C4 - S4 - Yo Me Cuido, Tú Me Cuidas

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Cuaderno de alfabetiz ación en salud mental

Sesión 4
Yo me cuido, tú me cuidas
Cuaderno de alfabetización en salud mental

Sesión 4
Yo me cuido, tú me cuidas
Sesión 4
Yo me cuido, tú me cuidas
El estigma constituye una práctica discriminatoria y que puede resultar muy
dañina para las personas que lo experimentan. Tomar conciencia de esta
problemática y emprender acciones para superarla es una tarea de todos
como sociedad.
• ¿Qué acciones o actitudes identificarías como contrarias a la estigmatización?
• Qué crees que hacen las personas que experimentan el estigma para
protegerse a sí mismas?

Un amuleto es un objeto al que se atribuye la capacidad


de protegernos o darnos suerte. El personaje de este
cuento —que nos habla en primera persona, como narrador
protagonista— se aferra a distintos elementos de la realidad
que convierte en sus amuletos. ¿Por qué hará esto?, ¿qué
efecto tendrá en ella?

Mi amuleto de la suerte
Daniela Viviani

A veces me encapricho con un objeto


cualquiera y lo denomino mi “amuleto
de la suerte”. Por ejemplo, esta tarde
de otoño mi elección ha recaído en unas
hojas de plátano oriental que se asoman
por mi ventana. El verde casi se ha ido de
ellas, pero lo poco que les queda destaca
con tal intensidad que su existencia se ha
transformado en una fugaz obra de arte.
Hojas de otoño, mi amuleto de la suerte. Ellas
terminarán soltándose de sus ramas, pero yo
no las olvidaré. Mientras pueda divisarlas por el
rabillo del ojo, repetiré para mis adentros: “hoy
tendré mucha, pero mucha suerte”.

2
—¿Qué hora es?
—Las cuatro y media —respondo con una sonrisa.
—¡Ah, bien! Todavía tenemos tiempo.
La voz de Diego me trae de vuelta al listado de phrasal verbs que
debo aprender para el examen de inglés de mañana.
—¿Alguien sabe si la profe va a preguntar los significados
solamente o va a pedir que hagamos oraciones?
—Va a pedir que los apliquemos en contexto —me apresuro a
contestarle a Marcela—. Habrá que reconocerlos en oraciones y
también crear oraciones. Aquí lo tengo anotado.
Mi compañera me sonríe antes de regresar a sus apuntes. Yo
hago lo mismo, pero no por mucho tiempo. Como embrujada por un
hechizo, regreso la vista a la ventana.
Quiero volver a ver las hojas doradas de la suerte.
Quiero que mi mirada se cruce con la de Víctor.
—¿Teresa?
Al ver cumplido mi deseo, un sonrojo furioso colorea mis mejillas
y me largo a reír. Él hace lo mismo para el desconcierto del resto.
Siempre es así con nosotros. Un “siempre” que apenas cumple seis
meses exactos desde que nos conocimos en nuestro primer día de
universidad.
A veces me parece que Víctor y yo nos comunicamos casi por
gestos y eso me maravilla de una forma inexplicable. Esta tarde,
sin embargo, he decidido ponerle más palabras a nuestra relación.
Cuando nos quedemos solos, le diré “me gustas mucho” con la
esperanza de que sus labios me regalen un “y tú a mí”.
Sonrío esperando nuestro futuro y voy tras mi amuleto de la
suerte para repetir una vez más: “hoy tendré mucha, pero mucha
suerte”.
—Oigan, ¿qué les parece si practicamos inventar oraciones con
phrasal verbs?
La idea de Marcela es recibida con entusiasmo por el grupo.
—Víctor, empieza tú que cachas más —sugiere alguien.
Él asiente, pero no alcanza a soltar una frase antes de ser
interrumpido.
—No, no —dice Marcela, un tanto nerviosa—. ¿Y si mejor
ejercitamos reconocerlos y traducirlos? Trabajemos con alguno de
los textos que salen en el libro de apoyo.
Pese al inesperado cambio de planes, todos aceptamos continuar
con las traducciones.

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—A ver, espérense un poco —Marcela nuevamente cambia de
parecer—. Mejor volvamos a crear oraciones. Teresa dijo que eso
también entra en la prueba, así que mejor no arriesgarse y…
—¡Ya, para, Marcela!
Víctor había levantado la voz tal vez por primera vez desde que
lo conocía. El rubor que invade su rostro me da a entender que el
arrebato lo avergüenza profundamente.
—Ah, perdón, Marcela…
Entonces hace ese gesto: dirige su dedo índice hasta la altura de
sus sienes y lo hace girar en círculos.
—Es que… ¡ni que fueras bipolar!
Todos ríen, menos yo. Mi sonrisa quebrada se asoma apenas por
reflejo.
—Sí, Marcela —agrega Diego—. Deja de cambiar de planes o nos
vamos a volver locos como tú.
A ella el comentario no le afecta en lo más mínimo. Pero a mí me
lastima. Muchísimo. Tanto así que, llegada la noche, me escondo tras
una mentira.
—¿Cómo? ¿Es que te gusta Arturo, el de segundo año?
—Sí, Víctor, me gusta mucho, pero, por favor, no se lo cuentes a
nadie.
—Obvio que no.
—¿Qué pasa?
—No, nada —dice pensativo—. ¡Qué raro!
Intento sonreír, pero no lo logro. El pasado sigue quemándome por
dentro. Ese dedo que giró y giró hasta clavarse en mi corazón. Esas
palabras ignorantes que buscaron hacer reír a costa de un prejuicio.
Porque yo sí tengo trastorno bipolar y, de todas las personas de este
mundo estaba segura de que él sí sería una que podría entenderme.
—¿Qué raro qué, Víctor?
—No sé, Teresa. Pensé que me ibas a decir otra cosa…
El rubor termina la frase por él; un rubor tan persistente que no se
lo puede sacar de encima por más aire que se eche con las manos.
Intento auxiliarlo con un cuaderno como abanico, pero solo consigo
que se ponga más colorado aún y en eso terminamos muertos de la
risa, como pasa siempre entre amigos.
“Amigos, es mejor así”, pienso.
—Buenas noches, Teresa. ¡Nos vemos el lunes!
Le sonrío de vuelta y en un fugaz vistazo a la ventana, compruebo
que las hojas de plátano oriental siguen en su lugar.

4
•••

El invierno ha llegado, las vacaciones están por terminar, no sé qué


hora es, busco a regañadientes mis medicamentos para esconderme
lo antes posible bajo las sábanas. Solo quiero dormir y esconderme
del mundo. Pienso que me lo merezco, después de todo. Cumplí con
todos mis compromisos pese al insomnio que me acechaba desde
hace días. Sí. Merezco dormir y sentirme triste.
Un vaso de agua, fluoxetina y olanzapina… Miro las pastillas antes
de echármelas a la boca mientras me obligo a aceptar el estrés
propio de los exámenes. “Ya pasaron, saqué buenas notas… Era
obvio que iba a terminar destruida”, repito una y otra vez, antes de
un buen sorbo de agua.
Pienso: “es mejor dormir que llorar”.
Esa es mi locura. Una euforia inexplicable. Una tristeza
inexplicable. Y así…
Mientras regreso el vaso al velador, mi vista queda fija en la
ventana. Las gotas de lluvia se han teñido de una luz dorada por
efecto de mi lámpara de sal y se ven hermosas, como piedras de
ámbar. Las observo maravillada y, sin darme cuenta, de repente las
tengo frente a mis ojos con todos sus detalles. Entonces sonrío y en
un susurro les concedo el honor de ser mi nuevo amuleto. Mal que
mal, me han sacado de la cama después de tantos días de sueño.
El teléfono suena.
—¿Aló?...
Víctor y yo nos hemos convertido en mejores amigos.
—De verdad que estoy bien… Solo tengo muchas ganas de dormir.

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Él sabe de mi tristeza, pero no entiende cómo curarla. Le parece
extraña y confusa, pero aun así no se atreve a preguntar qué me
pasa realmente ni yo me atrevo a decírselo.
No quiero que piense que estoy loca.
Recuerdo que la primera vez que Víctor me vio así, creyó que
mi pesimismo se debía a la flojera. Para mi segundo episodio,
aburrimiento. Ahora simplemente procura estar cerca mío durante
esos bajones y si pasan más de cuatro días sin señales mías, se
aparece por mi casa.
—¿Qué? Pero si yo sigo en pijama…
El tono de mi voz no refleja la alegría que siento. Mientras lo
escucho decir que llegará en veinte minutos, mi campo visual se
repleta de perlas de ámbar. Cientos de gotas de suerte solo para mí.
—Suerte para vencer los miedos —murmuro.
El timbre no tarda en sonar. Víctor me sonríe con una gran
caja de pizza en sus manos, pero lo que era una sonrisa se torna
preocupación cuando me ve en pijama, pálida y desganada.
—Teresa —me dice mientras deja la pizza sobre la mesa y
regresa para abrazarme—, te vi tan contenta cuando terminaste los
exámenes, tan confiada, entusiasta, pensé que la alegría por los
resultados te iba a durar más.
—¿Contenta…?, ¿entusiasta…? Puede ser. Pero tal vez euforia
calza más. La verdad es que estaba con una energía desbordante y
la puse toda en estudiar. Pero ahora, no sé…
Me cuesta respirar. Al tomar conciencia de mi propia voz, me
doy cuenta de que es la primera vez que hablo de mi condición con
alguien que no sean mis papás o la psiquiatra y eso me provoca una
pena terrible.
Lo miro. Él me anima a seguir hablando.
—Es que después de episodios así vienen los bajones…
—¿Cómo el que estás pasando?
—Sí.
Los goterones de lluvia golpean la ventana. Retumban fuerte en el
silencio que reina entre los dos. Entonces sus ojos buscan los míos
también y al contemplarlos de cerca, descubro en ellos una pizca
de verde que destella sobre un mar de ámbar y que en sus enormes
pupilas estoy yo con los labios entreabiertos, a punto de pronunciar
las palabras que me liberarán del encierro. Entonces entiendo que
no necesito nada más. Soy yo, mi amuleto. Mientras ame a esa mujer
que me observa desde los confines de un reflejo, no dejaré de tener
mucha, pero mucha suerte.

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Actividades
1. ¿Cómo es la relación entre Teresa y Víctor? Descríbela considerando el contexto
en que se relacionan y las emociones que se producen entre ambos.

2. ¿Qué es lo que hace Víctor que hiere a Teresa? Identifica el gesto, lo que dice y
qué lo provoca.

3. ¿Por qué Marcela no se siente ofendida con la acción de Víctor y Teresa sí?
4. ¿Qué hace Teresa después de este incidente? Reconstruye las acciones
considerando los siguientes momentos o etapas:

TERESA Presta atención


a lo que ella
Después de que Víctor hace el gesto
cuenta y a lo que
Durante el periodo de exámenes se puede inferir
de su relato

5. Interpreta el final del cuento y concluye:


• ¿Cómo crees que se siente Teresa?
• ¿Qué ha cambiado en ella?

6. ¿Qué elementos colaboran a su cambio? Identifica tanto sus propios pensamientos,


emociones y acciones como las de Víctor.

Para profundizar en lo que le ocurría a Teresa, lee y comenta la información


que se entrega en la FICHA PSICOEDUCATIVA N.° 4 sobre acciones contra
el estigma (páginas 50 a 53). Luego continúa desarrollando las actividades.

7. ¿Qué costumbres, prejuicios o creencias operaron en Víctor cuando trató de


“bipolar” a Marcela?

8. A partir de lo que aprendiste, si tú hubieras estado ahí: ¿qué podrías haber hecho
cuando Víctor actúa así?, ¿le habrías dicho algo? Comenta en grupo.

9. Junto a tu grupo, desarrolla las siguientes actividades:


Aprovechen lo
a. Hagan una lluvia de ideas de conceptos relacionados con la que aprendan
salud mental que a veces ocupan como insulto o descalificativo. en esta pequeña
b. Revísenla y comenten en qué ocasiones ocupan esas palabras y investigación
qué prejuicios o ideas erradas se dan cuenta de que hay tras ellas. para crear
eslóganes y hacer
c. Escojan tres conceptos e investiguen en profundidad para afiches contra la
comprenderlos y comprometerse a no usarlos más de forma estigmatización.
ofensiva ni para reproducir estereotipos.

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FICHA PSICOEDUCATIVA N.°4 ACCIONES CONTRA EL ESTIGMA

Actuar contra el estigma es una acción necesaria para


favorecer la integración y bienestar de las personas con
enfermedades mentales. Y esto no es algo que debamos
hacer solo porque nos consideramos “buenas personas”,
PARE sino también porque es un deber ciudadano.

En Chile, la ley N°21.331 reconoce y protege los derechos fundamentales de las personas
diagnosticadas con trastornos mentales. Revisa el artículo 9 y reflexiona sobre las
implicancias de cada uno de sus incisos:

Artículo 9.- La persona con enfermedad mental o


discapacidad psíquica o intelectual es titular de los
derechos que garantiza la Constitución Política de
la República. En especial, esta ley le asegura los
siguientes derechos:
1. A ser reconocida siempre como sujeto de derechos.
2. A participar socialmente y a ser apoyada para
ello, en caso necesario.
3. A que se vele especialmente por el respeto a
su derecho a la vida privada, a la libertad de
comunicación y a la libertad personal.
4. A participar activamente en su plan de
tratamiento, habiendo expresado su consentimiento
libre e informado. Las personas que tengan
limitaciones para expresar su voluntad y
preferencias deberán ser asistidas para ello. En
caso alguno se podrá realizar algún tratamiento
sin considerar su voluntad y preferencias.
5. A que, para toda intervención médica o científica
de carácter invasivo o irreversible, incluidas
las de carácter psiquiátrico, manifieste su
consentimiento libre e informado. […]
6. A que se reconozcan y garanticen sus derechos
sexuales y reproductivos, a ejercerlos dentro del
ámbito de su autonomía, a que le sean garantizadas
condiciones de accesibilidad y a recibir apoyo y
orientación para su ejercicio, sin discriminación
en atención a su condición.

8
7. A no ser esterilizada sin su consentimiento libre
e informado. Queda prohibida la esterilización de
niños, niñas y adolescentes o como medida de control
de fertilidad. […]
8. A recibir atención sanitaria integral y
humanizada y al acceso igualitario y equitativo
a las prestaciones necesarias para asegurar la
recuperación y preservación de la salud.
9. A recibir una atención con enfoque de derechos. […]
10. A recibir tratamiento con la alternativa terapéutica
más efectiva y segura y que menos restrinja sus
derechos y libertades, promoviendo la integración
familiar, laboral y comunitaria.
11. A que su condición de salud mental no sea
considerada inmodificable.
12. A recibir contraprestación pecuniaria por su
participación en actividades realizadas en el marco
de las terapias que impliquen producción de objetos,
obras o servicios que sean comercializados.
13. A recibir educación a nivel individual y familiar
sobre su condición de salud y sobre las formas de
autocuidado, y a ser acompañada durante el proceso
de recuperación por sus familiares o por quien la
persona libremente designe.
14. A que su información y datos personales sean
protegidos […].
15. A no ser discriminado por padecer o haber padecido
una enfermedad mental o discapacidad psíquica o
intelectual.
16. A no sufrir discriminación por su condición en
cuanto a prestaciones o coberturas de salud, así
como en su inclusión educacional o laboral.

Reflexiona y comenta

• ¿Qué deberes le imponen estos derechos al Estado? Es decir, ¿qué deben hacer
las autoridades y las instituciones para que los derechos de las personas con
enfermedad mental se respeten?
• ¿Qué deberes significan para las personas? Es decir, ¿qué debemos hacer cada
uno de nosotros para contribuir a respetar estos derechos?

9
FICHA PSICOEDUCATIVA N.°4 ACCIONES CONTRA EL ESTIGMA

Pese a la existencia de un marco jurídico, realizar Además de usar la ley, ¿qué


acciones contra el estigma es una labor ardua podemos hacer para proteger los
y agotadora, porque implica contrarrestar derechos de las personas con
costumbres, prejuicios y creencias culturales. enfermedades mentales?

¡combatir el estigma!
Aumentar la conciencia sobre
estos temas y...

¿Por qué es Porque si aceptamos el estigma contra personas con problemas


de salud mental establecemos una barrera para su recuperación y
necesario actuar
contribuimos a empeorar lo que ya vivencian. Por lo tanto, actuar para
para abordar el eliminarlo es actuar para mejorar la calidad de vida de estas personas.
estigma? Además, la sociedad también se beneficia, pues la aceptación de la
diferencia promueve entornos sociales sanos y justos para todos.
Por último, cuando estigmatizamos a una persona con algún trastorno
mental, perdemos la posibilidad de que desarrolle sus habilidades y
talentos, con lo que no solo pierde la persona afectada, sino toda la
comunidad.

¿Sabías que el
Por eso, la acción contra el estigma promueve que
estigma imposibilita
las personas con problemas de salud mental sean
que una persona se
consideradas como miembros de la sociedad, con
desarrolle plenamente
derechos que abran oportunidades para ellas.
en la sociedad?

Las acciones contra el estigma se realizan en diversos niveles. Por ejemplo:

Las leyes, su Las acciones a nivel individual El trabajo a nivel comunitario


implementación y familiar para comprender o con grupos particulares
y uso. mejor la situación y contribuir destinado a reducir las prácticas
a eliminar el estigma entre discriminatorias y excluyentes
las personas y grupos del hacia quienes tienen problemas
entorno cercano. de salud mental.

A nivel personal Es importante que sepas reconocer de modo consciente cómo se encarna
el estigma en tu vida. Es decir, cómo experimentas los procesos sociales
relacionados con la enfermedad mental y qué sentidos le otorgas a la salud
mental y a la enfermedad.
A su vez, procura educarte respecto de los problemas y enfermedades
mentales que conoces en tu entorno, pues así evitarás alimentar
estereotipos inexactos o suposiciones incorrectas y podrás basar tus ideas
y acciones en la evidencia científica. Para esto, puedes buscar ayuda en un
profesional de la salud mental.

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¿Y si eres tú ¡No subestimes tus capacidades y tus habilidades, aun cuando
presentes un trastorno mental! Ten presente que el centro de interés
quien vivencia la recae en tus necesidades y que es indispensable tener un punto de vista
estigmatización? positivo, aunque las dificultades sean considerables.
Como cualquier ser humano que sufre un trastorno mental, no aceptes
una actitud “discapacitadora”, puesto que, de ser así, la percepción
sobre ti mismo se afectará y, con ello, las posibilidades de desarrollarte
en la vida. (Además, contribuirás a reforzar estereotipos negativos y
excluyentes).
Otra forma de accionar es cuidarte de experimentar el autodesprecio y la
autoculpabilización. En muchos casos es posible desarrollar un proceso
de reconstrucción de tu identidad que se relaciona con capacidades de
interconexión hacia la sociedad.

¿Qué más podemos hacer?


• Denuncia el estigma y participa en
movilizaciones que busquen eliminar las
imágenes negativas de los trastornos
mentales y las personas que lo padecen.
ACTUAR CONTRA EL ESTIGMA AYUDARÁ
• Aprende sobre salud mental y
A GENERAR CAMBIOS EN LAS PERSONAS
participa en cursos que aborden temas
CON PROBLEMAS DE SALUD MENTAL Y SUS
relacionados con bienestar, estigma y
FAMILIAS.
trastornos mentales.
• Conoce y relaciónate con personas que AUNQUE SEAN PEQUEÑOS, SI ESTOS
están diagnosticadas con un trastorno CAMBIOS SE SUMAN, SENTAREMOS LAS
mental. Participa en reuniones y BASES PARA UNA TRANSFORMACIÓN
actividades con ellas. CADA VEZ MÁS GRANDE.

D M E N TA
LU
L
SA

El estigma es una práctica discriminatoria, por lo tanto, atenta contra los D D H& H
derechos humanos de las personas.
L

SA
TA

LUD MEN
Para actuar frente al estigma en concordancia con los principios que defienden
los derechos humanos ten presente:
• Buscar información actualizada sobre el tema.
• Promover el respeto, la autoestima y la tolerancia en los diversos espacios en que te
desenvuelves.
• Desarrollar actitudes positivas hacia las personas que te parecen diferentes, abrirte
a conocerlas y respetar siempre sus derechos.
• Construir redes en tu comunidad, uniéndote a grupos y ¿Cuáles de estas
asociaciones que promueven los derechos humanos. Si acciones ya realizas?
es necesario, emprender acciones y levantar demandas ¿Qué más podrías
ante organismos pertinentes para contribuir a mejorar la hacer?
calidad de vida de las personas con trastornos mentales.

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REFERENCIAS
Para elaborar esta sesión, consultamos las siguientes fuentes:

Blum, G.; Bins, R.; Rabelo-da-Ponte, F.; Passos, I. (2021). Stigmatizing attitudes toward psychiatric disorders:
A cross-sectional population-based survey. Journal of psychiatric research, 139, 179–184. https://doi.
org/10.1016/j.jpsychires.2021.05.033

Branca, F.; Macchiarulo, E.; Costanza, A.; Ambrosetti, J.; Amerio, A.; Aguglia, A.; Serafini, G.; Amore, M.; Merli, R.
(2021). Stigma, mental illness, and COVID-19 from a frontline clinician perspective: a way to go against the
grain? Acta bio-médica : Atenei Parmensis, 92(S6), e2021442. https://doi.org/10.23750/abm.v92iS6.12235

Corbiere, M.; Samson, E.; Villotti, P.; Pelletier, J.F. (2012). Strategies to Fight Stigma toward People with Mental
Disorders: Perspectives from Different Stakeholders. The Scientific World Journal, 2012, 1-10. https://doi.
org/10.1100/2012/516358

Health Scotland & World Health Organization (2008). Stigma: A Guidebook for Action. https://consaludmental.
org/publicaciones/Stigmag

Rüsch, N.; Angermeyer, M.; Corrigan, P. (2005). Mental illness stigma: concepts, consequences, and initiatives
to reduce stigma. European psychiatry: the journal of the Association of European Psychiatrists, 20(8),
529–539. https://doi.org/10.1016/j.eurpsy.2005.04.004

Walsh, D.; Foster, J. (2021). A Call to Action. A Critical Review of Mental Health Related Anti-stigma Campaigns.
Frontiers in public health, 8, 569539. https://doi.org/10.3389/fpubh.2020.569539

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Desde tu cuento. Cuadernos de alfabetización en salud mental es una obra colectiva, creada
y diseñada por un equipo multidisciplinario en el contexto del proyecto Desde tu cuento.
Programa de alfabetización en salud mental para adolescentes y jóvenes, financiado por el
Ministerio de Ciencia, Tecnología, Crecimiento e Innovación y ejecutado desde la Dirección
de Vinculación con el Medio de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC).

Director del proyecto


RODRIGO ROJAS-ANDRADE

Equipo de contenidos
Antonieta Lanas Canales
Francisca Jaque Morales
Macarena Pi Davanzo
Rodrigo Rojas-Andrade

Equipo pedagógico
Claudia Dueñas Santander
Hugo Hinojosa Lobos

Enc argada Derechos Humanos


Isabel Plaza Lizama

Equipo de comunic aciones


Diego Jiménez Mundaca
Angelina Astete Alcaíno
Juan Eduardo Bustamante Molina
Mónica Fuentealba Martínez
Daniela González Canales
Catalina Schneider Errázuriz

Edición
Claudia Dueñas Santander El cuento que se incluye en esta sesión fue
creado especialmente para este programa y
es propiedad intelectual de su autora.
Diseño y diagramación
Queda rigurosamente prohibida la
Sebastián Lagunas López
reproducción total o parcial de esta obra sin
la autorización escrita de los titulares del
Ilustraciones copyright, bajo las sanciones establecidas
en las leyes.
Jorge Roa

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