Mug Rosita
Mug Rosita
Mug Rosita
de Benjamín Gavarre
Son casi las seis de la tarde, la hora la marca un reloj viejo que se
puede distinguir con facilidad.
La luz se filtra por una ventanita.
Es el cuarto de planchar pero también el cuarto de trebejos.
María Encarnación, una mujer de unos veinticinco años, está
planchando una camisa en el burro de planchar. La camisa,
visiblemente arrugada es blanca, es de hombre y es de una talla
que corresponde a un hombre grande o tal vez un hombre obeso.
Encarnación plancha con pericia el cuello, los hombros... los
puños... Y repite cada vez que termina una parte...
Homero.- Otra vez, no, hoy no. Y si trabajo de noche, hoy o cuando
se me pegue la gana, no es asunto tuyo.
Encarnación.- Mi maestra...
Homero.- Son las palabras que uno escribe cuando aprende a leer
y a escribir, cuando uno es un niño, cuando tienes cinco años o
seis... Así aprendí yo.
Homero.- ¡Cuál niña?
Oscuro.