Acu.#1 3P Etica Medica
Acu.#1 3P Etica Medica
Acu.#1 3P Etica Medica
Sección: 1401
El ejercicio de toda profesión trae consigo una serie de habilidades que no se pueden
reducir únicamente a competencias de tipo cognitivo, sino que deben estar reforzadas
por destrezas procedimentales y actitudinales, es a este último a las cuales va dirigido
el presente artículo que busca contextualizar la importancia de la ética en la labor que
desempeña el Psicólogo jurídico, específicamente en los conceptos que emite con
respecto a los informes periciales como mecanismo para declarar imputable a una
persona frente a un delito.
El rol que desempeña el Psicólogo jurídico en los informes periciales como perito o
experto posee una magna responsabilidad dado que su principal función es la de emitir
un concepto sobre el estado de capacidad mental y conductual de las personas
implicadas en cuestiones de la administración de justicia para que a través de los
discernimientos psicológicos referenciados en los códigos penal, civil o laboral, se
establezca el nivel de responsabilidad.
1. La Psicología jurídica.
El estado actual de la Psicología Jurídica se puede entender según las distintas áreas
en que se está trabajando, reflejadas en la introducción de este documento. En todo
caso el campo de la Psicología Jurídica que estamos intentado definir según va
consolidando sus tareas de forma específica debe establecer sus límites y sus estados
fronterizos con otras áreas psicológicas con las cuáles colaborar
interdisciplinariamente.La Psicología Jurídica es un área especializada, básica y
aplicada de la Psicología Científica, que investiga e interviene sobre el comportamiento
humano que alcanza implicaciones Jurídicas.
.
1.1 Aspectos éticos generales de la labor pericial.
Ética del Psicólogo Jurídico. Todo profesional en el ejercicio de sus actividades debe
conocer y aplicar los principios éticos generales y los propios de sus funciones, sin
embargo a pesar de que se considera obvio que se conozcan y se apliquen, resulta
válido entender la conceptualización sobre ética planteada por Connock & Johns (1995)
quien establece que hablar de ética es hablar de justicia, es decir, entre lo que está
bien y lo que está mal, es definir cómo aplicar reglas que fomenten un comportamiento
responsable tanto individual como en grupo; es la esencia de cada persona y se
encuentra en la práctica de los valores los cuales afectan sus decisiones. De esta
definición se resalta la ética como función de estabilidad social, como reguladora de lo
correcto, lo incorrecto y de la justicia y su destino de obedecer reglas y leyes para
evitar castigos o infracciones.El Psicólogo dentro del campo jurídico es instituido a
partir de la Ley y lo social, para ser auxiliar de la justicia en cuanto que su labor se
ajusta a los requerimientos específicos de ésta, realizando lo que le es propio de su
profesión, sin olvidar el compromiso ético que debe conservar con la persona
intervenida.
Principios éticos del psicólogo jurídico. Antes de entrar de manera concreta a los
principios éticos que regulan la práctica del psicólogo que labora en el contexto jurídico,
vale la pena revisar algunos de los elementos que constituyen las buenas prácticas que
deben regir su conducta: Respeto a la persona: guiar su práctica teniendo en cuenta la
protección de los derechos humanos, buscando garantizar la honra de la persona y una
práctica responsable, honesta y sincera atendiendo a los principios éticos universales y
sin transgredir la dignidad humana.
Caso
Mary Flora Bell (1957-Inglaterra) fue encarcelada en diciembre de 1968, culpable del
asesinato de dos niños; Martin Brown (de cuatro años de edad) y Brian Howe (de tres
años de edad). Bell tenía once años cuando fue encarcelada por los asesinatos.
En sus declaraciones, Mary parecía haber disfrutado ambos asesinatos. Confesó sin
aparente remordimiento el crimen de Martin Brown alegando que, al empujarlo del
parque, el niño seguía consciente por lo que ella decidió estrangularlo.
La policía, impactada, corroboró estas declaraciones al encontrar el diario de Mary
donde describe cada hecho con lujo de detalles. Según las pericias psiquiatricas fue
declarada psicópata, encerrada en prisión y condenada en diciembre de 1968 por el
cargo de asesinato en segundo grado, a 23 años de cárcel. Los periódicos la
bautizaron entonces como “La Niña Asesina”. Se dice que el maltrato comenzó al ser
rechazada por una adolescente e insensible madre, Betty, quien a gritos y con asco
pedía que le alejaran a la bebé, e intentando, durante los primeros meses de Mary,
asesinarla fingiendo “accidentes”.
Mary era una niña muy hermosa con rostro de muñeca pero con facciones andróginas
que le daban un aspecto de dureza. Dureza que no sería pura fachada ya que Mary
tuvo que sobrevivir a los intensos abusos de su madre, quien se dedicaba a la
prostitución y desde los 5 años forzó a la niña a participar en juegos sexuales. A los
ocho se la vendió a un cliente pedófilo para que la “desfloró”. Esto luego se convertiría
en un hábito de Betty para complacer a sus clientes más depravados.
Así creció Mary Flora Bell, en un ambiente enfermo, disfuncional y violento.
Por esos motivos es que la asesina desahogaba los abusos recibidos torturando
animales como perros y gatos, hasta el 25 de mayo de 1968, un día antes de cumplir
los 11 años, cuando Mary le quitó la vida al pequeño Martin Brown. El 21 de mayo de
2003, Mary Bell obtuvo la victoria en la Corte, para mantener su anonimato y el de su
hija por el resto de sus vidas. Pero los investigadores privados, contratados por la
familia de Martin Brown, siguieron rastreando. Tuvo que vivir escondida con el temor de
que, a donde fuera, alguien podría identificar en ella a la “Niña Asesina”. Actualmente
se desconoce su identidad y su paradero exacto, pero sus horribles crímenes nunca
serán olvidados.
Conclusion
El ejercicio no responsable por parte del psicólogo jurídico, puede incidir conducir a
dificultades disciplinarias así como en los ámbitos penal y civil justamente porque el
profesional trabaja con componentes que son muy susceptibles, entre ellos la vida, la
integridad y la libertad de las personas que hacen parte de este procedimiento judicial.
Todo profesional debe tener especial cuidado en el desarrollo de los informes periciales
dado que se podrían generar algunos conflictos de tipo ético: que el perito esté
influenciado por interese particulares o de la instancia que demanda sus servicios, que
al informe no se le da el suficiente soporte científico o su explicación sea muy
superficial, quebrantar los principios de confidencialidad, beneficencia, respecto a la
dignidad con los que se opera la información recolectada y los instrumentos utilizados.