Entender El Duelo y La Pérdida
Entender El Duelo y La Pérdida
Entender El Duelo y La Pérdida
Sentimientos. Las personas que experimentaron una pérdida pueden tener una gran
variedad de sentimientos. Estos pueden incluir conmoción, bloqueo, tristeza,
negación, desesperanza, ansiedad, enojo, culpa, soledad, depresión, impotencia,
alivio y anhelo. Una persona en duelo puede comenzar a llorar después de escuchar
una canción o comentario que los haga pensar en la persona que falleció. O la
persona puede no saber qué desencadenó su llanto.
Pensamientos. Algunos patrones de pensamiento frecuentes incluyen rechazo,
confusión, problemas para concentrarse, preocupaciones y alucinaciones.
Sensaciones físicas. El duelo puede causar muchas sensaciones físicas. Estas
incluyen opresión o peso en el pecho o garganta, náuseas o malestar estomacal,
mareos, dolores de cabeza, entumecimiento físico, músculos debilitados o
tensionados y fatiga. También puede hacerlo vulnerable a las enfermedades.
Comportamientos. Una persona en duelo puede tener problemas para dormirse o
permanecer dormido. También puede perder la energía para realizar actividades
agradables. La persona puede perder interés en la comida o en socializar. Una
persona en duelo puede volverse más irritable o agresiva. Otros comportamientos
frecuentes incluyen inquietud y actividad excesiva.
Religión y espiritualidad
El duelo y la pérdida también hacen que una persona se cuestione su fe o forma de entender
el mundo. O puede reforzar la fe de una persona al brindarle una nueva forma de
comprender el sentido de la vida.
Experimentar el duelo
Cada persona experimenta el duelo de una forma diferente. Generalmente, una persona
siente el duelo en olas o ciclos. Esto significa que hay períodos de sentimientos dolorosos e
intensos que aparecen y desaparecen. Las personas pueden sentir que están progresando en
el duelo cuando sienten menos dolor de forma temporal. Pero después de un tiempo,
pueden volver a atravesar el duelo. Tales cambios en el duelo pueden ocurrir en fechas
importantes, como fiestas o cumpleaños. A lo largo del tiempo, algunas personas
experimentan estos ciclos de duelo con menor frecuencia mientras se adaptan a la pérdida.
sobrellevar el duelo
Aprobado por la Junta Editorial de Cancer.Net, 03/2018
El duelo por la muerte de una persona cercana, a menudo, implica sentimientos muy
dolorosos. Pueden aparecer o desaparecer olas de duelo durante meses o años. A veces,
puede parecer que el dolor nunca va a cesar. Pero, la mayoría de las personas se da cuenta
de que la intensidad del duelo disminuye a lo largo de un año o más. Aunque puede parecer
muy duro, las personas encuentran formas de adaptarse a la vida sin la persona que
perdieron. Aunque atravesar el duelo puede ser un proceso largo y difícil, existen cosas que
puede hacer para ayudar a sobrellevarlo y a adaptarse.
La terapia para el duelo puede ayudar a las personas que experimentan un duelo muy
intenso que dura por mucho tiempo y que evita que participen de la vida diaria.
Puede ayudar a una persona a entender por qué está pasando por un momento difícil y a
explorar maneras útiles de sobrellevar la pérdida. Un profesional de la salud mental, como
un psicólogo o un trabajador social clínico, brinda terapia para el duelo en forma individual
o en grupos.
Debido a que cada persona sufre de manera diferente, las decisiones sobre la necesidad de
terapia para el duelo se toman según cada caso. Sin embargo, los siguientes signos indican
que puede necesitar ayuda adicional para sobrellevar su duelo:
Pensamientos de suicidio
Encontrar ayuda
Para encontrar ayuda para lidiar con el duelo, hable con su proveedor de atención médica
primaria para saber si le puede proporcionar una derivación. También puede preguntar en
un hospital local o en un centro de tratamiento para el cáncer, en un servicio de hospicio
comunitario, en su compañía de seguros médicos, en organizaciones de apoyo o en el
programa de asistencia al empleado de su empleador.
obrellevar los cambios después de una pérdida
Aprobado por la Junta Editorial de Cancer.Net, 03/2018
La muerte de un ser querido provoca muchos cambios en los miembros de la familia
sobreviviente. Estos van desde cambios en las rutinas domésticas hasta cambios en las
prioridades o en los planes para el futuro. Habituarse a las situaciones de una nueva vida
puede tomar meses o años.
Cambios frecuentes
Después de la muerte de un familiar o de un amigo cercano, es posible que note cambios en
numerosas áreas:
Relaciones. Es posible que note diferencias en cómo usted, su familia y sus amigos
se relacionan entre ustedes después de la muerte de un ser querido. Es posible que
algunos amigos o familiares no sepan qué decirle o cómo actuar frente a usted. O es
posible que se distancien de usted. Otros pueden acercarse más que nunca a usted.
Puede ser que los cambios en sus intereses, en sus prioridades o en sus objetivos
después de la muerte de un ser querido hagan que pierda contacto con algunos
amigos o familiares. Pero también pueden llevar a nuevas relaciones y a nuevas
amistades.
Rutinas. Si ha estado cuidando a un ser querido con cáncer, es posible que gran
parte de su rutina diaria haya constado de visitas al hospital y de tareas de cuidado.
Cuando la persona muere y esta rutina familiar termina, puede sentirse perdido y
extrañar sus responsabilidades de cuidados. Con el tiempo, muchas personas son
capaces de desarrollar una nueva rutina que les resulta familiar y con la que se
sienten cómodos.
Responsabilidades. Cuando una pareja o un familiar muere, es posible que usted
deba hacerse cargo de las tareas que este solía realizar. Algunas de estas tareas
pueden ser completamente extrañas para usted. Y puede ser estresante aprenderlas.
Cuando ya no pase tiempo como cuidador, también puede sentir que tiene
demasiado tiempo libre. Este sentimiento puede liberar muchas emociones que
antes podía mantener ocultas con tantas tareas de cuidado.
Empleo y finanzas. Si su pareja o el familiar era el principal sostén económico de
la familia, es posible que deba trabajar más horas, que deba volver al trabajo o que
salga a trabajar por primera vez. Si es un padre/madre con hijos pequeños, esto
puede significar que deba hacer arreglos para el cuidado de los niños y que tenga
menos tiempo para pasar en el hogar. La muerte de un familiar también puede traer
cambios en la economía de la familia. Esto puede incluir menos sueldos, una
diferencia en los beneficios de la seguridad social o pagos de una póliza de seguros
de vida.
Fe y espiritualidad. Después de la muerte de alguien que ama, es posible que usted
se cuestione sus creencias religiosas o espirituales, o su entendimiento del sentido
de la vida. O puede darse cuenta de que su fe se vuelve más fuerte y es una fuente
de consuelo.
Prioridades y objetivos. Sus prioridades pueden cambiar para reflejar qué es lo que
más le importa ahora. Las prioridades anteriores, como el trabajo, pueden ser
reemplazadas por nuevas prioridades, como pasar más tiempo con su familia y
amigos, o centrarse en su salud. Es posible que también tenga que cambiar sus
prioridades por razones prácticas. Por ejemplo, si se ha convertido recientemente en
el sostén económico de la familia, es posible que deba centrarse en encontrar un
buen trabajo o en construir una carrera. A medida que se adapta a un nuevo estilo de
vida, también puede tener que cambiar sus objetivos o demorar en tomar medidas
para alcanzarlos.
Actividades e intereses. Es posible que ya no tenga interés en algunas actividades
que anteriormente disfrutaba. O es posible que desarrolle nuevos intereses. Estos
podrían incluir involucrarse en actividades que eran importantes para su ser querido,
o ser voluntario en un hospital local o en una organización de apoyo a pacientes con
cáncer. Conozca más sobre lo que significa apoyar a pacientes con cáncer (en
inglés).
Sobrellevar el cambio
Las siguientes estrategias pueden ayudarlo a sobrellevar mejor los cambios estresantes tras
la muerte de un ser querido: