República Bolivariana de Venezuela

Universidad Central de Venezuela

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales
Escuela de Estudios Internacionales
Cátedra: Ambiente y Relaciones Internacionales

ECUADOR

Docente: Bachilleres:
Néstor Cegarra Katherine De Sa C.I. 26.819.331
Ana Ruiz C.I. 26.741.412
 Caracas, febrero del 2021
La línea imaginaria del Ecuador (circulo máximo que divide a la Tierra en los
hemisferios septentrional y meridional) da su nombre al pequeño estado ecuatoriano, cuyo
territorio comprende parte de la cordillera andina y de la cuenca amazónica. Aunque rico en
recursos económicos, el país solo comenzó a acelerar su desarrollo industrial a partir de 1972,
cuando se inició la explotación de las reservas petrolíferas.
La República del Ecuador está situada en el norte de Sudamérica y tiene una extensión
de 269.178 Km2, en los que incluyen los 8000 Km 2 del archipiélago de las Galápagos. Está
limitada al norte por Colombia, al sur y al este por el Perú y al oeste por el Océano Pacifico. El
territorio ecuatoriano esta recorrido por dos cadenas paralelas pertenecientes a los Andes: las
cordilleras Oriental y Occidental, que dividen al país en tres regiones principales: la costa la
sierra o zona montañosa, y el oriente, perteneciente a la Amazonia (…..)
La llanura costera se extiende entre el océano Pacifico y el extremo occidental de los
Andes. Cubre alrededor de una quinta parte del territorio y alcanza su anchura máxima (unos 150
Km) al norte de Guayaquil. Esta llanura se encuentra quebrada por alineaciones montañosas de
escasa importancia (entre 500 y 700 m de altitud) como la cordillera de Balzar o los cerros de
Colonche y Pajan. Entre las cordilleras andinas se extiende una serie de valles altos, como los de
Quito, Tulcán y Cuenca, situados a más de 2.500 m de altitud y rodeados por paramos
mesetarios. Las cumbres de las cordilleras están formadas por los conos de unos cincuenta
volcanes, algunos de ellos en actividad.
A pesar de la situación geográfica del país, el clima ecuatorial que le correspondería por
su latitud se ve modificado a causa de la elevada altitud de los andes y de la corriente oceánica
fría de Humboldt, que corre a todo lo largo de la costa. La vegetación, en consecuencia, con la
variedad del relieve y el clima, presenta distintas formaciones desde la sabana al bosque y la
selva ecuatorial.
En cuanto a la población, presenta una gran diversidad étnica, se compone de indios,
mestizos, criollos o blancos y negros y mulatos; la población blanca, que en términos generales
detenta el poder cultural y económico, desciende de los españoles que llegaron en los siglos XVI
y XIX.
Ecuador forma parte de uno de los países de América Latina con una gran diversidad
ecológica, sin embargo, estas características relevantes en cuanto a sus ecosistemas y ecologías
están en grave peligro debido a varios factores ambientales un evidente ejemplo de esto son las
islas Galápagos y la Amazonia ecuatoriana puesto que las mismas poseen una gran cantidad de
biomas al igual que una variedad de especies que en la actualidad se encuentran en peligro de
extinción.
La diversidad de Ecuador está constantemente amenazada por los problemas
ambientales que se derivan de la globalización y la tecnología, los cuales están estrechamente
ligados con aquello referente a la degradación de los espacios naturales por efecto de la
deforestación, la contaminación por actividades extractivas y productivas a nivel industrial, el
desarrollo de infraestructura no planificada. Aunado a esto el equilibrio de la naturaleza se ve
altamente afectado a causa del uso no sustentable de los elementos de la naturaleza como la
extracción selectiva de madera, la sobrepesca y la sobre caza (Lifeder, 2021). Estos problemas
traen como consecuencia un incremento a la vulnerabilidad frente al cambio climático y la
pérdida, fragmentación y deterioro del hábitat natural de muchas especies de fauna y vegetación,
así como de su diversidad genética.
La problemática ambiental de Ecuador está asociada a la producción industrial de bienes
y servicios destinados a satisfacer las crecientes demandas de una población con patrones de
consumo insostenibles (Lifeder, 2021). Entre las actividades económicas más relevantes del país
dentro del sector primario se encuentra la agricultura y la explotación petrolera, que no dejan de
incidir fuertemente en el gran problema de desforestación que afecta al país, siendo la industria
forestal considerablemente importante en el país, sobre todo en la región de La Sierra y en el área
cercana al Río Guayas con árboles como el cedro, pinos, eucalipto y balsos. Estas industrias
están relacionadas en el sentido de que la mayoría de los espacios deforestados han sido
transformados en zonas para la producción agropecuaria. Una menor proporción se ha destinado
a infraestructura en áreas urbanas y a otros tipos de cobertura (Montoya, 2017).
Sin embargo, según Bo Wergens, Presidente de la Asociación Sueca de Industrias
Forestales, Presidente del Comité Asesor de la FAO sobre la Pasta y el Papel y Vicepresidente de
la Confederación de la Industria Europea del Papel; el crecimiento demográfico y el aumento de
los ingresos se traducirán en un incremento de la demanda de productos y recursos forestales. El
incremento constante de la demanda de productos forestales y la disminución de los recursos
constituye un poderoso incentivo para que la industria forestal participe activamente en la
aplicación de los principios de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente
y el Desarrollo (CNUMAD) celebrada en Río en 1992. A través del Comité Asesor sobre la
Pasta y el Papel de la FAO (cuyos miembros, que participan a título personal, representan
equilibradamente a los países desarrollados y en desarrollo) existe una sólida vinculación entre la
FAO y el sector privado. En su condición de responsable de las actividades complementarias de
la CNUMAD, la FAO se beneficiaría del fortalecimiento de esos contactos y podría aprovechar
los conocimientos técnicos y especializados de la industria.
En muchos países, la industria forestal y los propietarios privados de bosques tienen a su
cargo la ordenación de los bosques, incluida la conservación de la diversidad biológica en
aquellos bosques situados fuera de las zonas de protección natural. La industria forestal tiene
también la oportunidad de influir en las decisiones relativas a las políticas forestales regionales y
nacionales. Después de todo, la industria crea empleo y aumenta el valor añadido de las tierras
forestales (Wergens, s.f).

Fig1 El Diario.ec
En este sentido, la industria forestal tiene gran potencial para poder adecuarse a las
necesidades de las economías y las sociedades siempre y cuando sea bajo legislaciones y leyes
responsables que se aseguren de que la tierra tenga el cierto cuidado que se merece para seguir
siendo productiva y fuente de vida de toda clase de seres vivos.
La FAO, la industria forestal, y la CNUMAD han recomendado una serie de
consideraciones para que este objetivo común sea llevado de la mejor manera posible, entre ellos
se encuentran; evaluar los recursos forestales mundiales tomando en cuenta las consideraciones
económicas y sociales y las preocupaciones ambientales; instar a que se destinen inversiones
para la ordenación forestal, la repoblación forestal, el establecimiento de plantaciones forestales
y la plantación de árboles para garantizar un suministro suficiente de fibras básicas; promover la
adopción de políticas comerciales internacionales que garanticen la apertura de los mercados
mundiales a los productos de la industria forestal, que es uno de los motores del progreso
económico, especialmente en los países en desarrollo; estimular y promover el comercio de
productos procedentes de bosques ordenados de manera sostenible, oponiéndose al mismo
tiempo a la imposición unilateral de boicots, restricciones y otro tipo de sanciones.
En agricultura Ecuador es líder en la producción de bananos, es el mayor productor y
exportador, además tiene una producción importante de flores, cacao. Otros productos agrícolas
importantes son café, arroz, papas, caña de azúcar mientras que en la ganadería se destaca el
ganado vacuno, porcino, ovino y la pesca (Montoya, 2017). A pesar de esto, hoy en día se sabe
que la mayoría de los agroquímicos utilizados en la industria agropecuaria son perjudiciales para
la salud del hombre y de los animales, además perjudica al ambiente y produce un grave daño
ambiental, por lo que afecta derechos constitucionales como el derecho al buen vivir y a la
soberanía alimentaria; es por ello que al manejar productos químicos se deben prever a las
personas de los altos grados de exposición de residualidad causados por dichos productos y
poniendo en riesgo la salud de los productores y la de todos los consumidores; es por ello que se
deben realizar constantes controles de residualidad en los alimentos por la autoridad competente
(Flores, 2016).
En conclusión, se debería instar a los gobiernos a no solo crear legislaciones que se
encarguen de velar por el entorno natural y de preservación de los espacios boscosos y de gran
diversidad genética sino a su vez de leyes que protejan la salud de los individuos y su calidad de
vida cuando esta se ve afectada por una actividad económica, más aún cuando es de los sectores
más relevantes para el país.
Ahora bien, el sector minero y petrolero se ha enfocado en los últimos 40 años en la
actividad extractiva, donde existe una variedad de recursos fósiles, puesto que este país cuenta
con importantes reservas de gas natural y petróleo concentradas en la región amazónica, al este
del país. Ecuador es el cuarto productor de hidrocarburos en América Latina y también es
conocido por ser el país que acoge la biodiversidad más densa del planeta en referencia a su
superficie (Dangles, 2009). Los productos petroleros representan el 56,8%5 de las exportaciones
totales del país y el 67,41% de las exportaciones de materias primas. Este país produce un
promedio de 524.000 barriles de crudo por día, de los cuales un 74.6% es extraído por las
empresas públicas Petroamazonas EP7 y Operaciones Río Napo.

Derrame petrolero en la Amazonía ecuatoriana. Fuente: Cancillería Ecuador [CC BY-SA

Durante los últimos 50 años el desarrollo incontrolado de las actividades petroleras ha

causado grandes impactos ambientales, sanitarios y sociales en todo el país donde se han
derramado más de 5 millones de barriles de crudo en los suelos, pantanos y ríos de la Amazonía.
Además, ha sido quemado gran cantidad de gas natural emanado de los yacimientos y ocurrido
pérdidas importantes de crudo en los oleoductos que transportan el crudo a las refinerías.

Esperanza Martínez, líder de la organización Acción Ecológica, expresa que al igual que
en el resto de América Latina, Ecuador está en una situación crítica en los temas ambientales
debido a la profundización del extractivismo. A pesar de que se ha ganado en derechos de la
naturaleza y que los discursos ambientales han permeado las instancias de gobierno, la intención
de acelerar la extracción está totalmente presente.

Las prácticas industriales han tenido efectos negativos. Los resultados de una encuesta
sobre las vulnerabilidades y capacidades frente a los impactos de la actividad petrolera sugieren
una difícil construcción social del riesgo sanitario debido a la diversidad de las percepciones, la
dependencia económica local y el insuficiente nivel de compromiso de los actores públicos en
este problema. Así pues, para disminuir la vulnerabilidad sanitaria, solo un compromiso fuerte
del Estado puede crear una ruptura en este modo de funcionamiento y generar nuevas
condiciones para reducir la vulnerabilidad sanitaria a la contaminación ambiental.

Derrame petrolero en la Amazonía ecuatoriana. Fuente: Cancillería Ecuador [CC BY-SA

2.0 (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.0)]