A2 Pararsitología
A2 Pararsitología
A2 Pararsitología
“COLEGIO KAYSEN”
Dra. Lizbeth Gutiérrez Mata
1.1 Parasitología
Los parásitos constituyen una de las mayores causas productoras de infecciones
que afectan al hombre y a los animales. Sus efectos no solo provocan elevados
índices de morbilidad y mortalidad, sino que conlleva a la producción de
cuantiosas pérdidas económicas que no solo comprometen al hombre enfermo,
sino también a su entorno familiar y a la comunidad en la cual está inserto.
En las últimas décadas, ha sido impresionante el avance conseguido en el
conocimiento de la relación hospedador-parásito que está basada, por una parte,
en la potencialidad patógena del parásito y en su capacidad de adaptación y
evasión de la respuesta inmune, y por otra, en la mejor comprensión de las
complejas etapas para montar una eficiente defensa inmunitaria del hospedador
frente a la invasión parasitaria y cuyo fin es terminar ya sea con la eliminación del
parásito (que solo se logra en contadas ocasiones) o alcanzar un equilibrio de
convivencia.
De esta manera, según las características de la relación hospedador-parásito, se
configuran diversos escenarios que pueden favorecer a uno u otro protagonista de
la infección parasitaria, lo cual dificulta esbozar perfiles sintomatológicos que
abarquen todos los encuentros entre hospedador y parásitos.
Su variación extrema es la aparición de cuadros clínicos derivados de la depresión
o supresión inmunitaria del hospedador y la emergencia de parásitos oportunistas,
como ocurre en el sida.
El tercer protagonista de la infección parasitaria (y con connotaciones tan
trascendentes como son el parásito y el hospedador), es el ambiente exterior. Las
condiciones ecológicas propicias del ambiente para el encuentro de parásitos y
hospedador, están demarcadas especialmente por factores climáticos, del
saneamiento básico y de factores socioeconómicos y culturales.
● Generalidades de la parasitología
En un sentido amplio la parasitología es la parte de la biología que estudia los
fenómenos de dependencia entre los seres vivos; es decir, se encarga del estudio
de organismos que viven en o sobre otros organismos vivos, obteniendo de ellos
nutrientes sin brindar compensación a cambio. Particularizando esto en la
Parasitología Médica, es la ciencia que se ocupa del estudio de los protozoarios,
helmintos y artrópodos que afectan al humano.
● Ramas de la parasitología
El estudio de la parasitología médica se divide en tres campos diferentes, de
acuerdo al tipo de parásito:
La Protozoología se encarga del estudio de los parásitos unicelulares que
pertenecen al grupo de los organismos protozooarios.
La Helmintología es la parte de la parasitología se tiene como objeto de estudio a
los gusanos (helmintos). Existen helmintos parasitarios importantes en dos grupos
(phylum) de la clasificación taxonómica, los nematodos y los platelmintos. A su
vez, dentro de este último grupo se encuentran los cestodos y los trematodos.
Finalmente, la última rama de la parasitología es la Artropodología, que estudia a
los insectos, arácnidos y crustáceos.
● Asociaciones biológicas o simbiosis entre individuos de diferentes
especies.
Las diferentes especies de la naturaleza no se desarrollan de manera
independiente de las otras, sino que cada una de ellas se encuentra afectada por
otras especies por medio de interacción o asociaciones. Son posibles tres tipos de
asociaciones entre organismos:
Mutualismo: ambos socios se benefician, como la abeja y la flor, las bacterias de
los rumiantes (vacas) que permiten digerir la celulosa, etc.
Comensalismo: asociación en la cual uno solo de los socios se beneficia y recibe
el nombre de comensal. En este caso el hospedador no sufre daño, por ejemplo,
la presencia de Entamoeba coli en el intestino del hombre.
Parasitismo: asociación en la cual uno solo de los socios, el parásito, se beneficia
y el otro, el hospedador, puede sufrir daño. Por consiguiente, los parásitos pueden
ser patógenos.
De acuerdo con estas premisas, se puede concluir definiendo el parasitismo como
un estado de asociación biológica entre dos especies vivas diferentes, y el
parásito como el ser vivo que, de manera temporal o permanente, vive a expensas
de otro organismo de distinta especie, obteniendo de este su nutrición y morada, y
al cual, eventualmente, puede producir daño.
Vamos a referirnos aquí a otro concepto utilizado muy relacionado con la
microbiología y parasitología médica que es el hospedador. Los conceptos de
parásito y hospedador se condicionan mutuamente, no se puede hablar de uno sin
pensar inmediatamente en el otro y la ciencia que estudia los hospedadores se
llama xenología. Podemos decir que los hospedadores son aquellos organismos
vivos (vertebrados o invertebrados) implicados en el ciclo evolutivo de los
parásitos a los cuales reciben o alojan. En su concepto más amplio, es el animal
que recibe al parásito. Podemos subclasificar a los hospedadores en dos
categorías. El hospedador definitivo, el cual es el organismo vivo que alberga la
forma adulta del parásito o en el cual el parásito se reproduce sexualmente y el
hospedador intermediario, que es el organismo vivo que alberga las formas
larvarias en desarrollo del parásito o en el cual este se reproduce de manera
asexual.
El parásito para llegar al hospedador, desarrollarse en él y producir formas
infectantes que aseguren la supervivencia de la propia especie, desarrolla un
conjunto de procesos, o estadios, algunos de ellos dentro del mismo hospedador,
otros en el medio ambiente, que son conocidos en su conjunto como “ciclo de
vida” y que resulta importante que los conozcamos, ya que ellos nos evidencian
características relacionadas con la patogenia, posibilidad de intervenir con una
profilaxis, control y orientación para realizar el diagnóstico del parásito en cuestión.
El ciclo de vida de un parásito son los procesos o estadios que realiza para llegar
al hospedador, desarrollarse en él y producir formas infectantes que aseguren la
supervivencia de la propia especie, alguno de ellos dentro del mismo hospedador,
otros en el medio ambiente. El ciclo de vida más simple es aquel que permite a los
parásitos dividirse en el interior de su hospedador, aumentar su número y, al
mismo tiempo, producir formas que salgan al exterior para infectar otros
hospedadores. Este ciclo existe principalmente en los protozoos.
En los helmintos se presentan otros tipos de ciclos que requieren la salida al
exterior de huevos o larvas, que en circunstancias propias de temperatura y
humedad llegan a ser infectantes.
En ciclos más complicados existen hospedadores intermediarios en los cuales las
formas larvarias crecen o se multiplican antes de pasar a los huéspedes
definitivos.
Los ciclos biológicos comprenden dos tipos básicos. Uno de ellos es el ciclo
directo, en el cual el parásito tiene un solo hospedador, a cuyo organismo llega sin
intervención de otro. El otro es el ciclo indirecto, en el cual el parásito necesita un
hospedador definitivo y uno más intermediarios.
1.1 PARASITOLOGIA
a) 1 1 1 Nombre
Nombre
2 2 2
Nombre
b) 3 3 Nombre
3
4 4
c)