Hoy vamos a hablar de un conflicto que ha sacudido los cimientos de la mismísima Europa, y es que pleno año 2013 en pocas

semanas Ucrania paso de ser un país con un futuro más que interesante a ser un país dividido en dos por una guerra civil que
aún colea hoy en día, pero ¿de dónde viene todo esto? ¿que hizo Ucrania para naufragar? ¿Qué papel ha jugado Rusia y la
OTAN en este conflicto?

Para entender este conflicto debemos ir bastante atrás en el tiempo concretamente a los tiempos de la Unión Soviética, ya
desde un principio una importante parte del pueblo ucraniano rechazaba la dominación soviética, de hecho en la Segunda
Guerra Mundial muchos ucranianos recibieron a las tropas alemanas como auténticos héroes, sin embargo la Unión Soviética
duro hasta los años 90 y Ucrania no consiguió su independencia hasta 1991, el problema es que el país estaba dividido una
gran parte de la población era étnicamente rusa y la otra étnicamente ucraniana, y esta diferencia se ve en una de las cosas
que más unen a un país: su lengua. Menos de un 70% de los ucranianos tiene al ucraniano como lengua materna, mientras que
la mayor parte del resto de la población son de habla rusa, esta separación lingüística y étnica es la clave de todo el conflicto y
ahora les cuento el por qué…

En 2010 Víctor Yanukovich es miembro del partido de las regiones, un partido prorruso que gano las elecciones ese mismo año
y se convirtió en presidente de Ucrania comenzando una nueva etapa en la que la democracia ucraniana se fue deteriorando
¿y por qué? Bueno pues porque para empezar la corrupción campaba a sus anchas Yanukovich en el poder y también porque
comenzó encarcelar opositores como la exprimer ministro Yulia Tymoshenko que fue rival de Yanukovich en las elecciones que
este gano, con Yanukovich en el poder también se encarcelo al ministro del interior Yuri Lutsenko, sin embargo, la economía
de Ucrania prometía, el PIB (Producto Interno Bruto) del país crecía y una gran oportunidad se presentó delante de los
ucranianos, la Unión Europea llamaba a su puerta y le ofreció a Ucrania ser miembro de esta. El 30 de marzo del 2012
Yanukovich y los líderes de la Unión Europea firman un tratado de adhesión entre ellos que incluía varios requisitos como los
de la liberación de los presos políticos ucranianos.

Yanukovich prometió a su pueblo realizar las reformas necesarias para que Ucrania ingresase a la Unión Europea, sin embrago,
el 21 de noviembre de 2013 el gobierno ucraniano informo de que el proceso de preparación de la firma del acuerdo de
asociación con la Unión Europea quedaba suspendido, esto fue un palo para una gran parte del pueblo ucraniano ya que se
frotaban las manos con el acceso al mercado común europeo, pero ¿Por qué hizo esto Ucrania? ¿qué le hizo borrarse de su
proyecto europeo? Pues nada más y nada menos que Rusia.

Rusia no quería dejar que Ucrania cayese bajo la influencia de la Unión Europea y presiono al gobierno de Yanukovich para que
no se uniese a esta, Rusia promete una generosa ayuda económica a cambio de esto. La razón de tanta pelea por Ucrania no
es otra que una disputa geoestratégica entre la Unión Europea y Rusia, y es que por Ucrania pasan importantes gaseoductos
que surten a Europa tanto de gas ruso como de gas de los países de Oriente Medio, un recurso de vital importancia para el
abastecimiento de la energía europea, sin embrago las protestas en Ucrania se fueron multiplicando y escalaron hasta que en
Kiev se levantaron barricadas y se montó un gran movimiento ciudadano de protesta conocido como el “Euromaidan” que
exigía el fin del gobierno de Yanukovich, las protestas se fueron radicalizando en un país en el que la mayoría de los
manifestantes tenia formación militar y en el que los choques entre manifestantes y policías fueron brutales, también el
gobierno recurrió a grupos ilegales formados por criminales, militantes prorruso o elementos extremistas de las Fuerzas
Armadas y policías, unos grupos que recibieron el nombre de “Titushkis”, también en el Euromaidan se organizaron distintas
milicias que recibieron el nombre de unidades de defensa y entre las que se encontraban elementos nacionalistas ucranianos y
organizaciones de extrema derecha.

El 22 de enero del 2014 llegaron los primeros 5 muertos a las protestas, finalmente y con un balance cercano a las 200 víctimas
mortales Yanukovich huyo del país y los opositores tomaron el control de las instituciones ucranianas, Yulia Tymoshenko fue
liberada, se celebraron elecciones presidenciales, Rusia la reconoció y todos fueron felices y comieron perdices, increíble final.
Pues no, esto no acaba aquí, ¿se acuerdan de que la población de Ucrania estaba dividida en dos? ¿Que había una parte
prorrusa de habla rusa y otra parte ucraniana de habla ucraniana y con tendencia más europeísta? Pues resulta que la mayoría
de los prorrusos viven en el sureste del país, a los pocos días de la huida del presidente Yanukovich en Crimea, una región de
Ucrania con una aplastante mayoría prorrusa, comenzaron a aparecer grupos de encapuchados perfectamente armados y
equipados, uno de estos grupos tomo los edificios de la presidencia y el parlamento de Crimea izando la bandera rusa en
ambos, unas banderas que siguen ondeando hoy en día, el mismo día el parlamento de Crimea anuncio un referéndum de
autodeterminación para el día 30 de marzo con una participación de más del 80% la opción de ser anexada Rusia gano con
más de 96% de los votos, un referéndum que por otra parte no tuvo muchas garantías democráticas, por ello los países
occidentales no reconocen este referéndum, sin embargo desde entonces de facto Crimea pertenece a Rusia.

Pero tampoco se quedó aquí todo esto, las protestas prorrusas contra el gobierno europeísta de Kiev se extendieron por toda
la región industrial del Dombas, al igual que en Crimea y en todo el Dombas comenzaron a aparecer de la noche a la mañana
grupos armados en distintas ciudades en donde los manifestantes proclamaron la República Popular de Donetsk, mientras que
un grupo diputados regionales de Járkov asumió el control de las instituciones gubernamentales y proclamo la República
Popular de Járkov aunque esta no durara mucho, unos días más tarde grupos armados prorrusos proclamaron la República
Popular de Lugansk, la separación era un hecho, el ejército ucraniano no era capaz de controlar una importante parte del país
y los prorrusos se habían hecho con el control de todas las instituciones de esos lugares, la guerra a estas alturas parecía
inevitable, durante estas semanas entre abril y mayo del 2014 los enfrentamientos entre grupos prorrusos y nacionalistas
ucranianos también fueron frecuentes, a pesar de que hubo conversaciones internacionales entre las potencias implicadas que
acordaron rebajar la tensión, los enfrentamientos continuaron escalando, los comandos prorrusos hicieron incursiones
tomando diversas localidades y edificios estratégicos, y a pesar de que las contraofensivas del gobierno se lo ponían muy
difícil, cada vez más y más territorios caían en manos prorrusas que se hicieron con una buena cantidad de armamento que
había en las bases de esos lugares, el frente se fue estabilizando y el facto de las milicias prorrusas mantenían el control de
todo el este ucraniano.

El papel de Rusia en la consolidación de las posiciones prorrusas fue clave, ya que armo a estas milicias y proporciono
importante asesoramiento militar, apoyo logístico y de inteligencia, sin embargo, lo más efectivo para los prorrusos fueron los
sistemas antiaéreos que les permitieron derribar aviones militares ucranianos, un elemento que fue clave para que las tropas
del gobierno no pudiesen recuperar territorio e incluso se replegasen en julio de 2014, aunque el hecho no está demostrando
y se acusan mutuamente, todo parece indicar que por error las milicias prorrusas derribaron un avión comercial Boeing 777 de
Malaysia Airlines con 295 pasajeros a bordo. Para setiembre del 2014 la situación del ejercito ucrania era insostenible, las
milicias separatistas avanzaban a la parte que el ejército ucraniano cosechaba derrotas y muchas bajas, para el 4 de setiembre
el gobierno de Ucrania había sufrido 3.881 bajas de las que 837 eran muertos, a pesar de que en setiembre se hizo un proceso
de alto al fuego que se llevó a cabo de octubre del 2014, extraoficialmente los combates escaramuzas y emboscadas
continuaron. El culmen de estas operaciones llego en 2015 cuando entre 5.000 y 8.000 soldados del ejército ucraniano
quedaron sitiados en el Valjevo, tras varios días de combate finalmente los sitiados se rindieron y entregaron las armas a las
milicias separatistas, las cuales se apuntaron la mayor victoria de la guerra, desde entonces la situación en Ucrania ha sido de
calma tensa, la línea del frente ha estado estancada, pero a menudo se reactivan las hostilidades, especialmente con
bombardeos de artillería, de hecho la guerra del Donbas es utilizada por el Kremlin y por el gobierno de Kiev como una
herramienta política, es decir, cuando Putin necesita ganar popularidad porque tiene problemas internos, el conflicto tiende a
reactivarse, lo mismo ocurrió con las elecciones presidenciales ucranianas en las que el expresidente Petro Poroshenko trato
de azuzar el conflicto para mejorar sus resultados electorales, algo que finalmente no ocurrió.

La situación actualmente se resume en que las repúblicas de Donetsk y Lugansk siguen en pleno funcionamiento con sus
propias instituciones y fuerzas armadas lejos del control de Kiev, a su vez, Rusia sigue garantizando la existencia de estas,
mientras que ni la OTAN ni la Unión Europea se han llegado nunca a involucrar en el conflicto lo suficiente como para dar un
golpe de efecto a la situación, de hecho, actualmente son señores de la guerra los que controlan las milicias prorrusas
separatistas en el este de Ucrania, controlando una vasta cantidad de terreno, otra de las consecuencias de esta guerra ha sido
la anexión del facto de Crimea a Rusia y es que a pesar de que la comunidad internacional no reconoce esta anexión como
hemos visto antes, la realidad es que Crimea haya sido integrada en la federación rusa y el Kremlin tiene pleno control sobre el
territorio. Por último, no hay que olvidarse del drama que ha supuesto la guerra con cientos de miles de desplazados, más de
13.000 muertos y una crisis económica que dificulta el acceso de la población a los servicios sociales más básicos en territorios
separatistas, así que todo indica que el conflicto seguirá aletargado, pero sin resolverse.