Guía de Auditoría
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PASOS PREVIOS
Para que en una empresa nazca la obligación de auditarse, deben cumplirse DOS de los siguientes requisitos durante
DOS AÑOS consecutivos (si durante dos años se cumplen los requisitos para auditar, pero el tercero no, este también
se deberá auditar, pero en el segundo año consecutivo en el que no se cumplan los requisitos ya no nacerá la
obligación):
Si la realización de la auditoría es obligatoria, se tendrá una actitud de escepticismo profesional más elevada, lo cual
influirá en el porcentaje a elegir para determinar la materialidad.
La Junta General de Socios (SL) o Accionistas (SA) debe reunirse para nombrar al auditor, el cual se nombra por un
plazo mínimo de 3 años y máximo de 9, y también debe inscribirse. Sin embargo, esto solo será necesario si la
auditoría es obligatoria. También es importante tener en cuenta que el nombramiento debe hacerse antes del cierre
del ejercicio.
- Denominación social.
- Objeto social.
- Forma jurídica: de cara al informe, los destinatarios serán distintos dependiendo de la forma jurídica de la
empresa, por ejemplo:
o SA: el informe se dirige a los accionistas
o SL: el informe se dirige a los socios
o SAU: el informe se dirige al accionista único
o SLU: el informe se dirige al socio único.
- Datos económicos: para ello, utilizamos una serie de ratios, que se detallan debajo.
FONDO DE MANIOBRA = ACTIVO CORRIENTE – PASIVO CORRIENTE -> hace referencia a la liquidez de la empresa
para afrontar sus deudas a corto plazo.
DEUDA FINANCIERA NETA = DEUDA L/P + DEUDA C/P – EFECTIVO – INVERSIONES FINANCIERAS C/P -> hace
referencia a si la empresa tiene más o menos efectivo que sus obligaciones financieras.
RATIO DE ENDEUDAMIENTO = PASIVO / PATRIMONIO NETO -> evalúa la proporción de financiación ajena que posee
una empresa frente a su patrimonio.
RATIO DE COBRABILIDAD = CLIENTES / INCN -> hace referencia a la proporción en la que la empresa cobra a sus
clientes. Para saber cuánto tarda un cliente en pagarnos, lo podemos multiplicar por 365.
RATIO DE PAGOS = PROVEEDORES / VENTAS -> hace referencia a la proporción en la que la empresa paga a sus
proveedores. Para saber cuánto tardamos en pagar a los proveedores, lo podemos multiplicar por 365.
RATIO DE SOLVENCIA = ACTIVO / PASIVO -> mide la capacidad de la empresa de hacer frente a sus obligaciones de
pago. Lo ideal es que su valor sea superior a 1,5.
Consiste en realizar una descripción ordenada de las áreas de riesgo significativas que debemos considerar. Se
recomienda, si se puede, calcular la variación absoluta (cantidad de año t – cantidad año t-1) y relativa (resultado
anterior/cantidad año t-1 * 100) para ver cómo han evolucionado las partidas. Tenemos los siguientes ejemplos:
1) Inmovilizado material: debemos ver si representa un elevado % del total del activo. También se puede
comparar la amortización en el balance y en la CPyG, ya que pueden variar.
2) Existencias: si es el primer año que auditamos a la empresa, no habremos podido asistir al inventario inicial.
Puede ser posible que los sistemas de control de la empresa para las existencias tengan errores o que haya
información a la que no podemos acceder (lo cual sería una limitación al alcance), por lo tanto, podrían
existir trabajos en curso incorrectamente valorados. Si se trata de empresas pequeñas, puede existir el
riesgo de que entiendan la contabilidad como un mecanismo para evadir impuestos, por lo que se tendrá
que comprobar que no se están aumentando las existencias para compensar el volumen de ventas.
3) Saldos con clientes: aquí puede darse la situación de que nos encontremos con saldos de difícil recuperación
y con clientes de dudoso cobro que provoquen deterioros. Tendremos que fijarnos si el INCN y los clientes
aumentan a la par, ya que, si no es así, puede ser que las ventas no hayan aumentado en realidad y que los
datos no sean correctos. Además, si los clientes aumentan significativamente, puede haber algún cliente
“estancado”.
4) Pasivos bancarios: la actividad de la sociedad justificaría un incremento de las deudas bancarias por el uso
de instrumentos como el descuento comercial, el confirming o el factoring, circunstancia que no se observa
en los balances.
5) Operaciones con partes vinculadas: es una de las partidas más importantes para analizar posibles fraudes
(por ejemplo, lo que parece ser un crédito financiero en realidad es un préstamo, puede que las operaciones
que sea realicen no existan o sean ficticias). Si el importe es elevado, se tendría que analizar la
recuperabilidad y si los saldos responden a transacciones reales.
6) Activo no corriente: para que haya equilibrio en la empresa, este debe estar financiado con pasivo no
corrientes (préstamos a largo plazo o hipotecas) o con fondos propios.
7) Activo corriente: este debe ser superior al pasivo corriente para que la empresa no tenga problemas de
liquidez (lo cual también analizamos mediante el fondo de maniobra), lo ideal es que el activo corriente sea
el doble del pasivo corriente. Si esto no sucede, existe la posibilidad de desembocar en concurso de
acreedores.
8) Problemas con el auditor saliente: si se dan problemas entre el auditor saliente y el director financiero por
los datos de auditorías anteriores, puede existir un interés aparente de este último en modificar la
información financiera. Por lo tanto, el riesgo de auditoría será alto.
9) Subvenciones: si no se cumplen los requisitos establecidos para recibir la subvención, se tiene que proceder
a su reintegro, lo cual puede indicar riesgo, ya que esto afectará al resultado. Por lo tanto, deben tenerse en
cuenta dichos requisitos.
10) Pasivo no corriente: debemos comprobar que el pasivo no corriente efectivamente hace referencia al largo
plazo y no al corto, ya que puede que se haya modificado la estructura del balance para dar una mejor
imagen (sobre todo si existe o puede existir un fondo de maniobra negativo). Debemos comprobar los
contratos que sustancien dicho pasivo (las operaciones con partes vinculadas suelen estar mal
documentadas o no documentadas, por lo que es interesante analizar esta cuenta en primer lugar). También
puede deberse a que la sociedad presenta deudas con entidades financieras ya vencidas, que deberían
registrarse en el corto plazo.
11) Proveedores: es importante analizar los proveedores con saldo cero, porque pueden existir pasivos ocultos o
deudas no reconocidas (pasivo infravalorado). Por otro lado, si la partida ha aumentado, tendríamos que
analizar el periodo medio de pago y ver si los proveedores no nos están pagando o nos están pagando
menos, lo cual podría generar problemas de pago para la empresa.
12) Deuda bancaria: si esta es muy elevada, puede estar mal clasificada. Si las deudas no están satisfechas, esto
genera aún más deuda todavía (ya que se añaden los intereses de demora), empeorando así la situación de
la empresa. Pueden producirse desinversiones de activo para hacer frente a la deuda. También se
recomienda comparar los gastos financieros con la deuda existente, ya que, si hay mucha deuda y pocos
gastos, puede ser que haya errores en la clasificación (sobre todo en relación con empresas del grupo, si las
hay).
13) Reservas: la cantidad que habrá que aportar, de manera totalmente obligatoria, deberá ser igual al 10% del
beneficio del ejercicio hasta que la totalidad de la reserva legal alcance, mínimamente, el 20% del capital
social de la empresa. Por otro lado, si el movimiento del epígrafe de Reservas no cuadra con el del resultado
del ejercicio anterior, puede ser que se haya producido un dividendo contra reservas a los accionistas
durante el ejercicio.
14) Dividendos: si se reparten dividendos y la empresa tiene resultados negativos, puede ser una señal de que la
empresa está desmantelando la empresa para liquidarla.
15) Capital social: si este ha aumentado, podemos ver si se debe a que los socios anteriores han realizado una
aportación o si han entrado nuevos socios en el ejercicio. Si han aumentado los fondos propios vía prima de
emisión, concluimos que las nuevas acciones/participaciones se han emitido con prima. Por otro lado,
la reducción de capital tendrá un carácter obligatorio para la sociedad cuando las pérdidas hayan disminuido
su patrimonio neto por debajo de las dos terceras partes de la cifra del capital y hubiere transcurrido un
ejercicio social sin haberse recuperado el patrimonio neto. Si la reducción del capital social se produce por
exceso de capital social, puede haber varias finalidades: devolución de aportaciones a los socios/accionistas,
amortización de acciones/participación y constitución o incremento de reservas voluntarias o legales. En los
dos primeros casos se produce una alteración patrimonial, en el último no.
Si se tiene que calcular la materialidad antes de analizar estos riesgos, deberíamos decir si dichos riesgos deben
incluirse en el informe o no. Si la materialidad se calcula después, no hace falta.
CLIENTES – VENTAS
APROVISIONAMIENTOS – PROVEEDORES
RIESGO INHERENTE
El riesgo inherente se refiere al riesgo de que la información financiera contenga errores por motivo de la actividad
desarrollada, su estructura de personal, situación financiera, etc. Está relacionado con el negocio de la sociedad, su
actividad, situación concreta y aquellos aspectos que pudieran influir, directa o indirectamente, en la información
financiera. Es un riesgo que no puede ser controlado por el auditor ni la compañía, y se da con independencia de la
eficacia o ineficacia del control interno. Tendremos que calificarlo como bajo, medio o alto.
Por ejemplo, si nos encontramos ante una primera auditoría y operar la empresa en un sector de riesgo (como
puede ser la construcción), el riesgo se calificaría como alto. Un epígrafe que suele tener riesgo alto es el INCN, ya
que la empresa puede influir en los registros contables para mejorar la situación de la sociedad.
RIESGO DE CONTROL
El riesgo de control está directamente asociado al funcionamiento de los sistemas de control interno del ente
auditado. Se calificará como bajo, medio o alto.
Por ejemplo, si la sociedad no tiene implantado un sistema de control interno formal, con manuales y políticas
escritas, el riesgo de control se calificaría como alto. Si el sistema de control sí existe, pero hay veces que no se
ejecuta, el riesgo podría ser medio o alto.
RIESGO DE DETECCIÓN
El riesgo de detección es el riesgo de que con las pruebas de auditoría practicadas el auditor no detecte los errores
existentes. El auditor sí puede actuar sobre él.
RIESGO DE AUDITORÍA
A través de la planificación de auditoría se realiza una evaluación del riesgo de auditoría con la finalidad de diseñar
la naturaleza, alcance y momento de realización de los procedimientos de auditoría. En este apartado cobra especial
importancia el cálculo de la materialidad.
Por ejemplo, si se trata de nuestro primer año de auditoría y la empresa nunca ha sido auditada previamente, el
riesgo de auditoría será medio-alto. Además, si tanto el riesgo de control y el de detección son medio-altos, el riesgo
de auditoría será medio-alto.
- Denominación social.
- Fecha de constitución.
- Objeto social.
Una vez clasificada la empresa y seleccionada la magnitud base (se debe seleccionar la más significativa para la
actividad actual del negocio, el parámetro que más influya en las decisiones económicas de los usuarios como
grupo), calculamos los rangos inferiores y superiores. Cuanto más alto sea el riesgo de auditoría, menor porcentaje
cogeremos. Una vez elegido el porcentaje, lo multiplicamos por la cifra del año actual de la magnitud seleccionada.
La materialidad no se fija por saldo o partida de los estados financieros, sino para los estados financieros en su
conjunto.
No obstante, en algunas circunstancias pueden existir determinados tipos de transacciones, saldos contables o
desgloses que, en caso de contener incorrecciones, cabría razonablemente prever que influyeran en las decisiones
económicas que los usuarios toman basándose en los estados financieros, en cuyo caso, se deberá determinar
también el nivel o los niveles de importancia relativa a aplicar a dichos tipos concretos de transacciones, saldos
contables o información a revelar, que será inferior al nivel de importancia relativa para los estados financieros en su
conjunto.
Para calcularla (si lo piden en el examen) debemos tener en cuenta los riesgos de control, inherente y de detección
del epígrafe en concreto. Una vez tengamos calificado el riesgo, tomamos la materialidad calculada anteriormente y
le aplicamos un porcentaje para calcular la materialidad de realización (que tiene que ser menor al 85%, si el riesgo
es muy alto podríamos aplicar, por ejemplo, un 50%).
Tras fijar la materialidad para los estados financieros en su conjunto, se debe determinar la materialidad para la
ejecución del trabajo con el fin de valorar los riesgos de incorrección material y determinar la naturaleza, momento
de realización y extensión de los procedimientos posteriores de auditoría. Se fija para reducir a un nivel
adecuadamente bajo la probabilidad de que la suma de las incorrecciones no corregidas y no detectadas supere la
materialidad determinada para los estados financieros en su conjunto.
Se parte del nivel de materialidad establecido para los estados financieros en su conjunto, y deberá ser menor o
igual al 85% de la materialidad establecida. Si existen áreas de mayor riesgo, debe ajustarse este % a valores
inferiores, por ejemplo: un 65% si el riesgo es alto o un 75% si el riesgo es medio.
Se debe determinar un importe por debajo del cual las incorrecciones detectadas son claramente insignificantes y no
es necesario acumularlas, ya que no se espera que tenga un efecto material sobre los estados financieros, tanto si se
consideran individualmente como de forma agregada, si bien, las NIA-ES no indican cómo se determina.
Se considera recomendable que normalmente oscile entre el 5% y el 10% de la materialidad determinada para los
estados financieros en su conjunto.
PASO 4: INCIDENCIAS – SOBREVALORACIONES E INFRAVALORACIONES
En este paso, lo primero que debemos analizar es si el error es material o no (es decir, si supera la materialidad
calculada anteriormente) para incluirlo en el informe.
1) Infravaloración de amortizaciones: este error se trasladaría al informe como una salvedad, ya que se trata
de un incumplimiento de principios contables, es decir, de una incorrección material. El asiento contable de
amortizaciones (cuenta 281) es recalculado por el auditor, y advierte que la cifra real es otra. En este caso, el
gasto de la empresa está infravalorado, y como esto afecta al resultado, este estará sobrevalorado en la
misma cantidad. A su vez, el activo (inmovilizado material) estará sobrevalorado en esa cantidad.
3) Pasivo bancario a l/p sobrevalorado por una incorrecta clasificación de los vencimientos de los préstamos:
este apartado es importante, ya que reclasificar la deuda se puede poner a la empresa en situación de
desequilibrio (si el fondo de maniobra pasa de ser positivo a negativo, podría ser un error material). En este
caso, el pasivo a l/p (cuenta 170) (DEBE) estará sobrevalorado y el pasivo a c/p (cuenta 250) (HABER) estaría
infravalorado. El fondo de maniobra disminuiría, y la liquidez sería inferior.
4) No se registra una compra: en este caso, hay unas existencias que no se han contado (estarán en el
inventario) o que se han vendido (ingresos) pero no se ha registrado el gasto. Por lo tanto, el pasivo está
infravalorado y el resultado de la CPyG sobrevalorado.
5) Reclamación de un cliente por indemnización: en este caso, el pasivo estará infravalorado y el resultado de
la CPyG sobrevalorado. Se tendrá que provisionar la salida de efectivo, lo cual genera una obligación.
6) No se informa en la memoria sobre la deuda garantizada con prenda sobre acciones de una sociedad del
grupo: se trata de una cuestión cualitativa, hay una omisión de la información y, por lo tanto, un
incumplimiento.
9) Se han recibido facturas por importe de X euros por reparaciones realizadas en el año anterior que no han
sido provisionadas por la Sociedad: se reducirá el resultado de la CPyG en X euros. Si se debiese a una mala
clasificación y se reclasifica, no afectaría a la CPyG. Si la incorrección por sí sola no supera a la materialidad
establecida, pero agregadamente con otras incorrecciones que afectan al resultado sí, se trataría de errores
materiales (para acumularlo deben afectar a las mismas partidas, en este caso, a la CPyG).
10) A 31 de diciembre la sociedad había entregado cheques por importe de X euros cuyo cargo en el banco por
la retirada realizada por el proveedor se ha producido en enero: no hay error.
11) Sobrevaloración de existencias: primero, tendremos que ver si afecta al informe o no. Independientemente
de esto, se plantea un ajuste: por ejemplo, si se trata de falta de dotación de deterioro: DEBE 693 Pérdidas
por deterioro de existencias - HABER (393) Deterioro de valor de productos en curso. A efectos de identificar
el efecto sobre los EEFF, se trataría de una sobrevaloración de la partida Existencias del activo corriente, así
como una sobrevaloración del resultado de la CPyG o del PN (si se hubiera corregido con cuentas del
subgrupo 11).
12) Infravaloración de la dotación al deterioro de créditos: el ajuste en este sentido sería DEBE 694 Pérdidas
por deterioro de créditos por operaciones comerciales – HABER (490) Deterioro de valor de créditos por
operaciones comerciales. A efectos de identificar el efecto sobre los EEFF, se trata de una sobrevaloración de
la partida Deudores comerciales y otras cuentas a cobrar del activo corriente, así como una sobrevaloración
del resultado de la CPyG o del PN (si se hubiera corregido con cuentas del subgrupo 11).
13) Sobrevaloración de las ventas: el ajuste sería DEBE 700 Venta de mercaderías – HABER (4309) Clientes,
facturas pendientes de formalizar. A efectos de identificar el efecto sobre los EEFF, se trata de una
sobrevaloración del INCN del activo corriente, así como una sobrevaloración del resultado de la CPyG.
14) No se ha registrado la baja de una inversión financiera por valor neto de 150.000 euros que ha sido
vendida por 350.000 euros: en este caso, el epígrafe de inversiones financieras se encuentra sobrevalorado
en 150.000 euros, y el resultado del ejercicio sobrevalorado en 200.000 euros. El epígrafe de deudores varios
estaría infravalorado por importe de 350.000 euros, por lo que el activo se encuentra infravalorado en
200.000 euros. Si el importe es superior a la materialidad, debe aparecer en el informe como una salvedad.
15) Se han reconocido como gasto por reparaciones inversiones por importe de 250.000 euros: en la cuenta de
resultados se encuentran gastos que deberían haber sido capitalizados como mayor valor de las inversiones.
Por lo tanto, las inversiones estarían infravaloradas en 250.000 euros, los gastos por reparaciones
sobrevalorados por ese mismo importe, y el resultado de la CPyG está infravalorado.
16) No se ha obtenido respuesta de saldos de proveedores que han sido circularizados a cierre de ejercicio,
resultando que no se han podido aplicar procedimientos alternativos para proveedores con X euros: No
puedo disponer de información sobre esas cuentas a pagar, por lo que tendríamos una limitación al alcance
en el informe de auditoría si el importe es material.
17) Se ha comprobado que la sociedad no informa del riesgo de continuidad en sus cuentas anuales,
circunstancia que se ha puesto de manifiesto por la cancelación de un contrato en el año siguiente que
supone la reducción de la cifra de ventas en un 60% para el año 2021: Se trata de información cualitativa
que puede tener un impacto en el marco normativo aplicable (principio de empresa en funcionamiento), y
un impacto cuantitativo en las cuentas anuales del ejercicio próximo. Debería incluirse una salvedad en el
informe de auditoría de este ejercicio puesto que la compañía no lo informa en sus cuentas anuales. Si lo
informase en su memoria, no debería ser una salvedad, sino un párrafo de énfasis sobre el principio de
empresa en funcionamiento.
EJEMPLO DE INFORME SOBRE LAS CUENTAS ANUALES DE PYMES CON OPINIÓN CON SALVEDADES
Hemos auditado las cuentas anuales de PYMES adjuntas de XYZ, S.L.U. (la Sociedad), que comprenden el balance de
PYMES al 31 de diciembre de 2021, la cuenta de pérdidas y ganancias de PYMES y la memoria de PYMES,
correspondientes al ejercicio anual terminado en dicha fecha.
En nuestra opinión, excepto por los efectos y los posibles efectos de las cuestiones descritas en la sección
Fundamento de la opinión con salvedades, las cuentas anuales de PYMES adjuntas expresan, en todos los aspectos
significativos, la imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera de la Sociedad a 31 de diciembre de 2021, así
como de sus resultados correspondientes al ejercicio terminado en dicha fecha, de conformidad con el marco
normativo de información financiera que resulta de aplicación (que se identifica en la Nota 2 de la memoria adjunta)
y, en particular, con los principios y criterios contables contenidos en el mismo.
No ha sido posible confirmar los saldos a cierre de ejercicio ni la integridad de las operaciones realizadas por la
Sociedad con su socio único, con el que se mantienen saldos deudores por importe de 78.394 EUR, al no haber
obtenido respuesta al procedimiento de confirmación directa de saldos y operaciones relativas al ejercicio 2021.
Nuestro informe de auditoría del ejercicio anterior contenía una salvedad sobre esta cuestión.
La partida “Existencias” que por importe de 137.044 EUR se refleja en el balance de situación a 31 de diciembre de
2021, incluye la valoración a precio de coste de los distintos productos por importe de 133.374 EUR, cuyo destino
actual es la valorización a través de un proyecto de I+D+i en desarrollo a cierre de ejercicio. Dada la fase de ejecución
del citado proyecto, no es posible determinar si el valor de realización de las citadas existencias es superior al coste
de producción. Nuestro informe de auditoría del ejercicio anterior contenía una salvedad sobre esta cuestión.
A cierre de ejercicio la Sociedad mantiene saldos vencidos por importe agregado de 29.802 EUR, clasificados en
cuentas de “Clientes” por importe de 12.613 EUR y en cuenta de “Deudores varios” por importe de 17.189 EUR, cuyo
cobro no se viene produciendo en los términos acordados, sin que se haya dotado deterioro a cierre de este ejercicio
o el anterior. Nuestro informe de auditoría del ejercicio anterior contenía una salvedad sobre esta cuestión.
Hemos llevado a cabo nuestra auditoría de conformidad con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de
cuentas de PYMES vigente en España. Nuestras responsabilidades de acuerdo con dichas normas se describen más
adelante en la sección Responsabilidades del auditor en relación con la auditoría de las cuentas anuales de PYMES de
nuestro informe.
Somos independientes de la Sociedad de conformidad con los requerimientos de ética, incluidos los de
independencia, que son aplicables a nuestra auditoría de las cuentas anuales de PYMES en España según lo exigido
por la normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas. En este sentido, no hemos prestado servicios
distintos a los de la auditoría de cuentas ni han concurrido situaciones o circunstancias que, de acuerdo con lo
establecido en la citada normativa reguladora, hayan afectado a la necesaria independencia de modo que se haya
visto comprometida.
Consideramos que la evidencia de auditoría que hemos obtenido proporciona una base suficiente y adecuada para
nuestra opinión con salvedades.
Los aspectos más relevantes de la auditoría son aquellos que, según nuestro juicio profesional, han sido
considerados como los riesgos de incorrección material más significativos en nuestra auditoría de las cuentas
anuales de PYMES del periodo actual. Estos riesgos han sido tratados en el contexto de nuestra auditoría de las
cuentas anuales de PYMES en su conjunto, y en la formación de nuestra opinión sobre éstas, y no expresamos una
opinión por separado sobre dichos riesgos.
Excepto por las cuestiones descritas en la sección Fundamentos de la opinión con salvedades, hemos determinado
que no existen otros riesgos más significativos considerados en la auditoría que se deban comunicar en nuestro
informe.
En la preparación de las cuentas anuales de PYMES, los administradores son responsables de la valoración de la
capacidad de la Sociedad para continuar como empresa en funcionamiento, revelando, según corresponda, las
cuestiones relacionadas con empresa en funcionamiento y utilizando el principio contable de empresa en
funcionamiento excepto si los administradores tienen intención de liquidar la sociedad o de cesar sus operaciones, o
bien no exista otra alternativa realista.
Nuestros objetivos son obtener una seguridad razonable de que las cuentas anuales de PYMES en su conjunto están
libres de incorrección material, debida a fraude o error, y emitir un informe de auditoría que contiene nuestra
opinión. Seguridad razonable es un alto grado de seguridad, pero no garantiza que una auditoría realizada de
conformidad con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas vigente en España siempre detecte
una incorrección material cuando existe. Las incorrecciones pueden deberse a fraude o error y se consideran
materiales si, individualmente o de forma agregada, puede preverse razonablemente que influyan en las decisiones
económicas que los usuarios toman basándose en las cuentas anuales.
En el Anexo 1 de este informe de auditoría se incluye una descripción más detallada de nuestras responsabilidades
en relación con la auditoría de las cuentas anuales. Esta descripción es parte integrante de nuestro informe de
auditoría.
OPINIÓN
Hemos auditado las cuentas anuales adjuntas de ZZZ, S.L. (la Sociedad), que comprenden el balance al 30 de
diciembre de 2021, la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el estado de
flujos de efectivo y la memoria, correspondientes al ejercicio anual terminado en dicha fecha.
En nuestra opinión, las cuentas anuales adjuntas expresan, en todos los aspectos significativos, la imagen fiel del
patrimonio y de la situación financiera de la Sociedad a 30 de diciembre de 2021, así como de sus resultados y flujos
de efectivo correspondientes al ejercicio terminado en dicha fecha, de conformidad con el marco normativo de
información financiera que resulta de aplicación (que se identifica en la Nota 2 de la memoria adjunta) y, en
particular, con los principios y criterios contables contenidos en el mismo.
FUNDAMENTO DE LA OPINIÓN
Hemos llevado a cabo nuestra auditoría de conformidad con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de
cuentas vigente en España. Nuestras responsabilidades de acuerdo con dichas normas se describen más adelante en
la sección Responsabilidades del auditor en relación con la auditoría de las cuentas anuales de nuestro informe.
Somos independientes de la Sociedad de conformidad con los requerimientos de ética, incluidos los de
independencia, que son aplicables a nuestra auditoría de las cuentas anuales en España según lo exigido por la
normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas. En este sentido, no hemos prestado servicios distintos
a los de la auditoría de cuentas ni han concurrido situaciones o circunstancias que, de acuerdo con lo establecido en
la citada normativa reguladora, hayan afectado a la necesaria independencia de modo que se haya visto
comprometida.
Consideramos que la evidencia de auditoría que hemos obtenido proporciona una base suficiente y adecuada para
nuestra opinión.
Los aspectos más relevantes de la auditoría son aquellos que, según nuestro juicio profesional, han sido
considerados como los riesgos de incorrección material más significativos en nuestra auditoría de las cuentas
anuales del periodo actual. Estos riesgos han sido tratados en el contexto de nuestra auditoría de las cuentas anuales
en su conjunto, y en la formación de nuestra opinión sobre éstas, y no expresamos una opinión por separado sobre
dichos riesgos.
Hemos determinado que los riesgos que se describen a continuación son los riesgos más significativos considerados
en la auditoría que se deben comunicar en nuestro informe.
OTRAS CUESTIONES
Las cuentas anuales de la Sociedad correspondientes al período comprendido entre el 1 de enero de 2020 al 30 de
diciembre de 2020 no fueron sometidas a auditoría obligatoria.
La otra información comprende el informe de gestión del ejercicio 2021 cuya formulación es responsabilidad de los
administradores de la Sociedad, y no forma parte integrante de las cuentas anuales.
Nuestra opinión de auditoría sobre las cuentas anuales no cubre la otra información. Nuestra responsabilidad sobre
la otra información, de conformidad con lo exigido por la normativa reguladora de la actividad de auditoría de
cuentas, consiste en evaluar e informar sobre la concordancia de la otra información con las cuentas anuales, a partir
del conocimiento de la entidad obtenido en la realización de la auditoría de las citadas cuentas y sin incluir
información distinta de la obtenida como evidencia durante la misma. Asimismo, nuestra responsabilidad con
respecto al informe de gestión consiste en evaluar e informar de si su contenido y presentación son conformes a la
normativa que resulta de aplicación. Si, basándonos en el trabajo que hemos realizado, concluimos que existen
incorrecciones materiales, estamos obligados a informar de ello.
Sobre la base del trabajo realizado, según lo descrito en el párrafo anterior, la información que contiene el informe
de gestión concuerda con la de las cuentas anuales del ejercicio 2021 y su contenido y presentación son conformes a
la normativa que resulta de aplicación.
Los administradores son responsables de formular las cuentas anuales adjuntas, de forma que expresen la imagen
fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la Sociedad, de conformidad con el marco
normativo de información financiera aplicable a la entidad en España, y del control interno que consideren necesario
para permitir la preparación de cuentas anuales libres de incorrección material, debida a fraude o error.
En la preparación de las cuentas anuales, los administradores son responsables de la valoración de la capacidad de la
Sociedad para continuar como empresa en funcionamiento, revelando, según corresponda, las cuestiones
relacionadas con empresa en funcionamiento y utilizando el principio contable de empresa en funcionamiento
excepto si los administradores tienen intención de liquidar la sociedad o de cesar sus operaciones, o bien no exista
otra alternativa realista.
Nuestros objetivos son obtener una seguridad razonable de que las cuentas anuales en su conjunto están libres de
incorrección material, debida a fraude o error, y emitir un informe de auditoría que contiene nuestra opinión.
Seguridad razonable es un alto grado de seguridad, pero no garantiza que una auditoría realizada de conformidad
con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas vigente en España siempre detecte una
incorrección material cuando existe. Las incorrecciones pueden deberse a fraude o error y se consideran materiales
si, individualmente o de forma agregada, puede preverse razonablemente que influyan en las decisiones económicas
que los usuarios toman basándose en las cuentas anuales.
En el Anexo 1 de este informe de auditoría se incluye una descripción más detallada de nuestras responsabilidades
en relación con la auditoría de las cuentas anuales. Esta descripción es parte integrante de nuestro informe de
auditoría.
En nuestra opinión, excepto por los posibles efectos de las cuestiones descritas en la sección Fundamento de la
opinión con salvedades de nuestro informe, las cuentas anuales adjuntas expresan, en todos los aspectos
significativos, la imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera de la Sociedad a 31 de diciembre de 2020, así
como de sus resultados y flujos de efectivo correspondientes al ejercicio terminado en dicha fecha, de conformidad
con el marco normativo de información financiera que resulta de aplicación (que se identifica en la nota 2.1 de la
memoria) y, en particular, con los principios y criterios contables contenidos en el mismo.
Tal y como se describe en las notas 6, 7 y 13.2 de la memoria adjunta, a 31 de diciembre de 2020 la Sociedad
mantiene registradas inversiones en el patrimonio de empresas del Grupo y asociadas por importe de 18 miles de
euros, así como créditos a largo plazo concedidos a sociedades del Grupo, asociadas y otras vinculadas y cuentas a
cobrar a las mismas registradas en el activo corriente, por importe de 1.659 y 385 miles de euros, respectivamente.
Durante el transcurso de nuestro trabajo no hemos dispuesto de información financiera ni contractual relativa a
dichas sociedades y saldos contables, por lo que no nos ha resultado posible concluir de un modo objetivo respecto
del importe, plazo y modo de recuperación de las citadas inversiones y cuentas a cobrar mantenidas al cierre del
ejercicio 2020.
Adicionalmente, tal y como se indica en la nota 11 de la memoria adjunta, según las disposiciones legales vigentes,
las liquidaciones de impuestos no pueden considerarse definitivas hasta que no han sido inspeccionadas por las
autoridades fiscales competentes o haya transcurrido su plazo de prescripción. En este contexto, como consecuencia
de las diferentes interpretaciones posibles de la normativa fiscal y legal aplicable a las operaciones de la Sociedad,
podrían ponerse de manifiesto pasivos o contingencias fiscales cuya cuantificación no es posible determinar
objetivamente y para los que no se ha registrado provisión alguna en las cuentas anuales adjuntas.
Hemos llevado a cabo nuestra auditoría de conformidad con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de
cuentas vigente en España. Nuestras responsabilidades de acuerdo con dichas normas se describen más adelante en
la sección Responsabilidades del auditor en relación con la auditoría de las cuentas anuales de nuestro informe.
Somos independientes de la Sociedad de conformidad con los requerimientos de ética, incluidos los de
independencia, que son aplicables a nuestra auditoría de las cuentas anuales en España según lo exigido por la
normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas. En este sentido, no hemos prestado servicios distintos
a los de la auditoría de cuentas ni han concurrido situaciones o circunstancias que, de acuerdo con lo establecido en
la citada normativa reguladora, hayan afectado a la necesaria independencia de modo que se haya visto
comprometida.
Consideramos que la evidencia de auditoría que hemos obtenido proporciona una base suficiente y adecuada para
nuestra opinión con salvedades.
Llamamos la atención sobre las notas 2.4 y 9.3 de las cuentas anuales, en las que se indica que, pese a que la
Sociedad presenta un resultado positivo en el ejercicio 2020, como consecuencia de las pérdidas registradas por la
Sociedad en el pasado ejercicio 2019 la Sociedad presenta a 31 de diciembre de 2020 un patrimonio neto negativo
por importe de 1.250 miles de euros, encontrándose tanto a 31 de diciembre de 2019 como de 2020 entre los
supuestos de causa legal de disolución previstos en la legislación mercantil.
Asimismo, sin tener en cuenta los saldos mantenidos con empresas del Grupo, asociadas y otras vinculadas descritos
en la sección Fundamento de la opinión con salvedades, la Sociedad presentaría a 31 de diciembre de 2020 un fondo
de maniobra negativo por importe de 1.995 miles de euros.
Estos hechos indican la existencia de una incertidumbre material que puede generar dudas significativas sobre la
capacidad de la Sociedad para continuar como empresa en funcionamiento. Nuestra opinión no ha sido modificada
en relación con esta cuestión.
Los aspectos más relevantes de la auditoría son aquellos que, según nuestro juicio profesional, han sido
considerados como los riesgos de incorrección material más significativos en nuestra auditoría de las cuentas
anuales del periodo actual. Estos riesgos han sido tratados en el contexto de nuestra auditoría de las cuentas anuales
en su conjunto, y en la formación de nuestra opinión sobre estas, y no expresamos una opinión por separado sobre
esos riesgos.
Además de las cuestiones descritas en las secciones Fundamento de la opinión con salvedades e Incertidumbre
material relacionada con la Empresa en funcionamiento, hemos determinado que los riesgos que se describen a
continuación son los riesgos más significativos considerados en la auditoría que se deben comunicar en nuestro
informe.
Tal y como se indica en la nota 1 de la memoria adjunta, la Sociedad se dedica a la consultoría tecnológica en el
marco de internet y la distribución y venta de licencias y software en general, así como a la venta de equipos
informáticos y la prestación de servicios de reparación de los mismos, todo lo cual supone la práctica totalidad de los
ingresos de la Sociedad.
El reconocimiento de estos ingresos, bajo las condiciones y términos normales de la Sociedad, si bien no resulta
complejo, dando lugar a cuentas por cobrar convertibles en efectivo en un corto periodo de tiempo y con
porcentajes de devolución inmateriales históricamente, implican una casuística específica asociada a las distintas
condiciones firmadas con los clientes y a los impuestos y gravámenes aplicables.
Este hecho, junto con la existencia de un riesgo inherente asociado al momento del reconocimiento de dichos
ingresos, que depende de los términos contractuales bajo los que los bienes son vendidos o los servicios son
prestados, motiva que este aspecto sea un área de atención significativa para nuestra auditoría.
Asimismo, hemos ejecutado una serie de procedimientos sustantivos, tales como: evaluar la razonabilidad de los
volúmenes de ingresos y márgenes del ejercicio 2020 respecto a las tendencias de los ejercicios anteriores,
cotejando estos datos con la información proporcionada por fuentes internas de la Sociedad y externas, y la
realización de pruebas en detalle sobre una muestra de ingresos contabilizados.
Por último, hemos evaluado si las notas 4.6 y 12.1 de las cuentas anuales adjuntas contienen los desgloses e
información relativa a los ingresos de la Sociedad exigidos por el marco de información financiera aplicable.
OTRAS CUESTIONES
Las cuentas anuales de la Sociedad _____ correspondientes al ejercicio terminado a 31 de diciembre de 2019 no han
sido auditadas.
Los administradores son responsables de formular las cuentas anuales adjuntas, de forma que expresen la imagen
fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la Sociedad, de conformidad con el marco
normativo de información financiera aplicable a la entidad en España, y del control interno que consideren necesario
para permitir la preparación de cuentas anuales libres de incorrección material, debida a fraude o error.
En la preparación de las cuentas anuales, los administradores son responsables de la valoración de la capacidad de la
Sociedad para continuar como empresa en funcionamiento, revelando, según corresponda, las cuestiones
relacionadas con empresa en funcionamiento y utilizando el principio contable de empresa en funcionamiento
excepto si los administradores tienen intención de liquidar la sociedad o de cesar sus operaciones, o bien no exista
otra alternativa realista.
Nuestros objetivos son obtener una seguridad razonable de que las cuentas anuales en su conjunto están libres de
incorrección material, debida a fraude o error, y emitir un informe de auditoría que contiene nuestra opinión.
Seguridad razonable es un alto grado de seguridad, pero no garantiza que una auditoría realizada de conformidad
con la normativa reguladora de la actividad de auditoría de cuentas vigente en España siempre detecte una
incorrección material cuando existe. Las incorrecciones pueden deberse a fraude o error y se consideran materiales
si, individualmente o de forma agregada, puede preverse razonablemente que influyan en las decisiones económicas
que los usuarios toman basándose en las cuentas anuales.