Sistema Hemolinfopoyético
Sistema Hemolinfopoyético
Sistema Hemolinfopoyético
ESCUELA DE MEDICINA
SEMIOLOGIA II
ESTUDIANTES:
María Fernanda Macías Alcívar
Macias Moreira Rosa Isabel
Vera Pacheco Sheyla Adamaris
DOCENTE:
Dr. Walter Mecias
SEMESTRE Y PARALELO:
Quinto “B”
PERIODO:
Médula ósea:
La médula ósea es un tejido esponjoso que se encuentra en el interior de los huesos largos,
como el fémur y la tibia, y también en los huesos planos, como el esternón y las vértebras.
Hay dos tipos de médula ósea: la médula ósea roja y la médula ósea amarilla.
Médula ósea amarilla: A medida que envejecemos, parte de la médula ósea roja se
convierte en médula ósea amarilla, que es predominantemente grasa y tiene una función
más limitada en la producción de células sanguíneas.
Bazo:
El bazo es un órgano situado en el lado izquierdo del abdomen, debajo de las costillas. Es
parte del sistema linfático y también está involucrado en la hematopoyesis fetal
(producción de células sanguíneas durante el desarrollo embrionario). Sus funciones
principales incluyen:
Almacenar y liberar glóbulos rojos y plaquetas cuando el cuerpo los necesita, como en
situaciones de sangrado.
Ganglios linfáticos:
Los ganglios linfáticos son pequeñas estructuras ovaladas o redondeadas que se
encuentran a lo largo de los vasos linfáticos en todo el cuerpo. Están conectados por una
red de vasos linfáticos que transportan la linfa, un líquido claro que contiene linfocitos y
otras células del sistema inmunitario. Los ganglios linfáticos tienen varias funciones,
entre ellas:
Filtrar la linfa y eliminar bacterias, virus, células cancerosas y otros materiales extraños.
Activar y desencadenar respuestas del sistema inmunitario al exponer los patógenos a los
linfocitos y otras células inmunitarias.
MOTIVOS DE CONSULTA
MANCHAS PURPURICAS
EQUIMOSIS
Las equimosis son manchas de color morado o azul que aparecen en la piel como
resultado de una hemorragia debajo de los tejidos, debido a la ruptura de vasos sanguíneos
capilares sin rotura de la piel. Estas marcas pueden variar en tamaño y forma y
generalmente ocurren después de un golpe o traumatismo menor. Las equimosis son más
comunes en áreas donde la piel es más delgada, como los brazos, las piernas y el rostro.
Las equimosis pueden ser causadas por diversos factores, y algunas de las causas más
comunes incluyen:
EPISTAXIS
PALIDEZ
La palidez es un término médico que se refiere a una pérdida de color en la piel y las
membranas mucosas, lo que resulta en un aspecto más pálido de lo normal. Esta palidez
puede ser causada por diversas razones, y en el contexto del sistema hemolinfoide
(hematopoyético), puede estar relacionada con problemas en la producción o destrucción
de células sanguíneas.
DISNEA – ASTENIA
La disnea se refiere a la dificultad para respirar o a la sensación de falta de aire. La astenia
es un término médico que se utiliza para describir la debilidad generalizada o la sensación
de cansancio extremo. Ambos síntomas pueden estar relacionados con problemas en el
sistema hemolinfoide (hematopoyético) o con otras condiciones médicas.
ADENOPATIAS INDOLORAS
Infecciones: Las adenopatías indoloras pueden ser una respuesta del sistema
inmunológico a infecciones virales o bacterianas.
Cáncer: En algunos casos, las adenopatías pueden ser un signo temprano de cáncer, como
linfoma o leucemia.
UÑA CUCHARA
Las uñas frágiles, quebradizas o que se rompen fácilmente pueden ser un síntoma de
varias condiciones médicas, algunas de las cuales pueden estar relacionadas con el
sistema hemolinfoide (hematopoyético) y otras pueden ser causadas por diferentes
factores. Aquí hay algunas posibles causas de uñas frágiles:
Deficiencia de hierro: La anemia por deficiencia de hierro puede afectar la salud de las
uñas y hacer que se vuelvan frágiles y quebradizas.
Trauma repetido: Actividades que someten las uñas a trauma repetido, como la manicura
excesiva o el uso de uñas postizas, pueden contribuir a la fragilidad.
Envejecimiento: A medida que envejecemos, es común que las uñas se vuelvan más
frágiles.
PRIAPISMO REBELDE
El priapismo es una condición médica caracterizada por una erección persistente y
dolorosa del pene que no está relacionada con la estimulación sexual. Puede ser causado
por una interrupción en el flujo sanguíneo del pene, lo que lleva a la acumulación de
sangre en los cuerpos cavernosos del pene.
Los edemas en casos extremos pueden estar relacionados con el sistema hemolinfoide
(hematopoyético) o con otros sistemas del cuerpo. Los edemas son acumulaciones
anormales de líquido en los tejidos, lo que puede provocar hinchazón y aumento de
volumen en la zona afectada. A continuación, se mencionan algunas condiciones en las
que los edemas pueden estar relacionados con el sistema hemolinfoide:
Anemia de células falciformes: En esta enfermedad de la sangre, los glóbulos rojos tienen
una forma anormal y pueden bloquear el flujo sanguíneo, lo que lleva a la acumulación
de líquido y edema en diferentes partes del cuerpo.
Leucemia: Algunos tipos de leucemia pueden afectar la función de las células sanguíneas
y el sistema linfático, lo que podría contribuir al desarrollo de edemas en casos extremos.
Mieloma múltiple: Esta enfermedad afecta las células plasmáticas en la médula ósea y
puede llevar a la formación de proteínas anormales que afectan la función renal y pueden
causar edemas.
Linfomas: Los linfomas son cánceres del sistema linfático que pueden provocar la
obstrucción del flujo linfático y la acumulación de líquido en los tejidos.
EXAMEN FISICO
INSPECCION
1. Facies
La inspección de facies (expresión facial) como parte del examen físico puede
proporcionar información importante sobre la salud de una persona, incluyendo posibles
trastornos o condiciones relacionadas con el sistema hemolinfoide (hematopoyético) y
otros sistemas del cuerpo. Algunas facies específicas pueden estar asociadas con ciertas
enfermedades. A continuación, mencionaré algunas facies que podrían tener relevancia
en el contexto del sistema hemolinfoide:
Facies pálida: La palidez en la cara puede ser un indicador de anemia, que es una
condición en la que hay una disminución en la cantidad de glóbulos rojos o de
hemoglobina en la sangre.
Facies de ictericia: La ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos) puede afectar
la expresión facial y ser un indicativo de problemas en el sistema hemolinfoide, como
enfermedades del hígado o trastornos de la sangre.
Facies de linfadenopatía: La linfadenopatía (agrandamiento de los ganglios linfáticos)
puede afectar la apariencia del cuello y la cara si los ganglios están inflamados.
Facies de fatiga extrema: La fatiga severa y crónica puede reflejarse en la expresión facial,
lo que podría estar relacionado con trastornos de la sangre u otras afecciones.
2. Cavidad bucal
La inspección de la cavidad bucal como parte del examen físico puede proporcionar
información valiosa sobre la salud general de una persona, incluyendo posibles trastornos
o condiciones relacionadas con el sistema hemolinfoide (hematopoyético) y otros
sistemas del cuerpo. Aquí hay algunas observaciones relevantes que se pueden hacer
durante la inspección de la cavidad bucal en relación con el sistema hemolinfoide:
Mucosas pálidas: La palidez en las mucosas orales, como las encías y el interior de las
mejillas, puede ser un indicador de anemia u otros trastornos de la sangre que afectan la
cantidad de glóbulos rojos o hemoglobina.
Petequias: Las petequias son pequeñas manchas rojas o moradas que pueden aparecer en
las mucosas. Su presencia podría sugerir una trombocitopenia (disminución del número
de plaquetas) u otros trastornos de la coagulación.
Ictericia en las mucosas: La coloración amarillenta de las mucosas puede estar asociada
con problemas en el hígado o trastornos de la sangre que causan ictericia.
3. Piel
• Anemias:
Palidez: La palidez en la piel podría ser un signo de anemia, ya que refleja una
disminución en la cantidad de glóbulos rojos y hemoglobina en la sangre.
• Leucemias:
• Trombocitopenia:
• Hemofilia:
4. Adenopatías (Ganglios)
La inspección de adenopatías (ganglios linfáticos) como parte del examen físico puede
proporcionar información esencial sobre la salud de una persona y posibles trastornos
relacionados con el sistema hemolinfoide (hematopoyético) y otros sistemas del cuerpo.
Aquí hay algunos aspectos a considerar durante la inspección de adenopatías:
Tamaño y ubicación: Se debe evaluar si hay aumento en el tamaño de los ganglios
linfáticos y su ubicación. El sistema linfático está distribuido por todo el cuerpo y los
ganglios linfáticos pueden palparse en áreas como el cuello, las axilas y la ingle.
Textura y consistencia: Los ganglios linfáticos pueden ser palpables en personas sanas,
pero su textura y consistencia pueden proporcionar pistas sobre posibles afecciones. Los
ganglios linfáticos sanos son generalmente suaves y móviles, mientras que los ganglios
inflamados pueden volverse más grandes, dolorosos y tender a adherirse a los tejidos
circundantes.
PALPACION
ADENOPATIAS
Asimetría: Compara los ganglios de ambos lados del cuerpo para verificar si
hay diferencias en tamaño o características.
HEPATOMEGALIA
Posición del paciente: El paciente debe estar acostado boca arriba en una posición cómoda
para permitir una palpación adecuada del abdomen.
Técnica de palpación: El médico utilizará sus manos para palpar el abdomen del paciente.
Comenzará presionando suavemente en diferentes áreas del abdomen para detectar
cualquier área de sensibilidad o resistencia. Luego, el médico puede realizar palpaciones
más profundas para evaluar el tamaño y la textura del hígado.
Localización: El hígado está ubicado en la parte superior derecha del abdomen, justo
debajo de las costillas. El médico palpará esta área específica para determinar si hay un
agrandamiento del hígado.
Tamaño: El tamaño normal del hígado puede variar, pero en general, no debe ser palpable.
Si el médico siente el hígado durante la palpación, esto puede indicar hepatomegalia.
Bordes y textura: El médico evaluará la forma y los bordes del hígado, así como su
textura. Un hígado agrandado puede sentirse más duro o más liso de lo normal.
ESPLENOMEGALIA
Posición del paciente: El paciente debe estar acostado boca arriba en una posición cómoda
para permitir una palpación adecuada del abdomen.
Técnica de palpación: El médico utilizará sus manos para palpar el abdomen del paciente.
Comenzará presionando suavemente en diferentes áreas del abdomen para detectar
cualquier área de sensibilidad o resistencia. Luego, el médico puede realizar palpaciones
más profundas para evaluar el tamaño y la textura del bazo.
Localización: El bazo está ubicado en la parte superior izquierda del abdomen, debajo de
las costillas. El médico palpará esta área específica para determinar si hay agrandamiento
del bazo.
Tamaño: El tamaño normal del bazo puede variar, pero en general, no debe ser palpable
en un examen físico normal. Si el médico siente el bazo durante la palpación, esto puede
indicar esplenomegalia.
EXÁMENES DE LABORATORIO
HEMOGRAMA COMPLETO
Hemoglobina: Es una proteína en los glóbulos rojos que transporta oxígeno. La medición
de la hemoglobina es importante para evaluar la capacidad de la sangre para transportar
oxígeno y para diagnosticar anemia.
Ferritina: La ferritina es una proteína que almacena hierro en el cuerpo. Los niveles bajos
de ferritina pueden indicar deficiencia de hierro, que es una causa común de anemia.
Hierro sérico: Mide la cantidad de hierro en el suero sanguíneo. Niveles bajos pueden
indicar deficiencia de hierro, mientras que niveles elevados pueden ser indicativos de
otras condiciones.
Capacidad total de fijación del hierro (CTFH): Evalúa la capacidad de la sangre para
transportar hierro. Valores elevados pueden ser un signo de deficiencia de hierro.
Retinol-binding protein (RBP): Mide los niveles de proteína de unión al retinol, que puede
estar aumentada en algunas anemias.
Vitamina B12 y ácido fólico: Niveles bajos de vitamina B12 o ácido fólico pueden causar
anemia megaloblástica, que afecta el tamaño y la función de los glóbulos rojos.
ASPIRADO MEDULAR
BIOPSIA GANGLIONAR
Técnica: Hay diferentes métodos para realizar una biopsia ganglionar. Los métodos
incluyen la biopsia por aspiración con aguja fina (BAAF) y la biopsia excisional. La
elección del método depende de la ubicación y el tamaño del ganglio, así como de la
afección sospechada.
Muestra: La muestra de tejido del ganglio se examina bajo un microscopio para evaluar
la composición celular, la arquitectura del tejido y otras características. Esto puede ayudar
a identificar células anormales, inflamación, infecciones y otras características relevantes
para el diagnóstico.
Seguimiento: Además del diagnóstico inicial, la biopsia ganglionar también puede ser útil
para el seguimiento de la respuesta al tratamiento y la monitorización de la progresión de
la enfermedad.
ECOSONOGRAFIA
Evaluación del bazo: La ecografía puede proporcionar imágenes detalladas del bazo y
ayudar a determinar si hay esplenomegalia (agrandamiento del bazo). También puede
ayudar a evaluar la estructura y la textura del bazo en busca de anormalidades.
Detección de masas: La ecografía puede ser útil para detectar masas, tumores u otras
anormalidades en los órganos y tejidos del sistema hemolinfoide.
Seguimiento: Después del diagnóstico inicial, la ecografía puede ser utilizada para el
seguimiento de la respuesta al tratamiento y para monitorear la evolución de afecciones
relacionadas con el sistema hemolinfoide.
RX SIMPLE
La radiografía simple (RX) es una técnica de diagnóstico por imágenes que utiliza
radiación ionizante para crear imágenes bidimensionales de las estructuras internas del
cuerpo, como huesos y órganos blandos. Aunque la radiografía no es el método principal
para evaluar el sistema hemolinfoide (hematopoyético), puede ser útil en ciertos casos.
Aquí hay información sobre cómo se puede aplicar la radiografía simple en relación con
el sistema hemolinfoide:
Detección de fracturas: Las radiografías son especialmente útiles para detectar fracturas
óseas. Si hay sospecha de fracturas en huesos de la región del sistema hemolinfoide (como
costillas o huesos de la pelvis), una radiografía puede proporcionar información sobre la
extensión y el tipo de fractura.
Hay diferentes métodos para estimar o medir el volumen sanguíneo total, algunos de los
cuales son más precisos que otros. Algunos enfoques para estimar el VST incluyen: