Purificación
Purificación
Purificación
Levítico 20 7-Santificaos, pues, y sed santos, porque yo Jehová soy vuestro Dios
Deuteronomio 28 9-Te confirmará Jehová por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los
mandamientos de Jehová tu Dios, y anduvieres en sus caminos.
Santiago 4 8- Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de
doble ánimo, purificad vuestros corazones
2 Corintios 7 1-Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de
carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.
Levítico 11 44- Porque yo soy Jehová vuestro Dios; vosotros por tanto os santificaréis, y seréis santos,
porque yo soy santo
Levítico 11 45-Porque yo soy Jehová, que os hago subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios: seréis,
pues, santos, porque yo soy santo.
Levítico 12 4- Mas ella permanecerá treinta y tres días purificándose de su sangre; ninguna cosa santa
tocará, ni vendrá al santuario, hasta cuando sean cumplidos los días de su purificación
Éxodo 19 5- Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial
tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.
Levítico 20 26-Habéis, pues, de serme santos, porque yo Jehová soy santo, y os he apartado de los pueblos
para que seáis míos.
Levítico 21 8-Le santificarás, por tanto, pues el pan de tu Dios ofrece; santo será para ti, porque santo soy
yo Jehová que os santifico.
Hebreos 1 3-el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta
todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros
pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas
Hebreos 9 13-Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas
a los inmundos, santifican para la purificación de la carne
Hebreo 12 14-Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Deuteronomio 23 Y los días que anduvimos de Cades-barnea hasta cuando pasamos el arroyo de Zered fueron
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treinta y ocho años; hasta que se acabó toda la generación de los hombres de guerra de en medio
del campamento, como Jehová les había jurado.
1 Pedro 2 9- Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por
Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
Deuteronomio 26 16-Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y decretos; cuida, pues, de
ponerlos por obra con todo tu corazón y con toda tu alma. 17 Has declarado solemnemente hoy
que Jehová es tu Dios, y que andarás en sus caminos, y guardarás sus estatutos, sus
mandamientos y sus decretos, y que escucharás su voz. 18 Y Jehová ha declarado hoy que tú eres
pueblo suyo, de su exclusiva posesión, como te lo ha prometido, para que guardes todos sus
mandamientos; 19 a fin de exaltarte sobre todas las naciones que hizo, para loor y fama y gloria,
y para que seas un pueblo santo a Jehová tu Dios, como él ha dicho
Josué 24 19-Entonces Josué dijo al pueblo: No podréis servir a Jehová, porque él es Dios santo, y Dios
celoso; no sufrirá vuestras rebeliones y vuestros pecados.
1 Pedro 1 14- como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra
ignorancia; 15 sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda
vuestra manera de vivir; 16 porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
1 Pedro 1 22-Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para
el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro; 23 siendo
renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y
permanece para siempre
1 Pedro 2 1-Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las
detracciones, 2 desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por
ella crezcáis para salvación, 3 si es que habéis gustado la benignidad del Señor.
Tito 2 11-Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los
hombres, 12 enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en
este siglo sobria, justa y piadosamente, 13 aguardando la esperanza bienaventurada y la
manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, 14 quien se dio a sí mismo
por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de
buenas obras.
2 Timoteo 1 9-quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el
propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos
Efesios 5 3-Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como
conviene a santos
Filipenses 2 14- Haced todo sin murmuraciones y contiendas, 15 para que seáis irreprensibles y sencillos,
hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual
resplandecéis como luminares en el mundo; 16 asidos de la palabra de vida, para que en el día de
Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado.
Romanos 6 17-Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a
aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; 18 y libertados del pecado, vinisteis a ser
siervos de la justicia.
22- Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por
vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.
Romanos 12 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en
sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
Isaías 57 15-Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo
habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el
espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados.
1 Pedro 2 11 11
Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que
batallan contra el alma,
1 Pedro 2 9 Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios,
para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;