Arias Osorio Elizabeth ProductoIntegrador

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 9

UNIVERSIDAD JUÁREZ AUTÓNOMA DE TABASCO

DIVISIÒN ACADÈMICA ECONÒMICO ADMINISTRATIVO

Lic. En contaduría pública

Tema:
“Elaboración de un cuento”

Materia:
Lectura y redacción
Catedrático:
Mtro. Esther Morales Priego

Alumna:
Elizabeth Arias Osorio

Matricula:
213T1004
Correo electrónico institucional:
213T1004@alumno.ujat.mx
MACUSPANA, TABASCO, 06 DE NOVIEMBRE DE 2021
os De

Su Una

Niña

Autora:
Elizabeth
Sueños de una niña

En un pueblo no muy lejano---bueno solo para algunos- llamado Sn Fernando, en

honor al santo patrono—Lugar lleno de historia, su gente muy alegre, lugar tranquilo,

rodeado de árboles, flores, animales. Bueno ahí vivía

una pequeña niña, tierna, inocente, alegre, sensible, era

blanquita, cabello castaño, ojos verdes; ella solo vivía su

día a día sin importar lo que pasaba a su alrededor.

Pero esta pequeña, a pesar de su corta edad, soñaba con tener muchas cosas cuando

fuera grande. Era una niña como cualquier otra, acudía a la escuela y le gustaba

aprender cosas nuevas, cuando había días lluviosos- ¿Qué creen? - ella lloraba por ir a

estudiar. Pero su madre --una mujer de aproximadamente 38 años-- no la dejaba ir a la

escuela, por temor que se enfermara de un resfriado; la mamá de esta pequeña era

una mujer muy trabajadora, para sacar a sus 3 hijos adelante trabajaba y hacia lo que

podía, para darle lo que necesitaban. La pequeña era feliz, juagaba con sus amigos,

primos, todos casi de su misma edad, a ella le gustaba ir a casa de sus abuelos, pues

allí Vivian sus primos, pero lo que mas le gustaba era el

amplio patio que tenían, pues era un gran terreno lleno

de árboles frutales, podían correr, andar en bicicleta,

ella era feliz en ese su lugar favorito, como se refería

siempre.

Con el paso del tiempo, ella fue creciendo—como cualquier niño que cree al paso de

los años-- y se dio cuenta que todo lo que vivía iba desapareciendo, pues cada uno de
sus primos y amigos, ya empezaban a tener otros gustos, otras ideas. Ella empezó a

darse cuenta también de muchas cosas que pasaban a su alrededor, de las cuales no

se daba cuenta antes. Pero ella seguía siendo una niña alegre, sonriente siempre,

ahora su tiempo lo invertía en sus estudios. Ella al igual que muchos niños tenía muños

sueño, y quería realizarlos cuando fuera grande, pero sabia que tenia que esforzarse el

doble pues las cosas no eran tan fáciles y no resultaría nada sencillo cumplir sus

sueños.

La niña acudía a la escuela primaria, allí conoció a un profesor, el cual, en apariencia,

era una persona con un gesto de enojo, él era físicamente chaparrito,

delgado, con algunas canas, tenía aproximadamente uno 48 años,

tenía un caminar muy particular, pues siempre caminaba a prisa como

si alguien lo viniera siguiendo, la primera vez que entro al salón, donde

la niña estudiaba, lo primero que causo en muchos niños, fue temor;

pero ¡oh! Sorpresa, el gruñón del maestro, resulto todo lo contrario a lo que los niños

pensaban que era, pues dentro de esa fachada humana, se encontraba un maestro

cariñoso, amable, respetuoso, responsable, atento, y sobre todo un maestro alentador,

empático, que aun con sus propios problemas—de esos que los adultos suelen tener—

siempre encontraba algo positivo en el día, y siempre regalaba una sonrisa a sus niños

—como el mismo decía--- que bonito era estudiar con el maestro, pues algo particular

es que el enseñaba con paciencia y amor a todos los niños. Aquella niña le tomo un

cariño especial al maestro, pues muy en el fondo estaba agradecida por que el profe—

como ella le decía--- ya que él le enseño a leer, y cuando ella creía que no podía, ahí

estaba el profe, aquel que enseñaba con cariño a todos sus alumnos. ¡Claro! No
piensen que todo era color de rosa, el profe tenía su lado enojón--que casi a nadie le

gusta en una persona—pero solo sacaba ese lado cuando los otros niños se portaban

mal.

Bueno se preguntarán y ¿a qué viene todo este cuento? –bueno es que el profe es una

pieza clave en los sueños de aquella niña. Sí, como leyeron, el profe fue quien tuvo que

ver con el gran sueño de aquella niña; por que la niña al ver todo lo que el profe hacia

para que sus alumnos aprendieran, la manera en que enseñaba, como transmitía sus

enseñanzas, como ayudaba a los niños para que aprendieran, etc., la niña empezó a

ayudar a sus compañeros de clases, aquellos niños que todavía no aprendían a leer, y

comenzó apoyándolos, tomando en cuenta lo que hacía el profe; ella empezó a seguir

aquellos pasos, con la única finalidad de ayudar a sus compañeros, ya que al profe

muchas veces no le alcanzaba el tiempo para apoyar a todos, al ver esta acción de la

niña, profe siempre le pedía del apoyo a la niña.

Un día aquella niña se encontraba sentada en el arriate del jardín de la escuela, ella

siempre acostumbraba a sentarse en ese lugar a la hora de recreo, --porque también le

gustaba observar a sus compañeros y a todos los niños jugar--La escuela como

muchas otras era muy espaciosa, con muchos salones, una cancha de futbol, un teatro

en donde se presentaban actividades culturales---Decíamos que la niña estaba


sentada, Cuando el profe se acercó a ella, y le pregunto de manera directa:-- ¿dime

algo? ¿qué quieres ser de grande? —La niña se quedo pensando en la respuesta que

daría al profe, pero mas sorprendido quedo el profe con la respuesta de la pequeña,

pues la respuesta fue la siguiente: —Yo ya tengo claro lo que quiero ser de grande

profe, ¡quiero ser como usted! Exclamo con alegría y una sonrisa la niña. --¿Cómo yo?

Pregunto el profe—y ella le respondió: —Sí como usted, voy a hacer maestra.

Enseñare, así como usted nos ha enseñado a nosotros y tal vez a muchos niños---el

profe pregunto a la pequeña: --¿y cómo enseño? A lo que ella respondió: —Usted

enseña con paciencia, con amor, con cariño, como si fuéramos alguien importante para

usted, como si fuéramos su familia. ---El profe respondió: —¡Ya veo!, nadie me había

dicho algo como lo que tu me dices y eso me motiva a seguir enseñando a muchos

niños más, pero te diré algo: -- Cuando alguien decide dedicarse a esta profesión es

importante que le guste enseñar, porque eso implica paciencia, yo se que tu puede

llegar a ser una gran maestra, he visto como ayudas a tus compañeros, y sin que yo te

pidiera el apoyo, tuviste la iniciativa de ayudarlos, por eso se que puedes ser una gran

maestra. La niña se sintió contenta con lo que el profe le

dijo, y sobre todo con lo que le expreso al final de la

pequeña conversación— Lo que el profe le dijo fue lo

siguiente:

--Si estas decidida a estudiar para maestra, cuenta con mi

apoyo que, con gusto y desinterés te ayudare en lo que pueda, sé que lograras ese

sueño, si es que realmente eso quieres. ---la niña le respondió con mucha seguridad:
—Gracias profe y si estoy segura de que eso es lo que quiero ser de grande, solo

espero cumplir ese sueño.

Así paso su etapa en la primaria la niña— ¿Ya había mencionado lo de la primaria? o

¿no? Bueno el chiste es que ella estudiaba y ustedes ya se imaginaban en qué nivel

estaba, ¡no lo nieguen! --- Bueno pues como todo alumno, cuando pasa de grado

escolar, hacen cambios a ella también le paso, la cambiaron de grado y grupo, de

grupo porque también le cambiaron al profe, ya no sería el mismo quien le daría clases,

ella se sintió triste, pero a la vez feliz por todo lo que aprendió de los libros, así como

del profe. Pero aun estando en otro grupo, el profe le siguió enseñando en temas que

ella a veces no entendía o no lograba comprender. Ella en agradecimiento al profe por

todo cuanto hacía por enseñarle, le llevaba tortillas hechas a mano que su mamá

hacía, también le llevaba camotes asados o fritos, eso era lo que más le gustaba al

profe y ella lo sabía, para ella era una forma de dar gracias a su profe por todo. Y así

transcurría el tiempo y mientras ella avanzaba de año escolar, siempre el profe le

seguía inspirando y orientando para que lograra hacer sus sueños y metas realidad.

Hay algo que no mencione y, quizás pensaran que ella no tuvo papá, pero no es así, el

padre de la niña también estuvo presente, así como su mamá, él se dedicaba a trabajar

fuera de casa, casi no lo veía, pero era un hombre muy trabajador, en ese entonces

tenía 40 años, pero ella siempre le comentaba a él y a

su madre la inquietud por llegar a ser maestra algún

día. Sueño que los padres de aquella niña vieron muy

lejano, pues ellos no contaban con el recurso para

darle un estudio profesional a su hija, no decían nada,


pero con la expresión del rostro bastaba, pues ellos no querían quitarle el sueño que

aquella pequeña tenía.

Así pasaron los años y a base de esfuerzos aquella pequeña siguió estudiando,

también fue creciendo, siempre con el apoyo de sus padres. Durante el camino de

estudio nada fue fácil hubo momentos buenos y otros no tanto, pero ella estaba

convencida de lo que quería llegar a ser de grande y siguió preparándose para llegar a

ser una maestra. No fue nada fácil, pero ella, a pesar de los obstáculos lucho por entrar

a estudiar la universidad y ¿Qué creen? Todos sus esfuerzos fueron dando frutos a lo

largo de su carrera universitaria, puso todo en cuanto tuvo para

prepararse, tanto así que aquella niña ---ahora ya adulta—fue

becada durante toda su preparación y hasta el final— ella dio todo

para lograr su meta, termino su preparación, obtuvo su título, fue

satisfactorio todo lo que hizo para lograr cumplir su sueño y al final

fue realidad. Y saben hoy se encuentra desempeñando la misma labor que hacia su

profe con ella, en aquella escuela de aquel pueblo que la vio creer, ahora es una

profesionista que se siguió preparando y aún sigue aprendiendo. Pero sobre todo ella

sigue enseñando con amor, paciencia, empatía y con cariño a sus niños como ella les

llama. Y siempre recuerda con cariño a su profe y le agradece por todo lo que hizo por

ella, por inspirarla a cumplir sus sueños que ahora son realidad. Ella ama enseñar y

ayuda a prender a los niños. Ahora por un bichito malo, no puede estar cerca de sus

niños, no recibe abrazos, ni besos, por que se tienen que cuidar, pero con solo verlos

se alegra y aun así ella es feliz enseñando…


Personajes Lugares donde ocurre la

historia

La niña

El profe En un pueblo.

La mamá En el patio de la casa sus

El papá abuelos.
Anexo
Los primos En la escuela.
Nota: las imágenes fueron
Los niños
tomada de la internet.

También podría gustarte