I Ching Parte 5
I Ching Parte 5
I Ching Parte 5
hallaba ubicado después del que ahora figura como § 3. Los dos
parágrafos indudablemente deben estar juntos, aun cuando só-
lo guardan una conexión bastante indirecta con lo que sigue.
Contienen especulaciones numerológicas que se conectan con la
sección Hung fan del Libro de los Documentos. Constituyen
probablemente el comienzo de la unión entre la especulación nu-
merológica del Libro de los Documentos y la doctrina yin-yang
del I Ching, que desempeñó un papel importante, en particular
durante la dinastía Han. Para mejor entendimiento de esta cues-
tión, a la cual aquí sólo ha de aludirse brevemente, debemos re-
montarnos a la figura gráfica conocida bajo el nombre de ho t'u,
el plano del río Amarillo, que según la tradición procede de Fu
Hsi. Este plano muestra la génesis de «los cinco estados de
mutación» (wu hsing, por lo común erróneamente denominados
«elementos»), a partir de números pares e impares.
Madera Metal
Figura 4
SUR
Madera^^/^ Fuego Verano ^ . Tierra
/
( É % ÓOOOOOOOO
ESTE OESTE
Primavera
Figura 5
Se utilizan 49 tallos
de ellos se deducen la primera vez 5 + 4 + 4 = 13 tallos
36 tallos
Aquí se exponen las condiciones del sentido del cielo y las si-
tuaciones de los hombres, tal como las reconocieron los santos y
sabios. El cerrarse y abrirse de las puertas es el cambio entre
quietud y movimiento. Son al mismo tiempo dos estados de
la práctica del yoga, accesibles únicamente al ejercicio personal.
40 6 Libro II: El material
lo. Los juicios añadidos (para los trazos individuales) indican las
modificaciones. Esto corresponde a las modificaciones de las es-
taciones del año. Las decisiones acerca de ventura o desventura
corresponden entonces a los signos que aparecen en el cielo.
SEGUNDA PARTE
En este caso las líneas son las sentencias adjudicadas a los tra-
zos individuales, que entran en vigor cuando tales trazos equiva-
len a nueve o a seis, vale decir cuando se mueven. En ellas se ven
reproducidas o diseñadas las modificaciones de las diferentes si-
tuaciones.
De ahí que las sentencias del libro sean tan a menudo ad-
vertencias ante peligros. El que cobra conciencia del peli-
gro, procura su paz; quien lo toma a la ligera, procura su
derrocamiento. El sentido de este libro es grande. N o omi-
te ninguna de las cien cosas. Se preocupa del comienzo y
del fin y está involucrado en la palabra «sin falla». He ahí el
sentido de las mutaciones.
I. GENERALIDADES
3. EL TIEMPO
4. LOS PUESTOS
5. EL C A R Á C T E R DE LOS TRAZOS
a) Correspondencia
b) Solidaridad
L
4 68 Libro II: El material
1+4 + 3 1 +1+2
01+3+4 o 1 +2+ 1
Si la suma es
9 W + 4 (3) + 4 (3)
o bien 5 (3) + 4 (3) + 8 (2) = 8,
o bien 5 (3) + 8 (2) + 4 (3).
Aparte del método del oráculo por medio de los tallos de mi-
lenrama está también en uso un método abreviado con mone-
das, para el cual normalmente se utilizan antiguas monedas chi-
nas de bronce que tienen un agujero en el medio y escritura en
una de sus caras. Se toma para ello tres monedas que se tiran si-
multáneamente. Uno de estos tiros es una línea. La escritura
vale como yin y se cuenta como 2, la otra faz vale por yang
y se cuenta como 3. De ello surge luego el carácter del trazo
correspondiente. Cuando las tres monedas son todas yang, es
un 9; si las tres monedas son todas yin, es un 6. Dos yin y un
yang suman un 7, dos yang y un yin suman un 8. Para encontrar
los hexagramas en el Libro de las Mutaciones se procede del
mismo modo que en el caso del oráculo con los tallos de milen-
rama1.
Existe otra forma más del oráculo con monedas, en la cual,
aparte de los signos del I Ching, se suele utilizar también los
cinco «estados de mutación», los «signos cíclicos», etc. Es un
método empleado por adivinos chinos. Esa modalidad no utili-
za, empero, el texto de los hexagramas del I Ching. Se cuenta
que se trata de una continuación del antiguo oráculo por medio
de los caparazones de las tortugas, que en la antigüedad se con-
sultaban junto con el oráculo de los tallos de milenrama, pero
LOS COMENTARIOS
PRIMERA SECCIÓN
*
/. Ch'ien / Lo creativo
Signos entreverados
L o creativo es fuerte.
EL DICTAMEN
LA IMAGEN
Al comienzo un nueve:
a) Dragón tapado, ¡no actúes!
b) «Dragón tapado, ¡no actúes!»
Pues lo luminoso todavía se halla abajo.
Nueve al tope:
a) Dragón soberbio tendrá que arrepentirse.
b) «Dragón soberbio tendrá que arrepentirse.»
Pues lo que está lleno, no puede durar.
2. K'un / Lo receptivo
Signos entreverados
L o receptivo es blando.
EL DICTAMEN
LA IMAGEN
El cielo se mueve con fuerza. Por eso se dice de el: «él va». La
tierra lleva a cabo a través de la forma. Por eso se dice de ella:
«estado». La tierra está duplicada, lo cual indica su masa, necesa-
ria para que ella pueda entregarse sin menoscabo de su esencia.
Así también el hombre ha de poseer fuerza interior, masa en su
naturaleza, y amplitud espacial, con el fin de ser capaz de sopor-
tar el mundo sin caer bajo su influjo.
Al comienzo un seis 1 :
a) «Si uno pisa escarcha, se aproxima el hielo firme.»
b) Cuando lo oscuro ya comienza a congelarse y continúa
por esa vía, se llega hasta el hielo firme.
Seis al tope:
a) Dragones luchan en la pradera,
su sangre es negra y amarilla.
b) «Dragones luchan en la pradera»:
el camino llega a su fin.
La secuencia
Luego de existir el cielo y la tierra, se originan los dife-
rentes seres. L o que llena el espacio entre cielo y tierra son
precisamente los seres individuales. Por esta razón sigue
ahora el signo: La dificultad inicial. Dificultad inicial sig-
nifica tanto como cumplir, llenar.
Signos entreverados
Chun es visible, pero aún no ha perdido su morada.
EL DICTAMEN