Ramo de Los 3 Deseos

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RAMO DE LOS 3 DESEOS

En un pequeño pueblo de Huancavelica, llamado Huachocolpa,


conocido por su riqueza en minerales, agricultura y también por sus
mitos y leyendas, vivía un niño llamado Kevín a quien le gustaban, los
objetos mágicos, en especial uno que su madre siempre le contaba: “El
ramo de los 3 deseos”. Ese ramo de flores tenia tres hojas, las cuales
cada una concedía un deseo.

Siempre soñaba que algún día lo tendría en sus manos para así pedir lo
que él quisiera, unos días después sus padres Alejandro y Valeria
decidieron ir a buscar un mejor lugar para vivir ya que en el pueblo
donde se hospedaban, ya casi no había gente porque todos se fueron a
Lima para buscar empleo. Kevín también quería irse con ellos, pero le
dijeron que esperara hasta que regresaran.

cuatro meses después sus padres murieron a causa de un huaico, él se


sentía muy triste ya ni siquiera quería hablar, comer y jugar con
alguien, ni con su tía Lucia que tenía 53 años y actualmente era su
único familiar que le quedaba.

Luego de eso Kevín se acordó de la leyenda que le contaba su madre


“El ramo de los 3 deseos” y decidido ir a buscarlo, su tía estaba
escuchando lo que decía, se acerco a el y le dijo que no arriesgue su
vida por una leyenda que no sabe si es real o no y que además es solo
un niño.

Una noche el se escapó de casa sin que nadie se dirá cuenta, él era
consciente de lo que le iba a suceder, pero aun así salió en su
búsqueda de la leyenda.
Su tía se preocupó al ver la ausencia de Kevín, fue al pueblo a
buscarlo, no lo encontró…

En la casa de sus amigos, no lo encontró…

Buscó en todas partes del pueblo y no estaba, parecía como que, si


nunca hubiera estado ahí. Pero se acordó de lo que le dijo el día
anterior, como era mayor y no tenía tantas fuerzas decidió esperar
hasta que regresara…

Mientras Kevin seguía en su búsqueda se encontró con un zorro que le


preguntó: ¿Qué estas buscando?, el le respondió el ramo de los deseos,
el zorro le que había escuchado eso antes porque muchos viajeros le
habían preguntado donde se encuentra. Kevín con mucha prisa
también le pregunto el zorro, él le respondió que se encuentra hacia el
sur, ya apunto de irse el zorro le da un saco con provisiones, se
despidió de él y se fue.

Kevin había perdido la noción del tiempo no sabía cuantos días o


meses llevaba fuera. Ya era de noche no sabia que hacer en ese
entonces, se encontró con unas luciérnagas y les pidió ayuda para que
alumbraran su camino, las luciérnagas aceptaron, pero por algo a
cambio, su bolsa de provisiones, como Kevin no tenia de otra les
entrego sus provisiones y con ayudas de las luciérnagas siguió su
camino.

Paso el tiempo y su tía ya no se acordaba casi nada de él, se olvidó por


completo su nombre, su edad, su rostro, pero no se olvido lo que le
dijo aquel día: “Voy a ir a buscar el ramo de los deseos y revivir a mis
padres”
Kevín, exhausto, ya no tenia fuerzas ni para caminar. No sabia si iba a
sobrevivir así que se echo a descansar por un rato… Luego despertó
en su casa junto a su mamá y su papá de nuevo, le dijeron: Volviste
hijo te extrañábamos; Estaba muy confundido no sabia si era real o era
un sueño. Decidió acercarse a sus padres para ver si eran reales, pero
cuando se acercó, empezaron a desvanecerse poco a poco, bajo la
mirada y se dio cuenta que él también estaba desvaneciendo…

¡¡Pasarón tres meses y lo encontraron!!

Sus amigos lo estaban esperando entusiasmados para jugar, pero. él ya


no iba a volver a jugar, ni a caminar y menos respirar.

AUTOR: LAMAS ROQUE ÁLAVIE NOÉ


1°A – SECUNDARIA
DOCENTE: ANNELIES JAEGER

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