Protocolo D Einvestigación Grupo 2
Protocolo D Einvestigación Grupo 2
Protocolo D Einvestigación Grupo 2
Pe
Tema:
dia
Cómo usar biomarcadores
de infección o sepsis a lado
P R O T O C O O
L
Integra Docente
Rengel Dr. Javier
ntes:
Gabriela :Fiallos
Robalino
María José
Tamayo
Michelle
PROTOCOLO
Título de investigación:
La sepsis neonatal es una respuesta desequilibrada extrema del cuerpo ante una infección
diseminada, que en pediatría afecta y pone en peligro la vida con mayor prevalencia, debido a
que esta población es más susceptible.
En Ecuador, informes anteriores han planteado que la incidencia de sepsis ocupa el tercer
puesto en relación con las causas de mortalidad en neonatología, teniendo una incidencia de
aproximadamente el 2,4 %.
Objetivo General:
Objetivos específicos:
Conocer cuáles son los principales biomarcadores que se emplean en el
diagnóstico de sepsis.
Detallar la validez de los biomarcadores como pruebas diagnósticas de la sepsis
neonatal.
Antecedentes:
Se realizó un estudio retrospectivo en una UCIP en Brasil. Todos los pacientes de 6 meses a
18 años ingresados con diagnóstico de sepsis fueron elegibles para su inclusión. Aquellos con
ferritina y proteína C reactiva medidos dentro de los 48h y lactato y leucocitos dentro de 24h
de ingreso se incluyeron en el análisis de desempeño pronóstico. De 350 pacientes elegibles
con sepsis, 294 se habían sometido a todas las mediciones necesarias para el análisis y se
incluyeron en el estudio. PIM2, ferritina, lactato y CRP tuvieron un buen poder
discriminatorio para la mortalidad, siendo PIM2 y ferritinas superiores a CRP. Los valores de
corte para PIM2 (> 14%), ferritina (> 135ng/ml), lactato (> 1,7mmol/L) y PCR (> 6,7mg/mL)
se asociaron con mortalidad. La combinación de ferritina, lactato y PCR tuvo un valor
predictivo positivo de mortalidad del 43 %, similar al de PIM2 solo (38,6 %). El uso
combinado de los tres biomarcadores más PIM2 aumentó el valor predictivo positivo al 76 %
y la precisión a 0,945. PIM2, ferritina, lactato y CRP solos mostraron un buen rendimiento
pronóstico de mortalidad en pacientes pediátricos mayores de 6 meses con sepsis. Cuando se
combinaron, pudieron predecir la muerte en tres cuartas partes de los pacientes con sepsis. El
recuento total de leucocitos no fue útil como marcador pronóstico. (Tedesco Tonial, 2021)
Se detectaron niveles significativamente más altos de PCR, PCT e IL-6 en el grupo Sepsis 1.0
que en el grupo de infección sin sepsis ( p < 0,001). Las áreas bajo la curva (AUC) para el
diagnóstico de Sepsis 1.0 fueron 0,974 (CRP), 0,913 (PCT) y 0,919 (IL-6). Una combinación
de dos biomarcadores cualesquiera aumentó la sensibilidad diagnóstica a ≥92,54 % y la
especificidad al 100,00 %. Se encontraron niveles significativamente más altos de PCT, IL-8
e IL-10 en el grupo Sepsis 3.0 que en el grupo Sepsis 1.0 ( p ≤ 0.01), con AUC para
diagnosticar Sepsis 3.0 0.807 (PCT), 0.711 (IL-8) y 0.860 (IL-10). La combinación de estos
tres biomarcadores aumentó la sensibilidad diagnóstica al 96,55 % y la especificidad al 94,03
%. LLegando a la conclusion, Conclusión
En la sepsis pediátrica, la combinación de CRP, PCT e IL-6 puede diagnosticar con precisión
el estado hiperinflamatorio y aumentar la especificidad diagnóstica. El diagnóstico temprano
de la disfunción orgánica requiere una combinación de PCT, IL-8 e IL-10. (Gongbo Zeng,
2022)
Hipótesis:
Marco teórico:
Definición:
Epidemiologia:
Etiología:
Un estudio revelo que S. áureas (15%), Pseudomonas (7,9%) y hongos (13,4%) son
patógenos comunes causantes de sepsis.
En la actualidad la mayoría de los niños con sepsis tienen al menos una enfermedad crónica,
compleja o no, exposición previa a la asistencia sanitaria, inmunosupresión o dispositivos
invasivos. Estos pacientes tienen un alto riesgo de infección por microorganismos resistentes
a antibióticos como es el caso de S. aureus resistente a la meticilina, C. difficile y
Pseudomonas spp.
Diferentes trabajos publicados en los últimos años indican que predominan las infecciones
por gérmenes Gram negativos, fundamentalmente enterobacterias y entre los gérmenes Gram
positivos, predomina el S. aureus y el S. coagulasa negativo, especialmente en los neonatos y
lactantes menores de 12 meses.
Los virus producen sepsis con menor frecuencia, pero debemos pensar en etiología herpética
en los menores de 3 meses, sobre todo si cursan con patología hemorrágica. (Laura Evans,
2021)
Fisiopatología:
Desregulación de la hemostasia
En la sepsis, hay una intersección entre las vías inflamatoria y hemostática, con la activación
simultánea de las cascadas inflamatoria y de la coagulación. El espectro de esta interacción
puede variar desde una trombocitopenia leve hasta una coagulación intravascular diseminada
fulminante. Se cree que la hipercoagulabilidad de la sepsis está impulsada por la liberación de
factor tisular de las células endoteliales alteradas. Luego, el factor tisular provoca la
activación sistémica de la cascada de coagulación dando como resultado la producción de
trombina, la activación de plaquetas y la formación de coágulos de plaquetas y fibrina. Estos
microtrombos pueden causar defectos de perfusión locales que dan como resultado hipoxia
tisular y disfunción orgánica. Además de lo antes descrito hay una depresión de los efectos
anticoagulantes de la proteína C y la antitrombina que normalmente atenuarían la cascada de
la coagulación. Adicionalmente se observa una reducción de la fibrinólisis como
consecuencia de la sepsis. A medida que aumentan los niveles de TNFα e IL-1β, las células
endoteliales vasculares liberan activadores del plasminógeno tisular, el efecto neto es la
reducción de la fibrinólisis y eliminación de fibrina, lo que contribuye a la perpetuación de la
trombosis microvascular.
Inmunosupresión
Manifestaciones clínicas:
La fiebre es un signo casi siempre presente, aunque puede faltar en pacientes neonatales,
lactantes pequeños o en pacientes inmunodeprimidos.
Respiratorio: Los pacientes sépticos generalmente presentan taquipnea, aunque si tienen
afectación del estado de conciencia o shock instaurado podemos encontrar bradipnea o
incluso apneas, especialmente en recién nacidos y lactantes. Mediante la auscultación
podemos sospechar un foco infeccioso pulmonar (p. ej., neumonía, empiema) o un edema
secundario a disfunción cardiaca o aumento en la permeabilidad capilar (crepitantes).
En las fases iniciales del shock séptico, si existe vasodilatación periférica, la presión
diferencial puede aumentar y los pulsos apreciarse como saltones. Luego se puede observar
un pulso rápido, progresivamente más débil, especialmente en los pulsos periféricos, incluso
con pulsos casi imperceptibles.
Diagnostico:
Valoración inicial:
Pruebas complementarias:
Exámenes de laboratorio
La serie roja inicialmente suele ser normal, aunque evolutivamente suele presentarse una
anemia. Las plaquetas pueden ser estar aumentadas, ser normales o estar disminuidas por
consumo y secuestro vascular. La trombopenia es más frecuente en la sepsis grave
Biomarcadores
Los biomarcadores se han evaluado para varias aplicaciones en pacientes con sepsis, incluido
el diagnóstico de infección, el pronóstico y la orientación terapéutica. Los biomarcadores de
sepsis pueden proporcionar información más allá de lo que está disponible utilizando otras
métricas y, por lo tanto, podrían ayudar a informar la toma de decisiones clínicas y mejorar
potencialmente el manejo del paciente. Por ejemplo, se podría administrar una terapia
antibiótica más oportuna y apropiada y evitar los antibióticos innecesarios si se dispusiera de
biomarcadores que pudieran diagnosticar con precisión la sepsis de manera temprana. De
manera similar, los biomarcadores podrían ayudar a los médicos a monitorear la efectividad
de las decisiones terapéuticas y ajustar el tratamiento si es necesario. (Charalampos Pierrakos,
2020)
Los niveles persistentemente elevados de PCR deben hacer sospechar la presencia una
infección por hongos, tratamiento inadecuado debido a resistencia farmacológica o
surgimiento de complicaciones.
Los niveles de PCT pueden elevarse en condiciones no infecciosas como asfixia neonatal,
hipoxemia y hemorragia intracraneal. También existe evidencia que sugiere que la edad
gestacional menor a 37 semanas, el muy bajo peso al nacer, un puntaje de APGAR de 4 a los
5 minutos, administración prenatal de antibióticos y el uso de surfactante pulmonar puede
aumentar los niveles de PCT en la primera semana de vida.
Amiloide Sérico A: se sintetizada en el hígado, células endoteliales, monocitos y
leiomiocitos. Esta se secreta en respuesta al trauma o infección. Se le atribuyen funciones
como quimiotaxis, inmunomodulación y regeneración tisular. Los niveles de ASA dependen
de la IL-1, la IL-6 y el TNF-α. Se ha visto que sus niveles incrementan desde 8-24 h después
de la infección y hasta 1000 veces durante una infección. En general, tiene una especificidad
del 92% y una sensibilidad del 78%. Los niveles de ASA tienen una relación inversa con la
mortalidad.
Citocinas y quimiocinas
Interleucina-6: una citocina inducida por el LPS y otros componentes bacterianos, que es
producida particularmente por monocitos, células dendríticas, linfocitos B, T, células
endoteliales y fribroblastos. Esta induce la activación de células B y la secreción de
anticuerpos, además de estimular la diferenciación de células T citotóxicas. Sus niveles se
elevan antes de que se presenten signos o síntomas de infección. Los niveles de IL-6
aumentan dentro de las 2-6 h de iniciada la infección, tiene una vida media más corta que la
PCR y la PCT, además, su concentración disminuye hasta volverse indetectable en la mayoría
de pacientes dentro de las 24-48 h, siendo aún más rápida esta disminución cuando se
administra tratamiento antibiótico, razones por las que se considera que puede ser de utilidad
como marcador temprano de la enfermedad. Tiene una sensibilidad de 79%, una
especificidad del 84% y un valor predictivo negativo de 93-100%.
Interleucina-8: Se eleva dentro de las 2-4 h de iniciada la infección, con un pico a las 2 h y
luego una rápida declinación a las 4 h. A las 48 h ya ha disminuido considerablemente. Se
relaciona con la activación y quimiotaxis de los neutrófilos. La sensibilidad y la especificidad
de la IL-8 para el diagnóstico de SN varía entre 81-92% y 70-94%, respectivamente.
Factor de necrosis tumoral-alfa: tiene una rápida elevación desde 30 minutos después del
estímulo y alcanza su pico a los 90 minutos. Tiene una vida media estimada de cerca de 70
minutos. La sensibilidad y la especificidad han sido de 66-68% y 76-89%, respectivamente.
Neutrófilo CD64: es una glicoproteína que actúa como receptor, se detecta su aumento
dentro de uno a seis horas después de la presencia de bacterias, y permanece elevada por 24
horas. La respuesta temprana a la infección en combinación con la capacidad de cuantificar
CD64 en muestras de tan solo 50 microlitros dentro de una hora hace que sea útil para la
detección temprana de sepsis neonatal.
Otros biomarcadores
Pruebas de imagen
Radiografía simple: Útil para el diagnóstico de los focos infecciosos pulmonares, como
neumonías y derrames pleurales.
Tratamiento:
Metodología de la investigación:
Se aplicará una investigación científica cualitativa que tendrá un diseño basado en teoría
fundamentada, que tiene como objetivo principal determinar la importancia de los
biomarcadores en el diagnóstico oportuno de sepsis en la edad pediátrica, mediante la
revisión de bibliografía.
Resultado: PCT es producida por casi todos los órganos y macrófagos, y sus
niveles comienzan a aumentar a las 3-4 h después de un estímulo
inflamatorio, alcanzando su punto máximo alrededor de las 24 h y con una
vida media de 22-35 h.
Cronograma:
Juan Ignacio Sánchez Díaz, J. C. (2021). Diagnóstico y tratamiento del shock séptico.
SECIP SOCIEDAD DE CUIDADOS INTENSIVOS PEDIATRICOS.