Dos Noches (Cuento)

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3

DOS NOCHES

Aquella noche en aquella fiesta alguien cubrió mis ojos con sus delicadas manos, no la pude ver
poque estaba atrás mío, camino sigilosamente hasta que se paró al frente mío y sus labios sin previo
aviso tocaron los míos, eran tan suaves y jugosos que no los pude olvidar fue un beso hermoso,
duramos unos pocos segundos, pero fue suficiente para que ese beso quedara impregnado en mí, las
luces se apagaron y ella me soltó, entre la multitud se perdió, no la busque, solo me quede ahí
preguntándome ¿Quién me beso?
Yo vivía en Sogamoso, una ciudad que tenía lo suficiente para vivir bien y todo lo que necesitara
estaba al alcance de mis manos. Esa mañana me levente como cualquier otro día, tarde porque
simplemente mi cuerpo se siente amarrado por las cobijas que le era imposible salir de ahí, pero mi
mama pego un grito que me levanto al instante.

- ¡NOAAAAAAA!
- Entre dormido respondí – ya voy mama

Me levante, pero mi cuerpo sabía que no quería solo me forcé, me duche y me puse mi uniforme
que era lindo, me gustaba mucho, era de las pocas cosas que me gustaban del colegio, mi uniforme
era con blazer azul, camiseta blanca, un chaleco gris, una corbata de cuadritos de tonos azules y un
pantalón gris con zapatos azules, a muchos no les gustaba porque lo miraban sombrío, pero yo lo
amaba, me encantaba el azul y ese uniforme lo tenia casi en todas sus predas.
Desayune un huevo y chocolate, luego partí a mi colegio que quedaba a dos cuadras de donde yo
vivía, para los nuevos era fácil identificarlo, pues constaba de 4 pisos y era tan grande que, aunque
estudiaran más de mil personas aun sobraba mucho espacio, al llegar salude a mis profesores en
portería y luego me dirige al salón sin saludar a nadie, esos días mis ánimos estaban por el piso así
que no me daban ganas de hablar.
Sonó el timbre que indicaba el inicio de clases, ese día pensé que iba a ser normal pero cuando entro
mi profesora de matemáticas a lado de ella venia alguien más, que entro muy tímida como
acurrucando su cuerpo para defenderse de este nuevo mundo al cual iba a entrar, yo la vi y me
parecía una mujer muy bella de las pocas que el uniforme le sentaba bien, todo su cuerpo creaba
una armonía entre ella y el uniforme que cada parte de su cuerpo emanaba su propia belleza. Al
frente de todos se presento

- Hola, me llamo Hana, soy de Bogotá y tengo 17 años – su voz sonó entrecortada, pero con
una timidez que emanaba confianza
La profesora le indico donde sentarse y por suerte gracias al universo le toco a lado mío, al sentarse
la vi y ella me vio, fue incomodo, pero de cerca pude ver ese hermoso rostro que parecía una selva
virgen que nadie había tocado, la saludé muy tímidamente y ella me devolvió el saludo, las clases se
sucedieron, pero no puse atención solo la presencia de ella me distraía que lo demás no me
importaba.
En el recreo fue y compré una empanada, cabe decir que fue toda una odisea, todos esos simios
amontonados y hambrientos hacían que la tarea de comprar algo fuera más difícil que una
evaluación, pero se logró y pude comer mi empanada en una esquina, sentado y escuchando muisca
de BTS, aunque sentí pasos que venían hacia mí, ese alguien solo sentó alado mío y no dijo ni una
sola palabra hasta que sonó el timbre
- ¿Puedo tener tu número? – me pregunto mirándome a los ojos
- Quedé desconcertado porque luego de pasar todo el recreo juntos sin decir una palabra y lo
único que me dijo fue eso, respondí – si – y le di mi numero
Luego nos fuimos juntos para el salón y nos sentamos, y en aquel preciso momento como que a los
dos no nos importaron las clases y empezamos a dialogar como dos desconocidos que querían saber
lo uno de lo otro sin temor a que pensara. Las clases se acabaron como a eso de las 2 de la tarde y
nos despedimos en la salida con una sonrisa en nuestros rostros que parecía que indicaban que algo
iba suceder entre nosotros y así fue, en los meses siguientes fue hermoso, imposible de olvidar, no
éramos novios pero éramos más íntimos que cualquier otra pareja hasta en lo prohibido nos
desenvolvimos que aun ahora después de mucho tiempo puedo sentir como sus manos recorrían mi
cuerpo y como las mías tocaban aquel cuerpo que una noche donde la luna iluminaba mas que el sol
hacia que su cuerpo brillara y cada parte de su cuerpo desnudada me decía que podía tocarla y
disfrutar de aquella noche.
Estábamos en ultimo grado y nos ayudábamos para no entrar en un estrés por toda la carga que
teníamos, al final lo logramos y nos graduamos, en el día de la graduación en la noche teníamos la
fiesta de prom y yo me puse de lo más elegante, un traje azul oscuro que me mire al espejo y pensé
me veo guapo, llegue a la zona de encuentro y la vi a ella bajar de una taxi traía un vestido azul
marino escarchado que le descubría la clavícula, ella se distinguía entre todas las demás, era la mas
hermosa de la noche, se dirigió hacia mi

- Estas guapo, bastante guapo que no se si esta noche podre controlarme – lo dijo con una
timidez, pero confiada de lo que iba hacer
- Me quedé mudo por un instante luego le dije – prepárate para esta noche – mi voz sonaba
muy coqueta y segura de si misma
Nos subimos al bus y nos sentamos el uno alado del otro, le puse uno de mis audífonos y
escuchando música esperamos hasta llegar al lugar, el lugar se llamaba hacienda la luna roja, el
nombre parecía de motel pero para lo que sucedió en la noche era aceptable, la comida era bastante
exquisita, era un pasta teriyaki acompañada de un vino exquisito y un pan francés que lo devore al
instante pues tenía hambre, Hana lo comió un poco más lento pero lo disfruto luego inicio la hora
loca y nos dirigimos a bailar, fue un momento agradable donde nuestros cuerpos liberaron todo lo
que tenían guardado, ese día baile con todo el salón.
La noche se iba poniendo mas y el DJ puso baladas románticas pero me quede solo porque no
encontraba a Hana para bailar así que en medio de la multitud estaba solo, pero alguien cubrió mis
ojos con sus delicadas manos, no la pude ver poque estaba atrás mío, camino sigilosamente hasta
que se paró al frente mío y sus labios sin previo aviso tocaron los míos, eran tan suaves y jugosos
que recordé que esto ya había pasado hace un año en otra fiesta y que aun me preguntaba quien fue,
reconocí los labios y ella bajo sus manos y era Hana

- que me dijo - fui yo hace un año y ahora, cuando te vi me enamore a primera vista, pero esa
noche no fui capaz de hablar contigo me pase a tu colegio y te conocí nos enamoramos y
ahora estamos aquí, tu al frente mío yo al frente tuyo es hora de que salgamos como pareja
y ya no como amigos íntimos
mi corazón comenzó a palpitar a mil por hora que se exalto de la emoción y la tome con mis brazos
y la bese y al instante nuestros cuerpos pedían salir de aquel lugar, fue lo que hicimos tomamos un
taxi ignorando a todos, fuimos a mi casa que estaba sola y aquella noche nuestros cuerpos se
deleitaron el uno del otro como nunca, algo que nuca olvidare y hoy luego de 10 años ella está en
altar esperándome para iniciar otra etapa. Fin.

También podría gustarte