La Resolución Alterna de Conflictos (RAC) en CR
La Resolución Alterna de Conflictos (RAC) en CR
La Resolución Alterna de Conflictos (RAC) en CR
09 FEBRUARY 2017
Antecedentes Históricos
La Resolución Alterna de Conflictos (RAC) es tan antigua como los problemas entre los seres humanos, aunque
tal vez en aquel entonces no se concebía como hoy en día. Desde que nos congregamos en sociedad, hemos
buscado como resolver las situaciones que ponen en riesgo la paz social.
Podemos afirmar entonces, que lo que hoy conocemos como formas alternativas de solución de conflictos,
refiriéndonos a opciones diferentes al proceso judicial, son la manera en que históricamente eran resueltos los
conflictos a través diálogo, la tolerancia y el respecto a las diferencias.
La importancia de estos mecanismos en la actualidad, no radica en que sean algo novedoso, sino en que a
diferencia de la forma en que se aplicaban históricamente, se han sistematizado, definiéndoles sus características
y particularidades, la tipología de conflictos en los que puede ser aplicado cada uno, así como los procedimientos
claros que garanticen, en mayor medida, resultados positivos.
Históricamente el sistema de administración de justicia costarricense, a diferencia de los demás países
centroamericanos, ha contado con una amplia credibilidad y confianza por parte de los usuarios. Sin embargo,
no se puede ignorar que en nuestro territorio se afincan muchos de los problemas presentes en los vecinos del
área, como por ejemplo los altos niveles de litigiosidad.
Justamente para atacar ese fenómeno, en los países centroamericanos se propició un análisis tendiente a la eficacia
y eficiencia del servicio que se brinda, pues es importante no sólo el acceso a la justicia, sino que ésta sea expedita,
transparente y cumplida.
De ese análisis iniciado a través del cuestionamientos al sistema, han salido las razones que han hecho que se vea
en los métodos alternos de resolución de conflictos, una opción viable y satisfactoria para ofrecer a la persona
usuaria.
Hace más de cuarenta años se concluyó que los sistemas judiciales eran lentos, en algunos casos corruptos, que
los operadores del derecho en muchas ocasiones no contaban con las posibilidades para tener procesos constantes
de capacitación y actualización o especialización, lo que provocaba que el sistema no tuviese los profesionales
calificados que eran necesarios.
Conscientes de lo anterior, los Poderes Judiciales, entraron a partir de los años 70, en procesos de modernización,
que si bien es cierto han sido estructurados de forma seria para garantizar la consecución de los objetivos que lo
inspiran, también lo es que su avance no es en muchos casos, a la velocidad que requieren los tiempos actuales
en razón de la cantidad y complejidad de los conflictos que se deben enfrentar.
En materia de Resolución Alternativa de Conflictos, a diferencia de muchos países en que la iniciativa surge de
la sociedad civil, en Costa Rica es el Poder Judicial quien impulsó la idea y lideró todas las acciones que dieron
forma al sistema que se sigue actualmente en el país.
Institucionalmente se pueden distinguir tres períodos de suma importancia, a saber:
• 1993 – 1996
• 1997 – 2007
• 2007 a la fecha.
El primero de ellos inicia en 1993.En ese año la Corte Suprema de Justicia, suscribe un convenio con la A.I.D.el
cual contiene dentro de sus temas prioritarios la Resolución Alterna de Conflictos. Como consecuencia del
mismo, se desarrolla durante los años 1993 a 1996 el programa de Resolución Alterna de Conflictos.
Dicho programa se llevó a cabo con el apoyo de la AID y del Servicio Informático y Cultural de la Embajada de
los Estados Unidos de América en Costa Rica, y se constituyó en el primer esfuerzo nacional para incentivar la
solución alterna de los conflictos y la promoción de la paz social.
Dentro de sus principales logros pueden destacarse, los siguientes:
Ese período tiene especial relevancia para el Poder Judicial de Costa Rica, pues se sentaron las bases de la
orientación que en adelante tendrá el tema RAC en el país.
El segundo estadio(1997 – 2004) está marcado por un hecho trascendental:la promulgación de la Ley 7727 (Ley
sobre Resolución Alterna de Conflictos y Promoción de la Paz Social), el día cuatro de diciembre de mil
novecientos noventa y siete.
En ese período se desarrollan una serie de iniciativas tanto en el ámbito jurisdiccional como extrajudicial, con el
objetivo primordial de enseñar a los costarricenses a enfrentar los conflictos de una manera asertiva, haciendo uso
del respeto, la escucha y la comunicación, para así no violentar los derechos de los demás, y convivir de una
manera pacífica.
En el ámbito extrajudicial, se constituyen la mayoría de Centros Privados de Conciliación y Arbitraje, nacen los
Centros de Conciliación en las instituciones y en los Colegios Profesionales y se inaugura el programa de casas
de justicia.
En el área jurisdiccional, se suscitan una serie de eventos y los más relevantes son:
Consciente de que el artículo 6 de la Ley 7727 establece que “…En cualquier etapa de un proceso judicial, el
tribunal puede proponer una audiencia de conciliación. El conciliador podrá ser el mismo juez de la causa o
un juez conciliador. La Corte Suprema de Justicia designará a los jueces conciliadores, que requiera el
servicio y les determinará las facultades y responsabilidades…”la Corte Plena creó la figura del(a) Juez(a)
Conciliador(a), señalando que este(a) profesional es un(a) juez(a) de carrera, especializados en la resolución
alterna de conflictos, capaces de establecer un modelo comunicacional diferente, encaminado al abordaje integral
del conflicto que agobia a las partes.
Merece especial relevancia el hecho de que este tipo de juzgador, mediante acuerdo de Corte Plena del 20 de
octubre del 2003, fue dotado de una competencia ampliada que le permite actuar en todas las materias e instancias
legalmente establecidas, lo que le permite abordar integralmente el conflicto, evitando que la competencia se erija
como un valladar infranqueable que provoque que un mismo hecho generador de controversia, deba ser asumido
por distintas autoridades judiciales.
En el año 2001,el Poder Judicial crea la Unidad de Jueces Conciliadores, adscrita a la Presidencia de la Corte
Suprema de Justicia, que laboró por un plazo de tres años en los Juzgados de Familia del Primer Circuito Judicial
de San José. Se pretendía insertar la figura del Juez Conciliador a nivel institucional, demostrando cómo la
práctica profesional de la conciliación generaría beneficios cualitativos y cuantitativos en el manejo de los casos
y por lo tanto en la disminución de la litigiosidad.
La experiencia no generó los resultados que se esperaban, pues durante esos tres años tan solo se resolvieron 152
asuntos mediante el instituto de la conciliación (70 en el 2001; 50 en el 2002 y 32 en el 2003). Fueron muchas
las causas que incidieron para que no se alcanzaran las expectativas trazadas.
En el mes de julio del 2003, la Presidencia de la Corte, conformó nuevamente la Comisión de Resolución Alterna
de Conflictos del Poder Judicial. La nueva Comisión, se dio a la tarea de plantear y definir los objetivos
estratégicos que guiarían sus metas, proyectos y acciones.
Estos Objetivos Estratégicos se plantean y aprueban de la siguiente forma:
1. Debe proponerse a corto plazo a la Corte Plena una definición de las políticas institucionales en la materia
para conocimiento de la Corte y su aprobación.
2. Dentro de esa definición de políticas debe establecerse como un objetivo de la comisión el impulsar u modelo
de conciliación judicial que tenga como objetivo fundamental el descongestionamiento en todas las materias
en donde de considere viable la reducción del retardo judicial.
3. Los jueces conciliadores que pertenezcan a la Unidad de jueces conciliadores en la actualidad y hacia el
futuro deben quedan investidos de competencia plena para actuar en la celebración de conciliaciones
judiciales en todas las materias.
4. La Comisión, deberá avocarse a identificar posibles ayudas o colaboraciones de la cooperación internacional
para el fortalecimiento del RAC en el Poder Judicial y a nivel general.
5. La Comisión, deberá realizar a mediano plazo un diagnóstico general sobre la evolución y el resultado del
RAC en Costa Rica, a propósito de la celebración del X Aniversario de su implantación en Costa Rica. Dicho
diagnóstico deberá realizarse a más tardar en el primer semestre del próximo año.
6. La Comisión, deberá impulsar mediante procesos participativos, la identificación interna y externa con el
tema del RAC como una de las herramientas esenciales para afrontar con éxito el retardo judicial.
7. Según las experiencias internacionales en la materia, la única manera de lograr a través del RAC una
efectiva disminución y descongestionamiento de los despachos judiciales, es a través de la aplicación
extensa y masiva de las resoluciones de conciliación en todos los procesos en que esto sea posible, y
promover estas facilidades activamente desde los mecanismos judiciales. La Comisión deberá avocarse a
dirigir sus procesos a la mayor brevedad posible, para lo cual contará con los recursos requeridos y el apoyo
del Consejo Superior.
(Acuerdo de Corte Plena, Sesión 39-03 del 20 de octubre del 2003,Artículo XVIII).-
Con el fin de dar cumplimiento a esos objetivos, la Comisión a través de la Unidad de Jueces Conciliadores,
diseñóel “PLAN PILOTO DE AUDIENCIAS ESPECIALES DE CONCILIACIÓN” que se desarrolló
durante los años 2004 al 2006 en los diferentes Circuitos Judiciales del país. Gracias a él, se resolvieron 5825
asuntos (1973 en el 2004; 2386 en el 2005 y 1466 en el 2006)trabajando en las diferentes materias y despachos.
Esa experiencia permitió a la institución introyectar en los usuarios un modelo de solución de conflictos distinto
al dictado de una sentencia, pero satisfactorio y con respaldo institucional. La persona usuaria percibió el sistema
judicial como el que realmente le ofrece soluciones viables, se interesa por el ser humano detrás de cada
expediente, le da la oportunidad de expresar sus intereses y de resolver su conflicto con base en estos.Se
atendieron más de 12.000 usuarios, que tuvieron la oportunidad de buscar soluciones a sus conflictos o de conocer
al menos en que consiste este tipo opciones que brinda la institución.
En aquel entonces era claro para el Poder Judicial, la importancia no sólo de trabajar con los problemas que
afectaban a la institución, sino hacer una labor de información y sensibilización con los ciudadanos que dentro de
algunos años serían los potenciales usuarios del sistema. Es por ello, que a partir del año 2004, se impulsó en
forma conjunta con el Ministerio de Educación Pública, el proyecto “RESOLUCION ALTERNA DE
CONFLICTOS EN EL AMBITO EDUCATIVO: HACIA UNA CULTURA DE PAZ”.
Este Convenio estuvo dirigido a incorporar los métodos de resolución pacífica de conflictos a los programas
nacionales de educación y partía de una gran reforma curricular en los planes de estudio, para incluir la
conciliación como un eje transversal en las distintas asignaturas y concebirla como uno de los mecanismos que
nos permiten hacer realidad el valor de la paz.
El Poder Judicial en ese entonces visualizaba la Resolución Alterna de Conflictos en el ámbito educativo, como
uno de los componentes más importantes, porque sus objetivos y estrategias iban encaminadas a una labor
preventiva, de intervención temprana, en etapa de formación de los niños y jóvenes, lo que permitiría que su
cultura inicial sea de paz, no teniendo que desaprender comportamientos, ni modificar actitudes.
El tercer período empieza el 12 de marzo del 2007. Ese día la Corte Suprema de Justicia, en sesión de Corte
Plena aprobó la creación del Centro de Conciliación del Poder Judicial, el cual ha venido a coadyuvar a la
obtención de una justicia de calidad y promover una cultura de paz, para la solución constructiva de los
diferendos.
Dicho centro, responde a un cambio de modelo, luego de conocer los resultados de un plan piloto que se
implementó en diferentes circuitos judiciales.
Con esta modalidad, la conciliación que se encuentra legitimada desde hace mucho tiempo en los diferentes
cuerpos legales, como una etapa procesal obligatoria que debe agotarse, está siendo ejecutada por juezas y jueces
conciliadores, quienes desarrollan un modelo comunicacional diferente que permite el modelaje de conductas
pacíficas para la resolución de los conflictos, modelo en el que las personas puedan adquirir conciencia de la
importancia de su participación en la construcción de mejores alternativas para la solución de sus controversias.
Si bien estas acciones las realizó durante los años 2004, 2005 y 2006, la Unidad de Jueces Conciliadores, con la
creación del Centro de Conciliación del Poder Judicial se sustituyó el sistema de audiencias especiales
“itinerantes” por un esquema en el cual el Centro recibirá constantemente expedientes de los despachos de los
diferentes circuitos judiciales.
En el año 2007 se crearon la Sede Central, la Sede de Santa Cruz y la Sede de San Ramón. El año siguiente se
crearon las sedes de Pérez Zeledón y San Carlos. En el 2009 se creó la Sede de Pococí y en el 2013 se crearon
las sedes de Limón y Golfito. Y en el 2014 las sedes de Puntarenas y Alajuela.