La Escabiosis
La Escabiosis
La Escabiosis
COMO SE CONTAGIA
La escabiosis se contagia principalmente a través del contacto directo de piel con
piel con una persona infectada. Los ácaros de la sarna (Sarcoptes scabiei) pueden
moverse fácilmente de una persona a otra cuando hay contacto físico cercano.
Esto puede ocurrir durante actividades cotidianas como abrazar, sostener las
manos, tener relaciones sexuales o compartir camas.
Además del contacto directo, la sarna también puede transmitirse indirectamente
al compartir ropa, toallas, ropa de cama u otros objetos personales que hayan
estado en contacto con una persona infectada. Los ácaros pueden sobrevivir fuera
del cuerpo humano por un corto período, lo que facilita la propagación si no se
toman las precauciones adecuadas.
En entornos donde muchas personas viven en espacios estrechos y en
condiciones de higiene limitadas (como internados, cárceles o refugios), la
propagación de la sarna puede ser más común debido a la proximidad y el
contacto cercano entre los individuos.
La escabiosis es altamente contagiosa, y a menudo es necesario tomar medidas
para evitar la propagación a otras personas. Si una persona ha sido diagnosticada
con sarna, es importante que se traten tanto ella como todas las personas con las
que ha tenido contacto cercano. También se debe prestar especial atención a la
limpieza y desinfección de la ropa y objetos personales para evitar la reinfección.
FORMAS DE TRATAMIENTO
El tratamiento de la escabiosis generalmente implica el uso de medicamentos
antiparasitarios para eliminar los ácaros y aliviar los síntomas. Es esencial seguir
las indicaciones del médico y completar todo el tratamiento para asegurarse de
que los ácaros sean eliminados por completo. Además, es importante tratar a
todas las personas que hayan tenido contacto cercano con un individuo infectado
para prevenir la propagación de la sarna. Aquí hay algunas formas de tratamiento
comunes:
1. Permetrina: Es el medicamento más utilizado para el tratamiento de la
escabiosis. Viene en forma de crema o loción tópica que se aplica
directamente sobre la piel. La permetrina ataca a los ácaros y sus huevos,
matándolos y deteniendo su reproducción.
2. Lindano: Es otro medicamento tópico que se puede usar para tratar la
sarna. Sin embargo, debido a posibles efectos secundarios y
preocupaciones sobre la toxicidad, la permetrina generalmente se prefiere
como primera opción de tratamiento.
3. Crotamitón: Esta es otra crema tópica que puede aliviar los síntomas de la
sarna y matar algunos ácaros, aunque no es tan efectiva como la
permetrina.
4. Ivermectina: En algunos casos más severos o cuando las cremas tópicas
no son efectivas, el médico puede recetar ivermectina, un medicamento oral
que ayuda a matar los ácaros.
5. Medicamentos antihistamínicos: Estos pueden ser recetados para aliviar la
picazón y la irritación asociadas con la reacción alérgica a los ácaros.
6. Lavado y limpieza: Además de aplicar los medicamentos antiparasitarios, es
importante lavar toda la ropa, toallas, ropa de cama y objetos personales
que hayan estado en contacto con la persona infectada. Lavar con agua
caliente y secar a alta temperatura puede ayudar a eliminar los ácaros.
7. Desinfección del hogar: Es recomendable limpiar y desinfectar las
superficies y objetos que podrían haber estado en contacto con los ácaros.
MEDIDAS DE PREVENCIÓN
Para prevenir la propagación de la escabiosis y reducir el riesgo de contraerla, se
pueden seguir algunas medidas de prevención importantes:
1. Evitar el contacto cercano: Evita el contacto piel con piel con personas
infectadas con sarna. Esto incluye abrazos, sostener las manos, tener
relaciones sexuales o dormir en la misma cama.
2. No compartir objetos personales: Evita compartir ropa, toallas, ropa de
cama u otros objetos personales con personas infectadas.
3. Limpieza y lavado adecuados: Mantén una buena higiene personal y lávate
las manos con frecuencia, especialmente después de tocar a alguien que
pueda tener sarna.
4. Lavado regular de la ropa: Lava regularmente la ropa, toallas, sábanas y
otros objetos personales en agua caliente y sécalos a alta temperatura para
eliminar los ácaros.
5. Desinfección de objetos compartidos: Desinfecta objetos y superficies que
pueden haber estado en contacto con una persona infectada.
6. Tratamiento temprano: Si sospechas que puedes tener sarna o has estado
en contacto con alguien infectado, busca atención médica de inmediato.
Cuanto antes se inicie el tratamiento, más fácil será detener la propagación.
7. Tratamiento para contactos cercanos: Si alguien en tu hogar o entorno
cercano ha sido diagnosticado con sarna, asegúrate de que todos los
miembros de la familia o personas con contacto cercano reciban
tratamiento, incluso si aún no presentan síntomas.
8. Evitar el contacto con personas infestadas: Si sabes que alguien tiene
sarna, evita el contacto cercano con esa
persona hasta que haya completado el
tratamiento y ya no sea contagiosa.
9. Mantener entornos limpios: Si trabajas o
vives en un entorno donde la sarna puede
propagarse fácilmente, mantén un ambiente limpio y desinfectado para
reducir el riesgo de infestación.