Reflexiond El Padre CASALDIGA
Reflexiond El Padre CASALDIGA
Reflexiond El Padre CASALDIGA
Respondería que Cristo también vino para todos, y optó por los pobres. Y
condenó a los ricos. Y rechazó el privilegio. Y fue sentenciado, torturado,
ejecutado y colocado en la cruz por los poderes de latifundio, de la ley, del
imperio.
No es posible pensar que el Evangelio sea para todos por igual. Lo peor que
se podría decir del Evangelio es que el Evangelio es neutro. Yo suelo decir
que el Evangelio es para todos, a favor de los pobres y contra los ricos:
contra la posibilidad, la capacidad que ellos tienen de vivir en un privilegio
que expolia a la inmensa mayoría de los hermanos. El rico, normalmente
hablando, está excluido del Reino de los cielos.
La causa política y la causa indígena
Una vez hecha la opción por los pobres a nivel individual, hay un segundo
paso que llega de inmediato: el salto a lo político, a la transformación de la
sociedad. Para Casaldáliga, todo estaba relacionado con la actividad
política, concibiéndola como el principal instrumento de liberación y
emancipación.
No se entiende el amor por los oprimidos sin una respuesta política que
conlleve un cambio de raíz. Es cuando se comienza a identificar al
capitalismo como un pecado estructural y se hacen del marxismo junto con
la teoría de la dependencia los métodos de análisis para comprender la
realidad y buscar una necesaria alternativa.
La sociedad capitalista no responde a los estándares básicos que deben
conformar la sociedad según el Evangelio. Por tanto, la revolución se hace
necesaria y urgente. De hecho, como por ejemplo en el propio Brasil, el
cristianismo de base iba más allá que los partidos comunistas oficiales,
presos de su burdo mecanicismo histórico.