Democracia y Argucias Legales. Dos Conceptos Incompatibles
Democracia y Argucias Legales. Dos Conceptos Incompatibles
Democracia y Argucias Legales. Dos Conceptos Incompatibles
Desde que la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) dio a conocer los resultados de
la contabilización de las actas de sufragio al 100%, dando como ganador y virtual presidente de
la república al señor Pedro Castillo Terrones, los partidarios de Fuerza Popular, liderado por la
señora Keiko Fujimori Higuchi, han venido realizando una serie de acciones legales y
denunciando la ocurrencia de un presunto fraude electoral en los comicios del pasado 06 de
junio.
El postulado sostenido por quienes votaron en contra de la fórmula de Perú Libre es la “defensa
del voto y de la democracia”, y el desprecio del comunismo fundado en el terror y la crisis
económica que, según ellos, ocurriría inevitablemente de finiquitarse el proceso electoral con el
resultado actual. Pero quienes defienden esta postura no parecen advertir la incoherencia de su
discurso con las acciones que, bajo el manto aparente de la ley, vienen realizando para revertir
la situación a su favor. Soslayan, ingenua o deliberadamente, que los Estados modernos, para
implantar un régimen democrático en su organización social y legitimar la distribución y el
ejercicio del poder, requieren de la existencia de instituciones que gocen de independencia,
legitimidad y confiabilidad en el desempeño de las funciones que les han sido atribuidas
constitucionalmente, sin perjuicio de la rendición de cuentas, fiscalización y reclamos que se
haga de las actuaciones estatales siempre en los límites de la razonabilidad en el ejercicio de
las acciones legales.
Sucede que cuando se pone en entredicho la veracidad contenida en los actos oficiales de
manera irracional, caprichosa y prepotente, utilizando el poder mediático no para alimentar la
libertad de expresión, sino para manipular a las masas y alinearlas en consonancia con intereses
subalternos que distan de aquella finalidad tan elemental en la política como la perduración del
cuerpo social y de los individuos que lo componen, se socava la estabilidad, se fractura la
sociedad, se polarizan las ideologías, en suma, se enferma la democracia misma. El conflicto,
intrínseco del género humano, se acentúa en estas circunstancias y germina en el espíritu el
deseo de la imposición sobre el otro por no aceptar pensamientos e ideales que se muestran
contrarias debido a la multiplicidad de realidades y cosmovisiones. Se observa al otro con ojos
de enemistad y no se concibe la opción de que algo puede haber de razón en sus opiniones.
Una situación como ésta conjura la fundación de una nación; suprime los caminos hacia la
integración de los pueblos, de las gentes y de los estratos; sustituye los puentes de diálogo por
la efectividad de las estratagemas y argucias inventadas gracias al don de la inteligencia que la
naturaleza nos ha proporcionado. Se ensalza la habilidad de quien emplea ardides en el juego
de la política, sustrayendo su real naturaleza de arte y propiciando la decadencia de la ética
social. Este ambiente patógeno imposibilita asimismo la construcción de una sociedad
democrática y la constitución de una república, que reclama esfuerzos denodados en la
formación de ciudadanos educados tanto en el plano intelectual como de la sensibilidad, libres
1
Democracia y argucias legales: dos conceptos incompatibles
1 Redacción EC. “Fuerza Popular anuncia recurso de hábeas data en proceso de la segunda vuelta
electoral”. En El Comercio[En línea]: https://elcomercio.pe/politica/elecciones/fuerza-popular-anuncia-
recurso-de-habeas-data-en-proceso-de-segunda-vuelta-elecciones-2021-keiko-fujimori-nndc-
noticia/?ref=ecr. (Consultado el 18 de junio de 2021).
2
Vicente Brayan Villalobos Villalobos
2 Idem.
3
Democracia y argucias legales: dos conceptos incompatibles
3 El JNE desmintió estas afirmaciones por medio de su Comité Técnico de Fact Checking:
https://www.facebook.com/JNE.Peru/videos/2753929384898208 (Consultado el 19 de junio de 2021).
4
Vicente Brayan Villalobos Villalobos
competencia para reglamentar sus propias funciones. Así, tal acuerdo nunca adoptó el rango de
norma jurídica al no haber sido publicada.
5) Las manifestaciones de voluntad de las entidades públicas, aunque válidas, no surten efectos
si no son publicadas o notificadas, según se trate de una norma jurídica o un acto administrativo,
con la sola salvedad de este último que surtirá sus efectos en caso sea favorable al administrado.
Finalmente, en lo que respecta a la demanda de amparo postulada por Villa Stein para que se
declare la nulidad de la segunda vuelta electoral, no merece mayor análisis por carecer
manifiestamente de asidero legal y constitucional en todos sus extremos. Basta con decir que la
Ley Orgánica de Elecciones, en tanto norma perteneciente al bloque legal de constitucionalidad
que desarrolla el sistema electoral, es clara al respecto: la nulidad total de las elecciones es
atribución exclusiva del JNE4; esto aunado a la regla de preclusión de cada etapa del proceso
electoral. Estas disposiciones se sustentan en la autonomía necesaria del JNE para garantizar
la perdurabilidad del régimen democrático y evitar cualquier atentado contra el mismo.
Por estas razones considero que las argucias legales aquí criticadas, en especial la demanda
de amparo, son la expresión del punto más degradante de la perversión de la profesión; son la
actividad argumentativa inescrupulosamente forzada para obtener un resultado también
reprochable; son la razón por la cual la ciencia jurídica pierde su carácter científico por el mal
ejercicio que profesionales hacen de sus bases teóricas elucubradas en aras del desarrollo de
la epistemología jurídica y de la resolución de los problemas humanos. En suma, son un ejemplo
negativo para las generaciones venideras. Por lo pronto, esperemos que la vorágine de la
coyuntura política encuentre una resolución fundamentada en criterios de justicia.
4 Asimismo, las meras alegaciones sustentadas en conjeturas o indicios endebles de fraude o cualquier
otra irregularidad no califican como causal de nulidad total de las elecciones, conforme al artículo 365 de
la Ley Orgánica de Elecciones:
Artículo 365.- El Jurado Nacional de Elecciones declara la nulidad total de las elecciones en los siguientes
casos:
1. Cuando los votos nulos o en blanco, sumados o separadamente, superan los dos tercios del número
de votos válidos;
2. Si se anulan los procesos electorales de una o más circunscripciones que en conjunto representen
el tercio de la votación nacional válida.