonces hay una única solución, que es 𝑛 = 0.
3. Si 𝑎 > 0, entonces hay dos soluciones, que son 𝑎 y −𝑎, puesto que ambos números
tienen como valor absoluto 𝑎.

Ejemplo. Nos preguntamos qué números tienen por valor absoluto 3. Claramente, hay dos: 3 y
−3, puesto que |3| = |−3| = 3. También nos podemos preguntar qué números enteros tienen
valor absoluto mayor o igual que 5. La respuesta ahora es el conjunto de los números enteros
que sean mayores o iguales que 5 o bien menores o iguales que −5.

Operaciones con números enteros

En primer lugar presentaremos la suma de números enteros (y, paralelamente, la resta, que no
es más que la suma del opuesto). Es sobradamente conocido el proceso que se ha de seguir para
sumar números enteros:
- Si los números tienen el mismo signo, se suman y se pone el signo común. Así,
observamos que la suma de dos números enteros positivos es siempre un número
positivo y la suma de dos enteros negativos es siempre negativo.
- Si los números tienen diferente signo, se obtiene su diferencia y se pone el signo de
aquel que sea mayor en valor absoluto. Así, la suma de dos números enteros de
diferente signo podrá ser positivo o negativo, en función de cuál de los dos enteros sea
mayor en valor absoluto.
En la siguiente tabla recogemos este procedimiento ilustrado con ejemplos:
Tabla 1.1. Procedimiento para sumar números enteros
Signo de 𝒂 Signo de 𝒃 𝒂+𝒃
 + + 5+3=8
+ - 5 + (−3) = 5 − 3 = 2
- + −5 + 3 = 3 − 5 = −2
- - −5 + (−3) = −5 − 3 = −(5 + 3) = −8

Nota. Cualesquiera que sean los números enteros, se verifica que 𝑎 + (−𝑏) = 𝑎 − 𝑏.

A continuación presentaremos el producto de números enteros. También es conocido el

proceso que se ha de seguir para multiplicar enteros: se multiplican sus valores absolutos y se
pone signo positivo si ambos factores tienen el mismo signo y signo negativo si el signo de los
factores es diferente. En la siguiente tabla recogemos este procedimiento poniendo ejemplos:
Tabla 1.2. Procedimiento para multiplicar números enteros
Signo de 𝒂 Signo de 𝒃 𝒂∙𝒃
+ + 5 ∙ 3 = 15
+ - 5 ∙ (−3) = −15
- + (−5) ∙ 3 = −15
- - (−5) ∙ (−3) = 15

En la siguiente tabla recogemos de manera sintética las principales propiedades de la suma y

multiplicación de enteros:
Tabla 1.3. Propiedades aritméticas del anillo de los números enteros
𝑎, 𝑏, 𝑐 ∈ ℤ Suma Multiplicación
Cierre 𝑎+𝑏 ∈ ℤ 𝑎∙𝑏 ∈ℤ
Asociativa 𝑎 + (𝑏 + 𝑐) = (𝑎 + 𝑏) + 𝑐 𝑎 ∙ (𝑏 ∙ 𝑐) = (𝑎 ∙ 𝑏) ∙ 𝑐
Conmutativa 𝑎+𝑏 = 𝑏+𝑎 𝑎∙𝑏 =𝑏∙𝑎
Elemento neutro 𝑎+0=0+𝑎 =𝑎 𝑎∙1=1∙𝑎 =𝑎
Distributiva 𝑎 ∙ (𝑏 + 𝑐) = 𝑎 ∙ 𝑏 + 𝑎 ∙ 𝑐
Uniforme 𝑎 =𝑏 ⇒𝑎+𝑐 =𝑏+𝑐 𝑎 =𝑏 ⇒𝑎∙𝑐 =𝑏∙𝑐
Monótona 𝑎 ≤𝑏 ⇒𝑎+𝑐 ≤𝑏+𝑐 𝑎 ≤𝑏y𝑐 ≥0⇒𝑎∙𝑐 ≤𝑏∙𝑐
Absorbente 𝑎∙0=0
Valor absoluto |𝑎 ∙ 𝑏| = |𝑎| ∙ |𝑏|

A la hora de abordar cualquier operación con números enteros que incluya de forma combinada
sumas y productos, ha de seguirse cuidadosamente la conocida jerarquía de las operaciones:
- Primero se opera dentro de los paréntesis.
- Se opera de izquierda a derecha.
- Se operan en primer lugar los productos y divisiones, dentro del paréntesis
correspondiente.
- En último lugar, sumas y restas.
Ejemplo.
2 + [3 − 5 ∙ (4 − 7 ∙ 3 + 4)] ∙ 5 − 8 =
2 + [3 − 5 ∙ (4 − 21 + 4)] ∙ 5 − 8 =
2 + [3 − 5 ∙ (−17 + 4)] ∙ 5 − 8 =
2 + [3 − 5 ∙ (−13)] ∙ 5 − 8 =
2 + [3 + 65] ∙ 5 − 8 =
2 + 68 ∙ 5 − 8 =
2 + 340 − 8 =
342 − 8 =
334

Definición. Sean 𝑎 ∈ ℤ y 𝑛 ∈ ℕ o 𝑛 = 0. Se define la potencia de base 𝑎 y exponente 𝑛:

𝑎𝑛 = 𝑎 ∙ 𝑎 ∙ … ∙ 𝑎, 𝑛 veces.
Por definición, tomaremos 𝑎0 = 1.

Nota. Obsérvese que hemos tomado en nuestra definición exponentes cuya base es un número
entero y cuyo exponente es un número natural o el número 0. Esto es necesario para que el
resultado siga siendo un número entero. Es posible considerar potencias de exponente un
número entero negativo, pero el resultado no será un número entero, como veremos más
adelante.

A continuación presentamos sintéticamente e ilustradas con ejemplos las principales

propiedades de la potenciación:
1. 𝑎𝑛 ∙ 𝑎𝑚 = 𝑎𝑛+𝑚

Ejemplo. 32 ∙ 34 = 32+4 = 36 .

2. (𝑎 ∙ 𝑏)𝑛 = 𝑎𝑛 ∙ 𝑏 𝑛

Ejemplo. (3 ∙ 2)2 = 32 ∙ 22 = 9 ∙ 4 = 36.

 3. (𝑎𝑛 )𝑚 = 𝑎𝑛∙𝑚

Ejemplo. (32 )3 = 36 .

Es necesario hacer una observación en cuanto a los signos de las potencias, que dependerá del
signo de la base y de la paridad del exponente. En concreto, si 𝑎 ∈ ℕ, entonces
𝑎𝑛 si 𝑛 es par
(−𝑎)𝑛 = {
−𝑎𝑛 si 𝑛 es impar
Por tanto, 𝑥 𝑛 > 0 si 𝑛 es par, cualquiera que sea el entero no nulo 𝑥. En cambio, si 𝑛 es impar,
entonces la potencia tendrá el mismo signo que tenga la base.
Números racionales: fracciones, orden y operaciones

Noción y primeras propiedades de los números racionales

De la misma forma que las exigencias de las situaciones cotidianas y de las necesidades
aritméticas suscitaron en su momento la necesidad de ampliar el conjunto de los números
naturales añadiendo el 0 y los enteros negativos para dar lugar a un nuevo conjunto, el de los
números enteros, con una estructura algebraica y aritmética más rica y fecunda, nuevamente
nos topamos con la necesidad de ampliar los números enteros por razón de dar cauce, en
sentido matemático, al estudio de nuevas situaciones cotidianas y por buscar, también un cierre
aritmético más completo del que hemos logrado hasta ahora. El nuevo espacio numérico que se
generará como fruto de esta ampliación será el conjunto de los números racionales. En
particular, nos encontramos con las siguientes motivaciones para llevar a cabo la ampliación que
anunciamos:
1. Si bien el conjunto de los números enteros dan respuesta matemática a buena cantidad
de situaciones cotidianas de contenido aritmético, existe una nutrida cantidad de
situaciones en que necesitemos hacer uso de unidades que no serán enteras, sino
partes de una unidad o de varias unidades (problemas de reparto, por ejemplo).
2. Desde el punto de vista aritmético, el conjunto de los números enteros permitió la
clausura del conjunto de los números naturales para la operación resta, pero aún sigue
vigente el problema de la clausura para la división: el conjunto de los números enteros
no es cerrado para la división o cociente porque el cociente de dos números enteros no
4
tiene por qué ser un número entero (véase, por ejemplo, que mientras = 2 es un
2
4
número entero, sin embargo 3 no es un número entero.

Las dificultades indicadas anteriormente se resuelven mediante la construcción del conjunto de

los números racionales.
Los números racionales o fraccionarios pueden verse de dos maneras:
1 2
- Como partes de la unidad: 2 es la mitad de la unidad; 3 es dos tercios de la unidad;
4 1
3
es 1 más 3 de la unidad.

- Como cociente de números enteros: si 𝑎, 𝑏 ∈ ℤ con 𝑏 ≠ 0, el cociente de 𝑎 y 𝑏 es

𝑎
𝑏
.
𝑎
En la fracción 𝑏 , al entero 𝑎 se le llama numerador y al entero 𝑏 se le llama denominador.

El conjunto de los números racionales se denota con la letra ℚ. Obsérvese que todo número
𝑎
entero 𝑎 puede verse como una fracción de denominador 1: 𝑎 = . Por tanto, ℤ ⊂ ℚ.
1
Introduzcamos la noción de fracciones equivalentes. Dos fracciones no tienen por qué ser
diferentes simplemente por tener diferentes numeradores o denominadores. Dos fracciones
serán equivalentes cuando, coincidan o no los numeradores y los denominadores, los números
racionales indicados por la fracción coincidan. La manera de comprobar si dos fracciones son
equivalentes es comprobando si el producto de los medios es igual al producto de los extremos,
del modo siguiente:
𝑎 𝑐
= ⟺𝑎∙𝑑 =𝑏∙𝑐
𝑏 𝑑

18 3
Ejemplo. = porque 18 ∙ 2 = 36 = 12 ∙ 3.
12 2

Se pueden obtener fracciones equivalentes por dos sistemas:

3 3∙6 18
- Multiplicar numerador y denominador por el mismo número: = =
2 2∙6 12

- Simplificación. Dividir numerador y denominador por el mismo número (un factor

18 3∙6 3
común): = = .
12 2∙6 2

El máximo número por el que se puede simplificar una fracción es el mcd de numerador y
denominador. A la fracción que resulta de hacer esta operación se la conoce como fracción
𝑎
irreducible. Si es una fracción irreducible, entonces mcd(𝑎, 𝑏) = 1.
𝑏

Signo de una fracción. Supongamos que 𝑎, 𝑏 son enteros positivos. Entonces se tienen los
siguientes casos:
𝑎 −𝑎 𝑎
- 𝑏
= −𝑏. En este caso, 𝑏 > 0.
−𝑎 𝑎 𝑎 𝑎
- = = − . En este caso, − < 0.
𝑏 −𝑏 𝑏 𝑏

Tomaremos siempre el denominador positivo.

𝑎
Valor absoluto. Si 𝑎, 𝑏 ∈ ℤ, entonces, el valor absoluto de la fracción 𝑏
es otra fracción, que

coincide con ella misma si era positiva y que será su opuesta si era negativa.
A propósito del valor absoluto, se verifica, para cualquier fracción, que el valor absoluto de una
fracción es el cociente de los valores absolutos del numerador y el denominador de la fracción.
Es decir:
𝑎 |𝑎|
| |=
𝑏 |𝑏|
Orden en ℚ. Para ordenar dos fracciones, procedemos de la siguiente manera:
 3 8
- Si tienen el mismo denominador (positivo), se ordenan por el numerador: 5
<5
4 9
porque 3 < 8; − 7 > − 7 porque −4 > −9.

- Si tienen diferente denominador (positivo, en todo caso), antes de comparar

deben reducirse a un denominador común, que habitualmente será el mcm de los
5 9 5 25 27 9
denominadores: < porque = < = .
12 20 12 60 60 20

Como regla general,

𝑎 𝑐
< ⟺𝑎∙𝑑 <𝑏∙𝑐
𝑏 𝑑
Propiedad de densidad de ℚ. Para todos 𝑥, 𝑦 ∈ ℚ con 𝑥 < 𝑦 existe 𝑧 ∈ ℚ tal que 𝑥 < 𝑧 < 𝑦.
1 2 1 5 2
Por ejemplo, podemos asegurar que hay un número racional entre 2 y 3. En efecto, 2 < 8 < 3.

Operaciones con números racionales

Veamos en primer lugar la suma y resta de números racionales. Como sabemos, el
procedimiento para sumar (o restar) números racionales depende del denominador de las
fracciones que se estén sumando.
1. Cuando los sumandos tienen el mismo denominador:
- Se suman los numeradores.
- Se pone el mismo denominador.
- Se simplifica, si es posible.

Ejemplo.
3 7 3 + 7 10
+ = = =2
5 5 5 5

2. Cuando los sumandos tienen distinto denominador:

- Se reducen a común denominador (el mínimo común múltiplo, 𝑚𝑐𝑚, de los
denominadores).
- Se procede como en el caso anterior (sumando los numeradores y,
posteriormente, simplificando).

Ejemplo.
4 7 16 35 16 + 35 51 17
+ = + = = =
15 12 60 60 60 60 20
Para el cálculo del mínimo común múltiplo (𝑚𝑐𝑚) de los denominadores:
- Se factorizan los denominadores. Por ejemplo: 15 = 3 ∙ 5 y 12 = 22 ∙ 3
- Se toman los factores primos comunes y los no comunes elevados al mayor
exponen que con que aparezcan en las descomposiciones. Por ejemplo:
𝑚𝑐𝑚(15,12) = 22 ∙ 3 ∙ 5 = 60

Abordaremos ahora la descripción del producto y cociente de números racionales, expresados

en forma de fracción.
El producto se realiza multiplicando los numeradores y los denominadores:
𝑎 𝑐 𝑎∙𝑐
∙ =
𝑏 𝑑 𝑏∙𝑑
Por su parte, el cociente de dos fracciones se realiza mediante productos cruzados, de la
siguiente manera:
𝑎
𝑏 =𝑎÷𝑐 =𝑎∙𝑑 =𝑎∙𝑑
𝑐 𝑏 𝑑 𝑏 𝑐 𝑏∙𝑐
𝑑
Obsérvese que, con esta definición,
𝑎 1 𝑏
1÷ = =
𝑏 𝑎 𝑎
𝑏

Ejemplo.
3 8 3 ∙ (−8) 3 1
∙ (− ) = =− =−
8 12 8 ∙ 12 12 4
3 8 3 ∙ 12 36 9
÷ (− ) = =− =−
8 12 (−8) ∙ 8 64 16

De la misma manera que ocurría con los números enteros, para operar números racionales
mediante operaciones que combinen sumas, rectas, productos y cocientes, es necesario seguir
una jerarquía en las operaciones, que es la misma que ya describimos para los números
racionales.
1 1 1 1 8
= = = =
3 1 3 1 3 3 9 9
4+ 2 4+ 8 4+8 8
2+3 3
En la siguiente tabla recogemos las principales propiedades aritméticas del conjunto de los
números racionales, es decir, aquellas propiedades que se derivan de las operaciones de las que
este conjunto goza. Es un ejercicio interesante comparar estas propiedades con las análogas del
conjunto de los números enteros. Si se hace este ejercicio se podrá observar que hay una
coincidencia punto por punto, con las siguientes excepciones:
- El conjunto de los números racionales es cerrado para la operación cociente.
- Esto es equivalente a la segunda de las diferencias: la operación producto siempre
tiene inverso (es decir, dada una fracción no nula, siempre es posible encontrar
otra, su inversa, cuyo producto por la primera valga 1).
Las propiedades anteriores, que marcan la diferencia entre los números racionales y los enteros,
permiten decir que el conjunto de los números racionales tienen estructura de cuerpo, de la que
no goza el conjunto de los números enteros. Por esa razón hablamos del cuerpo de los números
racionales.
Tabla 1.4. Propiedades aritméticas del cuerpo de los números racionales
𝑥, 𝑦, 𝑧 ∈ ℚ Suma y resta Producto y cociente
𝑥
Cierre 𝑥 + 𝑦, 𝑥 − 𝑦 ∈ ℚ 𝑥 ∙ 𝑦, ∈ ℚ
𝑦
Asociativa 𝑥 + (𝑦 + 𝑧) = (𝑥 + 𝑦) + 𝑧 𝑥 ∙ (𝑦 ∙ 𝑧) = (𝑥 ∙ 𝑦) ∙ 𝑧
Conmutativa 𝑥+𝑦 = 𝑦+𝑥 𝑥∙𝑦 =𝑦∙𝑥
𝑥+0=0+𝑥 =𝑥 𝑥∙1=1∙𝑥 =𝑥
Elemento neutro 𝑥
𝑥−0=𝑥 =𝑥
1
Elemento 1
El elemento opuesto de 𝑥 es – 𝑥 El elemento inverso de 𝑥 es 𝑥
opuesto o 1
porque 𝑥 + (−𝑥) = 0 porque 𝑥 ∙ = 1
inverso 𝑥
𝑥 ∙ (𝑦 + 𝑧) = 𝑥 ∙ 𝑦 + 𝑥 ∙ 𝑧
𝑥 ∙ (𝑦 − 𝑧) = 𝑥 ∙ 𝑦 − 𝑥 ∙ 𝑧
𝑥+𝑦 𝑥 𝑦
Distributiva = +
𝑧 𝑧 𝑧
𝑥−𝑦 𝑥 𝑦
= −
𝑧 𝑧 𝑧
𝑥 =𝑦 ⇒𝑥+𝑧 =𝑦+𝑧 𝑥 =𝑦 ⇒𝑥∙𝑧 =𝑦∙𝑧
Uniforme 𝑥 𝑦
𝑥 =𝑦 ⇒𝑥−𝑧 =𝑦−𝑧 𝑥=𝑦⇒ =
𝑧 𝑧
𝑥 ≤ 𝑦 ⇒ 𝑥+𝑧 ≤ 𝑦+𝑧 𝑥 ≤ 𝑦 y 𝑧 ≥ 0 ⇒ 𝑥∙𝑧 ≤𝑦∙𝑧
Monótona 𝑥 𝑦
𝑥 ≤ 𝑦 ⇒ 𝑥−𝑧 ≤ 𝑦−𝑧 𝑥 ≤𝑦y𝑧 ≥0⇒ ≤
𝑧 𝑧
Absorbente 𝑥∙0=0
|𝑥 ∙ 𝑦| = |𝑥| ∙ |𝑦|
Valor absoluto 𝑥 |𝑥|
| |=
𝑦 |𝑦|

Veamos ahora la potenciación en el cuerpo de los números racionales.

 𝑎
Definición. Sean 𝑎, 𝑏 ∈ ℤ con 𝑏 ≠ 0 y 𝑛 ∈ ℕ o 𝑛 = 0. Se define la potencia de base y
𝑏

exponente 𝑛:
𝑎 𝑛 𝑎 𝑎 𝑎 𝑎∙𝑎∙…∙𝑎 𝑎 𝑛 𝑎𝑛
(𝑏 ) = 𝑏 ∙ 𝑏 ∙ … ∙ 𝑏 = 𝑏∙𝑏∙…∙𝑏 , 𝑛 veces. Por consiguiente, (𝑏 ) = 𝑏𝑛 .

𝑎 0
Por definición, tomaremos ( ) = 1.
𝑏

En ℚ, al contrario del caso de los números enteros, podemos considerar potencias con
exponente negativo:
𝑎 −𝑛 𝑏 𝑛 𝑏 𝑏 𝑏 𝑏∙𝑏∙…∙𝑏 𝑎 −𝑛 𝑏𝑛
(𝑏 ) = (𝑎) = 𝑎 ∙ 𝑎 ∙ … ∙ 𝑎 = 𝑎∙𝑎∙…∙𝑎, 𝑛 veces. Por consiguiente, (𝑏 ) = 𝑎𝑛

De esta manera, se tiene que, cualquiera que sea 𝑥 ∈ ℚ distinto de 0,

1
𝑥 −𝑛 =
𝑥𝑛
A continuación exponemos las principales propiedades de la potenciación de números
racionales expresados en forma de fracción. Conviene observar que se trata de propiedades
análogas a las ya expuestas para números enteros.
1. 𝑥 𝑛 ∙ 𝑥 𝑚 = 𝑥 𝑛+𝑚

1 2 1 4 1 2+4 1 6 1 1
Ejemplo. (2) ∙ (2) = (2) = (2) = 26 = 64.

2. 𝑥 𝑛 ÷ 𝑥 𝑚 = 𝑥 𝑛−𝑚

2 6 2 4 2 6−4 2 2 22 4
Ejemplo. (3) ÷ (3) = (3) = (3) = 32 = 9.

3. (𝑥 ∙ 𝑦)𝑛 = 𝑥 𝑛 ∙ 𝑦 𝑛

2 −2 3 −2 2 3 −2 3 −2 52 25
Ejemplo. (5) ∙ (2) = (5 ∙ 2) = (5) = 32 = 9
.

4. (𝑥 𝑛 )𝑚 = 𝑥 𝑛∙𝑚

−1
3 2 3 −2 4 2 42 16
Ejemplo. ((− 4) ) = (− 4) = (− 3) = 32 = 9
.
Forma decimal de un número racional
Existen tres formas posibles de expresiones decimales para los números racionales:
324
- Decimal exacto. Por ejemplo, 15
= 21,6
214
- Periódico puro. Por ejemplo, 18
= 11,888888 … = 11, 8̂. El periodo es 8.
50
- Periódico mixto. Por ejemplo, = 4,1666666 … = 4,16̂. El periodo es 6.
12

Dado un número decimal exacto o periódico (puro o mixto) se llama fracción generatriz a la
fracción irreducible que equivale a ese número decimal. Por ejemplo:
8326 4163
- 8,326 = 1000 = 500

- ̂ = 8326−83 = 8223 = 2741

8,326 990 990 330
8326−83 8223 2741
- ̂=
83, 26 = =
99 99 33

Para pasar de forma de fracción a forma decimal, simplemente es necesario efectuar la división.
Para pasar de forma decimal a forma de fracción, en cambio, se procede de la siguiente manera:
- Si se trata de decimal exacto, la fracción generatriz tiene como numerador el
número sin coma, y como denominador 10 elevado al número de decimales del
número en cuestión.
- ̂ , el numerador se calcula restando
Si es periódico puro, por ejemplo, 83, 26
8326 − 83 = 2741 y el denominador es 10nº decimales del periodo − 1 = 102 −
1 = 100 − 1 = 99.
- ̂ , el numerador es, igual que en el caso
Si es periódico mixto, por ejemplo, 8,326
puro, 8326 − 83 = 2741, y el denominador es
10nº decimales del periodo+nº decimales fuera − 10nº decimales fuera del periodo =
103 − 101 = 1000 − 10 = 990.
La proporción aritmética
Comencemos definiendo lo que se entiende por razón.

Definición. Se llama razón al cociente entre dos números. Esos números pueden ser
adimensionales o ser las medidas de dos magnitudes (por ejemplo, las longitudes de dos
segmentos).

La razón, por ejemplo, entre las longitudes de dos segmentos indica el número de veces que el
̅̅̅̅ del dibujo mide
más corto está incluido en el más largo. Así, supongamos que el segmento 𝐴𝐶
̅̅̅̅ mide 1.
2 y el segmento 𝐶𝐵

𝐴 𝐶 𝐵

Figura 1.2. Segmento dividido en razón 2:1

Entonces, la razón entre ̅̅̅̅

𝐶𝐵 y ̅̅̅̅
𝐴𝐶 es
̅̅̅̅
𝐶𝐵 1
=
̅̅̅̅
𝐴𝐶 2
Esto quiere decir, que en el segmento ̅̅̅̅
𝐴𝐶 caben dos segmentos ̅̅̅̅
𝐶𝐵. Igualmente, la razón entre
̅̅̅̅ y 𝐴𝐵
𝐶𝐵 ̅̅̅̅ es
̅̅̅̅ 1
𝐶𝐵
=
̅̅̅̅ 3
𝐴𝐵
Por tanto, en ̅̅̅̅
𝐴𝐵 caben tres segmentos ̅̅̅̅
𝐶𝐵.
Las razones como las anteriores que pueden expresarse como números racionales, se llaman
razones exactas, conmensurables o estáticas.

Ejemplo. Si una mesa mide 10 𝑚 de largo y 6 𝑚 de ancho, entonces la razón entre el ancho y el
largo es
6 3
=
10 5

Ejemplo. Es un resultado conocido que el lado de un hexágono regular (𝐿) mide lo mismo que el
radio (𝑅). Esto significa que la razón entre el lado y el radio es
𝐿
=1
𝑅
Pero no todas las razones son de esta manera. Se llama razón inexacta, inconmensurable o
dinámica a aquella que se expresa como un número irracional.

Ejemplo. La razón entre la diagonal de un cuadrado de lado 1 y el lado es √2. En efecto, del
teorema de Pitágoras sabemos que la diagonal de un cuadrado de lado 1 es la hipotenusa de un
triángulo rectángulo cuyos catetos miden 1. Por tanto, la diagonal mide √12 + 12 = √2. Ahora,
la razón entre la diagonal y el lado es

√2
= √2
1

Ejemplo. La razón entre la longitud de una circunferencia y la medida de su diámetro fue

obtenida por Arquímedes. Es el número 𝜋, que es irracional.

Ahora, es inmediato observar que la noción de razón puede aplicarse a otras magnitudes que
no son necesariamente longitudes. De esta forma, llegamos al concepto de razón de dos valores
de determinada magnitud.

Ejemplo. Si el coche A va a 50 𝑘𝑚/ℎ y el coche B a 100 𝑘𝑚/ℎ, entonces, la razón entre las
velocidades es
100 2
=
50 1
Esto quiere decir que la velocidad del coche B es el doble de la del coche A.

Definición. Llamamos proporción a la igualdad entre dos razones.

3 6
Por ejemplo, = es una proporción porque se están igualando dos razones. Esta proporción
4 𝑥

se lee “3 es a 4 como 6 es a 𝑥”.

1 3 1 3 1 3
Ejemplo. Las razones y forman una proporción porque = . Sin embargo, las razones y
2 6 2 6 2 4

no forman una proporción porque los valores de las fracciones no son iguales.

Definición. Dos magnitudes son proporcionales cuando la razón entre ellas permanece
constante. A esa constante se la llama constante de proporcionalidad.

Ejemplo. Existen numerosas magnitudes que son proporcionales:

 - La velocidad de un coche y el consumo de gasolina. A mayor velocidad, mayor
consumo.
- El coste de un determinado producto que se vende a granel y el número de quilos
que se compra. Evidentemente, a mayor número de kilos, mayor coste, siendo así
que el precio del kilo es la constante de proporcionalidad.

𝑎 𝑐
En una proporción, digamos 𝑏 = 𝑑, distinguimos los siguientes elementos:

- Extremos: son los elementos primero y último de la proporción. En nuestro caso,

𝑎 y 𝑑.
- Medios: son los elementos intermedios de la proporción. En nuestro caso, 𝑏 y 𝑐.
En una proporción siempre ocurre que el producto de los extremos es igual al producto de los
medios.
𝑎∙𝑑 =𝑏∙𝑐

Proporciones y regla de tres. Cuando tenemos magnitudes proporcionales, si disponemos del

valor de tres datos, podemos calcular el valor del cuarto usando la proporción. Es la llamada
regla de tres. Veamos algunos ejemplos.
- Un coche recorre 50 kilómetros en 1 hora. ¿Cuánto tiempo empleará en recorrer
200 kilómetros? El espacio recorrido y el tiempo empleado son magnitudes
proporcionales, porque a más tiempo mayor espacio se recorre. Por tanto,
podemos decir que si a 50 𝑘𝑚 le corresponde 1 ℎ, a 200 𝑘𝑚 le corresponderán
𝑥 ℎ. En otras palabras,
50 200
=
1 𝑥
Utilizando que el producto de los extremos es igual al producto de los medios,
obtenemos que
50𝑥 = 200
De aquí que 𝑥 = 4, luego el coche necesitará 4 horas.
- Ese mismo coche, ¿qué espacio recorrerá en 3 horas? Nuevamente es un
planteamiento de regla de tres: si a 50 𝑘𝑚 le corresponde 1 ℎ, a 𝑥 𝑘𝑚 le
corresponderán 2 ℎ. Es decir,
50 𝑥
=
1 2
Desarrollando, obtenemos 100 = 𝑥, con lo que vemos que recorrerá 100 kilómetros.
 - Dos pantalones cuestan 50 euros ¿Cuántos pantalones puedo comprar con 250
euros? Si 2 pantalones cuestan 50 euros, 𝑥 pantalones costarán 250 euros:
2 𝑥
=
50 250
500
Entonces, 2 ∙ 250 = 50𝑥. Por tanto, 𝑥 = 50
= 10. Podré comprar 10 pantalones.

Porcentajes. Obtener un porcentaje no es más que calcular una proporción sobre 100. Por
ejemplo, si en unas elecciones municipales, en un municipio de 200 habitantes, el partido A ha
obtenido 70 votos y el partido B ha obtenido 130 votos, entonces, los porcentajes de votos se
obtienen haciendo una proporción sobre 100:
Para el partido A: 70 votos es a 200 vecinos como 𝑥 votos serían a 100.
70 𝑥
=
200 100
Por tanto, 70 ∙ 100 = 200𝑥. En consecuencia, 𝑥 = 35. Por tanto, el partido A ha obtenido el
35% de los votos.
Para el partido B: 130 votos es a 200 vecinos como 𝑥 votos serían a 100.
130 𝑥
=
200 100
Igual que antes, deducimos que el partido B ha obtenido el 65% de los votos.
La adquisición del concepto de número racional
Hay diversas maneras de interpretar el número racional. Cada una de esas maneras induce una
perspectiva desde la cual debe abordarse el proceso de enseñanza-aprendizaje del número
racional, sus operaciones y propiedades, porque el alumno debe conocer y manejar todas estas
interpretaciones, diferenciarlas y, a la vez, relacionarlas.
Es posible diferenciar hasta cuatro interpretaciones diferentes del número racional (Chamorro,
2008). A continuación expondremos brevemente cada una de ellas.

El número racional como medida

Puede interpretarse el número racional como la relación de la medida de una magnitud en un
objeto con la medida del todo. Por ejemplo, si digo que me he comido dos terceras partes de la
2
barra de pan, estamos interpretando el número racional a partir de la magnitud longitud (o
3

masa si se prefiere) asociada a la barra de pan: lo que me he comido equivale a una longitud de
2
3
de la longitud total de la barra de pan, que se toma como unidad de medida. Otros ejemplos

de interpretación del número racional en términos de medida:

- He barrido la tercera parte del suelo de la habitación.
- Mi hermano ha roto dos quintas partes de los vasos que teníamos en casa.
Es inmediato comprobar que hay dos tipos de medidas respecto de las cuales puede llevarse a
cabo la interpretación del número racional:
1. Medidas continuas. Llamamos así a las medidas de magnitudes continuas (como la
longitud, el área, la masa, el peso, el volumen, el tiempo, etc.). En el primer ejemplo que
pusimos, me he comido dos terceras partes de la barra de pan, la fracción se refiere a
una magnitud continua (la longitud). Usualmente, cuando interpretamos un número
racional en términos de una magnitud continua, lo representamos haciendo alusión al
área de alguna figura, generalmente un círculo o un rectángulo.

2
3

𝟐
Figura 1.3. Representación gráfica de la fracción 𝟑 como medida continua

2. Medidas discretas. Son aquellas que se refieren a magnitudes discretas (por ejemplo, al
número de objetos de un determinado tipo que estemos considerando). En el ejemplo
anterior, mi hermano ha roto dos quintas partes de los vasos que teníamos en casa, el
 2
número racional 5
se está interpretando en términos de la magnitud que mide el

número de vasos de la casa, que es una magnitud discreta porque sólo puede tomar una
cantidad discreta de valores. Cuando manejamos medidas discretas, suelen estar
asociadas a representaciones gráficas que siguen un modelo conjunto (porque expresan
un conjunto de elementos).

2
5
𝟐
Figura 1.4. Representación gráfica de la fracción 𝟓 como medida discreta

En la interpretación del número racional como medida cobra especial importancia el concepto
de unidad, de la cual la fracción que se esté considerando expresa una porción o proporción.
Por esa razón, es posible ilustrar esta interpretación del número racional a partir de dos tipos
de actividades, mutuamente inversas, que juegan con el papel de la unidad:
1. Actividades de partir la unidad. Se trata de mostrar al alumno la unidad de medida
dividida en partes congruentes para que identifique a qué número racional, expresado
en forma de fracción, corresponde.

Ejemplo. Podemos proponer las siguientes imágenes y pedir que digan a qué fracción
corresponde cada una de ellas, sabiendo que la unidad considerada es un rectángulo:

5
6

4
3

𝟓 𝟒
Figura 1.5. Representaciones, como medidas continuas, de las fracciones 𝟔 y 𝟑

Ejemplo. Si la unidad que consideramos son dos rectángulos, entonces las fracciones
5 4
representadas en las imágenes del ejemplo anterior serían 12 y 6.
 2. Actividades de reconstrucción de la unidad. Se trata de pedir que el alumno indique
cuál es la unidad a partir de la representación de una fracción concreta. Es el camino
inverso al realizado en las actividades anteriores.

Ejemplo. Averiguar cuál es la unidad si las imágenes que se presentan a continuación

corresponden a las fracciones que se indican (para la primera imagen la unidad es un rectángulo,
para la segunda es dos rectángulos y para la tercera, cinco rectángulos).

2
3

2
6

2
15

Figura 1.6. Representaciones de fracciones usando distintas unidades

Nota. Las actividades de los ejemplos anteriores, que han sido ilustradas usando medidas
continuas, tienen un correlato natural en términos de medidas discretas.

Esta manera de interpretar el número racional permite ilustrar el concepto de fracciones

equivalentes. Dos fracciones equivalentes son aquellas que, interpretadas como una porción
del total, abarcan la misma medida, aunque se haya dividido la unidad en diferente número
4 2
de partes congruentes (usando la misma unidad). En efecto, las fracciones 6 y 3 son equivalentes

porque, si tomamos como unidad el rectángulo, la medida que abarcan es la misma.

4
6
 2
3

Figura 1.7. Representaciones de fracciones equivalentes

El número racional como reparto

Los números racionales pueden verse como cocientes de números enteros, es decir, como un
reparto de tantas unidades como diga el numerador de la fracción entre tantos elementos como
2
indique el denominador. Por ejemplo, la fracción 7
corresponde a la porción de tarta que

correspondería a cada comensal si se reparten dos tartas entre siete personas. Hay muy
numerosos ejemplos que pueden ponerse para ilustrar esta interpretación:
- Repartimos una superficie de 2 hectáreas entre 5 personas. ¿Qué fracción de
hectárea le corresponde a cada persona?
- Un padre debe repartir una pizza entre sus tres hijos. ¿Qué fracción de pizza le
corresponde a cada uno de ellos?
Esta interpretación de los números racionales como reparto tiene gran versatilidad. Permite,
por ejemplo, combinar cuestiones aritméticas con su natural interpretación geométrica, lo que
permite profundizar en ambas perspectivas e incidir en el sentido del número racional.
Considérese, por ejemplo, el siguiente problema:
Necesitamos repartir cinco tartas entre ocho personas. ¿Cómo podemos hacer este
reparto para que sea equitativo?
5
Naturalmente, la fracción de la unidad que corresponde a cada persona es 8. Pero podemos

intentar resolver el problema, si representamos cada tarta como un círculo, haciendo una
disección de los ocho círculos de forma que las piezas sean, por grupos de cinco, de la misma
medida. Esto puede resolverse de la manera que indica el siguiente dibujo, en donde se ha
coloreado de rojo lo que le corresponde a una persona en el reparto:

𝟓
Figura 1.8. Primera representación de la fracción 𝟖 como reparto
Pero el reparto también puede realizarse de otras maneras, de modo que el problema no tiene
una solución cerrada:

𝟓
Figura 1.9. Segunda representación de la fracción 𝟖 como reparto

Cada posible solución se corresponde con una descomposición de la fracción como suma de
otras fracciones. En efecto, la primera solución se corresponde con la descomposición:
5 1 1 1
= + +
8 4 4 8
Por su parte, la segunda solución se corresponde con esta otra descomposición de la fracción:
5 1 1 1 1 1
= + + + +
8 8 8 8 8 8
Por consiguiente, la operación suma de fracciones y la descomposición de las fracciones
aparecen de manera natural con esta interpretación del número racional.

El número racional como operador

Se puede interpretar el número racional como un operador o función que actúa sobre un todo
(o sobre una parte de un todo) mediante la extracción de la parte de ese todo (o de esa parte
del todo) que indique el número racional en cuestión. Esa acción de la fracción sobre una
cantidad sigue el principio multiplicativo: para obtener la acción de una fracción sobre una
cantidad cualquiera se requiere multiplicar la fracción por esa cantidad. Esta es la interpretación
2
que se está considerando cuando decimos, por ejemplo, que la acción de la fracción 3 sobre una
2
cantidad es multiplicar por 2 esa cantidad y dividir por 3. Más exactamente, 3 de una cantidad,

𝑥, es la tercera parte del doble de 𝑥 (o, lo que es lo mismo, el doble de la tercera parte de 𝑥).
Nuevamente, podemos considerar dos clases de actividades en que se ilustra la acción de los
números racionales como operadores:
1. Acción de la fracción como operador. Se trata de proponer situaciones en que el alumno
deba manejar la fracción como un operador sobre alguna cantidad.

3
Ejemplo. Si yo peso 38 𝑘𝑔 y mi hermano mayor pesa 2 de mi peso, ¿cuánto pesa mi hermano?
 3
∙ 38 = 57 𝑘𝑔
2

2. Obtención de la fracción a partir de su acción como operador. Se trata de la acción

inversa a la trabajada en el anterior tipo de actividades. Ahora tenemos datos sobre la
acción como operador de la fracción y se trata de encontrar la fracción que da lugar a
esa acción cuando se interpreta como operador. Basta con dar un dato de la acción del
operador. Sin embargo, si se dan varios (por ejemplo, en forma de tabla), el alumno
podrá comprobar que los diferentes datos dan lugar a la misma fracción (en el fondo,
estará encontrando la razón de proporcionalidad de magnitudes proporcionales).

Ejemplo. Yo tengo 10 años y mi padre 35. ¿Qué fracción de los años de mi padre tengo yo?
10 2 2
La respuesta correcta es 35 = 7, porque 7 ∙ 35 = 10.

Ejemplo. Un determinado producto presenta harina y azúcar en las siguientes cantidades:

Tabla 1.5. Proporciones de harina y azúcar en un determinado producto
Harina (en g.) 50 150 300 500
Azúcar (en g.) 10 30 60 100
¿Cuál es la fracción de azúcar que da la harina? La respuesta es
10 30 60 100 1
= = = =
50 150 300 500 5

El número racional como razón

Interpretamos el número racional como una razón cuando lo entendemos como una
comparación entre dos cantidades o medidas, de la misma o distinta magnitud. Por ejemplo,
la velocidad de un automóvil puede entenderse como un número (racional, en su caso) que
resulta de la comparación, mediante el cociente, de la distancia recorrida por el automóvil y el
tiempo empleado por el mismo en recorrerla. Así, si un automóvil ha recorrido 200 kilómetros
200 100
en 6 horas, diremos que la velocidad es de 6
= 3
. Este número informa de que el automóvil

recorrerá 100 kilómetros cada 3 horas. Se trata, por tanto, de la interpretación del número
racional privilegiada para introducir las magnitudes proporcionales, la proporcionalidad
aritmética y la razón de proporcionalidad.
Otros ejemplos:
- Si en una clase hay 20 chicas y 15 chicos, ¿cuál es la relación entre el número de
chicas y de chicos?
 - Si una planta que medía 20 centímetros ha pasado, en tres semanas, a medir 25
centímetros, ¿cuál es su ritmo de crecimiento semanal?
También podemos combinar esta interpretación del número racional como razón con la
interpretación del número racional como operador, exigiendo del alumno que haga actuar la
razón de proporcionalidad obtenida sobre un todo o una parte de un todo. Por ejemplo:
- En un supermercado, por cada 10 euros de compra nos regalan un vale de 2 euros.
Si quiero comprar productos por valor de 60 euros, ¿cuánto dinero debo traer de
10 10 5 5
casa? (Respuesta: de 60, es decir, puesto que = , debemos traer de casa ∙
12 12 6 6

60 = 50 euros).
- De cada tres alumnos de una clase, uno suspende matemáticas y, de cada cinco
alumnos que suspenden matemáticas, dos suspenden también lengua. Si la clase
tiene 15 alumnos, ¿cuántos alumnos han suspendido matemáticas y lengua?
2 1
(Respuesta: 5 ∙ 3 ∙ 15 = 2 alumnos suspenden matemáticas y lengua).

En este contexto se sitúan también los porcentajes como una expresión de un número racional
en términos de una razón sobre 100.
- Si se estima que el 70% de la población tiene carnet de conducir, en un pueblo de
1500 habitantes, ¿cuántos ciudadanos es esperable que tengan carnet de
70
conducir? (Respuesta: ∙ 1500 = 1050 habitantes tendrán carnet de conducir).
100

- En una clase de 20 alumnos han aprobado matemáticas 18 de ellos. ¿qué

18
porcentaje del alumnado de ese curso aprueba matemáticas? (Respuesta: 20
∙

100 = 90; aprobarán matemáticas el 90%).

El aprendizaje significativo del número racional

Qué entendemos por aprendizaje significativo del número racional

Chamorro (2008), haciendo referencia a Kieren (1993), explica la existencia de hasta cuatro
niveles en cuanto a la comprensión de los números racionales. Estos niveles de Kieren son los
siguientes:
- Nivel de conocimiento etnomatemático. Se trata de un grado de conocimiento en
el que el acceso al número racional se hace a través de las situaciones cotidianas
vivenciadas por el alumno, cuales son situaciones de reparto, etc.
- Nivel de conocimiento intuitivo. Los alumnos en este nivel son capaces de conocer
mediante la intuición la estructura racional de determinadas situaciones a partir
de representaciones mentales que ya tienen relacionadas y que identifican en
situaciones reales o simuladas. En síntesis, en este nivel se conocen los números
racionales a partir de representaciones y del uso del lenguaje.
- Nivel de conocimiento técnico-simbólico. Es el nivel en el que el alumno es capaz
de manejar los números racionales de manera simbólica.
- Nivel de conocimiento axiomático-deductivo. Es el propio de quien conoce y
maneja la estructura axiomática de la teoría aritmética de los números racionales
y trabaja con ella de manera lógico-deductiva.
Ocurre un aprendizaje verdaderamente significativo de los números racionales cuando el
alumno es capaz de sintetizar el segundo y el tercer niveles de conocimiento, es decir, cuando
es capaz de reconocer el sentido de lo que representa en cada situación los números racionales
de maneja, opera con ellos simbólicamente y comprende también el sentido de esas
operaciones que sabe realizar (sumas o productos, simplificación, etc.). Por ejemplo, el ejercicio
4
de obtener la fracción irreducible de 6
puede realizarse simplemente aplicando una serie de

reglas a modo de receta: obtenemos el máximo común divisor del numerador y el denominador
de la fracción y dividimos ambos por este máximo común divisor; el resultado de esa operación
es la fracción irreducible buscada. Si nos conformamos con esta resolución estaremos
renunciando a que el alumno alcance un conocimiento realmente significativo de lo que está
haciendo, y la simplificación será para él un mero procedimiento mecánico, sin un sentido de
mayor calado. Para suscitar esta comprensión más profunda de la situación, conviene realizar
4 2
esta operación gráficamente. Por ejemplo, la fracción se obtiene de la fracción simplemente
6 3

doblando tanto el número de divisiones del rectángulo como el número de partes que tomamos,
según se indica en la figura. De esta forma, el alumno comprende que la acción de multiplicar o
dividir por 2 numerador y denominador es exactamente hacer esta operación, que deja la
cantidad final invariante.

2
3

4
6

Figura 1.10. Obtención de fracciones equivalentes mediante recursos gráficos

Es solo a partir de estas consideraciones que el alumno puede ir creando representaciones

mentales de los números racionales y extrapolando lo que ocurre en las diferentes situaciones
para finalmente adquirir la destreza de operar de manera simbólica, pero significativa, con los
números racionales.

El proceso de representación del número racional

En la sección anterior aprendimos que la representación del número racional es clave para
acceder a un conocimiento formal y simbólico del mismo que sea, además, significativo. Más
aún, el manejo de diferentes tipos de representación hace al alumno versátil para dos
capacidades: la de conocer los números racionales desde sus diferentes interpretaciones,
diferenciándolas y, a la vez, relacionándolas, y la de comunicar resultados obtenidos y
argumentar con números racionales.
Es necesario, por tanto, incidir en el tema de la representación en el aula. Sin embargo, hay que
entender que el aprendizaje de las representaciones de los números racionales no es el objetivo
último, sino que éstas deben servir de herramienta para lograr un desarrollo significativo del
conocimiento formal y simbólico de los números racionales. Por esa razón, no es una estrategia
adecuada simplemente presentar diferentes representaciones para que el alumno las asuma y
las utilice porque, de este modo, le estaremos hurtando al alumno la oportunidad de descubrir
en cada representación aquel aspecto o interpretación de los números racionales que esa
representación puede brindar de manera privilegiada. Es necesario suscitar en el alumno que él
mismo construya las representaciones a partir de la búsqueda de un objetivo y, a su vez, llevar
a cabo con él actividades de interpretación, para facilitar la comunicación de resultados y la
capacidad de argumentación. A su vez, la búsqueda del objetivo, que es el motor que da
movimiento a todo, se suscita a partir de la resolución de algún problema propuesto a tal fin.
Por tanto, la cadena es la siguiente:
1. Planteamiento de un problema.
2. Búsqueda de un objetivo.
3. Construcción de una representación que satisfaga el objetivo buscado.
4. Interpretación de la representación.

Errores de aprendizaje del número racional y estrategias didácticas

La mayor fuente de dificultades de aprendizaje y errores en la asimilación de los números
racionales, sus propiedades y operaciones, surge cuando se introduce al alumno en el manejo
simbólico de los números racionales sin haber trabajado suficientemente en el ámbito de la
representación y sin que, por lo tanto, en el alumno se sinteticen adecuadamente los
significados profundos y los algoritmos. En la siguiente tabla recogemos algunos errores típicos
que pueden darse:
Tabla 1.6. Errores habituales en el aprendizaje de la aritmética racional
1 1
> porque 5 > 4 o, en forma decimal, 0,21 > 0,5 porque
En el orden 5 4
21 > 5
1+2 1
En la simplificación 3+2
= 3 porque el 2 se va
En la identificación de 2 3
= 4 porque 3 − 2 = 4 − 3
fracciones equivalentes 3
1 2 1+2 3
3
+ 5 = 3+5 = 8 o, en forma decimal, 0,21 + 0,5 = 0,26,
En la suma porque entienden que el 5 de 0,5 tiene el mismo orden de
valor que el 1 de 0,21 puesto que en ambos casos es la
última cifra

La frecuencia de estos errores muestra que, en ausencia de una adecuada capacidad de

representación del número racional, el alumno llega a utilizar las fracciones y los números
decimales como si fueran meros símbolos sujetos a unas relaciones gobernadas por ciertas
reglas pero todo ello desprovisto de sentido. En este estado, el alumno manifiesta un
conocimiento insuficiente del número racional.
La manera de evitar este problema es presentar desde el comienzo el número racional como
una entidad ligada a experiencias, reales o figuradas, de reparto, de operador o de razón y
facilitar la construcción de representaciones mediante diagramas u otras formas gráficas,
materiales sensoriales, etc. Todo ello debe, además, ligarse con la simbólica del número racional,
para que se conecte el lenguaje formal con el sentido del objeto matemático. Siguiendo a
Chamorro (2008), podemos describir un itinerario adecuado como aquel que sigue los
siguientes pasos:
1. Planteamiento de una situación problemática, real o figurada.
2. Pedir al alumno que resuelva la cuestión de manera gráfica y/o realizando la resolución
con algún tipo de material (papel, piezas de algún tipo, etc.).
3. Argumentar que la estrategia elegida resuelve el problema.
4. Traducir a términos simbólicos la situación y resolverla.
5. Explicar el sentido de las operaciones realizadas.

Ejemplo. Vamos a ilustrar las ideas anteriores con un ejemplo. Consideramos la siguiente
actividad:
2 6
Después de hacer deporte, yo me bebo 3 de litro de agua y mi hermano se bebe 5 de litro

de agua. ¿Cuántos litros de agua bebemos entre los dos?

Siguiendo el itinerario anterior y, una vez planteada la situación problemática, podemos pedir
al alumno lo siguiente:
- Representa el agua que bebe cada uno utilizando hojas de papel. Junta las
representaciones obtenidas. ¿Qué fracción de la unidad representa la cantidad
obtenida?
- Explica a tus compañeros el proceso que has seguido para obtener la solución.
- ¿Podrías resolver de otra manera el problema? Explica si el nuevo resultado
coincide con el anterior y cómo relacionarías ambas estrategias.

Ejemplo. Planteamos la suma 2,35 + 0,4. En esta ocasión vamos a utilizar material sensorial y
generar una situación de cambio de unidad.
- Tomamos los bloques multibase de base 10. Fijamos que la unidad sea el bloque
de 102 .
- Representamos los números indicados con los bloques y realizamos la operación.

2,35
 0,4

Figura 1.11. Representación de números decimales mediante bloques multibase

- Finalmente vemos que 2,35 + 0,4 = 2,75.

La génesis del pensamiento proporcional

El razonamiento proporcional abarca la capacidad de reconocer magnitudes proporcionales
(como aquellas que cuando crece una crece la otra, pero no de cualquier manera, sino
manteniendo constante un índice comparativo de crecimiento, que es la razón de
proporcionalidad), obtener y operar con la razón de proporcionalidad y manejar un lenguaje
apropiado.
Este tipo de razonamiento, que suele presentarse en el último ciclo de la etapa primaria, es
clave para que el alumno esté preparado para asumir el contenido matemático y científico
propio de las etapas posteriores. Puede suscitarse este tipo de pensamiento mediante
actividades de diversos tipos:
- Actividades de reconocimiento de magnitudes proporcionales. Se trata de
plantear problemas en que ambas magnitudes crezcan y en que ambas
magnitudes decrezcan, de forma proporcional y de formas no proporcionales, así
como de magnitudes que sean inversamente proporcionales.
- Actividades de cálculos con la razón de proporcionalidad. Se incluyen aquí
problemas cuya resolución involucre multiplicaciones y divisiones, primer usando
dobles y mitades (que pueden abordarse gráficamente y mediante materiales
manipulativos, como ya hemos explicado) y después introduciendo otras razones
de proporcionalidad más complejas. También es interesante que los números que
se presenten sean decimales y no naturales.
Una estrategia didáctica generalmente adecuada es la organización de los datos en tablas de
una entrada en donde se pueda visualizar el mutuo crecimiento o decrecimiento de las
magnitudes que se estén considerando, así como facilitar la intuición de la razón de
proporcionalidad. La tabla debe ser un elemento que construya de manera libre el propio
alumno con el objetivo de buscar los números por los que debe multiplicar o dividir para
encontrar la solución a la pregunta que se les hace a partir de los datos del problema.
Ejemplo. En un cierto supermercado, hemos comprado 15 kilogramos de manzanas por 30
euros. ¿Cuántos kilogramos de manzanas podremos comprar con 100 euros?
Tabla 1.7. Trabajo de proporciones mediante el uso de tablas
Datos × 10 ÷3
Kilos 15 150 50
Precio 30 300 100
Ejercicios
1. Representa en la recta real los números 𝑥 que verifican las siguientes relaciones:
a. |𝑥| = 0
b. |𝑥| = 1
c. |𝑥| = 4
d. |𝑥| = |−2|
e. |𝑥|3 = 8
1
f. |𝑥| =
4|𝑥|
2
g. |𝑥| ≤ 3

h. |𝑥| > 1
i. |𝑥| ≥ −2
1
j. |𝑥|−1 =
√3

2. Encuentra los valores de 𝑥 que cumplen las siguientes relaciones:

a. |𝑥 −1 |−1 = |−1|−1
b. |𝑥|2 − 2|𝑥| + 1 = 0
c. |𝑥 2 − 2𝑥| = |𝑥|
d. |𝑥|8 + |𝑥|6 + |𝑥|4 + |𝑥|2 + 2 = 1
e. |𝑥|2 + 1 = 0
f. |𝑥|2 ≥ 4
g. |𝑥|3 ≤ 1
|𝑥|
h. 1+|𝑥|
=2
1
i. 1 − |𝑥| ≤ 1

j. 1 − |𝑥|2 ≥ 0

3. Razona si es verdadero o falso.

a. |3 + 7| = |3| + |7|
b. |3 − 7| = |3| − |7|
c. |(−3) ∙ 7| = |−3| ∙ |−7|
d. (−3) ∙ 2 < (−3) ∙ 5

4. Calcula las siguientes expresiones:

 1 1 1 1 1 1
a. 3 − 4 [3 − 2 (4 − 5) + 3: (3 : 2)]
1 1 1 1 3
b. [3 + 2 (2 − 4) + 5] − 3 [4: (5 + 1)]

c. 22 − 42 : 8 + 25
𝑎 2 𝑏−3 𝑐 3
d.
𝑎𝑏3 𝑐 −1

5. Efectúa las siguientes operaciones:

a. (−2)[1 − (−2 + 5) − 3(3 − 1)] + (−1)[2 − (−3)] =
b. 2 − 1 − (−1)[−(−1) − (−1)(−1 − 1)] =
c. −3[−(2 − 5 ∙ 2) − (−1 + 2)] =
d. [−4 ∙ (−1) + (−2)(−2 + 4) − (−3) ∙ 2]2 − (−1)(−2 − 1) =
1 1 3 5 2 3
e. [(− − : ) ∙ (− + ) − 1] ∙ (− + 2) =
2 4 2 2 3 2

1 1 1 2 8 5
f. (1 − 2 + 4 − 8) ∙ 5 − 8 =
𝑎 3 𝑏𝑐+𝑎𝑏3 𝑐+𝑎𝑏𝑐 3
g. 𝑎𝑏𝑐−𝑎 2 𝑏𝑐+𝑎𝑏2 𝑐−𝑎𝑏𝑐 2
=
8−2 ∙23 ∙4−1 ∙16
h. 2−1 ∙32∙82 ∙4 −3
=

6. Ordena las siguientes familias de fracciones:

1 3 2 9 6 5 0
a. , , , , , ,
5 4 7 8 5 6 1
1 3 2 −9 6 5 0
b. 5
,−4,7, 8 ,5,−6,1

7. Ordena las siguientes familias de fracciones:

1 2 3 4 5
a. 1, 2 , 3 , 4 , 5 , 6
1 2 3 4 5
b. 1, − 2 , 3 , − 4 , 5 , − 6

8. Pasa a potencia única las siguientes expresiones:

a. 72 ∙ 62
b. (−4)3 ∙ 63
(−27)2
c. (−9)2

d. (−1)−1 ∙ (−(−1)−1 )

9. Resuelve:
 a. En un colegio que está formado por 900 alumnos, han obtenido una calificación de
aprobado en el presente curso 600 de ellos. Calcula el porcentaje de aprobados.
b. Un cierto coche cuesta 10800 euros, pero lo compramos aprovechando una oferta que
aplica un descuento del 7,5%. ¿Cuánto debemos pagar por el coche?
c. Calcula el precio de una bandeja de 9 pasteles en una pastelería en la que tienen una
oferta que deja la bandeja de 6 pasteles por 12 euros.
d. Hemos comprobado que 2 botes de pintura dan para pintar una superficie de 10 𝑚2 de
pared. Tenemos 3 botes de pintura y queremos pintar una habitación, dos de cuyas
paredes tienen una superficie de 3,5 𝑚2 cada una y las otras dos tienen una superficie
de 5 𝑚2 cada una. ¿Podremos hacerlo?

10. Calcula el término desconocido de las siguientes proporciones:

4 𝑥
a. =
10 60
9 12
b. 12
= 𝑥
3 𝑥
c. =
𝑥 12
8 2
d. =
32 𝑥
RESUMEN

En esta Unidad hemos estudiado el conjunto y la aritmética de los números enteros, el concepto
de número racional, las operaciones entre números racionales y sus propiedades. Hemos visto
cómo se suman, restan, multiplican y dividen números racionales y cuáles son las propiedades
de estas operaciones aritméticas. Hemos hecho hincapié en cómo se ordenan los números
racionales y cómo se compatibilizan las operaciones aritméticas con el orden natural en los
racionales. También las diferentes formas de expresar un número racional y la noción de
proporción aritmética vinculada al número racional. Finalmente, hemos hecho una reflexión
didáctica acerca del proceso de adquisición del número racional en sus diferentes facetas en
Primaria y sobre cómo facilitar el proceso de aprendizaje, detectando posibles dificultades y
errores.

En particular, los siguientes conceptos son clave:

• El conjunto de los números enteros es doblemente infinito y simétrico respecto del 0.

• Los números enteros admiten las operaciones de suma y resta como operaciones cerradas.
La suma es conmutativa, asociativa, admite elemento neutro (el 0) y cada número entero
admite elemento opuesto. El opuesto de un entero positivo es el entero negativo
correspondiente.
• Los números enteros admiten el producto como operación cerrada. La suma de enteros es
distributiva respecto de la suma.
• El conjunto de los números racionales es infinito, no discreto y contiene al conjunto de los
números enteros.
• Los números racionales admiten las cuatro operaciones básicas como operaciones cerradas.
En particular, todo número racional no nulo admite inverso para el producto.
• Hay dos expresiones posibles para los números racionales: en forma de fracción y en forma
decimal. De entre las posibles formas decimales, los números racionales pueden ser
decimales exactos, periódicos puros o periódicos mixtos.
• Es necesario introducir los números racionales en el aula según cuatro perspectivas
diferentes: como medida (vinculado a las magnitudes), como reparto, como un operador
(visión aritmética) y como una razón (que manifiesta proporción).
• Los alumnos de Primaria deben ser capaces de sintetizar un conocimiento intuitivo y un
conocimiento simbólico del número racional, para lo cual es necesario suscitar la
representación mental del número racional.