Tema 2: La Persona Física

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TEMA 2: LA PERSONA FÍSICA

PERSONA: Sujeto de derecho (Libro I CC: De las personas)

Art. 10 CE → Personalidad: aptitud para ser titular de derechos y obligaciones

Las personas tenemos derechos, pero también obligaciones. En cualidad de titulares de derechos
tenemos algunos que nos son fundamentales (del 14 al 29.2 y el 30.2). Al ser fundamentales si
se violan tenemos derecho a acudir al Tribunal Constitucional. Más allá de ellos se reconocen
otros derechos que no son fundamentales, sino constitucionales o derechos de las personas (por
ejemplo, propiedad privada). Los principios rectores de la política social y económica los
inspiran. Salvo que haya una ley que lo regule no podemos acudir a ningún tribunal que los
defienda.

CAPACIDAD JURIDICA Y CAPACIDAD DE OBRAR:

Capacidad jurídica: atribución genérica que el ordenamiento jurídico hace a las personas
(físicas o naturales y jurídicas) de la condición de sujeto de derecho, ya que atribuye la
titularidad de derechos y obligaciones. Se consiguen desde que se nace (desde que se rompe el
cordón umbilical). Titularidad de los derechos.

Capacidad de obrar: aptitud para realizar con eficacia actos jurídicos, es decir, adquirir o
ejercitar derechos y asumir obligaciones. Puede ser plena o limitada. Es algo estático que se
pone en ejercicio. Ejercicio de los derechos.
La “capacidad de obrar” es la aptitud para actuar eficazmente en el tráfico jurídico,
ejercitando derechos, cumpliendo obligaciones y realizando actos y contratos.
Es “graduable”: se puede tener en mayor o menor medida. Como regla general, tienen plena
capacidad de obrar los mayores de edad no incapacitados. Puede verse restringida o limitada
cuando se den en la persona determinadas circunstancias.

En el caso de las personas físicas:

 falta de capacidad por inmadurez asociada a la edad (por ejemplo, los menores de edad
a los que el derecho civil no los considera maduros para realizar determinados actos)

 causas de incapacidad (enfermedades o deficiencias persistentes con trascendencia


psíquica que impidan a la persona gobernarse por sí misma)

Mecanismos de representación (legal): patria potestad (padres), tutela y curatela (asistencia).

En el caso de las personas jurídicas: la imposibilidad para obrar deriva de su propia naturaleza
como colectividades de personas o de bienes, que impide que se manifieste ninguna voluntad a
no ser por medio de una persona física (actuación como órganos).

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a) La minoría de edad: como regla general, los menores no pueden actuar por sí mismos en el
tráfico jurídico (contratando, ejercitando derechos, cumpliendo obligaciones…), sino que han de
hacerlo a través de sus representantes legales (padres). No obstante, podrán actuar eficazmente
cuando la Ley expresamente lo permita, o cuando realicen actos que se correspondan con sus
condiciones de madurez (otorgar testamento notarial a los 14, casarse a los 16, ser oído...). Un
caso especial es el de los menores emancipados: el menor de edad, pero mayor de 16 años,
puede obtener la emancipación por concesión de los padres o del tutor (“habilitación de edad”),
por concesión del Juez, por el hecho de vivir de forma independiente con el consentimiento de
los padres si tiene más de 16 años.

El emancipado puede actuar por sí mismo como si fuera mayor de edad, pero necesita la
asistencia de sus padres o de un curador para realizar eficazmente los actos y contratos que
tienen mayor trascendencia (art. 323 CC: tomar dinero a préstamo, gravar o enajenar bienes
inmuebles, establecimientos mercantiles o industriales u objetos de extraordinario valor). En
estos casos los padres o el curador no actúan representando al emancipado; es éste el que actúa,
aunque necesita la asistencia de aquéllos (complemento de capacidad). En caso contrario:
anulabilidad.

El emancipado todavía no ha alcanzado la mayoría de edad, es un mayor de 16 años que se le


trata como emancipado o bien porque se lo han concedido los titulares de la patria potestad o el
juez o porque vive de forma independiente.

b) La incapacitación: las personas que sufren enfermedades o deficiencias persistentes de


carácter psíquico o físico, que les impidan gobernarse por sí mismas, pueden ser incapacitadas
(concepto distinto de la discapacidad). La incapacitación de una persona sólo puede ser
declarada por sentencia judicial, dictada tras el correspondiente procedimiento, y en la que
deberá declararse el grado de incapacitación del sujeto, en atención a su estado y circunstancias.
En función del grado de incapacitación, el incapacitado habrá de actuar a través de sus
representantes legales (ya sean sus padres o un tutor) o bien con la asistencia de un curador.

c) La prodigalidad: el sujeto que de modo habitual “malgasta sus bienes”, poniendo en peligro
el derecho de sus familiares a recibir los alimentos a los que legalmente tienen derecho puede
ser declarado “pródigo” por sentencia judicial, debiendo nombrársele un curador que le asista en
aquellos actos que indique la propia sentencia.

d) La declaración de concurso: la persona insolvente, que carece de bienes suficientes para


hacer frente a todos sus acreedores, puede ser declarada judicialmente en situación de
“concurso de acreedores” (Legislación Concursal) que tiene por objeto destinar el patrimonio
del deudor común a la liquidación de las deudas pendientes y al pago ordenado de los
acreedores. La declaración de concurso priva al concursado de la facultad de administrar
libremente sus bienes: dichas facultades de administración quedarán sometidas a la intervención
de los administradores del concurso o quedarán suspendidas, correspondiendo la gestión a los
propios administradores.

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CAPACIDADES ESPECIALES (vgr.175.1 CC)
PROHIBICIONES ESPECIALES (art. 1459 CC)

COMIENZO DE LA PERSONALIDAD

Antes: artículo 29 CC:

 “Figura humana”
 Vivir “24 horas enteramente desprendido del seno materno”

Modificado por la ley 20/2011, de 21 julio, del Registro Civil:

“El nacimiento determina la personalidad; pero el concebido se tiene por nacido para todos los
efectos que le sean favorables, siempre que nazca con las condiciones que expresa el artículo
siguiente.”

Artículo 30 CC: “La personalidad se adquiere en el momento del nacimiento con vida, una vez
producido el entero desprendimiento del seno materno.”

Nacimiento “con vida”:

 Por sus propios órganos


 De forma asistida

La situación del nasciturus: “El nacimiento determina la personalidad, pero al concebido se le


tiene por nacido para todos los efectos que le sean favorables…”

En el orden constitucional, la vida es un bien jurídico protegido por el art. 15 CE: “Todos tienen
derecho a la vida y a la integridad física y moral” (STC 53/1985, de 11 abril)

Donaciones a concebidos (art. 627 CC)


¿Pueden ser aceptadas? Sí: por las personas que legítimamente les representarían de haberse
verificado ya su nacimiento, es decir, sus representantes legales, titulares de la patria potestad o
tutores.

Herencia a lo que es llamado el nasciturus (arts. 959 y ss CC)


Reglas en beneficio del nasciturus:

 Se suspende la división de la herencia hasta que se verifique parto o aborto


 Se proveerá a la seguridad y administración de los bienes
 Pueden adoptarse medidas para evitar la suposición de parto o que la criatura pase por
viable no siéndolo

Retroacción de efectos al momento de la concepción

Para todos los efectos favorables, la personalidad se tiene desde el momento de la concepción,
pero… ¿cuándo se ha concebido un hijo?

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Arts. 116 y 117 CC: términos mínimos y máximos de gestación (presunción iuris tantum), es
decir, 180 y 300 días

Artículo 116 CC: se presumen hijos del marido los nacidos después de la celebración del
matrimonio y antes de los 300 días siguientes a su disolución o a la separación legal o de hecho
de los cónyuges.

PRESUNCION DE PATERNIDAD: Nacido el hijo dentro de los 180 días siguientes a la


celebración del matrimonio, podrá el marido destruir la presunción mediante declaración
auténtica en contrario formalizada dentro de los 6 meses siguientes al conocimiento del parto.
Se exceptúan los casos en los que:

 hubiere reconocido la paternidad expresa o tácitamente


 hubiese conocido el embarazo de la mujer con anterioridad a la celebración del
matrimonio, salvo que, en este último supuesto, la declaración auténtica se hubiera
formalizado, con el consentimiento de ambos, antes del matrimonio o después del
mismo, dentro de los 6 meses siguientes al nacimiento del hijo (art.117 CC)

Artículo 31: “La prioridad del nacimiento, en el caso de partos dobles, da al primer nacido los
derechos que la ley reconozca al primogénito.”

PRUEBA DEL NACIMIENTO: INSCRIPCION EN EL REGISTRO CIVIL


Directamente en el hospital el personal sanitario identificará al recién nacido, al que tomará las
huellas plantares y comprobará su filiación materna: en un plazo de 72 horas, la dirección del
hospital deberá comunicar los nacimientos al Registro Civil correspondiente.

Documentación: Certificado médico de nacimiento, documentos de identidad de los padres que


estén vigentes, Libro de familia o certificado de matrimonio si lo hubiera, y formulario oficial
en el que se solicita la inscripción cumplimentado y firmado por la persona o personas obligadas
a comunicar el nacimiento, que debe incluir su identificación y nacionalidad, el nombre elegido,
el orden de sus apellidos y su filiación paterna. El certificado literal de nacimiento se enviará a
los padres por correo ordinario o electrónico. Los progenitores podrán realizar ellos este trámite
en el Registro Civil.

Inscripción en el Registro Civil en el plazo de 24 horas desde nacimiento hasta 10 días (+ 30


días: expediente registral). En el registro quedarán anotados los siguientes datos: la fecha, hora
y lugar de nacimiento, el sexo del bebé y su nombre y apellidos, la filiación, y la hora de
inscripción. Tanto el padre como la madre, e incluso otros familiares, como abuelos, tíos y
primos, pueden inscribir al bebé si sus padres están casados, pero, en caso contrario, ambos
progenitores deben acudir al registro. Además, si cualquiera de los dos hubiera estado casado
anteriormente tendrán que aportar sentencia firme de divorcio.

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EXTINCION DE LA PERSONALIDAD

Artículo 32 CC: “La personalidad civil se extingue por la muerte de las personas.”

Prueba del fallecimiento: la inscripción de defunción

Al margen de la de nacimiento. Da fe de la fecha, hora y lugar, o, en todo caso, límites y primer


lugar conocido de aparición del cadáver. Será necesaria:

 Declaración de quien tenga conocimiento cierto de la muerte, antes de la inhumación.


 Certificación médica de la existencia de señales inequívocas de muerte.

Si se duda, entre 2 o más personas llamadas a sucederse, quién de ellas ha muerto primero:

 el que sostenga la muerte anterior (premoriencia) de una o de otra, debe probarla;


 a falta de prueba, se presumen muertas al mismo tiempo (conmoriencia) y no tiene lugar
la transmisión de derechos de uno a otro.

Respecto a la presunción de muerte del ausente y sus efectos, se estará a lo dispuesto en el título
VIII de este libro (art. 34 CC).

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